Flash Back
Himuro camina con su hermano, con cierta frustración, después de todo Alex los había rechazado como aprendices nuevamente y eso no era lo que se esperaban, Tatsuya iba a reclamar ya que la actitud de Taiga no había sido de mucha ayuda para convencer a la rubia, pero se detuvo cuando notó como los ojos de su hermano estaban cristalizados.
-Bro??.- Kagami reaccionó limpiándose los ojos con desesperación, no quería llorar frente a su hermano mayor.- ¿qué tienes? Te sientes mal, ven te llevó a casa.
-¡NO!.- el pelirrojo se alejó del agarre de su hermano, mientras gritaba su negativa.- no quiero ir a casa, es que… es que… hoy.- sus ojos se aguaron, el tigre se dio vuelta y se alejó corriendo del moreno.
Himuro solo atinó a seguirlo, fueron varias cuadras, pero realmente su hermano estaba corriendo más rápido de lo que recordaba, finalmente le logro dar alcance.
-¿Qué tienes? Hermano…¿qué te ocurre?- Kagami se abrazó a su hermano llorando con fuerza.
-Es mi culpa… fui yo, yo lo hice, lo lamento, lo lamento.
-Hermano cuéntame que paso.
-Yo mate a mamá, la maté….
Tatsuya logro calmar a su hermano, quien tomo un profundo respiro y le comenzó a explicar a su hermano, como era que su madre había muerto.
-Cuando mamá murió estaba embarazada, nos habíamos mudado poco tiempo antes y mi papá perdió su trabajo, las cosas no están bien en mi casa, mi mamá estaba trabajando en una fábrica, solo aceptaban mujeres, pero le habían dado un permiso especial por la bebé, pero le recortaban parte de su sueldo, así que el dinero no era abundante en mi casa.
Tatsuya estaba atento mientras su hermano se iba quebrando, mientras ese dolor esa culpa salía de cuerpo junto con las lágrimas.
-Papá estaba triste, de verdad muy triste, salía muy temprano a buscar trabajo, pero no lograba encontrar, muchas noches lo escuche llorar entre los brazos de mamá, sabía que se sentía mal, que creía que no estaba siendo un buen padre, pero él lo era, mamá y yo lo amamos mucho.
-Bro…- Tatsuya quería decirle algo, pero no sabía cómo consolar a su hermano.
-Cuando mi mamá ya estaba de casi 8 meses, yo me enferme, tuve mucha fiebre, en el hospital nos dijeron que no me podían atender, que mi papá no tenía seguro médico y que si nadie podía cubrir los gastos para ellos les era imposible…- un silencio luego de un quejido por llanto salió de la boca del pelirrojo y entre jadeos continuo.- estaba nevando y mamá salió de casa, le habían dicho que por ese día podrían pagarle lo necesario para mis medicinas…ella…tomó el bus que los llevaba al trabajo… este chocó…perdió el control por la nieve…
-Taiga, no es tú culpa, fue un accidente…- pero el moreno no pudo continuar, cuando los puños de Kagami lo tomaron por el cuello.
-LO FUE, FUE MI CULPA, SOLO MIA, SI YO FUERA FUERTE… ELLA NO DEBÍA TRABAJAR… MI HERMANITA, MI MAMÁ.- el tigre se apoyó en el pecho de su hermano y entre jadeos agregó.- por…eso… cuando sea mayor…cui…cuidaré a mi esposo…lo amaré mucho… no le faltara nada, nada de nada… papá dice que es su culpa, que yo debó ser buen padre, buen esposo y debó cuidar a mi familia con todas mis fuerzas...la extraño Tatsu, yo quiero que esté aquí, yo quiero a mi mamá Tatsu, no es justo, yo la quiero…Tatsu, era mi mamita y yo no quería que muriera, yo quería tener una hermanita Tatsu, yo quería.
Fin flash back
-Ese día nos quedamos con Taiga durante horas sentados bajo el mismo árbol, fuimos a su casa, su padre ya había vuelto del trabajo, me pidió que me quedara a comer y luego a dormir, escuche a su padre, él se disculpaba, por no haber sido un buen padre y un buen esposo.
-Pero…el padre de… Kagami-kun lo ama mucho…- Kuroko jadeaba.
-Ambos se sienten culpables, pero se aman, no creo que Taiga lo superara en este tiempo, es cosa de ver como es contigo, pero para más información Taiga es quien debe dártela, aunque él se ha preocupado mucho de ti y tú futuro, de su futuro como pareja.
-Pero… él no quiere hijos, no quiere que me embarace… no me toca.
-Kuroko compréndelo, después de todo imagínate que la única persona en su vida que ha sido madre murió mientras gestaba, él no quiere arriesgarte, no quiere perderte.
