PDV BARTOLOMEO
Era temprano en la mañana, me habían dado dos días de descanso y Cavendish no le dio la gana de asistir a clases asique ahora estaba tirando una bola de caucho a la pared mientras Cavendish leía y apretaba una pelota amarilla para el estrés, era una atmosfera rara, ninguno de los dos quería hablar de lo que había pasado pero más que nadie Cavendish actuaba extraño, yo por mi parte no quería salir y ver a law y luffy agarrados de la mano o comiendo juntos, claro que eso no quitaba el hecho de que luffy era mi ídolo
-te amo-
Un susurro provino desde el otro lado de la habitación se escuchó claro, pero no podía decir que era verdad… era Cavendish no se habrá dicho me duele el ano bueno él no tiene, me estaba volviendo histérico sin razón, alce a vista para ver su cara, estaba completamente roja
-¿qué?- reaccione y la bola callo en mi pantalón
-que eres una maldita y asquerosa bestia, y eso me encanta- Cavendish estaba casi llorando de la vergüenza al decir eso y yo apenas podía abrir los ojos como platos, Cavendish y yo eso no podría ser posible de igual forma no sentía nada por el
-déjate de bromas- Salí de la habitación donde Cavendish quedo solo, la verdad por un momento tuve ganas de volver y no dejarlo solo, Cavendish hacia tantas cosas por mí pero esto es imposible además y lo más importante ¿qué le puede dar esta bestia asquerosa y fea? me reí recordando su cara de vergüenza, parecía un niño pequeño con su pijama
Cavendish…
Camine hasta la enfermería donde estaba chopper acomodando medicamentos me saludo y entre, sus ojos negros y piel marrón, siempre era un encanto ir a verlo, era pequeño y bastante cálido, otro atractivo para los semes gays de esta institución, pero por chopper eraun gran respeto y amistad también
-yo pollo-kun- saludo el chico y bajo e las escaleras para dirigirse al escritorio
-hola chopper-sempai- sonreí y me senté en una de las camillas
-la enfermera está tomando su descanso así que dime cómo te sientes- hablo con una cálida sonrisa propia del voluntario más cálido de la enfermería
-pues me duele un poco pero puedo caminar creo que viviré- bromee y el pequeño rio pero se sobresaltó y saco de los cajones del escritorio lo que parecían unas ligas
-puedes devolvérselas a Cavendish, ya sabes el pasaba aquí conmigo cuidándote incluso me ayudo a picar ruta para los heridos solo para quedarse jaja, olvido estas ligas para el cabello la última vez- y yo apenas me enteraba de aquello, no sé cómo, se ve tan lejano, no creo, no, no quiero creer que una persona como él me ame
-bien, yo se las entrego, entonces saldré a tomar aire fresco- el moreno asintió
-y come bien- me recordó a lo que pique el ojo y Salí con las ligas de colores en la mano
No me puedo imaginar a Cavendish pelando fruta, más bien usando sus manos para hacer un trabajo como ese, ahora que lo pienso creo que se vería como una mujer delicada, me reí un poco mostrando mis colmillos lo cual espanto a los niñitos de grados inferiores que venían pasando
La verdad es que mi imagen no me da para ser el príncipe de Cavendish más bien sería un perro un gran buldog verde
Cavendish, me gustaría creer y darte una oportunidad, pero, la gente como tú sigue desilusionándome, más bien sigo decepcionándome yo solo de las personas que amo
Llegue al patio trasero, donde hace 4 días había sucedido todo, según Cavendish estuvo apresado detrás de estos arbustos, es increíble que pudiese haber escapado, aún conserva sus habilidades aun sin su espada, recogí algunas rosas que le servirían para comer
Abecés Cavendish es tan amargo como los pétalos de rosas, me pregunto si los come para ocultar su parte dulce la que acababa de presenciar
-valla, lo rechazas y no haces más que pensar en él- una voz me sorprendió detrás de mí una voz familiar, aunque sonaba más ronca de lo que acostumbraba me voltee para encontrar a hakuba mirándome directamente
-bartolomeo- escuchar mi nombre siendo pronunciado por tan sádico tipo hizo que corriera una pequeña corriente por mi cuerpo su mirada sádica no parecía muy tranquila, de cualquier forma eso no me importaba mucho
-Cavendish es solo un niño que no sabe lo que quiere deberías saberlo- le dije con el mismo tono uniforme observando las rosas recordando al mismo mencionado
-bartolomeo, yo lo conozco más que nadie es un niño, uno que necesita atención y si te quedas a su lado quizás cambies de opinión en poco tiempo- me cabreaba un poquito el que hakuba me pidiera quedarme con Cavendish
-y que sabes tú igual esto es solo un sueño, cuando despierte Cavendish será el otra vez e igual no pienso corresponderle a un niño mimado- hable claro
Mire su cara, se mostraba ofendido y con los movimientos rápidos de un gato ahora estaba frente a mi pasando su mano por mi cara -tú no sabes muchas cosas, y creo que no queras saberlas, caníbal, pero si haces que agote mi paciencia las consecuencias no serán buenas… para alguien como tú- no entendía porque decía aquello susurrando frente a mi cara su amenaza sonaba grabe y su mirada comiéndome no me parecía normal
-tan solo tomate el tiempo de conocerlo bartolomeo, quizás si lo haces tendrás algo adicional- otra vez me confundía pero simplemente me quede hay parado, hakuba meramente se marchó, esta vez menos sigiloso dejándome viendo las rosas solo nuevamente
Era tan confuso, probablemente Cavendish armaría este rompecabezas en un segundo además tratándose de una persona que vivía dentro de él.
