Pov. Sehun
- maldita sea- me desespere. Desde ya hace una hora que Da Hye no para de llorar y esta con la temperatura muy elevada. Llamo a Suho hyung pero su celular está apagado. - El número con el que intenta comunicarse se encuentra fuera de cobertura....- es lo mismo con el celular de Baekhyun. Debe ser por la tormenta que hay en estos momentos. También intente llamar a kyungsoo pero igual sería inútil pues él vive alejado y con la gran tormenta que hay sería imposible que salga de su casa. Al igual que yo estoy encerrado. Intente salir para llevar a Da Hye al hospital pero fue un intento fallido. Me estaba volviendo loco. No sabía a quién mas acudir. La bebé no para de llorar. Comencé a revisar la agenda de mi celular ahí debe haber algún número que sea de ayuda. Cuando encontré el número que buscaba marque rezando que esta vez si me entre la llamada. - Holaaa?...- me contestó adormilado. Era más de media noche así que era comprensible. - Luhan... Da Hye está enferma. Tiene mucha fiebre. Por favor- dije al borde de la desesperación. - voy para allá- me respondió inmediatamente y después colgó. Espere alrededor de diez minutos antes de que tocaran la puerta. Era él estaba todo mojado por la lluvia. Lo primero que pensé es que no se podía quedar con todo mojado, podría enfermarse. Así que corrí hasta mi cuarto y saque un par de pantalones que me quedaban chicos y una playera. Se las di para que se cambiara y así lo hizo. Mecía de un lado a otro a Da Hye esperando que se calmara un poco pero parecía ser en vano. Me desgarraba el corazón escucharla llorar. Mis intentos comenzaron a dar resultados pues el llanto fue reduciendo hasta solo ser pequeños quejidos. Estaba un poco decaída pues la fiebre la tenía en esas condiciones. - Listo- voltee a ver quien había dicho. Me causo mucha gracia y ternura lo que vi. Si no fuera que estamos en esta situación me habría reído a carcajadas. Luhan estaba con mi ropa que claramente le quedaba un poco grande, la playera le dejaba a la vista una de sus clavículas, y con el cabello alborotado y mojado. - sabes a que se debe la fiebre?- pregunto mientras sacaba su celular y entraba a la habitación. - Nose, se que hace un par de horas esta fastidiada y le subió la temperatura- le dije tratando de resumir todo lo que había pasado hace horas. - Esta bien. La fiebre es debido a la vacuna que le pusieron hoy- me dijo en un tono calmado tratando de tranquilizarme. - Tenemos que bajarla de alguna manera- me explico. Solo asentí a lo que me dijo. - Aquí dice que Se pueden tomar medidas físicas como quitar el exceso de ropa, bañar en agua tibia y dar líquidos abundantes- me mostro la pantalla de su celular donde efectivamente decía eso. Después de leer lo que decía puse a la pequeña en su cuna y quite el exceso de ropa solo dejándola en pañal y un polo ligero. Le indique a Luhan que se quedara ahí con la bebe mientras yo iba a calentar agua para darle un baño y enseguida prepárale un biberón con agua tibia. Cuando regrese a la habitación vi que Luhan tenía a Da Hye en brazos y la mecía de un lado a otro susurrándole una canción. Mi corazón se aceleró por tal escena que vi y una sonrisa boba apareció en mi rostro. Como una persona que recién la conoce puede tener todas estas atenciones. Venir desde su casa en plena tormenta, desvelarse y cuidarla. Sentía una rara sensación en mi pecho que no entendía. - Ya está todo preparado para el baño- avise. Después de darle un tibio baño le pusimos ropa ligera, un enterizo rosado, Luhan fue quien le dio el biberón de agua y la arrullaba mientras que yo limpiaba todo lo que habíamos usado y de rato en rato lo quedaba observando. Después de media hora notamos que la fiebre había bajado. Nos relajamos pero no bajamos la guardia pues la fiebre podría regresar. Cada diez minutos le tomábamos la temperatura para asegurarnos. Ya eran las cuatro de la mañana cuando Da Hye se durmió. La recostamos en su cuna y salimos de la habitación. - Por fin- suspire aliviado y tirándome sobre el sofá. - Si por fin- dijo Luhan y se sentó en el otro sofá frente a mí. - Es hora que regrese- se levantó. - Pero es muy tarde y todavía está lloviendo. Es peligroso- dije. - Mi hyung debe de estar preocupado- me respondió. Pude notar que estaba preocupado. - Puedes llamarlo y avisarle- dije. Por alguna razón no quería que se vaya. Era peligroso salir a estas horas. - Esta bien. Le enviaré un mensaje. Ya mañana le contaré - volvió a recostarse en el sofá y saco su celular para comenzar a textearle. - Me podrías invitar un poco de café- pregunto. - Claro- me pare y me dirigí hacia la cocina a preparar el café pero me di con la sorpresa que se me había acabado. Cuando salí de la cocina para avisarle a Luhan que se me había acabado el café, lo vi dormido en una posición incómoda pues tenía el cuello torcido hacia un costado. - Creo que ya no querrá el café- susurre. Me acerque a él y lo cargue al estilo princesa. Estaba tan dormido que solo paso sus manos por mi nuca inconscientemente pero ni abrió los ojos para nada. Lo recosté sobre mi cama y lo tape hasta el pecho. La noche estaba fría. Vi como se arrullaba y se acomodaba para dormir. Volví a la cocina a apagar el agua que estaba hirviendo y luego pase por la habitación de Da Hye para ver si seguía dormida. Le bese la frente y salí sin hacer ruido. Después de ponerme pijama. Me recosté al lado de Luhan quien parecía estar muerto. Lo pensé de no ser que todavía respiraba. Cerré los ojos y caí rendido en un sueño profundo.
