Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fair Game por ritsuka10

[Reviews - 128]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Bang abrazaba por la espalda a un ruidoso grisáceo que simulaba tratar de huir, lo sostuvo fuertemente en sus brazos besando su  nuca, cuello, pasaban las tres de la mañana y ambos caminaban por una solitaria avenida donde el flujo de autos era escasa, las lamparas iluminaban la banqueta, la pareja se molestaba mutuamente se sumergían en desesperadas rondas de besos que los llevaban a detenerse varios minutos en el frío el cual les dejó de preocupar cuando el calor en su interior se extendía por su piel. 

—¿A donde vamos ? Esta no es la dirección a tu casa.— le cuestionó JunHong delineando con la punta de sus dedos el perfil de su pareja.— No quiero que me lleves a mi casa.—Le hablo en un puchero logrando que Bang le robara un beso.—Quiero pasar toda la noche contigo haciendo travesuras.

El menor paso su mano por encima de la entrepierna del mayor acariciándolo por arriba de la ropa, lo sorprendió apresando sus labios e introduciendo su lengua, las manos de Bang descendieron de la cadera hacia sus glúteos fue entonces que Jun rió divertido por la situación, sus narices chocaban, la pareja tenia un ligero aliento al alcohol pero lograban caminar tranquilos, la falta de oxígeno los separó.

— Esta noche no iremos a mi casa a hacer travesuras, esta noche es especial así que debemos ir a un sitio de mejor categoría que mi cama vieja y destartalada.— Le susurro arrastrándolo por la calle para detenerse frente a la entrada de un lujoso hotel cinco estrellas.—Mi bella esposa merece lo mejor.—le volvió a hablar besando sus labios.—He ganado bastante dinero para darnos el lujo de pasar una noche en un sitio como este.

—Bang ¿estas seguro?.—Lo detuvo antes de entrar por la puerta giratoria.—Cuando era rico me llegue a quedar un par de veces y es bastante caro.—El mayor asintió besando su frente.— Estas completamente loco. 

JunHong observo como su amante caminaba hacia la recepción y trataba de reservar una habitación por lo que restaba de la noche, su voz era firme pero cuando la recepcionista le hacia unos cuestionamientos él dudaba ligeramente tal vez ese gesto era imprescindible para otras personas pero Jun lo conocía, al final logro reservar una suite con jacuzzi, Jun salto sorprendido cuando Bang entrelazo sus dedos con los suyos para caminar de la mano hacia los elevadores, las pocas personas que estaban en el lobby los miraron, la recepcionista secreteo con su compañero mientras las mejillas de Jun se tiñeron color carmín después de que las puertas del elevador se cerraran se puso delante de su amante para besarlo, se colgó de su cuello uniendo sus frentes, con nadie antes había experimentado todos los sucesos que le pasaban a lado de YongGuk, cuando estaba con él el mundo avanzaba de forma extraña, una veces calmado, aburrido pero otras era una aventura bastante bizarra como la vez que terminaron haciendo llenos de pintura en una vieja bodega. 

—Creo que te gusto la sorpresa.—Le susurró hundiendo su nariz en ese largo cuello color mármol.— Anoche tuve un sueño bastante cachondo así que quise hacerlo realidad hoy.—Lo sujeto de las caderas.—¿sabes? tu eras el protagonista principal.—Mordió su labio inferior.—Tu siempre eres el protagonista de mis sueños húmedos, mis pesadillas, tu, siempre tu.

—Odio cuando te pones tan cursi.—Le contesto extasiado por la confesión se aferro a su espalda.—Te amo, te amo demasiado. 

