Cap.10 explícame ¿por qué?
- ¿Tienes un gato? – Pregunto extrañado no lo había visto la primera vez que vine
- Si… me lo regalaron hace casi una semana – Respondió – me gustan mucho los animales en especial los gatos
- Ya veo… hola pequeñín – Digo abrazando al gatito
- El chico que me lo regalo es raro – Empieza a contarme – Ayer en la noche me lo volví a encontrar
- ¿En verdad?
- Sí, aunque no fue exactamente la mejor manera de encontrarlo, iba camino a un compromiso con un amigo y lo encontré en medio del camino, estaba llorando, me ofrecí llevarlo – “Por qué demonios te ofreciste” - Le pregunte el por qué la razón de su llanto y me conto que su amado se comprometió con su hermano
- Ah… si – Eso no me da buena espina
- si, dijo que él no sabía nada y que en verdad le dolió mucho, ya que es su propio hermano, sé que hay gente mala pero que tu propio hermano haga eso es imperdonable
- Y como… se llamaba el chico – Temo a lo que escuchare
- Onodera… Ritsu
Me quedo helado ante l que escucho, eso significa que Masamune y Ritsu ya se conocen o mejor dicho se conocían, el miedo me invade aunque intento no demostrarlo, ¿Qué pasaría si Masamune se entera de que yo soy esa persona? ¿Ritsu le habrá dicho el nombre?
- Misaki… Misaki
- ¿Eh? Que… que decías – Intento parecer normal
- ¿Qué te sucede? – Pregunta acercándose a mí – Te pusiste muy pálido de repente
- Y… ¿Yo?
- Si
- Debe de ser tu imaginación – Digo – Y cuéntame ese chico te… dijo el nombre de su hermano
- No – Responde y suspiro de alivio esperando que no me escuchase – estoy seguro que no le era muy agradable recordar el nombre
- Si… tal vez tengas razón
- Dime Masamune tu perdonarías una mentira de ese tipo
- No lo sé… jamás eh estado en una situación así
- Supongamos que lo estuvieras perdonarías a tu hermano – “Por favor di que sí”
- No – Responde fríamente – Jamás perdonaría algo así – Siento un fuerte latido de dolor, el pensar que Masamune se entere y no me perdone me aterra, no puedo hacer otra cosa más que abrazarlo, Masamune hace lo mismo aunque después alza mi rostro y me besa, nuevamente me dejo llevar ante él.
Prov. Ritsu
Ya ha pasado una semana desde lo ocurrido en la cena donde según se iba anunciar “mi” compromiso, pero resulto ser todo lo contrario, Akihiko-san le propuso matrimonio a mi hermano, aun me sigo sintiendo fatal, no eh querido comer ni siquiera levantarme, estos días me la eh pasado acostado durmiendo, tal vez siento que me estoy comportando como una adolecente de preparatoria pero no me importa, me han roto el corazón y no es nada fácil de superar.
Hace unos días mi madre vino a visitarme me pidió disculpas por lo ocurrido y se echa la culpa de lo ocurrido, le dije que ella no tuvo la culpa, no quería que se sintiera peor de lo que ya se siente, hoy eh decidido regresar a casa, no puedo abusar de la hospitalidad de Kisa además Yukina y él no puede… prefiero ni pensarlo, guardo en los cajones la poca ropa que tengo aquí con Kisa eso es lo bueno de venir de visita de vez en cuando, bajo las escaleras, le dejo una nota en la mesa y tomo el sobre amarillo que se encuentra encima de esta, salgo de la casa y me dirijo a la mía.
El trayecto dura alrededor de 45 minutos, salgo de la estación del metro y camino las cuadras de antes hacia la casa, paso justamente en donde me encontré al gatito y recuerdo aquel hombre, sigo sin recordar cómo se llama, lo único que recuerda es que él conoce a Akihiko-san, nuevamente duele mi corazón al recordar ese nombre, me gustaría saber por qué tomo esa decisión.
