Escucho el flash de una cámara y eso fue lo que lo hizo despertar. Parpadeo varias veces para enfocar la mirada hasta poder finalmente abrirlos y mirar bien. Era Rin con una mirada maliciosa y celular en mano tomando fotos.
-¿Rin? ¿Eh, que pasa?-pregunto con la voz más ronca de lo usual
Rin solo puso un dedo sobre sus labios en un gesto de silencio y fue cuando Makoto se dio cuenta de su alrededor. Haruka tenía su cabeza sobre su pecho, sus dos manos apretando su camisa y sus piernas entrelazadas, Haru aún seguía profundamente dormido. El castaño sintió sus mejillas ruborizarse y se congelo al ver como Haru se movía suavemente como acomodándose mejor sobre él.
Makoto no se movió por miedo a despertar a su amigo. Rin rio ligeramente y el castaño levanto la mirada para ver como el pelirrojo se levantaba y le guiñaba un ojo.
-Voy abajo con los gemelos, deberías dormir un rato más Makoto-le dijo
Rin salió de la habitación y Makoto bajo su mirada verde al pelinegro. Sonrió suavemente y con algo de timidez levanto la mano para acariciar ese cabello azabache tan suave de su amigo. Makoto atesoraba en su corazón todos esos momentos que pasaba con Haru a solas y podía ver facetas que nadie más conocía de él. Makoto quería disfrutar del momento por un poco más por lo que sin darse cuenta se quedó dormido.
*****
Rin se levantó del sillón donde se había pasado la ultima hora mirando televisión con los hermanos de Makoto y no había señales de su amigo y eso despertó su morbosidad. ¿Había pasado algo entre ellos? Se levantó y sin hacer ruido subió a la habitación del castaño. Lo que miro, lo hizo detenerse y esconderse detrás de la puerta entreabierta antes de que lo miraran.
Makoto estaba dormido pero Haru si estaba despierto. Se había acomodado de tal manera que estaba totalmente encima del más alto, con los brazos sobre el pecho del castaño y su barbilla recargada en ellas con su mirada azul encima del rostro de Makoto. Lo observaba de una manera tan intensa, como si fuera la primera vez que lo miraba. De pronto esos ojos azules que habitualmente se mostraban inexpresivos como su rostro, se tornaban en tantos sentimientos, como si sus ojos pudiera decir tantas cosas.
Y Rin deseo en ese momento con todas sus fuerzas poder saber leer al pelinegro como Makoto podía hacerlo o que el castaño despertara en ese momento para que pudiera ver lo que Haru quería decir con esa mirada. Pero una parte de él, la que quería creer con fervor, decía que esa mirada de Haru explicaba ese amor que sentía por el castaño más allá de una amistad.
En ese momento, cuando se dio media vuelta para retirarse con los gemelos, se prometió que haría todo lo que estuviera en sus manos para que Makoto y Haruka se hicieran pareja. Para que fueran felices y su futuro brillara aún más. Él era un romántico por culpa de su madre y Gou y sabía que sus amigos eran almas gemelas y que no serían plenos con alguien que no fuera el otro.
Rin sonrió y sacudió la cabeza. Sus amigos eran unos idiotas, llevaban años de conocerse y no eran capaces de ver los verdaderos sentimientos del otro.
Ese plan iba a funcionar. De eso estaba seguro.
*****
Makoto escucho su nombre, alguien lo llamaba pero él se sentía tan cómodo que no quería despertar. También comenzó a sentir unos suaves piquetes sobre sus mejillas.
¿Por qué no lo dejaban dormir un poco más? ¿Quién lo estaba llamando?
Vagamente recordó que se había dormido en el futon con Haru recargado en él y fue cuando pudo disipar su mente y abrir los ojos de golpe. Lo primero que miro fue azul, el cielo azul ¿o era azul del mar? Pero de pronto ese azul se dividió y formo dos círculos. Y eran unos ojos. Unos hermosos ojos que él conocía a la perfección.
Haruka Nanase.
Sintió sus mejillas ruborizarse salvajemente al ver que Haru estaba encima del él y que intentaba despertarlo porque en algún momento lo había apresado con sus brazos, como si dormido hubiera sentido miedo de que Haru se alejara de él. Abrió sus brazos para dejar libre a su amigo y se rasco una mejilla esquivando la mirada.
-Lo siento Haru-murmuro entrecortadamente-No me había dado cuenta
Haru no se movió y Makoto lo miro con curiosidad. Los ojos de Haru no se habían despegado de él hasta que aparto la mirada con un leve sonrojo en las mejillas y se levantó antes de salir del cuarto. Makoto solo lo miro irse sin entender que había pasado. El castaño suspiro colocando una mano sobre sus ojos e hizo una mueca. Posiblemente había incomodado a su amigo. Se había quedado dormido sin querer.
Se quedó mirando el techo un par de minutos y luego se levantó para bajar. Rin estaba con Ran en un sillón, Haru y Ren casi en el regazo del pelinegro en otro miraban un documental de animales marinos.
