Segunda Locura
Con la respiración acelerada, la temperatura corporal al máximo y la memoria estancada en cinco minutos de un bar de noche, es como podíamos encontrar al, casi siempre, estoico Kaede Rukawa mientras que bajo el edredón de su cama apuraba con vehemencia sus últimos instantes de auto placer cerrando los labios con fuerza para que los gemidos murieran en su garganta.
A la vez que exhalaba aire totalmente agotado saco su mano por debajo de su protección de tela y cogió papel higiénico para limpiarse los resto de esperma que había acogido entre sus dedos en tanto que no dejaba de preguntarse como era posible que no hubiera muerto deshidratado debido a los fluidos que habían salido de su cuerpo en un corto espacio de tiempo cada vez que recordaba al objeto de su amor y deseo: el sensual Hanamichi Sakuragi.
Decidido a completar la rutina de los anteriores tres días, se levanto decididamente de la cama, cogió las primeras prendas que encontró en su armario y fue directo al baño que para variar esta ocupado por su hermana.
Llamo impaciente con la palma abierta y enseguida la resuelta voz de su, única, hermana mayor se oyó tras la puerta
-Ve al de abajo
-En el de abajo no hay ducha-replico bufando Kaede con tono de quien no entendía porque las mujeres pasaban tanto tiempo en el baño
-Estoy yo primero- argumento la chica como dando a entender que tenia primigenia razón
Rukawa levanto la ceja harto de la situación -¡llevas ya dos horas!-exclamó con mas ganas sin dejar de tocar a la puerta repetidas veces
-Deja de golpear la puerta que me estas poniendo nerviosa niño- salió de la maquillada boca de su hermana cuando en un rápido ademan abrió la puerta
-Yukari ¿que haces así de buena mañana?- preguntó anonadado Rukawa en cuanto vio a la chica toda arreglada como un sábado por la noche, cada vez más le parecía que por muy universitaria que fuera tenia cerebro de mosquito
-he quedado con Jin- le explicó la chica toda resuelta
‹‹ah, si Jinpachi Hatori el subnormal ese con el que sale››-procesó con desgana el cerebro del zorro pues
todavía recordaba en la presentación oficial que le habían obligado a hablar con él
-Me acaba de llamar dice que tiene una sorpresa para mi-interrumpió Yukari los pensamientos de su hermano -¿y tú que?, desde el sábado esta muy rarito, antes te ibas a entrenar y luego te duchabas-la chica tomó un gesto pensativo-estas más autista que de costumbre y no hablemos de que te sangra mucho la nariz últimamente...
Sin embargo la chica no terminó sus divagaciones porque su hermano la cruzó rápidamente en dirección al aseo
-cambio de rutina- contesto rápidamente el zorro metiéndose en el baño y cerrando la puerta
‹‹cambio de rutina›› -repitió para si Rukawa sabiendo lo poco creíble de su excusa pues el absoluto hábito de estos días era dar con el paradero de Sakuragi y es que eso le estaba obsesionando. Pues
aparte de perder la cuenta las gratas masturbaciones que se daba con la imagen del pelirrojo necesitaba saber si tenia posibilidades con él, pero ni rastro, solo se había encontrado con el retrasado de Sendo apestando a feromonas de salido que seguro también estaba buscando a Hanamichi.
Al otro lado de la puerta de madera Yukari Rukawa negaba con la cabeza y sus labios mostraban una sonrisa maliciosa- así que ahora se llama cambio de rutina, ¡ja!, estas enamorado hasta las cachas hermanito-dijo pensando en voz alta antes de perderse por el pasillo en dirección hacia su cuarto.
*
‹‹otra vez ni rastro››-sentencio Rukawa mirando al suelo apenado cuando volvía a buscarle en la cancha donde era habitual ver a Sakuragi practicando-‹‹ni siquiera esos amigos suyos que tiene, parecían muy avergonzados pero no creía por eso se han encerrado durante tres días en su casa››
Al levantar la vista ve una alta figura, ¡él conoce esa camisa!, es la que llevaba Hanamichi el día del streptease, quiere echar a correr hacia él pero se queda congelado en el sitio cuando ve que el portador no es otro que su mayor rival en el juego del pelirrojo que también se ha percatado de su presencia y se dirige a él con una ladina sonrisa
-¿qué te parece?-le pregunta Sendo mientras acaricia el cuello de la camisa con sarcasmo- admito que me ha costado conseguirla
‹‹Maldito erizo verde, esa camisa debería ser mía››- se dice Kaede muerto de celos y envidia, pero se repone con celeridad- bueno, tú te quedaras con su camisa como premio de consolación por que quien se quedara con Sakuragi seré yo.
