Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Other life por Maclean

[Reviews - 78]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

uff 

¿Aun me recuerdan?

Estoy super ocupada ¡Lamento no haber subido actualizaciones! Lo siento por las pocas personas que leeen esto 

Así subo una actualización pequeñita aunque sea

Capitulo 8

Tuve una noche tranquila, sin sueños y sin pesadillas, si puedo recordar algo, sería la voz de Takano hablándome por mi nombre mientras me apretaba fuerte contra él, aunque quise decirle que me dejará en paz,  pero no tenía muchas fuerzas pues estaba cansado después de lo que habíamos hecho.

 ¡Una vez más había amanecido en su cama! ¿Por qué  era completamente natural sentir que nuestros cuerpos se juntaran en uno con el otro? Detestaba que sus toques provocarán todo tipo de emociones.   Hacía que mi mente estuviera casi inconsciente y mi corazón latiera rápido.  ¡Incluso ni siquiera soñé con Kuroda! Era incapaz de pensar en otra cosa cuando estaba con él.

-¡Onodera!  - Me gritó una voz enojada.

Tarde unos breves minutos en recordar que no era mi departamento y que estaba en la habitación de mi jefe. Demonios, quería huir pero ya era demasiado tarde. Y aunque mis caderas no dolían,  estaba avergonzado por lo que había hecho la noche anterior…con mi boca para ser exacto, no solo porque se viniera en mi boca, si no porque  -quizá por el efecto del alcohol-  lo había disfrutado.

-¡Onodera! –Gritó de nuevo –Tendré que ir por ti y cargarte entonces.

En lo que escuchaba ruidos y unos pasos rápidos, me puse ropa interior y mi camisa, sin embargo cuando apenas estaba abotonando unos botones, Takano apareció la habitación y me cargó en sus brazos como si fuera un costal.

-¡Suéltame! ¡Takano-san! -  Me quise mover todo lo que pude pero me tenía agarrado con mucha fuerza.

-No pesas nada – me respondió – Solo debe haber comida chatarra y bebidas energéticas en tu apartamento, aparte de basura acumulada.

En cuanto llegamos al comedor me dejó de pie al lado de la mesa, mientras él fue a la cocina por lo que faltaba. Entonces fije mi vista en la mesa, había omelet, arroz y café y demás cosas…olía todo tan delicioso que sentía como se me hacía agua la boca y mi estomago gruñía.  Cuando me quedaba en su casa, aunque fuera un desayuno lo hacía bien.

-Preparé también bentos para llevar al trabajo – Dijo mientras entraba de nuevo a la habitación, yo no me había sentado aun.

-¡Eh! ¿Por qué?  - Gruñí

-Porque eres mi amante, obviamente idiota- Rodó los ojos.

-No soy tu amante – respondí de inmediato.

-Oh bien,  entonces porque eres la persona con la que tengo sexo a menudo.

-¡Eh!  - Grité. Eso era mucho peor, casi quise darle un golpe en la cara e irme, pero tenía tanta hambre y lo que estaba en la mesa se veía tan bueno

-Y por cierto bonita camisa…- añadió mientras daba un sorbo a su café.

No sé porque, pero tan nervioso estaba que no me había dado cuenta que traía puesta la camisa de Takano, que era bastante ancha, para mí.

-Te queda bien, incluso si estas muy delgado

-¡Eh!  - Me quejé, pero seguí comiendo.

Se hizo un silencio, de nuevo terminamos teniendo una discusión y no podíamos hablar normalmente.  A veces, quería conocerlo mejor y saber todo de él, pero en momentos como este era tan difícil.

-¿Hablaste con sensei ayer? – Me preguntó. 

-Sí, dice que esta feliz con la portada del nuevo tomo – respondií

El tema cambio al trabajo y con eso estuve distraído, tratando de ignorar que en unas horas más me reuniría con mi madre para hablar del asunto de compañía.  Desearía que mi vida fuera más tranquila, y aunque no conocía al tal Kuroda, estaba empezando a pensar que si lo buscaba él tendría todas las respuestas

-Takano-san…¿Conoce a alguien llamado Kuroda? –le pregunté cuando estábamos en el portón

-¿Kuroda?  -Frunció el ceño y me miro con severidad como si hubiera hecho algo malo.- Seya dice que el día que te desmayaste dijiste ese nombre, eres tu el que tiene que explicarme algo

-¿Yo? – Respondí enojado. – Es solo un personaje de un libro. ¡No tengo que explicarte nada! – Cuando dije esas palabras corrí por el pasillo con Takano siguiéndome detrás.

***

Cuando después de trabajo fui a hablar con mi madre, ella ya me estaba esperando sentada en la mesa del restaurante con una expresión seria examinandome de arriba abajo.  El fin de ciclo apenas empezaba y no había tenido ni un poco de tiempo para arreglarme, por lo que apenas me había peinado un poco.

-Buenas noches mamá- Salude con la mejor sonrisa que pude fingir

-Buenas noches hijo – me contestó ella.

Pedimos la comida mientras estábamos en silencio, yo estaba realmente hambriento así que pedí  una hamburguesa aprovechando que era un lugar familiar, mi madre pidió algo ligero de comer por lo que hizo gestos cuando pedí mi comida

-Te vez muy delgado, no estás comiendo bien ¿verdad?

