--¡Te volviste loco! ¿Cómo pudiste hacer semejante acuerdo? ¡No voy a tolerar esa clase de estupideces de tu parte! ¡no sabes la vergüenza que meda que haya hecho algo así!
--Déjame manejar esto a mi manera, si te lo he dicho. Es porque no me gusta actuar a tus espaldas.
--¿Te has puesto a pensar un poco en lo que acabad de hacer? ¡Ecthelion lleva más de un año saliendo con Oropher! ¡Es lógico que el Sindar lo ama a él! ¡Y tú le has ofrecido su libertad en una semana! ¿Y cómo vamos a quedar nosotros? ¡Como la burla de dos enamorados! ¡Solo por un capricho de orgullo tu yo!
Gil Galad no se sobre salto, observo a su tío golpear su escritorio, los papeles que yacían en el brincaron debido al golpe.
--Voy a pedir que arresten a Ecthelion ¡Y tú no vas a hacer nada de esas tonterías! ¡Oropher es tu esposo y él no se va a ver con nadie!
Gil Galad se acercó al escritorio y su mirada desafío a su tío, clavo esos ojos penetrantes en él. Turgon se puso de pie ante él, ambos eran casi del mismo tamaño. Era mínima la diferencia de altura entre él y Gil Galad.
--No me hagas pensar que me he equivocado con respecto a ti tío. Déjame arreglar esto a mi manera, Oropher no se ira a ningún lado que no sea conmigo. Oropher no va a gemir en otra cama que no sea la mía. Él va ser el padre de mis hijos.
--¡Ah! ¡Ya veo! ¿Y supongo que Oropher se ha enamorado de ti de la noche a la mañana no?
--No...Solo necesito una semana para convencerlo, que su mejor opción soy yo. Ecthelion le rompió el corazón dos veces y lo sucedido con los orcos es culpa suya. Por ahora tengo todo a mi favor.
--Haber Gil Galad, voy a dejarte hacer las cosas como tú quieres. Pero si Oropher se va con Ecthelion o intenta fugarse con él, voy a traerlo a rastras ¡Y voy a hacer que te lo cojas delante de toda la corte! ¡Y al capitán Ecthelion lo voy a expulsar de Gondolin, de Belerian y de falas!
Gil Galad, se soltó a reír burlonamente. Su tío era demasiado sutil a la hora de hablar. Turgon le clavo la mirada molesto.
--Te preocupas de más tío. Pero está bien, que sea como tú digas, pero te vas a quedar con las ganas de verme coger con mi esposo delante de la corte y Ecthelion seguirá a tu servicio.
--Te vez muy seguro de ti mismo ¿O será que Cirdan te ha enseñado a ocultar tus preocupaciones muy bien? Y si acaso fuera lo último le aplaudo sus enseñanzas.
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Oropher observaba los jardines, mientras le daba manzanas al pequeño Celeb. Después le dio un par de besitos, para acariciar su cabecita, después vio a Cirdan acercarse y sentarse junto a él.
--¿Aun sigues enojado por lo de tu boda?
--No sé, la verdad. Es que ya no lo sé...
Cirdan le observo, Oropher dejo al cervatillo blanco correr por el jardín. Sonrió levemente y después invito a su hermano a caminar por el jardín. Cirdan se puso de pie y le acompaño, ambos caminaron en silencio un rato. Oropher observaba de vez en cuando a Celeb, que husmeaba y olía las flores del lugar.
--Me dijo que quiere conocerme, que no quiere que le tenga miedo y asco....
Cirdan escucho suspirar a su hermano, pero su voz se escuchaba algo confundida.
--A pesar de que me violo aquella noche, no fue tan malo conmigo. Me dijo todo lo que podía pasarme, si no accedía. Y después paso lo de los orcos y el...
El sindar hizo una pausa, trago saliva. Respiro profundo para no llorar. No quería recordar aquello, pero necesitaba desahogarse.
--¡No comprendo cómo dejaste que Thingol me vendiera de esa forma!....
--No te vendí....
