DaeHyun salía de su cama al escuchar varios golpes en la puerta no tenía muchas ganas de abrir pero los incontables mensajes de texto y voz que Jae le había enviado le indicaban que el menor no se detendría hasta hablar con él, abrió la puerta para dejar ingresar a un agitado pelinegro que lo primero que hizo fue besarlo, acariciar su cabello, trato de dibujar una sonrisa pero le fue imposible era feliz por tener a la persona que amaba a su lado pero el remordimiento por su traición le impedía disfrutar de su felicidad lo sujeto fuertemente de la cintura escondiendo su rostro en ese cuello color canela, se llenaba de ese aroma a té verde, era como estar en casa.
—Te he traído algo de comer.—Levanto su brazo mostrando una bolsa, la pareja se separo y Jae se dirigió a la cocina a dejar los alimentos para después sacar unas hojas de su mochila.—También te he traído notas sobre las clases y las tareas, ibas muy bien levantando tu promedio así que no creo que sea justo que lo vuelvas a bajar. —Se colgó de su cuello pegando sus frente. —¿Como sigues? el chico que golpeaste salió esta mañana del Hospital.
—Ese imbécil se merecía lo que le hice odio cuando la gente juzga sin conocer a las personas. —Contesto irritado rascando su cabello para alejarse al menor.—Mi padre se esta comportando de la misma manera pero él no merecía que lo corriera de esa manera, soy su única familia y ahora esta afuera sin mi apoyo. —Tomo asiento en un sillón. —Te juro que él es una buena persona se comporta de manera errónea porque nadie le ha enseñado hacer cosas buenas, mi abuelo también era un jugador empedernido que se emborrachaba cuando perdía golpeaba a mi padre desquitando su furia, él nunca me golpeo de esa manera aún si me portaba mal, cuando mi madre lo dejo él no me abandono cuido de mi como mejor pudo. —YoungJae se arrodillo a su lado para sujetar su mano. —Yo soy como él, si no hubiera tenido a HimChan o a YongGuk hace mucho tiempo hubiera terminado en una correccional, he tenido tanta suerte con mis amigos y ahora contigo. —Tomo por la mejilla al pelinegro besando sus labios. —Tú me vuelves una mejor persona por ti quiero ser alguien, mi padre nunca tuvo ese apoyo.
YoungJae se colgó una vez más del cuello de su amante besándolo, entendía sus pensamientos, sus deseos, DaeHyun no era de esa clase de personas que abandonaba a sus amigos o sus familiares, él buscaría la manera de que todos hicieran las paces y continuaran a su lado, lo admiraba y respetaba, ese hombre delante de sus ojos era el compañero que anhelaba tener el resto de su vida, decidido a pelear por una causa que la mayoría daría por perdida, él lo apoyaría se sentó en el regazo del mayor lo guardo en sus brazos, despeino su cabello, unos dientes se clavaban en su cuello, una lengua lamia su piel.
—No me interpondré si necesitas tiempo a solas con tu padre hasta que él acepte, me haré a un lado, DaeHyun te amo. —Le susurro sujetando su rostro mirándolo a los ojos. —Te quiero y pase lo que pase quiero estar a tu lado si tú tienes la esperanza de que tu padre cambie de opinión te apoyaré. —Beso sus labios. —Somos una pareja y aprenderemos a superar los problemas juntos, confío en ti.
—Sé que cambiará de opinión. —Le contesto posando sus manos sobre las caderas del menor. —Él no te hará daño, solo necesita tiempo. —Una vez más escondió su rostro en el arco del cuello del pelinegro. — Yo también te amo, mi bello y dulce niño.
Sus labios se volvieron a unir en un beso desesperado la lengua de Jung se deslizo entre los labios sonrosados de Jae quien comenzaba a desabotonarse la camisa, el calor en su cuerpos se volvía insoportable, unos dedos se deslizaban en el borde de su pantalón restregó su entrepierna al sentirlos, los gruesos labios de DaeHyun comenzaron a besar esos hombros desnudos.
YongGuk lanzaba a la cama su teléfono móvil le había enviado mínimo unos 10 mensajes a JunHong para hacer una cita y conversar pero el menor no se digno a contestar, su ira aumento cuando el aparato reboto en el colchón para dar en el piso y destrozarse la pantalla, le dio una patada aumentando su frustración ya era viernes había pasado media semana sin poder hablar con su pequeño caprichoso, sin poder besarlo, extrañaba su sonrisa, el sonido de su voz, su olor, le desquiciaba verse solo sin su compañía saco su maleta hecha al pasillo tenía que ir a un curso para el interinato en la empresa japonesa que estaba aplicando, era un seminario que duraría solo una semana, el director del colegio le permitió faltar debido a su buen comportamiento y excelentes calificaciones, le daba orgullo admitir que era uno de los favoritos llevaba trabajando tanto tiempo para convertirse en alguien respetable para de esa manera alcanzar su meta, un empleo lucrativo, estabilidad económica para su Familia, un futuro prometedor que ofrecerle a su pequeño mocoso.
