Tercer día del feriado largo. Esa mañana en el desayuno.
Naruto se mordió el labio divertido al darse cuenta del detalle en el cuello del moreno. El bloqueador lo había camuflado ayer, pero hoy sin el bloqueador se notaba ligeramente, ahí oculto tras el cuello de la camiseta, que era extrañamente bien alto.
Él había hecho esa marca, “esa noche”. Y con los intentos por mantenerlo oculto le decían que estaba consciente de eso.
<Tengo que hacerlo ahora>- pensó decidido, ya había pasado demasiado tiempo.
El desayuno se aplazó más de lo que esperaba. Ino había traído a un chico que lo había presentado con su nuevo novio. Sai era su nombre, y tenía rasgos parecidos a los de Sasuke, cabellos negros al igual que sus ojos y una piel incluso más pálida que la del moreno. Lo había conocido en la disco apenas ayer, y según contaba emocionada fue amor a primera vista.
El chico no decía casi nada, pero sonreía a todo lo que decía Ino. La sonrisa de Sai era extraña, casi forzada pero daba la intención de que era algo sincera, así que no les pareció un mal chico, aunque la mayoría estaba de acuerdo que era extraño.
Luego de una larga conversación todos se fueran a sus habitaciones a alistarse para ir a la playa.
No habiendo ya casi nadie cerca el rubio fue corriendo a alcanzar a Sasuke en el elevador, apenas entro en el cerró las puertas para que nadie más entrara. Pero apenas empezó a moverse el ascensor entro en pánico y dijo lo primero que se vino a la cabeza.
-Tienes… en tu cuello- dijo señalando la marca.
Sasuke de inmediato se tapó más el cuello y lo miro molesto, pero también algo nervioso, oculto su rostro entre sus cabellos.
-Solo es un piquete de mosquito- dijo con más indiferencia de la que esperaba.
Antes de ver o sentir algo más el rubio solo se quedó con la respuesta en su mente.
<¿Por qué contesto así?>- pensó casi molesto.
No había nadie más, no tenía por qué mentir o aparentar otra cosa.
Entonces llego la conclusión, o no recordaba nada o quería olvidar e ignorar lo que paso. Esa era respuesta, no fue más que una humillación o cualquier otra cosa para él. El licor le había hecho que se comportara de “esa” manera, y no había nada más tras de ello.
Su mente empezó a cerrarse, todos sus sentidos se bloquearon. Cuando se abrieron las puertas al llegar a su piso salió en dirección a la habitación. Tenía que calmarse, así que entro de frente a la ducha.
Tenía que aceptarlo, prometió que fuera cual fuera el resultado lo aceptaría. Así que enfrió todo, bloqueo lo que estaba sintiendo en ese momento y salió después de un rato de la regadera.
-Esta vez sí que demoraste- se quejó Gaara entrando al baño.- Hace calor, yo también necesito un baño.
Fue entonces cuando Naruto se dio cuenta de que Sasuke estaba en el otro extremo arreglando sus cosas, con una calma que aturdió su cuerpo, pero tomo un respiro y el también empezó a alistarse para salir.
-Me voy a adelantar, ¿podrías avisarle a Gaara?- sin esperar respuesta salió de la habitación.
Sasuke estaba sumido en sus pensamientos, se quedó confundido con todo esto. No sabía que pensar ni nada, todo esto hacia su cabeza un lio, y como siempre lo ponía de malas. Y en esos momentos no sabía si quería tratar con él o no, si quería golpearlo hasta dejarlo irreconocible o solo…. Soltó un suspiro cansado, no tenía ni idea de lo que quería.
Pero también sentía que perdía algo; esa idea golpeo su cuerpo y empezó a sentir un vacío que conocía muy bien.
. . .
Cuando el moreno llego con los demás, se dio con la imagen del rubio jugando con su prima en hombros, intentando hacer caer a Sakura que estaba en los hombros de Kiba. Se sentía tan extraño a su diversión que opto por quedarse sentado en la arena debajo de la sobrilla, acompañado de Shikamaru, quien como siempre estaba durmiendo.
