La llegada y los recuerdos amargos de una infancia
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Los momentos de en que veo la Luna siempre veo en ella la imagen de un conejo, al igual que cuando veo las nubes o estrellas en ellas noto varias imágenes que cuentan una historia, a pesar de los años no puedo dejar de imaginar esas imágenes que en mis tiempos de niñez se bosquejaba en mi mente.
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Esa es... (Pronuncia asombrado el rubio al ver aquella gran puerta de entrada.)
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Naruto no podía creer que se encontraba ya en ese lugar, a simple vista al menos para el, parecía impresionante.
_ ¿Seguimos? (Pregunta el azabache sacándole de su ensoñación.)
Mientras daba unos pasos alejándose de la puerta de entrada y adentrándose a la aldea, el rubio nota como los aldeanos empiezan a mirarlo con un rostro de sorpresa y lo saludan amistosamente.
_ Hola Naruto
_ ¿Como estas Naruto?
Podía oír mientras caminaba por las calles y no entendía el por que todos le saludaban con respeto, con rostros sonrientes y otros saludando de manera respetuosa a medida que pasaba por su lado.
Tetsuya lo llevo hacia una oficina en donde se encontraba sentada una mujer de cabellos rubios piel de color porcelana ,unos voluptuosos senos y una marca color violeta en su frente quien se levantó rápidamente envolviéndolo en un fuerte abrazo.
_ Oh... Naruto que suerte que te encuentres bien.
_ Psbdjfkf...
_ Creo que dice que no puede respirar (Dice el azabache a la mujer.)
_ Ha... Claro. (Pronuncia la mujer apenada.) Es que me emocioné je je...
_ Entiendo pero Tsunade... Naruto... como decirlo... no es el mismo...
_... ¿A qué te refieres? (pregunta la mujer.)
Tetsuya empieza a contarle todo lo ocurrido y la pérdida de memoria que padecía el rubio momentáneamente, además de otros detalles que pasaron en aquellos seis meses en que Naruto se encontraba inconsciente.
_ Ya veo... (Dice con algo de tristeza la mujer rubia mientras suelta a Naruto mientras que este con desesperación se aparta un poco más...tratando de hacer que sus pulmones recuperen el aire.)
Luego de unos minutos la mujer sólo se limita a romper el silencio preguntando:
_ ¿¿Recuerdas a alguien... a mí Sakura, Sai, Kakashi, Hinata o alguno más de tus amigos que se te venga a la mente?? (Pregunta la mujer al rubio.)
_ No... Que yo sepa... sólo se por Tetsuya que yo sufrí un accidente. (Le contesta bajando levemente su rostro mientras que sus mechones rubios tapan sus ojos.)
_ Bien... no voy a presionarte a
Recordar, yo me llamó Tsunade Senju y soy la líder de la aldea de la hoja o más dicho de otro modo el kage de esta. ¡Mucho gusto mi pequeño!
_ Mucho... gusto. (Responde con algo de timidez estrechando la mano de la mujer con la suya.)
Tsunade limita las ganas de abrazar nuevamente al chico que considera como su propio hijo para no asustarlo más y soltando un suspiro, ahora que podía ver al rubio sus nervios pudieron calmarse un poco sin embargo aún seguía presente la preocupación debido a que aún no obtenía respuesta alguna sobre quien fue el verdadero responsable de lo ocurrido hace seis meses. Los sentimientos de culpa no se quedaban atrás. Ya que ella al igual que la mayoría cometió errores que ayudaron a desencadenar lo ocurrido.
_ Tetsuya-San me gustaría que sigas con Naruto un tiempo más si no es molestia, ya que parece que te tiene mucha confianza más a ti que a los demás. Si quieres puedes mandar un telegrama a tu aldea por medio de una de nuestras águilas mensajeras.
_ No será necesario. Yo lo iba a hacer de todos modos, ya mandé un mensaje cuando habíamos llegado a aldea de la arena. Más bien necesito hablar de otra cosa importante... Pero sería mejor hablarlo en otro momento.
_ De acuerdo. Deberían ir a tu casa Naruto.
_ ¿He? ¿Mi casa?
_ Si, a lo mejor viendo lugares y personas conocidas recuperaras algo de memoria.
_ Si supongo...
_ Bueno nos vamos
_ Hasta luego Tsunade-San
_ No me digas así pequeño...me queda mal, mejor Llámame Baa-chan (contesta con ternura ganándole un ojo.)
_ Je je je... De acuerdo Bachan. (Responde un poco más animado.)
Luego de que Tsunade le entregará una llave al azabache mayor. Los dos se retiraron encaminándose en donde se encontraba el apartamento del rubio.
Los puestos y calles se encontraban llenas de personas con actitud amigable que lo reconocía a pesar de que el no los reconocía, algo extraño para Naruto ya que los escasos recuerdos que habían aparecido en su mente eran de el siendo rechazado por todos los aldeanos, siendo aislado y en algunas veces golpeado. Todos aquellos recuerdos se juntaron en su cuerpo acumulándose en un gran escalofrío que recorría por su cuerpo desde la punta de los pies llegando a la médula de su ser,tratando de mantenerse en calma agarrándose a cualquier idea o cosa que lo distrajera.
_ ¿Pasa algo? (Pregunta el azabache mayor al notarlo un poco distante.)
_ ¿He? No ¿por qué? He he he... (Contesta el rubio saliendo de sus pensamientos.)
_ Bueno... es que me estas apretando mucho la mano. ¿Sabes?
Naruto al darse cuenta sólo le soltó rápidamente, bajando la cabeza para ocultar el color rojo que colores va todo su rostro.
_ Je je je no importa (Dice soltando una leve risa.)... más bien es genial es como si fuésemos familia (pronuncia ilusionado.) así como un hijo que trata de apoyar inconscientemente sus inseguridades, buscando refugio en su padre (Repite esperanzado, con los ojos brillantes mientras brillos imaginarios lo rodean.)
_……No déjate de joder... (Gritaba el rubio con los ojos como platos y un tic nervioso formándose en sí ojo derecho,)¡¡ Ya suéltame!! (Le gritaba Tratando de soltar el agarre de mano, pero sin éxito ya que el azabache no le dejo sosteniendo un agarre fuerte como si estuviera pegado.)