-—¿Te vas? .—Le cuestionó una voz casi idéntica a la suya una afirmación de cabeza le dio la respuesta.—Buena suerte ¿cuándo regresas?
—Creo que hasta el otro lunes, quiero pasar el próximo fin de semana con los abuelos.—Contestó verificando que llevará su pasaporte y credenciales.—Me tengo que ir es tarde y el taxi ya pito hace un par de minutos, adiós hermano y cuidate.
El menor salió del departamento con prisas sin esperar respuesta mientras entraba al elevador se percato que olvido quitarle la ficha al teléfono chasqueo la lengua pero no tenía caso llevarse el número de sus amigos les había avisado que estaría fuera por cuestiones de su próximo trabajo como becario además JunHong no le contestaría los mensajes así que lo vio como una ventaja para disminuir su ansia de contactarlo, subió al taxi indicándole la dirección del aeropuerto al chofer siguió sus instrucciones diligentemente. Nam cerraba la puerta de la habitación de su hermano descubriendo un teléfono celular en el piso vibrando se acerco a tomarlo descubriendo que era una llamada de entrante de JunHong, la pantalla estaba rota pero se lograba ver una parte, Nam negó la llamada entrante para quitarle la pila y lanzar la carcasa al piso tenía la oportunidad perfecta para abrirle los ojos al menor de una vez por todas.
Sábado en Warrior
Cinco integrantes de BAP levantaban las manos orgullosos de su victoria no había sido fácil pero JongUp, DaeHyun y Zelo habían sacado la casta al vencer en tres enfrentamientos consecutivos, sus rivales cayeron abatidos ante su eficiencia, HimChan y YoungJae dirigieron sus movimientos desde la cabina, el segundo cada vez era mejor en trazar los mejores opciones para los recorridos mientras que el primero tenía una maravillosa voz de mando, era un líder nato que fácilmente llenaba los zapatos de Bang, cuando se vieron felicitados caminaron en dirección a su mesa reservada.
—Enserio me gustaría quedarme a festejar pero mi madre esta como loca y tengo miedo que se de cuenta que me escape. —Se justificó YoungJae dandole un sorbo a su bebida y poniendose su chaqueta se acerco a su amante para besarlo en los labios. —Me tengo que ir ¿Vas a ir a buscar a tu padre?—El mayor asintió regalándole otro beso. —Ten mucho cuidado.
La fogosa pareja se separo y Jae salió del club en medio de un mar de gente, DaeHyun también se despidió de sus amigos ya que había visto un compañero de fechorías muy cercano a su progenitor así que fue a cuestionarlo sobre su paradero, se quedaron tres personas en la mesa pero era obvia la tensión entre los individuos Zelo estaba de un humor insoportable no había tomado de buena manera el hecho de que Bang se fuera ese fin de semana a Japón sin avisarle, sus mensajes solo decían que necesitaba hablar con él pero no especificaba la razón y cuando le devolvió la llamada el mayor sencillamente lo ignoro, no era feliz pensando que Bang andaba en Japón disfrutando de la vida mientras él estaba al borde de un colapso mental.
—¿Entonces tú tampoco has podido hablar con él? —Cuestionó el grisáceo al mayor de los tres. —Se supone que es el líder pero nos deja abandonados casi no ha participado en el torneo, nosotros hemos ganado mientras él se lleva el crédito ¿Cuando regresa?
—Lo más seguro es que no les permitan el uso de celulares, es una oportunidad para Guk ha peleado todo el año por ese lugar así que no quiere perderlo. —Le contesto irritado el mayor al notar que JongUp sencillamente los había dejado y se fue con Alyson a bailar. —No sé que peleas maritales tengan pero debes saber que Guk odia que lo controlen no somos unos malditos perros amaestrados que terminaremos haciendo lo que ustedes dicen. —Se levantó furioso de la mesa golpeando el vaso contra ella. —Regresa el próximo viernes o sábado.
