// Pensamientos //
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----------- Flash Back -----------
17 – EPILOGO: JUNTOS PARA SIEMPRE.
Que felices y tranquilos días le venían. Porque eran felices, si, muy felices.
Y estaban juntos, sí, eso era lo más importante.
Desde que dejaron el mundo mágico de Londres, Harry se encargo de cambiar todas sus pertenencias y las traspaso al mundo mágico de Suiza, un territorio neutral donde sabia que jamás podrían tocar su herencia.
A Draco le costó un poco adaptarse a la nueva tecnología muggle, usar una saca jugo o aspiradora de primera era todo un escándalo. ¿Cómo cosas tan sencillas para humanos sin magia era tan complicadas para seres como ellos? Pues simple, los magos estaban acostumbrados a vivir con la comodidad de la magia y sus varitas. En cambio los muggles no. Harry de primera se reía por las cosas que le pasaban a su rubia adoración, pero cuando vio que a este no le hacía ninguna gracias decidió ayudarlo.
Vivian cómodamente cerca de los Alpes Suizos y se daban vacaciones por España y América. Nunca dejaron de usar magia, ya que ellos eran magos y su hijo también. James era instruido en la magia por Draco y concurría a un jardín muggle donde se divertía junto a sus amigos. Muchas veces Draco se vio complicado en tratar de explicarle el por qué sus amiguitos no la poseían, pero James era un prodigio en aprender, desde muy chico hacia hechizos básicos supervisados siempre por ambos padres. Y lo que dejo mucho más tranquilo al rubio fue que no había heredado su condición. James podría ser libre de los prejuicios y malos tratos. Aunque él jamás permitiría que lo trataran mal.
Draco tenía un lio cada tarde que llegaba Harry del trabajo y debía lidiar con los celos de su hijo y su padre. A veces era muy cansador.
Ron y Hermione los visitaban siempre y le contaban como iba el mundo mágico sin ellos. A Harry la verdad es que no le importaba mucho eso, el ya había cerrado la posibilidad de volver, no les perdonaba el haber intentado hacer sufrir a su familia y menos cuestionar la honorabilidad de su esposo. Ellos no eran nadie para hacerlo y nadie pudo sacarlo de ahí.
Al año después de que naciera James nació la primera hija de Weasley y Granger, Rose llego a embellecer la vida del matrimonio y también paso a ser parte de la compañera de juegos de James. Ambos niños corrían felices por el patio mientras sus padres disfrutaban de una velada familiar y feliz.
A los 2 años después Draco recibió la noticia de que esperaba un nuevo bebe. Harry lo abrazo feliz y lo levanto en sus brazos dándole vueltas. Obvio que James trato de que lo soltara ¡Porque su papi siempre era suyo! Demás está decir que al niño le costó mucho asimilar que iba a tener un hermanito o hermanita y otra persona más iba a llegar a pelear por tener la atención de su papi.
Y nació Lily Narcissa Potter Malfoy con un hermoso pelo rubio y ojos verdes, la princesa de Harry, eran sus ojos, su vida y su niñita, estaba tan baboso que le perdonaba cualquier fechoría y desorden, solo tenía que ponerle carita de “Yo no fui papito” y Potter caía en sus redes inmediatamente.
Si James conseguía casi todo con Draco, imagínense lo que podía hacer una mini Draco con Harry, porque Lily era igual a su padre. Demasiado hermosa según Harry y demasiado Slythering según Draco.
Cuando James estuvo en edad recibió la carta de Hogwarts para que ingresara a su alumnado, Draco apretó las manos nervioso, el no quería que su hijo estuviera ahí. Aunque ya le habían explicado antes todo lo aledaño al pasado de sus padres. El rubio siempre tenía que maltrataran a sus hijos por ser el padre. Y no quería por nada del mundo que ellos sufrieran lo que él.
-¿Qué piensas? - Dijo Potter mirando al rubio que miraba la ventana con tristeza - Draco…
-Es solo que… - ¿Cómo explicarle a su marido que no quería que fuera a Hogwarts? De seguro Harry lo deseaba, también había sido su casa de estudios y el moreno tenía buenos recuerdos de ahí.
-Vamos. Dilo ya amor - Potter lo abrazo por la espalda y olio su pelo, si no estuvieran hablando de algo importante se lo llevaría en brazos a la cama y le haría el amor - ¿Es por la carta verdad?
-Sí, no quiero que valla a Hogwarts pero tampoco quiero truncarle su futuro. James es un mago y muy bueno, me siento egoísta al pensar esto.
-No eres egoísta, eres su padre y deseas lo mejor para él - Potter siempre era así con Draco. Comprensivo y amoroso - Hagamos algo Draco, Hogwarts no es la única escuela de magia en Europa ¿Qué te parece si vemos Durstrang? Tengo entendido que Krum es ahora el actual director ¿Qué te parece?
-¿Durstrang? ¡Me parece genial! ¿No te complica que vaya allá? Yo creí que desearías que fuera a tu escuela
-Esta decisión es de ambos, somos pareja y James sabrá ser el mejor en cualquier lugar por algo tu hijo y mío también.
-Gracias Harry - Se besaron, ambos amaban sus labios y su intercambio de sentimientos con él - A todo esto ¿Viktor Krum es el director? Qué buena noticia.