Le grito provocando que Bang soltará una carcajada, el mayor lo arrastro por el pasillo y le aconsejaba bajar su volumen de voz para no molestar a los otros clientes cuando abrieron la puerta se toparon con una hermosa y amplia recamara, una cama king size  en el fondo un bello ventanal que dejaba ver las luces de la ciudad y ahí se encontraba un gran jacuzzi que contenía varios pétalos de rosas sobre la espuma blanca, era un Hotel de lujo así que una botella de champan los esperaba a un lado de la cama, Bang se acerco a ella para tratar de abrirla, ya una vez en el pasado había estado en un vergonzoso evento donde quiso impresionar a Jun abriendo una botella de vino pero terminó echando a perder el corcho y el contenido de la botella, el corcho esta vez salió volando perfectamente y vacío el liquido en dos copas, JunHong tocaba el agua del jacuzzi sentándose en el borde esa escena le parecía sacada de un cuento de hadas, de una novela cursi de alto presupuesto, giro su rostro para encontrarse con el mayor quien le daba una de las copas, tomaba asiento a su lado.

—¿Por qué deberíamos brindar?.—cuestiono Bang mirando el paisaje que se dibujaba fuera de la ventana.—Wow es hermoso nunca había visto la ciudad desde este punto.

Jun lo observo tranquilamente rara vez el mayor se sorprendía por algo, comúnmente mantenía su cara seria, su frente fruncida y su rostro carecía de emociones, era feliz al verlo reír como un niño pequeño que acaba de descubrir las luces de navidad lo miro dejar la copa en el borde de la tina para quitarse los zapatos, calcetas, la sudadero mientras se deshacía del pantalón Jun estiro su manos para aventarlo en el fondo de la tina un gruñido escapo de sus labios trato de jalarlo pero Jun corrió al otro extremo de la habitación riendo por su hazaña, Bang no estaba molesto solo reía como un idiota por la travesura recién hecha así que termino de quitarse la ropa dentro del agua, jugaba con la espuma como un bebe en la hora de su baño después se sentó en un extremo dandole la espalda a la ventana, JunHong camino hacia unas bocinas donde coloco su smartphone para reproducir una  sensual canción, era Earned It de The Weeknd , mejor dicho puso play a todo el nuevo álbum Beauty Behind the Madness, apago la luz principal para que solamente algunas lamparas de neon alumbraran la habitación dandole un aire sensual, JunHong salto sobre la cama para comenzar a mover sus caderas al ritmo de la música sus labios repetían la letra de la canción entonada por el cantante, al termino de cada frase se deshacia de una prenda para lanzarla al piso, YonGuk relamía sus labios fascinado por la escena, su amante se caracterizaba por saber mover la cintura y ese trasero como nadie.

—¿te gusta lo que vez?.—Le cuestiono el chico de piel blanca desabrochando su pantalón  dejando ver una ajustada ropa interior, Bang asintió.— Es momento de darle su premio al ganador de la pelea.

JunHong se quito los pantalones mostrando una sexi truza negra de tela transparente que no dejaba nada a la imaginaciòn se dio la vuelta agachándose sin dejar de mover su cadera al sonido de la música, jalo una mascada que se encontró sobre una lampara la sujeto de cada extremo se incorporo alzando las manos  y meneando su trasero de un lado a otro después la bajo a su trasero y lo novio de izquierda a derecha mientras se agachaba ligeramente haciendo que sus glúteos chocaran con ese pedazo de tela, el calor en la entrepierna del peleador número uno se erguía fascinada por el show privado, el bailarín lanzo la mascada hacia su único espectador quien no logro alcanzarla, Jun dejo escapar una boba risa por el fallo como último acto fue deslizando su sexi ropa interior por sus largas piernas blancas dandole la espalda a su amante se giro para nuevamente lanzar la prenda y esta vez el cliente la atrapo, un sucio fetiche de Bang hizo acto de presencia, olió esa prenda fascinado sumergió su nariz en esa tela transparente que estaba humedad de una parte, todos tenemos secretos, unos mas sucios que otros, aquellos que siguen la normas de la moralidad son quienes más perversos pueden ser, Jun aprendió esa lección con su amante a diferencia de muchos, no le desagrado, le encanto hundirse en sus fantasías tomo asiento en el borde de la cama abrió las piernas y se comenzó acariciar, gotas de sudor rodaban por su pecho, era como perlas que brillaban bajo las azules luces de neon, su boca ya no podía seguir la letra de la canción a causa de los gemidos, al sentir que su entrepierna estaba completamente despierta camino hacia el jacuzzi donde se metió para colocarse delante de su amante quien también se puso de pie lo tomo de cabello para besarlo, el agua corría por el bien torneado cuerpo de Bang quien dejaba ver el efecto que ese baile tuvo en su miembro volvió a su lugar para después sentar a Jun encima suyo mordió su labio inferior, su cuello, su pecho,  pasaba su lengua por aquella blanca piel dejando miles de marcas, Jun tenía la cabeza echada hacia atrás después de varios besos se animo a incorporarse un poco y sus largos dedos blancos se dirigieron a dibujar esa morena espalda llena de moretones, golpes y cicatrices,  cada músculo que se flexionaba Jun lo besaba, lo acariciaba,  pegaba para que sus caderas y sus evidentes erecciones se rozaran debajo de la tumultuosa agua, las manos de Bang vagaban por su cintura y descendían hacia su trasero, el menor gemía ante las sugerentes caricias, los labios de YongGuk navegaban por ese mojado pecho, mordida sus clavículas, chupaba sus pezones como si fueran dos caramelos que se levantaban temblorosos, la mirada de Zelo se enfoco en el paraíso fuera de las ventanas.