Al llegar a casa, saco mis llaves y entro, noto que está vacía, entro a la cocina y veo la pizarra que está colgada en la pared, miro el recordatorio es verdad hoy es la primera terapia de mi madre, salgo de aquel cuarto y subo con pocas ganas las escaleras, entro a mi cuarto me tiro sobre mi cama dejando caer al suelo el sobre amarillo que tenía en mis manos, sin muchas ganas lo levanto y saco su contenido
“Solicitud de ingreso Universidad Zhejiang - ZJU pasante”
Eh decidido irme como pasante a la universidad de China gracias a los padre de Kisa puedo ingresar junto con él, afortunadamente la carrera que llevo es más especializada en esa universidad por eso es muy difícil entrar, me siento en la silla de mi escritorio y empiezo a llenar la solicitud, trato de no pensar en nada ni en nadie para poder lograrlo, aunque me tardo más de lo normal.
Después de un rato escucho la puerta abrirse, debió haber llegado mi madre, salgo de mi habitación para verla, bajo las escaleras y entro a la sala, no esperaba con lo que me encontraría.
- Buenas tardes – Al verlo me quedo paralizado, escucho algo romperse al instante que escucho su voz, mis lágrimas amenazan con salir
- Por fin regresaste Ritsu – Me dice Misaki, no digo nada – No piensas saludar
- Buenas tardes – Respondo en un hilo de voz apenas audible, me entra la necesidad de salir de ese cuarto que cada vez se hace más pequeño, pero hacerlo mostraría lo mucho que me duele verlo, junto mis pocas fuerzas que tengo y me siento en uno de los sillones, siento la mirada de ambos seguirme pero no les tomo importancia, estoy sentado frente a ellos pero no los miro, un silencio se hace presente, ninguno de los tres hablamos, hasta que Akihiko-san lo hace
- ¿Cómo has estado Ritsu? – Me pregunta con mucha calma, tal parece que él no se enteró que no estuve aquí por una semana
- Bien…
- Me alegro – Alzo la vista un poco y él me sonríe, la desvío antes de que se dé cuenta de que lo estoy viendo y miro a Misaki, él está tranquilo aunque tiene una mirada de molestia, estoy a punto de decir algo pero mi madre entra a la sala
- Ritsu… hijo te extrañe tanto – Dice mi madre abrazándome
- Yo también mamá
- Mamá no seas exagerada hace unos días lo viste – Reprocha Misaki
- Eso no importa
- Misaki no pelees con tu madre – Akihiko-san toma la mano de Misaki y le da un beso, bajo la mirada, procurando que no vea la lagrima que cae por mi mejilla
Se inicia un platica algo corta, mi madre se sentía agotada por la terapia que tuvo, Misaki se ofrece a llevarla a su habitación, yo me quedo a solas con Akihio-san algo que hubiera deseado que no pasara. Los minutos pasan y Misaki no baja, mi corazón y mi mente se debaten, mi mente me dice “Pregúntale tienes que saber por qué hizo eso” y mi corazón “No lo hagas. No te lastime más” no sé a quién hacerle caso pero… mi mente gano
- Explícame – Digo en un Hilo de voz
- ¿Eh? Que sucede Ritsu
- Explícame ¿Por qué? – Vuelvo a decir
- No entiendo – Alzo la mirada con lágrimas cayendo, Akihiko-san se sorprende pero no dice nada
- Explícame ¡¿por qué?! – nuevamente digo llorando tratando de no levantar demasiado la voz – ¿Por qué me hiciste esto?
- Ritsu…
- ¿Por qué? Akihiko-san
- Por favor…
- ¿Por qué Misaki? – No dejo de hablar – ¿Por qué mi hermano?
- Ritsu no fue algo que yo…
- ¿Por qué fueron tan crueles conmigo?
