Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Quiero Alcanzarte... por Xesc13primero

[Reviews - 31]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

PERDÓN POR TARDAR TANTO EN SERIO T-T LO SIENTO MUCHO, SOY UN *** T-T SIEMPRE SIGO QUE ESCRIBIRÉ PRONTO PERO LUEGO ME SALEN OTRAS COSAS LO SIENTO EN SERIO T-T

Este capítulo será de Kousuke x Ren, de la historia principal por lo que no pasa nada si no os acordáis de nada :'v soy un tonnto T-T lo siento en serio.

Pequeño mini resumen de lo que pasó: Se descubrió que Ren no era humano, todos lo olvidaron excepto Kousuke. Luego de contar el pasado de Ren, Kousuke tuvo un accidente de tráfico pero no pasó nada grave, encontes Ren preocupado por Kousuke empezó a sentir que se había enamorado.

 

--Ren's POV--

 

Habían pasado unos cuántos años desde el accidente de Kousuke. Ahora él ya era un respetable y oficial alumno de segundo año de preparatoria y yo, seguía en el mismo lugar de siempre, en su mesilla de noche. No es que me entristeciera el estar en el mismo lugar de siempre, es más, estaba realmente feliz por ello, puede que ya no me hiciera tanto caso como antes pero me seguía apreciando y eso hacia que mis sentimientos por él siguieran vivos. Así es, mis sentimientos por él. Después de de aquel accidente, me di cuenta de que me enamoré de Kousuke, era la primera vez que experimentaba tales sentimientos. Sabía de ellos pero aún así, lo que sentía era nuevo, era como si todo fuera mejor a antes, como si mi cuerpo entero rebosaba de feliz.

 

Pero, un día, mi feliz y normal vida junto a Kousuke cambió, era un dia cualquiera, un Viernes para ser exacto, Kousuke estaba en clase como siempre y su padre, el cuál hoy se tenía que ir de un viaje de negocios, se encontraba limpiando la casa.

 

-Uff*- entró suspirando su padre con utensilios de limpieza- ahora el cuarto de Kousuke- dijo para después empezar a limpiar, primero empezó por la zona del armario y luego por la de la cama, donde lo que más temía pasó de nuevo aunque no fuera queriendo. Por accidente, su padre me empujó con su codo colocando algunas cosas en al mesita de noche haciendo que cayera en el cubo de la basura sin que se diera cuenta y después, tiró varios papeles y unas camisetas rotas que encontró en el armario de Kousuke encima mía tapándome por completo.

 

-¿Eh?- pensé sin acabar de procesar lo que acababa de pasar-No... no, no, no, no- repetía una y otra vez entrando en pánico- No, e-esto no puede estar pasando!- estaba totalmente aterrado. Sentía lo mismo que aquel día en que me tiraron por primera vez pero esta vez, no podía dejar de pensar en una vida sin tener a Kousuke a mi lado, me negaba, me negaba a estar sin él-No, por favor... date cuenta de que estoy aquí...-rogaba para que su padre se diera cuenta de que me había tirado pero mis esperanzas de que tal deseo se cumpliese se desvanecieron por completo cuando cerró la bolsa de basura del cesto y esta se empezó a moverse- No...., no, no no sniff*... ¡NO DE NUEVO!- entré en desesperación, no quería volver a pasar lo mismo, no, es más, a decir verdad me alegró el que hubiese acabado en la basura aquél día porque si no hubiese sido así nunca hubiera conocido a Kousuke pero esta vez, me negaba completamente a alejarme de él, sin él, mi vida perdería lo poco de sentido que tenía desde un principio. Él era el único que me brindaba felicidad y no podría aguantar el tener que vivir por el resto de mi vida sin él- preferiría que mi vida terminase ahora a no volverlo a ver nunca jamás- pensaba llorando intensamente a pesar de que no soltara lágrimas al exterior mientras que escuchaba el ruido de la puerta abriéndose y cerrándose de nuevo dándome a entender que estábamos afuera-.

