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Como la bella y la bestia por Alphonse Zero

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Notas del capitulo:

Holaaaa!!

Hace tiempo que no pasaba por aquí, la escuela ya saben.

Y bueno este cap me quedo largo, espero que les guste!!

Despertó antes que él, aun lo tenía en brazos, el castaño dormía plácidamente, a los ojos de Eidan parecía un ángel. Lo apretó fuerte, como si temiera que lo dejase solo. Recordó al chico de ayer que lo buscaba, no podía permitir que Derek lo dejase, no ahora que lo tenía tan cerca.

-Mmm…buenos días- Dijo el aun adormilado chico de ojos esmeraldas.

-Buenos días- Respondió la bestia con una sonrisa. Derek se soltó de su abrazo y se levanto de la cama.

-Seguro Dominic me buscara en mi habitación y no me encontrara, voy a bajar ¿No vienes?- La bestia se sintió algo decepcionado, esperaba que se quedara más tiempo con él, se cruzo de brazos y le contesto algo frio.

-No, adelántate.

Derek noto que algo pasaba pero al ver que tal vez se enojaría prefirió evitarlo, confiaba en él, más no en su mal genio. Apenas abrió la puerta una avalancha de niños lo atacaron.

-¡DEREK!- Gritaron todos al unisonó.

-No estabas en tu habitación- Dijo Beatriz.

-Pensamos que tal vez…-Dijo Leonora.  –…el amo te había comido- termino Eleonora.

-¿HA? ¿Ustedes siguen con eso? Ya dejé en claro que no me lo comeré- A la bestia ya no le daba gracia que los niños pensarán que se lo comería.  Dominic se abrazo a Derek con fuerza.

-¡Derek! ¿Por qué no dormiste en tu cuarto?- Pregunto preocupado el pequeño de ojos cielo.

-Oh bueno, dormí con Ei… digo, con el amo- Dominic pareció no tomar bien esto, se abrazo con más fuerza a Derek y miro molesto a la bestia.

-¿Por qué me ves así? Derek me pertenece en las noches, así que acostúmbrense a que amanezca en mi habitación.

-No es justo, Derek dormirá conmigo hoy- Pidió Dominic.

-Por mi está bien…

-¡NO! Derek pasa todo el día con ustedes, las noches las pasa conmigo, ese fue el trato- La bestia se levanto y les miro con autoridad. –Vayan a hacer el desayuno rápido.

Los chicos obedecieron y bajaron de inmediato, solo Dominic se detuvo a sacarle la lengua al amo antes de retirarse. La bestia se molesto por la insolencia del chico, aunque claro, debía admitir que estaba tan celoso o más que él.

-Es tu culpa-  Dijo la bestia cruzándose de brazos y poniéndose frente a Derek.

-¿Mi culpa?- se quejo el castaño.

-¡Si! Desde que llegaste los influenciaste, antes ni siquiera tenían sentimientos, eran muñecas huecas y sin voluntad, los convertiste en pequeñas plagas que opinan y hasta se rebelan ante su amo- Al inicio sonó molesto, Derek pensó que de nuevo tendrían problemas, pero de inmediato la bestia le revolvió el cabello.  –Gracias por ello, ahora son niños de verdad, llenaste el hueco de esas muñecas.

Derek se sintió feliz, Eidan le sonreía agradecido, parecía que había hecho las cosas bien.

 

Mientras tanto en la casa de Derek una discusión madre e hijo se llevaba a cabo.

-¡No puedes ir!- Le decía su madre al rubio que buscaba un hacha en el sótano.  

-Nadie más ira, solo yo puedo traerlo de vuelta.

-La policía lo buscara, tu les dijiste donde puede estar, seguro ya lo están buscando.

-Escúchate mamá, parece que no quieres que lo encuentre ¿Acaso no te dio esperanza saber que lo escuche en el bosque?- Jonathan no entendía por qué su madre le prohibía ir a buscar a Derek.

-Claro que me da esperanza, pero entiende, no quiero perder otro hijo en el bosque, si es verdad lo que dices y hay una bestia o lo que sea correrás riesgo, debes  dejar que la policía lo busque.