Se empezó a preguntar si en verdad lo de esa noche había pasado. Si en verdad había aceptado que le interesaba de cierta forma –gustaba- el idiota que no paraba de observar.
Como era que había llegado a esa conclusión, se había acostumbrado a tener al “idiota” siempre cerca, que sin darse cuenta esperaba que apareciera.
Pensó que diría algo, pero ya habían pasado dos días y no había pasado nada, ningún cambio, entonces que… ¿lo que sucedió era normal?, ¿ese idiota lo consideraba normal?, el moreno había bajado la guardia, él permitió lo de esa anoche, no fue nada fácil siquiera pensar en ello, pero entonces para Naruto no fue absolutamente nada…
“Te daré estos días que quedan, si no haces nada…me asegurare de mantener alejado a mi primo de ti” esas palabras resonaron en su mente otra vez.
<Parece que tú también estabas equivocada> pensó irritado. <No creo que esto sea mutuo, y tampoco que existiera>
Entonces como solía hacer siempre, reprimió lo que sentía.
Y así el término el tercer día.
. . .
El último día habían decidido ir al parque acuatico y luego en la tarde regresarían. Esa mañana entre Naruto y Sasuke apenas hubo unos intercambios de palabra; por lo menos el moreno se mantenía al margen de todo.
-Y cuanto esta la entrada- pregunto Shikamaru, el parque era mucho más grande de lo que esperaba.
Todos se quedaron viendo los toboganes que sobresalían del lugar.
-Relájate- hablo Ino con una sonrisa orgullosa- conseguí pases gratis- dijo sacándolos de su bolso.
-Waoo- dijeron al unísono.
-Y logre uno extra para ti Sai- agrego un con un poco de timidez.
-Gracias- contesto con una sonrisa.
Ambos se quedaron viéndose ignorando lo demás.
-Cof, cof- interrumpió la pelirosa- tenemos que entrar-
El parque acuático era enorme, había una zona para niños, otra de tamaño normal y otra que ocupaba más de la mitad del lugar, en esa había tres toboganes; y en el más alto te podías deslizar solo o en pareja encima de un flotador, era una gran caída, con grandes vueltas y bajadas casi como una montaña rusa, y al terminar te daban una foto. Decidieron que después de un rato subirían a ese. Primero querían disfrutar, nadando y jugando.
Cuando todos estuvieron listos entraron a la piscina sin esperar nada, pero como siempre Sasuke era la excepción. Al poco rato de entrar en el agua las miradas se quedaron fijadas en las chicas, en especial en Naruko que estaba con un bikini naranja que llamaba aún más la atención de los chicos. Pero Naruto no se quedaba atrás, tenía unos shorts también naranjas pero con bordes negros; las chicas parecían comerlo con la mirada, sin embargo todo eso era ignorado por el rubio.
Naruto intento portarse normal, hacia bromas, y sonreía cada vez que podía; pero Sasuke se había quedado como siempre bajo la sombrilla. Naruto no quería resignarse, quería llevar bien las cosas, quería que todo lo que habían avanzado como “amigos” se mantuviera intacto, y en eso no iba a dar vuelta atrás.
. . .
Después de un buen rato de juegos, Naruko decidió que era buena idea relajarse bajo el sol un rato, su primo todavía seguía compitiendo con los demás chicos en juegos que consideraba de niños, según ella.
-¿No tienes calor?- le hablo al moreno acercándose a sus cosas. Sasuke estaba con su ropa de baño, con una camiseta y unos lentes de sol; parecía que estaba durmiendo pero la rubia sabía que no.
-No- contesto seco.
-Eres un pesado- respondió.
No hubo respuesta. La rubia suspiro cansada.
-Se te agota el tiempo- dijo al aire-
El moreno volteo ligeramente a verla.
