-¿Suna? Eso es muy lejos. Hablar con nuestros padres es más sencillo.
-Tengo mucho miedo de que no quieran apoyarme…
-Sabes que no sé si pueda no decirles nada sobre esto…
-Por favor, no digas nada, ni siquiera a Naruto, por favor, no quiero que se enteren, aún falta un poco de tiempo, y tampoco quiero ver la reacción de la abuela… estoy seguro de que sólo traeré deshonor a la familia.
-Gaara, pero trata de reconsiderarlo, no estoy tan seguro de que nuestros padres te nieguen el apoyo, además Sai no lo sabe…
-Jo, claro que lo sabe, le he dejado la prueba positiva en su buzón
-¿Y no te dijo nada?
-Nop…
-¿Almenos le dijiste que era tuya o lo viste?
-No, implemente la dejé ahí y me fui de su casa…
-¡IDIOTA! Eso no cuenta como decirle…
Deidara nunca le había llamado de esa manera, pero a estas alturas comprendía que también irse sin hablar con el azabache había sido un error…
-De todas maneras, se hubiera enterado o no, no creo que le importe mucho ya que solo fui su puta…
-No te menosprecies Gaa-chan, entonces Suna… ¿Estás seguro?
-Sí, sé que es lejos, pero creo que entre más lejos mejor, además de que en Suna hay chicos guapísimos y…
-¡Concéntrate! Apenas estas queriendo resolver este problema, no quieras meterte en otro tan pronto, además, ya tienes un hijo en camino, enserio que tu no cambias Gaara…
-Lo siento Dei-nii, pero también tengo otro problema… mis calificaciones son un asco, apenas y logro pasar las materias… ¿Puedes ayudarme a subir mis notas? Has entrado a una buena universidad, por favor Dei-nii…
-Está bien, pero quiero que te concentres en tu bien y en el de mi sobrino…
-Y no le digas nada de este asunto a Naruto por favor…
-Pero si te vas él querrá saber el motivo
-Prométeme que no vas a decir nada de esto a nadie por favor…
-Está bien, tienes mi palabra.
Haberle contado todo a su hermano le quitaba cierta carga de encima al pequeño Gaara, aunque no parecía ponerlo menos nervioso, pero eso pasó a segundo plano cuando Deidara comenzó con lo del estudio, claramente se lo había tomado muy enserio ya que no lo dejaba ni a sol ni a sombra cuando se trataba de estudiar, ya llevaba días sin poner un dedo en la computadora, en la televisión y ni mencionar en sus amados juegos de video. Pero también eso daba sus frutos, las calificaciones mejoraron notablemente en un par de semanas y ya estaba más que dentro del programa de intercambio, sólo debía mantener sus notas para poder mantenerse en Suna el mayor tiempo posible o almenos hasta terminar el semestre, todos los que notaron la mejora en el chico no paraban de felicitarlo, en especial Minato que aunque no le dijera nada se notaba a lenguas que ya estaba dando a su hijo como un caso totalmente perdido para la escuela y si seguía estudiando era un milagro u obra de los aliens.
Lo había logrado y se marcharía en un mes, Kushina se mostraba muy orgullosa y Minato con cierto temor de que le pasara algo a su “bebé” (no porque ya lo estuviera dando como caso perdido quiere decir que lo desprecie o lo descuide XD).
-Aún falta un poco de tiempo, no te preocupes papá, estaré bien no tienes por qué exagerar.
-Nunca nos habíamos separado, ese mes se pasará volando
-Sí, pero verás que también ese semestre se pasará muy rápido, además puedo llamarles cada semana.
-Yo preferiría que fuera cada día.
-Está bien, pero no me estoy marchando ahora ni tampoco me voy mañana.
-No importa, siempre te lo recordaré y si no me llamas, yo lo haré ¿De acuerdo?
-Pero ni siquiera tengo móvil…
-Es cierto, tu padre y yo te hemos comprado uno como regalo de felicitación, por tus notas y por saber lo de tu intercambio.
-¿Enserio? Gracias mamá, papá…
Kushina abrazó a su pequeño y Minato sólo le dio una palmada en la espalda. Después de tan “emotiva” charla los tres hermanos subieron a su habitación y el primero en caer dormido fue Naruto (como siempre) y Deidara también tenía algo para su hermano…
-Si es verdad lo que dices de Suna, tendrás que mandarme muchas fotografías.
-Ha ha ha, lo haré, aunque no sabía que te hubiese interesado conocer a un chico de allá…
-Yo me refería a que si es verdad sobre la escuela, pero ya que te has ofrecido, también puedes mandarme fotografías de esos chicos a los que consideres atractivos.
Los hermanos rieron y después volvieron a discutir el tema del bebé de Gaara, ¿Qué pasaría si algo saliera mal en su embarazo y no estuviera su familia para ayudarle? Eso sería un serio problema, pero Gaara trataba de no pensar en eso, ambos fueron a dormir sin tratar de preocuparse de más sobre el asunto.
-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-Con los Uchiha-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-
Se había vuelto un hábito el molestar a su hermano menor por haberles arruinado la oportunidad de estar con los Uzumaki (y siguen dando con eso) y para demostrar el odio a su hermano y su poca madurez siempre que podían le gastaban una broma que iba desde comprarle ropa de bebé hasta que en su cuarto encontró cada rincón lleno de muñecos, algunos de más tamaño que otros, pero todos igual de molestos para el azabache.
-¡ITACHI!
-¿por qué tanto alboroto? ¿Qué quieres?
-¿Podrías dejar de hacer esas cosas para molestarme?
-¿Y por qué querría dejar de hacer lo que hago?
-Porque eres molesto al igual que tus “bromas” de mal gusto…
-Oh, esta vez yo no fui…
-¡SASUKE!
El azabache nombrado se hizo presente con su respectiva sonrisa de lado, Sai no se esperaba que Sasuke hubiese metido todas esas cosas a su habitación y mucho menos que tuviese ese singular mal sentido del humor igual que su hermano.
-¿Y ahora qué?
-¡SACA ESAS COSAS DE AQUÍ!
-No es mi problema, no están en mi habitación.
-Pero tú los metiste.
-Oye, tu habitación, tu problema.
El Itachi y Sasuke salieron del pasillo hacia la dirección de Itachi, estaban aparentemente tratando algunos asuntos sobre lo que harían para seguir a sus amados chicos.
-Bueno, Konoha no es muy grande, será fácil encontrarlos, aunque no tengo ni idea de cómo haremos para que no nos odien.
-Para empezar, el del problema fue Sai, no nosotros.
-¿Acaso no viste la expresión que pusieron cuando se marcharon? Estaban preocupados por su hermanito y también furiosos con nosotros.
-Entonces… ¿Sugieres que debemos llevar a Sai con nosotros para que él hable con los chicos?
-Si
-Eso no estaba en los planes, habíamos acordado que sólo iríamos nosotros dos.
-No será buena idea dejarlo, ahora él estará cabreado con nosotros y hará lo que quiera con nuestras cosas, debemos mantenerlo bajo observación, para evitar más problemas.
-Esto es el colmo Itachi, primero nos ocasiona problemas y ahora tenemos que cuidarlo.
-No tenemos muchas opciones.
-Está bien, mientas no haga más tonterías.
-Bueno, ya que estamos solucionando las cosas lentamente llamaré a Orochimaru…
-¿Aún hablas con él?
-Sí, desde hace mucho, me ha dicho que tiene un montón de cosas nuevas que contarnos, le diré que iremos a visitarlo pronto, y nosotros nos vamos a buscar a los Uzumaki… nos vamos en tres semanas
CONTINUARÁ…