Después de tantos intentos de huida por el rubio que creía que el azabache mayor estaba loco o ya a su edad de treinta le había alcanzado la ancianidad de manera prematura, por su nivel de molestia. Ya estaban frente a la puerta del apartamento. Naruto no sabía que habían llegado tan rápido quizás debido a las idioteces de Tetsuya se olvidó de todo lo demás que estaba pensando.
El mayor saco aquella llave pequeña y abrió la habitación esperando encontrarse con el sofá, ya anteriores veces vino a la casa de Naruto así que ya sabía que objetos tenía y sinceramente todo lo ocurrido lo había agotado de diferentes maneras.
_ !!Ho Querido sofá cuanto te he añorado!! (Pensaba con alivio.)
No obstante su sorpresa fue otra al notar el aspecto de la casa. Las cosas se encontraban desordenadas y tiradas por doquier, los platos y trastes sucios tirados a un lado mientras cucarachas salían de estos. Basura tirada por todo el piso y por último la alacena y muebles del lugar que parecían abiertos un poco.
El azabache se encontraba en un shock nervioso con los ojos como platos meditando si asesinar o no al rubio por ser tremendamente cochino.
Mientras que el rubio entró sin preocupación estirando un poco los brazos y adentrándose al apartamento adonde se encontraba un sillón con ropa desparramada y algunos platos que corrió para sentarse a descansar.
_ Ha... Que cansancio.
_ ¡¡Que cansancio ni que nada!! Nos pondremos a limpiar primero.
_ Sehh... admito que está sucio pero podemos limpiar después de descansar un rato recorrimos mucho. Estoy cansado
_ Naruto esta casa apesta a diablos. ¡¡Levanta tu maldito trasero sarnoso de ese sofá y ven a limpiar!!
_ No, tú no me man... (El rubio se calló al ver el aura macabra que se formó alrededor del azabache.)
Minutos después ambos se encontraban con bolsas se consorcio recogiendo la basura y todo lo que no se catalogaba de viscoso.
_ Que conste que solo lo estoy haciendo porque quiero… no porque me asuste. (Dice casi en un susurro.)
_ ¡¡¿¿QUE DIJISTE??!! ¡MIERDA!
_ Que yo… nada… (Se pone a juntar la basura más rápido, sintiendo miedo.)
_ Más te vale. Ahora sigue limpiando sino TU saldrás de aquí en una bolsa de consorcio.
…………………
_ Mmmm (pronunciaba el rubio mientras alzaba unos potecitos pequeños de la alacena.) Parece que tengo que comer je je (Pensaba con una gran sonrisa al ver todo el compartimiento de ramen.)
_ ¿Qué haces? Tenemos que ponernos a limpiar mocoso. (Pregunta con el seño fruncido al no ver a Naruto limpiar.)
_ Nada sólo arreglando las cosas. (Le dice tapando con su cuerpo el lugar en donde se encontraba su ramen. Aunque en vano ya que adentro se empezó a escuchar un sonido extraño que atrajo la atención de el azabache mayor y el mismo.)
Ambos abrieron la alacena encontrándose con algunas ratas que salieron corriendo en varias direcciones y había varios recipientes de ramen abiertos.
_ !!Mi ramen ¡¡!!Malditas ratas!! (Grito eufórico.) Al menos quedó algo...
_ No los toques están sucios.
_ No, no están abiertos ¿no lo ves?
_!!NARUTO. Había ratas allí, esta todos sucio con sus huellas¡¡ (Le reclama enojado.)
_ Y que no abrieron todos. Además no están tan sucios, quizás aparecieron hace poco y pueda limpiar algunos y...
_!! Aquí dice que vencieron hace dos años ¡¡ (Le reclama sorprendido.)
_ Bue... este...no creo que importe tienen conservantes datebayo.
_ Una de las ratas acabó de parir allí... (Pronuncia con asco y los ojos grandes como platos.)
_ heee... los del rincón parecen limpios. (Dice tratando de tomar los recipientes pero Tetsuya de un manotazo le impide tocarlos.)
Justo cuando deciden comenzar con una pelea por ver quién decide hacer lo que quiere con los potes de ramen suena el sonido del timbre de la casa. Cuando el mayor se dirige a abrir se encuentra con una mujer de cabellos rosas cortos, mechones a los costados y una marca color violeta parecida a la de Tsunade en la frente.
_ Hola Tetsuya-san ¿como esta? ¿Puedo pasar? (Dijo saludando cortésmente. Pero el azabache se interpuso a la vista de lo que se encontraba adentro cerrando la puerta frente al rostro de la mujer.)
_ He... Sabes que Naruto, eso del descanso es una buena idea porque no te lo tomas y mientras tanto vas con tu amiga a pasear por ahí... ya sabes para refrescar la mente y todo eso.
_ ¿¿Heeee?? Pero no conozco a nadie, ni recuerdo a nadie que...
_ Muy bien... (Le interrumpe.)Aquí hay dinero, campera y... (Dice para luego sacarlo afuera) !!Diviértanse¡¡ (Y les termina cerrando la puerta a ambos.)
Ambos se miraron levantando la mano en forma de saludo para cortar el tenso silencio.
Así que... ¿tienes hambre? Mi casa no se encuentra lejos sin embargo que tal sí mejor vamos a Ichiraku.
_ Mmmm creo que sería buena idea y ¿¿tienen ramen allí??
_ He si, si tienen.
En el camino al restaurante de ramen el rubio miro levemente al lo que era una academia grande de donde salían gran cantidad de niños junto a sus madres. Uno de los recuerdos que se bosquejaron en su mente los últimos días salto a su mente de repente, era de el más pequeño, sentado en una banca solitaria a la sombra de un árbol. Mirando con envidia a esos niños que sonreían acompañados de sus padre y amigos.
Sakura siguió caminando al lado sin más que sólo sonreír, noto que el rubio se distrajo y paro para ver hacia donde se encontraba la academia de donde ellos salieron para ser lo que son ahora, mientras caminaban trataba de sacar uno de los muchos recuerdos de la infancia junto a su amigo pero los nervios de hacerle recordar alguna cosa cruzaban por su cabeza formando un nido en su garganta. Ya que por su mente cruzaba da idea egoísta de mantener las cosas como están y así imaginando que no existían las peleas, perdidas ni problemas de por medio.
