JunHong abría lentamente sus párpados los rayos del Sol habían terminado por inundar esa pequeña habitación que horas antes abandono los penumbras para ahora estar rodeada de luz, el menor trato de moverse pero algo en su regazo se lo impidió instintivamente llevo sus manos a ese cabello negro dispuesto a tomar el rostro del extraño, se agacho decidido a besarlo pero su mirada se afilo y descubrió que ese intruso no era la persona que un inicio creyó que era, de un sobresalto se puso de pie, el sujeto también se despertó de golpe por el súbito ajetreo y ambos se miraron fijamente.
—Buenos días hyung.—Comento seriamente el chico de cabellos color plata quien acomodo su ropa y se preparo a salir.—Voy a ir a buscar a Guk.
—Espera.—El mayor detuvo la huida del menor sujetándolo de la mano.—Lo siento no quise incomodarte pero anoche estaba muy cansado y tu regazo era tan cálido que me quede dormido.—Sus mejillas se sonrojaron entrelazo sus dedos con los del contrario.—¿Te puedes quedar un momento más? por favor.—Suplico jalando al menor quien negó enérgicamente.—¿Por qué?
Jun mordió su labio inferior, le agradaba su cuñado pero su cariño se fundamentaba simplemente en una amistad, una relación de pariente político ya que era el hermano mayor de la persona que amaba, le agradaba su personalidad pero no buscaba fomentar otro sentimiento fuera del formal que sostienen dos parientes políticos trato de liberar sus dedos de ese agarre, le incomodaba la forma que lo miraba, el tono que usaba, dulce, tierno, tal vez hubo un momento en el pasado que creyó tener otras emociones pero no, un corazón no puede latir en dos cómpaces distintos.
—No quiero que YongGuk malintérprete la escena.—Se armo de valor para alejarse.—No quiero pelear con él, no ahora que esta débil.
—¿Como puedes ser tan ingenuo? ¿No recuerdas las fotos que vimos? para él no tienen una relación solo eres su hombro en donde llorar mientras llega Ariana, eres un reemplazo, un entretenimiento ¿le has preguntado porque decidió entrar a trabajar a una empresa japonesa? —Jun negó evadiendo la mirada que el mayor le regalaba.— No seas un tonto que cree en sus palabras, él no te ama, te encuentras tan ciego que no te das cuenta que hay personas que daríamos nuestra vida misma por ser queridos por ti. —El hombre se acerco al menor para arrinconarlo en una esquina.—Eres un maravilloso ser que merece ser amado de la manera correcta, ser el actor principal de una bella historia de amor ¿No puedes darte cuenta de mis sentimiento?.—Acerco peligrosamente sus labios.—Me gustas, no, miento, te quiero, mi corazón se vuelve loco cuando te encuentras a mi lado.—Llevo sus manos entrelazadas a su pecho para que Jun sintiera sus latidos, eran gritos silenciosos que pregonaban el gran cariño que ese hombre le profesaba.—JunHong te amo.
YongNam acorto la distancia entre ambos, beso esos labios rojos en cuestión de segundos el menor reacciono de golpe, él no quería ser forzado, no deseaba esa caricia, no la buscaba trato de alejarlo con un repentino movimiento pero la fuerza impuesta por ese hombre lo doblegaba, el menor cerro los ojos concentro su voluntad interna en un solo golpe, lanzó lejos de él al mayor quien miraba la escena incrédulo, por la rebelde actitud del objeto de su deseo, la respiración de JunHong se volvió más erradica.
—No vuelvas a tocarme, los problemas con mi pareja los resuelvo yo solo, no necesito un niñero estoy bastante grande para saber que decidir en mi vida. —Le grito apuntando al pecho del pelinegro con la punta de su dedo.—No malinterpretes mis acciones, eres el hermano mayor del hombre que amo y solamente eso, no aspires a algo que nunca serás.
La puerta se abrió violentamente, una tercera figura hizo acto de presencia, el semblante del extraño no lucia amable sino cansado, nervioso y un poco molesto al notar que las dos unicas personas habitando en ese cuarto era su amante y su hermano, dio un par de pasos dudando sobre el lúgubre ambiente que se había instalado en el espacio.
—¿Sucede algo? —Cuestiono a ambas personas sin recibir respuesta, Guk dirigió la mirada al más pequeño del grupo. —Buenos días. —Le dedico una sonrisa para sujetarlo por la cintura y darle n ligero beso en los labios, llevo sus ojos a su hermano.—No sabia que estabas aquí, espero no hayas molestado a MI JunHong.—Su tono de voz era el de un hombre celoso.—Es hora de retirarnos. —Entrelazo sus dedos con los de Jun para arrastrarlo a la salida pero antes volvió a regresar su mirada al mayor.—Mantente alejado de JunHong sino quieres que te pase algo malo, no, no es una amenaza es una promesa.—Nam dio un paso hacia delante decidido a enfrentar a su hermano menor, en ese momento la ira suprimía cada rasgo de cordura que alguna vez existió en su cuerpo.—No Nam, no en el funeral de nuestro abuelo.
