- Kurogane-sensei. -dijo el gemelo mientras le servia una taza de té al moreno.
- Hace mucho que no venía a tomar algo aqui... -miró el lugar. - desde que ese idiota dejó de hacerme bromas.
- Nii-san es así... como le ves. - Se sirvió algo de chocolate y se sentó a hablar. - El no siempre fue como lo conociste -Bebió un sorbo. -Creo que puedo hablar de ello contigo.
El moreno arqueó una ceja como si se fuera a enterar de algo raro y extraño.
- Yuui era como yo... osea nos parecíamos mucho más que ahora... pero Yuui era mas valiente que yo la mayoria de las veces. - suspiró. - Yo en cambio era tímido, llorón y algo debil... Nuestra madre había conocido a un músico, se enamoraron y nuestro abuelo se opuso a la relación. Poco tiempo después ella descubrió que estaba embarazada y murió al dar a luz.
Kurogane escuchaba todo, le habia sido demasiado facil que el maestro de cocina le contara todo, por eso no predería la oportunidad de averiguar lo que necesitaba saber.
- Nuestro abuelo nos culpaba constantemente de su muerte, nos golpeaba, la mayoria de las veces, para evitar que me lastimara a mi; Yuui lo enfrentaba recibiendo el los maltratos. Hasta que un dia en un arrebato nuestro abuelo estaba ebrio y mientras Yuui le enfrentaba sufrió un ataque al corazón y falleció. Después fuimos a dar a un orfanato.
- ¿Su abuelo era Ashura?
- No, eso viene a continuación... por favor, no le digas a nii-san lo que te contaré, sino se molestaría mucho... pero solo así podrás entenderlo mejor... aunque solo sé parte de la historia.
Miró a todos lados para evitar ser oido por alguien mas, y comenzó a contar. - Abuelo no nos reconoció nunca, por ello no teniamos apellidos, nuestros nombres los encontramos junto al diario de nuestra madre y ahí nos enteramos de su historia. Al poco tiempo no costó que nos adoptaran. Hubo un hombre que nos adoptó y nos dió un apellido aquel que hasta el dia de hoy usamos.
- D Fluorite.
- Así es. - miró hacia la ventana. - Aunque ambos eramos identicos, yo era muy enfermiso y al poco tiempo me tuvieron que hospitalizar. Yuui venía seguido a verme, muchas veces con nuestro padre adoptivo; pero empecé a notar que cada vez que venía Yuui llegaba distinto. - miró sus manos. - Sus manos temblaban y aunque yo le preguntara si estaba bien, el decía que no era nada, que me preocupara solo de mejorarme.
- Ese sujeto si era Ashura.
- Si. - Sirvió mas té al moreno. - Al tiempo volvi a casa mucho mejor y Yuui no se apartaba de mi, poco a poco todo iba mejorando en él y temblaba menos. Pero al tiempo volví a enfremar y estuve nuevamente hospitalizado. Todo había vuelto a como estaba antes... Cada vez caía mas seguido en el hospital y pronto comencé a ver cosas, como que Yuui empezaba a tenr cortes en las piernas, heridas en las manos y un extraño rechazo a la demás gente. Pero el me decía que lo había echo el mismo, que era un niño malo y que debia castigarse. Ashura me dijo que mi hermano estaba enloquesiendo debido a los traumas de nuestra infancia. Yo le creí. Un dia mi hermano dejó de venir, noté que la gente del hospital actuaba raro, pronto llegaron detectives a mi cuarto y me dijeron que había sido envenenado. Mi padre Ashura, estaba dandome veneno en dosis bajas para que yo cayera enfermo y finalmente muriera.
Los ojos de Kurogane estaban asombrados, estaba hablando de intento de homicidio. - ¿Qué pasó después?
- Les conté a los detectives todo lo ocurrido con mi hermano y al tiempo cuando me dieron el alta fui a dar a un hogar, sin mi hermano. A las semanas llegaba Yuui... mi hermano no era él, me lo habían cambiado... Después no supe mucho mas que lo que deduje de sus pesadillas y de sus ataques. Hasta que unos meses después, fuimos nuevamente adoptados por una mujer; ella era joven para adoptar dos muchachos que ya pronto cumplirian edad para marcharse y cuyas vidas habían sido marcadas con un horrible pasado y es más ella quería que la trataramos no como una madre, sino como una hermana, dada su edad y la nuestra; ya que solo eran pocos años de diferencia. Ella sabía todo el historial de mi hermano, incluso aquel que la policia guardaba. Así supe otro resto de lo ocurrido cuando ella quizo que hablaramos del tema. Mi hermano rompió en llanto admitiendo cada cosa que ella decía. Para que Ashura pagara mis gastos medicos y no me matara. Yuui debia ser su juguete, ¿sabes a que me refiero?