_ Desearía que las cosas siguieran así... congelándose en el tiempo donde éramos chicos, donde nos manteníamos juntos y nos peleábamos sólo por tonteras. Pero supongo que las cosas no son siempre lo que uno espera... (Se dijo para sí)
Al llegar a Ichiraku un gruñido de las tripas del rubio saco una risa de la muchacha rompiendo con la tensión creada en el ambiente.
_ Vamos yo invito
_ No está bien Sakura-san , yo invito.
_ No, yo lo hago y que es eso de "Sakura-San " Solo dime por mi nombre no estoy tan vieja. (Bromeó haciéndole un puchero a lo que Naruto sólo río tomando por afirmativa lo dicho por la pelirosada.)
Así entre bocados siguieron hablando entre una que otra risa. Sakura le contaba las cosas que habían vivido, las misiones que tenían en equipo y lo impuntual que era su sensei que siempre iba con los libritos pervertidos. También le conto de su vida relatándole la relación que poseía con su novio, un chico de unos metros setenta algo escuálido y de cabello negro con anteojos de nombre Satoru y que planeaban casarse dentro de poco por que no querían criar a su hija fuera de un matrimonio.
_ ¡¡Guauu¡¡ Eres mama no se nota.
_ Awww gracias.
_ Bueno yo...decía por que los pechos de las embarazadas son redondo no chatos al menos eso creía...yo (decía queriéndole gastar una broma.)
_ Ho no lo hizo (se decía mentalmente)Ho si lo hizo...!!ESTA MUERTO¡¡ _ Naruto ... (pronunció de manera macabra mientras se formaba una sonrisa sicópata a medida que levantaba su rostro para que el rubio pueda verlo. Un golpe levantó la mesa prácticamente. ) Me estás diciendo que las tengo tan planas como una tabla Vas a..!! MORIR CERDO¡¡(Pronuncia levantando su puño encestándole un golpe que lo hace volar y no conforme con ello le busca furica para darle mas.)
_ NOOOOOOOO ya no me hagas daño Sakura-chan. (Ruega mientras se quiere hacer bolita.)
_ Espera... (Para la mujer más calmada.) Tu...
Tanto Naruto como Sakura se mi eran impresionados.
_ Yo... Sakura-chan (Susurra con los ojos levemente aguados.)
Mientras se abrazan en un corto abrazo como si no se hubiesen visto en años.)
Luego de parar de hacer escándalo ambos se sientan y simplemente esperan la comida felices aunque el rubio se pregunta el por qué no los habían hecha do después de hacer tanto escándalo.
_ Descuida el te quiere mucho eres su cliente número uno. (Le dice) y bien aparte de mi no recuerdas a... alguien más (Dice poniéndose algo sería.)
_ Si. Recuerdo a Kakashi andando siempre con sus novelas porno de... Ero-sennin (dice nostálgico.) A Iruka que siempre anda como me regaña tal cual mamá gallina, A Sai y su cara inexpresiva a Garra y... (En su mente se retrata la silueta de otra persona sin embargo difuminado, como una sombra.) A alguien más antes de Sai pero no logró...¿¿ no??
_ He si... ¿no lo recuerdas para nada?
_ No. Que es raro y... ¿quién es? ¿¿Esta por la aldea o se fue a hacer una misión??
_ No verás el...
_ ¡Mira a quien encuentro! (Dice una voz de adelante sorprendiendo a ambos.) Te estábamos buscando por todos lados, inclusive fuimos a tu casa pero nadie nos atendió.¡ Como estas Naruto! ( saluda al igual que un chico de pelo corto y gruesas cejas en el rostro y un traje verde, un chico con cara despreocupada de cabellos y ojos color azabache obscuro con el cabello junto con una coleta y una y una chica de pelo rubio largo recogido y ojos violetas.
_ He... Bien supongo amigo. (Contesta con duda.)
_ Se llama Kiba es uno de nuestros compañeros.
_ Porque Naruto habla como si no me conociera. (Pregunta el chico de cabellos castaños cortos, unas marcas de colmillos color violetas en sus mejillas, de piel morena acompañado de un gran perro de blanco con manchas color moca y de gran tamaño.)
_Es que no te conoce, ni a ellos. (Le responde secamente al moreno.)
_ Bueno gracias. Ha y como has estado Sakura! (Pregunta con una fingida preocupación) hace mucho que no ye vemos. (Se acerca para darle un abrazo y mientras Naruto se distrae saludando a los demás le susurra...)Aunque de ser posible me hubiese gustado no hablar con personas asquerosas como tú.
_Igualmente Kiba-kun (le responde la pelirosada no mostrándose intimidada.)
Después de saludar a todos él rubio se sienta a comer con los que se consideraban sus mejores amigos y mientras les escuchaba sobre todas las aventuras que compartían en alguna que otra misión entre risas y una que otra broma, al mirar de nuevo a la pelirosada notaba que a ella no le hablaba nadie más que la chica rubia de ojos violetas a la cual Sakura sólo le respondía con unos pocos monosílabos.
Pasaron los minutos y todos los jóvenes se fueron despidiendo de Naruto y Sakura.
_ Huumm parece que ya se hizo tarde... que tal sí te acompañó a tu casa y luego me voy a la mía. (Le dijo la pelirosa.)
_ Bueno pero no es necesario Sakura-chan no soy mujer Datebayo (dice rascándose la nuca.)
_ Ha... ¿Qué dices? Entonces… Creo que sería mejor que te acompañe.
_ He... (Lo piensa de nuevo recordando que ya no se acuerda donde queda su casa.)No está bien, no es como si se me hubiese olvidado por donde vivo ni nada...Pero si tú quieres. Porque no je je je... (Dice tratando de ocultar el lo evidente.)
_... Sehh mejor te dejo en tu casa antes de que te pierdas.
En el camino a casa ambos parecían reírse o más bien sólo la pelirosada que no paraba de carcajear de las antiguas anécdotas hechas por el rubio y este sólo se limitaba a quejarse de lo mal que lo trataba y de cómo se burlaba de sus momentos de niñez.