Camine de nuevo a la habitación y abrí la puerta sin hacer ruido para no alarmar si es que Cavendish seguía hay luego de aquello, simplemente estaba en posición fetal tapando su cabeza con sus rodillas mientras estaba recostado en la cama, probablemente dormido aunque realmente no era normal que Cavendish durmiera de esa forma el creyéndose ser la creación más perfecta del mundo
-vete- la vos repentina de Cavendish me hiso sobresaltar y casi podía jurar que escuche un sollozo ahogado
-cavendish? ¿Estas llorando?... venga porque lo haces - creo que sabía a qué me refería el teniendo un gran sentido de la percepción, claro que me refería al hecho de que tapase su rostro
-soy horrible- no creía lo que estaba escuchando, Cavendish el príncipe pirata menospreciando su belleza
-estas bromeando- dije riéndome pero apretó más su agarre por lo que parecía se desmoronaría en cualquier momento, sin duda mis palabras no fueron la correctas, de cualquier modo no soy bueno en esas mamadas
-tú mismo me rechazaste, es porque soy repugnante- esta vez suspire pesadamente tratando de dejar pasar el regaño que le daría a continuación simplemente me relaje un poco y con mi mano alcé su cara la cual estaba mojada, como siempre aun con cualquier expresión su rostro era hermoso sus ojos como el mar permanecían húmedos simplemente restregué mis grandes y callosas manos por su cara tratando de secar su cara, esto que estaba haciendo me parecía de lo mas de gay pero creo que empezaba a gustarme
-eres hermoso, cualquier ser de este mundo se sentiría bendecido si le hicieses feliz diciendo que le amas, pero yo, no soy necesariamente la persona correcta, entiende que yo soy una simple bestia, no puedo cuidar de ti sin lastimarte- trate de explicarle aunque me llevaba del coño decir todas esas cursilerías
-entonces en vez de la bella déjame ser la rosa de la vestía por ahora- no sabía que quería decir creo que lo noto ya que se rio un poco y siguió hablando -déjame depender de ti y depende de mí, quizás no ahora pero, quiero tener el consuelo de tener una oportunidad para que me ames en un futuro- esto había sido lo más complicadamente lindo que había escuchado de una persona refiriéndose a mí.
Si mas no recordaba todo lo que había recibido siempre habían sido burlas e insultos por mi repugnante apariencia, mi forma de actuar e incluso maldecían mi existencia, se sentía realmente nuevo escuchar el ser necesitado y amado por alguien de esa forma. No supe que responder simplemente me tire en aquella cama donde probablemente estaba aceptando sus condiciones, y con cuidado sentí una pequeña cabeza acomodarse en mi pecho
-quien te dio permiso de hacer eso- le reclame en vos baja pero el solo se incorporó más rodeándome con su delgado brazo y cerrando los ojos
Si… se sentía cálido, probablemente terminaría loco por que Cavendish hiciese eso todos los días, quizás pueda terminar por enamorarme por completo de él pero de algo estaba seguro
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No estaba listo para amar a alguien de nuevo en un sueño como paso con luffy, quiero despertar y escuchar todo salir de su boca, entonces le dejaría ser mi rosa
De pronto mi cuerpo se puso pesado, se sentía extraño, empezaba a escuchar boses y el Cavendish que estaba recostado encima de mi empezaba a ser borroso
Que, que está pasando
------------------------------------------------------- mientras tanto en dressrosa
Kross les explicaba a los nuevos reclutas las reglas mientras que el usuario solo se aburría con tanta cháchara y los bandidos estaban dormidos
-y eso es todo- una vez todos escucharon eso se pusieron en guardia, por ahora vigilarían el castillo e informarían, en todas partes se escuchaban rumores de que kroos era bondadoso y miles de cosas más que ellos mismos podían afirmar
-¿saben que la marina vendrá a inspeccionar?- escucho anna detrás de las puertas, sin duda la mujer era chismosa y estaba en esa área con el usuario
-sí, malditos marinos, ahora es que quieren “protegernos” solo buscan información para aliarnos con piratas y quitarnos el país- se trataba de viola quien era la consejera real y sin duda no era una mala idea pensar aquello ya que confiaron y fueron salvados por piratas
-ero escuche que ellos ya han salvado muchas islas además de dressrosa, comenzando por arabasta, y además hay niños y personas que afirman que salvaron a mucho niños secuestrados en un laboratorios, que al parecer eran experimentos de la marina- anna se sorprendió bastante, sin duda los muguiwara no eran tan débiles como pensaban, asique ellos eran los piratas que vencieron a doflamingo cada vez anna se sentía más intrigada
-son piratas muy raros, les debemos mucho- fue todo lo que dijo el rey riku luego de dar la orden para que arreglaran todo para la llegada de la marina para la inspección
CONTINUARA