El menor de los Bang arrastro a su pareja fuera de la habitación, Nam se mantuvo de pie en el mismo sitio por varios minutos sus dientes castañearon de rabia, la frustración lo consumía a tal grado de soportar el enorme peso en su pecho que le imposibilitaba respirar, golpeo una pequeña mesa que se encontraba en un extremo, su hermano no era merecedor de ese ángel que tanto lo amaba, nunca lo fue. JunHong detuvo el andar del mayor quien aumentaba el ritmo al sentir la repentina pausa se giro en busca de respuestas, el menor quería por fin obtener respuestas a las miles de preguntas que se formaban en su cabeza abrió los labios decidido a formularlas pero una figura detrás de su amante lo congelo, ahí se encontraba esa mujer, la protagonista de todas sus pesadillas.
—¿YongGuk ? —El mencionado giro para observar a la mujer de tez morena que corría abrazarlo.—Lo lamento tanto, no sé que decir, amabas tanto a tu abuelo.—Ariana rodeo con sus brazos al hombre, lo sostuvo fuertemente y Bang contesto la muestra de cariño.—No sabes lo mucho que lo siento.
YongGuk encontró un poco de calma en esa intima caricia, Ariana fue su primer amor, la mujer que cambio su forma de ver la vida, la precursora de sus nuevos ideales, JunHong se soltó del agarre no soportaba esa escena, los celos, el miedo, la frustración lo sumergían en un abismo repleto de terror, de desasosiego, se hundía en la más terrible desesperación así que camino hacia la sala principal no era lo suficiente fuerte como aguantar un beso, una caricia más profunda, Bang al percibir que su mano estaba vacía busco con la mirada al joven de piel blanca, trato de escapar de esos brazos.
—Ariana gracias por venir.—El pelinegro agradeció para alejarse.—Creo que no podré presentarte a mi novio.—La mujer desarrollo una sonrisa en sus labios disculpando al joven que huyo.—Vamos adentro.
—Creo que lo asuste.—Contesto la mujer tomando el brazo del hombre, durante su visita en Japón la pareja de ex amantes confeso sus sentimientos, Bang le habló del maravilloso ser que ahora ocupaba su corazón y la mujer le confeso que viajaba a Londres a seguir al amor de su vida.—Si, quiero saludar a Natasha.
La pareja ingreso a la sala donde continuaba los últimos toques funerarios para el señor Bang, YongGuk trato de moverse a lado de Zelo pero este huía continuamente, durante el trayecto al cementerio prefirió mantenerse lejos, no quería iniciar una pelea, los eventos continuos fueron más íntimos, solo una pequeña comitiva ingreso al mausoleo para dejar los restos del patriarca cuando YongGuk salió no encontró a su pequeño amante trato de contactarlo pero el celular no funcionaba, las fuerzas escaparon de su desgastado cuerpo, las heridas de la pelea continuaban abiertas, el sueño era una sombra pesada que se acomodaba sobre sus hombros, por ello al llegar a casa se quedo dormido sin poder aclarar la situación con su pareja, el fin de semana se atravesó y después de que Jun le contestará que estaba ocupado con problemas familiares YongGuk decidió alejarse de su teléfono móvil, paso el tiempo necesario con su abuela quien decidió irse a vivir a Busan con Natasha, una luz se encendió en el interior de ese núcleo familiar cuando la hermana mayor anuncio que estaba esperando un bebe y le pidió a la mujer, que fue como su madre irse con ella, acompañarla en esta nueva aventura que el destino le proponía, el menor de los hermanos por primera vez dibujo una sonrisa franca y serena, no debía albergar pena por la partida de su abuelo, puesto que debía reservarla para los desgraciados que le sobrevivieron y lloran con amargura, ya que ellos fueron quienes quedaron privados de tan bello ángel.
YongGuk cruzaba la puerta principal cuando percibió varias miradas curiosas lo observaban fijamente, susurraban palabras entre los diversos grupos de amigos que se formaban en la plaza principal, intercalaban miradas entre su persona y los teléfonos móviles que llevaban en sus manos, una extraña sensación recorrido la columna vertebral del pelinegro, no era una agradable señal ser el objeto estudio de la escuela entera cuando ingreso a su salón de clases rápidamente se percato que sus compañeros tenían el mismo comportamiento, un sujeto se puso de pie armado de valor por las porras de su grupo de amigos le extendió un pedazo de papel con una pluma.
—¿Me das tu autógrafo ? —Le cuestionó con una burlona sonrisa pegada en su rostro.—Wow eres buen actor aunque quiero saber la identidad del chico al que te jodias en el video.