- ¿Juguete? No me digas que...
- Así es... mi hermano fue violado,maltratado y humillado de innumerables formas.
- ... - la rabía lo consumia, se sentía horrible al oir tal cosa y ver como aquella persona había pasado por tanto.
- Nuestra hermana, era maestra en un colegio, aunque para solo ser una maestra poseia muchas influencias. Ella pagó nuestros estudios y nos envió al extranjero a perfeccionarnos. Mi hermano, aun temeroso de salir al exterior era el que más se oponia.
- Por miedo a encontrarse con aquel sujeto.
- Si... aunque aquel hombre estaba en las rejas, el miedo de que escapara o quedara libre no se iba; fue así que antes de separarnos cambiamos nuestros nombres; si el era capaz de hacerse pasar por mi para que nuestro abuelo no me golpeara, yo me haría pasar por Yuui para que el no tuviera miedo de encontrarse con Ashura; pero el se opuso a la idea y al cabo de un rato terminó cediendo. Finalmente, nuestra hermana se fue con él y yo a Francia para perfeccionarme en la cocina. El resto es como lo ve ahora.
Aquella conversación le dejaba en claro muchas cosas y otras no tanto; pero pronto las olvidó al toparse con la directora quien junto a las mokonas miraba la clase del maestro de ciencias. Su rostro parecia dolido y preocupado; miraba a Fay con preocupación. Pero de pronto salió el maestro de ciencias quien le sonrió de manera dolorosa, pero aun así sincera; Kurogane entendía que a él jamás le sonreiría de esa forma.
Ambos notaron la presencia del maestro de deporte y estupidamente le sonrieron para luego comentarle sobre las actividades del festival.
- Kurogane supongo que Fay y tu ya organizaron el evento de cierre.
- ¿Nani?
- Es que Kurogane-sensei ha estado ocupado y no hemos podido coordinar Yuuko-sensei. -dijo el rubio.
- Que mal... Si siguen así no terminaremos este festival como corresponde. - Dijo mirando a las mokonas.
- Demo... -dijo Soel, la mokona blanca. - Kurotan-sensei podría esperara a que Fay-sensei termine las clases y ponerse de acuerdo.
- ¡Anda Kurorin-sensei! - dijo Larg, la mokona negra. - Fay ¿verdad que pueden reunirse después de clases?
- ¡hai! demo... tengo un par de pruebas que correjir, no sé si Kurogane-sen--
- Te espero. -dijo el moreno ante el asombro del rubio. - Es más, si me das las respuestas podría ayudarte a corregirlas.
- ¡Así me gusta! - aplaudió la pelinegra. - Listo, entonces Fay sensei debería ir a revisar las pruebas al dormitorio de Kurogane-sensei o en su oficina en el gimnacio.
- Si... - No estaba muy convencido, pero sonrió tontamente y luego volvió a su salón. Las mokonas lo siguieron y se fueron cantando una canción.
- No seas duro con él. -dijo la directora. - Solo sigue siendo su amigo.
- ¿Nani? - El moreno no entendia mucho.
- Fay-sensei habla con muchas personas, rie con ellas; pero solo tiene un amigo, ese eres tu Kurogane.
Esperaba que pronto las clases terminaran sin dejar de pensar en los acontecimientos del dia, eran muchos y todos muy importantes. Aun recordaba lo ultimo que hablaron con el maestro de cocina ya que le había preocupado.
------------flash back--------------------------
- ¿Qué ocurrió con su hermana? ¿y Cómo fue que aprendió a sacar esa estupida sonrisa?
- Creo que eso deberías preguntarselo a él algun dia. Pues ni yo mismo lo sé. Pero cada cierto tiempo, mi hermano tiene estas crisis extrañas; desde que saliera una noticia muy extraña.
- ¿Noticia?
- Ashura esta libre.
-----------Fin del flash back------------------------