-Eso esperabas que dijera- contesto con indiferencia- puedo leer fácilmente a las personas, y ahora tú no lo estás pasando nada bien-
No hubo respuesta.
-Si no quieres decir nada, esta bien. Pero por lo menos finge que te diviertes-
-No es divertido en lo absoluto-
-Entonces por qué no paras de observarlos-
-¡Tú!- se calló al verla tan cerca de él.
-Quítate la camiseta-
-¿Qué?- contesto confundido.
-Voy a ponerte bloqueador, me di cuenta que las veces que no salías de sombra era porque no lo tenías puesto - dijo divertida.
-Te fijas en detalles sin importancia-
-Ya deja de gruñir, te obligare si es necesario- sonrió con malicia.
Sasuke se sentó y se quitó la camiseta como dijo, no estaba con paciencia para aguantarla; además de que el sol estaba más fuerte de lo normal.
Cuando empezó a echarle la crema no pudo evitar compararlo con la vez en que lo hizo Naruto, era muy diferente, era totalmente diferente. Su subconsciente hizo que su cuerpo empezara a extrañar y desear el contacto del otro, y no hizo más que sentirse patético.
El rubio se había quedado viendo la escena desde el agua, desde cuando su prima era tan amable con Sasuke, y por qué Sasuke era tan normal con ella, como era posible que se quitara la camiseta con tanta facilidad. Como era que Naruko había logrado acercarse tanto para ser capaz de echarle el bloqueador. Porque Naruko, porque, porque.
-Bien ya estas, ahora ve a nadar- hablo como una madre dándole permiso a su hijo.
-Prefiero estar aquí- se volvió a poner su camiseta. Pero para cuando giro a ver a la rubia, esta estaba con una gran expresión de enojo.
-Idiota…- levanto su puño- eres un obstinado cabeza hueca. Juro que no volveré a ser amable contigo-
-Y…-
-Moh, eres un…-
Naruto seguía observándolos, ahora estaban peleando como solían hacerlo; hundió su cabeza en el agua intentando calmar su rabia –celos-.
-No tienes ninguna excusa para quedarte aquí secándote como una fruta deshidratada-
-Y que si lo hago-
-¡Naruko ya vamos a ir al tobogán!- grito Sakura interrumpiendo la discusión; estaba avanzando con los demás, arrastrando a Naruto que parecía molesto por algo.
Entonces a la rubia se le vino una idea.
-Lo que pasa es que no sabes divertirte, eres un aburrido-
-No me interesa divertirme ahora-
-Es eso o te da miedo-
-Miedo de que-
-Miedo de subir a ese tobogán y divertirte- dijo señalando al más grande
-Es un chiste, o que-
-Entonces sube-
-No tengo porque hacerlo-
-Miedo, tienes miedo- empezó a burlarse.
-Eres odiosa, si te callas y me dejas en paz iré.-
Naruko sonrió triunfante.
Al poco rato todos estaban en la cima a la espera de subir al tobogán. A Sasuke no le gustó nada estar tan alto, quiso ponerse al final de todos pero Naruko logro hacerle quedar casi en la mitad del grupo.
-Siguiente- dijo el encargado con voz monótona, parecía ser de los que hace todo mecánicamente.
Kiba fue el primero, el flotador era lo suficientemente grande para dos personas, pero el Inuzuka prefirió bajar solo. El encargado empezó a contar.
-Tres, dos, uno- y movió una palanca.
Kiba empezó a bajar con velocidad, gritando con euforia desde el inicio. Los siguientes en bajar fueron Shikamaru, Chouji y Gaara. El siguiente era Naruto, no se mostró muy animado ya que seguía algo perdido en sus pensamientos. Coincidentemente detrás de él estaba Sasuke, con Naruko al costado sujetándolo, y detrás de ellos Ino y Sai, y al final de todos Sakura que decidió bajar sola.