--¡Si lo hiciste! ¡Me vendiste! ¡Ecthelion me dijo que a Gil Galad solo le interesa llenarme de bebes! ¡Para preservar su descendencia! Solo soy su....
--¡Oropher cálmate! Haber dime una cosa, si solo le interesara eso exclusivamente a Gil Galad ¿Crees que se hubiera tomado la molestia de ser "amable"? como tú mismo acabas de decir.
El sindar se le quedo viendo a su hermano, entonces le dijo. Que tal vez lo había hecho para quedar bien con él. Cirdan soltó una risita ante aquel comentario y Oropher puso un puchero ante la burla.
--No te engañes hermano, déjame decirte algo. Gil Galad no es amable con nadie, ni siquiera con su tío Turgon. No le sonríe a nadie, no le importa lo que sientan los demás. Y tú has logrado en una noche, hacer que ese elfo sea amable, que te regale una sonrisa, que se preocupe por lo que tú sientes al traer a Celeb. Y le has angustiado como nunca al ser atrapado por esos orcos, aun no puede perdonarse el que ellos hayan tocado tu cuerpo. Dijo que actuó, de forma muy es tupida. Que todo eso lo hubiese evitado, si no te hubiera dejado hablar con Ecthelion.
--¿Entonces él fue a buscarme porque estaba angustiado por mí? ¿No fue el rey Turgon el que le mando a buscarme cuando los orocos me raptaron?
--No, el pidió a su tío se hiciera cargo de Celeb, tomo su auriga y salió a buscarte. Y Glorfindel, el salió detrás de Gil Galad por orden de Turgon.
El sindar se sintió agitado y extrañado, aun recordaba aquellas palabras del príncipe noldor "quiero que dejes de tenerme miedo y asco" "no quiero obligarte a nada ya no más"
--¿Y qué hago entonces?....
--Dime ¿Aun amas a Ecthelion? se sinceró, después de todo lo que ha pasado.
--No, ya no...Yo mismo lo vi y lo escuche la noche de mi boda con Gil Galad. Me escape de la habitación, le avente las ropas encima a Gil Galad y salí corriendo de la habitación, me escondí en otra habitación. Y entonces él estaba ahí, le escuche cuando estaba montando a su "amigo" me acerque a la cama. Y los vi en pleno acto salí de la habitación y después me deje caer en el suelo llorando ¿Por qué?...¿Por qué duele tanto Cirda? ¡Porque!
Cirdan se arrepintió de su pregunta, al ver llorar a Oropher de esa forma. Estaba a punto de abrazarle cuando Gil Galad lo volteo y le abrazo con ternura.
--¡No llores solecito! ya no llores...Di me que te ha hecho este. Viejo cascarrabias.
Cirdan mato a Gil Gald con la mirada y Oropher se rio del comentario entre lágrimas. El príncipe noldor limpio aquellas gotitas, que asaban de las dulces lucecitas de Oropher. Amaba esa mirada limpia e inocente, Oropher se puso rojo al ver la mirada dulce del noldor. Lo que dejo a Cirdan perplejo, Gil Galad se había portado de lo más tierno con él. Tanto que el pequeño Celeb corría alrededor de los dos, demostrando su felicidad. Oropher se separó del noldor. Y dejo que Celeb lamiera sus manos.
--¿Te gusta Gil Gald verdad? es muy amable con los dos ¡Verdad que es dulce pequeño!
Gil Galad se puso serio, se dio media vuelta para marcharse. Oropher se puso de pie y fingió volver a llorar. El noldor se giró sobre sus talones y acudió al sindar. Oropher comenzó a reír y Gil Galad estaba a punto de regañarle, cuando el rubio se aferró a su cuello y le abrazo con ternura.
--Le hannon, eres muy amable conmigo. Estoy dispuesto a conocerte. No te vayas camina conmigo, si....
Gil Gald sintió un enorme pellizco en el corazón. No tenía derecho a jugar con el corazón de Oropher, ahora entendía por qué su tío le había dicho que era un estúpido. Gil Galad se quedó parado. No se movió de su lugar y Oropher se quedó desconcertado.