- No es algo que…
- ¿Por qué? si yo… te amo
- Lo siento Ritsu, discúlpame si te lastime, jamás pensé que tú en verdad tomaste el compromiso enserio
- Fueron quince años – Digo – Quince años que viví engañado, esperando un amor que jamás existió, ¿Por qué?… ¿Por qué? no me dijiste que ya concias a Misaki
- Cuando conocí a Misaki no sabía que era tu hermano – Se excusa – Cuando lo volví a ver aquí en tu casa me sorprendí tanto como él, no pensé que no era buena idea decirte que ya nos conocíamos, en verdad lo siento
- Y te pareció buena idea no decirme nada de lo que tenías planeado hacer – Digo con sarcasmo
- Lo siento, sé que no arreglo nada con esta simple palabra pero te aseguro que yo no era el indicado
- Eso me hubiera gustado saberlo por mis mismo
- En verdad discúlpame – Se levanta del sofá y camina asía la salida – Despídeme de tu madre y de Misaki, discúlpame con ellos por favor
Solo escucho la puerta serrarse y me siento aun peor aunque tal vez esto sirva para que ya no sufra por él. Después de unos minutos me levanto y subo a mi cuarto, la puerta está abierta al entrar veo a Misaki leyendo la solicitud que hacía unos cuantos momentos había terminado de llenar.
- ¿Qué haces en mi habitación? – Pregunto molesto
- Que significa esta solicitud
- Eso es algo que a ti no te importa, además es de mala educación leer los documentos de las demás personas aunque sean tu familia – me acerco a él y le arrebato la hoja
- Es de mi incumbencia, como que te iras de pasante a China
- Es una decisión que ya tome
- Y cuando tenías pensado decirnos
- ¿Decirles? - Pregunto con un notorio sarcasmo – En verdad me estás diciendo eso, si ustedes son lo que no me dijeron nada
- Ritsu cálmate
- ¿Qué me calme? Como quieres que me calme cuando gracias a ti todas mis ilusiones se fueron a la basura
- Eso es muy diferente – Dice – Lo ocurrido con Usagi-san fue distinto
- ¿Usagi-san? Ah… ya veo – Por alguna extraña razón siento la necesidad de reírme y lo termino haciendo
- ¿Qué te sucede Ritsu? Por qué te ríes
- Me rio de la hipócrita que eres – Contesto – Me sorprende la confianza que se tiene en tan poco tiempo o perdón lo olvide no creo que haiga sido en tan poco tiempo por qué ya se conocían – Lo miro de manera fría me acerco a él y lo tomo de los brazos – No puedo creer que mi propio hermano me haiga hecho esto.
- Suéltame que me lastimas
- Te lastimo… y cómo crees que me lastimaste TÚ mi propio hermano, la persona que sabía bien que yo lo amo con todo mi corazón
- Deberías de estar feliz por qué se casara con la persona que ama
- Si tienes razón debo de estar feliz, pero no sé si la persona con la que se casara en verdad lo sepa hacer feliz – Al terminar de decirle lo suelto – Si no te importa necesito hacer unas cosas así que vete de mi habitación
- Aún no hemos terminado de hablar
- Yo ya termine, no tengo nada más que hablar contigo vete y no olvides cerrar la puerta
Misaki se quedó callado y termino saliendo de mi cuarto, al cerrarse la puerta me dejo caer de rodillas, todas mis fuerzas se había ido, la noche comienza a llegar me recuesto en mi cama y dejo que el sueño me lleve consigo, al día siguiente tenía que levantarme temprano para mandar mi solicitud por correo.