-Ren, Ran, ¿y mamá y papá?-pregunto
Sus hermanos voltearon el rostro y se levantaron para colgarse de sus brazos.
-¡Onii-chan! ¡Buenas!
Makoto sonrio y les beso suavemente una mejilla.
-Buenos días
Ren sonrió y regreso al regazo de Haru.
-Mamá y papá salieron con la tía Mei, dejaron el desayuno en el refrigerador y un pedazo de caballa para Haru onii-chan-explico la gemela
Makoto sonrió divertido al ver los ojos azules de su amigo brillar ante la mención del pescado. Rin chasqueo la lengua.
-¿Acaso no comes otra cosa, Haru?
Haru ni siquiera lo miro. Makoto acaricio el cabello de su hermana antes de entrar a la cocina para calentar el desayuno para todos. Se colocó el mandil que sus hermanos habían escogido para él y que le regalaron el año pasado. Tan concentrado estaba que no se dio cuenta de que alguien se había acercado hasta que se dio media vuelta y miro a Rin en el marco de la puerta.
Soltó un grito entrecortado y se llevó una mano al pecho. El pelirrojo rió y se acercó la palmearle los hombros.
-¡Rin, me asustaste!-se quejó el más alto
-Ya, ya, ya, perdón Makoto. Solo vine a ver si necesitabas ayuda
Makoto respiro hondos varias veces para normalizar su corazón y sonrió sacudiendo la cabeza.
-No, está bien, ve con los demás, eres un invitado Rin
Algo llamo la atención de Rin por unos segundos detrás de él antes de que su amigo se acercara invadiendo su espacio personal y tomarlo de la barbilla. Makoto sintió sus mejillas colorarse y trago saliva ante esa mirada carmesí que lo miraba fijamente.
-No me importa ayudarte, quiero hacerlo-dijo
Makoto abrió los ojos como plato y volvió a tragar saliva. Abrió la boca para decir algo pero las palabras no salieron y mejor solo asintió varias veces. Rin se apartó y Makoto pudo respirar pero de reojo miro la figura de Haru alejarse.
Juntos, rojo y verde, calentaron la comida y sirvieron la mesa. Rin los llamo y se sentaron. Fue un desayuno agradable donde la mayor parte del tiempo los gemelos se la pasaron contando cosas. Lo que le extraño a Makoto fue el hecho de que Haru parecía más serio de lo normal y no parecía prestar atención a lo que los demás decían, ni siquiera a Ren que le había pedido se sentara a su lado.
Terminando, Makoto recogió la mesa con Rin y lavaron los trastes, los gemelos habían arrastrado a Haruka arriba para que se cambiaran, irían al parque a petición de los gemelos, Rin se había apuntado también. Unos minutos después, subieron riendo de algo que Rin había dicho y cuando entraron al cuarto del castaño, miraron a Haru sentado en la cama ya vestido con la vista por la ventana*. Como no era la primera vez que Haruka se quedaba en su casa, ya tenía varios cambios de ropa en el cuarto de Makoto pero llevaba puesta una camisa de Makoto porque le quedaba grande. Makoto enarco una ceja pero no dijo nada.
-Makoto, ¿me prestas ropa?-indago Rin
Makoto asintió y busco en su armario algo que le quedara al pelirrojo. Le extendió un pantalón de Haru y una camisa suya. Makoto se quitó la camiseta que usaba de pijama y sintió un escalofrió cuando alguien le toco la espalda con las yemas de los dedos, ladeo la cabeza y se encontró con los ojos de Rin sobre su espalda.
-Realmente tienes una buena espalda, ahora entiendo la fascinación de Gou-dijo
Makoto sonrojo y se cambió rápidamente. ¡¿Qué demonios estaba pasando con sus amigos?! ¿Se estaban volviendo locos o qué?
*****
Rin sonrió al ver la chispa en los ojos de Haruka cuando él le coqueteo durante la mañana a Makoto. Alguien estaba celoso. Rin realmente se estaba divirtiendo con todo esto de emparejarlos y coquetear con Makoto, era gracioso ver como Haru reaccionaba.
Tomo su celular cuando lo sintió vibrar. Nagisa había hecho un grupo en whatsapp que llamo “Plan: Celos MakoHaru” donde los había agregado a todos. Gou había mandado un mensaje preguntando si ya iban para el parque. Sonrió mostrando todos sus dientes de tiburón.
Rin: “El plan sigue en marcha. Ya vamos saliendo de la casa.”
Nagisa: “Hay que usar el arma secreta 7w7r”
Momo: “Arma secreta?! Khe arma secreta?! o.O”
Nagisa: “La ternura de Ai-chan!! ;3”
Ai: “Eh?!! Yo?!”
Rin bloqueo el celular y chasqueo la lengua sintiéndose molesto. ¿Por qué habían metido a Aichiiro en todo esto? Era más que obvio que el chico peliplata no quería ser parte de esto. ¿Por qué Nitori había aceptado al final?
Y lo más importante, ¿por qué se sentía molesto por eso?