-La policía dejo de buscarlo hace tiempo, nadie me cree, solo yo lo sigo buscando- al revolver algunas cosas encontró lo que buscaba, tomó el hacha y se dispuso a irse.

-¡No te vayas! Por favor, no nos dejes solos tu también- Su madre lo abrazo por la espalda con fuerza, comenzó a llorar mientras le suplicaba.  -¿Qué pasara si tu tampoco regresas? Tu padre empeora cada día, ¿Y si me quedo sola? Por favor no quiero perder a nadie más-  Soltó el hacha al suelo, las palabras de su madre lo hicieron pensar, no podía abandonarla, se volteo y la abrazo también.

-Lo siento, es que ya no se qué hacer, no confió en nadie, necesito hacerlo yo mismo.

 

Volviendo al castillo, las gemelas y Beatriz esperaban a Derek en su habitación.

-Hola niñas ¿Qué hacen? ¿Pasa algo?- Dijo Derek quien entro a su habitación para cambiarse.

-El amo nos pidió hace unos días que te hiciéramos esto- Beatriz se acerco con un cambio de ropa en las manos.

-Es ropa de chico- Dijo Eleonora.  –El amo pensó que te haría sentir más cómodo- Termino Leonora.

-¡Oh esto es fantástico!- Se emociono bastante, tomo la ropa y la vio, consistía de una camisa color hueso muy elegante y unos pantalones negros largos hasta arriba de los tobillos, además había un lazo para atarlo a modo de corbata color verde esmeralda. – Ya extrañaba vestir un poco más normal. Un momento, ¿Ustedes hicieron esto?

-Así es, bueno, remendamos la vieja ropa del amo para ti ¿Te gusta?- Beatriz le pregunto curiosa.

-Me encanta, gracias chicas, me vestiré de inmediato, bajen y las alcanzo en el comedor- Las niñas le hicieron caso y bajaron mientras Derek se vestía.

Todos estaban en el comedor listos para empezar a desayunar, solo esperaban a Derek. Bajo al poco rato ya vestido, Eidan le vio de pies a cabeza, la ropa le sentaba tan bien, un ligero sonrojo se dibujo en el rostro de la bestia.

-Te ves muy bien Derek- Dijeron las gemelas.

-Gracias, y gracias a ti también por esto, las niñas me dijeron que fue tu idea- Le dio gracias a la bestia.

-No es nada, solo quería que dejaras de quejarte de los vestidos- Dijo la bestia intentando sonar desinteresado.

El desayuno paso rápido, todos comieron juntos como era su nueva costumbre, luego salieron al jardín a jugar un rato, merendaron y justo al atardecer como era de esperar Derek les conto un cuento.

-Entonces la princesa beso al sapo y se convirtió en un príncipe. Ambos se casaron y vivieron felices por siempre- Al terminar el cuento los niños aplaudieron y luego levantaron la mano para pedir la palabra, el primero fue Esteban.

-¿En serio se transformo en humano con un beso?

-Bueno la versión original dice que en verdad lo arrojo contra la pared y se transformo en príncipe, porque una bruja lo había hechizado, pero la versión del beso fue mucho más romántica- De inmediato Beatriz levanto la mano.  

-¡Derek! ¿Si besas al amo se volverá humano?- La pregunta sorprendió a todo el mundo.

-Si, bésalo Derek, para ver si se convierte en príncipe- Dijeron las gemelas. Dominic se cruzo de brazos.

-¿Por qué no mejor lo arroja a la pared? Después de todo eso dice la versión original-Menciono el de ojos cielo. La bestia se molesto ante el comentario.

-Para su información ya e besado a Derek, no paso nada porque yo no estoy hechizado por nadie, yo siempre he sido así.

-¡No les digas eso a los niños!- Derek se apeno bastante de que supieran que se habían besado. Dominic de inmediato fue y abrazo a Derek.

-No, tú me quieres más a mi ¿Verdad?- El castaño se sorprendió por su comentario,  le acaricio el cabello y le miro a los ojos.

