El celular comenzó a sonar muy de mañana era sábado y le hubiera encantado quedarse a dormir hasta tarde pero tenía un compromiso
-la primera prueba empieza aquí
-¿estás nerviosos?
-extrañamente no, yo diría que estoy ansioso
-debe de ser impresionante el estruendo de las porras
-seria genial que estuvieras aquí pero sé porque no lo haces
Kuramochi se termino de levantar de la cama y bajo a la sala, Eijun ya estaba frente al televisor listo para ver el primer partido de Mei y Miyuki. Se dejo a caer a su lado en el sillón mientras contestaba
-es bueno saber que lo entiendes y mientras tanto no te quiero de regreso hasta dentro de 3 semanas
-hahahaha seguramente no me extrañas
-cállate, claro que te extraño pero esto te lo mereces, anota un homerun por mi
-tenlo por seguro, me tengo que ir.
No tardo mucho en que la transmisión comenzara y que en la pantalla aparecieran tanto Mei como Kazuya, Eijun se puso a gritarles a Haruichi y a sus tías para que salieran a ver el partido. Kuramochi le aplico una llave para que se callara y se estuviera quieto.
El partido estuvo bastante interesante aunque Narumiya tomo ventaja en la cuarta entrada y los otros ya no pudieron hacer mucho. Todos en la casa respiraron aliviados cuando el partido termino, la primera ronda había concluido.
...
Los partidos fueron volviéndose mas complicados, cada día antes y después del partido Miyuki se comunicaba con Youichi igual que lo hacia Mei con Eijun, la diferencia era que Sawamura pasaba horas pegado al teléfono y terminaba desesperando a todos. Ryo no hacía otra cosa que burlarse del menor mientras se dedicaba a mantener un ojo vigilando a Haruichi, que casi diario también se veía con Christ, ya fuera en la cafetería o en su casa. Una vez mas ambos confirmaban que ser vecinos era muy conveniente.
A Ryo le molestaba que no encontraba la manera de molestar a Youichi, se negaba a creer que ambos se vieran tan bien juntos, nadie podía amoldarse tanto a otra persona, eso simplemente no pasaba. Youichi evitaba hablar de Miyuki con Ryo, no terminaba de entender por qué no lo aceptaba, su tía Takako lo había hecho y eso que era una persona bastante exigente
-Youichi hay algo en el que no termina de convencerme -le dijo cuando por fin se armo de valor para cuestionarlo
-se que no tiene un carácter intachable pero me resulta muy fácil ser yo mismo a su lado. No es como cuando estábamos en Tokio y de algún modo no podía hacer o decir lo que quisiera
-eso no es cierto
-bueno, casi nunca solo cuando estaba contigo
-juum aun así siento que no puedes confiarte, que algo no te está diciendo
-trata de darle una oportunidad
-mmm ya veremos, no ha habido ocasión de ver que actué sin pensar
- y ¿eso que significa? No sé porque pero eso no es para nada tranquilizador
-¡oh Youichi! me ofendes, yo sería incapaz de hacer algo que te haga daño.
Eso tampoco le dio tranquilidad al menor pero por lo menos sabía que su amigo lo estaba intentando.
...
-esta vez si tengo nervios...
-no seas ridículo, lo han hecho muy bien. Estas a un paso de la final
-pero tal vez es justo por eso, ¿No has visto los periódicos?
-este... No
-deberías poner mas atención, han llamado a este partido como la final adelantada
-aahh ¿es por qué el otro equipo es el favorito a ganar?
-así es…
-bien, eres el desafiante ¿Y qué? ¿No me digas que no te gusta ese papel? Porque si no es así, entonces no te conozco
-hahaha ¿Como haces para con simples palabras lograr que me emocione?
-porque es asi de simple, ahora sigo esperando mi homerun
-trabajo en ello
Sus nervios estaban justificados, había sido un partido cerrado desde el principio y el otro equipo se había hecho de la ventaja en la tercera entrada y así se había mantenido, todos estaban nerviosos y tensos, incluso Ryo estaba callado y no dejaba de comer palomitas de los nervios.