—¿Crees que alguien nos vea?.—Cuestionó inocentemente al sentir como la mano del mayor juntaba ambos miembros para que se frotaran.— YongGukikie ¿Alguien nos estará viendo? YongGukkie

Un sonoro quejido escapo de los labios del mayor una perversa sonrisa se dibujo en el rostro de Jun quien había descubierto que sus amante se excitaba más cuando lo llamaban de esa manera infantil, el hombre que amaba tenia sus perversos secretos que iban desde emocionarse porque se puriera ropa interior de mujer o por escucharlo gemir desesperadamente, sí, lo admitía una vez se puso ropa intima de mujer, era una broma para saber como reaccionaria su amante extrañamente descubrió que reaccionaba demasiado bien, tan bien que le había comprado un par de prendas que después el mayor se las arrancaba y las conservaba en una cajón en lo más profundo de su closet, donde los secretos, los monstruos y esqueletos se esconden, Jun también poseía algunos perversos fetiches que tal vez no eran tan radicales como Bang pero si aumentaban su ego, en su caso adoraba a veces amarrar a su amante a la cama para llevarlo a la locura y después soltarlo para que lo poseyera,  ser dominado en cada uno de los aspectos,  su punto de ebullición consistía cuando su pareja se comportaba como una bestia, cuando perdía el control del mundo, la noción del tiempo, la moral o física, tenerlo por así decirlo “babeando” por él inflaba su pecho en un superioridad no permitida, porque en ese instante que la ronca voz de YongGuk gemía por él reafirmaba su poder sobre su persona, aunque él fuera el sumiso en realidad era el amo. 

—Hey Gukkie ¿te gusta? mmm Gukkie ¿eres mío?.—le cuestiono llegando al limite sentir su erección rozar tan bestialmente con la del mayor, ese toque lo estaba volviendo loco.—Nee Gukkie.

Las manos de YongGuk se apoderaron del trasero del grisáceo mientras sus entrepiernas se frotaban mutuamente, JunHong mordió el hombro izquierdo del mayor mientras se aferraba a su espalda, ambos llegaron al limite dejando escapar un sonoro suspiro pero solo fue el inicio Bang tomo por los hombros a su compañero para girarlo, JunHong acomodo sus antebrazos en el borde de la tina, su rostro se encontraba separada por centímetros del vidrio de la ventana cuando percibió que Bang buscaba algo en su pantalón lo detuvo negando con la cabeza, el mayor siguió su “sugerencia” así que lanzo el empaque a medio abrir en el piso y  sin previo aviso se introdujo en el interior del menor sujetándose fuertemente de su cadera.