Prov. Takano
Estoy recostado en el sofá tratando de recobrar mi aliento, siento su cuerpo sobre el mío también intentando regularizar su respiración
- Me encantaría estar así siempre – Digo dándole un beso en la frente
- Yo también
- Anda toma un baño – Le digo – No te puedes quedar todo lleno de sudor te puedes enfermar
- No quieres que nos bañemos juntos – Me da un beso rápido en la boca – Quiero que me ayudes…
- Oh en verdad…
- Si
Vuelvo a tomarlo de la cintura, el enreda su piernas en mi cadera, lo subió hasta el cuarto del baño, abro la llave de la regadera, cuando estoy por entrar suena el timbre de mi casa
- No abras – Dice Misaki – Deja que se vayan
- Pero si es algo importante
- Que vengan otro día
- Me gusta como piensas – Vuelvo a besarlo y mis manos otra vez ya están jugando con su miembro, sus gemidos se ahogan en mi boca, pero él tampoco se queda quieto hace lo mismo con el mío
En timbre sigue sonando insistente, algo que me comienza a molestar, termino por hartarme del sonido al igual que Misaki, decido dejarlo para que se bañe, yo salgo del baño y entro a mi habitación tomo lo primero que encuentro un pants y un playera, bajo abrir con intenciones de matar a la persona que interrumpió lo que estaba haciendo pero termino por arrepentirme al ver de quien se trataba.
- Hasta que abres – Dice Yokosawa molesto – Pensé que no estabas en casa
- Lo siento – Me disculpo – Estaba un poco ocupado
- Ah ya entendí - Dice sonriéndome - Bueno si quieres regreso después
- No, no te preocupes ya estás aquí pasa – Me hago a un lado y Yokosawa entra, caminamos hasta la sala, no dice nada aunque ve varias prendar tiradas, me apresuro a levantarlas, después de unos minutos nos sentamos frente a frente - Y bien que te trajo por aquí
- Además de querer ver a mi amigo, también te traje los documentos que me diste para revisar
- O que bien y que paso
- Todo está en orden, no hay ningún problema para exportación que piensas hacer
- Eso me parece perfecto – Tomo los documentos en mi manos y sonrío - Me alegro
- Eso me parece bien y dime tu visita no se enojara de que estas aquí conmigo
- En lo absoluto – Respondo – Es más quisiera que le conocieras
- Claro que sabiendo tus gustos estoy seguro de que será la típica muchachita
- No de hecho es todo lo contrario
- Eso me gustaría verlo - Dice burlón, ladea la cabeza dejando ver su cuello, noto una marca que estoy seguro sé de qué es
- Y como esta Kirishima – Yokosawa reacciona y se pone nervioso – Tal parece que anoche estuvo bastante demandante
- N… no se dé… que hablas, además anoche me… dormí temprano
- Estas seguro, por qué la marca que está en tu cuello dice todo lo contrario – En un movimiento veloz Yokosawa tapa aquella marca, yo solo rió ante su reacción la cual en verdad es graciosa
- Deja de molestar
- Está bien, está bien, como está la pequeña Hiyo
- Muy bien es el orgullo de Kirishima
- Me lo imagino, yo desearía tener un hijo
- Tal vez lo tengas más adelante, pero para eso te tienes que casar con una mujer y espero que sea hermosa
- Entonces será mejor olvidarlo, sabes que no soy mucho de tener una relación con una mujer
- Si es verdad, pero si quieres un hijo solo con una mujer se puede – Comenzamos a reírnos ante el comentario de él, el ruido de unos pasos hizo que nos calláramos
- Masamune – Entra Misaki a la sala está completamente vestido aunque tiene el cabello mojado, se sienta en mi regazo y me besa, Yokosawa carraspea su garganta y nos separamos
- Lo siento Yokosawa – Vuelvo a disculparme – Deja te presento el Misaki
- Es un placer – Yokosawa se levanta del sofá y se acerca entendiendo su mano - Soy Yokosawa Takafumi
- El placer es mío soy Takahashi Misaki
- Vaya no pensé que fuera un chico
- Yo jamás dije que fuera una chica – Digo
- Bien tengo que irme pasare por Hiyo gimnasia y ya es tarde, fue un placer Takahashi
- Lo mismo digo
- Suerte padre responsable
- Deja de molestar
Yokosawa salió de mi casa y yo me quede con Misaki
- ¿Tienes que irte?
