Estas vacaciones resultaron ser diferentes para Sasuke.
Se había rendido en pedirle a su hermano que le dejara ayudarlo con la empresa. Cada vez que preguntaba siempre era la misma respuesta “será para la próxima” y luego le daba un pequeño toque en la frente, eso le molestaba al moreno; pero de cierta manera se convirtió en algo especial para los dos. Ahora ya se había acostumbrado a pasar las vacaciones solo en casa, y ver rara vez a su hermano. No lo odiaba, ni mucho menos le molestaba estar sin él; más bien sentía un gran respeto y afecto (se podría decir apego) hacia él.
Pero esta vez Itachi fue el que le pregunto si quería ayudarlo en la empresa, por supuesto Sasuke acepto de inmediato.
El segundo lunes de vacaciones fue el primer día. Sasuke se había levantado más temprano de lo normal, pero su hermano ya estaba preparando el desayuno. Itachi estaba preparando su especialidad waffles bañados en miel, con unos huevos revueltos y un café, toda esta combinación era una de las pocas comidas que ambos disfrutaban comer.
Comieron sin mucho que decir. Itachi se puso un terno, mientras que Sasuke prefirió algo más sport, así que se puso unos jeans no tan ajustados y una camiseta con una camisa encima abierta, no quería parecer muy emocionado. Subieron en el deportivo de su hermano y se marcharon a la empresa. No hubo mucho tráfico a esas horas así que llegaron rápido.
Sasuke ya había ido y entrado varias veces a la empresa, pero no le habían permitido el paso a las áreas importantes. Desde la entrada la seguridad era muy organizada, y más cuando subieron al piso 16. Había un detector de metal, chequeaban los maletines, revisaban muy minuciosamente el carnet de identidad (ID), y por ultimo daban una revisión de prendas. Para Sasuke era demasiado, la empresa UCHIHA solo se encargaba de producir y vender equipo electrónico de última generación; abarcaba desde algo simple como un juguete capaz de recibir órdenes solo habladas - para niños, hasta un equipo completo de seguridad para la casa. No era algo para tener tanta seguridad, a menos que sucediera algo antes.
El piso 16 era el inicio de los departamentos importantes, este se encargaba de la supervisión de los otros pisos inferiores. No era algo demasiado interesante, pero Itachi empezó a caminar y supervisar a cada grupo de trabajo, al poco rato estaba rodeado de gente que le empezaba a ser consultas. Las personas de ese piso lo miraban con mucho respeto.
Sorprendentemente no demoro mucho en hacer todo ese ajetreo, y poco tiempo después volvieron al ascensor y subieron al siguiente piso. El piso 17 se encargaba de ver las opiniones y sugerencias de los usuarios, no era algo que se veía importante pero su hermano hizo lo mismo que el piso anterior, y tampoco demoro mucho. Cuando estuvieron en el ascensor, su hermano le sonrio.
-Te parece aburrido todo esto verdad- le dijo.
-No, en realidad…- no se le ocurrió nada que decir
-Si estas aburrido, pero una empresa no es nada sin los trabajadores y sobre todo los clientes-
-Entiendo- respondió pensativo.
-Pero ahora empieza lo interesante- contesto de nuevo con una sonrisa,- el piso 18 se encarga de producir ideas nuevas son la máquina que mueve todo aquí-
Cuando se abrió las puertas del ascensor todo parecía totalmente diferente a los demás, era más movido, había objetos por doquier, diseños de equipos y juguetes en las paredes y ventanas, y uno que otro prototipo. Itachi espero que su hermano al menos mostrara interés, pero nada.
- Bueno creo que esto llamaría más la atención de Naruto- admitió el moreno mayor casi riéndose.
Pero a Sasuke no le gustó nada ese comentario, al fin pudo librarse del rubio por al menos las vacaciones, y que su hermano lo mencione no le gustaba para nada. Que tenía que ver él en todo esto.
Empezó a hacer lo mismo que en los otros pisos, y luego subieron al siguiente. El piso 19 era el encargado de las ventas, la distribución de los productos y en si la economía de toda la empresa. Un leve brillo en los ojos de Sasuke fue detectado por su hermano.
-Parece que esto es más de tu estilo- volvió a admitir
El moreno menor no dijo nada.
Itachi empezó a caminar por el lugar, pero esta vez Sasuke noto algo distinto. A diferencia de los demás departamentos en este lugar la gente no era tan joven, se notaba que ya estaban años trabajando ahí, tal vez desde su padre; pero ese no era el problema, era la forma en cómo se comportaban cuando su hermano se acercaba a conversar o cuando tan solo pasaba cerca de ellos. Se sentía cierta hostilidad y el ambiente tampoco era tan bueno. Había personas caminado de un lado a otro preocupadas, estresadas. Pero eso no era lo peor, había cinco personas que parecían tener mucha más cantidad de años trabajando que cualquier otro, y esas personas solo tenían una mirada venenosa dirigida a Itachi.