Naruto no dejo de mirar a la pareja detrás de él, hasta que se acomodó en el flotador.
-Tres-
-Se te cayó algo- le dijo Sai a Ino. Se agacho a recoger una pulsera, pero al hacerlo resbalo por un pequeño charco de agua en el piso, empujando a la persona delante de él.
Por el impulso que recibió Sasuke se soltó del agarre de la rubia, pero tropezó con un desnivel, que lo hizo perder el equilibrio.
-Dos-
No supo cómo, pero en su tropiezo termino sentado al lado del rubio. Naruto se quedó en blanco cuando lo tuvo tan cerca de un momento a otro.
-Uno- y movió la palanca.
Sasuke se agarró del flotador como pudo y empezaron a bajar. El moreno empezó a sentir como su estómago se separaba de su cuerpo, era una sensación frustrante, quería llegar al final de una vez y la altura en la que estaban no ayudaba en nada. Hasta que empezó a sentir la risa del rubio cerca suyo. Como podía estar así en una situación como esta, pensó enojado.
-Relájate- escucho muy cerca de su oído- te sentirás peor si no lo haces-
Entonces sintió el brazo fuerte del otro abrazándole la cintura, para sujetarse del otro extremo del flotador; sus cuerpos estaban más juntos y de cierta manera sentía más estabilidad, pero no pudo evitar sentirse raro al sentir el cuerpo desnudo del otro chocando con su piel también desnuda, al poco rato se alteró.
-¡Bum!- resonó en su pecho.
-No nece…-
No pudo terminar lo que quiso decir, otra vez el rubio se puso a reír y gritar disfrutando de la caída.
-Si quieres te sujetas al otro extremo- dijo con una enorme sonrisa al cabo de un rato.
Sasuke todavía sentía que se podría caer, así que hizo lo mismo y abrazo al rubio sujetándose del otro extremo; solo entonces se sintió más seguro y de cierta manera empezaba a disfrutar la sensación de la caída.
Naruto continúo riéndose y gritando hasta que una diminuta gota cayó en su garganta y le provoco que tosiera como si se hubiera atragantado. El moreno no pudo evitar querer reírse, pero se contuvo mirándolo con burla; hasta que el mismo rubio empezó a reírse mirando al moreno. Sasuke ya no pudo contenerse más, contagiado con la risa del otro empezó a reírse.
Cuando lo vio Naruto se quedó más embobado, estaba feliz, era una felicidad autentica y él lo había provocado. Se veía tan relajado, con una gran sonrisa; y lo que era más volvía a escuchar su risa. El momento pareció durar horas, hasta que llegaron al final.
-Aquí tiene su foto, gracias por subir- hablo una chica acercándose.
-Gracias- recibió la foto el rubio, saliendo primero del agua.
-Es una gran foto - comento la chica sin quitarle los ojos a los dos- se ven muy bien los dos juntos- dijo antes de alejarse.
Naruto apenas escucho lo último, se había quedado viendo la foto. Estaban los dos estaban sonriendo mirándose mutuamente. Una felicidad inundo su cuerpo, parecía que estaba flotando, un rayito de esperanza volvió surgir.
-Yo me quedo con eso- hablo el moreno quitándole la foto de la mano, el rubio hubiese reclamado al instante, sino fuera porque noto el delicioso tono de sus mejillas. En una felicidad absoluta volvió a la piscina y empezó a jugar con los demás.
-Y… ¿te gusto?- dijo Naruko acercándose al moreno que se estaba secando.
-Tch- contesto desviando la mirada
-A mí me pareció que te divertiste- dijo divertida
Sasuke oculto su rostro debajo de la toalla.
-Tsundere- hablo la chica al aire.
-Por qué te importa tanto- contesto al fin.
-Solo quiero ver feliz a Naruto, es así de simple-
. . .
-No se dejen nada, no quiero regresar- hablaba Ino pasando por los cuartos.
-Ya mamá- contestaron con broma.