- Sí, no quiero dejara mi madre sola mucho tiempo
- Y es que no está tu hermano con ella
- Mmm… digamos que mi hermano no está de humor para quedarse con ella
- Que hermano tan malo tienes
- Eso mismo digo yo, es muy egoísta solo se preocupa por el mismo, desde que regrese todo me lo ha dejado a mí – Responde y después suspira – Quisiera tener más tiempo para estar contigo
- Misaki…
- ¿Qué sucede?
- Si yo te… pidiera que te casaras conmigo ¿Qué responderías? – Observo con detenimiento las expresión de Misaki, es de sorpresa y luego la transforma a felicidad, me da un beso rápido en la mejilla y después me abraza
- Aceptaría con mucho gusto – Susurra a mi oído
- Entonces eso es un si
- Por supuesto – La felicidad me inunda y le abrazo no queriéndolo dejar ir, Misaki hace lo mismo y permanecemos así unos instantes, terminamos deshaciendo el abrazo – Tengo que irme
- ¿Vendrás mañana?
- Por supuesto
- Te espero
Misaki toma su mochila, se coloca sus zapatos y sale dejándome completamente solo, vuelvo a subir al cuarto del baño otra vez abro la llave de la regadera me quito mi ropa y me meto bajo el agua, dejo que el agua aclare mis ideas aunque la felicidad que tengo no se me quita. Termino de ducharme vuelvo ya se ha hecho de noche entro a mi habitación y me visto con otro pants y otra playera para dormir cómodo, mi celular comienza a sonar y conteste.
- Hola Akihiko ¿Qué sucede? – Pregunto
- Nada en especial pero noto un tono de voz meloso ¿Qué te ocurrió?
- Supongo que estoy enamorado
- ¡Oohh! Por fin alguien logro atraparte – Dice burlándose al otro lado de la línea
- Deja de decir tonterías – Respondo
- Ya en verdad, por fin alguien logro cautivarte
- Si y digamos que acabo de proponerle matrimonio
- Tan enserio va
- Si
- Eso merece ser celebrado – Dice con felicidad notoria
- Por lo visto tienes demasiado tiempo libre
- De hecho no tanto en estos momentos estoy por llegar a la casa de mi prometido
- Hablando de prometido ya tienes fecha
- No pero justamente hoy vamos hablar de eso, pero que te parece si saliendo de aquí nos vemos bar del hotel Teito
- Me parece bien
- De acuerdo entonces nos vemos en tres horas allá
- Trata de no tardarte
- Lo intentare
Termino llamada nos veremos entre horas no tengo por qué apresurarme, todavía tengo bastante tiempo.
Prov. Usami
Voy llegando a la casa de Misaki, justamente hoy pondremos la fecha de la boda, estaciono mi coche frente a la puerta, bajo y entro a tocar el timbre, solo espero unos minutos y es Ritsu quien abre, al verlo me siento mal por lo ocurrido pero no puedo sentirme así por siempre
- Buenas noches Ritsu
- Buenas noches Akihiko-san
- Esta Misaki
- No, salió en la tarde y no ha llegado pero supongo que no tarda en llegar
- Mmm ya veo te molesta si me quedo a esperarlo
- En lo absoluto pasa – Ritsu se hace a un lado y me deja pasar, entro y paso directamente a la sala ahí se encuentra su madre se ve cansada
- Buenas noches Manami-san
- Oh Akihiko-kun como has estado – Dice dándome un beso en la mejilla
- Muy bien y usted
- Un poco cansada pero me encuentro bien y dime a que se debe tu visita
- Vengo a decirle la fecha de la boda – Veo el brillo en su mirada está feliz
- Me alegro mucho que ya tengas la fecha – Al decir eso se cierra la puerta y entra Misaki – Hijo que bueno que haigas llegado Akihiko-kun nos vino a dar una buena noticia
- Ah que alegría madre y ¿Cuál es la noticia?
- Ya fecha de la boda
- ¿Eh? La… fecha de la boda
- Si Misaki – M e acerco a él y lo tomo de las manos, le doy un beso en ambas manos – Quiero que nos casemos en dos meses
Continuara……..