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La primera vez por sharedey

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Notas del capitulo:

 
 Hoooola =D 
 
Si, lo sé, volví a retrasarme T.T pero la vedad no pude escribir el capitulo las anteriores semanas
 
1 porque estaba con mucho trabajo
 
2 estaba deprimida :( por lo que mi inspiración no era la mejor del mundo, así que decidí esperar a sentirme mejor :D por eso hoy vengo con un nuevo capítulo de esta historia, espero que sea de su agrado n.n
 
 Como siempre gracias al l@s que me animan con un comentario y también a tod@s por leer en general =D 
 
Ahora, al cap 

 

 
Las nubes comensaban a cubrir el cielo, dando indicios de que pronto comenzaría a llover, a pesar de que el tiempo se mostrase caluroso hace solo unos instantes; en verdad que el clima podía cambiar de un modo muy repentino en esa ciudad y aquello no dejaba de ser molesto para un chico de ojos rojos; aunque por algún extraño motivo, ahora mismo no lo era tanto 

 

 Sin entender porque, aparto su vista de la ventana y la dirigió en dirección al chico que estaba sentado al frente suyo, el cual mantenía toda su atención en llevar a cabo el trabajo que tenían; tal parecía que quería terminar pronto, como si el tiempo no fuese suficiente 
 
 Era verdaderamente extraño, sentía que la cercanía de ese chico era muy poco común ¿porque quería saber todo sobre él? Se había dicho a sí mismo que no importaba la razón de ello, que averiguaría todo lo que escondía sin importar que, se lo repitió muchas veces pero...
 
 Lo cierto era que si importaba, sentía miles de cosas cada vez que se hacía una pregunta referente al chico ojiazul, incluidos la rabia, la impotencia, la irá, la intranquilidad, y  por encima de todos, un sentimiento que no lograba descifrar ¿tal vez lastima? Era absurdo, lastima era lo peor que se podía sentir por un ser humano, pero si no era eso ¿qué era?
 
— ¿te ocurre algo?...— lo escucho preguntar, por lo que esa voz lo saco de sus pensamientos— aún no has empezado con tu parte del trabajo— continuo el rubio, señalando la hoja en blanco que estaba encima de la mesa
 
-lo haré en un momento 
 
-ya van a ser las tres, será mejor que te apures...—después de decir aquello continuo con su labor, mientras el moreno se había quedado observándolo; aquello lo ponía un poco nervioso
 
 Desde lo ocurrido tiempo atrás en su instituto, desde el día en el que se sentencio a no volver a confiar en nadie; jamás se había acercado a ninguna otra persona; se abstenía de hablar solo lo necesario con los demás ya que no quería involucrarse con nadie; eso no era difícil contando con la reputación que tenía
 


 Pero ahora mismo, se sentía tan vulnerable al lado del chico de ojos rojos, y eso era porque intuía que el más alto buscaba algún tipo de respuesta; una respuesta que nunca encontraría, ya que si supiera lo que era su realidad, sin duda terminaría alejándose como los otros… o aun más, y no quería que eso pase, aun si no entendía porque
 


 Sin duda su vida era una tragedia tras otra, desde que tenía memoria siempre había sido así; nunca conoció a su madre, creció como crecen las plantas silvestres, sin atenciones, sin cuidados; a pesar de mostrarse en todas partes, estaba aislado del mundo, no tenía ningún tipo de libertad

 

 Entendía muy bien que su vida era distinta a las demás, era tan lúgubre y tan miserable; no podía permitir que ninguna persona se embarrara con la suciedad en la que estaba en vuelto, y más si se trataba de una persona con buenos sentimientos como intuía que era el chico pelinegro. Y aun así, aquí estaba, metido en su casa, estando a pocos centímetros de él; no quería, pero sentía que cada vez ese chico estaba más cerca de romper el muro que había construido a su alrededor y eso le asustaba 
 

-¿de dónde vienes?...- lo escucho preguntar, volviéndolo a incorporar fuera de sus pensamientos 
 


-¿a qué te refieres?...— respondió con otra pregunta al no entender a donde pretendía llegar el moreno preguntándole eso tan repentinamente
 

 

-¿siempre fuiste así? ¿En dónde está tu madre? ¿Quién es el señor D'Flowring en realidad? — y eso lo confundía más; quizá esta era su maldición, que sus peores miedos no tardaran en hacerse realidad —¿no vas a responder?...— continuo el moreno bombardeándolo con preguntas, causando que el más bajo se pusiera algo inquieto
 


-creo que... terminaré el trabajo en casa, ya se me hizo tarde y si no llego a tiempo se preocuparan por mi...— hablo al fin tratando de sonar lo mas calmadamente posible, cosa que no lograba, ya que el moreno notaba su nerviosismo 
 


-¿por qué no quieres responderme?...—  volvió a preguntar sin apartar la mirada, por lo que el más bajo respiro profundo y trato de calmar la situación 


 
-soy de aquí no vengo de ningún lado, nunca conocí a mi madre, mi padre nunca me dijo que paso con ella; el señor D'Flowring es mi papá, y si, siempre he sido así; listo respondí a tus preguntas


 
 El moreno se quedo mirándolo tras escuchar aquella “respuesta” si podía llamarle así, es que la verdad respondió pero no respondió, hablo pero calló ¿Por qué ese chico tenía que hacerlo todo tan difícil? La verdad quiso pescarlo con la guardia baja y así obtener algo; tal vez no fue buena idea preguntarle todo de un modo tan improvisado, ahora veía que estaba un poco asustado 