_ Ja ja ja (reía sosteniéndose el estomago.)Bueno es que debes admitirlo es gracioso recordar viejos tiempos.
_ Pero… ¡¡Sakura-chan!! No son tan graciosos para mí. Sabes que con lo que me cuentas ya no me dan ganas de dejar de ser amnésico.
_ Bueno... ¿qué quieres saber entonces?
_ Hummm por ejemplo ¿cuando apareció Tetsuya? O ¿porque ya no me tratan como no queriéndome golpear o tirar cosas ?... O como me accidente? ¿¿O como es ese Sai de que me contó Ino??
_ He bueno, Tetsuya-san apareció cuando tenías 13 y al parecer mucho antes, sólo que el único que sabía sobre su existencia era el Sandaime hokague. Y ya nadie te volvió a molestar porque salvaste a la aldea y el mundo de varios conflictos así que te convertirse en algo así como en un héroe. Y te accidentaste en una misión de clase ss. Y si, Sai es uno de nuestros compañeros. (Cuenta de manera rápida para poder responderle todas las preguntas.)
Ya cerca del apartamento de Naruto este le terminó preguntando una pregunta que dejó a Sakura sin saber si contestar o no...
_ Que no Sai tenía el pelo más largo.
_ ¿HE? No él fue nuestro compañero recién cuando teníamos dieciséis años. ¿Por qué lo dices lograste recordar algunas cosas?
_ Si algunas, en partes la mayoría de las veces...lo poco que recuerdo, es que había un chico un poco igual que él pero... con el pelo un poco más largo.
_ ...
_ Bueno, parece que ya estamos en mi casa. Je je voy a ver si Tetsuya sigue vivo. Nos vemos mañana Sakura-chan.
_ Si nos vemos mañana.
Llegando ya a la entrada el rubio nota que la luz estaba apagada. Da unos toques a la puerta sin ninguna respuesta. El chico ojiazul un poco preocupado sigue tocando y pronunciando el nombre de azabache mayor sin ninguna respuesta nuevamente se decide por tomar el pomo de la puerta y girar la perilla encontrándose la sorpresa que la puerta se encontraba abierta. Con algo de temor se decide encender el interruptor luz, aunque lo que se encuentra no es de terror más bien se encuentra con toda una casa limpia hasta el punto de que brilla.
La mente del rubio en un clic le recuerda aquello importante que quedó en la casa haciendo alarmar al chico.
_ Ramen mi precioso...
Hace una inspección completa por la cocina no encontrando nada y casi cuando está a punto de entrar en una depresión huele un olor que llama la atención a su papilla gustativa, dirigiéndose a la cocina y encontrándose con una olla grande que contenía una gran cantidad de Ramen casero.
_ Bueno huele rico, con esto ha redimido sus actos crueles (dice refiriéndose a sus potes de ramen que el mayor tiro.)¿En dónde estará?
Unos pasos más adelante en donde se encontraba un pequeño living donde estaba una televisión, se encuentra con el azabache acostado sobre el sillón de la pequeña sala con los ojos cerrados.
_... se debió haber cansado, después de todo terminó limpiando todo él solo. (Dice Naruto mientras va a traer una sabana para tapar al azabache ya que este se encontraba tapado con una toalla larga en la parte de las caderas que llegaba hasta un poco más de sus rodillas.)
Cuando lo decide tapar ya mirándolo de cerca nota todos los vendajes que antes no había notado. Que se esparcían en partes de su torso, brazos, y las cicatrices en partes de sus piernas que parecían grandes cicatrices de color obscuro.
Naruto recuerda todas las veces que se dibujaban en su mente.
Como el azabache le daba su saco cuando hacía frío en las noches, cuando llovía o cuando iban hacia Suna caminando a ciegas entre el viento seco. Las veces en que él se comía casi todo y Tetsuya sólo se limitaba a comer una miseria diciendo que ya no tenía hambre por que terminó encontrando algo en el camino...
_ Todas esas veces, y no te preocupante por ti... en serio que eres un tonto. (Piensa mientras lo tapa totalmente con las sábanas.)
Esa noche Naruto se pone a calentar la comida que el azabache había hecho para empezar a comer sin despertarlo de su sueño.
La mañana siguiente es llamada por el cantar de las aves haciendo que el hombre de ojos color borgoña despierte envuelto en como cuatro mantas.
_ Mmmmm (pronuncia con una voz pasmosa, peinando un poco sus largos mechones negros, poniéndose de pie y tomando las prendas del suelo que anteriormente se encontraban dobladas a sus pies. No era difícil saber que Naruto lo encontró en el sofá en donde se tiro luego de sacarse la mugre acumulada de meses y decidió taparle además de traerle su ropa, que había lavado y colgado para ponerse una vez seca, una parte suya agradeció mentalmente el haberse tapado con la toalla porque si ... había lavado TODA ... su ropa.)
El azabache se dirige al baño tomando el cepillo que había comparado ayer y se dispone a cepillarse, lavarse y peinarse saliendo con la remera y pantalón ya algo gastados por el uso, yendo a la cocina encontrando a un Naruto ya despierto con dos tazas de café ya hechas.
_ Buenos días.
_.... Buenas. (Se sienta.) Gracias por lo de la ropa se me hubiese humedecido. Ha... Y las mantas también.
_ No está bien... quieres café lo acabó de hacer.
_Si gracias.
_ ¿Sabes? Sakura-chan nos invito a comer a su casa.
_ Genial. Y ¿te encontraste con algunos otros de tus amigos?
_ Si aunque parece que no se llevan bien con Sakura-chan y quizás sea cosa mío pero creo que hay cosas que me ocultan. Creo... no sé.
_... Pues si ese es el caso, tu terminarás descubriendo aquello tarde o temprano. Las verdades siempre salen a flote no importa cuánto se traten de ocultar. (Le responde con tranquilidad y luego toma un sorbo de café.) Hu... esta bueno.
_ Por supuesto esta genial. Igual que su creador je je...
_ Sabes es sólo café, no una obra de arte.
_ Tu ramen casero no estaba mal...
_ Por supuesto, años de paternidad me entrenaron en el arte de la cocina.
_ No es para tanto... el de ichiraku es mejor
_ ¡Desagradecido! ¡Que ichiraku te rescate la próxima vez que te den! (Dice arrugando un poco la nariz fingiendo estar ofendido.)