- Dominic… los quiero a todos ustedes por igual, se han vuelto muy preciados para mi,  aunque, al amo lo quiero de forma diferente, pero no significa que te quiera menos, solo son diferentes formas de amar- Dominic agacho la mirada, entendió bien lo que Derek quiso decir pero le costaba compartirlo con los demás.

-Yo te quiero mucho Derek, también al amo, aunque sea un gruñón- La bestia se acerco a él y le despeino con una media sonrisa.

-Tranquilo, yo también quisiera que fuera solo para mí, pero Derek solo será feliz si lo compartimos- Todos los niños fueron y abrazaron a Derek y a su amo, el ambiente se sentía como el de una familia, tan cálido, tan alegre, sin duda todos eran felices juntos.

 

Cuando cayó la noche y todo estaba en silencio Jonathan salió de su casa, aprovecho que su madre estaba cuidando a su padre y decidió buscar a Derek, no podía estar en paz, nada lo pondría tranquilo hasta no tener a su hermano en casa. Tomó el hacha y se dirigió al bosque.

 

En el jardín, Derek y el amo Eidan charlaban bajo un árbol, los niños estaban en sus habitaciones, había mucho silencio, se sentía un ambiente de paz.

-Te ves bien con esa ropa, aunque con vestido también- Dijo la bestia.

-Cállate, era vergonzoso vestir así, agradezco mucho que me dieran esta ropa- Derek miro que la bestia sonría, tomo su rostro con sus garras de forma delicada, entonces la bestia cambio su expresión por una triste.

-Si pudiera cambiar algo de mí creo cambiaria mis garras, quisiera tener manos normales.

-¿Eh? ¿Pero por qué?- Derek tomo una de sus garras con ambas manos.

-Por qué quiero tocarte sin herirte, quiero poder sentirte a través de unas manos más gentiles- Derek entendía que no era fácil para Eidan, aunque aun se preguntaba cómo es que el fue una bestia desde siempre ¿Desde cuándo? ¿Tenía familia?  ¿Había más bestias? No tenía el valor de preguntar, prefería que él le contara cuando estuviera listo.

-Pero no me molestan tus garras, nada de ti realmente, y si es imposible cambiarlo será mejor que lo aceptes y entiendas que no me desagradan- Tomo ambas garras y las llevo a su rostro para que lo tocara.   - ¿Ves? Puedes tocarme sin herirme.  Eidan estaba más que feliz, sin dudas Derek era con quien quería pasar el resto de su vida.  

-¿Y si me besas? Tal vez así desaparezcan, pero yo no debo besarte, bésame tu a mí.

-¿Ah? No puedo, es muy vergonzoso.

-Por favor- Eidan se acerco a su oído y le susurro en un tono serio.  –Al menos que quieras que me enojes-  Obviamente Derek no quería eso.

-Bien, pero puede que no funcione- Se acomodo frente a la bestia, esta le obligo a sentarse en sus piernas.

-Si no funciona puedes arrojarme contra la pared después-  Dijo la bestia con una sonrisa mientras esperaba aquel beso. Derek moría de nervios, cerró los ojos y se acerco lentamente hasta sentir el ligero roce de sus labios, lo beso un poco torpe pero dulce, rodeo con sus brazos su cuello y la bestia le rodeo la cintura, el beso se profundizo, ambos saborearon sus labios y sus lenguas, luego Derek se separo lento con el rostro rojo.

-Creo que… no funciono- Dijo tímidamente, la bestia lo tomo de la nuca y lo acerco de nuevo.

-Sigue tratando- Ambos se besaron de nuevo, el beso se volvía cada vez más apasionado y desesperado, al poco rato ya no les bastaba con ello. Eidan comenzó a desatarle la corbata y abrir su camisa. –Solo un poco- Dijo a la vez que le besaba el cuello y bajaba dejando un rastro de besos en Derek. El castaño soltaba pequeños suspiros de placer, no quería quedarse atrás, mientras la bestia bajaba él subía a sus cuernos, los besaba y lamia de una manera que estremecería a cualquiera.

-¿Te gustan mis cuernos verdad? Es la segunda vez que haces eso- Derek no le respondía, seguía en lo suyo.  –Basta, si sigues así no podre contenerme más.