 
-mi padre trabaja para tu papá…- comenzó a hablar, obteniendo de ese modo la atención del más bajo— después de estar diez años bajo su servició al fin le dio un asenso, esa la razón por la que vinimos a vivir a esta ciudad. Al principio y aun ahora todo se me hacía muy pesado; en primer lugar porque no quería dejar la vida a la que me había acostumbrado…- continuaba hablando


 
 El ojiazul se quedo mirándole; no entendía la razón de porque Kurogane le contaba todo esto justo ahora, pero por algún extraño motivo quería saber más; tal vez era solo por curiosidad


 
-debió ser difícil para ti dejar a tus amigos…— hablo siguiendo el rumbo de la conversación


 
-la verdad no, si tuve amigos, pero a ninguno lo considere como tal; siempre me ha gustado mi privacidad y es muy difícil que yo logre confiar en alguien. En mi antigua escuela siempre me metía en peleas y conflictos, a menudo mis padres eran llamados a la dirección por mi conducta rebelde, pero por más castigos que me imponían, yo nunca escarmentaba y continuaba metiéndome en líos...- continuaba el más alto, mientras el ojiazul lo oía 
 


-¿y por qué?
 


-porque esa es mi forma de ser y de expresar mi rechazo hacía ciertas cosas; es el modo que yo tengo de expresarme…— hizo una breve pausa—También hay cosas que oculto
 


  Ante lo último el ojiazul sintió una corriente eléctrica recorrer su cuerpo; era más que obvio que Kurogane sabía que el escondía algunas cosas, pero que fuera tan directo no dejaba de ser un poco inquietante 


 
-¿a qué… te refieres? 


 
 -mis padres no fueron los que me criaron; la verdad las personas con las que vivo me adoptaron, y eso me ha traído un poco de problemas cuando trato de relacionarme con los demás; no falta alguien que se burle de mi situación y por eso siempre e sido un chico solitario… al igual que tu  


 
 El más bajo abrió los ojos al escuchar eso, aun no entendía el motivo por el que le contaba todo eso; pero que le demostrara la confianza al grado de hablar sobre aquel tema con él, le hacía feliz 


 
-pero no es tu culpa, no entiendo porque alguien puede burlarse sobre una situación así 
 


-¿y porque crees que los golpeaba? Precisamente porque eran unos idiotas…- el más bajo rio levemente con lo último; aquello de algún modo alegro al moreno— muchas veces las personas dicen cosas sobre otras personas, porque las odian, intentan hacerlas sentir mal, o simplemente porque les tienen envidi. Por eso no siempre hay que hacer caso a todo lo que alguien diga sobre otra persona, y muchas veces es mejor que la persona que es agredida de ese modo se defienda, porque si siempre se queda callada no logra más que hacer que todos crean en los falsos rumores… como es tu caso...- concluyó mirándolo fijamente a los ojos

 

 
 El ojiazul bajo la mirada ante eso, ahí estaba otra vez Kurogane, lanzándole indirectas muy directas; aquello no hacía más que ponerlo nervioso, sabía que el moreno tenía razón, pero poco o nada podía hacer al respecto y más aun cuando sabía que los rumores que se esparcían, no eran tan repudiables como la realidad. Volteo su vista en dirección al reloj, este apuntaba las 16: 30

 

 

-el tiempo paso volando, ahora es más que tarde debo irme ya, terminare el trabajo y tu puedes hacer tu parte después…— hablo el chico de ojos azules cambiando completamente el rumbo de la conversación; y comenzó a alistar sus cosas ante la atenta mirada del moreno


 

 El ojirojo cerró los ojos por un momento al verlo; otro día en que fracaso el intento por descubrir algo sobre lo que ocurría con el chico ojiazul; sin embargo esto apenas era el principio y no se daría por vencido, sabía que tarde o temprano terminaría descubriendo la verdad, y después de ello... haría lo que fuera necesario…

 

 

 La noche se mostraba tranquila, hace tan solo unos minutos que había parado de llover; el rubio contemplaba a través de la ventana del cuarto de su progenitor, esperando a que este llegara para poder cumplir con la última de sus obligaciones diarias. Hoy había sido un día un poco extraño, se entero de cosas que no sabía y de cierto modo se acerco un poco más al moreno; algo que estaba muy lejos de sus deseos ¿Por qué ese chico insistía en saber sobre él? Quizá preguntarse eso no lo ayudaba; aún así, termino enterándose de su secreto o algo así, y para que se lo haya contado significaba que de algún modo le tenía confianza, y por extraño que pareciera eso lo hacía feliz

 
  Y aún así era duro ser consciente de que eso no era bueno, ya que él no podía corresponder a esa confianza con la suya, por que su caso era muy distinto y nadie podía saberlo ¿qué pasaría si todos se enteraran de que el…? Pauso repentinamente; no le importaría la opinión de sus compañeros, pero si Kurogane lo rechazara sería un golpe muy bajo y doloroso, pero... ¿porque? ¿Por qué era la única persona que no lo juzgaba? ¿O había otra razón? Al principio solo era miedo, pero ahora…
 


 Se sujeto la frente, era tonto ponerse a pensar en ello, lo más seguro era que las razones que tuviera, sean cuales sean, aun si incluso ahora mismo no las entendía; en realidad no importaban, trataría de que el secreto de su existencia, la razón de porque prefería callar antes que defenderse de cualquier acusación, nunca saliera a la luz 
 

 

Notas finales:

Bien, hasta aquí, espero el capitulo haya sido de su agrado n.n traere la continuación lo anfes posible =D

Cualquier duda, sugerencía, crítica o comentario es bien recibida n.n cuidense mucho por favor. Hasta pronto ^_^ 


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