Capítulo 9
Despertó con el corazón amenazando con saltar de su pecho y el miedo bañando cada nervio de su cuerpo, podría jurar que estaba temblando hasta que sintió una mano apretar su antebrazo con algo más de fuerza que la que era necesaria.
-Derek, despierta es un sueño- Los ojos de Stiles fue lo primero que pudo vislumbrar claramente, algo asustados pero completamente bien, no moretones en sus mejillas, ni sangre en su boca, ni el cuchillo de Kate Argent rebanándole la garganta.
-Sí, pesadilla…sólo una pesadilla- Kate estaba muerta, Peter la mató, no podía hacer daño a nadie más.
Stiles tiró de él hasta que la cara de Derek quedó enterrada en el hueco entre el cuello y el hombro del muchacho, acariciando su nuca hasta que pudo respirar un poco mejor.
-¿Estas bien?- Preguntó Stiles y Derek no se dio cuenta en qué momento se había aferrado a él como si fuera una manta de seguridad
-Sí. Sólo ya sabes…
-No sé- ¿Cómo qué no? Si se supone que dormían juntos casi todas las noches- Tú nunca tienes pesadillas.
-Cazadores- Medio verdad y medio mentira- El otro día estuve platicando con Scott sobre Allison y…supongo que se quedó dando vueltas en mi cabeza, no pasa nada en serio- Justificó con su mejor sonrisa. No iba a decirle que en su sueño Kate averiguaba que Stiles era su compañero y le rajaba la garganta delante de él a la tierna edad de once años.
-Esa…tipa, ojalá se esté pudriendo en el infierno junto con su tía y su abuelo. No me arrepiento de haber dejado que Laura le arrancara la garganta- Stiles no sabía sobre él y Kate, conociéndolo hubiese enfatizado más en ella que en Allison. - ¿Quieres que te traiga un vaso con agua o algo?
-No- Cada vez que le escuchaba decir algo cruel era casi como estar viendo a su Stiles- sólo necesito un poco de aire.
Se puso los Jeans y tomó su abrigo de la silla del escritorio, la habitación se sentía demasiado caliente y pequeña de repente.
-Derek, son las cuatro treinta de la mañana.- Puntualizó Stiles mostrando la pantalla de su teléfono como apoyo visual.
-Lo sé, sólo…duerme; hoy fue un día largo y agotador, necesitas descansar
-Son las cuatro treinta y pretendes salir de la casa Derek, no voy a dormir- Stiles hizo a un lado las mantas y comenzó a buscar sus propios pantalones en el suelo- voy contigo.
-Está bien, de verdad- Derek puso las manos sobre los hombros del muchacho para mantenerlo sentado- Sólo fue un susto, y no necesito otro pensando que estas por ahí sin dormir ¿de acuerdo?
-Vale- Aunque no se veía muy convencido, Stiles dejó que Derek lo recostara de nuevo y lo arropara con las mantas- Pero no olvides que debes venir a buscarme mañana para la reunión pre navideña del colegio, ya conozco tus excursiones para “tomar aire”
Qué bueno que se lo informaba
-De acuerdo, lo prometo- Ahora que lo sabía iba a ser mucho más fácil que lo recordara.
-A las diez, debo estar allí a las diez treinta para ayudar a esa mujer con su tonta obra-Derek sonrió con el puchero en los labios de su prometido.
-Tú solito te lo ganaste, ¿Quién te nombró paladín de la literatura?- No pudo evitar reírse y callar la protesta con un beso pequeño en los labios de Stiles- Duerme ¿de acuerdo?
El muchacho asintió y Derek se despidió con la mano antes de saltar por la ventana hacia el tejado, luego hacia la rama del abeto del vecino y después a la calle, como siempre.
…
Caminar el trayecto de la casa de Stiles hasta la reserva era tranquilizador, sobre todo con el pueblo en silencio y sin gente saludándole a diestra y siniestra como si se llevara de maravilla con ellos, cundo la mayoría le trataban como si fuera un perrito callejero que quieren alejar de su vista porque les despierta una mezcla de pena y asco. Puede que el otro Derek estuviera habituado a ser el niño bonito de mamá a quien todo mundo ama y sonríe pero él no.
No podía volver a utilizar la llave de emergencia para entrar en casa, seguramente su madre lo notaría, haría preguntas y eso precisamente era lo que menos necesitaba ahora; inventar más mentiras.
