O-o-O-o-O-o-O-o-O-o-O
Masquerade
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Capítulo 4
A medida que caminaba por aquel salón, se dio cuenta de que Erwin se encontraba bailando con Mike, Hanji estaba más que feliz bailando con aquel chico llamado Moblit, quien parecía competir con los tomates; ya que su rostro estaba igual de rojo. Y los otros dos ya hacían de las suyas igual, ya solo quedaba él. Aunque desechó la idea, al ver que ni Eren o su hermano parecían estar en el salón.
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Eso era algo que había llamado la atención aún más de Eren, relamió sus labios al verle así. Lentamente se acercó a él y fue besando aquella blanca piel, era tan suave y tersa. Sus labios y lengua recorrieron toda la extensión del cuello del francés, hasta que decidió encajar levemente sus dientes en este y dejar una marca en él, reclamándolo como suyo y de nadie más. Pero jamás se esperó escuchar aquel sonido, aquella dulce voz que dejó escapar ese sonido tan erótico.
Mhg... -ese fue el detonante para el castaño quien terminó perdiendo la razón, sus manos fueron recorriendo aquel pequeño cuerpo que temblaba por esas emociones y sensaciones nuevas que se desataban sobre su cuerpo- mmhg E-e-erenn... Aahhg
Era una suerte que nadie les viera en ese lugar, aunque lo mejor sería ir a un lugar privado; donde no hubiera fisgones y nadie que les interrumpiera.
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Si alguien le llegaba a preguntar ¿Cómo es que habían llegado tan rápido a aquel apartamento? Y más en aquella situación, Eren jamás lograría encontrar explicación alguna. Lo que si sabía, es que ahora ambos se encontraban en aquel cómodo departamento, el cual le pertenecía al alemán y se sentía orgulloso de tenerlo, pues el mismo lo compro con su propio dinero (Dinero el cual ganaba honradamente trabajando en una de las tantas clínicas de su padre, y aunque fuera en un lugar de su progenitor, Eren prefería ser tratado como un trabajador más y no recibir ninguna clase de preferencia solo por ser hijo del señor Jaeger.)
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Sus manos recorrían con gran maestría y deseo aquel joven y esbelto cuerpo que temblaba en sus brazos. Su lengua recorría cada parte de aquel blanquecino cuello, lamiendo, besando y dejando pequeñas marcas en él, reclamándolo como suyo y de nadie más.
Ngh… -El azabache soltó una fuerte exclamación al sentir como su espalda chocaba contra la pared. Escuchar como de aquella boca salían sonidos tan eróticos provocaba que su excitación aumentara, si es que eso era posible, pues ya los pantalones le molestaban por aquel bulto que tenía entre sus piernas-
El azabache tan solo se retorcía de placer mientras que con sus brazos rodeaba el cuello del moreno y juntaba su cuerpo al de él. Levi sentía como las caricias de Eren le quemaban, y como sus besos le robaban el aliento.
El libido iba en aumento y apenas se encontraban en la pequeña salita del apartamento del alemán. Eren tomo a Levi de la cadera, y el azabache rodeo la cintura del castaño con sus piernas. El más alto tan solo sonrió con galantería mientras se dedicaba a ver al menor, quien tenía las mejillas sonrojadas y con un delgado hilillo de saliva en la comisura izquierda de su labio, para después lamerlo y atacar nuevamente aquellos labios rosados.
Elevo un poco más al peli negro, quien sujeto la camisa de Eren cuando los labios de este se acercaron de nuevo, el castaño pudo sentir los suaves labios sobre los suyos, aunque no fue más que un simple roce entre ellos. Cuando se separó, logro ver que Levi mantenía los ojos cerrados, y sus mejillas tenían un fuerte carmesí, y podían llamarle loco pero juraba que podía escuchar como el corazón del francés emitía fuertes y desenfrenados latidos. Nuevamente aquella necesidad de sentirle aún más le ataco, sus mejillas se sonrojaron por aquellos pensamientos tan pecaminosos, pero la necesidad de ser uno con él, eran muy grandes. El pequeño abrió los ojos al sentir como el más alto se fue alejando de él, le miro con confusión al no entender el porqué.
Pero al ver la forma en que Eren le miraba y como este se fue aflojando el nudo de la corbata le dio a entender que aún no habían acabado. Lentamente, Eren se fue deshaciendo de su corbata, y después le siguió la chaqueta de su traje. Levi tan solo le miraba y de vez en cuanto desviaba la mirada hacia otro lado, pues sentía como sus mejillas ardían al ver el espectáculo que el castaño le estaba dando.