-Yo… ha habido mucho trabajo….-respondí poniéndome nervioso.

Aunque estaba feliz de que mi madre estuviera saludable y trataba de ser lo más amable posible, ella seguía mirándome de forma enojada.

-Vienes por lo la decisión de comprar Marukawa para que hable con tu padre ¿No?

-S-sí

-Fue idea mía.

-¿Q-qué?-  Aunque no era algo que no hubiera pensado antes, eso aun así me sorprendía

-Los mangas y publicaciones juveniles como algunas que tienen Marukawa no son nuestro fuerte en la compañía, así que sí que pensé que sería buena idea invertir en comprarla y se lo comenté a tu padre, aunque hubiera muchos cambios y efectos colaterales

-¡P-pero!- La interrumpí. ¿Eran así las cosas? ¿No le importaban ni un poco las personas de ambas compañías?

- Te preocupa Marukawa ¿No? No te preocupes, estará bien, al menos la mayoría de las cosas seguirán igual….-Suspiró con la mirada baja-  Tampoco es que este muy feliz de hacerlo, desearía que la compañía tuviera mejores editores  y gente más trabajadora. Si yo tuviera más tiempo, saldría a buscar gente así. No quiero que la compañía caiga en banca rota

Entonces me iluminé, supe cual era su objetivo. Yo había caído de inmediato, pero no me importó. Todo se resumía a este momento donde pronunciando las palabras adecuadas el destino de editorial Marukawa estaba en mis manos. El destino de los que había conocido, de mis compañeros, de Seya y de Takano.  Por supuesto también mis padres dependían de mí ahora.

En mis sueños con Kuroda, yo era un valiente guerrero.  ¿Así que porque no serlo a ahora?  Sacrificarme por el bien de todos no se me hacía extraño.

-No estarás sola  -le dije – Yo volveré y te ayudaré mamá…

-¿Es en serio?

-Sí…yo…no quiero que la compañía se arruine, no sin antes intentarlo

-¡Es lo mejor que he escuchado!

Y en medio de un gran llanto, ella me abrazó. No pude echarme para atrás.

*

-Así que es lo que has decidido- me dijo el presidente Isaka  cuando fui a hablar al siguiente día-

-Sí…

-Pobres de nosotros. – Suspiró y me dio unas palmadas en la espalda-  Nuestros padres siempre terminan haciendo nuestras vidas más difíciles de los que ya son…

No respondí, solo me quede con la cabeza baja en silencio. Después de unos segundos me día la vuelta y me empezaba a retirar, cuando él volvió a hablar.

-Ahora solo tienes que hablar con tu editor en jefe…-añadió

Si fue difícil hablar con Isaka y aun más con mi madre, no quería imaginar que pasaría si hablaba con Takano, no se lo tomaría bien para nada, probablemente estallaría en medio de todo el lugar.

 

Así que me dirigí  a la oficina, todo parecía normal. Takano y los demás estaban trabajando y no me pusieron mucha atención, salvo Seya quien me miró preocupado.

-¿Paso algo Onodera? – me miró.

-N-no nada, estoy bien  - contesté muy nervioso.

-No te ves bien, quizá debería de decirle a Takano  - Acto seguido se levanto de su silla para ir a hablar con él

-¡N-no! ¡Y-yo! – Le quise detener pero fue en vano.

-¿Ocurre algo Onodera? – En cuanto Takano se levantó corrió de inmediato junto a mí observándome con sus ojos felinos.

-Takano…yo…

-¿Qué pasa?  - Preguntó. Seya estaba detrás suyo

-Tengo que irme

-¿Tan mal te sientes?  - Levantó una ceja preocupado.- Puedo llevarte al hospital…

-¡No! ¡Yo me iré de Marukawa!

Lo último lo grite con bastante fuerza, que los demás que estaban presentes me voltearon a ver sorprendidos.

-¿Eh?

-Me voy…- Y antes de que Takano  pudiera reaccionar, salí corriendo de inmediato del lugar.

O0o

Llegué corriendo hasta el pasillo, cuando me detuve sobre una pared para tomar aire  escuché unos pasos atrás de mí, efectivamente había venido siguiéndome en cuanto comprendió la situación, no dijo nada, solo se detuvo y me acorraló contra la pared.

-¿Vuelves a la editorial Onodera?

-Yo… -no podía juntas las fuerzas para hablar.

-¡Contéstame! – Gritó- ¡Es lo que acabas de decir! ¿No?   Es por lo que dijo Isaka, te convenció ¿verdad?

-Yo lo hago por mi cuenta.

-Debes quedarte aquí, no te dejaré ir.

-¡Mi madre me necesita!

Takano me tomó del mentón y me acercó hacía su rostro, justo cuando nuestros labios se iban a tocar,  hice lo primero que pensé y le di una cachetada.  No fue dolorosa, supongo, pero por el impacto me soltó.

Nos miramos a los ojos en silencio por largos instantes que parecieron eternos y como hacía tantos años,  corrí hasta desaparecer de su vista.

Notas finales:

Bye!

No se cuando podré publicar de nuevo, pero espero que sea pronto! Les prometo que seguiré con la historia.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).