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La Mejor Jugada por Sputnik_Mi_Amor

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Mi corazón latía aceleradamente por el nerviosismo que sentía en ese momento. Afrontar la conversación que tendría y las preguntas que posiblemente me harían, era algo fácil pasar si lograba mantener la ecuanimidad, mas sin embargo, el tenerlas tan cercanas a mí y en ese estado, hacía que mi mente perturbara mis sentidos e ideas, lo cual hacia que mi otra idea se fuera a la basura. Inhale y exhale exageradamente, calmándome un poco para hablar de forma que mi voz se escuchara serena. 

-De que... -comencé a hablar segura, sin embargo mi voz me traiciono y mis palabras entorpecieron- De que... De que... ¿Hablar? 

-¿De qué queremos hablar?- Mireille se auto-pregunto para ayúdame a aclarar mi pregunta. 

Solo asentí con mi cabeza, pues ahora ya no me confiaba de mis palabras. Mireille rio. 

Sonreí nerviosa, para que Mireille pudiera ver que "no me encontraba nerviosa", sin embargo sabía que mi nerviosismo ya era muy visible. Para colmo del asunto, mientras Mireille me había hablado, me había olvidado de que Susan se encontraba de mi otro lado y que esta también se encontraba en estado "no razonable" y que se estaba molestando de que no la mirara a ella. 

Susan animo más su agarre de mi mano y en un movimiento rápido la paso por su cintura del lado derecho y la cruzo hasta poderla tomar con su mano izquierda. Este acto ocasiono que me alegara un poco de Mireille y que me acercara un poco más a ella, de forma que parecía que era yo la que la abrazaba por la cintura. Intente regresar mi mano, mas Susan me lo impedía, y claro que no pensaba en hacerme solo eso, no satisfecha al parecer con ese agarre, Susan inclino un poco su cabeza y oculto su rostro por completo en mi cuello, cruzando su mano derecha por mi espalda, tomo mi cabeza del lado contrario al que estaba y me forzó para no poder separarme ni un centímetro más, después de eso me comenzó a rozar con sus labios. Esto provoco en mi un escalofrió, no sabía muy bien si de temor o de otra cosa, pero sabía que no era correcto, pues la que aquí estaba abusando era yo por ser la que de las tres estaba sobria. 

-Mireille... Ayuda...- hable en un susurro a penas, pues el contacto de los labios de Susan en mi cuello me impedía razonar en todo sentido. 

De verdad esperaba que Mireille me rescatara, que de alguna forma razonara y se convirtiera en mi héroe del momento, más para mi desgracia no fue así, sino que al parecer disfrutaba el verme en esa situación. Extrañamente, aunque no lo fuera, esto parecía un interrogatorio planeado. La interrogadora y la torturadora. 

-¿Por qué te encontrabas con "Daniel" hoy?- Comenzó a atacar Mireille con preguntas, mientras jugaba con un mechón de mi cabello como una malévola villana y pronunciando el nombre de Daniel como si le lastimara la garganta el solo pensar en pronunciar el nombre. 

-¿Qué? ¿Todo esto es solo por esa tontería? ¿De casualidad eso les tiene que importar?- hable en parte sorprendida y en parte molesta, esto era demasiada tortura como para un tema que era en realidad una cosa muy simplona. 

-Susan...- Mireille hablo muy malévolamente, la mire con miedo y comencé a negar con la cabeza, a modo de súplica- un poco más cerca de la oreja. 

Para estar ebrias, estas chicas sabían muy bien lo que hacían. 

-Has dicho que mantendrías eso en secre... 

Susan detuvo su contacto por un momento, y sonrió de medio lado, se acercó nuevamente pero esta vez me beso un poco más arriba, justo debajo de la oreja. 