No demoraron mucho en alistarse, salir y subir al tren que los llevaría de regreso; y Sai coincidentemente también tomaba ese tren, así que uno más se unió al grupo y logro que todos tuvieran un compañero de viaje. No hubo un gran cambio de parejas, y Sasuke en verdad estaba agradecido por ello; Shikamaru no le iba a causar problemas.
Quería pensar fríamente sobre lo que acababa de pasar en los toboganes, nunca había sentido esa euforia, sentirse tan feliz que empezara a reír; hacia mucho que no lo hacía. Y el causante de todo era Naruto; extrañamente con él bajaba la guardia al punto de olvidarse de todo lo demás; como si estar solo con él expulsara lo negativo.
-¡Bum!- volvió a sentir, pero esta vez resonó en todo su cuerpo.
Maldición, se dijo. Perder el control no era nada agradable. Se acomodó en su asiento y volvió a pensar, no quería llegar a esa conclusión tan rápido, pero significaba algo bueno la reacción que tuvo al ver la foto. Ahora extrañamente se sentía más relajado, pero “bueno”, que significaba ese “bueno” para él. Volvió a sentirse confundido, pero a la vez sentía tranquilo, al borde de la ¿felicidad?; su cabeza era todo un lio.
Volvió a repasar las cosas y revivió el momento en el que lo vio observando la foto que les sacaron. Al inicio era como una sorpresa, luego se iba tornando a una felicidad nada simulada, pensó que se estaría riendo de como salió la foto, pero era otro tipo de felicidad, una que le causo nervios y cierto grado de vergüenza, por eso se la quitó; y hasta ese momento no se atrevió a verla. La saco con cierto temor del libro donde la guardo.
Sus ojos al instante se dirigieron a ver al rubio. Estaba con una sonrisa que conocía bien, pero la mirada que tenía era nueva, estaba tan fija observando al Sasuke que sonreía también mirándolo; el moreno no pudo reconocerse, y eso lo hizo sentirse más avergonzado.
. . .
Cuando el tren llego ya en la noche, Sasuke se dirigió lo más rápido que pudo a su casa. Quería evitar a toda costa siquiera toparse con Naruko o el otro idiota en el camino.
Para cuando llego a su cuarto lo único que quiso hacer era descansar de todo, así que sin importarle nada se tiro literalmente en su cama intentando dormir, pero los pensamientos contradictorios no lo dejaban en paz. Por una parte estaba la idea de que había aceptado que le gustaba; de alguna forma, y que le ¿agradaba estar con él?, aun no comprendía; pero por otra parte había concluido que esa idea no era nada buena, no podía dejar que estuviera en su vida de esa manera, consideraba que no sería nada fácil hacerlo. Ahora realmente empezó a ser consiente que no le quedaba otra persona más que el rubio, si este se alejaba se iba a quedar completamente solo. Pero que importaba, se dijo a sí mismo; pero luego de un rato regresaron las contradicciones.
<¿Que debería hacer?>- pensó; por primera vez se sentía tan perdido respecto a algo. -<¿Quería estar con él?, ¿pasar el tiempo con él?>- muchas dudas empezaron a surgir en su mente, y con ellas poco a poco iba cayendo dormido. Mientras su subconsciente ya tenía la respuesta a todo.
. . .
-Espero que hayan disfrutado su feriado largo- hablo el tutor encargado del salón- es un poco raro a estas alturas del año, pero tenemos un nuevo compañero, sean amables con él-
Un chico de cabello negro y piel pálida ingreso al salón.
-Mucho gusto, mi nombre es Sai, espero llevarme bien con todos-
Al instante las chicas se quedaron prendadas de él, pero el aura de cierta Yamanaka las hizo calmarse.
-Ino tu sabia de esto- le pregunto Naruto, su carpeta quedaba detrás de ella.