—Si alguien nos ve espero disfrute de tu bello rostro,  espero le fascine la manera que se contrae cuando entro y salgo de ti.—Le susurro al oído lamiendo su lóbulo derecho mientras lo embestía.— ¿Quieres que me ponga un collar en el cuello con una placa que diga “Propiedad de Zelo”?.—Le cuestionó hundiéndose en su entrada causando que la espalda de Jun se arqueara. —Por que si lo deseas soy capaz de usarlo.—Clavo sus dientes en su hombro causando un moretón una siguiente estocada causo que el menor gritara.— No existe persona en el mundo que me coma como tu, que se contraiga, no importa cuantas veces me venga dentro de ti siempre quiero más. —La espalda de Zelo se volvió a curvar una descarga eléctrica lo consumía volviéndolo loco, araño la superficie de la cerámica.— Jamas me cansaré de ti, nunca Jun.

Ante esa afirmación JunHong trato de calmar su respiración pero el dolor en sus piernas lo volvieron a alterar, la forma que Bang salía, entraba en su cuerpo le provocaba una oleada de placer ya que cada vez que llegaba al fondo tocaba algo en su interior que lo animaba a gritar a moverse con más hambre, unos dedos se deslizaban por sus muslos llegando a su propia excitación que goteaba por las tortuosas embestidas, la ultima estocada toco por fin ese botón y los dos una vez más llegaban al éxtasis un liquido blanco inundó el interior del menor quien termino ahogando sus gemidos en un grito ambos terminaron sentados dentro del agua abrazados, Jun se coloco en medio de las piernas de Bang mientras este lo abrazaba por la espalda los minutos pasaron y recobraron un poco el aire así como la compostura, ambos personajes disfrutaron del sonido de la música enamorando sus oídos, sus sentidos,  hablaron de un par de tonterías hasta que paso cierto tiempo.

—Nuestras manos se arrugaron como pasas.—Hablo inocentemente Jun estirando sus mano que estaba entrelazada con la del mayor.—Parecemos dos viejitos.

YongGuk negó con la cabeza dandole un beso en la mejilla a su amante, no le desagradaba esa idea, pasar toda su vida hasta llegar a anciano con el menor, no le importaba no darle bisnietos a sus abuelos, no poder casarse legalmente, ni tener hijos de su sangre todo ese vacío sería reemplazado con la compañía de JunHong y eso le provocaba sonreír, beso su cuello, lo abrazó fuertemente de la cintura adoraba el olor que desprendía de su cuerpo había descubierto que era una fragancia dulce, melosa, vainilla con canela, mil veces le pregunto que si usaba una crema especial pero el menor contestaba que era su aroma natural, beso sus labios introdujo su lengua recorrió esa cueva húmeda hasta que la falta de oxigeno en sus pulmones lo separo fue entonces que sus miradas se cruzaron. 

—Vamos a  estrenar la cama.—Le susurro acariciando sus muslos.— Debes pagar con creces lo que he gastado en esta habitación.—Jun se puso de pie para agacharse y alcanzar un albornoz Bang le dio una ligera nalgada.—Deja de seducirme con ese bello trasero.

Jun le lanzo el albornoz que le correspondía a su amante para ambos salir de la tina y recostarse en la cama donde nuevamente fue aprisionado en las colchas, sus labios se encontraron para un desesperado beso.

—Te quiero Bang YongGuk.—Le gritó pataleando feliz.— Quiero pasar el resto de mi vida a tu lado, por siempre y para siempre.

Bang lo callo con un beso lo odiaba por poder gritar lo que él se guardaba en el pecho, quería tener el suficiente valor y menos miedo para también ser honesto como él, confesarle que él también tenía esos infantiles pensamientos, que buscaba ser su esposo aunque no hubiera papel que lo avalara como tal, trabajar honestamente y comprar una casa para que ambos vivieran felices todas las noches cumplir una fantasía sexual diferente, todas las mañanas hacerlo en un lugar diferente en la casa, completarse como en ese momento lo hacian, abrió el albornoz dejando al aire libre la parte delantera del cuerpo de Jun, sus labios bajaron hasta su abdomen, metió su lengua en ese ombligo gracioso para después bajar por sus muslos para morderlos.

—Temo que mañana seguiré sin poder sentarme. —Dijo en un suspiro al sentir algo húmedo recorrer su excitación que una vez más despertaba. —Ehh YongGukkie.

 

Al día siguiente.