Era inevitable eso me había hecho doblegar por completo. Mis intentos de alegarla eran ahora completamente patéticos e inútiles, pues mis fuerzas habían cedido y comenzaban a abandonarme. Cerré los ojos y me mordí el labio inferior en un intento de frenar el deseo que comenzaba a crecer rápidamente en mi cuerpo. Pude sentir como Susan, con su mano derecha que cruzaba mi espalda y mantenía hasta ahora en mi nuca, comenzaba a posarse sobre el lado de mi oído y obligaba a mi cabeza a girar, algo que para mí fue imposible de detener, Susan no se despegó de mí en ningún momento y antes de que pudiera reaccionar en contra de cualquier forma, Susan me beso apoderándose de mi apasionadamente. 

Nuevamente lo había hecho y como la última vez, nuevamente para mí era difícil resistirme, aunque me sentía culpable del estar cooperando con esto. No podía alegarla, el sentir el contacto de sus labios, en lugar de inquietarme, me hacia desear. Si Mireille y ella no se llevaran bien, desde quien sabe cuándo, esto no estaría pasando, Susan no hubiese estado en la cafetería, Susan no hubiese estado en mi departamento hoy, y por ende ella no estaría besándome, ella no estaría a mi lado. 

El aire me comenzaba a faltar y suponía que Susan se había percatado de eso, pues se separó de mí solo unos centímetros, aun podía sentir el rose de sus labios, pero aunque aun estuviera tan cerca de mi logre respirar un poco o al menos me apresure a hacerlo antes de que Susan me volviera a besar. Nuevamente continuo besándome de la misma forma que lo había hecho hacia un momento, sin embargo esta ronda no se quedaría sola, pues entre mi muy confundido cuerpo, pude sentir como una mano comenzaba a hacerse paso de por debajo de mi ropa y tocaba mi vientre, ese contacto me erizo la piel al sentirlo, ¿Quién era?, si Susan tenía una de sus manos en mi cabeza y la otra sosteniendo un agarre en mi mano, sin duda alguna debía de ser Mireille, ¡Esto se estaba saliendo de control! no podía dejar que ellas, y en semejante estado, continuara con esto. Moví mi cadera hacia arriba en un intento no solo de apartar la mano de Mireille, sino para levantarme de ese lugar que se estaba convirtiendo en mi deseo más aterrador de realizar, dijo porque de verdad que no me importaría acostarme con Mireille de nuevo y mucho menos negarme a Susan, pero... ¡¿Pero en que estoy pensando?! O peor aún, ¡¿Por qué demonios no estoy pensando?! 

La mano de Mireille ya se encontraba en un punto crítico de altura sobre mi vientre, y la otra de sus manos deseaba comenzar a explorar dentro de mi pantalón, aparte de que Susan no podía dejar libre a mi pobre boca.  

De alguna forma, inexplicable, mi cuerpo reanimo sus fuerzas y de un solo movimiento me pude liberar de esas dos máquinas humanas de tortura sexual, así que levantándome de un brinco me escape de ellas.  

Mireille y Susan se miraron un momento y luego dirigieron su vista muy lentamente hacia mí, que me encontraba para frente a ellas totalmente agitada tratando de recuperar todo el oxígeno que Susan me había arrebatado, me miraron serias solo por un momento y seguidamente ambas sonrieron pervertida-mente de lado. 

-Ok, si lo piden así de buena manera... Se los diré ¿Felices?-  dije aun con mi cuerpo agitado y tratando de recuperarse. 

Susan y Mireille sonrieron alegremente y, acomodándose bien sobre el sillón y tomando sus vasos nuevamente, me dedicaron toda su atención. 

-Bien- dijo Mireille 

-Te escuchamos- aporto Susan. 

Entorne los ojos, pues de verdad creí que esto era una tontería, ni yo tenía porque explicarles nada, ni ellas tenían porque interesarse. Que ahora ya no puedo tener amigos, pensé. 

Comencé a relatar a las chicas el poco importante encuentro que tuve con Daniel, desde que lo encontré en el jardín trasero de la escuela, hasta que llegamos a la cafetería. La verdad es que quería ver sus caras de tontas cuando se dieran cuenta de que no había sucedido nada interesante en realidad. Conforme contaba la pequeña y boba explicación, pude ver las reacciones que tenían cada una de ellas por la plática que había sostenido con Daniel, aunque ella más bien parecían solo interesadas en porque Daniel me llamo "mi Brillit" y en porque beso mi mejilla, más que por cualquier otro cacho de la historia.  