Decidió que lo más fácil sería emular sus días de rebeldía cuando escapaba de casa para ver a…a esa mujer y entrar por su ventana, un par de saltos, la ayuda de la canaleta de desagüe y mover rápido su mano derecha para empujar hacia arriba el marco metálico y allí estaba, aterrizando ambos pies en el suelo de su habitación, justo en los cojines mullidos de la cornisa de la ventana.
Sonrió de forma involuntaria al ver los dibujitos de lobos en el cristal, uno dormía, otro movía la cola y otro aullaba a la luna.
No tuvo idea cuando pasó de estar admirando los dibujos de Stiles a tener la espalda pegada a la pared contraria, un brazo presionando contra su pecho y algo metálico y frío contra su garganta. A Juzgar por las cosquillas nada agradables en su piel, la cosa era de plata.
-Tú no eres mi sobrino- Peter, Peter le tenía arrinconado contra el muro y le estaba amenazando, sus ojos brillando como oro líquido en la penumbra y palabras susurradas entre dientes- ¿Quién o qué demonios eres, dónde está Derek?
Alto ¿Qué?
-¿Qué?- Bien, eso era estúpido, Peter no tenía manera de saber absolutamente nada, sólo era cosa de hacerle creer que estaba viendo visiones- ¿De qué mierda estás hablando? Estoy aquí, enfrente de ti
-¿Te atreves a afirmar que eres Derek Hale?-El brazo sobre su pecho presionó un poco más y supo que si quería salir de esa tendría que ser algo más convincente.
-Peter mírame, lo que estás diciendo es absurdo, ¿Qué te hace pensar semejante tontería?-Si hubiera puesto atención a Stiles hacia unos meses que estuvo parloteando acerca de un síndrome que hace creer a la gente que su familia ha sido secuestrada y reemplazada podría argumentar eso, pero no recuerda ni el nombre.
-Vamos a ver, tal vez el que hayas gritado e insultado delante de todos a alguien que Derek no permite ni que se le mire mal- ¿en serio, tanto así?-o que hayas lastimado a Scott sacando a relucir un error, que olvidaras a tu hermana y a Stiles en el colegio y ni te hayas inmutado cuando dijeron que Scott llevó a Stiles a casa en su motocicleta cuando Derek no quiere ni que se acerque a su Jeep, que no sepas donde conociste o peor, siquiera como se llama el que se supone que es tu prometido. ¿Estoy dejando algo?- Si a esas vamos probablemente debía mencionar la manera en que perdió los papeles y se puso a llorar abrazado a su mami, pero mejor no lo mencionaba.
-Espera, ¿Stiles no se llama Dara..Daru…eso que dijiste sobre el techo?-Bueno menos mal, era un alivio; vale momento inadecuado para pensar en eso.
-Si la plata no hace efecto en ti juro que voy a encontrar la manera de destriparte, pero no sin antes saber qué fue lo que hiciste con Derek- El filo de la pequeña hojita de plata cortó su cuello y la conocida sensación de quemazón le hizo revolverse.
-Está bien, bien tienes razón- Iba a morir en una realidad alterna, eso era bizarro hasta para él- Si soy Derek Hale, técnicamente si soy tu sobrino pero no soy…no soy la persona que tú conoces ¿de acuerdo?
-Ya claro, ¿crees que me vas a confundir?- Estaba diciendo la verdad, Peter tuvo que haberlo escuchado en los latidos de su corazón.
-Sabes que no estoy mintiendo
-Ni siquiera sé qué cosa eres- Peter hundió un poco más el arma en su piel, rasgándola y amenazando con acercarse a su yugular.
-Soy Derek, soy un hombre lobo, nací aquí en esta casa, Mi madre se llama Talia, mis hermanas Cora y Laura, tú eres mi tío. Es cierto que algo pasó y no soy el tipo que tú conoces pero sigo siendo yo- Se estaba haciendo pelotas
-Está bien- Pudo sentir las garras de Peter en la mano que estaba aplastando su pecho, amenazando con cavar hasta su corazón- Dime algo que sólo Derek sabría.
Mierda
-Cuando tenía catorce años entré al garaje a buscar mi bicicleta y te encontré dándote el lote con Paul Morgan, el tipo ése que trajo mamá para reforzar las tácticas de defensa
Peter se apartó de él de un salto. Derek recordaba ese incidente, se quedó parado como tonto viendo a Peter ser empotrado contra un gabinete de herramientas y luego salió corriendo. Esa noche Peter habló con él acerca de las preferencias sexuales y que estaba bien s te gustaba otro chico y bla bla bla.
