Asgard y los nueve reinos se encontraban en luto, muchas fueron las vidas que se perdieron en aquel enfrentamiento entre hermanos, como lo habían llamado algunos regentes, Odín había perdido tanto en aquella contienda que su mundo se había tamaleado peligrosamente para caer y destruirse, por otra parte después de una semana de aquello Thor no había despertado ni recuperado de aquel ataque final, Loki junto con su familia regresaron a su hogar levantándolo desde los cimientos y rescatando las pocas vidas que aún se conservaban los nueve reinos mandaron provisiones y objetos para que el reino de hielo eterno regresara a su gloria.
Y aun así Loki lloraba por que el alma de su amado encontrara el camino hacia su cuerpo y así despertara, cada noche se visualizaba la figura de Thor llegando a Jotunheim escapando de Asgard para verle aunque fueran por minutos y en esos pensamientos sonreía sin poderlo evitar y su espíritu se calmaba.
Cuando Jotunheim se levantó habían pasado 7 meses de todo aquello y la vida parecía continuar, Asgard seguía sumergido en su mutismo y luto por parte de Padre de Todo, y aunque algunos decían que la vida continuaba Asgard se desmoronaba de a poco, sin un regente o heredero a la corona el reino dorado parecía perdido en una meditación fatalista, pues sabían que al morir Odín si Thor no había despertado la contienda por quedarse al mando de Asgard seria aun peor y cruel que cualquiera que hubieran vivido antes.
Y la incertidumbre se vivía en cada reino, siendo que ni Jotunheim se pudiera salvar de aquello, Farbauti se había empezado a mover ya que las alianzas eran importantes, Laufey como un rey imponente y Helblindi como el futuro rey todos a la expectativa, esperando y siendo conscientes que una vez la balanza se dirigiera a uno u otro lado lo que hicieran en el transcurso marcaria las futuras acciones.
Y la balanza se inclinó… y con ello los ánimos de los reinos junto a una terrible ansiedad pues ese día después de ocho meses Odín Padre de Todo se paró frente a su pueblo con la mano en el corazón y su semblante destrozado, Thor había fallecido y con ello la esperanza de dejar un legado para su pueblo quienes se vieron igual de abatidos que su rey, solo era cuestión de esperar y que el tiempo diera respuesta a la apremiante situación en que se encontraban.
Odín convoco a cada uno de los reinos para su llegada al funeral de su primogénito, se les dio unos días para recibirlos y con ello despedir a quien fuera uno de los mejores guerreros de la historia, los reyes de Jotunheim observaron la misiva la cual entregaron a Loki quien lloro ante sus padres y regentes suplicando por ir, Farbauti convenció a Laufey quien estaba renuente ya que podría haber un ataque sorpresa durante la ceremonia, pero su consorte le calla con una mano en la boca y otra en el corazón
-confía mi amado rey- fueron sus palabras y Laufey asintió a sus pedimentos dejando que su hijo marchara a ver a quien en vida había amado, Loki se paró en medio del prado nevado viendo al cielo sus ojos se cerraron y llamo al guardián que todo lo ve, la luz le rodeo y sintió como era jalado, en segundos estuvo parado frente a Heimdall quien le recibía con una reverencia
-Joven príncipe- dijo el guardián haciendo una reverencia, Loki le miro atento para seguir con su camino sin decir palabra alguna, el moreno fue llevado al palacio, todo era diferente, la gente, las calles sin luz ni vida a su alrededor, describiéndolo como si fuera una ciudad de muertos pensó en un momento, los pasillos vacíos con cortinas negras colgando de pilar en pilar y las flores que se ponían abajo de estas.
