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Solo cambiemos el rumbo por ItIsOnlyLove

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El tiempo ha pasado demasiado rápido, el trato que Albus hizo con Northway ha tenido que ser alargado, la información es demasiado escaza, solo escucha rumores falsos...

Scorpius está cada vez más frio y cortante, ha tomado un perfil serio, poco sonriente... En vacaciones de navidad se negó completamente a dejar Hogwarts al ver que Albus se quedaba y confidencialmente también Northway.

- ¿Aún no le explicas nada a tu amigo? –pregunto Northway mientras pasaba su brazo por mis hombros.

- No debe saberlo Northway, -dije mientras trataba de zafármelo- Si sabe que estoy haciendo este tipo de investigación tendría unas cuantas preguntas que no voy a responder.

- Y... ¿Crees que eso es suficiente? –dijo mientras sacaba un foto de su túnica –Mira no creo que sea lo correcto, si le quieres decir por mí no hay problema... Toma esta persona puede ser útil.

Mire detenidamente la fotografía, era una chica con ojos café profundo y cabello trigo que llegaba a su espalda.

- ¿Quién es? –pregunte mirándola.

- Es Natalie Wolff, una hermosa Hufflefpuff –dijo mientras se acercaba cada vez a mí –De hecho, ella puede suministrarte muy buena información...

- ¿Costo?

- Mmmm, creo que depende de quien la busque, si vas tú te lo dejara bastante económico...

- ¿Dinero mágico o muggle? –dije mientras comenzaba a anotar en mi pequeña libreta.

- Pues... Mas bien favores, ella tiene una gran red de información gracias a todos sus tratos.

- Le debes...

- Y bastante, así que no le menciones mi nombre... Por cierto cada vez te veo más y más guapo Potter –Dijo colocándose frente a mí- Te ves demasiado bien con esa libretita.

- Lo que haces puede ser visto como pedófila Northway, creo que sabes muy bien que hasta ahora estoy en segundo y tú depravado estas en quinto.

- Igual de mordaz que siempre –dijo mientras tomaba una de mis manos -¿No piensas contarle nada al Señor Malfoy?

- Ya te lo dije Northway...

- Bueno... pero al menos dile que no vuelva a tratar de mandarme una maldición...

- ¿Qué?

- Tu querido e inocente amigo trato de lanzarme una maldición, si piensas que es una damisela en peligro estas muy equivocado... -dijo mientras jugaba con mis dedos –Ese chico es peligroso, cuídate Potty.

- Scorpius no es...

- ¿Capaz? –dijo mientras acercaba mi mano a sus labios –Ese corderito es más un lobo... Te tiene más vigilado de lo que piensas...

- Solo tengo que terminar la investigación rápido... -dije mientras alejaba mi mano- Ya casi se termina el año.

- Agradece que soy un jefe bondadoso, pero cada vez me entra más urgencia para que termines tu investigación.

- ¿No deberías estar estudiando? –dije fastidiado –Pronto comenzaran los exámenes.

- Dile eso a tu hermano, va bastante mal –dijo con sorna – En cambio yo soy el mejor de quinto.

Lo mire directo a los ojos, tratando de descifrar lo que quería pero sus ojos eran totalmente herméticos a mi intuición, su cabello ya había vuelto a su tono normal y ahora lo tenía más corto dejando ver mejor las facciones de su rostro.

- ¿Dudando de tu sexualidad Potty? –dijo acercándose a mí.

- ¿Por ti? –dije sin apartar la mirada –Eres guapo, lo admito, pero nunca serás lo suficiente como para tentarme a cambiar de bando.

- ¿Acaso esa es una amenaza? –dijo colocando una media sonrisa -¿lo probamos?

- Oh, sé que te encantaría –dije con gracia –Pero para tu desgracia, no estoy para nada interesado en ti, es mas aunque lo quisiera hacer sé que no pasaría absolutamente nada.

- Estas hiriendo mi orgullo –dijo con la mirada sombría.

Estábamos cerca al lago, en un lugar que el castillo tiene una extraña hendidura y podíamos charlar con toda tranquilidad, me miro sonriente para luego tomar mi hombros con fuerza y lanzarme a la piedra del castillo.

- ¡Si estás seguro no hay problema! ¿Verdad? –dijo mientras sacaba su varita –Desmaius.

- ¡Maldi...!

Sentí como mis ojos desenfocaron y todo se volvía negro.

¨¨***¨¨

-Potty –sentí como mis sentidos volvían a mí -¿Cómo te sientes?

Trate de moverme pero estaba amarrado y mis ojos vendados.

- Estaría mejor si al menos pudiera ver...

- Oh no, eres un leoncito inquieto, no puedo permitir darte ningún elemento para que escapes.

- Inteligente de tu parte Northway –dije tratando de soltarme.