--No merezco caminar a tu lado. No merezco el cariño, ni la atención de un corazón tan bello como el tuyo.
El noldor se dio media vuelta y se marchó. Oropher vio a Cirdan y después a Celeb el ciervo pareciera que también, no había entendido la aptitud del elfo.
--¿Que dije?
--Nada, parece que algo le pico. No le hagas caso, tal vez está un poco confundido, te digo que es algo reservado. Déjame hablar con él. Por qué no vas a darte un baño y te perfumas un poco, tal vez eso le anime.
--¿Insinúas que se fue por que huelo feo?
--¡No digas bobadas! ¡Es solo estrategia! Anda, vamos a que te des un baño después hablare con él.
Turgon observo a lo lejos todo lo sucedido, pensó que su sobrino era un completo idiota. Pero parecía que no lo era del todo. Lo vio venir hacia donde el estaba, le dejo pasar y después le llamo.
--Gil Galad...
--Si...
--¿Qué piensas hacer ahora?...
--Decirle la verdad..
Oropher se desnudó, toco el agua tibia estaba en su punto. El agua estaba llena margaritas se sumergió en ella y disfruto del baño. Después comenzó a lavar su cabello. Para enjuagarlo con agua fría. Amo ese momento como nunca, por primera vez nadie le veía bañarse, nadie le obligaría a inclinarse para ser revisado. Salió del baño cubierto por una bata azul, que le quedaba algo grande. Término de secarse y se dejó caer sobre la cama. Vio las ropas que Cirdan le había dado, pero se quedó contemplando el techo, que estaba adornado con relieves de hojas de diversos tamaños, como si una enredadera viviera en él. Des pues cerro los ojos y se entregó al sueño.
--Así que por fin te has dado cuenta de tu estupidez. Bien habla con él, si se pone rebelde házmelo saber. Y ya hablaremos de Ecthelion después.
Gil Galad se siguió de largo por los pasillos, hasta llegar a su habitación. Entro y vio su escritorio pero su nariz capto aquella fragancia a margaritas, entonces le vio acostado sobre la cama. el cabello aún estaba algo húmedo. Lo vio envuelto en su bata azul. Vio que la prenda de bordados plateados, le quedaba grande. Su amado solecito parecía un dios durmiente, se acercó con cautela. Sonrió y se recostó junto a él. Acaricio las piernas redondas y suaves del sindar. Oropher se removió y abrazo a Gil Gald. El noldor se quedó quieto.
--Gil Galad.....
La voz de Oropher se escuchaba aun adormilada, el noldor pasó su mano por aquella cadera estrecha y después por sus nalgas redondas y firmes. Oropher sintió aquella caricia y abrió los ojos y se descubrió así mismo abrazado de Gil Galad que le observaba con esos ojos azules y penetrantes. El sindar se puso rojo y de repente le dio la espalda al noldor. Gil Gald suspiro y se recostó boca arriba.
--Necesito decirte algo...
Oropher no se volteo, se abrigo con la bata. Y se hizo bolita, sus manos temblaron de miedo.
--¿Qué cosa? Mi señor....
Gil Galad se colocó de lado y se recargo sobre su brazo.
--Hable con Ecthelion, le dije que puede verte en una semana. Y le he dicho que dejare que tú decidas, que quieres. Si irte con él o quedarte conmigo.
Oropher se giró de golpe y clavo su mirada aperlada en aquel rostro serio.
--¿Entonces me dejaras libre?
--Si... Eres libre de irte con el....
Gil Gald sintió un enorme dolor en su corazón, sabía que él se marcharía y que no lo volvería a ver, estaba dispuesto a adelantar el encuentro, para que su tío no le hiciera daño a Oropher.
Oropher se levantó de la cama angustiado. Quería ser libre, pero no deseaba marcharse con Ecthelion. Él le había traicionado, no le amaba de verdad como tantas veces le había dicho. Pero sabía que podía dejar a Ecthelion atrás. Entonces le dijo a Gil Galad que se marchaba. El noldor se levantó de la cama y le dijo que le esperaba en el jardín, por la noche. Que el mismo lo llevaría ante Ecthelion. Cirdan lo esperaba fuera..