Ambos empiezan a reírse.
_Oye que tal sí vamos a la casa de Sakura-chan, ella nos invito a comer.
_Hmmp... ¿Y tus amigos, no encontraste alguno aparte de ella?
_ Si...Pero creo que ellos no se llevan bien, además quería preguntarle sobre algunas cosas que no entiendo.
_ ¿Cómo cuales?
_ Y sobre un compañero de equipo, yo se que se llama Sai. Aunque sé que antes de él tuvimos a otro compañero, ella también me lo confirma. Mientras que los otros negaron la existencia de ese chico.
_Así que pudiste recordar algo... me alegra eso es un progreso. Creo que en ese caso deberíamos de ir a ver a Sakura a lo mejor eso estimula un poco más a tu memoria.
Ambos tardaron un poco en llegar hacia el hogar de la joven pelirosada ya que Naruto terminaba por leer mal las indicaciones que le dejo esta. Y peor aún cuando el rubio trato de hacer uso de su sacudida cabeza, sin resultado alguno. Hasta que finalmente el azabache ya harto, decidió arrebatarle el pedazo de papel con la dirección.
Tras transcurrir un rato habían llegado a una casa de tamaño mediano con una puerta de madera y con algo de estilo tradicional.
_ Ya estamos...
_ Yo podía.
_ Sehh claro, síguete mintiendo.
_ Imbécil.
_ Tarado.
_ Bastardo.
_ Estúpido al que le da la menstruación.
_ ¡¡Imbécil!
_ Asno desagradecido.
_ Hijo de...
Justo en el momento que ambos iban a seguir gritándose la puerta se abrió acortando la pelea. La mujer pelirosada al verlos se limitó a reír invitándolos a pasar.
La mujer suelta un leve risa al ver el comportamiento de Tetsuya y Naruto y los invita a pasar.
La casa era una de aspecto clásico con paredes gruesas de cemento, tatami y pisos lisos de maderas con un terreno espacioso tanto dentro de la casa tanto como del jardín. Según la pelirosada, ella y su novio la habían comprado con los ahorros de ambos, ya que ambos pensaron en comprar una casa más espaciosa para criar a su hija. Lo que sorprendió al rubio, no se le notaba a Sakura que había sido madre primeriza de hace unos pocos meses.
Un poco después de haber entrado ambos el azabache y el rubio ayudaron con la preparación del almuerzo uno noto que alguien los observaba escondido atrás de la puerta. El ruido de una pequeña risa terminó por ya mostrar lo evidente.
_ Mmmm... ¿¿Sakura quienes son ellos??
_ Ha casi lo olvidaba... ¿querido puedes venir?
De entre la puerta aparece un joven de cabellos castaños obscuros, cabellos cortos desmechados y anteojos, un poco más alto que la mujer, sosteniendo a una pequeña bebé de piel de color blanco como la porcelana y cabellos y ojitos de color negro carbón. Levantando con algo de timidez su mano en señal de saludo.
_ Hola...Mucho gusto. Mi nombre es Satoru Ryuji.
_ Mucho gusto. Mi nombre es Tetsuya y la rubia cara de gato es Naruto.
El rubio mira blanqueando con intenciones asesinas al azabache mayor.
_ Disculpen, es que acabó de venir de bañar a Sarada y bueno... no quería interrumpir.
_ O sólo querías ver cuánto se acercan a mi (Pregunta arrugado un poco el seño la mujer.)
_ ¡Que! ¡No! Je je como puedes pensar eso... (Dice un poco asustado por la actitud de su novia al saber sus planes.)
_ ¿Así que Sarada no? Es muy linda (dice el azabache mayor) ¿¿Puedo cargarla??
_ Claro.
_ ¡¡Owww!! Que linda es. Y mira esos ojitos y esas manitos... eres una lindura (dice alegre mientras la alza haciéndole reír.)
Mientras los azabaches se la pasaban con el bebé. Naruto se encontraba preparando la mesa y ayudando a Sakura con los preparativos de la comida.
_ Tetsuya se ve tierno, parece que tiene esa faceta de padre sobre protector je je je
Naruto notaba el brillo en la mirada del azabache mayor, aunque no podía determinar que más se reflejaba en el reflejo de sus ojos color borgoña… sin embargo el sabia que se encontraba algo más… uno era el cariño quizás debido a que la niña le hacía recordar a su familia en su hogar. Pero no sabía cuál era el otro.
_ Si mejor le quitas a tu hija antes que la adopté. (Decía con burla el rubio.)
_ Aunque a Sarada parece que le agrada no siempre esta tan alegre.
Luego Naruto le ofreció a su amiga preparar la mesa, donde enseguida todos los presentes se sentaron a charlar mientras que daban uno que otro bocado, el rubio se reía de las historias que su amiga le contaba, por otro lado Tetsuya hablaba con Satoru sobre lo duro y reconfortante que uno es cuando se convierte en padre aconsejándole, aun con la pequeña en brazos, algunos consejos que él había aprendido al criar a sus dos hijos.
Unos instantes luego de comer y levantar la mesa, entre risas bocados y una que otra anécdota el tiempo transcurrió rápido ya marcando las horas en el reloj.
_ ¿Y dónde van ahora?
_ Bueno, la verdad me gustaría comprar ropa, para variar la vestimenta, además todavía no tengo idea de cuanto tiempo voy a pasar aquí. ¿Naruto no te quieres quedar un rato aquí hasta que vuelva?
La pequeña ya cargada por su padre estiro sus manitas hacia donde estaban ambos.
_ Bueno porque no, mira Sarada… (La levanta.) Tu tío se quedara un rato más contigo. (Pero en el momento el que lo hace la bebe empieza a llorar y patalear de forma escandalosa.) HAAAAAA… ¿qué paso? solo le alce por unos segundos yo… no le hice nada Sakura-chan.
Para cerciorarse el azabache mayor la tomo para ver si algo andaba mal en ella, pero solo rio y pasó lo mismo cuando lo hizo Satoru o Sakura. En cambio cuando se la acercaban a Naruto esta se mantenía quieta con un semblante neutral, o de lo contrario lloraba y pataleaba.
