Broken Lives
Por: Rochelle Smidi & Mario Conivic
Tears
Tear 2: “I need the answers”
Es extraño… he estado muchas veces al borde de la muerte, pero de cierta forma ahora es diferente. Ahora siento como si estuviera en una hamaca meciéndome mientras mamá canta y… ¿Eh? ¿Por qué siento algo cálido? Algo tierno pero desesperado. A pesar de todo… es un sentimiento… tan… ¿Por qué ahora me duele el rostro? ¿Pero qué diablos?
─ ¡Cabeza de flama! ¡Despierta!
─ ¿¡Ah!?
Creo que el golpe me dejo medio mula pero… ¿Por qué está ese tipo con ojos caídos en mi habitación? ¿Habitación? Ahora que lo pienso… ¡¡Esto no es mi habitación!!
─Oye, oye, ¿Qué te pasó? ─me pregunta con un semblante preocupado ─. ¿Por qué me miras así?
─ ¿Q-q-q-quién eres? ─Le cuestionó con un tartamudeo… ¿Por qué mierda no puedo hablar normal?
─ ¿Cómo que “quien” soy? ¡Soy Gray Fullbester! Tú protector ¿Recuesdas?
─ ¿Protector? ¿Desde cuándo? ¿Además dónde estoy?
─ ¿Cómo que desde cuándo? ¡Además estas en el hospital!
Ahora que lo pienso… es cierto… esos tipos de Twilight Ogre me dieron una paliza, pero… ¡¿Dónde está aquel tipo que se parece a mí?! ¡¿Acaso se escapó con mis cosas!? ¿O solamente habrá sido un… sueño? ¿Por qué me duele la cabeza?
─ No me interesa en lo que sea que estás pensando, pero nos tenemos que ir.
¡Encima de que este desconocido me pega ahora me carga! ¿Qué acaso está loco? ¡Además no soy uke para que me cargue de esta manera!
─ ¡Oye déjame ir! ─Intento zafarme del agarre de este tipo.
─ ¡Pues lo siento pero tenemos que irnos! ¡Además tenemos de mucho de qué hablar!
¿Cómo que de qué hablar? ¡Yo no lo conozco! Esperen… ¿¡No piensa sacarme con una bata de hospital!? ¿O sí?
─ O-oye… tengo que cambiarme…
─ ¿Por qué…? ─Vaya que despistado ─. ¡Es cierto!
Por lo menos me dejo vestirme, además de que ya no me siguió cargando… hubiera sido vergonzoso… ¡Demasiado!
─ Bueno… ¿Entonces? ¿Cuándo me pagarás el venirte a recoger?
¿Pagar? No puede ser que sea igual a él… aquel que siempre que me “rescata” quiere que le “pague” el “favor” que me está haciendo… pero… ¿Por qué siento que en él si puedo confiar? ¡¿Por qué me estoy imaginando así con él!?
─ Yo diría que dejaras de temblar como una gelatina y entrarás al auto.
¿Auto? ¿Cuándo llegamos al estacionamiento? Además… este tipo con cabellos negro azulados, ojos del mismo color, cuerpo bien formado… Espera, ¿Me parece atractivo? Y encima ¿Por qué me dice que entre a un auto que no me llevará a mi casa? ¿Acaso me va a secuestrar y pedir una recompensa…?
─ Y al final termine subiendo…
Sí, tristemente no me quedo de otra que subir a este auto… aunque parece que me conoce…
─ Bueno Natsu… ahora me dirás ¿Cómo te hiciste esas heridas? ─ ¿Cómo sabe mi nombre? Yo nunca lo había visto ─. ¿Natsu?
─ ¿Cómo sabes mi nombre? ─Mirada extrañada de su parte
─ Mira cabeza de flama, a mí no me vengas con tus bromitas… si no ya sabes cómo te castigaré
No me gusta cómo sonó su tono de voz… además… ¿Castigarme? ¿Por qué? ¿Acaso abusará de mí como lo hacen todos los días Jet y Droy? ¿Eh? ¿Música clásica? Conozco a esta canción… claro es la Sonata n. º 5 para piano y violín en fa mayor… si me sé el nombre… porque es la que he querido tocar para el siguiente cumpleaños de mi mamá… la he estado practicando últimamente… además de que tocar el violín es mi manera de escapar del mundo, de mis problemas…
─ Qué milagro que no te estés quejando.
─ ¿Por qué?
─ ¿Cómo que “por qué”? ¡Tú solo escuchas hard rock! ¡Detestas este tipo de música!
¿H-hard rock? ¡Yo no escucho ese tipo de música! Ese tipo… no fue una ilusión… tendré que averiguar ciertas cosas… voy a sacar a flote las clases de teatro que me dio lucy.
─ Perdona… no recuerdo ciertas cosas, el golpe que me di en la cabeza debió haberme hecho olvidarlas… ¿Por qué tengo un protector?
─ No solo yo… Jellal también es tu protector, y te protegemos de aquellos que te persiguen por querer descubrir donde se encuentra tu padre…
¿Padre? Así que… sigue con vida, pero estoy seguro que esta tan podrido como lo ha estado todo este tiempo… Por su culpa… por su culpa… mamá casi muere ese día… por su culpa no puedo defenderme… por su estúpida culpa… pero… ahora tengo un problema mayor… ¿Cómo regresaré a mi casa? ¡Esto es una locura! ¡No sé ni porque le hice caso a este loco!
─ Bueno… llegamos ─no me gusta para nada esto…
─ E-está bien… ─tengo que pensar una manera rápida de salir de aquí.