Como era de esperarse, la historia resulto muy aburrida, cosa que les costó el peso del sueño a ambas chicas, no sé cuantas bebidas llevaban, pero suponía un número grande por el estado en que se encontraban. Mireille no pudo soportar mucho pues como a media historia se había quedado profundamente dormida y Susan no tardaría en ceder, sin embargo esta resistió hasta el final de mi explicación, y en cuanto finalice espere a ver cuál era su reacción. Rio. 

-Ahora vez que tu reacción fue absurda- dije cruzándome de manos burlándome de la embriagada y sexy chica que tenía frente a mi 

-Ya veo- dijo esta con su ya molesta sonrisita aun 

-Bien- continúe antes de que ella callera dormida- ahora tu dime ¿Cumplirás tu promesa y me dejaras en paz?... Solo compañeras ¿Recuerdas? 

-Pero si jamás te hice una promesa... Y aunque hubiese sido así, no la he rompido- hablo Susan burlándose de mi al hablar fingiendo seriedad 

-¿Como que no?- dije con molestia por sus burlas. Entendía que ella había terminado con Jeny, pero aun así ya no deseaba acercarme más a esta mujer 

-Hay muchos tipos de compañeras ¿A qué tipo querías ser? Jamás aclaraste eso, todo lo contrario- comenzó a hablar ella, y con un poco de dificultad se puso en pie y comenzó ha acercarse a mí- ... Cuando me has dicho que te tratara solo como una compañera, me has dado la libertad de tratarte como yo quisiera, pude ser una compañera que te ignorara, pude ser del tipo de compañera que es golpeadora y abusiva, puedo ser del tipo de compañera del que te haces amiga, pude incluso ser del tipo de compañera que se vuelve tu mejor amiga, pero no... Yo decidí ser del tipo de compañera que desea. 

Con cada palabra que salía de su boca yo quedaba mas sorprendida y ella se acercaba más y más, reduciendo el sonido de su voz, tanto que la última de sus palabras fue casi un susurro. Susan tomo mi mentón y tiernamente comenzó a besarme, pero esta vez su tacto fue un poco más delicado y lento, siendo para mí, como hasta ahora una maldita costumbre, le correspondí totalmente. 

Susan quería acercarse aún más a mí, haciéndome retroceder lentamente, y me di cuenta de esto hasta que caí sentada sobre el sillón que se encontraba tras de mí. Este acto provoco que me separara de Susan, y esto ella lo aprovecho para subirse en mí, y tomando mi rostro continúo con su beso. Su tierno beso se fue apango hasta que solo quedo un simple contacto, no me anime a separarla de mí, así que solo mire como la cabeza de Susan caía por un lado de mi rostro y se detenía recargándose en mi hombro, seguidamente sentí como todo su cuerpo se relajaba. La abrase y con un poco de esfuerzo me eche a un lado cargándola con migo, solo unos centímetros me costó levantarme del sillón para girar y recostar lentamente su cuerpo dormido de ella. La mire por unos segundo, frente a frente, observaba su placida expresión, era la primera vez que la miraba tan tranquila sumergida en un pesado sueño. Me aleje lentamente y me concentre en el siguiente problema que ahora tenía. 

-Bien- dije en voz baja, y pase mi vista de Susan a Mireille y de Mireille a Susan- la cuestión ahora es ¿Qué hago? 