Bang arrugo la frente, un enorme símbolo de interrogación se creo en su cara abrió los labios decidido a cuestionar esa petición pero su nombre nuevamente era mencionado, esta vez por un profesor que le pedía dirigirse a la oficina del director, dejo su mochila en su lugar para dirigirse al sitio comentado nuevamente la sensación de ser observado lo invadía, al llegar ingreso al cuarto donde un hombre de avanzada edad y con lentes dejaba escapar un suspiro juntaba sus manos acomodando los codos sobre la fría madera de su escritorio, Guk tomo asiento sin entender el aire tan pesado que rodeaba esa escena.
—No soy nadie para juzgar la vida personal de mis alumnos pero tú eres distinto, eres un chico que merece mis respetos por la sed de superación que se ve reflejado en tus acciones pero hay muchas personas cegadas por las etiquetas que la sociedad impone.—YongGuk arrugo la nariz sin comprender esas palabras, era como despertarse en un mundo que giraba diferente al de una noche anterior.—La empresa japonesa ha retirado la oferta para que pertenezcas a sus filas de igual manera has perdido la beca que te ofrecían, creen que tus actos inmorales no están enfilados a los valores que manejan.—El estudiante salto fuera de su asiento.—Creo por tu reacción que no sabes de lo que hablo.—El director giro la pantalla de la computadora para reproducir una parte del video que se encontraba en un sitio web famoso, era YongGuk teniendo sexo con un chico al que habían pixeleado el rostro, pauso la escena.—El video llego a los reclutadores y lamento decir que te excluyen del programa por esta razón.
YongGuk se quedo sin palabras, la vergüenza cubría su rostro, un sudor frío recorría su frente se encontraba apenado de que su vida sexual quedara grabada en un video donde morbosos se divirtieran, hizo una reverencia disculpándose con el director, le dolía perder la oportunidad de entrar a una prestigiosa Universidad, defraudo a una de las personas que creían en él.
—Entiendo la decisión de la empresa cuando firme el contrato de confidencialidad sabía que si algo como esto salía flote podía perder mi pase.—Se enderezo con la mirada fría.—No he sido yo quien subió el video pero descubriré quien fue ¿Habrá repercusiones para mi en el colegio?
—Claro que no pero si los culpables son estudiantes serán castigados.—EL hombre contesto seriamente.—Lamento que esto pasará después de la muerte de tu abuelo pero entiende que se ha cerrado una puerta pero hay muchas ventanas a tu alcance, no te des por vencido.
El estudiante agradeció las palabras del hombre para salir de la oficina, sus manos formaron un puño no necesitaba ver completo el video conocía la identidad del camarógrafo, él mismo supo en que momento fue filmado pero nunca creo que su propia sangre lo traicionara, que lo vendiera por ninguna recomposición, era un ataque directo, inicio una carrera hacia la puerta de salida donde su presa se encontraba parado junto a JunHong quien tenia una sonrisa de sonrojo en su rostro, Nam había ido al colegio en busca de Zelo para disculparse por el beso de igual manera ofrecerle solo su amistad cuando giro su rostro hacia el furioso hombre que lo llamaba no tuvo tiempo para contestar debido a que un puño se estampo en su cara causando que fuera a dar al piso donde una ráfaga de golpes lo sorprendieron más.
—Eres un maldito hijo de p..—Le grito en estado frenético el hombre estampando sus puños en ese rostro idéntico al suyo.—¿Qué diablos te hice yo para que me jodieras la vida? maldito bastardo me has quitado lo único que me quedaba.—Lo sujeto del cuello para golpearlo en la acera donde varios alumnos lo rodeaban.—Luche por esa beca, por ese trabajo, era mi futuro, mi deseo ¿Que daño te hice?
—Por favor Bang detente, deja de golpearlo.—Grito asustado JunHong tratando de detener a su pareja, lo rodeaba por la espalda.—Lo vas a matar.
Bang estiro el brazo para lanzar lejos al menor, HimChan, DaeHyun, hicieron acto de presencia de igual manera YoungJae y JongUp comenzaron a dispersar a la gente reunida, los dos mayores sujetaron a su amigo por los brazos para alejarlo de su lastimada víctima, Nam escupía sangre, su ojo derecho se encontraba morado de igual manera el labio inferior estaba roto, YongGuk se oponía con fuerza a que lo detuvieran, bufaba furioso, anhelaba que su sed de venganza se saciara con los golpes que trataba de lanzar, la infame jugarreta del mayor le causo un terrible dolor, el lazo de hermano que lo mantenía unido a ese ser de facciones idénticas había desaparecido como un copo de nieve a mitad del caliente desierto, no lo respetaba más.
