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Vamos a ser algo difícil de superar por Niji_Takagawa

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Notas del capitulo:

Buenas noches a mis queridos lectores~ esta noche por fin les traigo actualización, ¿qué pasó después de que L'Arc~en~Ciel y Gackt terminaron de cantar en el programa? Eso y más lo descubrirán justo ahora, así que sin más por el momento, les dejo leer, disfruten:

Una vez que el programa finalizó los cinco músicos volvieron a su camerino para así tomar un poco de aire más liviano antes de irse, además que preferían desmaquillarse antes de irse, y en ese lugar habían dejado sus pertenencias. El primero en estar listo para retirarse fue Gackt, quien apenas recobró la imagen natural de su rostro, y hubo bebido una botella entera de agua, se puso de pie de su silla para caminar hacia la puerta mientras buscaba el contacto visual del bajista una vez más, el cual consiguió gracias al espejo que éste tenía enfrente. Por tercera vez sus miradas se cruzaron una con la otra durante unos segundos, antes de que el mayor de los dos desviara la suya, pues se había colocado nervioso y no deseaba que el solista se diera cuenta de ello; por ese motivo se sintió verdaderamente agradecido en el momento que éste terminó de salir del camerino, alejándose definitivamente de su persona. De pronto una cálida mano posándose sobre su hombro le provocó un breve respingo, tras lo cual sus ojos buscaron ver a quién pertenecía, de modo que una sensación casi de alivio le invadió en el momento que notó esa mano bronceada y larga… esa mano que conocía tan bien como la suya, pues era la que le había ayudado, junto a su gemela, a desarrollar esa habilidad que las propias actualmente poseían para la música.

–Tetsu, Yukkie y yo ya estamos listos también así que ya nos vamos.

–De acuerdo, pero no te preocupes que yo me voy en cuanto pueda ver al productor del programa; ayer me llamó por teléfono y dijo que deseaba hablar conmigo una vez que el programa terminara.

–En ese caso por favor llámame en cuanto llegues a casa, si no lo haces me quedaré preocupado a pesar de tus palabras.

–Sabes que sí… Así que anda, ve a descansar, hoy ha sido un día largo…

–Imagino que no tanto como para ti verdad –le interrumpió una vez que se acercó a su oído lo suficiente para susurrarle con voz suave, apenas para que él le escuchara. No tenía la intención de remover aquello que, él sabía en el fondo de su corazón, seguía lastimando de manera muy profunda a su amigo, por lo que luego de darse cuenta de la mirada que el bajista mostró como reacción a sus palabras, revolvió su cabello con apenas una mano, antes de besar la frente de su querido amigo de la infancia, para después retirarse finalmente del camerino.

Por unos minutos se quedó a solas con el vocalista de su banda, y aunque no podía negar lo incómodo que la situación lo hacía sentir, un poco de alivio le invadió ante el hecho de que guardar absoluto silencio era suficiente para lidiar con ello. Después de algunos minutos su vocal estuvo listo también, por lo cual éste se levantó de su lugar para tomar sus cosas y luego retirarse en medio de una seca despedida. Con apenas un “hasta mañana” fue suficiente, ya que desde el reencuentro de la banda el cantante sólo hablaba lo estrictamente necesario: desde un simple saludo hasta una despedida cortés, y si en las juntas era necesario, daba su opinión sobre los asuntos importantes. Ya no tomaba parte de las animadas conversaciones que sus compañeros sostenían a su alrededor, no se integraba con ellos de algún modo que no incluyera trabajo; pero al mismo tiempo, cuando tenían cámaras o público a su alrededor, buscaban fingir que todo era como antes, que la armonía de los integrantes de la banda nunca se había perdido, a pesar de que semejante tarea se volvía cada vez más difícil de sobrellevar.