-Así es, asumió hace 2 años, el fue un buen amigo y competidor - Harry noto que el rubio se quedaba callado pensando -¿Qué pasa?
-Es solo que… En el colegio Viktor Krum me parecía muy guapo - Draco dijo las palabras salieron sin ninguna mala intención y un leve sonrojo tiño sus cachetes pálidos - Pero eso fue hace tiempo y… - Trato de arreglarla cuando se dio cuenta lo que había dicho.
-¡Pues entonces no va ir a Durstrang! - Dijo enojado Harry y muy, pero muy celoso.
-¡HARRY! ¡Eso fue hace mucho tiempo!
Para disgusto de Potter, James si ingreso a Durstrang feliz, es mas el mismo director Krum salió a recibirlos orgulloso. Obvio que Potter lo trato de evitar todo el tiempo.
-Gracias Harry por aceptar mi invitación a nuestra escuela, nosotros cuidaremos muy bien a tu hijo - El búlgaro se acerco a ellos rápidamente.
-Sí, lo sé - Dijo cortante el moreno - Un gusto verte Draco - El búlgaro le tomo la mano al rubio en forma de saludo, siempre respetuoso. Draco sonrió agradecido y entendió que su hijo ahí no seria discriminado por su sangre o por su padre. Potter interpreto que esa sonrisa era porque Krum lo estaba saludando y quiso con mayor razón irse luego de ahí y ojala no volver nunca más - Recuerdo haberte visto en el colegio hace tiempo, de hecho tu cabello rubio es difícil de olvidar.
-Gracias Viktor, para nosotros también es un placer poder venir acá y que James reciba su educación de mago - Contesto cortes Malfoy.
-Bien, es hora de irnos. Un placer Viktor ahora nos despediremos de nuestro hijo. Adiós - Potter más cortante y directo que eso no podía decirse más. Estaba implícito el “Aléjate de él y si es posible no lo mires” jalo la mano del rubio y lo guio rumbo a sus hijos. Draco solo sonrió, su marido siempre era así.
Lily despedía a su hermano con un fuerte abrazo, deseándole mucha suerte. Draco abrazo a su hijo y ambos lloraron. Para el rubio soltar a su retoño era muy doloroso, lo echaría mucho de menos, sobre todo su complicidad, aunque James ya tuviera 11 años siempre seria su bebe.
-Te amo mi amor - Dijo compungido el rubio apretando a su vástago.
-Y yo a ti papi - Se besaron cariñosamente.
-Bien campeón ha llegado tu hora de colocar tu nombre en la historia. Estamos orgullosos de ti y tu padre y yo te amamos - Harry lo abrazo también.
Los 3 caminaron rumbo a casa, dejando a James con su nuevo futuro. Por ser un Potter Malfoy grandes cosas le esperaban, nuevas aventuras y una vida llena de emociones y felicidad.
-¡Verdad papi que el director era muy guapo! - Dijo una emocionada Lily riendo con Draco.
-¡¿Es broma verdad?! - Potter ya no podía estar más indignado. Su rubia adoración y ahora su princesita colgadas por Krum ¡Era ya incosevible!
El tiempo pasó también y Lily ingreso a la escuela. Y cuando Draco creyó que estaría solo sin sus bebes hermosos recibió la noticia de que estaba nuevamente gestando.
A los 9 meses después nació Scorpius Sirius Potter Malfoy llenando de vida nuevamente la casa, era una fotocopia idéntica de Harry. Pero meloso y posesivo con su papi. Bueno, todos eran posesivos con Draco. Aunque a Harry no le importaba mucho ya que ninguno de sus hijos competiría con el gran amor que ambos se tenían. Scorpius nació con el don de Draco y eso los unió mas, por que el niño jamás fue denigrado por sus padres. Al contrario, sus padres y hermanos lo amaron mucho y lo trataron como un igual.
Y pasaron los años, los niños crecieron y formaron su propia familia.
James se caso con Rose, aunque eso era de esperarse. La sorpresa llego cuando Lily se enamoro del hijo de Krum, Harry quería puro matarlo. Y Scorpius escogió a un gran mago hijo de padres muggles pero con un gran potencial en pociones.
Y ahí estaban ambos, ya mucho más mayores sentados en el patio de su casa mirando el sol perderse en la cordillera. Viendo a sus hijos crecidos y a sus nietos correr por el lugar.
-¿Todavía me amas Harry? - Pregunto Draco, su pelo que ya no era rubio sino blanco por los años y sus ojos grises que seguían mirándolo enamorado.
-¿Que pregunta es esa? ¡Claro que te amo mi Dragón! - Entrelazaron sus manos como era la costumbre - Y tu Draco ¿Me amas?
-Siempre.
Ya llevaban más de 50 años juntos y se querían como si fueran el primero de ellos. Estaban juntos y enlazados. Por que como el rito lo había dicho:
“Que las bendiciones de este rito nutran, fortalezcan y sostengan a Harry Potter y Draco Malfoy a lo largo de su vida compartida y conjunta.
Sed bendecidos, como bendecidos sois”
Porque Harry Potter quiso ser feliz y Draco Malfoy también.
¿Existe un amor más puro que este?
Lo más probable que no, porque cuando ya no estén en esta tierra, sin lugar a dudas se seguirán amando.
***** F I N *****