Empecé a rogarle a mi cerebro que recuperara el conocimiento y que pusiera a trabajar a mis neuronas. ¿Qué podía hacer?, pensé, podía llevar a Susan a mi cama y acomodar a Mireille bien el sillón, no espera, ¿Por qué darle prioridad a Susan?, si hacia eso en cuando despertarla Mireille me reclamaría, aunque ahora ella y Susan son amigas así que no le importaría. Podía entonces cargar con las dos y que ambas durmieran en la cama y... ¡No! ¡Jamás! No podía acostarlas en la misma cama, diablos ¿De dónde habían salido esos celos?... ¿Por qué había desecho el otro cuarto? También podía dejarlas ahí donde estaban para que cuando despertaran sintieran el cuerpo adolorido y aprendieran la lección de que a la próxima deberían pensárselo dos veces antes de tomar y de intentar abusar de mí, ¡Pero que decía! Esto era más abuso de mi parte que de ellas, pues aquí la consiente era yo, aun así se lo merecían. Podía llamar a Marcos y pedirle que si podría venir por Susan, mentirle, y decirle que cuando llegue ella dos ya se encontraban así; ebrias y dormidas, pero, si le daba esa explicación se escucharía muy sospecho. Tal vez y funcionaria si no le doy ninguna explicación, pero él me preguntaría una, y si no le doy ninguna le preguntara a Susan el día siguiente, y si ella no se acuerda buscara una respuesta con migo, ¿Qué le diré?, "solo nos besamos no te preocupes..." "pues Mireille y tu casi abusan de mi..." "no ha pasado nada...", pero sino paso nada ¿Entonces por qué no le di una explicación a Marcos? No podía pensar y ya era tarde la noche ya estaba cayendo. Suspire, creo que solo me quedaba una ultima opción. 

 

Golpee con desesperación la puerta del departamento y no pare hasta que esta fue abierta por la dueña. 

-¡Que! ¡Que! ¡Que!- salió Shane en pijama tapándose los oídos 

-¿Estabas ya dormida?- pregunte extrañada al ver que esta ya se encontraba lista para dormir 

-No- contesto Shane seria y molesta 

-¿Entonces por qué has tardado para abrirme?- pregunte imitando su molestia 

-No he tardado- contesto aun molesta pero con más calma-  tú has sido la desesperada... Tarde lo que siempre tardo en abrir la puerta 

-¿A si?- dije y trate de recordar cuando había tardado, pero al ver que divagaba, decidí olvidarme de eso y hablar para lo que venía- ... Bueno no importa ya, necesito que me ayudes en un pequeño problema que me ha surgido, ¡Pequeño!, casi nada 

Shane se cruzó de brazos y enarco una ceja extrañada. 

-¿Qué pasa?... Ahora- pregunto sonriéndome burlonamente. 

Yo solo le sonreí inocentemente y me gire indicándole que me siguiera, ella cerro su puerta y me siguió. Pare frente a mi departamento y espere a que ella terminara de llegar, y en cuando lo hizo abrí la puerta y le cedi el paso hacia dentro del departamento. 

Shane entro y yo tras de ella y después cerré la puerta, Shane se quedó ahí parada mirando la curiosa escena que se encontraba frente a ella y después de un momento de curiosear el entorno, se giró hacia mí y hablo. 

-¿Debo preguntar?- dijo cruzado sus brazos y levantando una ceja. 

No sabía muy bien a que se refería, pero cuando agache la mirada para verme a mí misma note, a lo que ella se refería, me encontraba aun con la ropa mojada, cosa que se me había olvidado por completo. 

-De preferencia no- dije, con un intento fallido de querer limpiar mi ropa sacudiéndola estúpidamente, pues aunque la sacudiera, mi ropa no se secaría así de fácil.  

Shane sonrió burlonamente por mi forma de reaccionar y acercándose a Mireille la analizo un momento con la vista, pero no la toco, después camino hacia el otro extremo e imito su acción pero esta vez con Susan, al terminar su meticuloso y extraño análisis se giró hacia mí. 

-Bien, puedo notar que tanto Susan como Mireille tiene manchas de humedad en algunas partes de sus ropas- solo había empezado a decir esas palabras Shane, y yo ya me había puesto nerviosa- así que supongo que pasaste por un momento muy tenso, y por el alcohol puedo deducir que fue de verdad muy tenso... Y aunque no entiendo muy bien porque están en esas posiciones para dormir... 