—Estoy cansado de ti, no quiero que me vuelvas a dirigir la palabra, eres un maldito bastardo.—Le volvió a gritar mientras era sujetado por sus amigos, su ira aumento cuando noto como JunHong ayudaba a su antagonista a ponerse de pie.—Quiero que te mantengas alejado de JunHong, no lo vuelas a mirar, tocar, eres un estúpido idiota que envenena todo lo que toca, me has quitado el único sueño que tuve desde hace mucho tiempo quería ir a esa Universidad, ese empleo, eran las armas perfectas para salir de la maldita miseria donde estoy por fin iba a ser alguien, convertirme en una persona respetable que cualquier padre admire, era mi sueño, mi meta y tú ahora la has destrozado. —Se deshizo del agarre su pecho subía y bajaba de manera erradica.—Ahora soy un don nadie, no puedo ofrecerle a la persona que amo un futuro, anhelaba pasar el resto de mi vida con ese ser que me enseño un nuevo mundo ambos saldríamos adelante pero tú has roto mis sueños.
—Ariana debe aceptarte como eres.—Interrumpió Jun sorprendido por la manera que Bang le hablaba a su hermano mayor, por la ira que estaba inyectada en sus ojos, le dolía verlo sufrir por perdida de la oportunidad de estar con esa mujer.—No tienes que culpar a tu hermano por tus errores ademas siempre quedará otra opción, si tanto amas a Ariana vete a Japón, vuelve a Osaka donde fueron muy felices la semana pasada.
El rostro de YongGuk se contrajo, le dolía descubrir que la persona que amaba defendía al arquitecto de sus desgracias quiso gritar de rabia, maldecir, lanzar alaridos de dolor y lista de las peores obscenidades, simplemente estaba cansado, harto de pelear contra la corriente, JunHong era tan ciego, tan inseguro que nunca vio el amor más profundo que le profeso durante ese tiempo, la forma que lo cuidaba, sus ojos se pusieron vidriosos tenia muchas ganas de soltarse a llorar, cuando todo a su alrededor se desvanecía, una casa de naipes que cada en la primera brisa del otoño, se estaba ahogando en un fango, en un pantano de pesadumbre, miedos y tristeza.
—No sé de que diablos hablas JunHong pero estoy fastidiado de estas peleas absurdas.—Se acerco para tomar la mano de Jun pero este se alejo dando un paso hacia atrás.—Creo que he demostrado mis sentimientos hacia ti, Ariana y yo no tenemos nada, solo somos buenos amigos.
—A ella le has dicho que la amas.—Volvió a interrumpir dando un par de pasos hacia atrás dudoso de sus palabras, la mirada que Bang le regalaba era indescifrable.— Nunca me lo has dicho a mi, ni una sola vez.
YongGuk mordió su labio inferior por la falta de esas incoloras palabras el menor dudaba de su amor, no podía creer tanta estupidez, JunHong cerraba y abría sus ojos en continuas veces ahora que tenía al mayor frente a él, sus temores se esfumaban ¿En realidad era un necesario un te amo entre ellos? capto como el contorno de esas cuencas se humedecían ¿Estaba apunto de llorar? estiro su mano para alcanzar esas mejillas pero Guk se negó a ser tocado.
—¿es tan importante para ti esa estúpida palabra que todo lo que he hecho por ti? No soy un maldito príncipe de tu telenovela rosa, no busques en mi lo que no existe, no demuestro mi amor con palabras sino con hechos, acciones, he dejado que veas la parte más débil de mi persona, te he contado mis miedos, mis sueños, pensé que teníamos una relación donde las palabras no eran necesarias. —Se dio media vuelta para irse.—Si quieres un maldito galán ahí esta mi hermano, quédate con él, tal vez él alcance tus malditas expectativas.
YongGuk salió corriendo no aguantaba otro momento en ese lugar, la falta de aire le causo un nudo en a garganta por primera vez alguien consiguió romperle el corazón, sus piernas se movieron por instinto, el viento frío del otoño golpeaba su rostro, una terrible taquicardia invadía su pecho cuando no le quedaron más fuerzas encontró un pequeño escondite donde se dejo caer en un rincón donde comenzó a llorar, lagrimas recorrían su tersa piel, si, admitía que Zelo fue el remplazo de Ariana pero no existía ser que pudiera reemplazarlo, era una pieza única en ese Universo llamado realidad, golpeo el piso furioso, fue un estúpido siempre pensando con los sentimientos y no con la cabeza, en ese preciso momento simplemente estaba devastado, cansado, de luchar por un futuro que no era claro, era turbio y le asustaba no saber que hacer.
Un mes después.
Una voz femenina anunciaba el vuelo hacia HongKong los viajantes se apresuraron a seguir las indicaciones pero hubo un joven que se detuvo a mitad del ajetreo miraba fijamente su teléfono dudaba en continuar su andar con el mar de gente que lo apresuraba a decidir que camino tomar, YoungJae terminaba de leer un mensaje de DaeHyun que decía “Espero tengas un buen viaje recuerda que cuando vuelvas seguiré esperándote en el mismo lugar que esta mañana me dejaste, siempre te amaré.” releía una y otra vez esas palabras ¿Porqué debía dejarlo? llevo sus ojos a su padre y madre que volvían por él para arrastrarlo a la puerta que la mujer les había voceado formarse.