Nuevamente volvió a juntar su cuerpo con el del azabache, lentamente le quito aquel extraño antifaz que cubría esos ojos grisáceos que el tanto amaba, para después seguir con esa capa que más bien parecían alas, junto con la chaqueta de su traje, dejándole solo con la camisa, el pantalón y los zapatos.
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Varios gemidos y jadeos llenaban la habitación con un Eren posicionado encima de Levi, quien apenas y conservaba alguna de sus prendas, pues las demás habían quedado olvidadas en la sala y en el pasillo junto con las del mayor. Eren tan solo conservaba sus pantalones y ropa interior, mientras que Levi solo conservaba su camisa, con varios botones abiertos y su ropa interior, ya algo mojada por el líquido pre seminal.
Eres hermoso… -Susurro el castaño en el oído del otro, para después morderle el cuello y dejar que una de sus manos se perdiera por debajo de la camisa de Levi, quien dejo salir un jadeo, momento en el que el otro aprovecho para introducir su lengua en la boca de su pareja. Ambas lenguas luchaban por mantener el control sobre el beso, pero las caricias y la forma tan fogosa en la que Eren le besaba le obligo a aceptar su derrota y dejarse llevar por el castaño- …Te lo quiero hacer….
Levi se encogió en su lugar al sentir el aliento caliente de Eren en su cuello, además de como aquellas manos recorrían con extrema maestría sus caderas, para después ir subiendo por su abdomen y pecho hasta llegar a aquellos botones rosados. Eren empezó a mover lentamente sus caderas, rozando así ambas erecciones mientras que con sus manos se ocupaba de darle atención a aquellos pequeños capullos rosados que Levi tenía en su pecho.
El menor tan solo se removía por todo el placer que el alemán le otorgaba, Eren se encontraba extasiado con la imagen que su pareja le ofrecía. Su cabello estaba revuelto, sus pálidas mejillas ahora estaban siendo adornadas por un bello tono carmín y de su boca se escapaba un hilillo de saliva con varios gemidos, jadeos y suspiros que terminaban calentando aún más a Eren.
El mayor relamió sus labios ya secos al ver aquella imagen tan erótica, con mucha delicadeza tomo el cuerpo de Levi y lo sentó en horcajadas sobre sí mismo. Sus brazos rodearon la estrecha cintura de su pareja, mientras que el oji gris tuvo que morder levemente su labio inferior al sentir el miembro duro de su pareja (aun resguardado en su bóxer negro,) darle suaves estocadas.
El más alto no podía evitar sentirse extasiado con cada nueva faceta que iba conociendo del moreno, pues esta era la primera vez que llegaban a este punto. Sus manos dejaron la cintura del azabache para ir subiendo por la espalda de este, dándole suaves caricias hasta llegar a los hombros y obligar a este a deshacerse de aquella molesta camisa.
Nggh… E-eren… es-espera… -Prefirió ignorar el llamado del azabache y nuevamente lo acostó con cuidado sobre la cama. Sus ojos turquesa ahora refulgían como los de un animal salvaje apunto de atrapar a su presa. Su boca ataco la otra, le besaba y mordía, delineaba esos labios ahora ya hinchados por tantos besos mientras que con sus manos se ocupaba de llenarle el cuerpo con caricias. Y como si de una gran travesura se tratara, llevo su mano derecha hasta la entrepierna del ojigris, Levi se vio sorprendido por aquel atrevimiento por parte del alemán, pero antes de que pudiera decir algo se vio atacado por otro beso lleno de hambre y la mano del castaño que ahora se encargaba de acariciarle de la forma más lenta y tortuosa que le fuera posible- Ngh…. Mmgh… E-erennnnmmgh…
Sus caricias eran lentas, demasiado para el gusto de Levi pero para Eren eran lo mejor, ya que esa era una manera muy deliciosa de torturar al azabache, de hacerlo retorcerse de placer y pedir por más.
Te lo quiero hacer… -Dijo- Te quiero hacer el amor, quiero sentirte… -A este punto su voz se encontraba ronca por la excitación, Levi solo le observaba para después avergonzarse y morder su labio inferior, evitando así que algún sonido extraño saliera de su boca- Ngh… No te contengas, quiero escucharte gemir….