- Ni lo intentes, tienen un encantamiento –dijo mientras sentía como se hundía debajo de mi "Una cama" -¿Sabes que heriste bastante mi orgullo allí abajo?

- ¿Tanto como para intentar violarme? –dije relajándome –No sabias que fueras de esos.

- ¿Violarte? –dijo con burla –Bueno realmente no hare eso, hare algo mas productivo, si te violo lo comunicaras y seré expulsado, o peor seré castigado por ti.

- Cada vez más inteligente –dije relajándome -¿Entonces qué harás?

- Mmm, -escuché como la cama crujía -¿Sabías que realmente me gusta tu piel?

- Lo dices seguido –dije tensándome.

- Bueno... prometí no violarte, pero vaya que urge hacerte algo.

- Sabes que me vengare si intentas algo.

- ¿Has escuchado que el hombre es irrediablamente débil ate el placer? –dijo al desatarme los ojos.

- ¿Qué pretendes hacer? –dije tratando de alejarme –Me vengare de esto Northway.

- Oh, sé que lo harás, pero tengo mis trucos bajo la manga.

Mire alrededor estaba todo borroso.

- ¿Qué le hiciste a mi vista?

- Un hechizo nublador –dijo acercándose a mí, lo podía ver nítidamente –Veras todo tan borroso que será imposible reconocerlo, excepto a mí.

- ¡Ya córtala Northway! –dije enfadado.

- Nope –dijo risueño –Se u niño bueno y tomate esto.

- Ni loco –dije cortante.

- La dejas bastante difícil.

Observe como tomaba el pequeño y borroso frasquito, bebiéndolo todo, se acercó a mí y tomando mi nuca... ¡me beso! El líquido bajo con dificultad de su baca hasta llegar a la mía, comencé a retorcerme.

- ¡Tan rudo como siempre! –dijo Northway con dolor –Eres todo un león, pero morderme no hará nada.

- ¡Que me diste bastardo! –dije asustado.

- No te preocupes –dijo mientras sacaba su varita –Es una poción bastante divertida... Veras es un fuerte afrodisiaco, en un momento comenzaras a suplicar que te toque.

- ¡Eres un maldito!

- Accio libro –dijo mientras se acomodaba a mi lado acostándose tranquilamente –Tengo bastante paciencia.

Lo maldije nuevamente, esa poción había dejado dormida mi lengua lo que me dificultaba a hablar, habían pasado 3 minutos y comencé a sentir la temperatura de mi cuerpo subir. A los 5 minutos mi cerebro parecía estar en caos, me constaba ordenar los pensamientos de forma coherente. Pasados los 7 minutos, sentí la horrible punzada de necesidad, comenzaba a instalarse en mi vientre bajo y parecía reaccionar a cualquier roce que tenía. A los 10 minutos, mi respiración era entrecortada, mi cuerpo comenzaba a tener espasmos, mi cuerpo comenzó a sentir como la necesidad se masificaba hasta tocar la desesperación.

- ¿Cómo te sientes? –dijo Northway levantando la vista del libro –Wow, te ves realmente desesperado, ¿necesitas algo?

- ...M-ue...re-te –dije tratando de sonar normal.

- Vaya, aun puedes maldecirme –dijo mientras retomaba su lectura –Veremos que dice en otros diez minutos.

Mi cuerpo parecía estar incontrolable, sentía como se acercaba cada vez más a Northway añorando un poco de atención, mi raciocinio disminuía a cada segundo y lo único que pensaba era tratar de calmarme con Northway, A los quince minutos estaba tocando un estado crítico, mis respiraciones erráticas parecían más bien gemidos, y ya solo me encontraba a unos centímetros de Northway, mi cerebro fallaba, los espasmos ya habían hecho su trabajo dándole roces a mi parte inferior.

- ¿Listo? –dijo Northway mientras acercaba su mano a mí –Te ves muy bien estando sonrojado y con esa mirada llena de lujuria, ¿Quieres que te haga sentir mejor?

- ...Te

- ¿Qué dices?

- Pud-rete

- Tan reacio –dijo reacio –Pero no durara mucho, a los 20 minutos, te lanzaras sobre mí, viendo cómo te has acercado, no duraras mucho tiempo y lo sabes.

Lo mire con odio y me aleje dando un bote, aunque cada fibra de mi cuerpo lo sintió como una descarga de placer y dolor, mordí mi labio hasta casi hacerlo sangrar para evitar gemir.

- No lo ocultaste muy bien –dijo Northway –Lo escuche perfectamente.