Entendiendo lo que ocurre Sakura y Tetsuya rieron sonoramente mientras el castaño trataba e aguantarse las risas.
_ ¡! AWWW!! La bebe te odia… (Dijeron los tres al unisonó.)
De esa manera Naruto decidió despedirse de la pareja, antes de que quisiesen continuar haciéndole bulling por lo de su hija, al menos por parte de la peligrosa. Luego ambos se fueron, el rubio acompañando al azabache mayor que se puso a buscar nueva ropa para variar la vestimenta y uno que otros alimentos para la despensa, un poco después se pusieron a pasear por los lugares turísticos tanto como no turísticos de la aldea.
Mientras comían unos dangos sentados en una tienda pequeña el mayor se levanta sintiendo el aparecer e os presencias sospechosas ante ellos.
De repente una nube de humo se alza sobre la tierra y entre ella aparecen os hombres con unos chalecos color gris, pantalones y remeras color negro y una armadura de pecho, reforzadores de brazos, con mascaras de figura animal, un oso y un halcón.
_ Naruto Uzumaki ven con nosotros. (Pronuncia uno de ellos.)
_ ¿Depende quien los envía?
_ La godaime hokage y el rokudaime hokage, que ha vuelto de una conferencia con el señor feudal quieren hablar contigo sobre tu actual situación.
Naruto se queda estático sobre la confusión con la única idea e preguntar quiénes son esos dos y porque lo llamaría Tsunae-obachan y ese tal Kakashi, mientras Tetsuya quien se mantiene adelante diciéndoles:
_ No es necesario que nos acompañen ya vamos, cuando terminemos de comer a verlos.
_ de acuerdo, en ese caso nos retiramos. (Luego e eso desaparecen en una ráfaga de humo.)
Terminando de comer se dirigieron hacia la torre el hokage siendo inmediatamente recibidos por Tsunade y un alto hombre de cabellos plateados enremolinados, ojos negros, piel acanelada y una máscara e color azul obscuro que cubría su boca. Sentado en el escritorio mientras parecía sostener varios papeles.
_ Bueno, no los esperábamos tan rápido (Les dijo aquel hombre.)
_ Para que querían que viniésemos, emm señor... (Pregunta el rubio algo dudoso e la situación.)
El hombre peliplateado mira expectante al azabache mayor como buscando una respuesta.
_ No se… cuando despertó no recordaba nada y yo tampoco no pude hacer mucho, no soy médico. (Responde levantando un poco sus hombros en clara pose de “ya fue”)
_ hmmm. Supongo que esto pone las cosas un poco más difíciles. La verdad, Tsunade-sama me lo dijo pero yo no quería creerle. En este caso (Se levanta.) acompáñenos. Ha… y Naruto no soy “señor” mi nombre es Kakashi Hatake cuando te acuerdes de todo sabrás que me conoces bien, porque antes yo era tu sensei. (Le guiña un ojo.)
Los cuatro se dirigieron hacia una sala donde se encontraban unos ambus, junto con un hombre con cortes en el rostro de nombre Ibiki que según Kakashi y la senju pertenecía a la unidad de inteligencia y espionaje de la aldea.
El peliplateado le explico al rubio que se hirió un una misión y que por ello debían de fijarse si se encontraba en alguna manera de revertir su amnesia ya que esta tal vez sea a causa de un jutsu, que quizás algún enemigo le puso cuando sufrió un ataque. Y que en el caso de encontrar alguna señal sospechosa se encargarían de eliminarla de su mente, sin causarle dolor ni daño alguno.
Naruto dudo unos instantes mirando al azabache, quien le devolvió una mirada serena tranquilizándolo.
Ibiki junto con unos sujetos más, Lo hicieron recostarse en una camilla mientras el sueño invadía su mente. En aquella camilla, mientras cerraba sus ojos. Sus pensamientos se fundieron introspectivamente mostrándose como un espejo sobre sí mismo, reflejando pequeños fragmentos de su vida, cuando era niño pequeño, uno que cursaba la academia y uno un poco más adulto.
Pequeños fragmentos de su vida… que mostraban la soledad y el maltrato hacia el por parte de las personas de la aldea que lo miraban llenos de odio y rencor… los momentos que paso con Kakashi y Sakura y las peleas que tuvo con sus otros compañeros… al chico llamado Garra ofreciéndole su mano amistosamente en señal de despedida… Y muchos momentos cortos… Al igual que otros que solo le mostraban una áspera obscuridad.
Tan negra como una noche sin estrellas, tan profunda como el océano y por alguna extraña razón… tan deseada de conocer, sus manos se estiraban tratando de alcanzar aquellos colores que le muestren lo que oculta aquella negrura pero solo se encuentra con sombras sin figura, aunque a la lejos ve lo que parece una silueta de una persona, una figura… un rostro que se oculta en lo profundas sombras, intentando de alcanzarla corre sin embargo esta se aleja, de a poco convirtiéndose en nada. Y sus pasos se vuelven pesados como si estuviera corriendo en concreto líquido de a poco va tragándolo por completo.
De repente abre los ojos y se levanta súbitamente casi saltando con gotas de sudor y respirando irregularmente como si no hubiera respirado en días.
_ Pesadilla… una pesadilla.
Cuando recobra por completo sus sentidos nota que se encuentra en el mismo lugar recostado, solo que tapado con la chaqueta de Tetsuya.
_ Hay que ser, ni una manta tienen en este lugar. ¿Te encuentras bien?
_ He… si solo tuve una corta pesadilla. Je je… ¿Y los demás?
_ Se fueron a hablar sobre los resultados con la otra hokage y con unos tipos de un consejo, según me dijeron. Van a volver enseguida.
_… Gracias por lo de la chaqueta y lo demás…
_ hmm… ¿estás seguro que te encuentras bien? No te sacudieron el cerebro ni nada, mocoso generalmente no eres tan “dulce” (Pronuncia sarcásticamente.)
_ MIERDA… ¡Uno queriendo ser amable contigo y tú la cagas¡ No te quejes después.
_ Huuug… Bueno perdón… es que eso no es muy común. Ni lo era… (Dice casi en un susurro la última frase.)
Durante unos instantes lo único que se pudo oír de trasfondo en aquella silenciosa habitación no era más que la respiración de ambos. Hasta que el menos rompió el silencio preguntando:
_ ¿Porque me ayudas?