-¿Qué demonios…?- Ahora le miraba asustado, hacía menos de quince segundos le estaba amenazando y ahora le miraba asustado.- ¿Te golpeaste la cabeza? Esto tiene que ser un hechizo o algo que…no te preocupes chico todo se va a arreglar, vas a dejar de alucinar.
Pues ya que estaba…a quemar las naves.
-No, Peter si sé lo que pasó- ¿Por qué iba a confiar en Peter?
-Tranquilo, hablaré con tu madre y en menos que…
No, eso no
-Un ángel y un demonio me pusieron aquí para mostrarme como sería mi vida si yo no hubiera hecho que Kate quemara la casa- Soltó apretando los ojos y tentando a su suerte. Una vez más ¿Por qué demonios estaba confiando en Peter?
-¿Qué?- Peter le miraba con cara de preocupación, como si acabara de ver brotar otro brazo en su cabeza o algo así.
-Esta sería mi vida si…si no hubiese habido incendio- Peter le arrastró por el brazo y lo sentó en la orilla de su cama, haciendo lo mismo en la cornisa de su ventana.
-Derek, es que si hubo incendio.
Eso no se lo esperaba.
-Espera, se supone que esto es lo que sería mi vida si yo hubiese hablado con mamá sobre Kate
-Me contaste a mí- Suena lógico, Peter era su héroe por aquellos tiempos- No pudimos prever cuando o que haría, pero si hubo tiempo para sacar a la manada de casa. Vivía en alerta permanente.
-Pero entonces…¿mamá?- Derek vio a su madre morir en el fuego y a Peter lastimarse y de cierta forma también desaparecer.
-Sólo se quemó la sala de estar, parte del comedor y la habitación de Laura. Salimos a tiempo, llamamos a los bomberos y todo quedó en un susto. Por supuesto no pudo vincularse nada con Kate.
Si hubo incendio, aún con eso su familia vivía, pudo haber vivido.
-Unos días después tu tía Jeannette comenzó a ladrar sobre la seguridad, la responsabilidad de tu madre en todo el asunto y ella y todos los de más prefirieron abandonar la manada. Nadie los detuvo, yo no iba a permitir que se cuestionase la autoridad de mi alfa
Cierto, el resto de la familia. Había estado tan mareado y contento con tener a su madre y a su hermana que ni siquiera se había parado a pensar en los de más.
-Si dices que esta sería tu vida…entonces – Derek le vio dudar- ¿Qué es diferente para ti?
Derek suspiró y miró al suelo, le fue difícil comenzar a hablar; Contarle a Peter que su madre y todos los de más murieron, que Peter mismo estuvo en estado lamentable mucho tiempo, que él y Laura vivieron escapando y que Cora se separó de ellos y la creyeron muerta. No entró en detalles sobre la muerte de Laura, no había necesidad de decirle quien la asesinó, sólo que fue el mismo que mordió a Scott y le llevó indirectamente hasta Stiles, Jackson y su aventura reptilica, Le contó como asesinó al alfa para vengar a su hermana y sobre sus betas, su reunión con Cora y la muerte de Boyd y de Erica.
-¿Sabes?- Los ojos de Peter eran más brillantes de lo normal- Si no me hubieses dicho lo que viste en el garaje, pensaría que esta es sólo una estrategia para distraerme, funcionaría romperme sabiendo que viviste de esa manera.
Derek sonrió sin diversión, el Peter de su realidad jamás habría admitido algo así.
-Entonces un día se me ocurrió defender a un anciano en la calle y esto- señaló a su alrededor- al parecer es mi regalo de navidad.
-Algo cruel, si me lo preguntas- Al menos alguien pensaba como él- Eso explica por qué pusiste esa cara cuando se hizo el anuncio del bebé.
-Eso es otra cosa, el Stiles que yo conozco me odia. Bueno no me odia pero apenas me tolera, y es mutuo. Entonces llego aquí y me encuentro con ESO
Se dejó caer de espaldas en su cama, “eso” era precisamente lo que le había tenido tarareando en su cabeza una canción ridícula de los noventa que había sonado en su baile de promoción.
Peter se rio de él, para variar.
-Eso no creo que varíe mucho Derek, él es tu compañero.