El líder de L’Arc~en~Ciel pensaba en dichas cuestiones con frecuencia, pues incluso a él le parecía absurdo querer guardar las apariencias de esa manera; pero también era muy necesario, si él no deseaba que todos se enteraran de la desgracia tan penosa de la que había sido víctima… más aún porque su verdugo fue precisamente uno de sus compañeros, un hombre al que por mucho tiempo había llamado amigo sin saber que él era capaz de apuñalar por la espalda a cualquiera, si a cambio obtenía un placer digno de considerar. Una vez que estuvo listo también sacudió su cabeza, como si de esa manera estuviera deshaciéndose de pensamientos indebidos, pues él sabía que no le iba a hacer ningún bien seguir recordando semejantes sucesos. Por ello decidió enfocarse en lo que de verdad importaba: su carrera y la creación de su música, como él tanto deseaba, pues siempre le pareció absurda la sola idea de imaginarse a sí mismo trabajando en una oficina o algún lugar cerrado, con una rutina monótona día a día. De esa manera, tras dejar de lado la pasajera fantasía de convertirse en piloto de carreras, su verdadero sueño tomó mucha más fuerza. Los escenarios eran lo que más deseaba, al igual que crear música para el mundo entero, pues la música era lo único que le hacía feliz de verdad; ahora, en las circunstancias en que se encontraba, se daba cuenta de que era además, lo único que real en cuanto a la felicidad extrema que creía haber tenido los últimos meses.

Le tomó algunos minutos más salir del estudio en el que se había llevado a cabo el programa, pues como le había mencionado al guitarrista antes de que se fuera, aún debía hablar con el productor; a pesar de que no sabía sobre qué, el deber de líder era más fuerte que cualquier cansancio que en ese momento lo tuviera agobiado. Por ello hizo acopio de toda su fuerza de voluntad para soportar, atento y despierto, la junta que le esperaba, y de la cual salió completamente aliviado una vez que acabó; ya se habían terminado sus compromisos por ese día y ahora podía ir a casa a descansar, lejos de todas las preocupaciones que le habían atormentado desde el día en que les anunciaron su participación en aquel programa. Caminó con pasos seguros hacia el estacionamiento subterráneo, donde había un elevador, pero debido a que sentía la necesidad de caminar, llegó usando las escaleras… después de todo, ahora que estaba liberado no tenía demasiada prisa en llegar a casa, donde su querido amigo de la adolescencia le esperaría con algo de cenar como todos los días desde el día en que abandonó su antigua residencia. Takanori estaba muy consciente de lo mucho que necesitaba de su compañía, y claro, él se lo agradecía infinitamente a pesar de la culpa que le ocasionaba el haber sacado a su amigo de su casa. En eso pensaba cuando repentinamente se dio cuenta de que había llegado al estacionamiento, pues la escalera se había terminado, y ahora sólo era cuestión de avanzar hacia su coche: ese auto compacto y discreto de color hueso, con algunos detalles en color rosa pálido y que lo llevaría a casa. Empero, en el momento que lo divisó, se detuvo en seco a tan sólo unos metros de él, pues ahí había alguien más; estaba recargado de espaldas sobre el vehículo, aparentemente, esperándole, pues al advertir su presencia le buscó con la mirada, observándole fijamente pero con un gesto aparentemente sereno. Dudó por un instante… no estaba seguro de querer encararlo, pero si se encontraba ahí impidiendo el acceso a su auto no tenía otra alternativa más que terminar de acercarse y averiguar lo que deseaba.

–Por un momento pensé que saldrías corriendo con tal de no verme…–Se atrevió a decir en el momento que el bajista estuvo lo suficientemente cerca, buscando así el contacto visual con él, aunque éste trataba de evadir su mirada lo más posible.

–¿Me crees un cobarde que no es capaz de enfrentar los problemas Gackt? Quizás lo pienses porque la idea te recuerda a alguien que sí lo hace.

–Por favor Tetsu déjate de esas ironías, yo quiero hablar contigo como los adultos que somos –comenzó a responder con la mayor tranquilidad posible en su voz. En seguida realizó una breve pausa, para así continuar después de haberse tomado la libertad de inspeccionar minuciosamente la nueva imagen que adornaba al ahora pelinegro– por cierto te ves hermoso… Bueno, tú siempre has sido sumamente hermoso, pero con ese peinado y esa ropa tan distinta tu belleza solamente aumenta… Verte así me ha hecho recordar por qué me gustas tanto…

–Gracias por los innecesarios y posiblemente hipócritas halagos, pero no creo que te hayas quedado a esperarme solamente para hablar de mi cambio de look. Aunque la verdad no sé si desee escucharte, no creo que haya nada qué decir entre nosotros ya que tus actos ya hablaron por ti mucho más que tus palabras. Yo siempre he pensado que los actos deshonestos tienen el poder de anular las palabras que quizás, tuvieron algo de verdad, y eso lo debes saber porque estuvimos juntos mucho tiempo. Además a diferencia de ti yo todo el tiempo me mostré como soy.