Sendo le dedica una sonrisa igual de tensa que la mirada de Rukawa hacia él
-No lo creo, YO -remarcó Akira- me quedaré con Hanamichi y tu seguirás pelándotela como un mono como seguro que has hecho desde el sábado
-¿Lo dices por experiencia?- el tono del zorro no era nada amistoso y cualquiera podía rasgar el aire entre ellos.
Sin embargo los chicos decidieron obviar la hostilidad mutua para concentrarse en encontrar al pelirrojo como creyendo, al igual que en un concurso infantil, que el que le viera primero lo tendría de premio.
Rukawa fue el primero en marcharse, no antes de dar un ultimo gruñido de zorro a Sendo toda una declaración de guerra en un primitivo idioma machista.
Dio la espalda al jugador de Ryonan y se marcho por donde había venido, cuando estaba dando la vuelta se topó con una encogida anciana totalmente vestida de negro pidiendo. Le resulto extraño no había mendicidad en ese barrio aparte que llevaba ya tres días justo como la desaparición del pelirrojo que le volvía loco
‹‹do´aho donde te has metido››- suspiro intranquilo para sí mientras su espigada silueta se perdía calle abajo
Por su parte Sendo, sosteniendo una tensa sonrisa, espero a que Rukawa desapareciera de su vista y luego fue tras la misma dirección que el joven del Shohoku había tomado, cuando paso a la altura de la viejecita, se la quedo observando un rato mientras le parecía que se encogía un poco más al notar su mirada sobre ella, se palpó los bolsillos velozmente para dejo caer algo en el plato donde había unos pocos yenes, esbozó su usual sonrisa y silbando se marchó por la senda que conducía a la avenida principal.
‹‹no me puedo creer que ese erizo me ha dejado algo››- penso la cabeza debajo del pañuelo negro, subió un poco la inclinada cabeza para asegurarse de que no había moros en la costa y comenzó a sacar la cabeza estirando el cuello al igual que una tortuga dejando de ver el comienzo del inconfundible flequillo rojo
‹‹¡será capullo! me ha dado un caramelo››
-¿todavía sigues ahí Hanamichi?- la voz de Yohei que le sobresaltó de inmediato
-claro, no pienso formar parte de tus magníficos planes- contestó cuando se repuso del susto viendo como su amigo se acercaba a él-como quieres que me olvide que un tío me dijo "si se te levanta el asta juro bandera"
Yohei se arrodillo hasta quedar cara a cara con el pelirrojo
-¿qué te crees que no?, creo recordar que a mí me gritaron "ese culito que no pase hambre"- dijo dando un escalofrío y añadió con la paciencia de tener que explicar a un niño-además no has conseguido ni diez yenes en tres días
- ¿Y que?, los demás también están pidiendo por ahí para conseguir reunir el dinero a tiempo- se reafirmó el pelirrojo con fe
Los tres mencionados aparecen temerosos por la esquina en ese preciso momento, también iban vestidos con pintas de pedigüeños incluso Okus llevaba un cartel al cuello que decía tengo tres hijos, un gato, un canario y un periquito además tengo que alimentar a la suegra
-Abandonamos Hana- dijo Noma como portavoz de los otros dos-llevamos sin lavarnos tres días para caracterizarnos y el tonto este de Takamiya se ha gastado el dinero en zamparse una hamburguesa
-Cobardes- gruño el pelirrojo
-Tampoco es eso, es ser realista, mis padres estarán aquí el lunes y estamos a miércoles, además Yohei ha preparado todo incluso hemos hecho carteles-dijo Takamiya y le mostró uno a Hanamichi de los que habían estado pegando antes
- ¿Por qué mi foto? esto harto de ser el reclamo- dijo sorprendentemente para el anterior ego que se gastaba Sakuragi -Bueno... - cedió al fin- pero con la condición que lo que sobre se lo damos al Comedor Social
-Vale- dije los otros cuatro firmemente al unísono
**
Rukawa salía de la papelería del barrio con la prensa deportiva y fue al supermercado con el resto de la lista de lo que debía comprar, al fin y al cabo si su hermana no lo hacia la responsabilidad recaía en él pues sus padres no estaban y no quería morirse de hambre
Completamente desanimado al ser el tercer día consecutivo sin noticias de su adorado pelirrojo, decidido regresar a casa, enumerando mentalmente los sitios donde le iría a buscar esta tarde
‹‹Debería llamar al capitán Miyagi o a Ayako seguro que sabrán su teléfono››
‹‹Pero,¡mierda!, tampoco tengo el número de ellos››- se reprochaba mentalmente su naturaleza asocial
De repente se paro en seco ¿que eran esas letras que habían pasado por delante de sus ojos? ¿Hanamichi Sakuragi?, no estaría volviéndose loco del todo, retrocedió unos pasos a la altura del poste en que juraba haber leído en relación al del pelirrojo
¡Oh dios! ¡no lo podía creer! Arranco el papel nerviosamente para acercárselo hasta rozarlo con la punta de la nariz y leyó en voz alta el encabezado del anuncio para asegurarse de que no estaba alucinando- Subasta de besos-se quedó sin aire de la sorpresa, así que eso era lo que estaba preparando su torpe.
