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Quiero Alcanzarte... por Xesc13primero

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Notas del capitulo:

Hola a todos, siento haber tardado tanto en subir un nuevo capítulo T-T en serio, lo siento :c bueno, aqui les dejo el nuevo capítulo, espero que os guste.

Nueva personaje:

Kikuchi Karu: Una chica pequeña de 5 a 6-7 años, estatura normal para una niña de su edad, piel blanca, ojos esmeralda, cabello castaño claro con flequillo recto y dos coletitas estilo pigtail.

--En casa de la señora que compró a Ren--

-Na Na Na...- tatareaba la niña pequeña que vi al abrirse la caja donde estaba encerrado observando como dibujaba con pinturitas-.

*Flashback*

-Toma Karu, aquí está tu regalo de parte de mamá- reconocí la voz de la señora de la tienda la cuál me había comprado-.

-¡Gracias mamá!- escuché una voz aguda mientras notaba como alguien abría la tapa de la caja en la que estaba metido-¡Muchas gracias mamá! es lo que quería- vi como la niña, dueña de la voz aguda que escuché hace unos instantes, salió de mi campo de visión mientras seguía estando confuso sin llegar a entender lo que estaba pasando en ese momento-.

-Me alegro que te haya gustado Karu- la llamó por su nombre- es que como te veía observándolo en la tienda de juguetes casi siempre que pasábamos por delante, pensé que te encantaría y parece que he acertado, ¿no?- escuché como finalizó su frase desde la caja por la cual se asomaban más niños, en especial un trío de niños que recordaba haber visto en algún lugar. Si mal no recordaba, eran los chicos que me enseñaron por así decirlo en que en teoría los muñecos no tenían pensamientos ni podían hablar-.

-Es verdad, es el muñeco de la tienda del Oji-chan y la Oba-chan- se asomó un pelicastaño claro con cara infantil-.

-Déjame ver Nagisa- se escuchó otra voz levemente más grave empujando al tal Nagisa fuera de mi campo de visión para que entrara el dueño de la voz-.

-Vale, pero no empujes Takami- se quejó el primero-.

-Dejad de pelearos- se asomó otro pelinegro- parecéis niños pequeños- les regañó el pelinegro un poco despeinado-.

-Somos niños, ¿algún problema Ichimatsu?- contestaron ambos a la vez al pelinegro despeinado-.

-No- decía Ichimatsu cuando se levantó la caja de golpe cómo si alguien la hubiera cogido sin preocupación alguna de su interior-.

-Muchas gracias mamá, lo atesoraré!- gritó Karu emocionada sacándome de la caja y permitiéndome ver nuestro alrededor. Estábamos en un salón con paredes beige y alfombra roja con los típicos muebles del salón, un sofá, un sillón, una tele y una mesa con sillas, la cual era de madera-.

-Eso espero que hagas, Karu- vi como la señora le sonrió a su hija para después ser llevado por Karu con los otros niños-.

-¡Ahora a divertirnos!- gritó sonriendo mientras era llevado al patio trasero de la casa donde los niños empezaron a jugar a diversos juegos que tenían montados por allí durante todo lo que quedaba de fiesta de cumpleaños-.

Después de terminar de jugar y hacerse muy tarde, los niños se fueron a sus casas claramente acompañados de sus padre quejándose un poco ya que querían seguir jugando porque se divirtieron mucho. Ahora, ya se había hecho de noche y estaba con una Karu en pijama de color rosa en su habitación.

-Qué bien nos lo hemos pasado eh- me sonrió tumbándose en la cama conmigo en las manos hablándome por milésima vez sobre la fiesta de hoy, la cual había vivido en primera persona ya que después de salir al patio trasero, me llevó consigo sin soltarme mientras jugaba a los diferentes juegos que habían montado sus padres para su cumpleaños con sus amigos-.