M-mocoso… mocoso estúpido… Agghhmm… -Sonrió, para después darle un casto beso en los labios y después pasar al cuello donde le fue dando suaves besos, para después lamerle y volverle a morder hasta pasar a los hombros y llegar a aquellos botones, donde aprisiono el derecho en su boca. Eren mordía con delicadeza para después lamerle y volver a repetir el mismo procedimiento, sacándole más de un gemido o grito al menor, pues esa era música para sus oídos. Levi se retorcía en la cama pidiendo por más, y Eren al ser tan obediente decidido hacer lo que su pareja le pedía
Pero cansado de aquella situación decidió probar con algo más, con su lengua fue lamiendo el abdomen del mas pequeño hasta bajar a su vientre, Levi se tensó un poco al sentir como Eren le tomaba las piernas para separárselas y acomodarse entre ellas, dejándole así expuesto y con su miembro ya erecto y aprisionado en aquella molesta tela. Vio como el castaño se relamía los labios, sus miradas se conectaron. Ambas cargadas con lujuria, deseo, muchísimo amor y una pizca de nerviosismo.
Aun sin soltar las piernas del azabache, Eren lamio y beso las entrepiernas del otro inclusive se atrevió a dejarle una pequeña marca rojiza en la entrepierna derecha. Levi soltó un quejido por aquello, pero Eren solo le ignoro y volvió a hacer lo mismo en la otra pierna del azabache. Ya estando bien acomodado y satisfecho por su pequeña travesura, Eren empezó a lamer y besar el miembro de Levi, quien soltó un gemido al sentir la lengua del otro en aquella zona.
¿Q-que demo… nios esstás ha-hacien…do? –Pregunto mientras intentaba sentarse, pero Eren no se lo permitió pues nuevamente volvió a lamer aquella zona mientras acariciaba las suaves y níveas piernas del pequeño. Una nueva sensación recorrió el cuerpo de Levi, era como si una descarga eléctrica recorriera cada parte de su cuerpo haciéndolo vibrar y pedir por más. Eren seguía en su ardua tarea de lamer y besar e inclusive morderle por encima del bóxer, pero él quería más, ansiaba probar más de Levi. Sus manos viajaron hasta llegar al elástico del bóxer y lentamente se fue deshaciendo de la última prenda- Ngh,.. n-no…
Levi… -Sus fosas nasales se llenaron con el olor del menor, las mejillas de Levi se encontraban más rojas que un tomate en temporada; pues ahora más que nunca se encontraba totalmente expuesto al otro. Pero lo que se llevó el premio gordo fue sentir como algo húmedo recorría la punta de su miembro hasta bajar a sus testículos. Levi se encogió en su lugar, y de forma inconsciente abrió un poco más sus piernas, dándole así más acceso al castaño, cosa que no desaprovecho pues con una de sus manos tomo el miembro del azabache y lo empezó a masturbar-
Sus caricias empezaron siendo lentas y prolongadas para después ir aumentando la velocidad, Levi sentirá como esa parte iba despertando aún más. Pero las caricias y aquellos movimientos ya no eran suficientes, Eren se encargó de engullir parte del miembro del azabache, lamiéndolo por completo, así como también se atrevía a darle suaves mordidas, las cuales causaban que Levi se removiera como loco en la cama.
Al ser la primera vez que el experimentaba algo como eso, Levi empezó a sentir que faltaba poco para que aquello terminara, el castaño también se dio cuenta de ello asi que saco el miembro erecto de su pareja y volvió a darle atención con sus manos hasta hacer que el oji gris llegara al clímax.
Sus manos blanquecinas atraparon con fuerza las sabanas de la cama, mientras sentía que llegaba al final. Sus mejillas se encontraban sonrojadas y su frente estaba perlada con sudor, además de que tenía aquella semilla blanquecina en su vientre. Ver a Levi en esa situación provoco que la erección del castaño aumentara y los pantalones le hicieran sentir aún más incómodo. Lentamente fue bajando la cremallera de su pantalón así como este mismo junto con su ropa interior que termino desechando aun lado de la cama. Ahora ambos se encontraban en las mismas condiciones.
Ngh… -Soltó un quejido al sentir como Eren volvía a tocarle en aquel lugar, se sentía extraño pues aún se encontraba cubierto de semen. Pero a Eren pareció no impórtale, pues seguía sin quitar la mano de aquel lugar- Q-que… hac-ess… -Pero en vez de recibir una respuesta, sintió como los dedos del castaño trazaban un camino hasta llegar a su entrada- Nnngh…
Con mucho cuidado y sin lastimar al azabache, Eren fue introduciendo su dedo índice en el interior de Levi; quien se había empezado a remover en la cama por la incomodidad que sentía. Sabía que algo así pasaría pero era mejor empezar a prepararle bien, además los restos de semen funcionaban como un buen lubricante. Segundos después de ver que Levi ya no se removía tanto, introdujo un segundo. Aquello termino provocando que el peli negro soltara un sonoro gemido además de que algunas lagrimillas empezaran a asomársele en sus ojos. Sus dedos se movían de forma lenta y en círculos para después empezar a tijeretearle, tratando así de dilatar con cuidado al menor.