-Pues… N-no te contengas- Dijo Derek de forma tímida mientras se abrazaba con fuerza a la bestia quien apenas se lo creía.

-¿Vas a atenerte a las consecuencias?- Ante la pregunta Derek solo asintió con la cabeza, con ello le estaba dando total libertad a Eidan. La bestia continúo besándolo mientras lo desvestía, el castaño seguía disfrutando, no podía negarlo, él también quería estar con Eidan.

La bestia se quito la capa y la coloco en el césped, tiro a Derek sobre ella y se coloco sobre él, lamió y mordisqueó sus pezones. Sus manos bajaron a la entrepierna del castaño y lo toco sobre la ropa.

-¡Espera! Ah… ¿No crees que vas muy rápido?

-Cállate, dijiste que te atendrías a las consecuencias, así que no esperes salir libre de esta- Lamio su mejilla y continuó tocándolo, Derek gemía despacio, le gustaba, le gustaba mucho, pero le daba pena, nunca nadie lo había tocado, solo la bestia conocía esa parte de él. 

- Ah, no… espera, si sigues así voy a… - En eso la bestia desabrocho y bajo sus pantalones de un solo movimiento.  -¡AH! ¡EIDAN!

La bestia lamio de su vientre a la entrepierna saboreándolo.

-Basta, no sigas… ¡Ah!- Se sentía bien, pero si Eidan seguía así no aguantaría más.

- Que lindo eres- Dijo la bestia en un tono pervertido, se detuvo y comenzó a desvestirse también. Se quito el saco y la camisa, desabrocho sus pantalones y se acerco a Derek. -¿Estás listo?

-¿Listo? ¿Para qu...? ¡Ahh!- El castaño sintió como lo penetraba, lo hacía despacio para no lastimarlo pero igual le dolía.

-¡Duele! ¡Duele mucho!- Sus ojos se pusieron llorosos.

-No me detendré, tranquilo, pronto te sentirás muy bien- Término de penetrarlo con una fuerte estocada, Derek gimió fuerte, su rostro estaba tan rojo como un tomate, le dolía, se sentía extraño, pero le gustaba. Cuando parecía que se había acostumbrado la bestia comenzó a moverse en su interior.

-¡Ahh! Eidan…- Estiro sus manos para abrazarlo, la bestia lo cargo y lo sentó sobre el haciendo que lo sintiese aun más.  –  AHH~

-Se siente muy bien dentro de ti- Aumento la velocidad, Derek gemía con más fuerza con cada estocada, cubrió su boca con sus manos. –Te gusta mucho ¿Verdad? Si no, no gemirías como lo haces, anda, gime más para mí- Lo envistió más rápido.

-¡Ahhh! Ahh…Ei-dan….ahh~ m-más… Más- No podía creerlo, Derek le pedía más, y por supuesto que le obedecería, lo envistió tocando cierto punto. –Ahh~ allí… por favor- A Derek ya no le importaba sentir vergüenza, solo pensaba en el placer, en que estaba en brazos de Eidan, en que lo amaba. Todo en él, su cuerpo y su mente, se llenaron de Eidan.

La bestia gruñía por aquella placentera sensación, por los gemidos de Derek, por qué sabía que lo estaba disfrutando. Lo abrazo con tanta fuerza que casi no se dio cuenta que lo araño de la espalda, mordió con fuerza su cuello hasta dejarle chupetones.

-D-duele, ¿P-por qué te gusta tanto morderme?- Le pregunto con la voz agitada.

-Porque todo tu sabes delicioso ¿Es tu primera vez verdad? Eso me hace feliz, soy el primero en probarte por completo- Lo beso dulcemente, después de un rato en el que se besaron, lamieron y tocaron con pasión Derek se corrió, luego de unas envestidas más Eidan también lo hizo en su interior.

-¡AHHHH!- Gimió con fuerza el de los ojos esmeraldas que cayó en brazos de la bestia. –T-tonto… te viniste dentro…- Se acerco a él y lo beso. – Eidan- Dijo en un tono tierno y sensual.

-Perdón, pero te advertí que no me detendría  ¿Cómo se sintió?- Eidan lo abrazaba tiernamente.

-B-bien…- Respondió con algo de pena.