El mayor camino en dirección a la oficina de Maslo para jugar un rato al poker no soportaba ver a JongUp tan sonriente bailar con la persona que le diera la gana, esa tarde trato de hablar con él pero este lo ignoró magistralmente, jamas nadie lo había humillado como el menor lo estaba haciendo, HimChan lo adoraba pero en ese momento su orgullo parecía ser más importante no quería continuar pisoteando su dignidad si su novio se montaba en su macho él también lo haría, no quería ser despreciable pero su paciencia había llegado al limite ya no se arrastraría más por un niño que hacia una rabieta porque no se le cumplió su caprichoso deseo.
YoungJae se escurría por la abertura de su ventana rápidamente se quito su ropa lanzándola a un cesto donde tomo su pijama un par de pasos lo asustaron se lanzo a la cama para meterse entre las cobijas guardando silencio, logro escuchar que sus padres discutían tenían un par de días comportándose de manera extraña se animo abrir un poco la puerta para escuchar mejor su instinto le gritaba que algo malo estaba apunto de suceder, su madre había estado hablando mucho a empresas dedicadas a la mudanza.
—Si solo hablamos con él. —Dijo le mujer nerviosamente. —Es un buen chico estoy seguro que lo entenderá.
—No, no me voy a quedar en este sitio el trabajo es muy bueno y la paga es espectacular. —Contesto el hombro tomando por los hombros a su esposa quien levantaba el rostro nerviosa. —Tenía miedo en tomar esta decisión pero después de lo que me has dicho no quiero seguir viviendo en este lugar.
YoungJae mordio su dedo pulgar cerrando cuidadosamente la puerta quería olvidar esas palabras porque sus temores se estaban volviendo realidad sus padres sabia algo y era claro que por esa razón buscaban mudarse, su mandarín no era tan bueno como el de su padre pero había comprendido que el otro día su padre hablaba por teléfono sobre una entrevista que una empresa en HongKong le hacia, su padre era bueno en su trabajo y siempre tuvo ofertas de otros países pero la obsesión de su madre por quedarse en Corea para que YoungJae entrará a las mejores Universidades los detenian para viajar a otros sitios ahora parecía que su madre no se oponía más sino que aceptaba el cambio, por un segundo pensó en el padre de DaeHyun ¿Si el señor Jung habló con sus padres? ¿Si ellos conocían su relación con Dae? ¿No estaban de acuerdo? trato de dormir pero las dudas lo consumían por dentro de igual manera quiso conversar con su amante pero no quería preocuparlo o causar una pelea entre él y su padre tal vez Jae estaba equivocándose y era paranoico con la situación.
La semana transcurrido con bastante incomodidad para los integrantes de BAP, HimChan casi no había tenido clases debido a que los estudiantes de tercer año se encontraban visitando las Universidades o las mejores opciones para después de graduarse por esa razón sus profesores suspendieron sus respectivas clases debido a que era más importante que los alumnos eligieran su camino a seguir, DaeHyun volvió a clases volvió a conversar con YoungJae quien no le menciono lo que escucho en casa ni le contó sobre el montón de cosas raras que pasaban, en las tardes no podían estar juntos debido a que el padre del segundo lo recogía en la escuela y lo llevaba a casa, sus padres lo mantenían más vigilado que nunca en el caso de los dos maknaes no soportaban su mal humor ambos maldecían a sus respectivas parejas por una parte JongUp no lograba entender por que Him no iba a él para pedirle perdón mientras que JunHong no soportaba los nervios por no saber nada de Bang y que este no hiciera nada por contactarlo ninguno de los dos estaba muy seguro de los sentimientos de los dos mayores.
Sábado en la mañana
JunHong se encontraba de pie delante de la puerta del departamento de su novio en los últimos días no soportaba las ansias de verlo, levanto el brazo dispuesto a tocar el timbre, esa semana la soledad le causo una terrible depresión en su interior no solo por la pelea con Guk, sin sentido, sino que el resto de los chicos también tenían fricciones la madre de YoungJae cada vez estaba más autoritaria prohibiéndole la salida en las tardes, HimChan y DaeHyun no estaban de humor de tratar con el resto, el primero era quien se comunicaba con el resto para el torneo de Parkour pero sencillamente sus peleas con JongUp impedían una sana convivencia mientras que el segundo simplemente no estaba interesado nada más que buscar a su padre.
—¿No te vas animar a tocar?.— Una voz conocida capto su atención, Jun le regalo una mediana sonrisa a Nam. —Me haces feliz al pensar que vienes a buscarme ahora que Guk no esta en Corea.— El menor cuestiono con la mirada las palabras.—¿No sabias? Tu querido novio no ha regresado de Japón tal vez se encuentra tan feliz que no quiere volver.