-Ni siquiera puedo decir su nombre- Fue su convincente argumento, cosa que por supuesto hizo reír a Peter más fuerte.
-Se llama Genim- Peter aclaró- Darareaksmey es un nombre Camboyano. De niña
Derek se dio el lujo de mirarlo mal
-Tranquilo muchacho, voy a ayudarte en lo que pueda- Lo peor de todo es que efectivamente, si estaba un poco más tranquilo.- Te recomiendo que duermas un poco, en menos de tres horas tienes que asistir a una reunión de colegio.
-¿Y por qué yo? Eso es de padres e hijos.
-John siempre trabaja la mañana de la víspera de navidad para poder pasar las fiestas aquí con nosotros, entonces bajo pretexto de Cora tú acompañas a Stiles.
Derek medio sonrió, para cuando Peter estaba cerrando la puerta ya se había quitado los Jeans, la camiseta y metido a la cama. Aún quedaba una duda más en su cabeza.
-Peter- Su tío se detuvo y le miró levantando una ceja, incitándolo a continuar- Si alguien lastimara a mamá, mucho. Como Kate en mi realidad ¿la vengarías?
-Por supuesto- No hubo duda en la respuesta.
-¿Al precio que fuera?- Peter asintió.
-Es mi Alfa Derek, es deber de un beta líder cuidar de su alfa. Si ese fuera el caso sería instintivo el buscar venganza, tú mismo lo dijiste. Mataste al asesino de…de tu hermana
Derek asintió, Peter, este Peter claramente no concebía la idea de Laura muerta.
-Descansa muchacho
Con un peso menos sobre su cabeza se quedó dormido
…
Odiaba las aglomeraciones, escuchar a tanta ente junta en un sitio encerrado le estresaba como pocas cosas en la vida, oler la mescolanza extraña de humanidad con aromas artificiales y comida le estaba dando ganas de romper una ventana o algo para que entrara el aire.
Stiles desapareció por un pasillo apenas pusieron un pie en el colegio, le dijo que lo buscaría más tarde que lo esperara en la mesa de catering; y allí estaba, como un obediente cachorrito comiendo la mitad de un sándwich horroroso de pepinillos con atún, recargado en una mesa plegable con un mantel desechable blanco y rodeado del maldito muérdago navideño con lucecitas.
Parece que no pudieron elegir otra cosa para adornar
Cora y Scott se llevaron a Peter hacía tiempo entre el mar de estudiantes y padres, comenzaba a preocuparle eso de que no se soltaran las manos para nada. Estaba sopesando el preguntarle a su madre si era alguna práctica nueva en el entrenamiento, algo como la supervivencia o cualquier explicación porque eso no era normal.
Sólo Peter sabe de las artimañas que se valió para convencer a su madre de dejarle ir en su lugar a la famosa reunión pre navideña, supuestamente le ayudaría en caso de que no conociera a alguien que le saludara pero resulta que se perdió con los cachorros en el momento en que pisaron el gimnasio
-¿Por qué refunfuñas ahora?- Stiles salió de quien sabe dónde, materializándose a su lado y robando el resto de su bocadillo.
-¿Por qué decoraron con muérdago? – Preguntó con una mueca de asco.
-No sé, supongo que es tradicional o algo así, yo sólo ayudé a colgarlo. ¿No te gusta?
-Lo odio- Stiles levantó una ceja y lo miró fijamente esperando una explicación- No me agrada, es todo.
-Huele raro- Concedió el muchacho y Derek lo agradeció, pasando un brazo por los hombros de Stiles como ya se le estaba haciendo costumbre.
Casi salta de su piel cuando recibió un manotazo para apartar su brazo.
-Aquí no ¿recuerdas?- Pues no, no recordaba.
-Creí que no nos ocultábamos- ¿Por qué sonó decepcionado?, al menos merecía una explicación después de haber caminado una tarde entera de la mano o abrazados y sin que nadie dijera nada y ahora era rechazado sin consideración.
-No lo hacemos generalmente, pero aquí es distinto.- Stiles señaló alrededor- Probablemente nadie diga nada, pero no queremos problemas si esa mujer entrometida o el entrenador nos ven. Todavía no se traga muy bien la explicación de que voy a estar ausente del equipo de Lacrosse por una extraña infección en los riñones, aun me mira raro y temo que me pida un certificado médico o algo.