 

-Bueno- pude escuchar la voz del padre de Kousuke mientras sentía como dejaba la bolsa en la que estaba en el suelo seguramente junto a otras- ya he acabado aquí, mejor me voy a casa para prepararme para el viaje de esta noche- dijo sentenciando el final que me venia venir pero aún así, seguía sin querer aceptarlo-.

 

-N-no por-favor...no me dejes- rogué tristemente pero la única respuesta que conseguí fue escuchar los pasos del padre de Kousuke alejarse de donde estaba haciendo que una sonrisa triste se formara en mi rostro- así que al final, estoy solo de nuevo...-fue lo único que pensé en ese mismo momento empezando a llorar de nuevo, claramente sin derramar lágrima alguna por la simple razón de que era un muñeco-.

 

--Por la noche de ese mismo día--

 

No sé cuantas horas habían pasado ya desde que me encontraba en la basura, pero me las pasé pensando una y otra vez en Kousuke, por mucho que sabía que ya no lo volvería a ver nunca jamás no podía negar la tristeza que inundaba todo mi cuerpo hecho de telas.

 

-Ufff*- pude escuchar un suspiro al mismo tiempo que notaba como dejaban una bolsa de basura al lado de la mía- hemos llegado a tiempo- escuché la voz de una señora mayor-.

 

-Sí, justo quince minutos antes de que pasaran a recoger la basura, que suerte- dijo otra voz de mujer adulta. No necesitaba ser Sherlock Holmes para saber que era una simple conversación de dos mujeres sin importancia alguna o eso pensaba hasta recordar lo que acababa de decir la segunda voz.

 

-15 minutos eh...- pensé en ese momento- 15 minutos y nunca jamás veré a Kousuke...- no me quedaban ni fuerzas para llorar, estaba hecho polvo mentalmente, el tener que vivir lo que me quedaba de vida sin tenerlo a él era más bien un infierno, un infierno al que estaba destinado, no había nada que pudiese hacer para evitarlo- Kousuke...- su nombré pasó por mi cabeza por milésima vez en esa tarde. Me sentía frustrado por mi impotencia, la impotencia de no poder hacer nada para evitar lo que estaba por suceder. Me odiaba, en esos momentos me odiaba más que otra cosa en el mundo-.

 

Y justo entonces, en el momento que pensaba que no podía pasarme nada peor, pude escuchar que alguien o algo estaba moviendo las bolsas y poco a poco se estaba acercando a la mía, no escuchaba a nadie hablar por lo que me estaba empezando a poner nervioso. Unos pocos minutos después de escuchar esos ruidos, mi bolsa se empezó a mover y entonces fue cuando pensé en que a lo mejor podía ser Kousuke, es decir que otra razón tendría alguien para mover y abrir todas las bolsas si no fuera para buscar algo, a parte de que si está callado es porque debe estar muy concentrado en ello.

 

-¿Kousuke? eres tú?- pensaba empezando a recobrar las esperanzas que ya había perdido- ¡Estoy aquí Kousuke!- gritaba recobrando la energía al pensar en que seguramente era Kousuke, el cuál al volver a casa se habría dado cuenta de que no estaba y había venido a buscarme-¡Kousuke, sí, aquí estoy!-gritaba con todas mis fuerzas a pesar de que no emitía ruido alguno mientras sentía como abrían la bolsa en la que me encontraba y fue entonces, donde toda esperanza que volví a sentir, se destrozó en pedazos pequeños. Delante mía, se encontraba un perro bastante sucio-No... no.... ¡NOO!!!!- empecé a llorar enfadado e histérico-.

 

Entonces, el perro me olisqueó y me agarró sacándome afuera y tirándome al suelo olfateándome de nuevo.

