Alentó el paso mediante llegaba a la torre del Hokage; sinceramente, no quería ir, pero era mejor a que una docena de AMBU'S rodearan la casa de su pequeño hermano. Toco cuando estuvo al frente de la puerta, como no recibió contestación, entre. ¿Qué podría estar haciendo además de firmar documentos?
Abrió los exageradamente los ojos. El “respetable” Hokage estaba leyendo Icha Icha Paradise mientras le sangraba la nariz. Tosió falsamente para que supiera que estaba hay. Rápidamente Sarutobi escondió el libro, para después limpiarse la nariz.
—Buenos días Naruko —saludo con un pequeño sonrojo en las mejillas.
—Buenos días Hokage —saludo la pelirroja, intentando ocultar su risa.
—Bueno; como Menma y tu no pudieron hacer los exámenes chūnin, los harán ahora. Lo que si se tiene que planear es con quien lo hará Naruto, si con su actual equipo o con ustedes. No se preocupe, si Naruto decide estar con sus amigos, Menma y usted pueden formar un equipo.
—Entiendo —murmuro para si Naruko—. Si es todo, me retiro. Ah, espero que nadie se entere de que es un gran pervertido'ttebane.
Salió corriendo, lo ultimo que creyó oír fue a Sarutobi gritar “Vuelve aquí Uzumaki”. Cuando estuvo a una distancia considerable (y segura), camino a un sauna donde siempre. Le gustaba mucho el lago que tenia entre los cuartos de mujeres y hombres.
Entro al establecimiento. Saludo a la recepcionista, la cual le respondió con una sonrisa. Camino lentamente al lago. Ya dentro vio que no era la única hay. Había un hombre encima de un sapo... Esperen, ¿un hombre peli-blanco encima de un sapo? ¿Un sapo de un gran tamaño? ¡Jiraiya!
Sonrió de manera traviesa. Se acerco lentamente al hombre, cuando estuvo detrás de él, grito:
—¡Padrino!
—¿Quién se atreve a molestar al gran...? —Dejo la pregunta inconclusa, ¡era su huracán rojo!—. Niña, tiempo sin verte, ¿donde esta el remolino rojo?
—Esta con Naruto. —Jiraiya sonrió culpable—. No le has dicho que eres su padrino, ¿verdad? —Más que una pregunta, sonó como una afirmación.
—Vayamos a Ichiraku.
Los dos caminaron al restaurante de ramen, donde ambos pidieron miso de cerdo. Hay Jiraiya le explico a Naruko que el Hokage creía una mejor idea decirle la verdad a Naruto cuando Menma y Naruko regresaran, por lo cual mantuvo la boca cerrada.
Después de eso los dos caminaron a unos de los lugares de entrenamiento, donde Jiraiya comprobó felizmente que su ahijada no había perdido condición en todo ese tiempo. Naruko vio el cielo, el cual ya estaba oscuro, decidió irse.
—Adios Jiraiya.
Camino a la casa, llegando rápidamente. Ya dentro, vio a Menma durmiendo el el sofá. Camino al cuarto de Naruto, el cual estaba acostado (como siempre) en una postura extraña. Camino al baño, donde se puso el piyama. Ya lista, se acostó en la cama.
Apenas se acomodo Naruko, el pequeño rubio se acerco a ella, abrazándola. Naruko sonrió, tal vez si pudieran recuperar el tiempo perdido con su pequeño hermano...
. . .
Naruko despertó temprano; se quito con delicadeza los brazos de Naruto (ya que aun la estaba abrazando), para caminar al baño. Ya vestida (unos pantalones plancos y una camisa cuello de tortuga blanca) camino a la cocina, donde empezó a hacer el desayuno. Revoltillo con salchicha y pan.
Cuando el desayuno estuvo casi listo, un halcón mensajero se poso en la ventana; en su pata había una carta. Se acerco al ave.
“Sra. Uzumaki y Sr. Uzumaki:
Hoy Naruto debe decidir con que equipo se va a quedar para participar en los exámenes chūnin. Estarán los siguientes equipos: Equipo Asuma, Equipo Gai y Equipo Kurenai.
Atentamente, Hokage Sarutobi”.
Suspiro, antes de ir tendría que explicarle a Naruto y a Menma esto...
. . .
Sarutobi veía con una pequeña sonrisa a unos de los mas jóvenes jonin, que esperaba que se volvieran chūnin.
Delante de el estaban: Ino, Shikamaru, Chōji, Neji, TenTen y Lee.
—¿Para qué nos ha llamado? —preguntó con el ceño fruncido Sasuke. Cuando lo llamaron estaba entrenando.
—Ya que los hermanos de Naruto volvieron, el tiene que decidir con que grupo se va a quedar, si con usted señor Uchiha y la señorita Haruno o con sus hermanos.
Todos se sorprendieron (menos Sasuke y Sakura, que ya lo sabían). La puerta fue abierta, dejando ver a el pequeño Naruto y a Menma y Naruko. Los niños (menos Sasuke y Sakura) vieron asombrados a los pelirrojos. Comparando, no podían decir que no eran hermanos del pequeño blondo.
—Bueno Naruto, ¿con que equipo te quedaras?
Naruto se mordió el labio nervioso; quería estar con sus amigos, pero tampoco quería dejar solos a sus hermanos. ¿Qué pasaba si después no lo dejaban hacer los exámenes chūnin por ser una pareja y no un equipo?
Naruko al ver la preocupación de su hermanito, se agacho al lado de el.
—Tranquilo, el Hokage me dijo que Menma y yo podíamos participar sin ser un equipo de tres —susurró, para después enderezarse.
—Me quedo con Sasuke y Sakura.
—Esta bien, pueden retirarse.
Todos los presentes salieron. Mientras caminaba Naruto, agarro la mano de Menma y Naruko quedando el medio de ellos, sonrió felizmente. Algunos de los niños (incluso aldeanos) veían esa sonrisa. No era la típica gran sonrisa; era un pequeña, pero se veía... real y natural.
—¡Naruko!
La pelirroja voltio, viendo que quien la llamaba era Sasuke.
—Adelanten se, yo ahora los alcanzó.
Naruto y Menma la observaron unos segundos, para después seguir caminando.
—¿Qué pasa Uchiha? —preguntó burlona.
—No quiero que te acerques al dobe —amenazó fríamente, para después darse la vuelta.
Naruko sonrió, parece que las cosas se pondrían interesantes.