—No es mi novio y no, no sabía que aun no regresaba.—Confesó dejando escapar un suspiro de molestia. —¿cuando regresa?. —Nam subió los hombros dandole a entender que no tenia idea.—Es común en él no decirle nada a nadie, me tengo que ir.
Jun estaba dispuesto a huir pero la mano del mayor lo detuvo este le mostró una bolsa con comida rápida dandole a entender que lo invitaba a almorzar, el menor no estaba de humor para volver a casa así que acepto la invitación ademas extrañaba el aroma de YongGuk, ingresaron al departamento se dirigieron a la cocina donde Nam con la ayuda de su invitado preparo la mesa para una dulce velada comenzaron platicando de temas irrelevantes, clima, capítulos de series, noticias de moda sin tocar el tema de YongGuk, el mayor era consiente que su hermano ya se encontraba con sus abuelos Natasha le había llamado en la mañana de igual manera esta le comentaba sobre un extraño descubrimiento, el curso de su hermano fue en Osaka donde Ariana, la ex novia de Guk era originaria, por curiosidad Nam entro a la red social de la japonesa sabía que era una fanática a las redes sociales siempre subiendo fotografías fue entonces su suerte se volvió más poderosa días antes parecía que la mujer se encontró con Yong y se tomaron un par de fotografías era la prueba irrefutable que necesitaba para por fin destruir la fe ciega que JunHong le juraba a su hermano, hizo a un lado su plato vacío.
— No quiero meterme en tu vida pero ¿Pensé que Guk y tu eran novios? Bueno es una palabra demasiado formal que tal vez mi hermano no este familiarizado pero creo que tenían una relación.—Jun mantuvo cerrada su boca con la última persona que quería hablar de sus sentimientos era con esa personas delante de él. —Zelo en realidad me agradas pero quiero que veas como en realidad es mi hermano, él no quiere a nadie, bueno después de Ariana se volvió alguien de piedra, no es su culpa él en realidad la amaba fue la primera chica que presentó ante toda la familia. —Una mediana sonrisa apareció en su rostro al darse cuenta que el rostro de Zelo se desencajaba. —No estoy diciendo que mi hermano no pueda quererte sino que él no ha dejado de amar a Ariana, ella era una parte muy importante para su existencia.
—Ellos terminaron hace tiempo ella decidió volver a Japón y hacer su vida, Guk me dijo que las cosas no funcionaron. —Le contesto no quería justificar a Guk pero no le agradaba que hablaran a su espalda. —Nuestra “relación” es “especial”.
Nam trato de no sonreír por fin había encontrado el talón de Aquiles de ese lazo que tanto unía a Zelo con su hermano, era una hebra delgada pero si jalaba de ella terminaría por desbaratar esa absurda relación, él seguía creyendo ciegamente que Yong seguía amando a Ariana, Nam merecía a JunHong ellos eran tan idénticos reian de las mismas tonterías, habían nacido para complementarse ademas esa sería la venganza perfecta por fin Nam le ganaría a Guk, le quitaría a alguien como él lo hizo con Micky, poso sus manos encima de las blancas manos de Jun.
—Ustedes no tienen una relación solo son compañeros de equipo, amigos con derecho. —Le susurro acercando su rostro. —Se sienten cómodos pero él solo te ve como un chico con el cual se divierte un rato y disfruta del sexo. —Bajo su mirada mientras sus pulgares acariciaban la piel de Jun.—Ellos se separaron es verdad pero solo se dieron un tiempo porque estaban seguros que en el futuro se volverían a encontrar, ellos se aman más de lo que tú tal vez piensas que lo amas.—Jun trataba de mantener la compostura, Nam soltó al menor para sacar su móvil y enseñarle unas fotos. —Era cuestión de tiempo para que se encontraran.
JunHong tomo ese aparato sus ojos se abrieron como platos al ver una foto marcada con la fecha del jueves pasado, en ella estaba una bella chica de piel canela abrazando por el cuello a un serio pero contento Bang, deslizo su dedo mirando las siguientes fotos, Guk estaba rodeado por más personas en una clase de reunión pero la chica estaba a su lado haciendo una V con sus dedos, volvió a deslizar su dedo en la imagen estaba la chica alimentando al coreano quien tenia las mejillas sonrojadas Jun enfoco su mirada en el comentario que tenía agregada esa estampa “Volverte a encontrar me recuerda la frase no existen las coincidencias solo lo inevitable #loveyou ” fue un tonto al pensar que YongGuk podría amarlo era más que obvio que el mayor nunca lo podría hacer porque su corazón le pertenecía a otra persona, le dolía verse como el perdedor de esa estúpida novela, llorar por un hombre que nunca iba a voltear a verlo, solo fue su entretenimiento de medio tiempo.
