Unos golpes en la puerta hacen despertar a un niño pelinegro con pecas. Se pone de pie lentamente, lanza un gran bostezo mientras estira su cuerpo, al terminar, cierra los ojos nuevamente a punto de dejarse caer de nuevo sobre la cama, los golpes vuelven y lo hacen reaccionar bruscamente.
-ya voy- camina hacia la puerta para abrirla.
Era la hermana más joven del orfanato –Buenos días Ace- le sonríe amigablemente.
-Buenos días hermana- saluda el niño poniéndose firme, sabía que a las hermanas se les debe mucho respeto, incluso si es la más joven, igualmente debe ser respetada –a que se debe su visita son…- miró el reloj del pasillo –son las 7:00am, es muy temprano, además es sabado- dice lo último bostezando.
A la hermana le causa gracia el estado somnoliento del niño, tenía el cabello desordenado y los ojos semicerrados –jajaja solo vine decirte que Sabo está en la sala de abajo esperándolos a ti y a Luffy.
Ace se pone lucido al oír el nombre de Sabo y corre dentro de su habitación para cambiarse –en seguida bajo hermana- dice quitándose la pijama.
-iré a despertar a Luffy- exclamó dirigiéndose a las escaleras para bajar al piso donde estaba el pelinegro menor.
HACE DOS AÑOS
Sabo era un niño rubio de buen nivel económico, había perdido a sus padres y vivía con su abuelo Garp, un hombre imponente jefe del comando de policías.
Sabo al estar solo, le pidió a su abuelo un hermano, tanto fue su ruego que el viejo aceptó llevándolo una mañana al orfanato “Going Merry”, lo dejó ahí diciéndole que lo recogería al anochecer, y que intente elegir a un buen hermano.
Sabo aceptó feliz, ahí fue cuando conoció a Luffy y por ende también a Ace, dos hermanos que habían sido dejados por sus padres, nunca supieron el porqué de su abandono, se la pasaban en la calle sobreviviendo como podían, hasta que un día una señora de una carnicería que a veces les daba de comer se compadeció de ellos y los llevó al orfanato.
Luffy al ver a un niño nuevo no dudó en acercársele, también le presentó a sus demás amigos y a Ace, jugaron todo el día hasta que anocheció. Garp ya esperaba a Sabo en la sala de visitas, el niño llegó con dos pelinegros, el mayor de ellos intentó ser lo más educado posible a diferencia del pequeño que se divertía haciendo bromas divirtiendo a Sabo e irritando a Garp.
Esa noche al llegar a su hogar, Garp y Sabo tuvieron una charla con la cual llegaron a un acuerdo: si Sabo sacaba buenas calificaciones ese año, Garp adoptaría a los niños. Desde ese dia, el rubio iba los sábados cada dos semanas a visitarlos.
ACTUALIDAD
Ya habían pasado dos años, la burocracia para adoptar a dos niños siendo un hombre solo y de edad, fue demasiado larga, pero por fin terminó y ya podía llevarse a los niños esa tarde. Su nieto no esperó para darles la noticia y decidió ir esa mañana temprano, el ya tenía 8 años, y fue el condecorado de su colegio dos años, se merecía ese premio, además que lo hizo esperar un año más que lo acordado por culpa del maldito papeleo, pero al fin terminó.
Los dos hermanos aparecieron en la puerta de la sala con una sonrisa siendo recibidos con un abrazo de Sabo.
-Hola chicos, debo decirles una muy buena noticia- dijo tomando asiento en uno de los sofás al igual que los dos pelinegros.
-mmm adivinaré- dice el menor de ellos –me regalarás carne
-NOO!!- exclama el rubio
-mmm la escuela se incendió- dice el mayor sonriendo
-tampoco!!- Sabo empieza a perder la paciencia
-entonces?- dicen los hermanos al unísono
-de hoy en adelante son mis hermanos- dice el rubio alegre.
-…- los dos quedan atónitos ante lo dicho, ¿oyeron bien?, dijo hermanos?, habían sido adoptados? Luego de dos años y medio? Por el abuelo de Sabo? Se preguntaban mentalmente asimilando lo oído.
Ace fue el primero en hablar –n-nos ad-adoptaron?
-así es- dijo Garp –se irán de aquí esta tarde, alisten sus cosas, vendré por ustedes a las 5:00pm- dice mirando su reloj.