-¿Por qué le afecta tanto que te retires del equipo?- Podría ser otro universo y lo que quisieran pero igual no creía que Stiles fuera la estrella deportiva del colegio.
-No sé- Se encogió de hombros- Probablemente necesite a alguien que cuide la banca en los partidos.
Derek soltó una risita por la explicación y aun así golpeó el hombro de Stiles con el suyo en un gesto cariñoso que fue correspondido con una sonrisa luminosa, de esas que según estaba aprendiendo podían despejar cualquier oscuridad cercana a él.
-¡Stiles!- Al seguir con los ojos el sonido de la voz encontró a su prometido abrazando cariñosamente a otro tipo, no cualquier tipo.
-Issac, pensé que no vendrían- Issac lucía distinto, alto y fuerte, con la chaqueta del equipo de Lacrosse, ropa nueva y el pelo cortado de forma distinta, pero la misma sonrisa inocente y los mismos ojos brillantes.
-Al final tu padre obligó a mamá a dejar por un rato la comisaría, dice que puede arreglárselas sólo- Momento, ¿mamá?- Siento que él no haya podido estar aquí.
-Na está bien, no importa es el precio por que pueda pasar la noche buena con la familia. ¿Recuerdas a Derek, no?
Issac sonrió grande tendiéndole la mano y dando algún saludo educado que no escuchó, su pequeño beta se veía tan distinto. Seguro y sin miedo.
Se despidió de Stiles con otro abrazo y se perdió en la multitud, Derek alcanzó a ver como se reunía con una mujer pequeña y rubia que platicaba con un profesor.
Issac estaba bien, y él no podía dejar de sentirse un poco más tranquilo.
-Me agrada ese chico- Puntualizó en cuanto recuperó su capacidad de hablar.
-Es un gran tipo.- No quería preguntar, pero tenía que
-¿Y su padre?- Stiles le miró un par de segundos y luego se encogió de hombros
-Sigue en la cárcel, y dudo mucho que vaya a salir de allí en un buen rato. Lo atraparon con las manos en la masa. ¿Alguna vez te contó papá la historia?
Probablemente sí pero como no se la contó a él, estaba en todo su derecho de preguntar.
-No, no lo creo
-El tipo golpeaba a la madre de Issac, ella puso una denuncia pero el Sheriff de aquel tiempo no quiso atenderla, entonces papá que en ese tiempo no era Sheriff le dio instrucciones de que si ocurría de nuevo llamara inmediatamente. Como puedes sospechar pasó, Issac tomó el teléfono y llamó al 911, cuando papá llegó encontró la escena completa y no hubo ninguna manera de negar el hecho; Issac es el héroe de su madre, a pesar de que era sólo un niño en ese entonces. Después cuando papá se volvió Sheriff la madre de Issac se convirtió en su secretaria.
Derek sonrió grande sin poder evitarlo, No tenía ni idea en que había influido lo de Kate en la vida de Issac, pero también era mucho, muchísimo mejor.
Aprovechando el momento, preguntaría…nada perdía con preguntar
-¿Qué ha pasado con tu compañera, la que tenía epilepsia?
-¿Erica?- La expresión de Stiles se ensombreció un poco, no…- Erica murió Derek, te lo dije. El año pasado estaba en la ducha y tuvo una crisis, se rompió la nuca.
-Lo siento- Su pequeña Erica, la joya de su corona. Bonita y peligrosa a partes iguales, no había podido salvarla en este mundo tampoco- ¿Te llevabas bien con ella?
-Pues…- Stiles desvió la mirada y comenzó a jugar con una de las servilletas decoradas- podría decirse que sí.
-¿Cómo que podría decirse que sí?- Algo en todo eso no le estaba gustando nada
-Bueno ella…ella estaba un poquito enamorada de mi- ¿Qué? …l nunca se enteró de eso, eso no pasó en su realidad ¿o sí? Igual no creía que Erica le hubiese dicho nada pero…pequeña zorra.
-sólo haré de cuenta que jamás escuche esa parte, prefiero que mi concepto de ella no cambie- ¿Por qué tenía celos de una muerta? Pero si eso hubiera sido real, si Erica, Su Erica hubiera…no, no mejor no pensar en eso.
-Oye, puedo mostrarte algo bueno que tiene el muérdago- Cambio de tema flagrante. Y aceptado, muchas gracias, porque ese agujero verde y viscoso que se estaba instalando en su estómago no era conveniente en ese momento.
