Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Rompiendo el caparazón de dolor por Dereck G de Sehamforash

[Reviews - 404]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Antes que nada gracias a todos quienes me animan con sus lindos comentarios: 

sharedey

Kaorugloomy

InfernalxAikyo

Rintarou Taiga

Eshua 

camiliwi

hayate_sama

Kana_shimi

blakanghel

Y claro a todos los lectores y seguidores de esta humilde obra, gracias por todo el apoyo, y bueno aclaro que este capítulo no es precisamente muy feliz pero igual espero lo disfruten

La cálida noche en que terminaban los tiempos agitados, el resplandor llenaba el cielo y bailaba intensamente. La multitud continuaba apresurada sin tiempo de respirar y los sentimientos se desbordaban.

Los blancos lazos se movían al compás del viento, mientras el “acepto” era pronunciado por los labios de la enamorada pareja. Finalmente mi hermano y Angel concretaron su relación con aquella feliz ceremonia.

Verlos tan felices, como si fueran la representación del concepto que cualquiera tendría de perfección, me hizo desear que tan solo un poco la relación que tenía con Seere pudiese ser un poco más normal.

 

– Apenas puedo creer que por fin se casaran, se ven tan felices – exclamé una vez que el evento terminó y nos hallábamos cansados en la habitación.

– Lo sé – musitó Seere sin prestar demasiada atención, simplemente quitando su chaqueta y recostándose sobre la cama.

– Y tú, ¿me concederías el honor de convertirte en mi esposo algún día? – pregunté depositando un casto beso sobre su mano derecha.

– Sabes que odio los estereotipos de la sociedad – apartó la vista a la par que alejaba su mano de la mía.

– ¿Eso es un no?

– Es un “no necesito serlo para estar a tu lado”

Sonreí al saber que la forma en que Seere me amaba era única, permanecí a su lado mirando el tiempo pasar hasta que recordé algo que por mucho tiempo quise decirle.

– Recuerdas la fotografía que tomé en nuestra primera… y única cita

– Lo recuerdo

– Que bien – me levanté buscando en el cajón un sobre, mismo que le entregué.

Él lo abrió encontrando en su interior aquella fotografía de la cual yo también poseía una copia, hasta ahora el único recuerdo que teníamos juntos.

A pesar de que no sonrió su mirada mostró un brillo que me contagió con la alegría que parecía sentir mientras musitaba un suave “gracias”

– Sabes, hace mucho que no fotografío algo lindo, crees que podría hacerlo contigo

– Yo no soy lindo – protestó como solía hacerlo, haciéndome reír y tomar mi cámara aun pese a su reprensión.

– Sí que lo eres, anda sólo actúa natural.

Comencé a tomar un sinnúmero de fotos mientras él, con un leve rubor se dejaba hacer sin protestar mayormente, relegando un poco la vista en ocasiones.

– Ya es suficiente – exclamó al fin, apartando la cámara

– Lo siento creo que me emocioné – musité feliz dejándola sobre el escritorio y recostándome a su lado – extrañaba todo de ti.

Levantó la vista para encontrase con la mía, en un inocente gesto que me inspiró a besarle, él correspondió y sintiéndome feliz subí encima de él profundizando el beso, hizo un esfuerzo por apartarme, más lejos de eso, mis manos se abrieron paso por su vientre.

– Owayne no… – haciendo caso omiso continúe con el recorrido de mi boca por su cuello

– Maldición, dije que no – gritó con desconcierto inclinándose y empujándome – lo siento – se disculpó viéndome alejado de él – solo… no me siento con suficientes ganas

– No te preocupes – le sonreí acercándome de nuevo – no debí insistir, esperaré hasta que quieras.

Pero a pesar de ello él solo volteó la vista, como intentando decirme algo que no llegaba

– Algo no va bien ¿no es así? – cuestioné finalmente en un intento por saber que era aquello que le preocupaba.

– Me molesta – contestó sin guardar un poco ese sentimiento

– ¿El qué?

Él solo mordió su labio inferior, preocupándome aún más por la pausa

– No importa – dio un suspiro y se volvió a acostar

Exhalé apesadumbrado, no podía obligarle a decirme aquello que le preocupaba, pero si podía demostrarle que le apoyaba y podía confiar en mí.

– Sabes que si pasa algo puedes decírmelo, si hay alguna manera en que pueda ayudar lo haré, incluso si es solo escuchando, tal vez no sea de mi incumbencia pero quiero hacerte feliz y ayudarte con todo problema que te preocupe.