 

-Qué irónico...- pensé en ese momento recordando que no era la primera vez en la que estaba en ese tipo de situación- ¿cuánto hace desde que pasé por lo mismo?- me pregunté rememorando aquél día en que conocí a Kousuke mientras el perro empezaba a gruñirme- supongo... que esta vez no vendrá ningún héroe a rescatarme...- sonreí triste para que justo después, el perro empezara a morderme y a agitarme consiguiendo separar mi brazo derecho de mi cuerpo y casi hacer lo mismo con mi pierna izquierda pero esta, por azares del destino se quedó colgando de muy poco-.

 

Después de eso, el perro me soltó cuál basura y siguió buscando entre las bolsas, seguramente en busca de algo para comer ya que tenía todas las pintas de ser callejero. Tras unos minutos, pasó el camión de la basura a recoger todos los deshechos que había y por suerte mía, espantaron al perro al llegar. Una vez terminaron con todo, se fueron dejándome solo en mitad de la fría noche en el suelo apoyado contra una vieja y sucia verja.

 

-Jajajajajaja sniff*...- empecé a reírme de lo triste que era todo lo que estaba pasando. Era tan estúpido que parecía irreal, aunque claro, un muñeco que tenia conciencia propia tampoco lo era- ¿y ahora qué mundo?... ¿qué es lo que vendrá ahora?- le preguntaba a la nada retóricamente. Primero me tiraban a la basura, después un perro me sacó de la bolsa en la que estaba y me destrozaba y encima, ahora me encontraba sentado en una posición desde la que podía ver la casa de Kousuke. ¿Por qué el mundo tenía que ser tan cruel conmigo? que había hecho yo? era lo único que se me pasaba por la mente-¡¿por qué yo?!- me pregunté- ¡¿no es ya suficiente castigo el apartarme de Kousuke como para que encima tenga que mirar donde vive y recordar cada día que pasa que ya no podré estar a su lado?! sniff* ¡m-mierda! ¡mierda! sniff* ¡mier...da sniff* - maldecía todo por completo mientras me sentía hundido en un infierno, el cual solo podría terminar si otro perro callejero apareciera y me destruyera esta vez por completo-.

 

Y entonces, pasó algo que nunca habría podido predecir, algo que me "salvó" de ese infierno de vida sin Kousuke.

 

-No llores- pude escuchar una voz en mi cabeza-.

 

-¿Eh? sniff*- me pregunté a mi mismo-.

 

-No llores- volví a oír aquella voz, era una voz de mujer adulta- no te des por vencido- me dijo la voz-.

 

Y entonces fue cuando la vi, en el cielo, había una estrella azul brillando intensamente, la cuál descendió del firmamento hasta donde estaba yo.

 

-¿Eeh?- no entendía lo que estaba pasando, lo único que mi cerebro procesaba era que tenía delante mía a una mujer un poco más pequeña que yo y la única forma en la que pude responder a aquello fue confundiéndome completamente-¡¡¡¿q-q-quién eres tú?!!!!- fue lo primero que me salió a lo que ella simplemente me sonrió-.

 

-Me llamo Kumi y soy una hada azul- me respondió creando en mí más preguntas de las que ya tenía-.

 

-¿K-kumi?- le pregunté-.

 

-Sí, Kumi- me respondió con una sonrisa amable- no te preocupes Ren, puedes confiar en mí- me explicó y allí fue cuando me sorprendió de una manera inesperada-.

 

-¡¿C-cómo sabes mi nombre?!- le pregunté extrañado, cada vez que me decía algo más me parecía sospechosa-.

 

-Uff*- suspiró la "hada azul"- he metido la pata- suspiró para ella misma- tonta, eres tonta - se dijo a si misma-.

 

-¿La pata?- me pregunté-.

 

-Lo siento, no tendría que haber venido tan directa, te he asustado- se disculpó sin yo entender el por qué de esa disculpa- empezaré de nuevo, Me llamo Kumi, la hada azul y he venido aquí a cumplirte tu deseo- me explicó-.