Intentando controlar la excitación que le embargaba llego a su casa corriendo subió las escaleras de dos en dos e intento serenarse para maquinar un plan y comprar los labios del pelirrojo, pero releyendo se percató de la letra pequeña que decía "Solo para chicas"
‹‹Joder››
-Kaede- oyó que le llamaba su hermana interrumpiéndole, así que molesto salió de su habitación
-¿por qué arrastras la maleta?
-Jin me ha invitado el fin de semana fuera, ¡no es fantástico!-dijo poniendo la maleta sobre la cama llenándola de ropa hasta reventar-pero eso sí, si papa y mama llaman no les digas que me he ido con él, pon alguna excusa-le pidió como favor a su hermano
-bah- en realidad le traía al fresco pero tampoco era un chivato-no entiendo para que quieres tanta ropa, solo son dos días, ¿ en eso te gastaste el dinero de la herencia del abuelo?
-Sí , ¿y que?, tú te compraste un balón nuevo, pues yo me compro lo que me da la gana
Y una luz se encendió dentro de Rukawa, mientras veía a su hermana afanarse para que sus prendas en la cupieran en la bolsa de viaje.
***
Un nuevo día comenzaba en Kanagawa y tenia algo que lo diferenciaba de los demás: era el esperado día de la subasta
Se había organizado al atardecer en el Danny´s, con Ayako de presentadora y recaudadora, en un improvisado escenario y convertido los baños masculinos en vestuarios
Allí era donde estaba Hanamichi y su Gundam, que escuchando el jaleo que traspasaba la puerta del aseo no pueden evitar abrir la puerta para echar una mirada al exterior
Asi se ven cuatro cabezas escrutando todo el local y pensando- ‹‹¡ay dios!, protégenos de las hordas de locas››
Mientras el pelirrojo no dejaba de dar vueltas arriba y abajo pensando en porque tenia que subastar su primer beso, dudaba de si pegarse un cabezazo contra la pared pero le había costado decidirse que ponerse y no quería arruinarlo.
Y es que estaba increíblemente atractivo con una camiseta negra que le hacia de segunda piel y unos pantalones chinos que le daban un aire de radiante compostura además sus rojos cabellos lucían un peinado estudiosamente desarreglado.
Sus compañeros no se quedaban atrás luciendo sus mejores galas
-dejad la puerta quieta inútiles, que me ponéis nervioso- dijo el pelirrojo a punto de subirse por las paredes
Los cuatro le miraron y después siguieron a lo suyo
-Oye, esas no son la asociación de tercera edad de Kanagawa- pregunto Noma de forma retórica, porque efectivamente el grupo de emocionadas abuelas llevaba la chapa de la asociación y una hucha en forma de cerdito recaudando dinero entre ellas
-Han venido las fans de Hanamichi también- repuso Takamiya y al momento todos le dieron un codazo para que cerrara la boca
El pelirrojo se puso lívido al recordar a su autodenominada fan numero uno, una histérica en potencia - no me digáis que esta la pesada esa de la Matsudaira
-Bueno... -intentó arreglar Noma
-Yo no salgo-sentenció Hanamichi
Se resolvió a irse pero al abrir la puerta un grupo le vio y se pusieron a gritar como locas, Sakuragi cerro la puerta corriendo y pego su espalda a ella con cara de susto
-Por favor no me hagáis esto recordar que esa pirada me mando una carta diciendo que se quería casar conmigo, por no mencionar que eso ha sido lo más suave- casi temblaba al recordar el día que llegó casa extrañándose al encontrar la ventana forzada para después encontrarse a una chica de aspecto común mirándole lascivamente tumbada en su cama con un picardías y eso solo había sido el principio: un wonderbra volador que casi le dejó ciego en el partido contra el Kainan o cuando se quiso tirar desde las gradas en plan suicidio porque el pelirrojo pasaba de ella.