-Bueno, algo así. Su tío consiguió trabajo aquí y por eso se mudó hace poco-
-¿Su tío?- pregunto confundido el rubio- pero y sus padres-
-Ah… bueno- respondió un poco incomoda- sus padres lo abandonaron al nacer, por eso su tío lo cuida ahora-
-L-lo siento- se disculpó el rubio- no quería…-
-No te preocupes, Sai lo trae sin cuidado- le sonrió la chica.
Naruto no pudo evitar pensar que de cierta manera su situación se parecía, tal vez podrían llevarse mejor de lo que esperaba.
-Muy bien te sentaras delante de Sasuke- hablo el profesor.
Sai asintió en respuesta y empezó a avanzar al lugar con su sonrisa forzada.
-Mucho gusto- saludo al moreno.
Sasuke se limitó a asentir con la cabeza.
. . .
-Ahora te tenemos de compañero, que coincidencia- hablo Kiba acercándose con los demás en el recreo.
-Quería que fuera una sorpresa por eso no dijimos nada- respondió Ino.
-Te lo tenías bien guardado- respondió Sakura molestándola- seguro estarás feliz de estar as tiempo con él.-
-Ah... bueno- se sonrojo la chica.
-Cómo eres nuevo aquí, no dudes en preguntarnos si tienes alguna duda- hablo el rubio.
-Gracias- respondió- entonces Naruto podrías enseñarme el lugar-
-Por supuesto- contesto animado- todos te daremos un tour-
Sasuke no soporto tanto ruido, así que se levantó de su sitio y se dirigió a la puerta.
-Sasuke parece enojado de algo- comento el chico.
-No te fijes, la mayor parte del tiempo tiene un humor de perros- le contesto Kiba.
Pero Naruto no pudo evitar seguirlo con la mirada hasta que salió del salón.
-Pero parecía disfrutar en la playa-
-Bueno si, fue algo inusual, una situación diferente- respondió la pelirosa.
Por un instante se quedaron en silencio todos.
-No hay que perder el tiempo, el recreo es corto- hablo Ino empujando a todos para empezar el tour.
Después de tanto pensar no había llegado a ninguna conclusión, Sasuke se sentía cada vez más frustrado, de alguna forma tenía que aclarar todo este lio, no podía dejar nada al aire. Y la única manera de hacerlo era hablando con el idiota.
Pero durante los tres días que pasaron desde que empezaron clases se la paso al lado del idiota pálido, las dudas se transformaron en rabia y esa rabia en ira. Cada vez que había tiempo libre o en el recreo, incluso en la salida pasaba tiempo con él; y como estaba sentado detrás de él causante era como ver todo en primera fila; y con la excusa según el idiota rubio de que se acostumbre al salón y a la ciudad, mostrándole lugares divertidos donde poder ir, que ni él conocía.
…
Era jueves y solo faltaba una gota para colmar el vaso. Había salido del salón apenas toco el timbre del receso, pero ya estaba cansado de estar afuera y toparse “casualmente” con el grupo que siempre estaba con el idiota pálido. Estaba por entrar al salón cuando reconoció unas voces.
-Sai se está llevando bien con todos, me alegro- escucho la voz de Sakura.
-Sí, se está adecuando rápido- contesto orgullosa Ino.
-Pero me parece que lo tomo cierto apego a Naruto- comento la pelirosa.
-Bueno, tiene sus razones.-
Sasuke no supo porque pero su cuerpo se tensó.
-¿Enserio?- pregunto extrañada.
-Bueno supongo que es raro, pero él es así.-
-Y cual es-
-Es que le conté un poco sobre Naruto y el accidente de sus padres, y creo que de cierta manera le intereso saber cómo sobrellevaba él con todo eso-
-Entonces es como que encontró a alguien que, de cierta manera, tiene un parecido a su situación- reflexiono la chica.
-Eso es lo que pienso- respondió la Yamanaka.
