—Sí… —afirmó Odín igual de sonriente.
—Creo que no sabremos nunca la razón del vínculo de sus almas, no hay ningún antecedente que nos diga que esto haya ocurrido antes para poder guiarnos en una investigación… —comento Frigga con desilusión—. Quizá cuando sea mayor, Loki pueda decirnos si averiguo algo… él es muy inteligente.
Odín asintió de acuerdo—. Espero que pueda descubrirlo.
***
Odín había pedido que se preparase un banquete para todo el pueblo, y había hecho invitaciones para una fiesta real en celebración de la mejora del Príncipe Thor. Preparar una fiesta era cansador, pero al menos ya había dejado todo dicho y esperaba que en unas horas ya estuviera todo hecho.
Suspiró cansado mientras entraba a la habitación de su hijo. Sonrió al ver a Frigga acariciar a sus hijos mientras dormían.
—¿Cómo estás, querido? —pregunto Frigga silenciosamente.
—Cansado —respondió suspirando otra vez. Y aprovechando que Frigga estaba sentada junto a Thor, él se sentó del lado de Loki.
Sonrió acariciando a su hijo menor.
—Es un héroe —suspiro Frigga orgullosamente. Odín asintió.
—Y todo el pueblo deberá reconocerlo como tal —afirmó sonriendo.
—Ya no lo verán como un extraño —dijo Frigga acariciándole el cabello—. Mi pequeñito… —Suspiró—. Es muy chiquito para tener que enfrentar un pueblo que lo trata como un extraño.
Odín suspiró—. Lo sé… se ve tan frágil…
—Pero no olvides que de frágil no tiene nada —recordó Frigga riendo.
—Oh, ya me demostró cuan poderoso es —confeso Odín riendo junto a su esposa. Guardaron silencio.
Maravillados observaron cómo Thor comenzaba a moverse, y con él, también lo hizo Loki; ambos comenzaron a acercarse de forma sincronizada hacía el otro; ambos apretaban su abrazo en el opuesto; ambos escondieron la cara en el cuello del otro; ambos bostezaron a la vez.
Loki abrió los ojos; encontrándose con el rostro de su hermano que lo observaba de igual manera; ambos sonrieron.
—Eso fue… magnifico —dijo Frigga estremecida. Sus hijos la miraron confundidos.
—¿De qué habla? —preguntó Loki silenciosamente.
—No lo sé… —respondió Thor de igual manera.
—¿Ya este loca? —preguntó Loki seriamente.
—Creo que sí…
—Chicos, los estamos escuchando igual —comentó Odín alegremente. Thor se sonrojo.
—Ya lo sabía —confesó Loki traviesamente.
—¿Aun así dejaste que dijera que mamá estaba loca? —preguntó Thor frunciendo el ceño.
—Sí —aceptó Loki sonriéndole.
—Te perdono porque eres lindo —habló Thor en el oído de Loki.
—¡Cállate! —chilló Loki sonrojándose. Thor rio sabiendo que su hermano se había sentido alegre por el cumplido.
Llamaron a la puerta.
Frigga se levantó y caminó hacia la puerta. Todos silenciosamente de acuerdo en mirarla caminar de forma elegante. Frigga asiente al mensaje y cierra la puerta. Voltea y levanta una ceja; su esposo e hijos la miraban embelesados. Prefirió ignorarlos.
—El mensajero dice que las cosas están listas —dijo volviendo a sentarse.
—Bien… —Odín pensó un momento—. Chicos, para la cena se ha preparado un banquete de celebración —anunció—. Por Thor, y por nuestro héroe —dijo sonriendo.
—Genial —dijo Loki ansioso.
—Todos te van a amar —dijo Thor intentando tranquilizarlo. Loki le sonrió.
—No almorzaron, así que espero que coman algo antes de que comienzan a lavarse y prepararse para el banquete —pidió Frigga con voz de mando. Loki asintió.
—Yo obligare a Thor a comer —prometió Loki.
—¡Hey! —reclamó Thor frunciendo el ceño—. Es solo que no entiendo porque tenemos que comer antes si luego hay un gran banquete…
—Para que tu cuerpo tenga energías —respondió Loki como si su hermano fuera un estúpido. Frigga asintió.
—Loki tiene razón, debes comer algo, aunque sea una fruta —dijo Frigga con firmeza. Thor asintió.
—Bien, pero Loki me dará la comida como si fuera un bebé —dijo Thor divertido.
—¡No! —reclamó Loki—. Entonces Thor debe cambiarme los calzones como si me hubiera hecho… —Fue interrumpido.
—No importa como comerán, solo háganlo —dijo Frigga frunciendo el ceño—. Y no, Loki, no te harás en los pantalones —añadió. Thor comenzó a carcajearse mientras Loki refunfuñaba.
—¡No es justo! —reclamó—. Thor puede ser un bebé pero yo no puedo hacerme en los pantalones. —Frunció el ceño.
—Yo te dejare ser mi bebé —dijo Thor para que Loki no se enojara.
—¿En serio? —pregunto ilusionado. Le gustaba cuando Thor hacía de todo para complacerlo.
—Sí —Asintió—. Si quieres jugamos, tú serás el bebé y yo el papá —afirmó con seriedad.
Loki negó con la cabeza—. Yo también quiero ser el papá.
—Pero un bebé no puede tener dos papás —dijo Thor frunciendo el ceño—. Necesita de una mamá.
—Entonces adoptaremos un bebé desamparado —afirmó Loki—. Para que tenga una buena casa. Sería un príncipe —añadió reflexivamente—. Y con nosotros como padres no necesitaría una madre.
—Viviría muy bien en el palacio —asintió Thor—. Y sería muy amado…
—Luego planean una adopción —dijo Odín divertido—. Ahora necesito que coman, y luego se vistan apropiadamente; son lo más importante en el banquete, así deben estar listos —pidió.
—Está bien, padre —dijo Loki con solemnidad. Thor asintió.
—Pero debemos adoptar un niño juntos… algún día —dijo Thor mirando a Loki.
—Lo haremos —prometió Loki.
Frigga sonrió mirándolos.
—Nosotros iremos a prepararnos —dijo Odín—. Coman algo —añadió al final mientras besaba la cabeza de sus hijos.
—Ya escucharon a su padre, obedezcan —dijo Frigga despidiéndose de ellos con una caricia.
—Entonces… ¿te doy la comida, bebé llorón? —preguntó Loki sonriendo.
Thor frunció el ceño—. ¿Quieres que te limpie el trasero?
—Cállate —dijo Loki dándole la espalda.
—No te enojes —pidió Thor riendo divertido—. Sabes que sé que en realidad no estás enojado, ¿verdad?
—Lo sé, pero igual puedo hacerme el enojado para que hagas lo que quiero, ¿no? —pregunto Loki sin dar la vuelta.
—Claro que sí —afirmó Thor antes de abrazarlo.
Loki sonrió.