En ese momento supo que no quería volver a tener admiradoras en lo que le quedase de vida
-Lo siento Hana pero no queremos ser linchado por un ejercito de hembras en celo- y es que si las seguidoras de Rukawa te gritaban y te dejaban sordo, las del pelirrojo no se quedaban atrás y eran capaces de darte una paliza y dejarte sin dientes con tal de defender a su ídolo.
-Mirad a esa- oyó Hanamichi decir a Noma mientras Yohei le calmaba dándole aire con un panfleto
-No la había visto pero es mi tipo, alta y exótica-repuso Takamiya
-¿un poco rara no?
-que va, esa otra tan alta si que es rara, menuda hortera
-Ey, que viene Ayako
La manager atraviesa la puerta del aseo masculino-enhorabuena chicos el local esta lleno hasta la bandera, hasta han venido las admiradoras de Rukawa, ¿estáis listos?
-Un momento y salimos-confirmó Yohei que sacó cinco palitos- quien saque el mas corto sale primero y así sucesivamente
Todos se apresuraron a coger uno rápidamente deseando no ser el primero para que otro rompiera el hielo
Yohei echo un vistazo- pues primero Okus, después Takamiya, yo, Noma y Hanamichi
-Allá voy- dijo Okus, mientras se echaba un spray mentolado para el aliento y oía los comentarios de animo de sus compañeros para momentos después salir totalmente decidido
Fuera se escuchaba como la chica de rizos daba comienzo la subasta dando una calurosa bienvenida a las presentes y toda la atención se concentró en el escenario.
Ayako le hizo subir a la tarima haciéndole dar la vuelta para mostrarle- empezamos la apuesta con mil yenes, varias chicas dudaban a comenzaban a levantar la mano, hasta que se animó el ambiente y el efecto masa hizo que se consiguiera 3000 yenes
Los amigos comentaban emocionados la jugada desde la barrera, entiéndase el bastión higiénico masculino
-no esta mal la chica- comentó Takamiya cuando por fin finalizó la primera subasta
-no si la ves de frente, porque de perfil menudo par de narices que se gasta- criticó Noma
- callaos, callaos, que empieza el beso
En efecto Okus empezaba a tomar ventaja a la chica y fue tan directo que se dio un cabezazo brutal y un buen golpe en las narices
-¿pero que hace el tonto este?- gritó el pelirrojo
-es que ensayo con un póster-explicó Noma mientras bajaba la cabeza tapándose los ojos-ya sabéis todo plano
El siguiente fue el turno de Takamiya que se lo rifaron las abuelas al grito de buen mozo y las dio un beso en la mejilla a todas, luego Yohei, que armó un griterío colosal cuando hizo su flamante aparición, parecía que el chico tenia mas éxito del que el creía y su subasta acabo sin problemas besando a un chica que no conocía pero tal como fue el toque de labios seguro que no le importaría saber mas de ella.
Después Noma fue quien subió al escenario y para sorpresa de la Gundam quien pagó fue Fuji la amiga de Haruko
- no me había dado cuenta de que Haruko estaba aquí-- repuso el pelirrojo en tono neutro mientras Fuji subía al escenario animada por sus amigas
Yohei le palmeo la espalda- jajaja, no sé que en que piensas-y a continuación le explico- según Ayako para las chicas esto es el acontecimiento del año- y añadió mirándole pícaramente- ¿a qué no sabes por que?
Pero el pelirrojo no contestó pues le alertaron los gritos de Okus y Takamiya
-¡joder, que le va a dejar seco!
Y es que Fuji tenia a Noma inclinado entre sus brazos más blanco que el papel seguramente por el beso a roscachapa que le estaba dando.