Luffy no dijo nada, solo se puso de pie y abrazó muy fuerte a su ahora hermano rubio –m-muchas gracias- dice entre lágrimas el pequeño, lo suelta y se dirige con Garp para también abrazarlo agradeciéndole de igual manera.
-no llores Luffy- lo calma Ace –muchas gracias Sabo y señor Garp
-jajaja no me llames señor Garp, ahora soy tu abuelo- le dice el viejo sonriéndoles –estaré aquí puntualmente, no quiero retrasos
-Nos veremos en la tarde chicos- se despide el rubio poniéndose de pie al igual que su abuelo
-si!!- dicen los hermanos dirigiéndose a sus habitaciones para preparase, mientras Sabo y Garp salen del orfanato.
Luego de desayunar, se dedicaron a empacar sus cosas toda la mañana y en la hora de almuerzo, les contaron la noticia a sus amigos, quienes se alegraron mucho, Usopp y Nami lloraron, y los demás los felicitaron.
A modo de despedida empezaron los juegos y risas, hasta el cansancio de todos, hasta que llegó la hora de las 4:00pm
-NOOO!! No te vayas Luffy, con quien robaré dulces en la escuelaaa- decía Nami llorando abrazando al pequeño, y este también la abrazaba tratando de calmarla.
-ahora a quien contaré mis historiaaas- también lloraba Usopp siendo abrazado por Luffy.
El azabache mayor miraba la escena divertido.
-Ace- llama el peliverde a su amigo junto con Kid
-si?- se da la vuelta el azabache mirándolos cambiando su sonrisa, con una mirada seria ya que estos también tenían el semblante serio.
Nadie dice nada solo se lanzan a abrazar a su amigo, el azabache los corresponde volviendo su sonrisa.
-te extrañaremos amigo- dice Kid sonriendo pero lagrimeando.
-no nos olvides Ace- dice Zoro aun manteniendo su abrazo.
-Eso nunca chicos- dice separándose de ellos.
Entre los hombros de sus amigos Ace ve al pequeño rubio con el que convivió dos semanas, pero… no lo iba a negar, había empezado a gustarle con toda su ternura, y su forma de ser, -en seguida vuelvo- se separó de ellos y se dirigió al rubio quien estaba con Robin, pero al ver que Ace se acercaba se alejó con la excusa de también querer despedirse de Luffy.
-y tú no te despedirás de mi?- pregunta sonriendo ladinamente.
-pensaba ir en cuanto te separes de tus amiguetes- dice dirigiéndole la mirada algo nervioso, ya que se percató de que Zoro lo observaba de reojo.
-bueno ahora estoy solo
-cuídate Ace- dice el pequeño sonriéndole –y cuida a Luffy también
-espero verte de nuevo algún dia- dice el mayor acercándose al rubio, este se ruborizó un poco con el acercamiento –cuídate tú también Sanji- termina el pelinegro dándole un corto beso en la mejilla haciendo que su sonrojo aumente.
-i-iré a des-despedirme de Luffy- dijo el rubio, alejándose con una sonrisa nerviosa.
Luffy se jugaba con Law, colgándose de su espalda, pero por esta vez el moreno no se molestó, es más, empezó a correr con el pequeño encima entre risas.
Luego de bajarlo Sanji se acercó al pequeño.
-adiós luffy- dijo abrazándolo
-no veremos Sanji, te lo aseguro- dice el monito sonriendo.
La despedida fue larga y llego la hora de irse, las 5:00pm -Ace, Luffy, ya llegaron por ustedes- les informó la joven hermana.
Al momento de salir Luffy extendió su mano despidiéndose –NO SE COMO PERO NOS VOLVEREMOS A VER TODOS!!!- exclamó muy seguro de lo que decía. Todos le sonrieron esperanzados de que lo dicho se cumpliera.
La rectora los despidió con un abrazo deseándoles lo mejor, al igual que las demás hermanas.
Subieron a la camioneta del abuelo de Sabo, Garp metió las maletas en la parte trasera, encendió el auto y se marcharon.
Llegaron a la ciudad al anochecer, a una casa enorme, el garaje estaba en la parte trasera de la casa, al bajar Sabo los guió a la entrada que era una puerta de rejas blancas mientras el abuelo guardaba el auto, pasaron por un jardín de césped verde con un camino de piedra que llegaba a una puerta de madera, el rubio la abrió con su llave y los invitó a pasar, apreciaron una sala de estar con sofás negros, alfombrado beige, paredes verdes y una televisión plasma de 50pulgadas; al fondo de la sala la cocina de color verde claro. El rubio los llevó subiendo escaleras a un pasillo con varias puertas.