-Por cierto, ahora que lo pienso, no te he puesto nombre... ¿cómo te llamo?...- puso una cara pensativa mirándome fijamente- Uff* no sé que ponerte- se rindió tumbando su cabeza de lado mirando a dónde había una estantería llena de lo que después conocería como libros-¡Ya sé!- se levantó de golpe cogiéndome en sus manos y poniéndose de pie encima de su cama- te llamarás Andou, cómo el protagonista de mi libro favorito- se levantó dejándome en la cama tirado saliendo de mi campo de visión para después volver a adentrarse en él con un libro en mano, el cual me leyó hasta que su madre entró en la habitación-.

-Karu, es dormir, cielo- vino su madre a arroparla en la cama mientras ella me seguía abrazando fuertemente- Buenas noches mi amor- posó la madre de Karu sus labios en la frente de su hija para después apagar las luces y cerrar la puerta-.

-Buenas noches Andou- se despidió de mí, o eso creía, llamándome por el nombre por el que decidió llamarme, mi propio nombre-.

-Nombre... y-yo por fin tengo nombre, Andou- pensaba mientras observaba como Karu se quedaba dormida sintiendo algo extraño que nunca había sentido, algo que después conocería como felicidad-.

*Fin del Flashback*

-¡Karu!- la llamó su madre sin rastro alguno de seriedad o enfado-.

-¿Sí, mamá?- le contestó dejando de dibujar-.

-Ayúdame a poner la mesa por favor- le pidió su madre-.

-Sí mamá- se levantó dejándome a mí y a las pinturitas en la mesa para ir a ayudar a su madre- ¿Qué hay hoy para comer?- le preguntaba desapareciendo de mi campo de visión-.

-Estofado- escuché decir a su madre-.

-¡Bieeen!- se escuchó la voz de Karu llena de alegría por toda la casa-.

Ya había pasado casi un año desde mi primera noche con Karu. Desde ese día, Karu me llevó al colegio, al parque, a la playa y a dónde fuese que fuera. Me trataba cómo su hermano pequeño haciendo de mis días los mejores de mi vida de muñeco hasta el momento. Sentía, que estos días durarían para siempre haciéndome todavía más feliz porque no podía esperar al día siguiente para saber qué es lo que haría con Karu, o eso es lo que pensaba en ese momento ya que como el tiempo pasa, los niños crecen y se olvidan de sus juguetes en un suspiro...

-- Después de 10 años--

Los días pasaron en un abrir y cerrar de ojos, después semanas, meses y al final, años, en los cuáles se olvidó completamente de mí. Al principio, ella jugaba conmigo todos los días, recuerdo cada uno de esos días como si fuera ayer, los días en que experimenté continuamente lo que era la felicidad pero con el pasar de los años, ella se fue olvidando de mí lentamente. A la edad de 11 años, dejó de jugar conmigo como lo hizo hasta ese entonces pero seguía haciéndome caso, dejándome en su mesita de noche al lado de su cama, lo cuál aunque me entristecía un poco aún me hacía feliz por el interior ya que no me había olvidado por completo y a una que otra vez me cogía y me explicaba algún problema aunque ella no supiese que yo podía escucharla. También, cabe decir que al pasar los años empecé a tener más conocimiento, no todo pero más que al principio.

Ya después de esos años en los que me seguía haciendo caso, aunque era poco comparado a los primeros años que estaba con ella, llegó el día más triste hasta el momento. A la edad de 16 años, sin querer o eso quiero pensar yo, Karu me tiró al suelo al colocar su nuevo estuche de maquillaje, el cuál recibió por su cumpleaños por parte de sus padres. En ese momento sentí que algo dentro de mí se rompía, algo llamado corazón, que aunque no tenía en realidad era cómo si lo tuviese y ahora, este se estaba rompiendo en mil pedazos.

Cuando Karu se dio cuenta de que estaba en el suelo, me levantó revolviéndome la esperanza, la cuál se destruyó de nuevo al ver como me metía en la primera caja que cogió de debajo la cama.