- Yo creo que le ha succionado hasta el espíritu- fue la gran frase de Takamiya cuando Fuji aleccionada por Ayako soltó a Noma que bajó dando tumbos y le recibían preocupados en el aseo.
-Y por fin el momento esperado por muchas: ¡Hanamichi Sakuragi!- presentó Ayako que por un momento se quedo quieta al ver que el pelirrojo no salía
-Sakuragi, vamos
Finalmente el monumental pelirrojo al escenario aunque le costo lo suyo porque se había puesto rezar a todos los dioses que conocía
-Bien empezamos con 1000
La aparición del pelirrojo en escena fue un éxtasis colectivo, no hacían mas que oírse grititos de nerviosismo mientras una gran cantidad de manos se alzaban para pujar por él y en pocos minutos se alcanzo la cifra de los 5000.
Mientras Hanamichi se decidió a evadirse pensando en cuanto hacia falta para conseguir los 41000 que faltaban
‹‹ ummm... entre los demás han conseguido 22500, todavía queda demasiado››- claro que el no sabia que había tres personas presentes dispuestas a todo.
Sakuragi se sentía intensamente observado y queriendo saber por quien, sus ojos se encontraron con una mirada azul que pertenecía a una exótica chica y sin ser consciente se sonrojo furiosamente apartando la mirada.
Alzó la cabeza mirándola todo lo disimuladamente que pudo, quería saber que era lo que había en aquella chica que lo hacia sentir de forma extraña, no sabia como definirlo, ¿intimidado?, ¿nervioso? o ¿inquieto?
Claro que lo último que pensaría Sakuragi era que se encontraba con su ex enemigo declarado y actualmente algo calificable como pseudo amigo: Kaede Rukawa
Y es que la gran genial idea que se le ocurrió al zorro había sido tomar prestada la ropa de su hermana agradeciendo que fuera mas alta que la media femenina, pero aun así había tenido que ponerse una vaporosa falda blanca de lino porque todos los pantalones le quedaban horrorosamente cortos, y eso fue el principio del suplicio, mención aparte su inutilidad para conjuntar la ropa.
No podía ponerse algo que en cualquier momento podía mostrar sus piernas al aire y que salieran unos pelos negros que asustaban
¡Dios! Todavía le escocían las canillas de la cera caliente, no entendía porque había que pasar por esa tortura de la depilación lo único bueno fue cuando se afeito las axilas con cuchilla pues al estar en verano le proporcionó una sensación de frescor, pero de todas maneras terminó dando gracias al cielo por su pecho lampiño.
Por aquellas terribles experiencias se juró internamente que no dejaría que le arrebataran los espléndidos labios del deseado pelirrojo, ni siquiera la inaguantable fan ni por supuesto el atrofiado mental de Sendoh que para su desgracia había tenido la misma idea y estaba situado en apenas unos metros de distancia, echándole miradas asesinas, convertido en una estrella de rock femenina salida directamente de los años ochenta de lo sobrecargado que iba entre el maquillaje, la ropa y que ni siquiera se había molestado en peinar su pelopincho.
‹‹ tiene el gusto en el culo, va mas pintado que una puerta››- despreció mentalmente Rukawa, pues según su gusto él si se sabia maquillar: de manera discreta pero con estilo.
Levantó la mano por enésima vez, al principio le había costado arrancar al ver a Hanamichi hasta que terminó de babear, la cifra ya alcazaba los 13000 y la subió a 13500, lo que hizo que toda la atención fuera hacia él
Haruko la miró embobada nunca había visto una chica tan guapa pero el foco de atención cambio pues como instantes antes de que esa chica bajara la mano la otra estrambótica fémina había vuelto a pujar seguido de Yume Matsudaira
La competencia fue feroz entre las tres pues nada mas quedar en la puja ella solas apenas se daban un respiro dejando a todos los espectadores desconcertados por la intensa y agresiva lucha, pero según se iba alcanzando una cifra cada vez mas alta el dinero se agotaba hasta que finalmente la única que mantuvo la mano en alto la chica con esa estética hortera a los ochenta
-¿se puede paga con tarjeta de crédito?- preguntó ansiosa perdida, pues la cifra había subido a la nada despreciable cantidad de 27500 yenes
Ayako asintió anonadada por la feroz pelea, y porque sentía la mirada de la otras dos chicas que quería asesinar a la feliz ganadora-¿nos dices tu nombre?