-Pero hay algo que no he dejado de plantearme- volvió a hablar Sakura- No te parece que Sai tiene cierto parecido con Sasuke-
-Por qué dices eso- pregunto curiosa.
-Buen solo es mi opinión, pero míralo de esta manera; ambos tienen el cabello negro, el mismo color de ojos, su piel es igual de clara. Y si hablamos de personalidad se parecen en que mantienen una misma expresión y son algo serios con todo.-
-Bueno es una manera de verlo, pero si es así, Sai sería una versión más divertida de Sasuke, más amigable-
-Que cruel- se quejó la chica- Sasuke no es tan malo, creo-
Por un instante la mente del moreno se nublo, luego empezó a maquinar y juntar todo; hasta que llego a una conclusión, un poco rara.
Y si solo le gustan con ese tipo de apariencia, cabellos negros, ojos negros, piel pálida. Y si lo que sucedió no fue más que una reacción hacia el fetiche que tenía; y ahora iba tras otra persona. Una ira mayor a la que había sentido surgió, iba a aclarar todo ahora.
El resultado de una mente cansada no era nada bueno.
. . .
Naruto estaba conversando tranquilo con su grupo habitual, incluido Sai, en una banqueta cuando sintió un aura oscura en su espalda.
-Sasuke…- apenas articulo palabra cuando lo vio, estaba con una cara del mismo demonio.
El moreno lo sujeto de la camisa y lo arrastro hacia la parte trasera, donde no había nadie.
-Se acaban de llevar a Naruto- comento divertido Sai.
-Irán a pelear a algún lado, siempre es así- respondió sin importancia Shikamaru.
-Ya me parecía raro que no pelearan hasta ahora- hablo Gaara.
-Es-espera Sasuke, porque estas así- hablo nervioso el Uzumaki acorralado en un callejón que había entre las aulas.
-Cállate- respondió con una voz gutural como el mismísimo Hades.
El rubio cerró la boca de inmediato.
-Estoy harto, no me gusta no tener una respuesta clara-
-Ah…-el rubio se quedó más confundido.
-Acláralo de una vez- dijo molesto.
-Que aclaro…-
-Lo de esa noche, y sabes bien a lo que me refiero-
-Espera, recuerdas eso-
-Cómo crees que no recordaría-
-Ah…- su mente no quería funcionar, todo lo que creía hasta ahora era erróneo.
-¿Por qué lo hiciste?-
-Que porque, pues por que tú no sabías y bueno, necesitabas ayuda y eso- intenta hablar con coherencia, pero su mente todavía estaba procesando todo.
-Entonces, si encuentras a otra persona en la misma situación harías lo mismo-
-¡¿Qué?!, ¡no!-
-Harías lo mismo con Kiba, Gaara o Sai-
-¡No!, eso sería asqueroso- ni siquiera lo pudo imaginar.
-Entonces te sentiste asqueado conmigo-
-¡No!, por lo menos yo no lo sentí así-
-Entonces por qué lo hiciste-
-P-porque era una situación especial-
-Porque-
-Solo vas a hacer preguntas, tú deberías decir algo también, te pareció asqueroso lo que hice-
-¡¿Que?! – desvió la mirada no esperaba que le hiciera esa pregunta; sentía que su rostro empezaría a calentarse en cualquier momento- y-yo estoy haciendo las preguntas- reclamo luego de un instante.
-Responde, yo ya te di mi respuesta. Para mí no fue asqueroso ni nada, yo lo hice porque quise hacerlo. Ahora responde, ¿para ti fue asqueroso?-
-Y-yo…- por primera vez titubeaba, por primera vez no sabía que decir.
-Responde- volvió a insistir, Naruto empezó a avanzar acorralando al moreno.-Te sentiste asqueado-
Sin respuesta.
-Odiaste lo que hice- empezó a notar el dolor que le causaba decir esas palabras.
Sasuke se quedó mudo.