Llevaba unas calzas negras junto con unas botas altas que le llegaban a las rodillas su túnica holgada de manga larga que se habría por enfrente y arrastraba al caminar de color negro para conmemorar la ocasión, cada dios, hombre o ser de los nueve reinos presentes iban a darle su último adiós a quien había sido un guerrero y protector de los reinos, el iba a decirle adiós al Aesir que había amado, Odín desde su trono le vio entrar a paso lento, Loki le miro desde la puerta haciendo una reverencia corta
-Gracias por venir- la voz del mayor sonaba hueca sin vida y Loki bajo la mirada unos segundos para devolvérsela con sus potentes ojos verdes llenos de tristeza notando el cansancio y dolor del mayor, se veía demacrado como si apenas pudiera con su existencia
-vengo a despedir a alguien importante- Odín asintió –y…- miro el altar rodeado de ofrendas donde su amado se encontraba, Odín le observo unos segundos y después a su hijo sonriendo apenas en una mueca
-¿y?- cuestiono al moreno quien derramo un par de lágrimas
-yo solo quería despedirme de él- apunto a Thor, Padre de todo asintió entendiendo entre líneas bajando de su trono para salir y dejar que el moreno le diera el adiós a su hijo –espera- le detuvo unos instantes –tres días de espera para darle el último adiós a un gran guerrero como lo fue Thor son pocos- Odín le observo dudando un poco para después negar
-apenas llevamos dos- dijo saliendo para dejar a Loki a solas con su dolor y la despedida a su hijo, cerrando las puertas para que nadie les interrumpiera pues a pesar de todo lo ocurrido conocía el amor que ambos se habían profesado.
La tradición marcaba una semana en la que cantarían porque su alma se desprendiera de su cuerpo y viajara al Valhala donde los antiguo dioses le recibirían en la gloria eterna, Thor había sido un guerrero y uno honorable con principios y orgullo, Loki y los nueve reinos lo sabían, había luchado en gloriosas batallas y vencido, le observo acercándose apenas para ver el altar, las flores de Alfheim, los escudos de Nidavelir, las armas mandadas desde Muspelheim y allí entre todas esas ofrendas a Thor vestido con su armadura y sosteniendo entre sus manos a Mjolnir, sus cabellos siempre alborotados peinados hacia atrás sin su sonrisa distintiva en unos labios cerrados, se acercó retirando algunos de los objetos para estar a su lado sentándose junto a él en el altar.
Algunos embajadores arribaron minutos después siendo recibidos por Padre de Todo a las afueras del palacio, llevándolos a los jardines donde disfrutarían de una cena ligera y ya suave brisa del verano, contemplaba desde su posición el mar eterno y en el puente que iluminaba con su brillo la costa, escuchaba las pláticas de los presentes algunos preguntas que le parecían de mal gustos, ¿se volvería a casar?, ¿procrearía a más hijos?, incluso comentarios sobre hijas solteras o viudas capases de procrear una nueva familia, pero la verdad es que estaba cansado y dolido.
La primera explosión primer signo de la rebelión o toma del poder de Asgard se dio alrededor de la media noche, nadie había entrado al salón real donde se encontraba el cuerpo del príncipe heredero desde que Odín cerraras las puertas con Loki adentro, los gritos de la servidumbre y llamados de guardias movilizando a la gente se podían escuchar por todo el palacio, habían irrumpido en los aposentos de Odín encadenándole, pues no le matarían al ser signo de una victoria, sus paso se adentraron llegando ante las puertas dobles de oro que se abrieron para dejarles entrar
-yo hijo de Myrellie segundo príncipe de Vanaheim…- una risa interrumpió su auto proclamación volteando al altar donde un moreno les veía de la orilla de este con las piernas colgando mientras las columpiaba de arriba abajo -¿Quién eres?- siseo el hombre molesto
-yo…- se llevó una mano al pecho sonriendo –soy Loki Laufeyson segundo príncipe de Jotunheim- su voz sonaba dulce, aterciopelada Myrellie le vio detenidamente
-tráiganmelo- ordeno a unos de sus hombres Odín quien apenas si se mantenía consiente de la situación le grito que se fuera pero Loki negó
-se un buen niño- dijo un hombre acercándose al moreno
-aléjate de mí- siseo volteando la cabeza en desprecio
