-mmmm mami ¿Qué es esto?
-¿¿¿aahhh??? -Kise tenía algunas de sus cosas regadas sobre la sala y Yuki le mostraba lo que parecía un libro –¡oohhh! es uno de mis álbumes cariño.
-pero este nunca lo había visto –al niño le gustaba ver los álbumes de sus padres, por supuesto siempre había mas fotos de Kise que de Aomine. Tal vez Yuuki ya se sabía todos de memoria y por eso le extrañaba el reciente hallazgo
-en realidad, ni siquiera lo recuerdo. Tal vez hasta son fotos de tu padre hahaha, espero que sean de las vergonzosas para poder molestarlo en cuanto llegue ¿Qué te parece? -el pequeño se encogió de hombros mientras se sentaba cómodamente en el sillón para hojear su reciente descubrimiento.
Kise lo observo en silencio, le fascinaba ver a su niño todo concentrado y serio, sobretodo porque ni Aomine mucho menos él podían comportarse tanto como Yuuki. Tetsuya frunció el seño mientras pasaba las hojas. A Kise no le agrado eso pero antes de que preguntara el niño hablo
-mami, yo creo que no podrás molestar a papá con esto, son todas fotos tuyas
-¿¿en serio??
Kise se sentó a lado de su hijo movido por la curiosidad, y en efecto eran fotografías suyas… de antes de que jugara basket. Entre los dos comenzaron a pasar las páginas. Había un patrón en todas las fotos, eran de todos los deportes a los que Kise había pertenecido y había botado.
-¡0oooh mira! Cuando jugaba tenis –Kise con una raqueta al hombro –¡ooh! y esta cuando estaba en el equipo de voleibol, ¿sabes? era muy bueno como rematador –Kise saltando sobre la red, pasando el bloqueo –¡aaahh! Es cuando nadaba, era bueno en todos los estilos pero la mariposa se me daba muy bien –Kise en traje de baño –mira, esta es de mi época como jugador de futbol, fui campeón de goleo -Kise dominando una pelota – ¡vaya! ya había olvidado todo esto, creo que pase por muchos equipo ahora que lo pienso –siguieron pasando las fotos y esta vez fue Yuki el que se detuvo en una
-¿y esta? ¿Qué jugabas? –Kise observo la imagen, era él con un bate y el casco puesto antes de su turno al bate
-es beisbol, cuando jugaba en la agencia se pusieron como locos, dijeron que no podía llegar con un bronceado de cara y brazos haahaha debiste ver la cara de mi manager casi llora hahaha, pero era bueno, era el cuarto
-¿el cuarto?
-aja, es uno de los limpiadores, hace que sus compañeros regresen a home…
-¿a home?
-exacto… ¡a mira! esta ya es del basket, debió ser la primera que me tome con el equipo o algo así
Kise no le dio verdadera importancia, pero para Yuki algo había cambiado. Aquel deporte le había resultado interesante. Seguía jugando con su padre a encestar, pero quería intentar otra cosa. Una tarde mientras Kise se compraba ropa Aomine se llevo a Yuuki a la sección de deportes. Por experiencia ambos sabían que Kise se demoraría horas escogiendo un solo pantalón y ellos no tenían porque soportar el castigo. Como de costumbre Aomine veía balones y tenis para jugar y en un primer momento Yuuki también pero mientras pasaba por uno de los muebles se encontró con toda una variedad de bates. Aomine no tardo en darse cuenta lo que veía su hijo
-¿que pasa Yuki? ¿No querías un balón nuevo?
-papi ¿quiero uno de estos?
-¿un bate? ¿Como para que quieres un bate?
-para jugar beisbol –Aomine parpadeo, ¿desde cuando su hijo sabia algo de beisbol?
-¿beisbol? Y ¿tu como sabes que con un bate se juega beisbol?
-mami me dijo…
Una hora más tarde, Kise parpadeo al ver a su hijo y a Aomine, ver al mayor con un nuevo par de tenis no le sorprendía pero Yuki traía un bate y un paquete de pelotas de beisbol, eso sí era nuevo. Aomine parecía querer golpear a Kise.
-¿Qué es eso cariño?
-es un bate Kise, ¿que más puede ser?
-eso ya lo sé Daiki pero ¿por qué le compraste un bate a nuestro niño?
-dice que quiere jugar beisbol… -aunque aquello no se lo esperaba, Aomine no podía negarle nada a su hijo y menos cuando se lo pedía en tono serio pero con los ojos más tiernos de los que el niño era capaz.
Pero comprar el bate solo fue el principio, resulto que al niño le encantaba y que si, en efecto también tenía talento para aquello. Cada vez le interesaba menos jugar basket…
-esto es tu culpa Kise, ¿por qué demonios le enseñaste esa foto?
-no lo hice apropósito, el encontró el álbum
-aun así es tu culpa
-¡eso no es justo! pero ¿qué vamos a hacer?
-pues ¿qué quieres que hagamos? Necesitamos buscarle un equipo,
-¿estás seguro?
-mmmm no me agrada para nada la idea. Pero tal vez cuando vea lo que es jugar en un equipo, se le pase el gusto y regrese a lo que es realmente bueno
Pero eso no paso, Yuki quedo completamente fascinado por el juego. El basket podía ser divertido, pero el beisbol lo era mucho más. Adiós al sueño de que el hijo de las súper estrellas del basket siguiera su legado.
El cambio de ciudad no fue una noticia agradable para Yuki, por suerte terminaría el torneo antes de mudarse, Momoi lloro, mientras que Ryo se limito a desearle buena suerte, había sido divertido jugar con él en el mismo equipo. Si, también el hijo de Satsuki había preferido el beisbol al basket. Kise se había deprimido un poco pero le agradaba mucho la idea de volver a la ciudad con Kuroko y Takao, había extrañado a sus amigos. Además que quiera ver cuánto habían crecido el pequeño Ei-chan y Jun-chan.
Aomine no esperaba que la primera semana de regreso en Tokio seria con semejante bienvenida. Le había oído a Kise decir por la mañana que Kuroko con Eijun los visitarían. Al regresar en la tarde del trabajo ya no los alcanzó, lo cual era una verdadera pena, quería saludar a su amigo, sin embargo el teléfono sonó
-¡Aomine bastardo! ¿Qué hiciste??? –Aomine alejo el aparato ante los gritos de Kagami
-Bakagami, no grites y no sé de qué demonios me hablas
-¿no lo sabes? ¿no lo sabes??? Eijun acaba de decirme que quiere jugar beisbol
-¿¿¿Aaaahhh????? –no pudo aguantar soltar una carcajada, su Yuki la había hecho, había jalado a sus filas al pequeño Ei-chan
-no te rías idiota, esto es serio
-mira tonto, no es mi culpa que a tu hijo le dé pena como juagas, que prefiera otros deportes hahahah
-cállate, que bien podría decirte lo mismo y ya te dije es tu culpa – de pronto se produjo una pausa y un quejido, al siguiente instante la voz de Kuroko se escucho algo lejana
-Kagami deja de hacer tanto drama… -un instante después la voz de Kuroko se oyó claramente en el auricular –bienvenido a la ciudad Aomine-kun…