-Ahora ya tengo espacio para el estuche- dijo cerrando la tapa de la caja y metiéndome debajo de la cama sintiéndome destrozado, acabado y sobretodo triste, triste porque Karu me había rechazado, la persona que me enseñó la felicidad, me abandonó-.

-Sniff* ¿p-por qué?... Sniff*- lloraba sin emitir sonido al exterior rodeado por oscuridad, la misma oscuridad que sentí en la caja en la cuál me metieron el día en que la madre de Karu me compró para su cumpleaños haciéndome recordar esos momentos en los que me sentía amado-.

--Después de unos meses--

No recuerdo cuanto tiempo había pasado desde que me quedé encerrado en esa caja pero lo que si recordaba, era que me sentía como basura, basura desechable, el tipo de basura que podías tirar una vez la habías utilizado. Sentía que a cada momento mi corazón seguía rompiéndose aún creyendo en que Karu me sacaría de la caja permitiéndome estar a su lado de nuevo y eso, un día ocurrió, o eso pensé yo. Después de mucho tiempo, no sé exactamente cuando ya que solo estaba rodeado de oscuridad y nada más, la tapa de la caja se abrió dejando entrar luz al interior de esta y también darme esperanzas.

-Karu-chan- pensé con lágrimas en mis ojos, aunque claramente solo mentalmente, al sentir los primeros rayos de luz desde hace mucho tiempo- por fin, has...- decía cuando me detuve al ver que la que había abierto la caja no era Karu, sino su madre-.

-Karu- llamó a su hija- estoy haciendo limpieza de primavera, ¿aún sigues utilizando los zapatos de la caja de plástico duro de color azul de debajo de tu cama?- le preguntó refiriéndose a la caja donde estaba yo-.

-No, para algo están debajo de la cama en una caja, ¿no crees?- le respondió Karu desde otra habitación- bueno, me voy que he quedado con las chicas, adiós- se despidió para después poder oír el sonido de una puerta cerrándose-.

-Ay, esta niña, si que ha crecido rápido- se giró la madre de nuevo hacia donde estaba yo revisando las cosas de la caja- ¡Andou! pero se puede saber... ¿qué haces aquí?- sentí algo en mi corazón que me llenó de alegría, al parecer, no había sido olvidado por completo- uff* seguramente Karu te dejó aquí sin querer, bueno por el momento te dejaré aquí- conversaba conmigo sonriéndome aunque seguramente sabía que no podía escucharla para después dejarme en al parecer, el borde de la nueva mesita de noche de Karu, la cuál había añorado dándome cuenta de que la habitación había cambiado un poco-.

-¿Cuánto tiempo habré estado metido en la caja?- me pregunté entre triste y feliz porque había salido por fin de la caja, en la cuál me metió Karu- Al menos, ahora podré volver a Karu- pensaba feliz con esperanzas de volver a ver a Karu cuando la vida me pasó una mala jugada de nuevo, una jugada bastante cruel-.

-Será mejor que siga con lo mío- dijo su madre levantándose del suelo cuando sin darse cuenta, accidentalmente chocó contra la mesita haciendo que cayera dentro de una caja de cartón, la cuál se cerró al yo caer adentro-Ay... que daño- oí a la madre de Karu mientras estaba siendo rodeado por la oscuridad de nuevo notando ropa vieja a mi alrededor a pesar de no verla-.

-¡No! No de nuevo por favor!- rogaba que me escuchara y me sacara de allí, no quería volver a sentir esa sensación de oscuridad y abandonamiento de nuevo, no quería-.

-Uff, de momento llevaré la caja de la ropa vieja y el calzado de Karu a la basura- dijo notando como levantaba la caja donde estaba-.

-¿Basura?- sentí desesperación por primera vez- no.... snifff* ¡no! sácame de aquí snifff* no quiero... estar so.... sniff*- rompí en llanto desesperado rezando porque la madre de Karu mirara dentro de la caja y me sacara de allí mientras me llevaba a la basura junto a la ropa vieja-.