-mira mocoso si no quieres que algo malo te ocurra será mejor que obedezcas- le recombino otro de los sujetos, Loki le miro y sonrió ampliamente
-esa hora- vio al sujeto que intentaba tomar uno de sus brazos y le cortó con una daga haciéndole un corte profundo por lo que grito
-maldito- dijo alejándose mientras presionaba la herida de su mano y el otro hombre se acercaba a auxiliarlo
-no se resistan o dolerá mas- Loki les advirtió
-aquí el único que sufrirá serás tu- dijo molesto otro hombre quien soltó a Odín y se fue en contra del moreno, sus pasos resonaron en la baldosa del salón pero en cuestión de segundos había desaparecido de enfrente de ellos y Loki seguía moviendo sus pies columpiándolos con una sonrisa en su rostro
-¿Qué has hecho?- grito otro hombre y en segundos a cuando voltearon a verle tambien había desaparecido, Myrellie frunció el ceño mascullando algo en su lengua materna mientras bajaba para acercarse a Loki quien apenas si subió su mirada para dirigirle una sonrisa afable
-te extrañe- dijo en voz alta y Myrellie no supo que responder quedándose a unos pasos del moreno extrañado –por qué no vienes aquí y me besas- extendió su mano y el segundo príncipe de Vanaheim le miro sin entender hasta que dé tras de él una mano tomo la del moreno apartándolo con brusquedad para cumplir con el pedimento
-imposible- susurro viendo con sus enormes ojos a quien le había derribado de un solo manotazo y besaba apasionadamente al moreno, Odín se había quedado en su lugar sin entender que estaba pasando
-Thor…- ronroneo Loki sintiendo la lengua del rubio pasar por su cuello para pararse en su hombro y morderle –despacio…- pidió y el rubio apenas si se apartó para verle
-tengo hambre- dijo el mayor y Loki asintió
-lo se amor mío no has comido nada en tres días- le aparto apenas –ve…- apunto a los intrusos jalándolo un poco –solo no te comas a tu padre- le guiño un ojos y el rubio sonrió acercándose a los hombres que aún quedaban allí, los gritos se escucharon hasta la madrugada, los hombres seguidores del segundo príncipe de Vanaheim habían muerto a manos de Thor quien sacio su apetito con su sangre, Loki ayudo a Odín retirándole las cadenas y sentándolo en su trono
-¿Cómo…?- apenas le pregunto al moreno quien le sonrió para sentarse a un lado del mayor contemplando como su amado devoraba a aquellas incautas victimas de su ambición
-en el puente cuando Balder le iba a matar…- su mirada regreso a Padre de todo –su muerte seria el regalo más dolorosa para mí, pero necesario debes de morir para regresar a esta vida, y solo si tu alma encuentra el camino a tu cuerpo- volteo a ver a Thor quien parecía más que feliz destrozando a un hombre –yo solo deposite una semilla aquel día y su hijo decidió el futuro a seguir, siempre ha sido un luchador no lo niego pero aun así dudaba de su frotarles y deseo por una vida como la que llevamos mi gente y yo- Thor volteo apenas para sonreírle
-estando a tu lado nada más importa- le escucho susurrar, Loki sonrió ya que ahora su amado rubio tonto poseía los mismos dones que la de su raza
-pero regreso- susurro –encontró el camión a casa y volvió para estar a nuestro lado, su alma no se perdió y ahora está aquí- Odín asintió observando a su hijo el cual seguía en su tarea de saciar su apetito, horas pasaron como un suspiro cuando Thor regreso al lado de su padre y amado levantando al moreno entre sus brazos
-Padre- su voz al igual que él no habían cambiado incluso Padre de todo se atrevía a decir que nada había pasado en esos días a excepción por un brillo nuevo en sus ojos que le hacían ver más peligroso, les vio salir a las habitaciones del rubio donde se encerraron cuando el amanecer llego.
Cada miembro de los nueve reinos y embajadores se dieron cuenta de lo ocurrido durante la noche, apenas si diciendo algunas palabras o expresiones mientras Odín se dirigía a sus propios aposentos para descansar como en noches pasadas no había podido, y la noticia de que Thor el hijo de Odín había vuelto a la vida circulo por los nueve reinos llegando antes que nada a Jotunheim donde Farbauti junto a su esposo e hijo se dispusieron a ir a conocer al nuevo integrante de la familia.