Con suerte el azabache dejo de quejarse, ahora el dolor que había empezado a sentir al principio había sido reemplazado por una sensación muy placentera. Aunque debía de admitir que aun sentía dolor pero ya no era tanto, era extraño sentir algo de dolor combinado con el placer que Eren le estaba provocando. Cuando consiguió que el moreno se acoplase y comenzase a disfrutar de dos dedos dentro, se animó e ingreso el tercero. La habitación se encontraba llena de varios suspiros y jadeos por parte del azabache, quien gemía una y otra vez el nombre de su pareja, quien se encontraba muy entretenido mientras simulaba leves penetraciones con sus dedos en la entrada del menor.
El más alto sonrió satisfecho al haber terminado de dilatar lo suficiente al menor, ahora venía la mejor parte. Un sonoro y ronco gemido se escapó de sus labios mientras tomaba su miembro con una de sus manos y lo dirigía a aquella rosada y aun apretada entrada.
Te amo, Levi –Murmuro en tono bajo para después robarle un beso de piquito al moreno-
Y-yo… tamb-bien… -Respondió el otro en medio de un suspiro mientras le miraba fijo y con las mejillas sonrojadas-
Lo que sintió a continuación fue algo que no sabía cómo catalogar, la punta de su miembro tan solo se encontraba rozando la entrada del meno; provocando que Levi soltara uno que otro suspiro o jadeo.
Lentamente fue introduciendo la punta pero a los segundos se detuvo al ver la incomodidad en el rostro de su pareja- Relájate… -Susurro mientras le besaba con mucho amor, tratando de tranquilizarle mientras volvía a intentar meter su miembro, pero esta vez de una sola estocada entro en él, sabía que de aquella forma era más efectivo-
Ahhmm… E-eren…. –Hablo con dificultad, mientras algunas lágrimas se deslizaban por sus mejillas sonrojadas-
Lo… lo siento… pero, si lo seguía haciendo lento… costaría más… -Explico. Pero aun así no pudo evitar sentirse culpable al ver como aquellas lagrimas se deslizaban por las mejillas níveas del oji gris; por eso mismo prefirió esperar hasta que su pareja le diera algún incentivo de continuar, y cuando lo hizo empezó moviendo sus caderas de forma lenta para que el otro se fuera acostumbrando-
Pasados algunos minutos Levi empezó a mover sus caderas al compás de las del castaño mientras sus manos rodeaban el cuello del ojiverde. Ambos tenían la mirada fija en el otro, pues no había necesidad de hablar, con solo una mirada de alguno de ellos bastaba para decir muchas cosas.
No solo era lujuria o deseo, también era amor y satisfacción de ser uno solo con aquella persona que amas y has decidido entregarle todo de ti.
Por eso mismo Eren decidió hacerle el amor, el quería que Levi disfrutara su primera vez con movimientos suaves y palabras de cariño y amor que le susurraba cada tanto al oído. Así como aquellos tiernos y tímidos besos que le robaba, o esos candentes y fogosos que le hacían pedir por más. Por otro lado, Levi se sentía feliz de ser uno con su mocoso.
Pues aunque le costara aceptarlo abiertamente, él se encontraba feliz de entregarse a aquel chico tan impulsivo.
Te amo, te amo… aggh…. T-te amo… -Le susurraba en medio de esos gruñidos, su voz ronca provocaba un estremecimiento en el más chico-
Levi se fue aferrando a la ancha y morena espalda del alemán, a la vez que Eren aumentaba sus movimientos de cadera pues sentía que dentro de poco iba a terminar. Y así fue, pues a los segundos sintió como expulsaba toda su semilla en el interior del azabache, al igual que este término de expulsar su semilla, llenando a ambos con ella.
Te amo, te amo demasiado… -Volvió a repetirle aun sin salir del interior del francés, Levi tan solo se dejó hacer por las caricias y besos que su pareja le daba-
Yo también… te amo… -Le contesto en medio de un ronroneo mientras se dejaba abrazar por su pareja. El silencio parecía reinar en aquel lugar, pero si uno lograba prestar atención, lograría escuchar los corazones de ambos jóvenes que latían al unísono. Ambos terminaron cayendo rendidos en los brazos de Morfeo, y en la calidez del cuerpo del otro. Ambos con una enorme sonrisa en sus rostros, por sobre todo Eren quien se encontraba abrazando de forma posesiva al azabache-
Continuara…
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