─ ¡Vamos Natsu apresúrate!
─ ¡Y-ya voy!
La casa no se compara a la mía… pero parece acogedora. Ambos entramos, y en la cocina se encontraba un hombre con cabellos azules, pero estos eran más claros, además tenía un… o unos tatuajes arriba y debajo del ojo derecho, tal vez él es Jellal.
─ ¡Qué bueno que…! ¿¡Qué te paso!? ─Preguntó notoriamente sorprendido
─ Yo también se lo pregunte pero no me respondió ─ahora el tipo de ojos caídos recalca que quiere una respuesta ─. ¿Y bien? ¿Qué te sucedió?
─ Bueno… e… ─no sé qué decir… si no piensos bien mi respuesta ─. ¡Me tropecé de las escaleras en la escuela!
─ A mi no me engañas ─si no recuerdo mal… ese tipo llamado Gray me está hablando ahora ─. Jellal y yo somos maestros en la escuela donde estudias y nunca entraste a la misma.
Mierda… además de que mi mentira no funciona, ese idiota no entro a clases… ahora que digo… ¿¡Qué digo!?
─ ¡Era broma! ¡En realidad me caí en el parque y un carruaje me golpeo!
Es una lástima que no sirva para mentir, además de que mi rostro ha de demostrar mucha desconfianza ya que esos tipos me observan no muy convencidos.
─ Bueno, si eso paso, con razón tienes esas heridas ─dice el tipo que me tiro de la cama en el hospital.
─ ¿Gray? ─Dice el tal Jellal, es extraño, pero ese tipo me da más confianza que el tal Gray.
─ No te preocupes, has de estar cansado, descansa un poco antes de que este la cena.
Dice el tal Gray, asiento e intento retirarme pero… no sé cuál es la habitación de aquel tipo… además… tengo ciertas dudas sobre su vida…
─ Perdonen… ¿Dónde se encuentra mi habitación… y cuál es mi apellido? ─Pregunto y al parecer no les sorprende mucho.
─ Ya sabíamos que ibas a olvidarlo… más tu apellido, has cambiado tantas veces de apellido… ─dice Gray con un semblante serio ─. Y no sé te olvide, que tu eres Natsu Dragneel.
¿Dragneel? Así que ese es su nuevo apellido… después, gracias a sus indicaciones, logre llegar a la habitación, aunque estas heridas no me ayudaron mucho para subir las escaleras… de suerte la habitación está abierta, ya que mis llaves no me hubieran ayudado para abrirla…Después de abrirla entre y para mi horror… a diferencia de mi habitación este lugar es un desastre… ¡Esta habitación es un gran desorden! Si no fuera por mis heridas podría ordenar algo, solo medio arregle la cama para recostarme, iba a intentar escuchar música pero… para mi mala suerte… Gray tenía razón… este tipo solo escucha hard rock… ¡Necesito mi colección de música clásica! ¡Y si no pues mi violín!
─ ¡Oye Natsu! ¡La comida está lista! ─Una voz, al parecer de una niña, llama desde el otro lado de la puerta
─ Ya voy
Es lo único que respondo, me quedo recostado un poco más, no tengo ánimos de levantarme, solo porque mi estomago pedía comida baje las escaleras para poder comer algo… necesito fuerzas, siento que mis heridas se abrirán… pero… necesito ir a casa… tengo que descubrir ciertas cosas. Me senté y, para mi satisfacción, la cena fue placentera, más con la presencia de la pequeña niña con cabello azul, Wendy.
─ Gracias por la comida, me iré a dormir ─dije mientras comenzaba a subir las escaleras ─. Olvide dar las buenas noches ─no sé si aquel tipo lo hacía, pero no puedo ser maleducado así que regrese al comedor, pero la charla entre Gray y Jellal me llamo la atención.
─ ¿Aún la está buscando, Jellal? ─Dice el tal Gray.
─ Así es… Gray…
─ Pero él no sabe si aún está viva, es más, ¿No se suponía que Grandine estaba muerta?
¿Eh? Ese es el nombre de… mi mamá… ¿Por qué la busca? ¿Acaso quiere que ella vuelva a vivir ese momento trágico? ¿O quiere causarle un sufrimiento mayor?
─ Gray, él quiere encontrarla… a ella y a su otro hijo…
¿Otro? ¿Acaso… es verdad lo que pensé? ¡No…! ¡No puede ser así! ¡No puede ser que aquel tipo sea mi hermano! No pienso en nada, solo salgo corriendo de esa casa, no puede ser cierto… tiene que ser broma, es imposible que sea de esta manera, necesito respuestas. No me importo que gritaran mi nombre, no me importo nada, iba a detenerme cuando escuche la voz de la pequeña niña, pero no lo hice, seguí corriendo, pero mis heridas están mal… creo que alguna se ha abierto. ¿Eh? Llegue a un semáforo, no sé si sea el mismo en el que aquel tipo y yo nos encontramos, pero el destino tiene sus caprichos, ese tipo… está al otro lado… me observa al igual como yo lo hago con él.
─ Necesito repuestas…
Al parecer ese susurro me dio fuerzas, porque al cambiar el semáforo comencé a caminar, al igual que aquella persona que no solo compartía mi rostro, si no que mi nombre y mis padres… pero no dejaré que ese hombre, al que se supone debería llamar “papá”, se acerque nuevamente a mamá. Camino firmemente sin soltar la vista de aquel tipo, él también lo hace… ambos queremos respuestas… se nota en el ambiente, ninguno se hará para atrás y estamos dispuestos a lo que sea para obtenerlas…
CONTINUARA…