-Digamos que fue autodefensa- dije interrumpiendo a Shane y después le reste importancia a esa parte y me apresure a hablar sobre lo que deseaba- ... A lo que te he hablado es para que me ayudes, llevándote a alguna de las dos 

-¿A alguna de las dos?- dijo con extrañeza Shane- es decir que podría decidir llevarme a Mireille y tú te harás cargo de Susan 

-No, espera, ¿Qué?- razone un poco más en mis palabras- no... Bueno, no lo sé, llévate a la que quieras, solo llévate a alguna, no importa quien solo te pedía el favor porque yo solo tengo una cama... Y es obvio que tres personas no podemos dormir en la misma 

-Sí, bueno... Y yo ¿Qué ganare con esto?- pregunto divertida Shane. Maldita me quería jugar sucio, molestándome, pero claro que no me dejaría 

-Si me haces este favor... Te prometo que borrare todas las fotos que le he tomado a Cat, ¡De verdad! Desde las comunes del día diario, las de cuando duerme, y hasta las de la ducha, y créeme que esas son mis favoritas. 

Espere su respuesta, algún golpe, algún reclamo; lo que fuera. Sin embargo creo que estaba de humor, pues simplemente negó con la cabeza y rio divertida. 

-Buen contraataque- dijo y después regreso a su seriedad- claro te ayudare, después de todo ya sabía que esto pasaría 

-¿A qué te refieres?- pregunte confundida 

-En la cafetería, cuando salimos las cuatro al baño, Susan y Mireille se la fueron hablando de cómo sacarte la información del porque estabas con Daniel... Que supongo en realidad no fue nada, ¿O sí? 

-¡A pero que malditas!, ¿Sabes qué? Mejor ayúdame ha sacarlas a la calle- bromee primero un poco, para que Shane riera, lo cual conseguí, y después hable un poco más seria- ... No, no ha pasado nada... En definitiva han exagerado 

-Eso pensé- dijo ella aun con una sonrisa 

-Por cierto ¿Ya no está enojada con migo? ¿Verdad?- hable un poco temerosa 

-No, no estoy molesta... Lo que pasa es que quisiera que me tuvieses un poco más de confianza- dijo ella regresando a su estado serio 

-¡Ho!, valla creo que alguien quiere ser mi mejor amiga... O acaso hay algo más...- hice una pequeña pausa y al ver que Shane no respondía, me sorprendí y continúe- ¿De verdad? ¿Enserio? Pues me alagas Shane... Y bueno no se bien sobre noviazgos, pero te prometo que todos los días habrá rosas y chocolates, y en las noches... 

-Ya para tus fantasías que no es verdad- me interrumpió ella antes de continuar con mis exageraciones- ... Solo me agradas, y eres la primera que pone así a Susan, lo note desde un principio, por eso me ofrecía a conseguirte el departamento... Así que no te alucines más con migo, eso se lo dejó solo a Catherine 

-Pero que linda... Y créeme que entre más la ignores, ella más se enamorara de ti- dije con severo sarcasmo, pero no hiriente. Solo le había dado un pequeño golpe bajo 

-Sí, señorita graciosa, veras que no es tan fácil ser muy yo- dijo Shane en su defensa, pensé que se había molestado, pero al ver que su rostro entristecía, confirme que no era el caso 

-Es decir...- la anime a que continuará, era la oportunidad de que por fin hablara claramente y no con metáforas como lo hacía para evadir esta conversación, 

-Tú conoces a Cat, siempre alegre, sociable e inocente- me alegraba que Shane por fin hablara, aunque me sentí un poco extraña- ... En cambio yo soy demasiado, yo, no soy como ella sino que todo lo contrario... De verdad me gusta Cat por todo lo que es y cómo se comporta, y de verdad entiendo que ella asegure que me quiere... Pero, y si no es así... Deseo más que nada que Cat este a mi lado, pero y si lo hago, y si Cat se vuelve mi novia, ¿Qué pasa si al final no soy lo que ella esperaba? ¿Qué pasa si al final decide que siempre no era la chica que ella pensaba que le gustaba?, se alegara y eso es a lo que le temo... Si me vuelvo su novia y algo sale mal ella se separara de mí, en cambio, en este momento aunque ella no esté al 100% a mi lado, en fin lo está, no como esperaba, pero lo está... Es por eso que me reprimo, ella no es mía más tampoco está lejos de mí, no puedo arriesgarme a que sea mía y de un momento a otro se pueda alegar. 