—Debemos irnos.—El padre hablo duramente.—Deja tus lloriqueos.
—Puedes llevarme al fin del mundo, esconderme en mi habitación, pueden pasar los años pero jamas podrás cambiar lo que soy.—Le contesto YoungJae cargando su maleta.—Padre soy gay, no hay distancia suficiente para que olvide a DaeHyun, lo lamento padre.—Hizo una reverencia de 90 grados para después erguirse y entregarle el boleto de avión a su madre.— Tú sueño se volvió mío, aquí se quedan mis anhelos, mis metas, quiero entrar a la Universidad que soñaste, volverme alguien de bien.—Apretó fuertemente las manos de su madre.—Me voy a quedar en este lugar por que es mi decisión, padre ir a HongKong siempre fue tu sueño pertenecer a una empresa donde se te respete y valore.—Se arrodillo, agacho la cabeza hasta pegarla al piso, varias personas miraron la escena .—Permite que me quede, por favor padre.
—Si te quedas en Corea no recibirás nuestro apoyo.—Articulo la mujer debido a que no quería perder a su único hijo quien asintió con la cabeza.— Tendrás que enfrentarte al mundo solo.
YoungJae volvió afirmar con un movimiento de cabeza, estaba dispuesto aceptar ese castigo con tal de continuar andando el camino que él eligió, si tomaba el rumbo equivocado cargaría con las consecuencias continuo con su suplica física cuando percibo como su cabello era acariciado, nuevamente el sobre con el boleto era acomodado en sus manos lo apreto fuertemente cerrando los ojos percibo como los dos pares de zapatos delante de él se movían, levanto el rostro descubriendo que sus padres se alejaban, leyó la frase escrita en el sobre “Siempre tendrás a un hogar a donde ir.”, YoungJae abrazo ese sobre con fuerza era la forma que su padre lo dejaba cometer sus propios errores o aciertos, le dejaban una puerta abierta.
JongUp cerraba la puerta de su habitación caminaba por el pasillo apagando su teléfono móvil antes de salir fue a la cocina a tomar algo de agua y recoger su abrigo dejado en el respaldo de una de las sillas, en ese sitio se encontró a sus padres que conversaban animadamente al ver lo bien vestido que iba su hijo fruncieron la frente, JongUp se sirvió el liquido para beberlo y dejar el vaso en el lavabo.
— ¿Vas a salir nuevamente? —Cuestiono uno de lo hombres.—Creo que hemos hablado sobre esta relación …
—No pueden evitar que comenta mis propios errores o elija mi futuro, son mis padres respeto la opinión que tiene sobre la persona que amo pero no les otorgó el derecho para tomar mis decisiones, seguiré con mi relación les guste o no, tal vez mañana él me rompa el corazón o sea yo quien lo lastime pero aceptaré las secuencias de mis propias elecciones.— Tomo su chaqueta que colgaba del respaldo de una silla.— Los quiero.
Hizo una reverencia para salir por la puerta principal, los padres son guías, apoyos, compañeros pero no siempre deben cargar con el peso de nuestras decisiones, lo jóvenes debemos tener el suficiente temple para saber que camino elegir, aceptar los errores y festejar los aciertos, los padres de JongUp estaban temeroso de que su hijo sufriera pero comprendían que era momento que el menor madurara, esa novela iniciada por su progenitor debía ser descrita por el protagonista no los personajes secundarios, la pareja se tomo de la mano debían sentirse orgullosos de que su hijo fuera un ser independiente con ideales propios, que labraba su propio destino.
HimChan lanzaba un cojín a DaeHyun que no dejaba de hacerle burla por lo arreglado que iba a su primera cita formal con su novio oficial, era extraño para ambos el nuevo rumbo que había tomado sus vidas, los tres amigos, ellos dos y Bang decidieron rentar una pequeña casa donde la compartían, se dividían gastos cada uno contaba con un bosquejo sobre lo que seria su futuro, estaban indecisos pero ansiosos por experimentar el nuevo horizonte que se les dibujaba a la lejanía.
—Mi padre se ha estado portando bastante bien el abogado me comentó que solo es cuestión de tiempo y tal vez por buen comportamiento salga ates.—Agrego DaeHyun mientras abrazaba el cojín y encendía la televisión.— Será bastante caro pero Bang me ha dicho que consiguiera una parte no me agrada saber que continuará peleando pero he descubierto que al líder en realidad le gusta pelear.
— Creo que Guk ha sido nuestro mayor apoyo, mi madre esta muy contenta con el trabajo que Natasha le consiguió en Busan, no estaba muy feliz de que ella se fuera pero sé que es necesario que busque su propia independencia me siento seguro al saber que la señora Bang y la familia de Natty cuidaran de ella.— Contestó el mayor poniéndose de pie debido a que era tarde para su reunión.— No te vayas a quedar dormido recuerda que es tu primer día como bartender en Warrior.