-Si es así, solo dímelo; me disculpare y me mantendré alejado-
-No- apenas logro decir; empezó a sentir que sus ojos le empezaban a picar, y una presión extraña en el pecho.
Cuando Naruto vio que se había quedado estático, con la oscuridad tapando su rostro, supo que no debió haber dicho eso.
-Lo siento, Sasuke, no quise…- no pudo soportarlo más, era su culpa que reaccionara así; sin importarle nada lo cubrió con su cuerpo, abrazándolo.
-Lo siento- volvió a repetir- es solo que ya no podía soportarlo más. Me tienes loco, lo sabias-
-Cállate- emitió en un susurro.
Naruto sintió que ya no habría otra oportunidad como esta.
-Me gustas, no sabes cuánto- ya no podía callarlo más.
-Cállate- dijo con un hilo en su voz- e-eres un idiota, no puedes decir eso tan, tan fácilmente…-
-Es la verdad. Desde hace tanto quería decirlo- lo abrazo con más fuerza temiendo que lo rechazara.
Sasuke quiso levantar también sus brazos y aferrarse a él.
-Pero si no quieres nada, lo entenderé; no debe ser normal que un tipo te diga estas cosas, solo… déjame quedarme más tiempo así- hundió su rostro en el cuello del otro- Sasuke…- dijo en un suspiro.
Y luego en un instante separo de él.
-Me gustas- le volvió a decir con una gran sonrisa, pero al no haber respuesta empezó a avanzar.
-Yo –hablo al fin el otro.
Naruto paro en seco.
-Yo no sé nada de estas cosas idiota- se quejó, pero se notaba un cierto temblor en su voz.
El rubio guardo silencio.
-No sé cómo hacerte entender- reclamo, pero sus mejillas se empezaron a tornar rojas hasta la punta de sus orejas- pero crees que dejaría que pasara algo así, sin más. Y-yo te permití hacerlo, usoratonkachi-
Naruto entendió perfectamente todo.
-Que tan cabezota puedes ser- dijo acercándose en un instante a él. Lo tomo por el rostro y lo acerco a él hasta que chocaron sus alientos- Es un sí, verdad- y sin esperar más junto sus labios y empezó a besarlo con el deseo que había estado aguantando hasta ahora.
Lo único que hizo Sasuke fue dejarse llevar, hacia tanto que su cuerpo deseaba esto; hasta que sonó el timbre que sonaba el término del receso.
El rubio se separó ligeramente para respirar, ambos estaban agitados.
-Tenemos que irnos- logro decir el moreno con la poca conciencia que le quedaba.
-Solo un momento más-
-Que…- no pudo terminar, Naruto volvió a besarlo, pero esta vez en el cuello; donde empezó a darle una combinación de mordidas y succiones, que hicieron estremecer el cuerpo de Sasuke, por lo que se sujetó de la ropa del otro.
-Oye, idiota llegaremos tarde- logro quejarse.
-Andando entonces- hablo separándose del otro.
-Usoratonkachi- dijo en un casi puchero. Pero el gesto se vio interrumpido cuando el rubio sujeto su mentón e hizo que levantara un poco el rostro para besarlo en la frente.
-¡I-Idiota!- reclamo, esta vez golpeándolo en el estómago; lo tomo tan desprevenido que no pudo evitar la vergüenza. No quería mostrarle esa expresión, así que empezó a avanzar en dirección al salón, no sin antes cubrir bien la marca que se estaba formando en su cuello.
“…Desde la primera vez que nos tocamos…
Cuando tu pones tu cuerpo encima del mío,
cada vez que me levantas hacia el cielo y las estrellas…
tu me pones sentimental…
hay una energía cuando me abrazas
cuando me tocas,
puedo sentirlo, cuando me abrazas,
cuando me tocas…
el contacto de tus dedos,
el olor de tu persistir,
mi mente corriendo enloquecidamente,
con recuerdos de tu sonrisa”
Powerful - Major Lazer, Ellie Goulding & Tarrus Riley