Escuche atentamente cada palabra formulaba, cada expresión que ella hacía, muy atentamente. Era en parte verdad lo que Shane decía, Cat era una chica muy inocente, recordé el día que la conocí, y muy alegre. Era evidente que Cat y ella era totalmente distintas, sin embargo, también sabía que ella se equivocaba al pensar que Cat podría cansarse y dejarla. Podía hablar y decirle lo que realmente pensaba Cat y lo que sucedía con esto, pero, ¿Me correspondía a mí? No era correcto que me sentara a escuchar a Cat para después contárselo a Shane y viceversa, esas palabras eran algo que ellas mismas se tenían que decir, frente a frente, con la persona, la voz y las palabras correctas, era mi opinión. Así que por ese lado no podía interferir, sin embargo podía brindarles mi apoyo. Simplemente con escucharlas y haciendo que ellas pensaran por sí mismas. 

No me percaté de que Shane me observaba hasta que esta me llamo sacándome de mis pensamientos. 

-¿Crees que hago mal?- dijo seria- por estar simplemente suponiendo cosas 

-Claro- dije con la misma seriedad. No le hablaba en realidad lo que yo quería decir, sino lo que ella esperaba, con el único objetivo de que continuara con sus ideas 

-Lo sé, no está bien... Y después de todo lo que les hemos hecho pasar...- Shane silencio y oculto su rostro entre sus manos 

-Bueno... No todo en esta vida puede ser bueno o correcto- comencé hablar yo, lo cual provoco que ella levantará su vista- ... Lo que no quieres que suceda de un día para otro, está haciendo que pase a largo plazo. Como una muerte prematura... Pero ojala y fuese así de fácil, que cada cosa que viene en nuestra vida, llegara con todo y su fecha de caducidad, ¿Te lo puedes imaginar? Que antes de iniciar un proyecto, se nos siguiese si este funcionara o no, que antes de planear unas vacaciones, se nos avisara si nos divertiremos o no... Que cada vez que conozcamos a una persona, se nos advirtiese si nos hará daño o no. Si fuera así, sin embargo, parte de los eventos de nuestras vidas, si no es que todos, perderían gran parte de su encanto e ilusión. Puedes seguir así y mirar a Cat desde una distancia razonable, o puedes abrazarla durante ese pequeño, pero te aseguró maravilloso, milésima de momento. Después de todo eso es lo único para que se nos da nuestro despreciable deseo, ya lo he dicho una vez. Puede ser un momento de tu vida o el resto de ella. 

Shane se quedó un momento sumergida en sus pensamientos, justo lo que espera. 

Comencé asentir mi cuerpo pesado y caliente, suponía que era el hecho de que podría estar teniendo sueño. La noche ya era muy evidente. Pero no hice movimiento alguno, me mantuve seria esperando alguna otra respuesta de Shane, sin embargo esta aun no aparecía. Ella y yo nos encontrábamos aun paradas, en ningún momento nos habíamos sentado, Shane frente a mi le daba la espalda a Mireille y yo a Susan. 

Así que sin previo habido sentí como dos manos pasaban cada una por un lado y me rodeaban el cuello abrazándome por mi espalda. 

-¡Ha!- solo pode dar un grito de desprevención, pero sin moverme de mi lugar pues ella abrazo me había impedido cualquier movimiento. 

El grito que di había sacado a Shane de sus pensamientos, y con sorpresa y sus levanto su vista hacia mí, para después del momento de susto, se riera divertida. 