-Señor Itachi, agradecemos como siempre su presencia en el departamento de ventas- una de esas personas se acercó a hablarles- creo que estoy manejando este departamento con grandes avances, no es necesario que venga constantemente-
-Yo no dudo de tus capacidades Danzo, pero necesito estar pendiente de todo en la empresa-
-Siento haber sido descortés- contesto mintiendo- pero dejando eso de lado me intriga que usted haya traído aquí a un niño---digo el joven Sasuke…- claramente se notaba recelo en las palabras.
-Él se convertirá en mi mano derecha en poco tiempo, me parece que eso era algo que había dejado en claro antes- contesto con una sonrisa, pero la típica mirada Uchiha.
-Por supuesto-
Sin más que decir Danzo se retiró del lugar junto a los otros cuatro. Su hermano termino de supervisar y se dirigió al ascensor, pero Sasuke empezó a notar que las miradas de recelo se hacían más intensas. Pero al igual que su hermano mantuvo la cabeza en alto sin inmutarse con nada.
Cuando al fin llegaron al último piso. El piso 20 era exclusivo para su hermano, el jefe de la empresa. No había ni siquiera una recepcionista o secretaria, esto era algo que no se esperaba Sasuke.
-Sorprendido cierto- hablo el moreno mayor- prefiero tener mi propio espacio para hacer las cosas más tranquilas, no me estreso de esta manera, y además nunca vi la necesidad que alguien tenga que organizar mi tiempo - se rio un poco.
-Es algo propio de ti Nii-san- contesto el moreno menor.
-Si bueno, tengo mi propia manera de hacer las cosas- contesto mas serio.- bien siéntate, vamos a hablar-
Sasuke se puso un poco tenso.
-Lo que le dije a Danzo es algo que pienso en realidad- lo miro a los ojos- Sasuke quieres formar parte de la empresa?- pregunto.
-Por supuesto!- se apresuró a decir, pero luego se aclaró la garganta - Claro que lo hare - volvió a decir mas serio.
-En verdad me alegra tenerte aquí- contesto divertido- pero dime que piensas de las miradas que hubo en el piso 19-
-Mientras hagan su trabajo y la empresa siga con las ganancias, no creo que exista problema con esas miradas, no afectan en nada-
-Esperaba que dijeras eso- contesto Itachi casi con un tono algo preocupado- tu manera de pensar no está del todo mal, pero no duraría mucho tiempo-
-A que te refieres- respondió confundido.
-A que falta algo más- contesto también con cierto tono de duda.
-Nos falta alguien más… alguien como…-
-Como…-repitió Sasuke.
-Alguien como Naruto-
-Que! estás hablando enserio Nii-san- contesto mas confundido- ese idiota no sabe ni cómo manejar su vida!-
-Yo no dije que sea él específicamente- contesto sorprendido y algo divertido- solo dije alguien parecido a él-
Sasuke se quedó callado, a el moreno mayor le divirtió la reacción.
-Bueno, pero a lo que me refería era que él tiene algo que hace que la gente no pueda evitar fijarse en él- reflexiono- es difícil ignorarlo, es como si tuviera un aura atrayente y te dan ganas de seguirle, es algo que nos falta a los dos-
-No veo en que ayuda algo así- contesto serio.
-Es simple con alguien como él la tensión del departamento de ventas disminuiría, no habría muchas disputas, el ambiente sería tan bueno como el que nuestro padre quería-
-Nos las podemos arreglar los dos- respondió.
-Puede que mejoren ciertas cosas, pero aun faltara algo-
<<No puedo creer que ese idiota tenga algo que le interese a mi hermano>>pensó molesto.
-Sería interesante tener a alguien como él - continuo si hermano.- (o tener a el mismo Naruto-susurro para si mismo)
El moreno menor no dijo nada más.
-Bueno aún hay tiempo, ya aparecerá alguien- hablo Itachi.
-Conmigo será suficiente, no hay necesidad de alguien mas- respondio Sasuke.
-Sí, lo sé – le toco el hombro – pero sería mejor si sonrieras un poco más- le sonrió.
Sasuke frunció el ceño en desacuerdo, pero este tiempo entre hermanos era lo que había estado esperando, realmente le gustaba pasar tiempo con su hermano.