El pelinergo le lanzo otro cojín al menor quien trato de evadirlo pero fue a dar a su rostro, DaeHyun era consiente que para los tres inquilinos de esa vieja, desgastada casa se presentaba un nuevo comienzo, el inicio de un camino desconocido, DaeHyun trabajaría medio tiempo mientras conseguía el próximo año una beca en una Universidad, HimChan aún no decidía que estudiar pero había ingresado a trabajar de tiempo completo a un periódico como fotógrafo no era mucha la paga pero tenía el suficiente tiempo para aprender nuevas cosas y elegir qué estudiar, unos golpes en la puerta captaron la atención de Dae quien salto fuera del sillón con un gesto de molestia, odiaba cuando su compañero de casa olvidaba las llaves, unió los labios formando una sola linea pero al abrir se llevo una agradable sorpresa.
—No puede irme, no quiero dejarte, no puedo postergar estos sentimientos, te quiero DaeHyun, te quiero.—Habló rápidamente el menor quien dejo caer sus maletas y tomo entre sus manos el rostro del moreno.—No tengo donde quedarme, estoy sin dinero, realmente he cometido la locura más grande de mi vida pero era lo que mi instinto me gritaba hacer.
—Siempre donde comen tres alcanza para un cuarto, mi brazos serán tu hogar.—Contesto respondiendo el beso, lo sujeto fuertemente de la cintura pegándolo a su cuerpo.—Gracias por quedarte, te quiero.
La vida esta repleta de momentos inesperados pero es decisión de cada uno saber como afrontarlos, las locuras a veces son las elecciones más sabias porque se hacen con el corazón, por que son honestas con nuestras emociones, los dos chicos eran solo dos niños de 17 años que no estaban seguros si el amor que sentían era para toda la vida pero no querían quedarse con la duda fue por ello que iniciaron un camino que no planearon, ni imaginaron pero les agradaba la idea de que su futuro comenzara con una locura y tal vez terminará de la misma manera.
HimChan levantaba la mano para saludar a su novio que se encontraba sentado a mitad de una plaza bastante concurrida corrió hacia él para abrazarlo por la cintura y besarlo fuertemente en los labios, tener miedo de no ser aceptado por el resto de la sociedad es un sentimiento general y universal pero el terror es la confirmación de que estamos vivos, todos tenemos miedo, pero hay que saber diferenciar aquel que no nos lastime, que nos haga crecer y no elimine nuestra personalidad para HimChan el ser juzgado por curiosas miradas, castigado por lenguas venenosas dejo de ser un peso que lo hundía en la desesperación, no le importaba, ni le interesaba porque tenía sueños más importantes.
—Te vez muy guapo el día de hoy.—Le comento con una sonrisa el menor que ahora llevaba el cabello color plata, se estaba revelando poco a poco.— ¿A quien quieres conquistar? .—Se colgó de su cuello para besarlo.—Espero sea hermosa.
—Es el ser más bello que mis ojos han visto.—Le susurro apretándolo fuertemente por la cintura.—pero lo que me encanta es que es muy sexy y se ve tan sensual cuando usa pantalones ajustados.
Ambos dejaron escapar una sonrisa, entrelazaron sus dedos para comenzar andar por ese parque, el mundo es un enorme mar con distintas personalidades conviviendo en él, no se debe buscar a la mejor elección sino con la que nos complemente, no nos debe importar su color de piel, generó o religión.
Otro mes después.
La nieve se apoderaba de las calles de Seúl, el panorama era bastante frío una ligera manta blanca cubría edificios, autos, árboles el espíritu navideño también había arribado aunque en el país asiático era más un evento de convivencia entre amigos y amantes que una acción religiosa, YongGuk frotaba nerviosamente sus manos mientras intercalaba sus mirada con el regalo que estaba en el piso y la puerta de un centro de rehabilitación, JunHong había decidido por voluntad propia ingresar a una Institución que le ayudará vencer sus vicios cuando la puerta se abrió el menor de los Bang se acercó para cruzar la calle pero la escena delante de él lo desanimaron, Zelo salía acompañado de YongNam, chasqueo la lengua para darse media vuelta fue un estúpido al creer que tenía una oportunidad.
—No quiero que vuelvas a buscarme jamás te perdonaré lo que hiciste, fuiste tan cobarde.—Hablo seriamente JunHong soltándose del agarre del mayor de los Bang.—No quiero nada contigo.
—La última vez que hablamos me lo dejaste en claro solo quería disculparme contigo y si vuelves hablar con mi hermano que le pidas que me perdone.—Comentó el hombre con la mirada pegada en el piso.—No contesta mis mensajes o llamadas, en verdad he he estado pensando seriamente en mis errores y estoy arrepentido quiero que seas feliz con mi hermano, él en realidad te ama no tuve derecho al entrometerme en su relación.—El pelinegro saco una hoja de papel para entregársela al menor quien ahora también llevaba el cabello del mismo tono.—Creo que esto lo escribió para ti, él es bastante testarudo así que debes enfrentarlo, él no vendrá a ti aún si te ama demasiado.