-Ak... Akemi- contestó Sendo con voz de falsete
Pasaron la tarjeta, mientras Akemi miraba con hambre a Hanamichi que estaba absolutamente cagado de miedo, por él hubiera preferido que ganara la chica de los misteriosos ojos azules
-Por cierto Akemi nos avisan que no tienes fondos
-¿Como?- balbució Akira Sendo completamente helado bajo su disfraz
-Entonces tiene opción la señorita que quedo segunda con 27000 de oferta
Rukawa nada más escuchar esto, se aparto el largo pelo de la peluca recogiéndolo tras las orejas, se arremangó la falda dejando ver unas zapatillas converse negras y subió corriendo los escalones de dos en dos sacando torpemente un fajo de billetes del bolso
-Bueno pues cuando quieras- dijo Ayako shockeada por tanta celeridad
Cuando Sakuragi oyó esto cerro los ojos resignado- ‹‹ acabemos rápido››- penso su cabeza
Y Rukawa se le acerco dando una zancada totalmente nervioso viendo la hermosa faz de su do´aho con los labios contraidos en claro signo de nerviosismo.
Le daban ganas de besarlos deliciosamente para relajarlo, y eso fue lo que hizo aunque reconocía que le daba cierta vergüenza tener que hacerlo delante de todos pero en el momento que apenas fue un dedo la distancia que le separaba del pelirrojo le embriago con su suave perfume perdiendo la noción del tiempo y lugar.
Deposito sus labios sutilmente para comenzar a mezclarlos lentamente con los del apático pelirrojo, gozando sentir la carnosidad, la dulzura y el calor que emanaba de la boca de Sakuragi.
Se oyó un murmullo de asombro en toda la sala excepto por parte de "Akemi" que estaba de morros en un rincón
Sintiendo como era rodeado de emociones inesperadas pero muy placenteras y su corazón bombeando con rapidez, el deseo le aguijoneaba haciéndole querer mas de esa boca, querer saborearla por entero, así que empezó a tomar el labio inferior del pasivo pelirrojo entre los dos suyos mordiéndole levemente y degustándolo con su lengua. Mientras el pelirrojo comenzaba a reaccionar ante la demanda de mas pasión y torpemente buscó aquella húmeda y suave lengua que lo estaba dejando bajo de defensas atrayéndola a su boca donde la succiono con ardor.
Un -¡oooohh!- mucho más grande se dejo oír en la sala mientras las chicas se acercaban más a la tarima para no perder detalle del ardiente espectáculo
En ese preciso momento Rukawa se olvido de lo único que tenia presente: que en ese momento por su bien aparentaba ser una chica, y cogió con algo de violencia la nuca de Sakuragi mientras la otra mano se posaba en su mejilla. Si apenas quedaba algo de espacio fue eliminado de inmediato a la vez que ansioso devoraba al pelirrojo y este le correspondía con igual vehemencia.
Sakuragi no se podía creer que con un simple beso estaba totalmente excitado, pero... un momento... ¡estaba notando una dureza extra!
Sorprendido se paro en seco separándose de la que creía su compañera y la miro a los ojos, pero... si él conocía ese hermoso conjunto de iris y pupila
-Ru... Rukawa- fue lo único que atino a balbucear tras la inesperada revelación
Fue uno de esos momentos en los que sientes que el tiempo se para y los seres vivientes en convierten en estatuas, mientras Sakuragi notaba sus labios levemente inflamados por la energía del beso, todavía saboreaba el aliento de Rukawa y sentía la humedad en sus comisuras, se llevo la mano a los labios para comprobar que el tórrido beso había sido real.
Intento sobreponerse a la sorpresa haciendo un ademán para decir algo
-¡¡MALDITO BASTARDO!!- la voz de Sendo irrumpió en escena echándose sobre Rukawa y comenzando una pelea que dejo aun más asombrados a los presentes que ya no se podían creer nada de lo que veían
Y sin embargo ante los increíbles sucesos Hanamichi Sakurgi el ex pandillero que arreglaba las discusiones a base de puñetazos y que aniquiló a Tetsuo.. . se desmayo
Sendo y Rukawa dejaron de golpearse y corrieron a sujetarle para que no se diera contra el suelo
-necesita un beso de su príncipe azul para despertarse-dijo el pelopincho poniendo morros y tomado posición peligrosamente frente a la boca del pelirrojo.