--No se ira...
Dicho esto se dio media vuelta y se retiró dejando aún más confundido a Gil Gald.
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Oropher camino por el jardín, llevaba jalando aquella carretita con Celeb, que dormía bajo la cobija que Oropher le había puesto. Distinguió a Gil Galad en la oscuridad, el noldor no dijo nada sobre Celeb. Le llevo hasta la fuente donde se verían con Ecthelion.
Turgon había notado el carácter irritado de su sobrino, durante la cena. Por lo que había decidido seguirle los pasos, así que el muy condenado había adelantado el encuentro, pensó en castigar a ambos por aquello. Ecthelion les vio llegar y sonrió al ver a Oropher.
--¿Estás listo?
--Si...
--¿Qué es eso?
--Celeb, pienso llevarlo conmigo.
--Oropher, no creo que sea lo mejor para él. No iremos a un lugar en especial por ahora, no puedes arriesgarte a llevarlo y que lo mantén. O que le pase algo, no vamos a otro reino. Vamos a un bosque donde no sabemos que nos depara el destino.
--Pero, ¡Es que él es mi bebe! ¡No puedo dejarlo aquí!..
Ectelion le obligo a soltar la cuerda y se la dio a Gil Galad, que permanecía callado sin decir nada. Después tomo la mano de Oropher quien comenzó a llorar, Gil Galad sintió una gran pena por aquello, pero contuvo sus lágrimas. El pequeño cervatillo se despertó y comenzó a chillar, Oropher estaba por subirse al caballo pero se quedó parado sin moverse.
--------Pensamientos de Oropher-----
--Mira este es mi bebe. Y no puedo dejarlo aquí...
--No llores, hablare con mi tío para que el venga...
--¿Y eso?
--Es mío y de Oropher, así que vendrá con nosotros.
--Es bajo tu responsabilidad absoluta. Hay muchos peligros de camino y solo nos retrasara.
--Es su bebe y por lo tanto también es mío.
--No llores más solecito, que te hizo ese viejo cascarrabias
--No llores capullo, te juro que yo te haré feliz. No quiero verte triste......Ya no llores, no sé qué viste, pero no llores más.....
----------Fin de pensamientos de Oropher------
--Oropher vamos...
--No....
--No ¿Qué?...
--¡No me amas! ¡Cirdan tenía razón! ¡No me amas de verdad! ¡Jamás me has amado! ¡Si de verdad te importara dejarías que Celeb viniera conmigo y cuidarías de los dos! ¡Pero no me amas! ¡Quieres que lo deje aquí! ¡No quiero irme sin él!
El sindar se dio media vuelta y se refugió en los brazos de Gil Galad, el cervatillo sintió a Oropher junto a él y dejo de chillar. Gil Galad le abrazo con ternura, le acaricio el pelo y le dejo llorar a sus anchas.
--Perdiste.... Ahora retírate.... Mi tío nos esta observado desde aquel arco.
Turgon puso cara de pocos amigos, se recargo en el arco de mármol molesto por haber sido descubierto. Ecthelion se dio media vuelta y acelero el paso hasta salir corriendo de ahí.
--¡No quiero dejarlo! ¡No quiero irme sin él! ¡No quiero!
--Ya no estés triste, no iras a ninguna parte sin él. te prometo que adonde quiera que vayamos, el ira siempre contigo y conmigo
--¿Prometes que nos protegerás a los dos?
--Si, lo prometo...
--¿No me engañas?
--No solecito, porque es nuestro bebe ¿Y qué padre no protege a su bebe?
--Se lo dije rey Turgon, él no se marchó. Déjelos, Oropher está hecho para su sobrino y viceversa.
--Uhm. En ese caso dejare que Ecthelion siga a mi servicio, Gil Galad gano la afrenda y en menos tiempo del que pidió. Has hecho un excelente trabajo con el Cirdan.