 

-¿Mi deseo?- pregunté-.

 

-Así es, tu deseo- me contestó-.

 

-¿Y p-por qué querrías tu cumplir mi deseo?- le pregunté extrañado porque aún había algo que me olía mal de todo esto-.

 

-Por que es el trabajo de las hadas, simplemente por eso- me sonrió- y bien, vayamos al punto importante, ¿tienes un deseo que quisieras cumplir?- me preguntó parando de volar y quedándose con los pies en el suelo-.

 

-¿Deseo? pues claro que tengo uno...- pensé dirigiendo mi mirada a la casa de Kousuke- quiero volverme humano y poder decidir mi futuro por mi mismo ¡no!- rectifiqué ya que lo que acababa de murmurar solo era algo secundario para mí- quiero enamorar a Kousuke y estar junto a él para siempre- dije decidido-.

 

-Pues si lo tienes a que esperas, pídemelo y yo lo cumpliré por ti- me miró con una mirada amable-.

 

-¿E-en serio?- le pregunté aún un poco inseguro porque no me fiaba para nada- espera un segundo, ¿cuáles son las reglas?- le pregunté porque parecía demasiado bueno para ser verdad-.

 

-Chico inteligente- me dijo haciendo que empezara a dudar de si pedirle el deseo o no- pero puedes estar tranquilo, no tienes que dar nada a cambio, es totalmente gratis, por así decirlo- me explicó terminando en un suspiro-.

 

-¿En serio?- le pregunté ilusionándome-.

 

-No obstante... hay una regla, una sola regla que debes cumplir- cambió su mirada amable a una seria-.

 

-¿Y c-cuál es?- le pregunté al mismo tiempo que mi miedo incrementaba-.

 

-Primero, solo tendrás una semana en la que podrás permanecer de forma humana, si consigues que Kousuke te ame, te volverás un humano de verdad-me explicó-.

 

-¿Y si no?...- le pregunté empezánodme a asustar-.

 

-Si no...- me empezó a explicar que es lo que sucedería si en el periodo de una semana no había enamorado a Kousuke-.

 

Tras escuchar qué es lo que pasaría si no conseguía hacer que Kousuke se enamorara de mí solo pude quedarme en shock y pensarme el deseo dos veces.

 

-Uff*- suspiré después de pensármelo dos veces- da igual- le dije- prefiero mil veces más lo que pasará si no lo consigo a "vivir una vida" sin poder ver a Kousuke nunca más- le expliqué mirándola seriamente-.

 

-Muy bien- me sonrió- entonces, ¿cuál es tu deseo?- me preguntó de nuevo-.

 

-Deseo...- le dije para después dirigir mi mirada hacia el apartamento de Kousuke recordando una escena del pasado-.

 

*Flashback*

 

Estábamos en casa de Kousuke de noche leyendo un libro que le encantaba de pequeño, trataba sobre una historia entre dos amantes que no podían verse porque sus familias se odiaban.

 

-La chica, la cual lloraba noche tras noche- leía Kousuke en voz alta como práctica para aprender a leer en voz alta- pedía el mismo una y otra vez mirando por la ventana hacia donde vivía su amado diciendo "Quiero Alcanzarte"...- y siguió leyendo el cuento hasta que se quedó dormido-.

 

*Fin del Flashback*

 

-- pensé decidido para después mirar de nuevo hacia la casa de Kousuke- Deseo... ¡no! más bien, Quiero...- respiré profundamente- ¡Quiero Alcanzarte!-proclamé dirigiéndome a Kousuke a pesar de que no podía oírme-.

 

-Muy bien, ¡deseo para convertirte en humano y poder enamorar a la persona a la que amas marchando!- agitó Kumi su varita mágica envolviendo todo con luz azul-.

 

¡CONTINUARÁ!

 

 

Notas finales:

Dios mío T-T siento haber tardado tanto en serio :'v


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).