–Yo lo sé, tú eres transparente y jamás he tenido dudas de lo que tú sentías… Es por eso que más me duele haber caído de la manera en que lo hice, haberme dejado llevar de ese modo por la lujuria –sí, estaba arrepentido de aquel proceder que le hizo perder a la persona que más amaba en el mundo. …l lo sabía perfectamente, pero en ese momento se sentía tan perdido que no sabía qué podía hacer para recuperarlo.

–Jamás lo entendí sabes… Después de todo no era algo que yo te negara, creo que al contrario, porque yo me adapté a ti para ser capaz de satisfacer esas necesidades de tu cuerpo. Imagino que recuerdas que al inicio me costó lo mucho soportar lo vigoroso que eres, pero en nombre del amor que sentía por ti busqué hacerte feliz en todos los sentidos. Al recordar lo que hice por ti lamento haber hecho tantos esfuerzos tanto por alguien que no lo supo valorar… Es injusto ¿sabes? E incluso insano, que sólo una de las partes de una relación lo dé todo mientras el otro sólo recibe…

–No Tetsu… Nuestra relación no fue así, ¿por qué únicamente te has quedado con el recuerdo de mi engaño? También pasamos momentos hermosos juntos, ¿por qué es que ahora lo niegas…?

–¡Y de qué diablos me sirve quedarme con los recuerdos hermosos si después vuelve la funesta imagen de tu engaño a mi cabeza! ¡¿Puedes imaginar lo que sentí?! ¡Tú, en nuestra cama, haciéndole el amor a quien yo consideraba mi hermano! No, ¡sé que tú no tienes idea de lo que sentí en el instante que encendí las luces y comprobé lo que significaba ese camino de ropa que me guiaba a nuestra habitación! Te juro que al ver tus pantalones en el suelo, junto con otras prendas que no reconocí como tuyas, quise pensar que todo era un malentendido, pero cuando descubrí que mis peores temores eran realidad…

–Escucha por favor Tetsu, yo sé que cometí el error más estúpido posible y que lo que hice no tiene nombre. Tampoco debería tener perdón, pero si no lucho por obtenerlo jamás recobraré la tranquilidad de mi alma –al mismo tiempo que hablaba se acercó al mayor mirándole directamente a los ojos en todo momento, tomando sus manos entre las propias– por favor perdóname…

–No Gackt –respondió éste de forma seca, deshaciendo el agarre que las manos de los dos ejercían hasta entonces– no voy a perdonarte sólo para calmar tu conciencia, no te lo mereces y a mí no me nace hacerlo…

–¡No es por eso! No me malinterpretes por favor… Pedirte perdón no es sólo por mi conciencia, te lo pido desde lo más profundo de mi corazón, son él y mi alma quienes aclaman tu perdón… quienes no me perdonan por haber lastimado al amor de mi vida luego de tantas veces que juré que nunca te haría daño, y además que cualquiera que se te atreviera a hacerte daño pagaría las consecuencias. No sabes lo imbécil que me siento al saberte herido por mi culpa, lo impotente que me hacen sentir las lágrimas que derramaste frente a mí ese día, y saber ahora que no hay nada que pueda hacer para repararlo todo; sin embargo estoy aquí tratando de conseguir un milagro, porque si algún día eres capaz de perdonarme yo sería capaz de todo para conquistarte de nuevo… Que vuelvas conmigo sería un sueño hecho realidad…

–Yo dudo mucho que eso ocurra, porque ni lo uno ni lo otro es posible… Ni siquiera ha pasado por mi mente ninguna de esas dos posibilidades, así que lo mejor será que te olvides de ese absurdo. Deja de perder tu tiempo y de hacerme perder el mío, mejor dedícaselo a Hyde, estoy muy seguro de que a él le va a encantar la idea –trataba de hacerse el duro con todas sus fuerzas, como si haber pronunciado aquellas palabras no le hubiera provocado nada, pero era todo lo contrario. Hacer referencia al vocalista vinculándolo de aquel modo con el solista le dolía en lo más profundo de su ser, pero eso era algo que no podía permitir que el hombre que tenía enfrente supiera.

–A mí no me interesa Hyde en lo más mínimo… No del modo en que tú…

–¡Cállate! Si vas a insistir en eso significa que no tienes nada más que decirme, por lo tanto lo mejor será que me vaya de una vez…–Simultáneamente tomó las llaves del bolsillo de su chaqueta para acercarse más a la puerta del lado del piloto; empero, una mano del contrario se dirigió a posarse sobre su antebrazo y se deslizó hasta llegar a su muñeca, por lo que detuvo sus acciones en seco… Aunque no volteó hacia él y tampoco dijo nada más.