-este es el cuarto del abuelo- dijo mostrando la primera puerta –este es el baño- señaló a la puerta con dos cristales texturados –este es mi cuarto- apuntó a una puerta café con un cartel de “SABO” en la parte superior, la abrió y mostró su interior de color blanco, piso de madera flotante, una cama azul, armarios de pino, estanterías con libros, un escritorio con más libros y juguetes de dinosaurios.
Continuaron su camino –esta es tuya Luffy- dijo abriendo la puerta siguiente dando vista a un cuarto con paredes celestes, el mismo piso de madera, una cama roja, armario de pino estanterías vacías y un escritorio también de pino con una silla.
-es genial!!- dijo el pequeño emocionado.
-y esta es tuya Ace- dijo el rubio abriendo la puerta del frente, dando a ver una habitación de paredes blancas, una cama naranja, muebles de pino y piso de madera.
-es perfecta- dijo el mayor feliz, admirado por tener un cuarto para él solo.
Al poco rato llegó Garp con sus maletas, Sabo ayudó a acomodar las cosas, mientras lo hacian notaron que la mayoría de la ropa había sido donada por instituciones que el abuelo dirigió, entonces acordaron que al dia siguiente irían de compras, a lo cual aceptaron alegres.
Llegó la noche y cada uno fue a su cuarto. Ace pensaba en como estarían sus amigos ahora, en especial el rubio, “te aseguro que te veré de nuevo Sanji” se prometió a si mismo.
En el orfanato ya todos se iban a dormir Usopp tenía miedo de dormir solo, pero no tuvo opción aparte que en la habitación de Zoro y Sanji hacia demasiado ruido con sus peleas y eso no era novedad.
-pero porque estas molesto marimo?!- preguntaba el rubio harto de que el peliverde lo ignorara –responde!!
-dímelo tu cejillas!!- exclamo Zoro seriamente.
-yo no sé el motivo!!
-piensa entonces
Sanji pensó por unos segundos lo ocurrido en el día, en el desayuno todo fue normal, el resto de la mañana igual, el almuerzo fue diferente gracias a la noticia de los hermanos, luego se divirtieron jugando, luego se despidieron de Luffy y Ace…….. ACE!!, Ace se despidió de una manera peculiar con él, el recordar eso hizo que se sonroje apenas notablemente “¿será por eso que el marimo está molesto?” pensaba Sanji “pero… porque tendría que estarlo?”.
-ya que no me lo dices mejor me duermo- dijo el rubio cubriéndose con las frazadas y apagó su lámpara.
-como quieras cejillas- dijo el peliverde haciendo lo mismo pero dándole la espalda. Estaba molesto, pero no podía decir nada, ese gesto de Ace con Sanji le hizo sentir unas ganas terribles de golpear al azabache pero se contuvo, al fin y al cabo era su amigo, y ya no volvería al orfanato, si lo extrañaría, así que prefirió creer que solo fue una muestra de cariño a despedida y se quedó dormido.
-extrañaré a Mugiwara-ya- decía un moreno cerrando su libro para apagar su lámpara.
-ajam- dijo Kid ignorando a Law.
-ahora de que estas molesto?- preguntó recostándose en su cama.
-…- ya no hubo respuesta, quizá se quedó dormido, así que el moreno también cerró sus ojos.
Pero no, Kid no estaba dormido, solo lo ignoraba, no soportaba la idea de que Law cargó a ese enano sin ninguna molestia, estaba celoso?, SI, pero por suerte ya no tendrá que ver a ese bicho cerca de nuevo, y eso lo relajaba.
-trafalgar?- el moreno ya no respondió, se quedó dormido, estaban cansados, Luffy se emocionó este día con los juegos, desde jugar a los piratas, sol y hielo, escondidas, carreras, y no carreras cualquiera, carreras de un solo pie, haciendo carretillas, jalando a tres amigos. En definitiva jugaron mucho, y Kid también quedó rendido, durmiendo como nunca lo hizo hasta ahora, como roca.
Entonces pasaron nueve años.
CONTINUARÁ…