-¿Qué pasa he?- dijo Susan en un susurro tras de mi espalda- ¿Por qué tanto habla que no deja dormir? 

Susan aflojo su agarre de mi cuello y comenzó a bajar sus manos delicadamente, pero a paso rápido. Tome sus manos de por encima para intentar alegarlas. Sin embargo antes de que pudiera hacerlo, Susan ya había introducido sus manos por debajo de mi ropa mojada y ahora jugueteaba con mi vientre. ¡No más tortura por favor!, rogaba mentalmente.  

-Ok... Bueno...- dijo Shane levantando una ceja y con una sonrisa burlona de medio lado- creo que entonces parto con Mireille. 

Me olvide de las manos de Susan que aun jugueteaban debajo de mi ropa, y me concentre en detener a Shane, pero sin moverme de mi lugar. Ella dio media vuelta y comenzó a cargar con Mireille. 

-¡No!, espera, vamos... Shane- dije estirando mis manos hacia ella. 

Me ignoro. Termino de cargar a Mireille y se dirigió a la puerta y con un poco de dificultad la abrió. 

-Tú también deberías meditar tus palabras- dijo y me giño el ojo, después termino de salir del departamento y cerrando se marchó. 

Maldición, Shane juro que me vengare por esto, pensé. Ahora tenía que ver cómo podía quitarme a Susan de encima, dormirla y darme una ducha, para después ir a dormir. Esperaba que no fuera tan difícil, pero no sabía, si por sueño o por cansancio, pero me sentía muy agotada. 

-Vamos linda- dije a Susan que aún estaba muy entretenida con migo. 

Comencé a caminar con ella colgándose un poco de mi espalda, y me dirigí a mi habitación. Entre, y dándole la espalda a mi cama, haciendo que Susan quedara entre ella y yo, solté su agarre y esta cedió sobre la cama, quedando sus pies aun fuera de esta. Me gire quedando frente a ella. Sin embargo nuevamente Susan se paró, quedando sentada en la cama, con migo frente a ella, levanto sus manos y torpemente, intento desabrochar mi pantalón. Le di un manotazo, haciendo que sus manos se retiraran, sin embargo nuevamente las levanto e intento otra vez desabrochar mi pantalón, nuevamente la aleje, y esta vez la empuje por los hombros para que callera acostada sobre la cama. Susan se recostó nuevamente, y esta vez no intento levantarse más, pero si continuo con su manía de querer desabrochar algo. Esta dirigió sus manos a su pantalón e intento desabrocharlo, la tome por las muñecas y se las aleje de esa zona. Forcejeo un poco, pero después de un momento, el sueño le gano y quedo por fin dormida, deposite sus manos, que aun sostenía, una a cada lado. 

-Trata de ya no despertar- dije en un susurro, tome sus pies y la subí completamente a la cama, y después de comprobar que ya no se movía me dirigí al baño, para por fin ducharme un poco. 

No tarde más de unos cuantos minutos, y ya con mi pijama puesta me dirigí hacia la habitación, con la esperanza tonta e ingenua de que Susan se había quedado como la deje. Si claro, demasiado bueno para ser verdad.  

Cuanto entre pude ver que, aun Susan dormía, pero se encontraba recostada de manera diferente a la que la había dejado y que a parte ya no tenía su pantalón puesto, había quedado solo en ropa interior, pero por fortuna aunque también se quitó la parte de arriba, no había quedado en ropa interior, sino que tenía puesta una manga corta negra que seguro y llevaba debajo de la otra .Camine hacia la cama y la observe un momento, mi cuerpo se sentía demasiado débil, esto ya no parecía causa del sueño. No quería dormir en la misma cama que ella, más por desgracia, mi cuerpo tampoco daba para más. Me deje caer sobre la cama, a un lado de ella, y me quede profundamente dormida. 

Notas finales:

Gracias por leer hasta el final y nos leemos en el siguiente capítulo…


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