EASY—BAP
When I turn the lights on in my room
Will someone hug the lonely me?
The ramen that I cook so badly
Who will eat it with me now?
You were the type who hugged me and said I wasn’t a quiet and cold person
When my hands were so cold that you didn’t let go all night
I miss it, I feel so frustrated today
In the end, I tell you to take care and forcefully hide my heavy heart, you don’t know (you really don’t know)
It’s not that easy to empty you out
In the end, I ask to hug you so I hugged you and forcefully moved my heavy feet, this isn’t right (really isn’t right)
It’s not that easy to empty you out
Saying that I’ll forget you is so easy
I hate myself for trying to forget you
I feel like a fool even during the moment of separating
I say things I don’t even mean with a smile (woo baby baby)
I’m OK, I’m not OK, I’m not not not OK
You’re still so deep inside my heart lady
I’m smiling but I’m not OK, I’m not not not OK (oh baby baby)
Your familiar scent still lingers in me
Trying to be strong only makes my heart hurt
Words you said to me
If we break up, I’ll never see you again
Words that I regret the most right now
In the end, I tell you to take care and forcefully hide my heavy heart, you don’t know (you really don’t know)
Your scent is thickly in me, nights without you hurts so much
In the end, I tell you I love you and forcefully swallow my heavy tears, this isn’t right (really isn’t right)
I pretend nothing is wrong, who will know my heart?
Saying that I’ll forget you is so easy
I hate myself for trying to forget you
I feel like a fool even during the moment of separating
I say things I don’t even mean with a smile (woo baby baby)
Saying that I’ll forget you is so easy
(I haven’t done anything for you so I couldn’t hold onto you as you left me)
I hate myself for trying to forget you
(Even the last tear falling down your face is me, my right side without you feels so strange)
JunHong abrió la puerta de una vieja casa con muros desaliñados minutos antes se había encontrado con sus amigos quienes lo esperaban en un parque para celebrar su salida pero el maknae les solicito las llaves e información para saber donde se encontraba el líder, ingreso al interior de ese hogar alcanzaba a escuchar pasos en el segundo piso con sumo cuidado subió las escaleras echo un vistazo al pasillo y caminó hacia la habitación que Jae le indico donde dormía el líder, encontró el cuarto vaco, era más que obvio que ese espacio de cuatro paredes pertenecía al hombre que amaba, recorrió el pequeño lugar, lleno sus pulmones de ese familiar aromo, lo extraño tanto que sus huesos se sumergían en un eterno dolor, cada célula de su organismo estaba infectado por la plaga del amor eterno, miro en el piso una patineta semi envuelta la levanto para observar la tarjeta que colgaba del moño azul, “Pérdoname y te amo” su corazón latió sin control, así de simple era la visión de Bang, con dos sencillas palabras es capaz de explicar los sentimientos más profundos es cuando comprendió que en su relación nunca hizo falta pronunciar esas dos palabras debido a que sus miradas, sus cómplices silencios eran oradores más sabios que sus labios, un ruido capto la atención del visitante, bajo el umbral de la puerta se encontraba Bang YongGuk con un rostro desencajado por la repentina visita.
—Eres un idiota, un estúpido, un tarado, tal vez te creas muy inteligente pero sigues siendo un tonto.—Le grito el menor acercandose al mayor para golpearlo en el pecho.— ¿Crees que el amor es una moneda de cambio que se canjea conforme a nuestros deseos?, te equivocas pueden pasar miles de años, cientos de personas pero mis sentimientos por ti nunca cambiaran, no puedo dejar de pensar en ti, de extrañarte, no quiero un futuro si no estas a mi lado para compartirlo.— Se colgó del cuello del peleador.—No te voy a dejar ir, eres mío, yo te encontré, yo soy quien te merezco, no hay posibilidad que ames a alguien más porque siempre seré la persona que viva en tu corazón, te amo.
Sus labios se encontraron en un ansioso beso, esa era la juventud que YongGuk perdió con el paso del tiempo, esa era la rebeldía que necesitaba para continuar, JunHong era su contra parte tenía el suficiente temple para levantar la voz cuando una injusticia lo sorprende, Bang puede ser un idealista pero Zelo era el revolucionario, se necesitaban para complementarse, ser más fuertes, la falta de aire los separo pero sus miradas continuaban conectadas, Bang delineo ese bello rostro color nieve, unió sus mejillas, su cobardía era compensada con la valentía que ese chico cargaba en sus venas.
—Te amo JunHong, te amo y nunca me dejes ir, sé mi carcelero, mi verdugo si un día he de morir lo quiero hacer a tu lado.—Mordio su barbilla para recorrer su cuello y llenarlo de besos.—Gracias por elegirme.
