Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Todo en contra por Yaoi lovers

[Reviews - 42]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Adivinen quien volvió de la muerte! Ok no pero casi(?)

Ya hablando en serio no creí tener listo el cap antes de que terminara noviembre ¡Es una sorpresa incluso para mí! :D

Bueo ya, los dejo con la lectura

Seguían abrazados en completo silencio, tras lo que acababa de ocurrir lo que menos necesitaban eran palabras y ambos lo sabían, sólo querían disfrutar de la compañía de su pareja y disfrutar el momento sin importar nada más.


Tan inmersos estaban en la situación que de no haber sido por la vibración incesante del celular de David no se hubieran separado. 


-Es Fernanda-dijo al mirar la pantalla del aparato-Sólo dame un segundo…


-¡David! ¿Dónde estás? ¿Terminaste lo que ibas a hacer?-preguntó la chica al otro lado del teléfono.


-¡Fer! ¿Estás lista para irnos? Pensé que tardarías más…-miró a Gabriel esperando una respuesta de su parte.


-Adelante…-susurró sin mucho ánimo-Pregunta donde se verán para que nos vayamos-continuó tomando su mochila y la del chico para salir del invernadero.


-Estoy por terminar, no tardaré mucho ¿Te veo en la puerta o dónde?


-Estoy en la explanada ¿Te parece si nos vemos aquí?


-Está bien, no tardo-cortó la comunicación-¡Prometo compensarlo después!-le dijo al otro chico mientras tomaba sus cosas-Ya sé que casi no tenemos tiempo para nosotros pero si me negaba terminaría sintiéndome mal-lo tomó de ambas manos para verlo de frente.


-No te preocupes por eso, ya habrá otro momento en el que tengamos más tiempo-lo atrajo hacia él con ternura-Entiendo que es tu amiga y que no puedes hacerla a un lado, a cada uno debes darle su espacio y así está bien. Ahora vámonos que está esperándote-lo abrazó por última vez antes de salir del lugar.


-Gabriel…-lo detuvo antes de salir-Gracias, de verdad-entrelazó sus dedos-Te quiero-le dio un beso en la mejilla y soltó lentamente su mano para seguir con su camino.


El más alto lo miró caminar durante unos segundos con una sonrisa, no sabía si el chico lo hacía a propósito o si era de manera inconsciente pero cada vez le era más difícil resistirse a sus muestras de cariño.


Llegaron con la chica y tras despedirse cada quien siguió su camino. El chico iba en completo silencio mientras oía lo que la chica tenía por contarle aunque no se sentía precisamente animado para una conversación, se sentía culpable por no estar con su pareja aunque él dijera que todo estaba bien.


-Gabriel y tú se hicieron muy cercanos-le dijo llamando su atención-Quiero decir ¡Mírate! Al principio del año ni siquiera se hablaban, después empezaron a acercarse pero no pasaba de una pequeña conversación en el pasillo o que se juntaran a resolver una tarea y ahora se me hace extraño no verlos juntos.


-Tenemos más cosas en común de lo que parece, aunque siempre parezca serio si se lo propone puede llegar a ser muy gracioso y divertido. Deberías intentar acercarte a él, seguro también podrían entenderse.


-¡Ya me lo imagino! Tú, Gabriel y yo como amigos… Los tres siempre juntos y andando de aquí para allá sería grandioso ¿No crees?


-¡Seguro!-respondió fingiendo una sonrisa pues la idea de no poder estar a solas con el chico no le agradaba del todo-¿Pero no crees que Isaac se pondría celoso?


-Hmp… Me imagino que sí, no creo que le agrade mucho que me la pase con ustedes dos…-la chica desvió la mirada-¡Pero no suena mal!


No quiso insistir, si su amiga no profundizo debía haber una razón y no sería el responsable de que lo dijera. Simplemente siguieron el camino en silencio, comentado solo de vez en cuando algo respecto a la escuela o sus aficiones.


Apenas puso un pie en su casa se apresuró a redactar un mensaje avisándole así a su pareja que estaba de regreso.


-¡Ya llegué a mi casa! ¿Y tú? ¿Ya estás en tu casa o fuiste a vagar por ahí?


-Voy en camino-fue su repuesta-Hoy no tenía muchas ganas de estar fuera, mejor quedémonos mañana saliendo de clases y vayamos al parque a leer un rato ¿Te parece?