A Kaede por mas que tuviera los nudillos congestionados no le importo descargar otro puñetazo en la cara de Sendo
La Gundam apareció de inmediato en escena separando a los jugadores de baloncesto como críos de parvulario y rápidamente cargaron al pelirrojo tomándolo cada uno de una extremidad mientras todas las fans se arremolinaban alrededor y Ayako se encargaba de despejar la sala.
Ya en el baño a salvo de admiradoras del zorro y el mono pelirrojo a punto de comenzar algo parecido a una guerra civil. Yohei y los demás decidieron a llevar al pelirrojo hasta su casa optando por no despertarle pues después de la sorpresa inicial podía liarse a hostias con Sendo y sobre todo con Rukawa.
Mito salió a hablar con los dos chicos que se habían puesto morados a golpes destrozándose hasta la ropa y habían firmado una tregua esperando noticias tranquilizadoras del estado de Sakuragi en el callejón que daba a la puerta de servicio del Danny´s
-Creo que lo mejor es que le dejaseis un tiempo en paz- dijo el moreno contemplando estupefacto la escena: dos de los chicos con mas popularidad y admiradoras dentro de panorama escolar, se habían travestido, pujado hasta los limites por un beso de su amigo y enzarzado en una pelea que les había dejado a los dos la cara como un pan.
No lo procesaba y estaba absolutamente seguro que el inocente Hanamichi no lo haría por lo menos hasta dentro de un tiempo
Kaede lo acepto sin mediar palabra, Mito no podía creer que esta noche pudiera haber más sorpresas al seguir con la mirada a Rukawa mientras se marchaba cabizbajo, el chico mas inexpresivo del instituto era la personificación de la tristeza, con los ojos vacíos, el rostro desoladamente serio y los andares cansados
****
Poco a poco los ojos castaños de Sakuragi se abrieron y en un primer momento vio las cuatro cabezas de sus amigos borrosas para llevarse la mano a su adolorida mejilla izquierda.
-Lo siento- oyó la voz de Noma- era la única forma de despertarte
Echó un vistazo desconcertado y comprobó que se hallaba en el salón de su casa
Con el gesto turbado pregunto titubeando- ¿qué ha sucedido?
Sus amigos se intercambiaron miradas mientras el pelirrojo esperaba anhelante una explicación
-Hemos conseguido mas dinero de lo que esperábamos gracias a ti -intentó desviar la conversación Takamiya
-¿ De verdad era Rukawa?- dijo el pelirrojo extrañamente sereno
Sus amigos asintieron con la cabeza
-¿ y el otro era ese erizo de Sendo?
Los cuatro volvieron a hacer un gesto afirmativo
Sakuragi emitió un profundo suspiro mientras se echaba las manos sobre la cara, cuando las quito sus
amigos observaban preocupados su gesto ceñudo y desconcertado
-Tus padres han salido a cenar, si quieres nos quedamos contigo- dijo afablemente Yohei
-no os preocupéis- hablo Sakuragi- es que no termino de creérmelo eso es todo- tomó aire como si le costará hablar para terminar de confesar- y el beso... me gustó
-no le des importancia, tu creías que era una chica
-pero no lo era y no era una chico cualquiera estamos hablando de Rukawa, joder... ¿acaso quería dejarme en ridículo
-no lo creo, estoy convencido de que a Rukawa le gustas-dijo Yohei firmemente aunque supiera que era revelación confundiría mas a su amigo
-y que quieres que piense, estoy echo un lío
-Lo que necesitas es consultarlo con la almohada- le dice fraternalmente Okus
-Si, nos vamos si necesitas algo cualquier cosa nos llamas
Antes de meterse en casa al acompañar sus amigos a la puerta Hanamichi se percata de que hay una sombra observándole
-¿Sendo?
En efecto el capitán del Ryonan sale de su escondite saludando con una mano
-ya se que tu amigo dijo que te dejáramos en paz, pero yo quería hablar contigo
-esta bien, pasa
Mientras el pelirrojo entra en casa seguido del puercoespin no deja de dar vueltas en su cabeza al beso, no sabe si se sientes mas turbado porque el beso le gustara, por que había sido un hombre o porque fuera Rukawa ¿habría alguna oportunidad de averiguarlo sin sentirse tan confuso?
-yo...-comenzó Akira nada mas estar encontrarse en el salón de la vivienda
-Sendo-cortó Hanamichi un extraño brillo de decisión en sus ojos -bésame
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