– Sigues siendo demasiado amable, gracias… aun si solo lo dices para que hable sobre lo que pienso

– Bueno parece que así no funcionara… solo quiero que sepas que te amo Seere

– Y yo a ti, pero eso aún me resulta extraño – nuevamente sus palabras no eran comprendidas de mi parte, él sonrojándose y abrazándose fuertemente a su preciada almohada

– ¿Por qué?

– Porque aun no entiendo de amor y tú pareces solo interesarte por coger

Su respuesta tan directa como solo él podía darla me hizo sonrojar, pero finalmente reí notando lo que intentaba decirme

– Lo lamento, así que era eso

– ¿Por qué se supone que es tan gracioso?

– Porque tu cuerpo no es lo único que me interesa: te quiero a ti, más que el sexo o cualquier cosa  carnal, lo que más anhelo es ver tu sonrisa

– ¿Entonces no te importa que odie el sexo? – preguntó con inocencia

Claro que de alguna manera me importaba, yo quería a Seere en su totalidad, pero saber que el pasado que tuvo no fue el mejor me hizo comprender que tuviera cierta aversión

– Preferiría si no lo odiaras, pero yo te amo tal y como eres y estoy dispuesto a aceptar incluso si tengo que hacer un eterno voto de abstinencia

– Que exagerado – bufó rodando al otro lado – por mi puedes ir y coger con quien se te dé la gana, no es como si me interesara.

“Pero a mí únicamente me interesa estar contigo” si tan solo hubiese sido capaz de decirlo que el simple hecho de contemplar su rostro me satisfacía más que cualquier otra cosa en el mundo que pudiese hacer con cualquier otra persona.

Pero no pude más que permanecer en silencio, algo no estaba bien. El insensible corazón que se hallaba paralizado, le miré soltar un suspiro, el tiempo solo había hecho más difíciles las cosas.

Y entonces pensé, que ya habría tiempo de hablar con él, cuando giró su rostro le tomé en mis brazos, acurrucándole en mi pecho y permanecimos así hasta despertar al amanecer.

 

 

– Buen día, ¿ya es tan tarde? – pregunté frotando mis ojos

– Un poco, pasan de las 7 – contestó tomando el reloj que Matt me había obsequiado

– Ya veo – me incorporé hasta quedar sentado sobre la cama

– ¿Quién es Matthew? – preguntó de repente sorprendiéndome.

– Es un amigo – contesté con sinceridad, omitiendo obviamente la parte en que él sentía algo más que amistad por mí – ¿por qué lo preguntas?

– Solo curiosidad, su nombre está escrito en el reloj, y no recordaba a alguien con ese nombre.

– Bueno… este año empezó a estudiar en mi universidad y…

– Owayne no necesito saber todo lo que haces –me interrumpió al parecer hastiado por todas mis palabras – no necesitas darme explicaciones de todo lo que ha pasado.

– Lo siento.

 

El resto del día el nudo en mi pecho crecía más y más, dolía pensar  que la felicidad que sentí al ver a Seere de nuevo ahora se veía opacada por algo tan insignificante.

Definitivamente no estaba dispuesto a aceptarlo.

– Seere, lamento si te hice molestar, en verdad lo siento

– ¿Eh? Owayne, no estoy molesto – a pesar de su semblante serio podía ver por su expresión que hablaba en serio, que tal vez estuve exagerando las cosas.

– Pero sobre lo que hablamos anoche y ya no pude decirte que lo único que quiero es estar contigo

– No tienes que decirlo, eso ya lo sé

Sonreí y estuve por besarle solo para sentirle golpearme apartándome

– Jodido exhibicionista, estamos en el trabajo guarda tus innecesarias demostraciones de afecto

Su comentario me llevó a aquellos recuerdos de tal y como era antes lo cual me tranquilizo, reí al ver lo exagerado de mis miedos confundiéndole de paso por mi reacción.

– Te amo Seere

– Preferiría que no lo hicieras.

Sabía que eso era lo que típicamente solía decir, pero he ahí el problema, las cosas parecían no cambiar, como si el corazón de Seere permaneciera impenetrable y me entristeció saber que sin importar cuanto ofreciera no pareciera ser suficiente.

 

 

 

En medio la estrellada noche, estábamos por dar oficialmente terminado el día  cuando llegó Matthew pidiendo verme, el jefe con su típica actitud amable no nos lo impidió

– Lamento venir sin avisar joven Owayne, pero temprano me encontré con Chris y me pidió que te entregase esto, al parecer era importante.

Extendió sus manos y me entregó una carpeta con algunos papeles que había olvidado ordenar para el club de beisbol, lamentando mi torpeza al notar en las fechas que debían ser entregados a primera hora al día siguiente.

– En verdad te agradezco, lamento que hayas tenido que venir a estas horas, anda te acompañaré a tu casa.