-Dudo mucho que tengas algo lo suficientemente convincente para que me agrade esa cosa- Stiles volteó a ambos lados antes de tirar del cuello de su chaqueta y estampar su boca contra la de Derek, en una emulación bastante acertada pero más corta de lo que sucedió la noche anterior en el techo.
-¿Qué pasó con “aquí no”?- Soltó Derek en cuanto se separaron, volteando por reflejo a buscar quien sabe qué.
-Bueno, sólo era cosa de asegurar el perímetro, ¿Qué me dices ahora?
-Puede que no lo odie tanto, de acuerdo- Adoraba ver a Stiles reírse. Momento ¿qué?
Afortunadamente no tuvo mucho tiempo de detenerse en sus pajas mentales, porque el brazo de Stiles justo acababa de entrelazarse con el suyo cuando lo distrajo una voz detrás de su prometido.
-Stilinski- La sonrisa de Stiles se desvaneció y rodó los ojos antes de atornillarse una mueca medianamente decente en la cara
-Sí, profesora Blake-No, ella no ¿Qué mierda estaba haciendo ella aquí?
-Parece que el reflector grande del medio no funciona, ¿quiere revisarlo por mí?- pudo oler la rabia de su prometido al ver la mueca estilizada de Jennifer- Oh, Hola señor Hale.
Derek no se movió, no hizo ningún intento por contestar el saludo ni por ser mínimamente educado
-¿Vienes conmigo entonces?- Pidió/ordenó Jennifer y comenzó a caminar sin molestarse en despedirse.
Stiles suspiró e hizo un puchero que puede que en otro momento a Derek le pareciera adorable, ahora lo único que pasaba por su cabeza era que había dejado sólo a Stiles con esa bruja loca por horas y horas.
-No- Derek lo detuvo por el brazo cuando se dispuso a seguir a su carcelera (bautizada así por él mismo)
-Está bien Derek, en una hora la maldita obra se habrá terminado y con ella mi castigo, por ahora literalmente puede hacer lo que quiera conmigo-Sonrió pequeñito, se zafó de la mano de Derek y desapareció por la puerta del gimnasio con las manos dentro de los bolsillos.
La iba a partir en dos, la iba a destripar con sus propias garras si se atrevía a ponerle una mano encima a Stiles, ¿Qué es lo que estaba haciendo ella aquí para empezar? Que él supiera no había rastros de Deucalion y su grupo de marionetas por el pueblo.
Sintió sus garras rasgar el papel que cubría la mesa, iba a despedazar a Jennifer.
-Hey, hey- Alguien le sostuvo por el brazo lo más delicadamente que pudo para impedirle correr hacia la puerta- ¿Qué diablos crees que estás haciendo Derek?-Era la voz de Peter, ahora no tenía tiempo para él- Cálmate ¿quieres? Estás a punto de perder el control de tu lobo.
No lo había notado pero Peter tenía razón, podía sentir los colmillos contra su labio inferior y las garras en sus manos. Si alguien le viera en ese momento con detenimiento sería perfectamente capaz de apreciar el color azul cobalto antinatural en sus ojos.
-Se llevó a Stiles- Tenía que zafarse de Peter, no podía dejar a su compañero sólo con esa demente un minuto más.
-¿Quién?- Peter parecía a punto de hiperventilar, no sabía si porque Derek estaba a punto de revelar el secreto de su familia delante de medio pueblo o por lo que acababa de decir -¿Quién Derek?
-Jennifer- Peter volteó a ambos lados como buscando algo sospechoso- Su maestra Peter! Es ella, es esa…
-No sé de qué estás hablando Derek, ¿conoces a la mujer?- Evidentemente la conocía, si le estaba diciendo su nombre.
-Por supuesto que la conozco, ahora suéltame. No voy a dejarlo sólo con esa psicópata
Peter pareció pensarlo un par de segundos y luego lo soltó
-De acuerdo, pero voy contigo- No, Derek no necesitaba niñera; lo que necesitaba era rebanarle el cuello a esa bruja de una vez por todas.- No puedo dejar que hagas una tontería, y en caso de que tengas razón que hagas esto sólo.
Estaba acostumbrado a trabajar sólo muchas gracias, pero si tenía que ir con él para que le dejara ir a cuidar de su prometido pues adelante, total no sería la primera vez que tenía que cargar con Peter.
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