Lo que se había dispuesto como ofrenda y para la despedida del príncipe se colocó para darle la bienvenida de regreso, por la noche mientras la luz se ocultaba y salían por fin tanto los regentes de los otros reinos y padres de Loki ya se hallaban allí para recibirlos
-mi hijo- se acercó Laufey a abrazar a su pequeño quien le sonrió regresándole el abrazo
-padre… permítanme presentarles a ustedes y a los demás reyes y embajadores a mi esposo Thor Odinson- señalo a una puerta -¿Thor?- sonrió y después rodo los ojos –vamos amor no te comerás a nadie… espero- susurro lo último para si yendo a la puerta para meter al mayor a empujones
-espera aun no estoy listo- intento refutar pero Loki solo negó metiéndolo a la fuerza, Thor les miro atentamente y después sonrió mostrando sus nuevos y afilados dientes que a más de uno le saco un susto de muerte y a algunas jóvenes les provoco un desmayo –vez te lo dije- susurro el mayor al moreno quien negó rodando los ojos de nuevo
-se impresionaron por tu belleza ya que no has dejado de verte como el poderos y sexy dios del trueno- intento consolarle pero el otro solo meneo su cabeza en negativa
-me tienen miedo- refuto cruzándose de brazos
-aún no saben cómo tratarte pero pronto ya lo veraz- le ánimo, mientras Laufey estaba a punto de morirse de la risa y Farbauti solo cerraba los ojos con un Helblindi que hacia una mueca extraña con la boca como si quisiera hablar
-vamos déjate de tanto drama si quieres comerte a alguien solo hazlo- Loki reprendió a su hermano por lo dicho con una mirada que a más de a uno le helo la sangre
-es suficiente- la voz de Padre de todo quien hasta ese momento se había divertido resonó por el lugar llamando al orden y compostura –no es digno de un futuro rey el comportarse así- reprendió tanto a Thor como a Helblindi quien solo desvió la mirada haciéndose el desentendido
-por primera vez en siglo le daré la razón a Padre de Todo- dijo Laufey –Thor bienvenido a la familia y está más que seguro que aras feliz a mi hijo… porque si le haces algo aprenderás que la eternidad puede ser muy dolorosa- susurro lo último para que solo sus hijos, consorte y el rubio le escucharan quien asintió.
Aunque esa noche fue sumamente agitada para los presentes ya que Thor apenas si empezaba a controlar sus nuevas habilidades, las siguientes fueron de auto descubriste por completo, Mjolnir aun obedecía sus mandatos al igual que el trueno pero ahora era más veloz y fuerte algo que al principio tuvo problemas pues cada vez que tomaba a Loki ente sus brazos le rompía algún hueso que tardaba segundos en repararse pero le dejaba intranquilo
-yo…- bajo la mirada como si le hubieran gritado o regañado Loki sonrió apenas levantándose para verlo
-ven- le extendió la mano y Thor retrocedió
-ya no quiero lastimarte…- Thor apenas si podía ver a Loki al rostro por lo que no noto cuando el moren le derribo sobre su espalda colocándose arriba de el a horcajadas en su pecho
-podemos hacernos todo el daño que quieras- le susurro a unos centímetros de su labios –romper cada uno de nuestros huesos- Thor le miro titubeando –pero te prometo que se reconstruirán una y otra vez y al amor que siento por ti junto con ellos- y por fin sus labios se juntaron rozando sus dientes en un gesto de profundo amor y comprensión donde Thor le tomo tranquilamente para llevarlo a la cama
-te amo- susurro apenas separándose del moreno quien le beso la nariz y la frente
-y yo a ti- sus miradas se encontrar esperando el siguiente movimiento, ambas llenas de ansiedad y lujurio
-será mejor que paren allí- Helblindi dijo desde la puerta y Thor se paró de inmediato como resorte dejando a Loki en la cama quien veía a su hermano mayor como una molestia –no me mires así, padres ordenaron que te ayudara para que este troglodita no te termine matando- dijo apuntando a Thor quien intercalaba la mirada entre los hermanos quienes parecía se matarían mutuamente
-antes deberíamos de enseñarte a tocar la puerta- dijo fúrico el menor de los hermanos
-yo toque la puerta ustedes no me oyeron por andar acaramelados- refuto de lo más normal sin prestarle atención a como Loki le había hablado
-solo sal de aquí por el siguiente siglo- le recomendó apuntando a la puerta –y cierra la puerta cuando lo hagas- le ordeno y el mayor bufo
-como tu rey…- Loki le interrumpió
-el cual aún no eres- refuto burlón levantándose
-no es necesario que…- Thor fue callado por la mirada iracunda de ambos haciendo que se sentara y callara
-largo-siseo Loki
-oblígame- reto el mayor y de un movimiento rápido e imperceptible Loki le rompió el cuello y arrastro su cadáver fuera del cuarto cerrando la puerta de un golpe volteando a ver a su rubio de una manera encantadora y sensual
-continuemos- se acercó al dios del trueno deshaciéndose de su gabardina y camisa quedando desnudo de la cintura para arriba –bésame Thor- le ordeno y en segundos tenia los labios de su amado atrapando los propios.