JunHong miraba el perfil de su pareja que dormía tranquilamente en la cama después de varias rondas de sexo rudo a la pareja la mañana los sorprendió por lo cual  solo desayunaron en la habitación de lujo para después regresar  a casa del mayor quien extrañamente recordó que estaba adolorido por la pelea, el grisáceo salto fuera de las cobijas para ponerse algo de ropa trato de no  hacer ruido ya que Bang lucia bastante cansado se deslizo por la puerta para ir a la cocina y buscar que tomar mientras investigaba el terreno se encontró con Nam  mirando la televisión tomo un vaso de jugo para después acomodarse a un lado del mayor.

—¿En qué capitulo vas?.— Cuestiono el menor doblando su brazo en el borde del sillón.— Guk y yo nos quedamos en el último capitulo de la tercera temporada.—Emitió una sonrisa al escuchar un chiste.—Apenas vas en la primera temporada, me encanta Mitchel y Annie.

—¿Dónde esta mi hermano? .—Cuestiono de golpe sin separar la mirada en el televisor.— De hecho robe los discos de Guk, tenia curiosidad escuche que Being Human era una buena serie.— Miro de reojo como Jun cerraba los ojos cansado.— Ve a dormir si estas cansado. —El menor negó alegando que quería ver solo ese capitulo ya que era uno de sus favoritos. —Espero mi hermano no me mate por compartir el sillón. 

El menor no contesto a esas palabras solo mantuvo su vista fija en el televisor para disfrutar de la serie británica así pasaron un par de horas. JunHong no dejaba de reír ante las ocurrencias de su cuñado le divertía su compañía le hubiera gustado que su amistad fuera más profunda pero no quería iniciar peleas sin sentido entre los hermanos ademas descubrió que YongGuk se volvía un ser bastante celoso, le agradaba tentarlo, presionarlo pero conocía su limite y el tema de su hermano mayor era un nervio sensible  sus ojos se abrieron cuando el pelinegro dejo un folleto sobre la mesa, lo sujeto entre sus manos leyendo el titulo rápidamente su sonrisa desapareció, perfiló su mirada y apreso los labios formando una linea.

—Lo lamento no quería incomodarte pero mi hermano me platico tu pequeño secreto, no te enojes con él solo busca que estés mejor.— Se justifico el mayor.—Quiero ayudarte pero admito que él no debería de hablar tan abiertamente de los problemas de otras personas si estas no quieren.—Le arrebato el folleto de un centro de rehabilitación que anunciaba unos cursos en vacaciones de fin de año.— Él estuvo llamando y pidiendo informes.

—No pienso volver a ese infierno.— Contesto enfadado colocándose de pie.— Lo lamento sé que no es tu culpa pero es una cuestión íntima y no me agrada que otras persona sepan, Guk cometió un error al contarte.— Apretó sus manos formando un puño.—Por favor no le digas a nadie, me siento avergonzado de mis errores.

Nam también se puso de pie rodeo con sus brazos a ese tembloroso chico, era mentira Guk nunca contaría un secreto, él  lo había averiguado debido a que noto como su hermano estuvo investigando la forma de ayudar a alguien en rehabilitación ademas escucho la conversación con Mike, los amigos cargaban la misma cruz, sus respectivos amantes fueron atrapados por las redes de las drogas, era consiente que Guk era respetuoso con la intimidad de JunHong, a veces pensaba que en realidad estaba enamorado pero era imposible, su hermano no tenía corazón.

—Todos cometemos errores a diferencia de mi hermano soy discreto pero debo admitir que él piensa que tienes una enfermedad, no sé como explicarte pero Guk suele presionar a las personas para que hagan lo que él quiere.— Lo tomo por la barbilla mirándolo a los ojos.— No dejes que te convierta en alguien que no eres, eres muy listo para dejar que él dirija tu vida.