-Ya veo, eso me alegra- Lo beso en la frente, ambos se quedaron largo rato abrazados, pero no podían quedarse allí para siempre. Se vistieron rápido antes de que los niños aparecieran y los vieran así.

 

En ese mismo momento Jonathan ya había comenzado a cortar los espinos, se apresuro bastante, puso todas sus fuerzas para poder llegar al otro lado del muro y buscar a Derek. La bestia no se había percatado de su presencia, estaba tan distraído con Derek que ni pensó en ello.

-Listo, vámonos rápido- Derek intento caminar rápido pero un dolor en sus caderas le detuvo. –Agh…

-¿Qué te pasa?- Eidan se acerco a revisarlo.

-N-nada, solo me duele un poco, estaré bien, solo necesito descansar- La bestia no dudo un segundo, lo cargo en brazos y lo llevo consigo.

-¡Hey! Bájame, no necesito que me cargues ¿Me estas escuchando? ¡Bájame!- Justo en eso, cuando estaban por entrar al castillo, una voz llamo al castaño por su nombre.

-¡DEREK!- Jonathan estaba allí, tras la reja del castillo, cargando el hacha de su padre, cansado y sudado, pero… ¿Lo había ido a buscar?   -Derek, estás vivo- Casi lloraba de la felicidad, al verlo custodiado por la bestia temió por su hermano. – ¡Tu maldita cosa, suelta a mi hermano!

La bestia gruño con fuerza, dejo con cuidado a Derek en el suelo y se lanzo a la reja asustando a Jonathan.

-¡TE ORDENE QUE TE FUERAS Y NO VOLVIERAS NUNCA! ¡VETE! ¡VETE O TE MATARE!- De sus garras salían chispas de fuego azul, sus ojos brillaban intensamente y las sombras de alrededor rodearon al rubio para intimidarlo.

-¡DEJALO!- Grito Derek quien corrió a ver a su hermano.  –No lo lastimes, es mi hermano.

-¿HA? ¿Acaso no escapaste de casa por culpa de él y de tu familia? Quiere llevarte lejos de aquí, quiere regresarte a ese horrible lugar.

-¡No es verdad! Derek, las cosas han cambiado desde que escapaste, mamá no deja de llorar, papá ni siquiera habla o come, todos te buscamos por todos lados, te necesitamos- Hizo una pausa.  –Nos dimos cuenta de nuestro error, no sabíamos la falta que nos haces, sin ti nada es igual…por favor, vuelve.

Derek estaba sorprendido, todos lo habían buscado, su familia… su padre lo extrañaba. Eidan tan solo no entendía, no quería entender.

-¡No lo escuches! Derek, nos haces falta aquí, no puedes irte- Insistió la bestia.

-¿Cómo una bestia necesita a un chico de 16 años? El tiene familia, tú lo encerraste aquí.

-Eso no lo sabes, pero a mí me consta que Derek era infeliz con su vieja vida, no permitiré que regrese.

-Por favor Derek, piensa en nuestro padre ¿Lo dejaras morir?- Fue como una punzada, una apuñalada en el pecho, su padre había sido tan malo con él, pero no quería que muriera, no podía dejarlo morir por su culpa.

-¿Tan mal esta?- Pregunto Derek en un tono serio, Eidan se sorprendió al escucharlo, Jonathan se alegro.

-Solo tú puedes hacer que se sienta mejor Derek, tienes que volver, te prometo que nada será como antes- Derek vio a la bestia, no sabía que decidir, sus ojos se humedecieron.

-No puedo dejar que muera, es mi culpa- Eidan agacho la cabeza, era inevitable, Derek se le escapaba de las manos.

-Nosotros también te necesitamos.

-No me iré para siempre, solo déjame ir a verlo… ¡Una semana! Tan solo dame una semana y volveré- Le suplico, Eidan ya sabía que Derek diría algo así.

- ¿Prometes volver? ¿No te irás para siempre?

-Te lo prometo…

Notas finales:

Buenoooo.... se que no fue tan "Hard" pero fue algo Xd

espero que les haya gustado el cap

Nos vemos en la siguiente actualizacion! 


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