Preguntaba con curiosidad carcomiéndole ya que en los pocos recuerdos que vio, el azabache no se encontraba en ninguno.
_ Porque, dices… supongo que es solo porque me lo prometí. Que a pesar de todo te cuidaría hasta que ese día llegue…
Justo en el instante que el rubio iba a preguntarle otra cosa al azabache llegan Kakashi, Tsunade, Ibiki con un grupo de personas, dos hombres y una mujer octogenarios, escoltados por un par de ambus.
_ Naruto Uzumaki… a pesar de que ambos hokages estén de acuerdo de dejarte ir nosotros creemos que como mínimo deberías tener arresto inmobiliario. Y aun más sujeto al hecho de que estuviste ausente lejos de la aldea por un periodo de un poco más de seis meses. Ya que si bien no encontramos ningún rastro e algún jutsu en tu mente debemos estar al tanto de que puedes llegar a convertirte en una amenaza para la aldea debido al poder que posees.
Tanto Kakashi como Tsunde enojados por lo que dijeron los ancianos están a punto de replicar sin embargo el azabache se adelanta diciéndoles:
_ Y ustedes que se creen, para tratarlo así, debería de darles vergüenza. (Les dice Tetsuya quien se pone adelante de Naruto.) El salvo el trasero más de una vez… ¡idiotas!
_ ¡COMO SE ATREVE¡
_ Esperen (les interrumpe Kakashi.) resolvamos las cosas de manera calmada.
_ Eso mismo, aunque estamos de acuerdo con lo que dijo Tetsuya. (Habla Tsunade.) Excepto con lo de idiotas.
_ He, al menos me pueden explicar de qué se trata esto. ¿Hay algo mal conmigo?
_ No, no hay nada malo, porque no nos esperas afuera el pasillo luego te explicaremos todo Naruto. (Le dice la mujer.)
_ De acuerdo.
Un rato después salen todos los que estaban presentes adentro de la sala. Ambos hokages se acerca a Naruto, el peliplateado con un gesto de desinterés y la mujer con un toque serio pero no hostil.
_ Oi… Naruto ya llegamos a un acuerdo, que claro en parte depende de ti para que no te sientas desplazado en las decisiones que tomamos.
_ ¿Y de que se trata?
_ Que tienes que decidir si quieres permanecer en la aldea o irte con Tetsuya-san por el momento que dure tu estando de amnesia, serán como unas pequeñas vacaciones, luego volverás aquí y seguirás tranquilamente con el modo de vida que tenias antes. ¿O prefieres quedarte en la alea mejor?
_ Yo… creo que no se todavía.
_ Bueno, ¿porque no lo piensas hasta mañana y me lo dices, he?
_ Si, está bien.
_ OK, nos estamos viendo entonces.
_ ¿Estás bien?
_ Sí, creo que me gustaría dar un paseo corto, solo.
_ No sabes cómo volver…
_ Si se… vuelvo en un rato
_ bien, te espero allí en dos horas. Si no vienes te empezare a buscar y comprare potes de ramen solo para aplastarlos en tu narices ¿me oíste?
_… ¿Oye?
_ ¿Hmm?
_ Nada, nos vemos después
_ Si.
El rubio se mostraba indeciso por cual decisión tomar, si irse por un tiempo de la aldea o de quedarse allí.
Los pocos recueros que logro recuperar no son más que fragmentos asemejados a un par de mosaicos rotos y en la mayoría aunque se ve feliz junto a Kakashi , Sakura y un pervertido de cabello largo y empinado llamado Jiraija cuando tenía unos trece años y otras veces con los compañeros que pertenecían a su generación como Tenten, Neji, Rock lee, Kiba, ino y otros. Igualmente veía el otro lado de la moneda cuando era golpeado o se alejaban tratándolo como un marginado.
Y así mientras caminaba al par de sus pensamientos, pasando por un camino que llevaba a un prado extenso, un campo de entrenamiento para él y en done se sitúa una casa de dangos por el camino. Escucha voces conocidas saliendo de adentro del local.
_ Es una pena lo de Naruto
_ Si que problemático...
El rubio se oculta con una mirada picara, con el plan de sorprenderlos, en su mente pasaba la idea de que una broma no estaría mal… en poco tiempo que permaneció con Tetsuya aprendió a moverse ágilmente entre los peñascos y arboles muchas veces para ocultarse del mismo, que cuando estaba enojado lo perseguía con la intención de darle con lo que cazaba en los ríos. Y así al momento en que se mandaba una chingada con el azabache ganando su ira, casi se camuflaba con el bosque por que “la cachetada de pescado” era lo más aterrador y fuerte… en hedor, que le podía pasar ya que además de doler como el diablo, dejaba apestando su cara por horas. Aunque luego comía rico…
Sin embargo se detiene al escuchar lo que empiezan a decir:
_ En serio que problemático, cuando lo veamos le contaremos todo lo que quiera para que logre recuperar la menoría rápido, también deberíamos disculparnos con Sakura.
_ ¿Qué mierdas dices amigo? Para que nos tendríamos que disculpar con esa zorra pelichicle, que le den... Es más… si Naruto no se hubiera accidentado estaríamos festejando ahora que ya no tenemos que aguantar la presencia de ese malnacido asqueroso de nuevo. (Pronuncia soltando una leve carcajada.) Ahora que lo pienso, ese tipo que viene también es extraño, lo bueno es que ya que Naruto está aquí se va a ir lejos.
_ Sabes no entiendo… que logras diciendo todo esto. Por el momento nosotros debemos estar a disposición de Naruto si quiere saber algo, y apoyarlo, no mentirle solo para que no recuerde a alguien que no nos agradaba y hacer como si nada ocurrió. O decirle con quienes se junta y con quien no, no es un niño. El después decidirá lo que tenga que hacer.
_ Lo único que hago es apoyarlo para que no se vuelva a juntar con personas así… además para que va a querer recordar a un muerto de hambre, infeliz como ese. Ho… no me digas que buscas cualquier excusa para liarnos con nosotros porque te peleaste con Temari.