-¡Perfecto! Tengo muchas ganas de seguir con la historia y prometí que te compensaría, podemos quedarnos un par de horas o más.


-Te dije que no debías preocuparte por eso-escribió mientras negaba con la cabeza-Quiero que vayamos para estar juntos no porque quiera que compenses algo-le respondió sin entender por qué insistía en el tema.


-¡Apuesto a que sigue con su misma cara seria a pesar de lo que acaba de escribir!-se dijo tras leer el mensaje-¿Cómo hace para decir ese tipo de cosas de manera inconsciente…?-se sentó a releer un par de veces el mensaje antes de responder.


-Es un niño…-suspiró tras leer la respuesta-Demasiado impulsivo para ser verdad.


El mensaje decía: “No lo decía de esa manera, si alguien quiere que estemos juntos soy yo. No es agradable tenerte todos los días a mi lado y no poder abrazarte o besarte tanto como quisiera. No me reclames por las palabras y sólo déjame quererte ¿Sí?”


Eso lo llevó a su límite y no pudo hacer más que marcar su número a toda prisa no importaba como pero necesitaba escuchar su reacción tras escribir algo así.


-¿Qué se supone que significa todo eso que acabas de escribir?-fue lo primero que dijo en cuanto el más bajo contestó.


-Pues sólo eso, que quiero que estemos unas cuantas horas juntos no sólo porque hoy no pudimos… Mientras estamos en clases no puedo abrazarte todo el tiempo y cuando estamos solos sí.


-¿Tienes idea de lo caprichoso que eso suena? Sólo quieres que pasemos tiempo juntos para poder abrazarme, eres peor que un niño-fue su respuesta en su acostumbrado tono serio.


-¡No soy caprichoso! Quiero estar contigo no sólo para abrazarte o para leer o porque me divierta mucho cuando estoy contigo. Sólo tengo una razón para eso y ya deberías saberla.


-Si no lo dices no puedo saberlo, te conozco bastante pero no puedo leer tu mente-le respondió imaginando a lo que se refería-Dime la razón y si me convence dejaré de creer que eres caprichoso.


-Es porque te quiero-respondió con seguridad-No necesitas leer mi mente para saberlo, te lo he dicho varias veces y pensé que no tendrías dudas de eso.


-Sé perfectamente que es porque me quieres, sólo quería escucharlo directamente de tu boca.


-No juegues así conmigo, me haces dudar, como si no lo demostrara lo suficiente.


-¿Es malo que quiera escuchar que lo digas? Si es así no te lo vuelvo a pedir-le respondió riendo ligeramente.


-Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero… ¡Te quiero Gabriel! Y puedo decirlo las veces que quieras si eso te hace feliz, no me voy a cansar de decirte que te quiero.


-Pues sí me hace feliz, por eso me gusta escucharte, de no ser así no te lo hubiera pedido-le respondió con tranquilidad.


-¿Por qué siempre me haces lo mismo?-le preguntó David hablando bajo-Me dices ese tipo de cosas tiernas tan serio como siempre, no entiendo como lo haces.


-No lo pienso, lo digo como lo siento y asunto solucionado. Y no entiendo porque te sorprende si haces exactamente lo mismo. En estos minutos que hemos hablado me has dicho que me quieres aproximadamente diez veces y lo has hecho como si fuera un hola a cualquier persona.


-Tú eres responsable de eso, no quiero que dudes de lo que siento por ti y por eso puedo decirlo con tanta seguridad… Y no me hagas seguir con esto o mañana no podré verte sin avergonzarme.


-No puedo creer que seas tan exagerado-rio ligeramente sabiendo que el chico no mentía-Has dicho cosas mucho más “vergonzosas” estando frente a frente y no parece que eso te afecte, unas cuantas palabras sinceras por teléfono no pueden causarlo. Pero está bien, si no hacerte decir más te tranquiliza esperaré hasta mañana para seguir con esto.


-Como disfrutas molestarme con eso-respondió fingiendo indignación-Deberías ser más cariñoso y preocuparte más por mí… Pero bueno, mi mamá lleva horas hablándome y si no voy rápido seguro me quita el celular con todo y brazo… Nos vemos mañana ¿Sí? Te quiero-fueron sus últimas palabras esperado la risa del más alto.