—Es claro que tu hermano y yo solo somos amigos. —Le contesto devolviéndole el teléfono ahora entendía porque no le contestaba los mensajes, llamadas, estaba muy entretenido recuperando a su ex. —Me tengo que ir, es tarde y gracias por la comida.
Nam detuvo la huida del menor quería escucharlo explotar maldecir a su hermano, aborrecerlo, que su corazón padeciera de dolorosas heridas para él curarlas y ayudar a crear cicatrices, ser el hombro en el cual llore, consolarlo, para que viera que en el mundo hay más oportunidades que penas, lo guardo en sus brazos pero Jun se oponía firmemente no quería derrumbarse en ese sitio, era como un estúpido que ve la verdad con sus propios ojos pero sueña que no sea verdad, quien ruega desesperadamente que ese sea un mal sueño sea una pesadilla de la que pronto despertará con Guk a su lado besando sus mejillas, limpiando sus lagrimas, aprieto sus manos hechas un puño.
—No quería lastimarte Jun para mi era mejor ocultarte la verdad pero debes conocer el verdadero rostro de mi hermano. —Le volvió a susurrar al oído. —Tu tal vez estés enamorado pero él no, él no quiere una relación, un novio, eres su amante, el juguete con el cual se divierte te tiene aprecio pero solo es eso, no te ama, él todavía sigue amando a Ariana, a la chica que le compuso canciones, a quien presento a todo el mundo como el amor de su vida, quien lo hacía reír como un tonto, tú mismo lo viste en esas fotos.—Jun negaba con la cabeza conteniendo su rabia. —Todo este plan de trabajar en una empresa japonesa lo ha hecho por ella porque quiere volver a estar a su lado, lo has visto pelear por ese puesto, desvelarse porque es su sueño tener algo que ofrecerle a Ariana, ellos terminaron porque Bang no tenía nada que ofrecerle a una chica que viene de una acomodada familia. —Algo dentro de Zelo se rompió sus ojos se abrían a la realidad. —Ellos se aman Jun y tu debes entender que no tienes lugar en esa bella historia de amor.
—No estoy enamorado de tu hermano, no lo quiero. —Le contesto gritando apretando los labios para sostener su dignidad humillada deshaciéndose de ese agarre. —Por mi se puede ir a Japòn y casarse con el amor de su vida. —No estaba destrozado sino molesto consigo mismo por haber sido un imbécil. —No me interesa lo que le suceda, no lo quiero, nunca me ha importando que se pudra en el Infierno
Jun salió corriendo del departamento se encontraba dolido por esa situación, el asco de si mismo le causaba nauseas ¿como fue tan estúpido? ¿como pudo confundir sexo con amor? él era el culpable de esta tontería creada en su enferma cabeza, él era el grandísimo idiota por confiar en una personas que sentía placer golpeando a otros seres vivos, por alguien que nunca mostró más que un interés claro hacía lo físico, él había resultado ser un perfecto entremetimiento de medio tiempo YongGuk nunca lo vio como algo más, era su juguete con quien se divertía mientras su corazón era de alguien más, las puertas del elevador se abrieron golpeo el muro frustrado, su móvil sonó.
—No pienso ir a la maldita competencia.—Escupió casi gritando no quería tener nada que ver con el hombre que había jugado con sus sentimientos. —Me importa un maldito comino que pierdan el pase a las finales y dile a tu amigo que en su jodida vida me vuelva a dirigir la palabra.
Colgó la llamada no estaba de humor para ver la cara de sus amigos, no escuchar sus estúpidas preguntas sobre Guk, era un verdadero idiota saco todo el dinero que llevaba en su cartera, no estaba seguro que era mayor, su dolor al saber que YongGuk nunca lo amo o la rabia de verse como un idiota rogando algo que nunca sucedería ¿Cuantas veces Bang se reiría a sus costillas? fue un estúpido por haberle dicho tantas veces que lo amaba al salir de edificio paro un taxi indicando una dirección, borraría su deshonra de la única manera que conocía esa noche no le importaba más ser alguien bueno, no más JunHong amable era mejor seguir su vida sin creer en el cariño de las otras personas estaba mejor solo que ser la mascota de un maldito desalmado.