– Gracias, pero creo que en estos momentos no deseo estar a su lado…

Una mueca triste se dibujó en su tierno rostro. Sabía lo que era un rechazo, el dolor que se sentía incluso cuanto podía dañar la amabilidad de la otra persona

– Sabes Matt, creo que eres un chico muy lindo, no quiero que lo que hablamos cambie lo que había entre nosotros

– Yo tampoco quiero que cambie… pero es difícil permanecer a su lado cuando sé que nunca podrá verme de otra manera, pero no se preocupe, no es la primera vez que me rechazan

Eso realmente me preocupaba aún más, ver su rostro afligido a punto de llorar hizo que mi cuerpo se moviese solo y le abrazara, sintiendo por fin esas cálidas lágrimas sobre mi hombro, lágrimas provocadas por mí, si tan solo él pudiese no tener aquellos sentimientos.

– Ya me siento mejor, lo lamento – limpió el resto de sus lágrimas al cabo de un rato, obsequiándome finalmente su sonrisa.

– Eres mucho más lindo cuando sonríes

Sus mejillas se ruborizaron, y sin darme tiempo de protestar unió sus labios a los míos en un brevísimo instante.

– Idiota homosexual, tu maldito teléfono está sonando desde… – al oír la voz de Seere aparté bruscamente a Matt de mí, pero al parecer era tarde

– Seere esto no…

Pero lo que fuese que estuviese a punto de decir fue interrumpido al ver por primera vez una expresión en su rostro, y no precisamente la que hubiera deseado, su rostro reflejaba tristeza.

– Solo jódete.

– Me disculpo, no debí hacer eso… si usted es el novio del joven Owayne le prometo que…

Pero el pelinegro le interrumpió mirándonos con hastío

– No me relaciones con este imbécil, él está libre para ser tu novia o lo que quiera

Aquellas palabras me hirieron profundamente, a pesar que sabía que era culpa mía estaba en el límite de mi paciencia.

– ¿Así es que no soy nada?

– ¿Por qué no lo aceptas de una vez?, tú no eres Taylor – Saber que lastimé a la persona más importante para mí, pero más aún que ello dolió lo poco que parecía importarle yo a él – y yo… yo no soy alguien con quien puedas satisfacer tus malditas necesidades carnales.

– Así es – casi al borde del llanto sonreí y sin siquiera pensar mis palabras comencé el final de ese irracional amor –  Seere y yo no somos nada, así que Matt, no te preocupes, saldremos la próxima vez, de acuerdo.

Los ojos del pequeño rubio se iluminaron al mismo tiempo que sus mejillas se sonrojaban, por mi parte me limité a seguir forzando esa sonrisa, destrozado por dentro al saber que no solo fui inútil al intentar hacer feliz a Seere, sino que ni siquiera fui lo suficiente bueno para ocupar un lugar en su corazón, el cual estaba lleno del recuerdo de Taylor…

– Eso significa que…

– Por supuesto, en adelante somos novios.

– Gracias, te prometo que seré el mejor novio que pudieras pedir – exclamó con una enorme sonrisa mientras se abrazaba con fuerza a mí

Devolví la sonrisa y volteé hacía mi inexpresivo ahora ex novio, quien parecía no inmutarse ante esa acción. Me resultó doloroso, pero lo había decidido y era tarde para cambiar de opinión.

Seere dio la vuelta y se dirigió de nuevo a la habitación, quise detenerlo, pero no podía dañar ni a Matt, ni a mí mismo, correspondí el abrazo y permanecí así un largo rato dejando que mis lágrimas afloraran.

 

======><><><><><><><><><><><><><>< ======

      

– Puedo preguntar la razón de que Owayne este besando a ese chico y no a ti – cuestionó sorprendido Demian al ver a mi novio regresar, tanto o incluso más dolido que yo.

– Las personas besan a sus parejas… o al menos eso deberían.

- Pero tú eres...    

– Un simple inadaptado – le interrumpió Seere – un monstruo desalmado y cruel que no conoce de amor.

 

Notas finales:

De nuevo no tuve ideas para el título, me parece gracioso, tal vez no queda para este tipo de historia

Odienme pero siganme queriendo (?)

Me pongo nostalgico de tan solo pensar que el capítulo 40 será el final, asi que mis niños tendrán que arreglar las cosas lo más pronto posible

Se que fue propósito actualizar mas seguido, pero este mes estoy ocupado con la competencia de vex (robotsitos levantes los cubos (?))

Aun así no toma más de 15 o 20 días maximo (por eso de regreso a clases)

Y recuerden si quieren conocer a los personajes aqui: Elenco RECDDD

Gracias y nos leemos pronto :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).