-De acuerdo, nos vemos mañana. También te quiero-concluyó dando por terminada la llamada.


David sintió a su estómago dar un vuelco, sabía que su pareja sentía lo mismo que él por cómo se lo demostraba pero en ninguna ocasión había utilizado palabras para expresar ese sentimiento. Pensó incluso que había escuchado mal o que quizá el otro chico lo dijo sin pensar y no porque dudara de la veracidad de sus palabras sino porque no esperaba escucharlo directamente de él tan pronto.


Se sentía más feliz que nunca por sólo haber escuchado esas palabras. Ni él mismo podía creer su reacción pues parecía hasta infantil pero Gabriel lograba aquello que ninguna de sus ex-novias había logrado: formar una conexión tan especial que sin necesidad de estar juntos todo el tiempo o compartiendo muestras físicas de afecto se sintiera dichoso de ser su pareja.


__________________________________________


 


El segundo trimestre había llegado a su fin después de muchos días de estrés y tareas y trabajos acumulados de todas las materias. Las cosas habían sido tan intensas en las últimas dos semanas que la pareja casi no había tenido tiempo de estar juntos más que cuando se reunían a estudiar y durante clases.


Ahora que todos los exámenes habían terminado ambos se sentían más relajados, pues si bien Gabriel había dejado de entrar a la mitad de sus clases y no tuvo que presentar todos los trabajos, tareas y exámenes ver a su pareja tan preocupado lo hacía entrar en esa misma crisis.


-¡Creí que nunca llegaría este día!-dijo entre bostezos mientras se estiraba intentando desperezarse-Sentí que moriría y de nada habría servido mi esfuerzo.


-Como te encanta dramatizar la situación, siempre es lo mismo cuando llegan los exámenes y ya deberías acostumbrarte. Además, esta vez fue menos pesada que la anterior-le dijo el más alto para molestarlo.


-Para ti es fácil decirlo porque no presentaste la mitad de todo lo que tuve que presentar…


-¿Y quién crees que tuvo que soportar tu mal humor y tu estrés durante estas semanas? Tampoco fue fácil para mí.


-Son tan adorables…-escucharon una suave voz tras de sí-Gabriel cuidó de David durante estas semanas ¿Lo imaginas?-preguntó Brenda sin dejar de mirarlos.


-Seme que se respeta debe cuidar a su uke en los momentos más difíciles, sino fracasó como seme… Ya me imagino a David durmiendo sobre los cuadernos mientras estudiaba y Gabriel cubriéndolo para que no se resfríe…-una vez más Angélica dejaba volar su imaginación sin importarle que los chicos escucharan todo.


-Deja de fantasear de una vez por todas-Araceli tomó a su amiga intentando alejarla de los chicos-Brenda, por favor no la alientes. Una vez que empieza no hay como pararla-llevó a la chica casi a rastras lejos de ahí.


Los chicos solo rieron ante esa escena, las cosas no fueron tal como la chica lo decía pero si algo era cierto es que el tiempo que tuvieron juntos lo aprovecharon para estudiar y procuraba que el más bajo no se sobre esforzara y lo ayudaba en medida de lo que podía.


-Me divierto tanto cada que se ponen así… Aunque es curioso porque no están tan equivocadas, no evitaste que me resfriara pero cuando estabas conmigo me ayudabas a repasar y me explicabas cada vez que me atoraba en algún ejercicio-le dijo en cuanto estuvieron en el parque mirándolo de frente-Siempre me cuidas, de una manera muy peculiar pero así eres tú.


-¿Eso crees?-le respondió el más alto juntando sus frentes-¿Cómo puedes estar tan seguro? Quizá sólo te ayudo para repasar y prepararme para los exámenes extraordinarios.


-Ambos sabemos que eso no es cierto…-lo miró directamente a los ojos-Te choca estudiar y sólo aceptaste ayudarme porque insistí mucho-rodeó su cuello y lo atrajo hacia sí-De ser por ti no hubieras ni repasado.


-Es algo que no te puedo negar, estudiar no es lo mío-lo besó suavemente en los labios-Aunque ayudarte me divirtió, cambiar un poco la rutina vale la pena-se separaron y fueron a sentarse junto a un árbol para empezar su lectura.