Sentí como la necesidad parecía tener más control sobre mí que la voluntad, cerré los ojos pero eso solo hacia incremental mi sensibilidad, mis ojos ya veían en un 70% pero la poción aturdía mi cerebro, trate de calmarme... Debo hallar una solución, vamos piensa Albus, trata de recordar los hechizos no verbales, puedo manejar el Accio sin varita, tengo que llamar mi varita. Lanzarle un Desmaius y salir de aquí...

- Accio... varita –dije suavemente.

La varita salió disparada y se colocó en mis manos, Northway trato de reaccionar.

- Demaius –susurre.

Le dio directo en la frente dejándolo inconsciente en la cama, comencé a revolverme en la cama tratando de apaciguar un poco la ansiedad, desate mi cuerpo y comencé a caminar para salir del escondite de Northway, caminaba muy lentamente apoyándome en la pared, ya era de noche y mis piernas fallaban. Ya habían pasado los 20 minutos, realmente me movía para encontrar consuelo en el movimiento, no sabía quién era y por qué estaba allí.

- ¿Albus? –escuche decir -¡Por Merlín, Albus! ¿Dónde estabas metido?

Voltee lentamente viendo como Scorpius se acercaba corriendo por el oscuro pasillo, su capa se ondeaba y su cabello parecía brillar con la luz de la luna, llego tan rápido a mí que no pude reaccionar... Estaba ahí, con la preocupación a flor de piel, algo sonrosado y sudoroso, no podría controlarme.

- ¡Albus! ¿Qué sucede? –dijo preocupado al ver mi semblante débil y jadeante -¡¿Estas herido?! ¡Voy a llamar a Pompfrey!

- Scorp –dije suavemente mientras mis piernas caminaban los pocos centímetros que nos separaban.

Me recargue en él dejando caer mi peso, me sostuvo fuertemente, sus brazos me rodearon tratando de protegerme, comencé a jadear más fuerte y los gemidos escapaban sin control, Scropius estaba cada vez más nervioso, lo sentía.

- A-Y...uda –dije con susurros a su oreja.

- ¿Q-qué? –dijo nervioso.

Mi cerebro parecía desconectarse, lo arrincone contra la pared, fije mis ojos en los suyos, estaban preocupados, pero al ver la lujuria que estaba en los míos, comenzó a ponerse más y más nervioso. Lo jale hasta quedamos en el piso, me coloqué encima de él.

- ¿Estas...? –pregunto casi ahogado.

- Erecto –dije fluidamente –Tan caliente y ansioso como nunca.

- Pero... ¿Quién?

Lo mire de reojo, tome su mano con fuerza y la coloque en mi pecho.

- Solo tócame Scorpius –dije mientras comenzaba a mover mi cadera encima de la suya –Por favor.

Sus ojos entraron en pánico, comencé a guiar su mano por todo mi cuerpo hasta llegar al broche de mi pantalón, lo mire deseoso, baje mi cuerpo hasta que mi cara a nivel de la suya.

- Me pones tan caliente Scropius, pero aun así siempre te cambias frente mío –Para, no digas más –te acercas a mi demasiado... ¿Acaso sabes todo lo que quiero hacerte? –Detente, ahora –Dime Scorp ¿Lo sabes?

Me miraba con desconcierto, solo di una pequeña sonrisa y me acerque a sus labios le di un suave beso y lo mordí su labio inferior.

>> Detente

Reaccione, mire a mi alrededor todo era oscuro y frio, mire a Scorpius en el suelo debajo de mí, con tu labio sangrante y su mano en mi abdomen, salte para atrás tan fuerte que me termine pegando con la otra pared, tome mi rostro en mis manos y comencé a entrar en pánico.

- Al...

- ¡No te acerques Scorpius! –dije arrinconándome a la pared.

- Shh no te preocupes –Dijo acercándose –Todo está bien.

- ¡No lo está! –dije comenzando correr.

Corría y corría, escuchaba los pasos de Scorpius alcanzarme cada vez más, llegue a la puerta del colegio y la empuje con todas mis fuerzas.

- ¡No salgan mocosos! –Escuche gritar a Flitch.

Comencé a correr más rápido, en dirección al Bosque Prohibido.

- ¡Albus detente en este momento!

Mire hacia atrás antes de meterme por completo en el bosque, la cabellera plateada se deshizo ante los matorrales, seguía corriendo, mis músculos quemaban hasta hacer que cayera al suelo, mis latidos era lo único que se escuchaba, la poción aun hacia efecto pero a menor medida, comencé a relajarme, podía ver las estrellas a través de los tupidos árboles, comenzaba respirar más suavemente hasta que el efecto de la poción se neutralizo por completo.

- Mierda.

Bueno, me había declarado de la forma más repugnante y ahora estaba perdido en el Bosque Prohibido, si lograba salir me esperaba una buena detención o una expulsión... Y el gran Harry Potter tendría que venir... ¡Simplemente genial! ¡Qué Merlín me proteja!

 

 


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