Después de dejar a Celeb en su canasta, Gil Galad puso a Oropher en la cama. El comenzó a desnudarse y dejo la ropa en el suelo, Oropher aún tenía los ojos rojos de haber llorado, sus perlas se habían tornado más claras y brillantes debido al llanto. Observo aquel cuerpo bien formado, se puso rojo al ver al noldor completamente desnudo. Se volteo, pero escucho a Gil Galad entrar en el baño.
Oropher se despojó de sus ropas, quedando completamente desnudo. Se recostó en la cama y se colocó aquella bata azul. Se acomodó para dormir. Vio a Gil Galad regresar, por su cuerpo escurrían gotas de agua que recorrían sus brazos fuertes y musculosos, una musculatura discreta y bien definida. Oropher observo los muslos del noldor, su espalda ancha y fuerte. Después se en lelo con esos pectorales cubiertos por esa hermosa melena negra. Que contrastaba con esos ojos penetrantes, sus nervios crecieron al verle entrar desnudo en la cama.
--¿Y tú bata?
--La traes puesta....
Gil Galad no pudo más y alcanzo esa boca dulce, beso a Oropher apasionadamente sus manos se abrieron paso entre la bata y las sabanas. Oropher suspiro y jadeo ante aquellas caricias.
Gil Galad beso el cuello del sindar, mientras sus manos acariciaban y recorrían cada parte de ese cuerpo perfecto. Deseaba fundirse con él. Oropher se resistió un poco pero después la excitación le gano. Y comenzó a manosear a Gil Galad sus manos se pasearon por la espalda del noldor, sus piernas se enredaron en un baile extraño. Sus miembros despiertos rosaban el uno con el otro. El líquido empezó a salir y a lubricar a ambos. Gil Galad se restregó sobre Oropher quien soltó un gemido audible.
--¿Estás seguro de querer hacerlo?
Oropher asentó sin decir nada, abrió las piernas y dejo al noldor acoplarse a él. Gil Galad meció su pelvis hacia adelante y su miembro rozo aún más con el de Oropher, sus testículos también se friccionaron con aquel movimiento.
Gil Galad se acomodó y lamio abajo, saboreo los genitales del rubio mientras acaricia su rubio vello púbico. Masajeo los testículos de Oropher con su boca como si de dos dulces se tratara. El sindar soltó un gemido aún más audible, sus manos se posaron sobre los cabellos húmedos del noldor. Acariciándole. Gil Galad observo que el rubio se había puesto completamente rojo. Entonces introdujo un dedo, Oropher apretó un poco, pero después aflojo. Gil Galad movió su dedo de forma circular en el interior del rubio, después volvió a insertar otro y comenzó a entrar y a salir.
---¡Ahhh!
Oropher se arqueo ligeramente sobre la cama y Gil Galad dejo de estimular. El sindar abrió sus ojos vidriosos y beso al noldor. Gil Galad correspondió aquel beso después se acomodó y mordió las tetillas del sindar ligeramente. Oropher se retorció de placer, estaba en su punto. El noldor no espero más y le penetro de golpe. Oropher comenzó a gemir de placer, sus gritos se extendieron por toda la habitación al igual que los gruñidos de Gil Galad. La cama comenzó a rechinar debajo de ellos.
--!Ah! Gil… Ga…lad ¡Ahh!
--¡Oro..pher!.. ¡Arghhh!
--¡Ahh!....!Aghh!.....
Gil Galad sintió como apretaban su miembro, le dolía aquello y a la vez sentía un placer enorme. Abrazo a Oropher lo las fuerte que pudo y acelero el paso, Oropher grito aún más. Hasta intentar arquearse, pero el abrazo de Gil Galad se lo impidió sintió aquel liquido viscoso salir de ahí. Y entonces un calor le lleno por dentro, Gil Galad se vació hasta el fondo. Y permaneció un rato dentro de un exhausto Oropher.
--Le melin... Sé que tal vez no me creas Le melin. Le melithon anuir, no quiero vivir sin ti, no podría.
Oropher volvió a callar, no dijo nada. Solo abrazo a Gil Galad que seguía dentro de él.