Gabriel se recargó sobre el tronco y permitió que su pareja se sentara entre sus piernas apoyándose en su pecho. Lo rodeo para poder poner el libro de manera que ambos pudieran leer y sin más pasaron un par de horas sumergidos en su actividad favorita.


-¡Sentí como si llevara una eternidad sin leer!-le dijo el más bajo estirándose un poco-Necesitaba algo que no fueran apuntes o libros para examen…


-No exageres, apenas hace tres días leímos un capítulo para que te desestresaras antes del examen.


-Pero no es lo mismo, ese día había mucha gente y no pudimos leer los dos solos… De hecho, ha pasado mucho tiempo desde la última vez que estuvimos así, sólo nos quedábamos juntos para estudiar o hacer algún trabajo.


-Fueron dos semanas, y lo único que no pudimos hacer fue abrazarnos y besarnos ¿No crees que el tiempo se te pasó muy lento?-le preguntó divertido por su actitud mientras apoyaba su mentón sobre su hombro.


-No sabemos cuánto va a durar esto-giró la cabeza para verlo-Ya casi llevamos dos meses y los he disfrutado al máximo pero desde el principio fuiste claro con tus sentimientos y no podemos asegurar que en algún momento cambien a mi favor o que te enamores de alguien antes que de mí… Por eso quiero aprovechar cada segundo a tu lado, para no arrepentirme después por lo que no haya hecho-lo miro seriamente.


-Te preocupas demasiado-le respondió abrazándolo para disipar sus preocupaciones-Si vives tan pendiente del tiempo no tendrás oportunidad de disfrutarlo. Todo saldrá como debe de ser ¿De acuerdo?-lo sujetó con un poco más de fuerza  y lo besó en la mejilla.


Con tantas cosas que habían ocurrido ni siquiera recordaba que al iniciar su relación había dicho que no podía definir sus sentimientos hacia él. Ahora las cosas eran diferentes y sabía que aunque no pudiera expresarlo con palabras no tenía intenciones de terminar con todo tan pronto.


Pero no podía decirlo, no por ahora; aún debía decidir si era lo que quería en un futuro próximo porque si eso pasara debía cumplir con su acuerdo y dejar de ocultar lo que eran. En este punto las cosas no eran tan sencillas como decir “También estoy enamorado de ti, ahora podemos ser felices juntos”.


-Oye…-susurró acariciando las manos que aún lo sujetaban-Ya sé que es el peor momento para esto pero quiero proponerte algo. Ya te dije que quiero pasar más tiempo contigo y ya que casi llevamos dos meses juntos creo que podríamos hacer algo. Suena increíblemente cursi y no acostumbro hacer o pedir este tipo de cosas pero… Quiero saber qué piensas, sólo eso.


-¿Tienes algo pensado? La próxima semana no hay nada demasiado importante por entregar y podemos aprovechar para planearlo.


-¿De verdad?-se giró para quedar frente a frente y mirarlo con sorpresa-Como no sabía si aceptarías no pensé en nada pero no quiero algo muy elaborado. Un simple paseo sería suficiente mientras estemos juntos.


-Entonces pensaremos en algo durante esta semana y acordaremos un día ¿Te parece bien?


No dijeron más y se levantaron dispuestos a irse pero antes de salir Gabriel tomó a David de la mano y rápidamente lo atrajo hacia si para besarlo.


-Todo va a estar bien ¿Sí? No te preocupes por cosas insignificantes-lo abrazó suavemente y camino hacia fuera sin decir más.


________________________________________


 


La siguiente semana terminó antes de que pudieran darse cuenta y aún no tenían planes, no habían vuelto a mencionar el tema porque no encontraban la manera de hacerlo sin parecer ansiosos.


Ese día los profesores de sus últimas dos clases no iban a asistir así que su día en la escuela terminaría antes de lo acostumbrado.


-Es grandioso salir temprano en viernes ¿Verdad?-preguntó el más bajo mientras caminaban hacia la salida de la escuela.


-Salir temprano es genial sin importar que día sea-le respondió indiferente.


-Estuve pensando que hacer, por lo que te dije la semana pasada y pensé que podríamos aprovechar que hoy salimos temprano para hacer algo.


-¿Y ya pensaste que quieres?


-No realmente. Pensé llevarte a casa y jugar un rato pero como no estás muy interesado en los videojuegos y además mi mamá y mi hermana están allí y comenzarán a preguntar cosas y será incómodo creo que no es la mejor idea.