Fin Pov. Sehun
La mañana siguiente un desorientado Luhan despierta poco a poco con los rayos de luz que entraban por la ventana reflejando en su rostro. - Donde estoy?- pensó desesperado pues despertar en una habitación que él no conocía era inesperado. Y más si una pierna desconocida esta cruzada en tu cuerpo. Poco a poco iba analizando la habitación donde estaba. Las imágenes de la noche anterior venían a su cabeza poco a poco, haciéndolo recordar que su hermano lo mataría cuando llegue a casa. Cuando volteo a ver al que estaba durmiendo a su lado no pudo contener que una sonrisa se apoderara de su rostro. Nunca se imagino ver a Sehun en esas circunstancias. Le dio un pequeño toque en la nariz y luego paso muy suavemente su mano por la mejilla del menor. Este solo ronroneando un poco y luego siguió durmiendo plácidamente. Cuando miro el reloj en la mesita de noche dio un gran salto. - Son las doce!- grito haciendo que el de su costado se levantara asustado y lo mirara confundido. - qué pasa?- le dijo mientras rascaba su cabeza. - Me tengo que ir- se levantó lo más rápido que pudo. Su hermano realmente lo mataría esa noche cuando llegue a casa. - Hoy no fuimos a clases- miro al recién levantado. - Tienes razón- dijo agarrando el pequeño reloj entre sus manos. - Ya me voy- se despidió y fue hacia la puerta de la habitación. Iba a salir cuando una mano agarró su brazo y lo detuvo. - Gracias- Sehun se sentía muy agradecido con aquel chico que le fue de mucha ayuda durante toda la noche. Cuidando a Da Hye. Luhan solo sonrió brillantemente antes de salir por completo de la habitación y del departamento.
Después de quedar solo salió de la habitación para ir a ver a Da Hye, la última vez que controlo su fiebre Fue hace cuatro horas, cuando se despertó sonámbulo. Entro y vio a la pequeña jugando con sus pies recostada en su cuna. Parecía que la fiebre ya no la molestaba pues una bella sonrisa se dibujo en su casa rostro cuando vio a Sehun.
Sehun la alzo en brazos y luego fue hacia su habitación otra vez. Ya que hoy no fue a clases y todavía faltaba para que entre a trabajar. Decidió que pasaría todo el resto del día en casa disfrutando de la pequeña. Se volvió a recostar en la cama solo que está vez acomodo las almohadas para que Da Hye tenga una buena posición. Y agarro su celular que estaba en la mesita de noche. Cuando se percató tenía más de diez mensajes de Suho. Solo abrió el más reciente y lo leyó: Donde estas? No piensas venir a clases? Ha pasado algo? Respóndeme! :@ Mas tarde voy a verte. Los chicos están muy preocupados.
- Hyung estamos bien, solo me quede dormido, no se preocupen. - le respondió el mensaje. No vio los otros mensajes pues sabía que todos dirían lo mismo. Así que bloqueo la pantalla del móvil y se dispuso a jugar un rato con su pequeña. Realmente a Da Hye le encantaba ese peluche de ciervo que kai le había regalado. Cuando Sehun observo más detenidamente el animalito, automáticamente vino a su cabeza la imagen de Luhan, esos grandes ojos y esa brillante sonrisa. Y otra vez si corazón comenzó a bailar dentro de su pecho. - No sé qué me pasa- le hablo a Da Hye quien parecía como si le entendiera y le sonrió.
Cuando Luhan llego a casa suspiro aliviado, pues su hermano no estaba pero su tranquilidad duro poco, al encontrar la nota que kris le había dejado se puso muy nervioso. El sabía que su hermano cuando se molestaba era todo un caos. Aunque él poca veces lo ha visto en esa condición. Después de arreglar la sala y poner todo en su lugar. Tomó una ducha, tratando de pensar en lo que le diría a su hermano cuando llegue a casa. ¿Seria muy difícil decir: hyung fui a la casa de mi amigo quien me gusta mucho. Lo ayude con su pequeña hija y me quede dormido y amanecí en su cama.- definitivamente omitiría la parte del "me gusta mucho" y el " amanecí en su cama". Amaba mucho su vida y la de Sehun como para que le diga eso a su hermano. Se paso la mano por sus cabellos mojados en forma de desesperación. No tenía idea de lo que le diría a su hermano mayor. Después de salir de la ducha. Se cambio y salió a un supermercado cercano para comprar algunas cosas para la cena.- Tal vez si le hago la cena no esta tan molesto- pensó. Le haría un gran festín como su hermano lo había hecho para él cuando fue su primer día de clases. Compro todo lo que le pareció necesario y regreso al departamento.
Cuando llego comenzó la lucha entre él y la cocina. Fue cuando se dio cuenta que la cocina y él no eran totalmente compatibles. Pero puso todo su empeño y al menos logro algo. - La intención es lo que cuenta- se dijo a si mismo dándose aliento al ver el resultado final de su platillo. Después de acomodar y limpiar lo que uso. Solo faltaba esperar a que Kris llegue. Se sentó en la sala y prendió la Tv en el canal de los dramas que tanto le gustan. Algo tenía que distraerlo. Paso poco tiempo antes de que escuche que la puerta estaba siendo abierta. Sus manos comenzaron a temblar, estaba nervioso de lo que su hermano le pueda decir.