El pelirrojo se quedó en silencio repentinamente sin saber qué decir, sus pelirrojos cabellos cubrian la cara de este sin dejar ver la expresión de su rostro, Sai pensó que quizás o estaba muy enojado o hasta podría estar llorando. La sorpresa fue para albos Uchiha que el pelirrojo no paraba de reír escandalosamente y mientras terminaba de reir Obito entraba en una cierta clase de pánico y ahora se estaba arrepintiendo de haber dicho la verdad. Aunque después de que la risa del pelirrojo este le volvió a dirigir la palabra…
-Enserio que esta vez no pudiste ser mas tonto con tus bromas ¿Yo? ¿Un doncel? ¿No pudiste idearte otra cosa mas creíble?
El pelirrojo volvió a reír pero esta vez Obito rió junto con el, pero su risa era nerviosa y forzada, haciendo un momento incómodo para este, pues se daba cuenta de que no había manera de le creyera… No sin pruebas, Sai sin esperar al desenlace de esa charla se fue dejando nuevamente a los dos mayores terminar nuevamente en completa soledad.
-Entonces ¿Sin resentimientos?
Dijo el pelirrojo dispuesto a perdonar la “mala broma” de su amigo…
-Está bien, aunque debiste ver tu cara… Es la primera vez que te escucho reír de esa manera.
-Y la única, así que por favor no le digas a los demás que me viste así ¿Está bien?
-Claro, puedes confiar en mi…
-Gracias Obito…
Dicho eso, Sasori salió del plano visual del azabache para encontrarse con su grupo, que tal vez ya les estuviesen esperando. Obito quien inmediatamente se recargó no pudo evitar al menos golpear el piso con las palmas de sus manos, era obvio que no le creería y ahora con mayor razón sabía que había molestado al pelirrojo, esa risa era bastante sarcástica y fingida, no sabía cómo iba a ser su situación de ahora en adelante, si antes no le daba ni la hora, ahora quizás no quiera ni verle.
Con Sai…
El azabache había salido sin escuchar nada más que la confesión de Obito, pero se extrañó al ver salir al pelirrojo y que el otro mayor estuviese tardando tanto en bajar, supo de inmediato que algo no había salido bien y decidió volver al lugar de los hechos a buscar a su primo idiota. Lo que no esperó ver fue al “gran” bromista Obito Uchiha sentado en el suelo lamentándose de su mala suerte.
-¿Estas bien Idiota?
-¿Te parece que me veo o me siento bien?
-Si te soy sincero… te ves como la mierda.
-Que adorable, idiota ¿Vienes a burlarte? ¿O a joderme? ¿Qué quieres?
-Solo venía a ver al Uchiha más patético de la familia.
-Pues qué curioso, porque por Aquí no hay espejos.
Ambos Uchihas se miraron ofendidos y despues Sai decidió por sentarse a un lado de su primo.
-¿No lo tomó bien verdad?
-No, ahora soy un mentiroso y un loco.
-No es tan grave, creí que serías algo peor.
-¿Peor que tu? No lo creo.
El Uchiha mayor suspiro nuevamente y se levantó del suelo, Sai le secundó para poder ambos salir de la casa de los Uzumaki y unirse a su grupo, lo que no sabían es que aquello se había prestado a un enorme malentendido para el pelirrojo, quien no apartaba la vista del par que se acercaba en su dirección.
-¿Y cómo va la fiesta?
Preguntó Obito nuevamente con su actitud de siempre, llamando la atención de todos al instante y ganándose varias preguntas por parte del resto de sus amigos.
-¿Dónde estabas? Sasuke la acaba de volver a cagar con su novio y no estuviste para verlo.
-Lo siento Itachi, les dije que buscaba un poco de comida extra y me perdí después buscando un baño… Al propósito ¿Qué hizo esta vez el pequeño Sasukin?
-Intentó saltarle encima a Naruto y se llevó la paliza de su vida.
-Ooooh ¿Es verdad pequeño mini Itachi?
-Callate… Y no me digas así…
Decía el malhumorado azabache con la frente apoyada sobre la mesa…
-Esta bien, esta bien, enserio que admiro su perseverancia con esos chicos… Por no decir que son una panda de acosadores y pervertidos de primera.
-¡Callate!
Dijeron Sasuke, Sai e Itachi al unísono haciendo reír al resto del grupo. Al parecer esos tres no estaban de humor para sus inteligentísimos comentarios sobre sus “conquistas”.
Y Obito si algo bien había aprendido esa noche, era que los Uzumaki además de ser bellos y extrovertidos... eran sumamente violentos, agresivos y mal hablados… que Kami se apiade de las almas de sus primos… Y si Sai le ganaba a Sasori en conquistar a Gaara y sin morir en el intento, eso señores, sería un milagro. Pero incluso el ahora estaba en la busca de uno, y un milagro muy grande, pues ahora incluso Sasori ya le había comenzado a aplicar la ley del hielo, y eso lo notaron la mayoría del grupo, pues sentían la tensión entre ellos dos crecer, además de que ahora no solo el pelirrojo ignoraba los comentarios del azabache que siempre al menos le sacaban una sonrisa, sino que incluso estaban en lugares bastante alejados, y siempre eran los que más juntos estaban. Algo había pasado ahí y lo descubrirían tarde o temprano.
Sin embargo, en la mente de uno de los afectados, lo único que pasaba por su cabeza era la broma del mayor de los Uchiha, ese Obito no sabía de límites con sus tonterías ¿Sasori? ¿Un doncel? Eso era patético, una tontería, pero sabía que Obito no pensaría en semejantes cosas… Ahí había otro metido en la broma de mal gusto, y por lo que vio al ver a ambos Uchihas juntos sabía que toda esa artimaña había sido ideada por el imbécil de Sai… Sin duda incluso al que consideraba su amigo se había unido al maldito de Sai para joderlo con su relación con Gaara, esos Uchihas habían caído sin duda muy bajo…
Obito por su parte, se fundía el cerebro en idear alguna manera en que el pelirrojo al menos no se portara tan indiferente con él, sabía que la había cagado, eso no lo negaba, pero ¿Y dónde estaba ese “sin resentimientos” que el mismo pelirrojo había planteado? Eso le dejaba bastante confundido y frustrado…
CONTINUARÁ...