-Vamos a la mía-le sugirió deteniéndose de pronto-En este momento no hay nadie y podemos encontrar algo que hacer mientras tanto. Sólo si quieres-terminó al darse cuenta de lo que estaba diciendo.


-Pues si no tienes problemas con eso vamos, ya te había dicho que con estar a tu lado me basta-fue su respuesta y sin decir más se dirigieron a esperar el transporte.


Tras casi una hora de camino llegaron por fin a casa del más alto y entraron tranquilamente. Lanzó sus cosas junto a la puerta y le indicó a su pareja que podía dejar sus cosas también ahí mientras él miraba hacia todas direcciones sorprendido de que la casa estuviera completamente vacía.


-¿Qué haces?-le preguntó al verlo detenido junto a la puerta-Vamos a mi cuarto, me estresa quedarme en la sala…-se acercó al verlo tan distraído-¿O pretendes quedarte aquí?


-No pensé que en verdad no hubiera nadie-le respondió al darse cuenta de que estarían los dos solos en la habitación de su pareja y sin nadie más cerca-Ya sé que lo dijiste antes de que viniéramos pero pensé que exagerabas…


-¿Te preocupa que estemos solos en mi casa?-le preguntó divertido al darse cuenta de lo que pasaba-No pretendo hacer nada más que estar juntos a menos que así lo quieras-continuó sólo para molestarlo.


-No pensaba en eso… No te burles, camina y yo te sigo…


Apenas entraron Gabriel se arrojó sobre la cama mirando al techo. El otro chico observó rápidamente lo que había a su alrededor y encontró un librero lleno y otros tres montones en el suelo.


 


Divertido tomó asiento frente al escritorio que estaba a un lado de la cama y en él pudo ver sobre todo lo demás el libro que al iniciar clases le había prestado. Lo tomó y lo miró durante unos segundos.


 


-Es de tus favoritos ¿Verdad? Todos los tienes guardados y este aquí.


 


-Sí, bueno… Es un libro que me gusta mucho así que desde hace tiempo lo dejo ahí-dijo sin darle mucha importancia ocultando que la razón porque lo tenía en ese lugar era que después de que su relación comenzara recordó que fue el primer libro que le prestó, con lo que había adquirido un significado especial.


 


Estuvieron conversando un par de horas hasta que David se quedó callado sin apartar la vista de su pareja durante algunos minutos. No podía evitarlo pues por primera vez lo vio dormir, o al menos eso pensaba, y verlo así de tranquilo lo mantenía concentrado.


 


-No estoy durmiendo si es lo que piensas-dijo de pronto sorprendiéndolo-No necesitas verme con tanta insistencia-abrió los ojos y lo miró, ocultaba su expresión y no decía nada-Ven aquí-le dijo haciéndole un espacio en la cama. El chico no dijo nada y se sentó a su lado dándole la espalda-Te dije que vinieras, no que te quedaras ahí sentado-lo atrajo hacia sí quedando de frente sobre la cama.


 


-Era divertido creer que dormías…-susurró aún sin mirarlo-Te veías tan tierno y adorable-rio ligeramente y lo encaró.


 


-¿Tierno y adorable?-le preguntó intentando intimidarlo-¿Eso crees que soy?


 


-Sí, aunque lo niegues eres increíblemente tierno y adorable-rodeó su cuello y le dio un suave beso.


 


-Creo que te estás confundiendo de persona-lo tomó de la cintura y acortó la distancia entre ellos-Ninguna de esas palabras va conmigo-no quiso quedarse atrás y lo besó también pero de manera más demandante.


 


Así comenzaron una lucha que ninguno estaba dispuesto a perder y no por demostrar quién de los dos tenía razón sino simplemente porque ese contacto y las sensaciones que experimentaban no les permitían hacerlo de otra manera.


 


De pronto David se separó rápidamente al sentir que algo, además de sus cinco sentidos, había despertado y supo, por la forma en que su pareja lo miraba, que él también lo había notado.

Notas finales:

Chan, chan... ¡¡CHAAAAN!! Como quiero ver arder el mundo omitiré detalles de lo que pasará después, dejaré todo a su imaginación mientras esperan el siguiente *desaparece entre as sombras*

Nos leemos pronto si no es que muero en el intento...


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).