-Pero…pero…-las palabras se le atoraban en la garganta Kuroko no podía parar de llorar, las lágrimas bajaban caudalosas desde sus celestes orbes, mientras un puchero aparecía en sus labios.
-Kuroko, debes calmarte.- Himuro le hablo tranquilamente, mientras se acercaba a Tetsuya buscando calmarlo, agradecía que Kagami se hubiese ido con Izuki.
-Es…Es…que… no puedo creerlo.- dejó salir sus palabras junto con un profundo jadeo, la verdad es que no se esperaba una verdad como esa, algo tan doloroso, entender algo como eso habría sido terrible para un niño, sentir que tú madre murió por tú culpa, que tú hermanita jamás llegará a vivir, era una carga, una mochila que un niño no debe cargar, estaba seguro que había algo más, pero como Himuro había dicho debía ser Taiga quien se lo contara.
-¿Kuroko-kun?- Kagami lo miró preocupado y se acercó a su lado abrazándolo.- No llore, vamos donde Midorima, el podrá cuidarlo y ponerlo bien.
-Taiga, Kuroko no está enfermo.- Shun se acercó separando un poco a Kagami de Kuroko, entregándole pañuelos y un vaso de agua al peliceleste, esperando se calmara.-Solo está un poco triste pues extraña a su esposo.
-¿Dónde está? Vamos por él, para que Kuroko no llore.
-No podemos hacer eso, el esposo de Kuroko tiene muchas cosas que arreglar aun, pero Tatsuya y yo les haremos compañía mientras este así, ¿te parece?
-Shun.- Himuro le hablo, al moreno esperando a que este se acercara y poder hablar con cierta privacidad.- quiero que se queden hoy, sé que aun estas molesto por lo que Kuroko me hizo, pero se lo prometí a mi hermano y no puedo fallar…
Con un suave contacto de sus dedos contras sus labios Shun detuvo las palabras de su pareja.- Si es lo que quieres te apoyaré, se nota que Kuroko no está nada bien, la verdad es que aún estoy realmente molesto con el tema, pero no quiero que te preocupes de más, preparé la habitación de huéspedes.- deposito un pequeño besos en los labios del mayor provocándole un suave sonrojo, Himuro solía perderse ante las demostraciones de cariño que Shun solía tener.
Shun se acercó nuevamente al pequeño y le dijo.- Kagami, tengo que preparar unas cosas y además la cena, que te parece si me ayudas y dejas que Tatsu se haga cargo de Kuroko.
-Tatsu-nii.- Tanto Kuroko como Himuro sintieron que el corazón se les salía por las palabras del niño.- cuida a Kuroko, yo ayudare a Shun, Kuroko es importante, debes cuidarlo, como mi hermano.- la verdad es que una parte de las palabras del pequeño eran relacionadas directamente a la relación con sus recuerdos, le hablaba el Taiga de siempre, el adulto.
-Claro Hermano, yo cuidaré a Kuroko como te lo prometí.- el niño se fue de la mano con Shun, mientras Kuroko seguía con la vista baja, Himuro no se había percatado que había hablado de esa promesa con su hermano.
-¿Cuándo le prometiste cuidarme?- el moreno se sobre salto y miró con cierta ternura al peliceleste, parecía un cachorrito desamparado.
-Cuando entró a la academia, ese día me pidió que me quedará a tú lado si algo le ocurría, que debía cuidarte y ayudarte a seguir con tú vida.
-Pero eso fue después de la boda.
-Exacto, a pesar de lo que paso jamás podría fallarle a mi hermano y aunque no lo creas si comprendo tú punto para todo lo que hiciste, después de todo estabas celosos y yo mismo he podido comprobar que los celos suelen ser tus peores enemigos.
El resto de la tarde Himuro y Kuroko conversaron evitando en gran parte el tema del pasado del tigre, Kuroko y Kagami se quedaron a cenar y además pasarían la noche en la casa del moreno, al principio el peliceleste se negó, pero terminó por aceptar, después de todo, debía disculparse con Tatsuya y quizá está era la ocasión para mejorar las cosas.
Kuroko tranquilizó a Kagami y acostó, Tatsuya y Shun le habían prestado ropa para que durmieran y pudieran estar más cómodos.
Kagami ya estaba dormido cuando Shun entró al cuarto, Kuroko miró a su sempai notando su gesto, había algunos rastros de molestia y de incomodidad, al parecer había algo que debía conversar, aún era perceptivo y Izuki Shun era una de las personas más honestas y más fáciles de leer que había conocido.