_ ¿EN SERIO… EN ESO ES LO UNICO QUE PIENSAN, HACER COMO SI NADA OCURRIO? eso que los creía más nobles. ¿Pero saben? Yo al menos le digo lo que tenga que decirle en la cara a Temari y a cualquier otro, no me guardo las cosas, ni soy doble cara solo por el miedo al qué dirán, como cierto reprimido… ¿o no Kiba?
_ ¿! QUE DIJISTE MALDITO ¡? ¡¿QUIERES PELEA ES ESO?¡
_ ¿Porque no? A mí no me asusta tu cara de perro sarnoso que traes.
Justo en el momento en que van a empezar una pelea la mujer de cabellos rubios largos, Ino. Se interpone entre ellos.
_ ¡¡Basta ya¡¡ ¡¡Paren los dos¡¡ (Interviene.)
_ Tsk… Bien, pues yo me largo ya iba a ser bastante problemático si te partía el trasero, me iba a ensuciar de mierda.
_ Me vuelvo a encontrar contigo Shikamaru y te parto la madre. ¿! Me oíste ¡?
_ Como sea, intento de aborto.
El susodicho se fue sin mirar atrás. Dejando a un enfureció castaño y una rubia apenada porque en el fondo le daba la razón a Shikamaru de todo, sin embargo no tenía las agallas de admitir que había hecho mal, no quería perder a mas de sus amigos ni al castaño que la consoló cuando le rompió su ex novio Sai, por algo ocurrido en el pasado, por ello le daba la razón a su novio Kiba. De solo hacer como si nunca haya ocurrido nada.
Naruto se mantuvo en el mismo lugar, entre las sombras escuchando hasta la última palabra apretando sus nudillos con tal fuerza como queriendo cortar la circulación de sus manos.
Esperando a que se fuera la pareja el lugar bajo de su escondite para dirigirse hacia unos de los lugares que servían como campos de entrenamiento de la aldea, para perderse entre los árboles y sentarse en el suelo. En su mirar… por su cuerpo no paraba de escurrirse la rabia a la par de su sangre que bombeaba a cada segundo...
El atardecer termino de llevarse la luz el sol, abriendo paso a una noche sin estrellas y el cegado por el odio golpeando todo lo que podía en un intento de descargarse, prueba de ello eran varios árboles que tenían grandes huecos casi cayéndose.
Estaba arto… todos le ocultaban las cosas y alejaban a aquellos que querían ayudarlo, soltó una risa seca de ironía… en realidad no había cambiado mucho las cosas, si bien los aldeanos ya le trataban como un héroe la mayoría seguían siendo unos hipócritas que solo se movían por interés propio, inclusive los que decían llamarse sus amigos solo le contaban las cosas que se les daba la gana contarle, ¿acaso su camino hasta ahora no era más que fachada para hacerlo dócil ante las demandas de los que habitaban esta aldea?
Sus ojos contorneaos por un leve color rojizo por aguantarse unas lagrimas de coraje y aunque no había gritado mucho su garganta estaba seca, no sabía cuánto tiempo había pasado allí no obstante no le importaba.
_ ¿Ya terminaste? (Pronunciaba una voz conocida, ya presente desde hace rato.)
Levanto su cabeza hallando a Tetsuya, quien se acerco a él tomando una de sus manos. Inspeccionando las heridas que se había hecho. Solo para decir luego e soltar un suspiro:
_ Mira que niño… te terminaste haciendo varias heridas, será mejor que las limpiemos. Aparte de que ya se está volviendo un poco fresco… mejor volvemos a casa.
Sin decir alguna palabra llegaron a la residencia de Naruto. Y de donde el azabache saca unas gasas y alcohol procediendo a limpiar y vendar los raspones que tenia.
El camino a su hogar estuvo lleno de silencio… no paso desapercibido para el mayor que algo malo le paso al rubio por ello considero prudente darle su espacio.
Tetsuya viendo la hora decidió que era mejor cenar y se dispuso a dejar al chico solo.
Quien solo después el transcurso de un rato fue a la cocina y le dijo:
_ Si nos ponemos a empacar ahora ¿nos podemos ir mañana temprano ya de aquí?
_ ¿A qué viene esa pregunta?
_ Pues porque decidí que me voy contigo. Ya no quiero quedarme aquí…
_ ¿Paso algo malo? (Pregunta dándole la espala para remover la olla.)
_ Nada… solo estoy harto de este lugar.
_ ¿Y qué hay de Sakura y Kakashi?
_ Ya no me importa, no me importa nada, me quiero ir lejos…
_ ¿Estás seguro… de solo querer dejar todo atrás?
Le escucha ecir al azabache en lo que es pareció más a un tono leve e regaño, y por un momento cuano este gira a verlo, siente una presión sobre el, con esos ojos borgoña que reflejan un poco de reproche entre otros sentimientos que se ocultan en la opacidad e sus ojos. Naruto por un momento podía creer que con aquella mirada gélida el otro buscaba traspasarle el alma. Al igual que la primera vez que miro a los ojos del azabache.
Sin embargo en cuestión de segundo aquella expresión de Tetsuya se desvanece mostrando a una serena.
_ Bueno, no dudes que yo siempre estaré a tu lado. Ahora porque no comemos, hice curry pensé que vendría bien con noches frías como esta.
_ hmmm, si supongo.
_ Comamos primero y luego enlistemos todo lo que nos tengamos que llevar.
_ Si
Luego e la cena ambos prepararon lo poco que tenían en unas mochilas nuevas que el mayor había comprado. Terminando e hacer aquello Tetsuya sugirió que sería conveniente que ambos descansen ya que mañana tendrían que conseguir lo que falta.
Y así el rubio ojiazul cerro sus ojos no esperando ver la luz el mañana para despedirse por fin e ese lugar.
Por otro lado, entre la obscuridad de la noche se encontraba un azabache, que luego de haberse asegurado de ver sumido en un profundo sueño al rubio. Se dispuso a abrir una ventana sin causar casi ningún sonido para salir al exterior y contemplar a la luna llena, imponente con su luz en la soledad el cielo sin estrellas
A su mente vino una idea, que en cierto modo le divertiría, después de tantas malas pasadas que tuvo. Y así con una leve sonrisa en sus labios solo pronuncio al silencio.
_Creo que no vendría mal si le hecho un empujoncito a las cosas…