Sus labios se encontraron nuevamente, las manos de Bang se apoderaron de esa bien formada cintura ese era el momento cumbre de su vida, ese segundo donde todo cambiaria, se terminaba un ciclo pero reiniciaba una nueva misión, una nueva aventura.
Mini epilogo.
15 años después.
DaeHyun trabajo de noche como bartender mientras que YoungJae era mesero pasaban casi las 24 horas juntos, sus amigos les cuestionaban si no se aburrían pero ellos negaban ese hecho, debido a que todos los días era una aventura, los dos mejores amigos estudiaban arduamente durante el día mientras en las noches se enfocaban en su trabajo y las madrugadas dormían abrazados, cada uno eligió una carrera contraria al entrar a la Universidad, DaeHyun se enfocaba a marketing, era bueno para hablar y convencer a las personas mientras que Jae fue más práctico para los negocios, el padre del primero tardo casi 10 años en salir de la cárcel pero lo logró aunque nunca pudieron tener una cena los tres juntos, respetaba al prometido de su hijo, de igual manera los padres de Jae felicitaron a su hijo cuando les compartió la noticia aunque nunca volvieron a Corea, el menor de los Yoo los visitaba en fechas especiales, sus respectivas familias quizá nunca irían a un desfile del orgullo gay pero era claro que amaban a sus hijos y eran felices al saber que cumplan sus metas. DaeHyun y YoungJae formaron una familia aunque su compromiso no tenia validez legal para ellos los anillos sobre sus dedos eran un símbolo de una eterna promesa, el sello de una promesa para toda la vida planeaan en un futuro adoptar aunque no están seguros si podrían compartir su tiempo ya que siempre están comenzando una aventura.
HimChan se convirtió en reportero, fue de manera casual que elegir el oficio pero con el paso del tiempo se volvió en alguien respetado por informar sobre las injusticias, en el caso de JongUp terminó siendo profesor de pequeños niños de preescolar parece que su aire de ángel conquisto a los pequeños desde el primer momento que comenzó su servicio social, la pareja ha tenido sus altibajos pero han estado juntos en todas las situaciones posibles, pasan las vacaciones en la isla Jeju con la madre del mayor quien abrió un pequeño colegio de música, ella comenzó una relación con el dueño de un restaurant tal vez no sea tan rico como su anterior esposo pero es lo doblemente amoroso y respetuoso, los señores Moon nunca lograron aceptar a HimChan pero no se opusieron cuando su hijo les comunico que se iría a vivir con él a Japón continuaban pensando que su retoño sacrificaba más que ese hombre, que nunca se unió a sus actividades pro LGTB, pero a la pareja estaba decidida a continuar con sus sueños, con sus aventuras hace un par de meses después de que Him cubriera una nota sobre el abandono de un niño de 3 años ha decidido adoptar a la pequeña criatura que rescato de un lugar de mala muerte, JongUp ha aceptado y ambos se encuentran esperando el fallo de la corte para obtener la custodia legal ambos tienen miedo de convertirse en padres pero están dispuestos hacer su mayor esfuerzo.
Bang YongGuk después de no ser aceptado en varias Universidad comenzó siendo el letrista de Linkin Park junto con Mike Shinoda inicio su carrera como compositor cuando JunHong cumplió 18 años ambos decidieron escapar a Estados Unidos, llegaron a rentar un viejo departamento en la peor zona de Los Ángeles, ambos comenzaron a estudiar música en una Universidad prestigiosa durante los veranos viajaban a Europa conocieron muchos lugares, eran viajeros con mochila en mano tuvieron varios percances en ciertos lugares por su orientación pero salían airosos debido a que Bang continuaba disfrutando las peleas cuerpo a cuerpo, tardaron varios años en volver a Corea y solo lo hicieron para participár en el entierro de la abuela del mayor, de igual manera Jun hizo las paces con sus padres pidió disculpas ya que no todo lo que se hace por amor es correcto, huir cuando apenas eres mayor de edad fue un golpe bajo, con arduo trabajo ambos se crearon una carrera como productores, hubo fracasos y éxitos pero siempre permanecieron juntos, eran un equipo y como tal nunca se separo, no llamaron a un lugar físico su hogar ya que ambos establecían que su hogar eran los brazos del contrario, eran una familia nómada que recorría el mundo para descubrir los secretos mejor guardados, hace poco tiempo cumplieron su décimo aniversario de casados ambos adoran a los niños pero todavía no piensan tener ya que les falta muchos kilómetros que recorrer .
Los seis amigos tal vez tomaron caminos diferentes los cuales no les permitieron compartir el mismo espacio y tiempo pero se comunicaban continuamente sus logros, por que los amistad no se destruye solo se transforma en lazos invisibles que se vuelven eternos, ellos siempre serian jóvenes, salvajes y libres.