-No Sniff* por favor... Sniff* - lloraba desesperado notando cómo el movimiento que hacía la caja cuando la madre de Karu caminaba se detuvo-.

-¡Aquí mismo!- noté como dejó la caja de cartón en el suelo haciendo que entrara en pánico-.

-¡No! Por favor! Sniff* Mira dentro de la caja Sniff* ¡Mira!- gritaba desesperado escuchando las últimas palabras que oiría por parte de la madre de Karu-.

-Ayy... está empezando a llover, será mejor que vuelva antes de que me pille la lluvia- oí los pasos de una persona alejándose del lugar perdiendo toda esperanza-.

-No... Sniff* No Sniff* ¡Noooooo! Sniff*- lloré destrozado perdiendo toda esperanza que me quedaba. Estaba destrozado, sentía que mi corazón ya estaba pulverizado. Tenía miedo, miedo al no saber qué es lo que me pasaría a continuación, había leído libros junto a Karu cuando era pequeña sobre la basura, libros en los que ponía que la basura se aplastaba y se quemaba entrando en pánico- No... No quiero morir... sniff*- lloraba descontroladamente soñando con qué esto sólo fuera una triste pesadilla, de la cuál me levantaría al siguiente día pero al recordar que yo no dormía, cosa que normalmente recordaría si no fuera porque estuviera llorando sin descanso en ese mismo momento, hizo que entrara en depresión- sniff* por qué esto...- pensaba cuando sentí movimiento en la tapa de la caja recobrando levemente la esperanza- ¿habrá vuel...- me ilusioné demasiado esperando que la madre de Karu hubiese vuelto por alguna razón cuando se abrió levemente la caja permitiendo que entrara la luz y gotas de agua de la lluvia dejándome ver quién la había abierto- ¿un perro?- me quedé sorprendido ya que esperaba completamente que fuese la madre de Karu, no a un perro ensuciado por la lluvia, la cual empezaba a golpear mi cuerpo de trapo- un perro. eh... jajaja un perro Sniff*- empecé a reírme por mi mala suerte, la cuál no creía que aumentaría pero sorprendiéndome, el perro me agarró con su boca e hizo fuerza con los dientes destrozándome levemente el brazo derecho sin llegarlo a romper por milagro- ¿Eh? n-no... Suél... ¡Suéltame!- grité desesperado para que no me siguiera rompiendo más- ¡Suéltame! ¡He dicho que me sueltes!- gritaba desesperado - ¡Socorro! por favor ¡Ayuda!- rogaba por ayuda mientras el perro me agitaba mordiendo con más fuerza mi cuerpo entero aunque claramente, nadie podía escucharme- p-por favor sniff* a-alguien - me caí de su boca cayendo en el suelo ensuciado mientras la lluvia seguía cayendo -no quiero morir... sniff* no aquí, de... sniff* esta manera sniff*- lloraba desesperado mientras el perro se acercaba a mí de nuevo-.

*Woof Woof*

Ladró el perro, el cual, parecía que me atacaría de nuevo y esta vez, se ocuparía de destruirme completamente sin detenerse.

-Así que aquí se acaba todo, eh...- acepté mi muerte con una amarga sonrisa ya que en verdad, no tenía motivos para seguir viviendo, Karu, a pesar de haberme abandonado, seguía siendo mi todo después de todo y sin ella, no tenía razón para vivir el mañana- adiós sniff* mundo- derramé por primera vez una lágrima al exterior, la cuál fluyó lentamente por mi ojo derecho hasta alcanzar el suelo al mismo tiempo que el perro saltó hacía mí para destrozar mi cuerpo por completo-.

¡CONTINUARÁ!!!

Notas finales:

Espero que os haya gustado ^^

No olvidéis, quiero saber vuestra opinión del fanfic


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