Jun no se opuso cuando unos dedos acariciaron su rostro se sentía traicionado por la persona que deposito su confianza después de la noche maravillosa que había pasado, esa información era un golpe bajo, quería negar esos sentimientos debía primero conocer la versión de YongGuk ¿Pero que podía decir en su defensa? Nam lo conocía desde niños por mucha rivalidad que tuvieran seguro que existía un limite donde Nam no fuera lo vil para mentirle aunque Guk ¿Él era malvadamente bajo para mentirle? Recordó la pelea de la noche anterior, la forma que Guk disfrutaba golpear, derribar a su rival sentirse superior, la droga llamada poder lo enervó hasta convertirse en un ser soberbio por un solo segundo ¿Esa faceta de Guk no le gusta? ¿Lo decepcionaba?  se dejo apapachar por el pelinegro su olor lo embriagaba, el tono de su voz no era tan grave como del de Guk más dulce, calmado, sin el típico aire frío que emanaba de la garganta de su novio, YongGuk daba miedo a la primera vista mientras Nam desprendía confianza.

—Sé que suena pretencioso que esta frase salga de mi boca pero es verdad.—Acerco sus labios a su frente.—Siempre hay un hermano malvado en los gemelos, las personas que nos conocen dicen que Guk lo es.— Beso esa blanca piel.—Se dice que las personas lindas y de alma pura terminan con los peores.— Lo apreso contra su pecho.—Eres una buena persona. 

JunHong se zafo del abrazo cuando escucho la voz de Guk contestar un teléfono, estaba despierto, esa voz lo llamaba así que se dirigió a la habitación donde la puerta se abría asomando un despeinado pelinegro que se colocaba una sudadera, YongGuk emitió una pegajosa sonrisa que el corazón de Jun dio un salto de emoción ¿él no era una mala persona?, no existía eso de los gemelos malos ¿Verdad? Guk lo guardo entre sus brazos su toque era distinto al de Nam, más sobreprotector, posesivo, agresivo, unos labios se estamparon en sus mejillas, en la comisura de sus propios labios, el menor de los gemelos era una alma salvaje.

—¿Qué hacías con mi hermano? .—Le cuestionó pero Jun no contesto se mantuvo mirándolo fijamente.— Eres un niño travieso.—Le susurro besando sus labios introduciendo su lengua.— Mike me ha invitado a una barbacoa en su nuevo departamento ¿Vamos?.—Jun asintió.— ¿quieres ducharte conmigo? 

Jun volvió asentir a Guk no le agradaba el silencio mucho menos la mirada de superioridad que le lanzaba su hermano mayor, la idea de que ellos tuvieran algo le ahogaba, quería golpearlo como al sujeto que derribo en el ring una noche anterior, golpear su rostro idéntico contra el piso pero tenía miedo de que Zelo se asustará que huyera de su lado,no quería mostrar ese lado oscuro, lo quería tanto que le faltaba el aire al no tenerlo cerca, jalo de la mano al menor platicándole los tontos sueños que tuvo mientras dormía ambos reían por las extrañezas que el mayor soñaba. 

—YongGuk.—Jun le llamo deteniendo el andar.—Te quiero, te quiero mucho.

Le dijo en un susurro Bang lo guardo en sus brazos mordiendo su labio inferir susurrándole que él también, esa no era la respuesta que el menor esperaba ya que nunca de lo que llevaban saliendo le decía la misma palabra hasta ese momento sus oídos nunca escucharon un “Te quiero” , un “Te amo” solo un “Yo también” es como si evadiera confesar sus sentimientos ¿No lo amaba?

 

 

El señor Jung miraba a la mujer que estaba delante de él que conversaba con otro vecino era claro que él era el objetivo de esos insultos debido a que la mujer se jactaba de pertenecer a una familia con una alta educación, sus principios eran los más apegados a la moralidad, no era justo que su familia debiera compartir edificio con ladrones sin escrúpulos que en lugar de tener hijos engendran escoria de la peor clase,  no le interesaba los insultos se había vuelto inmune a las lenguas filosas de viejas chismosas que se creen superior al resto de los seres humanos promedio y solo se dedicaban a meterse en la vida de otros porque no poseen una propia.

