lo peligroso de las primeras atracciones por soranekozawa

Capitulo 6 Sai volvió a besar a Gaara y poco a poco fue bajando a su cuello mientras guiaba los pasos del pelirrojo hasta su cama, aquella que estaba revuelta como siempre y que nunca se molestaba en arreglar, sus manos se paseaban por debajo de su ropa, y antes de lanzarlo sobre esta pudo sacarle la camiseta, cuando por fin tuvo ahí, a Gaara para él se detuvo a mirar su cuerpo, su deseo aumentaba cada vez que paseaba su vista sobre la piel virgen que estaba a punto de ser suya, sin importar las circunstancias de que apenas le había conocido y eran completos extraños a punto de unir sus cuerpos. -Basta por fav… Sai al escuchar que Gaara comenzaba a negarse volvió a besarlo, tomó sus manos y las puso sobre su cabeza aprisionándolas contra la cama y puso su peso sobre el menor, recorrió su cuerpo de manera impaciente, mordiendo y succionando varias partes del chico, atendiendo sus ya erectos botones y haciéndole retorcer de placer.. Regresó a los labios de este para poder continuar con su labor de bajar sus prendas restantes, Gaara por su parte trataba de razonar y negarse ante el acto con el Uchiha, pero su cabeza estaba tan confundida, ya no sabía si propinarle una golpiza al Uchiha o si dejarse llevar por el inmenso placer que le estaba propinando el mismo ¿Qué pensarían sus hermanos de él, que ahora estaba demostrando su irresponsabilidad? Ahora estaba ahí dejándose hacer cuantas cosas quisiera el desconocido Uchiha, ahí estaba, siendo violado por una persona a la que habría pensado honesta y discente… esperen ¿Siendo violado? ¡Pero si por supuesto que NO! Su pequeña cabecilla cansada de pensar tanto se distrajo ante las atenciones que comenzó a sentir en sus muslos y en su trasero, Sai era un experto con esas manos que apretaban su trasero con gran fuerza que no le incomodaba para nada, dejó de divagar para dejarse hacer todo aquello que ese pervertido quisiera. Sai estaba realmente excitado ante la escena del pelirrojo cerrando sus ojos con fuerza y ese sonrojo tan encantador que le excitaban cada momento que transcurría, sus ojos inexpresivos esta vez brillaban con una lujuria cegadora, sólo deseaba poder aguantar las ganas de ir más rápido y verle suplicando por más contacto, el solo pensar en eso hacía que se pusiera más que duro y que jurara que se podría correr con solo recorrer su cuerpo con las manos, viendo su cara sonrojada y envuelta en una culpa exquisita, solo eso sería suficiente para poder querer correrse, pero quería probar ese cuerpo por completo, por lo que tenía que aguantar. -¿Se siente bien aquí Gaara? Decía el azabache a la oreja de Gaara mientras frotaba su ya libre miembro en la entrada del pelirrojo, este por su parte le miraba con los ojos entreabiertos, demostrando su cansancio que tenía tras haber hecho tanta fuerza para cerrarlos, sólo asentía ante la pregunta de Sai haciéndolo sonreír de pura satisfacción, Gaara se había puesto bastante cooperativo y eso que había sido él el que se había comenzado a negarse ante lo que hora estaban haciendo, ahora era tan vulnerable que solo daba ternura y un poco de lástima, pero no para el Uchiha que lo tomaría ahí sí o sí. No aguantó mucho más la espera y lo penetró de una sola estocada, liberando con ello un fuerte gemido que no venía de él, sino de su pelirrojo, que estaba ahí, tratando de hacerse el fuerte y sólo tratando de tranquilizarse mientras lloraba… -S-sácalo, duele… -Tranquilo, pronto se sentirá bien, lo prometo… -¿L-lo has hecho antes? -Para ser sincero… nunca, nunca con otro chico… Gaara guardó silencio ante las palabras del azabache ¿Era eso felicidad? Y Sai lo miraba conmovido por primera vez, esos ojos aqua marina desprendían un brillo encantador que ya le había atrapado en su calidez, ahora tendría que esforzarse por hacerlo bien con ese chico, con su también primera vez… Pero también tenía una sensación extraña, esa sensación que estaba recorriendo su cuerpo apenas veía a ese pelirrojo sobre su cama, le confundía el hecho de estar pensando en esa otra persona, otra persona con la que había experimentado el placer del sexo, a la que le había jurado fidelidad y amor al mismo tiempo, esa persona a la que aun frecuentaba… ¿Era eso culpa? ¿O era acaso algo distinto? Eso volvía a oscurecer su mirada… -S-Sai-kun… puedes continuar… -Como tú lo ordenes…Gaara… Gaara le había sacado de su nube y comenzó a sentir unas pequeñas embestidas, embestidas suaves y lentas, el dolor era notorio, pero el placer se acrecentaba cada vez que el pelirrojo pedía por más contacto, al poco tiempo las embestidas se volvieron frenéticas y certeras a cierto punto que le hacía casi gritar, Sai sacaba su miembro por completo y volvía a introducirlo con una ferocidad impresionante, lo llevaba a un éxtasis por segunda vez y Sai no podía creer con qué facilidad podía hacerle correrse, ni siquiera le había tocada más que las caderas para poder tener más profundidad. El tiempo llegó y Sai estaba por correrse… -M-me vengo… -P-Pe-Pero S-Sai-k-kun -No te preocu-pes, ya te a-ayudo… Esta vez tomó el miembro del menor y comenzó a masturbarlo al compás de las embestidas… -E-Espera Ah, Sai-k-kun, có-rrete fuer…AH El azabache que si bien había entendido no había hecho caso, después de todo ¿Qué es lo peor que podía pasar haciéndolo con otro chico? Cuando ambos se detuvieron Sai salió con “extremado” cuidado del interior de Gaara dejando un pequeño rastro de semen que salía de la entrada del chico, ambos se acostaron uno al lado del otro, Sai no paraba de mirarlo y pensar en lo sexy que se veía ahí, sobre su cama, con el sudor en su cuerpo y con su cuerpo marcado por él, sólo podía mirar la obra de arte que había hecho en él… -Te dije que no te corrieras dentro… -¿Qué dices? -Quiero saber por qué te has corrido dentro de mí… -No veo nada de malo… -Lo es, yo soy un… -No hagas tanto problema, no va a pasar nada lo prometo ¿De acuerdo? -Bien, supongo que debes saber que yo… -Y sobre lo que acaba de pasar, tengo que decirte que… -No hay nada que decir, supongo que ahora podremos conocernos y estar juntos y… -Yo te iba a decir que lo olvidáramos, igual que besarte, tener sexo contigo sólo fue otro de mis caprichos, además, estoy de novio con una chica… CONTINUARÁ…