-¿Aniki?
Ambos voltearon, Christ aun tenía las manos sobre las mejillas de Haruichi cuando un muchacho casi idéntico a él, apareció y le arrebato de las manos a Haruichi para abrazarlo posesivamente mientras un aura asesina iba dirigida a Christ. Sin embargo el amenazado no perdió la calma, se enderezo y sonrió
-me imagino que eres su hermano, el parecido es obvio
-bueno, si, es algo obvio y ¿tu quien eres? -Ryo escondía lo más que podían a Haruichi, el cual forcejeaba para soltarse de su hermano
-soy Christ Yuu Takigawa, mucho gusto, soy su vecino
-¡ja! pues que vecino tan cariñoso -Haruichi por fin se pudo liberar e intervino.
-¡Aniki! no seas grosero. Christ es mi vecino y nos llevamos bien -tenia la intensión de agregar que eran amigos pero no quería ofenderlo de algún modo después de besarse
-bueno pero si por supuesto que me di cuenta que se llevan bien, no sabía que en Nagasaki fueran TAAN cariñosos
-estas haciendo todo un escándalo
-¿un escándalo? Se suponían que estarías aquí dedicándote a tus estudios y lo primero que me encuentro después de tanto tiempo de no ver a mi hermanito es esto. ¡Ah pero Youichi tendrá que darme una explicación para todo esto!
Para su mala suerte, Takako y Kuramochi llegaron desde la otra calle en ese preciso momento. El aura se intensifico y antes de darse cuenta Youichi se encontraba en el suelo con Ryo encima que lo sacudía de la camisa. Haruichi pretendía correr hacia ellos cuando la risa de Christ lo hizo voltear y no saber hacia dónde moverse. Takako paso la mirada de uno a otro se cruzo de brazos y levanto una ceja. Aquello era todo un show, una de sus venas comenzó a resaltar en su frente. No podía creer el ridículo que estaban haciendo, ya estaba oyendo las quejas de la señora Takigawa por involucrar a su hijo. El colmo fue cuando escucho que la puerta de su casa se abría y la melodiosa voz de Eijun salía del interior, ahí fue cuando no aguanto mas
-¡Youichi! ¡Ryo! Sepárense en este preciso instante, ya están bastante grandecitos para estar haciendo este tipo de escena y más en plena calle, los dos métanse a la casa –Kuramochi estaba completamente desorientado y molesto, el no tenía ni idea de lo que estaba pasando y ya estaba siendo regañado. Ryo sin embargo se atrevió a discutir
-pe-pero tía Takako… Haruichi…
-nada de Haruichi, se meten a la casa, ya tuve suficiente de ustedes dos. Y tu Haruichi tienes cinco minutos o de lo contrario mandare a Eijun por ti. –le sonrió amablemente a Christ, que había dejado de reír –buenas noches Christ-kun.
Les dedico una mirada asesina a los otros dos y los arrastro al interior de la casa, Eijun estaba en la puerta pero no se había enterado de nada
-¿nisan? ¿Qué está pasando?
-no quieres saber –le respondió Kuramochi. Eijun se asomo ligeramente y alcanzo a ver a Haruichi. Regreso su vista a los mayores
-¡oh!
-si ¡oh! –y antes de que otra cosa pasara, Takako cerró la puerta de un portazo dando a entender que no molestaran
Haruichi se encogió de hombros con el portazo, dejo escapar un suspiro. Regreso su atención a Christ, se miraron por unos instantes en silencio para después sonreírse y reírse con ganas de lo que acababa de pasar. Tardaron algunos segundos en controlarse
-¿recuerdas que dijiste que te gustaría ver cómo era la cena? espero que aun quieras hacerlo
-la verdad ahora me da más curiosidad. Creo que fue un mal momento para… -Haruichi negó con la cabeza
-claro que no. Era justo el momento, mi hermano es el que no debió llegar en ese preciso instante.
-se nota que te quiere
-si lo hace, aunque a veces exagera –por una fracción de segundo los ojos de Haruichi se ensombrecieron, su hermano tenía un motivo para ponerse así, Christ notó el cambio pero sabía que no era el momento, sobre todo con la amenaza de que Eijun saliera –ya se le pasara, seguro después de la cena… y el interrogatorio hahahaha
-en serio cada vez me da más curiosidad hahahaha. Bueno me divertí mucho hoy y sobre el momento en el que nos interrumpieron –Haruichi se puso de puntitas y le dio un rápido beso en los labios antes de correr a su casa.
-buenas noches Christ
…
Al entrar a la sala se encontró con Kuramochi y Ryo sentados en el sillón con los brazos cruzados y un puchero en el rostro, era la misma expresión que siempre hacían de niños cuando los regañaban por hacer alguna travesura. Ambos voltearon a verlo y estaban a punto de reclamar pero les gano Takako
-Haru-chan imagino que tienes algo que compartir con la familia –Mei, Eijun y Haruno también estaban en la sala, sentados cómodamente en los otros sillones
-eh yo… -se puso completamente rojo porque no tenía ni idea de cómo explicar lo que estaba sintiendo –la verdad es que Christ-senpai va diario a la cafetería y platicamos un poco. No sé que es, ni a donde va pero desde que lo veo se siente bien. Las ganas de llorar cada vez son menos… y hoy solo salimos. –todos en la habitación entendían que por fin Haruichi estaba dando un paso fuera de aquella relación que lo había obligado a huir de Tokio, sin embargo para Ryo seguía siendo su hermanito indefenso
-¡aja si! una salida, ¡Se estaban besando!
-¿y te atreviste a intervenir Ryo?
-pues claro.
-Ryousuke Kominato, aquí la única que tiene derecho a interrumpir un beso soy yo. Además eso no justifica la escenita que armaste con el otro
-¡aja! y ¿yo por qué estoy siendo regañado? aquí yo soy victima
-por no cuidar de mi hermanito
-y volvemos a lo mismo. Ryo míralo, tu hermanito está feliz, más feliz de lo que había estando en los últimos, ¿qué te gustan? ¿3, 4 meses? No se supone que eso es lo importante –Ryo paso la mirada de Kuramochi a Haruichi.
-bueno si supongo que tienes razón. Aun así no creas que se va a escapar del interrogatorio
-¡Aniki! –Ryo le abrió los brazos y Haruichi se le acerco y se dejo abrazar fuertemente por su hermano mayor.