—Por esa razón yo le prohibo a mi hijo YoungJae que no se acerque a esos jovencitos de su colegio que tienen  mala reputación.— La mujer expreso a su compañera de platica.— Ahora en día no se sabe las malas mañas que hay en esos niños delincuentes. —Elevo la voz para que el señor Jung que estaba en el fondo del elevador escuchara. —Hay manzanas podridas que corrompen a las puras.

—Es verdad señora Yoo.—Le secundo la mujer de avanzada edad.—Pero no es su culpa toda la responsabilidad la tienen esos padres, ellos son lo causantes de tanto mal.

Un clic se hizo en la mente del hombre, el apellido y nombre del maricon que se acostaba con su hijo eran los mismos mordio el labio inferior continuaba con la herida abierta por la traición de su propia sangre en su mente la palabra venganza brotó como una fuente en medio del desierto, estaba harto de los comentarios superficiales de esas viejas, de la forma que denigraban la condición de su hijo, sentimientos afloraron en su pecho él debía odiar también a su hijo por su traición quería desquitar su frustración con alguien y esa orgullosa mujer fue el mejor chivo expiatorio.

—Mi hijo es un ejemplo a seguir tiene una mente pura ni siquiera ha tenido novia.—Agrego la mujer con una sonrisa de hipocresía habitualmente practicada.— No es como esos chicos que se acuestan con cualquier prostituta barata que se encuentran en la calle.— El elevador se detuvo de golpe las mujeres giraron hacia el hombre que iba a sus espaldas, las puertas se abrieron pero el extraño le puso un objeto a la Sra Yoo en las manos.—¿que diablos es eso?.—Grito al ver que era una crema.— ¿que se cree viejo pervertido?

—Es para su hijo debe necesitarlo después de que todo el fin de semana mi hijo se reventó a su hijo.— Le contesto girando para mirarla de frente y reglarle una burlona mueca— ¿Qué no sabia?.—La sonrisa se volvió más burlona.—No sabe que su hijo es la zorra que le abre las piernas a mi hijo? de seguro su querido niño prodigio no ha podido sentarse de lo duro que le dieron toda la noche créame que gime como una ramera.— Estaba dispuesto a destilar todo el veneno acumulado en su cuerpo.— A una ramera le pagan pero su hijo lo hace de gratis, es un maldito maricón que anda dando el c.—Soltó una risa al notar que la mujer se tapaba los oídos.— En lugar de andar quejándose de otras personas dediquese a saber que se mete su amado niño porque le aseguro que mi hijo la tiene bastante grande.

—¿Como se atreve a ofender a mi hijo de esa manera? —Le grito dandole una cachetada. —Se equivoca. 

El sr Jung disfrutaba de esa escena quería que también la familia de ese marica se cayera en pedazos como él había roto la suya, las lagrimas que la mujer derramaba era miel salada que deleitaba sus sentidos para él la manera de librar su propio dolor era causándole la misma pena a otras personas, que ellos también sufrieran.

—Si no me cree pregunte a su hijo. —La reto con un tono de voz frío. —Veamos si la mariquita niega que lleva más de dos meses dejando que mi hijo se la encaje todos los fines de semana.

El hombre sabio del elevador había vaciado su veneno porque con esa mujer había desembocado su rabia que le causaba ser traicionado por su propio hijo, ser cambiado por un chico,  en ese momento no creo que fuera lo correcto pero era una forma de igualar la balanza ahora también ese pequeño marica debía enfrentarse a la reacción de sus padres como su propio hijo lo hizo, una fractura entre ellos era la manera más efectiva de destrozar esa inmoraidlidad y asquerosa dependencia, la que juraba era la razón de la obsesión de su pequeño retoño. 

 

Notas finales:

GRACIAS POR SUS REVIEWS!! prometo contestarlos espero les haya gustado el capitulo, admito que el bangLo es mi pareja consentida xD espero les haya gustado mi lemon, esta algo largo el cap. ya llegamos a la recta final XD 

 

LOS MATOKIS ME ESTAN MATANDO LENTAMENTE CON ESOS TEASERS, NECESITO FOTOS DE SU NUEVO LOOK, LOS NECESITO, YAAAAA si muero de ansiedad, BAP es el culpable :D ya 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).