–No me importa que pienses que esto es una pérdida de tiempo para los dos, así como tampoco me importa que ahora no me creas, que todo lo que digo te parezca una mentira o una estupidez. Yo te voy a convencer de que no es así y no me importa el tiempo que me tome ni lo que tenga que hacer, ¿me escuchas Tetsuya Ogawa? Yo conseguiré tu perdón y recuperaré tu amor, no me importa el costo.

Los siguientes segundos transcurrieron en un silencio absoluto en que ninguno de los dos dijo nada más, hecho que el solista interpretó como una señal positiva de que por lo menos no sería limitado con respecto a las acciones que tenía planeadas para tratar de recuperar el amor de la persona que más le importaba en el mundo, y sin la cual se rehusaba a seguir viviendo. El notar la tristeza y la opacidad que mermaba la luz que anteriormente emanaban los ojos de su amado, le hizo darse cuenta del dolor tan grande que seguía atormentando su alma, pero él estaba dispuesto a cualquier cosa por verle sonreír de nuevo con esa calidez y dulzura que siempre habían sido características asociadas al nombre de Tetsuya Ogawa. Por ello, con ese alentador pensamiento instalado en su mente, se acercó la mano ajena hacia los labios para así depositar un suave beso en el dorso de ésta, justo antes de retirarse por fin; se alejó siendo llevado fuera del estacionamientos subterráneo gracias al auto deportivo de color negro que aguardaba por él a tan solo cuatro espacios del otro que pertenecía al líder de L’Arc~en~Ciel.

Un profundo alivio, mucho más fuerte que cuando salió de la junta en que lo habían atrapado, se instaló en el corazón del joven músico en el preciso instante que observó cómo dicho automóvil se alejaba cada vez más, llevándose consigo al hombre que le provocaba una gama de sensaciones tan amplia que apenas podía creer que estaba experimentando todo eso al mismo tiempo. Desde la más profunda ira con su sola presencia, una rabia casi incontenible, una tristeza inconmensurable, una profunda decepción, hasta un amor tan profundo que no se había logrado matar a pesar de las adversidades, además de una nostalgia que no se atenuaba con nada, una melancolía provocada únicamente por el anhelo urgente de volver a la época en que se sentía el ser más feliz y poderoso del mundo, de volver a sus brazos… Empero, desde el fondo de su corazón sabía que eso era imposible, puesto que la dignidad y su orgullo eran demasiado fuertes como para simplemente ignorarlos y correr a los brazos del hombre que aún amaba con todas las fuerzas de su alma muy a su pesar. En ocasiones no podía evitar maldecirse a sí mismo por sentirse débil y dejarse embargar de ese modo por sentimientos que debían estar prohibidos para él… Parecía como si su corazón se negara a olvidar, y por lo tanto, independientemente de las heridas que parecían matar lo que quedaba de calidez en su alma y del engaño que le había costado dos de las personas que más amaba en el mundo, todo el amor que guardaba dentro de su ser le pertenecía solamente a una persona, y estaba seguro de que eso no cambiaría con facilidad. Por alguna razón el encuentro con el dueño de todo ese amor había alterado algo en él; sus sentidos, su alma, todo sucumbía, y por ello supo desde el fondo de su corazón que todo aquello apenas comenzaba. Su cabeza se hizo escuchar primero, repitiendo que se rehusaba a volver al lado de un traidor; empero su corazón anhelaba tanto su regreso que repentinamente entendió que no bastaría con mantener distancia con una persona que se hallaba demasiado cerca. Probablemente por jugarretas de parte del destino un nuevo encuentro sucedería entre ellos de alguna u otra manera, y sería hasta después de un conflicto interno sumamente profundo que hallaría la paz emocional y espiritual que tiempo atrás había perdido.
Notas finales:

En el próximo capítulo les tengo una sorpresa, un par de personajes nuevos~ uno de ellos es bastante relevante, tendrá gran influencia en los próximos sucesos que se avecinan, pero tengan paciencia, la próxima semana sabrán de quién se trata, así que estén pendientes de la siguiente actualización. Ya saben que a través de mi página de facebook pueden enterarse de las actualizaciones y demás. Espero que les haya gustado el capítulo y que me dejen más reviews~ nos leemos la próxima vez, dulces lunas ♥

http//:www.facebook.com/Niji.Takagawa92


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