-Kuroko.- Shun lo llamó sin levantar la voz.- sé que es tarde, pero necesito discutir un par de cosas contigo.
Salieron del cuarto, la casa estaba en silencio, después de todo era bastante tarde, las estrellas iluminaban la sala y una suave luz salía de la habitación donde supuso Himuro se encontraba.
-Kuroko, quiero decirte esto antes de que alguien más lo diga por mí, no quiero que nunca en tú vida vuelvas a dañar a Tatsuya, ni físicamente, ni de ninguna forma, si me entero que hiciste algo que lo dañara nuevamente o que dijiste algo con el fin de lastimarlo, créeme que no me temblara la mano, ni me dolerá el corazón buscarte y hacerte entender tú error con mis propias manos.
-Izuki-sempai…- Kuroko estaba atónito, nunca había visto realmente molesto a su sempai, pero podía notar como realmente estaba furioso.
-El día de la boda te sobrepasaste, lo dañaste, comprendo tus celos, sé muy bien lo que se siente no comprender la relación que tienen Tatsuya y Kagami, además de las inseguridades que uno tiene con personas como ellos, Kagami y Tatsuya, tienen mundo, han estado fuera, conocen vidas completamente distintas a nosotros y cualquiera puede ser un riesgo, pero eso no te da derecho a insultarlo, ni menos para insinuar que otras personas tratan de acostarse con Kagami, menos Tatsuya.
-Lo siento…
-Lo sé, también sé que Tatsuya ya te perdonó, que no necesita una disculpa de tú parte, él está realmente bien solo con que Kagami y él puedan verse, pero yo no, no lo estoy Kuroko, Tatsuya es mi pareja, incluso de antes de la boda, nosotros llevábamos meses junto, cuando llego al altar, cuando termino la ceremonia y se excusó con los demás invitados, con el padre de Kagami, sus gestos, todo era de dolor, de tristeza, pero aun así él no te hizo nada, no te dijo nada, se contuvo por el bien del esposo de su hermano, por tú bien, pero no quiero que el día de mañana ustedes tengan hijos y él no pueda verlo, que tú lo alejes de su familia, de sus vidas, Tatsuya ni siquiera puede ir a los cumpleaños de Kagami y eso le duele, yo no soporto verlo más Kuroko.
Izuki había alzado la voz, se veía furioso y hasta cierto punto frustrado.- no quiero que lo vuelvas a dañar, no quiero, no permitiré que vuelva a pasarle algo malo, que vuelva a sufrir por tus palabras y tus acciones… sé que no lo sabes, pero Tatsuya estuvo un día completo solo después del accidente en el hospital, no permitió que llamar a Kagami que era su contacto en caso de emergencia, solo para que ustedes no tuvieran problemas, Kagami solo se enteró cuando Takao llamó furioso s Kagami para regañarlo y reclamarle por tener a su hermano solo en el hospital, después de que se había quebrado un par de costillas, si no hubiese sido por Takao, ni yo hubiese sabido que mi pareja estaba tan mal, su inseguridad y todo aumento desde tus palabras.- Kuroko abrió los ojos, Kagami no le había contado eso.- No te pido que sean los mejores amigos, pero te exijo que dejes de comportarte como una quinceañera celosa y le des la oportunidad de ser una familia, de que seamos todos una hermosa familia, de que los dejes ser hermanos, o acaso Kagami te grita por Aomine.- el peliceleste negó.- es por su madurez, el comprende que tú necesitas a Aomine, que aunque te dañara tú lo quieres, si el comprende eso que te involucra directamente ¿qué tan difícil es entender que él vea a Tatsuya como su hermano?
Shun se sentó notando como los ojos celeste estaban aguados, la verdad es que el moreno a pesar de todo no quería hacerlo llorar, ni nada por el estilo.
-Lo…siento…lo siento…- Kuroko comenzó a llorar.- Kagami-kun estaba tan triste esos días, pero… no me di…dijo que Himuro-kun estaba…que había….lo siento… Himuro-kun estuvo solo…por mi culpa… lo siento.
-Ya…shhhh, ven.- Shun abrazó al pequeño.- tú puedes cambiar todo, Tatsuya es un poco emo a veces, pero ya te perdonó, quizás ahora podamos ser una familia y cuando ustedes tengan hijos le permitirán a Tatsu ser el tío consentidor y malcriador, como todo un tirador… ok, mala broma.- Shun río.
Ambos se quedaron abrazados, Shun se sentía más liviano con todo lo dicho y Kuroko sentía que los brazos de Shun eran como los de una madre, Kuroko entendió lo que necesitaba, arreglaría su relación con Kagami y a la vez con Himuro, desde la mañana todo lo que hiciera sería para mejor.