Durante el resto del día Sasuke acompaño a su hermano con lo que quedaba de actividades, como juntas, presentación de nuevos proyectos, entre otras cosas. La empresa se encontraba en las mejores condiciones, y planeaban mantenerlo así.
Ya casi para terminar el día un hombre algo sospechoso para Sasuke apareció en la oficina de su hermano. Itachi le dijo al moreno que esperara cerca del ascensor, no iba a tardar mucho.
Sasuke se quedó observando la escena. El hombre tenía la boca y la nariz tapada por una tela, parecía una máscara, y lo único que se lograba ver con claridad era solo uno de sus ojos el otro lo cubría parte de su flequillo. Tenía el cabello plateado, debía ser solo unos años mayor que su hermano, bestia un terno azul marino.
Cuando empezaron a hablar, el moreno noto algo peculiar, su hermano lo miraba con una confianza absoluta, algo que no suele ser con nadie más que él. La conversación debía ser de algo serio porque la expresión del rostro de su hermano era algo que no veía casi nunca. Pero cuando terminaron de hablar Itachi se relajó totalmente y luego le dio un apretón de manos al extraño mirándolo directamente a los ojos.
El extraño salió primero del piso, pero cuando paso al lado de Sasuke este le miro a los ojos y luego le sonrió, era lo que logro distinguir por la forma que se plegó la máscara de tela.
El moreno no quiso preguntar nada por el momento. Cuando los dos morenos llegaron a su casa conversaron sobre la empresa. El primer día de Sasuke fue tan bueno como esperaba, y así continuaron el resto de sus vacaciones, al lado de su hermano ayudándolo en todo, participando abiertamente de las reuniones y decisiones. Sentía que estas vacaciones habían sido las más productivas al lado de su hermano, “trabajar” a su edad en una empresa y tener alto rango no era algo que le sucediera a cualquiera, estaba disfrutando de todo eso.
<<Seguro que ese idiota se habría dedicado a vagar en Canadá>> se burló el moreno.
. . .
Ya era la última semana antes de clases, se enteró por su hermano Naruto llegaría el jueves en la noche. Por fin podría ir a pedir la cámara que el idiota se olvidó de devolver. Iría el sábado en la noche a pedírselo, quería evitar verlo el mayor tiempo posible.
Llego el sábado, el moreno salió de su casa y fue caminando a la casa del otro. Se paró en la entrada y toco el timbre, mientras sonaba el ding-dong escucho que alguien se acercaba por detrás.
-Excuse me, will you let me go?- dijo una voz femenina.
Sasuke volteo hacia la voz, y se topó con una chica rubia de pelo realmente largo amarrado en dos coletas, tenía los ojos azules casi verdes, era realmente alta casi de su porte. Vestía una camiseta algo masculina pero los janes ajustados le daban el toque perfecto a su esbelta figura, y agregándole algo más la sonrisa que tenía era parecida a la de cierto chico que conocía muy bien.
La chica se aclaró la garganta.
-Disculpa voy a pasar- dijo en perfecto español. La voz era algo aniñada y se notaba que era uno o dos años menor que él.
La puerta se abrió al fin.
-Más vale que no seas tú Naruko, ya te íbamos a recoger al aeropuerto- el rubio apareció con una toalla que cubría su cabeza tapándole un poco la vista.
Había pasado cerca de tres meses desde la última vez Sasuke vio a Naruto, y había cambiado. Estaba más alto, ahora si se notaba la diferencia de porte, la mirada era de alguien más maduro, pero aún tenía esa profundidad y algo de su niñez típica; su cabello ligeramente había crecido, caía un poco por sus ojos pero seguía desordenado. Y lo que más llamo la atención fue que estaba solamente con una camiseta manga cero exponiendo unos brazos más tonificados y vestía unos shorts muy veraniegos, se notaba que recién había salido de la ducha por su piel, más morena, resbalaban algunas gotas todavía.
Antes de que pudiera decir algo la chica de atrás corrió hacia los brazos del rubio, al igual que él, Naruto se quedó sorprendido.
-Te extrañe mucho!!- dijo la chica apachurrándose más hacia el cuerpo del otro.
-Solo ha pasado una semana- el rubio alejándose un poco de ella la miro con ternura.
-Moh, es que no tenías ganas de verme- reclamo con un puchero infantil.
-Ya, ya, yo también te extrañe- levanto su mano y con suavidad le acaricio la cabeza.
Este momento le estaba molestando al moreno –realmente odiaba a las parejas- se aclaró la garganta.
-Eh! Sasuke!- dijo el rubio con clara sorpresa
El moreno realmente se estaba enojando, como era posible que ese idiota había estado ignorándolo.
-Y…. quien es esta persona?- pregunto la chica.