Todos gritaron como locos cuando Miyuki bateo un doblete que les permitió darle la vuelta al partido en la novena entrada. Mei termino el trabajo sacando a cada uno de los bateadores con tres lanzamientos, todos se dejaron resbalar en la sala y respiraron aliviados, parecía que aquello se había vuelto la regla después de cada partido, pero estaban en la final.
…
Dos días después era la final, Youichi había invitado a Jun a que viera con ellos el partido y también lo habría hecho con Christ, si no fuera porque tuvo que salir el día de la semifinal a un congreso de medicina y no regresaría hasta el otro día, igual que el equipo que esperaban que lo hicieran como campeones.
Ese día solo tenía unas cuantas palabras que decirle al catcher
-da lo mejor…
Sabía que no le contestaría y no esperaba que lo hiciera, solo necesitaba que lo supiera. Se sonrió ante su mensaje y se acomodo una vez más en el sillón para ver aquel partido que estaba seguro marcaba un cambio, quisieran o no.
Miyuki vio el mensaje y se sonrió, una vez más con tal solo unas cuantas palabras Youichi lo había tranquilizado. No podían terminar de creer que estaban en la final, seguían siendo los retadores pero después de vencer a tantos equipos y pasar sobre los favoritos para ganar. Los ponía en una situación diferente, ya no eran el mismo equipo que había llegado hacia tres semanas, eran más fuertes y creían que se merecían aquella victoria, por la que pelearían sin la menor medida.
El partido estaba siendo tan interesante como se esperaba, ninguno de los equipos cedía un solo paso, después de tres entradas a todos les quedo claro que aquel seria un juego de muchas carreras, ya llevaban 8 carreras cada equipo. No era como si estuvieran cometiendo algún error solo que su nivel de bateo era bueno.
Haruichi recordó que había olvidado un libro en la cafetería y lo necesitaba en la mañana, estaban en la séptima entrada y al paso que iban las entradas extras casi eran un hecho, cuando el partido terminara ya sería bastante tarde. Si se iba en ese momento lo más seguro es que alcanzara a regresar para el final. Se puso de pie y le aviso a sus tías que saldría a la cafetería. Los otros ni cuenta se dieron, estaban demasiado enfrascados en el partido y ni siquiera escucharon cuando salió.
…
Haruichi se apresuro hasta la cafetería, no tardo en encontrar el libro, cerrar y salir del establecimiento, no le había tomado realmente casi nada de tiempo. Caminaba por la calle cuando algo llamo su atención, lo vio de reojo pero sintió un horrible peso en el estomago, se paró en seco y dirigió su atención hacia la pantalla de televisión que se encontraba dentro de un establecimiento. En el vio a una persona que le era completamente familiar, aparecía con su familia y con otra persona a la que no conocía y con la cual se veía muy cariñoso, quería correr pero sus piernas no le respondían.
Escucho el ruido como si de un eco se tratara, cuando reacciono unas luces lo deslumbraron y después todo se volvió oscuro…
…
Fue en la decimoquinta entrada que Miyuki puso fin al partido, anoto el homerun que los volvió campeones, todos en el estadio prorrumpió en aplausos y gritos, en la casa todos se pusieron a gritar y a brincar de alegría. Lo habían conseguido, eran campeones. Miyuki y Mei festejaron con todo su equipo, nadie podía quitarse del rostro una enorme sonrisa.
En la casa nadie quitaba la vista del televisor, no podían creerlo, habían visto cada uno de los partidos desde el principio, los habían acompañado en tan largo recorrido y ahora eran campeones, no había sido para nada fácil pero había valido toda la pena del mundo.
Sin embargo el festejo duro muy poco, el teléfono de la casa sonó y el rostro de Haruno palideció…