No sabía porque siempre terminaba llegando a ese campo, el campo donde entrenaba con el equipo 7, tal vez solo era que estaba un tanto apartado y nadie lo molestaba mientras se intentaba relajar acostado en ese gran árbol, era tranquilizador pues como ya sabía nadie se acercaba a ese lugar…o eso creía hasta que sintió como alguien pateaba con la fuerza necesaria solo para llamar su atención, abrió sus ojos listo para correr a quien osaba perturbar su tiempo de relajación, además se le hacía raro que alguien pudiera encontrarlo pues normalmente en su tiempo libre no se encontraba cerca de los alrededores de la aldea, pero al abrir los ojos y enfocar solo se topo con una cara sonriente, unos ojos azules y un cabello dorado y desordenado frente a él.
-¿Sasuke-teme, qué? ¿Acaso ahora te dedicas solo a dormir?-Decía Naruto con una sonrisa burlona mientras tomaba lugar para sentarse al lado del azabache que descansaba ahí, mientras el ojinegro solo se limitaba a cerrar de nuevo los ojos.
-¿Qué? Ahora te importa después de tanto…-No termina su monologo cuando abre abruptamente los ojos y gira la cabeza en dirección al rubio sentado a su lado- Pero qué demonios…
El ojiazul solo se limita a sonreír ante la reacción del otro.
-Tienes que despertar Sasuke-Le dice sin quitar esa “estúpida” sonrisa- Vamos Sasuke despierta.
El Uchiha se levanto de un tirón al tiempo que abre los ojos y dirige su vista donde segundos antes estaba Naruto y nada… de nuevo ese maldito sueño lo acosaba, se paso las manos por la cara para quitar los rastros de sueño (si manos plural después de su recuperación la vieja Hokage hizo un brazo para el con células de Hashirama). Después de despejar su mente y tranquilizarse decide encaminarse a su hogar.
Habían paso 9 meses desde que despertó en el hospital, 9 meses en los que no había sabido absolutamente nada de Naruto, nadie ha tenido pista alguna del paradero del rubio revoltoso, el último de los Uchiha había tomado la decisión de quedarse en Konoha después de una “seria” conversación con Kakashi y acordar que era lo mejor, además ellos no se rendirían en buscar algún rastro de Naruto y en cuanto encontraran alguna pista le informarían de inmediato.
-¿Usuratonkachi, que estás haciendo?-Pregunta al aire pues sabe que obviamente no obtendrá respuesta para su desgracia.
Tan ensimismado se encontraba el azabache acerca de su sueño y por qué lo alteraba tanto que apenas se dio cuenta de que ya estaba entrando a las calles transitadas de Konoha, que en ese momento no se encontraban tan concurridas para mi fortuna pensaba.
-Sasuke-kun-Lo llaman y sabe que es su ex-compañera Sakura, pues es la única que aún le llama así.
No se detiene pues sabe que ella le dará alcance. Aunque quisiera lo contrario y que lo dejara seguir su camino a casa.
-¿Sasuke-kun, vienes de nuevo del valle del fin?-Le pregunta, pues sabe que el Uchiha en sus ratos libres de vigilancia y deber, siempre se dirigía a aquel lugar donde fue visto por última vez el rubio que todos buscaban sin descanso.
-No-Responde secamente pues para variar no estaba de buen humor, sin contar el sueño que lo había puesto aún más irritado y sinceramente no tenía ánimo de ir a ese lugar para encontrarse con lo mismo de siempre, nada.
-Oh ya veo pensé que habías ido de nuevo, ¿no te rendirás, cierto?, bueno no creo que nadie lo haga pero ya han pasado 9 meses creo que Naruto habría podido al menos dar alguna de señal de…
Tsk como se atreve
El azabache detiene abruptamente su andar girándose hacia la chica a su lado.
-¿Qué quieres Sakura? No estoy de humor, quiero llegar a mi casa de inmediato, así que si tienes algo con relevancia dilo ya-Dice cortante el ojinegro pues no quiere escuchar lo que ella quería insinuar, pues por más que lo negara, aquello hacia que su pecho se oprimiera dolorosamente, Naruto no está muerto lo sé. O al menos era lo que quería pensar, lo que se exigía pensar pues de lo contrario…
-L-lo siento Sasuke-kun no fue mi intención decir eso, es solo que ha pasado tiempo y…
-Sakura no me interesa lo que ten...-
¡BOOM!
Una gran explosión llego a los odios de los jóvenes ninjas interrumpiendo su conversación
-¿Que fue eso? ¿Un ataque?-Pregunta Sakura alterada intentando localizar con la vista el origen de ese sonido.
A lo lejos, en las afueras de Konoha ven crecer una columna de humo.
Sin molestarme en responder el Uchiha se dirige al origen de dicha explosión, no puede ser un ataque, quien atacaría Konoha en pleno día, corre lo más rápido que puede mientras ve como las personas alteradas van en dirección contraria a la que él se dirige, no le toma mucho tiempo llegar a las puertas de la aldea se detiene y mira a su alrededor a los ninjas que ahí se encuentran, a unos pocos metros frente a él se encuentra la nueve de polvo, dirige su vista a los ninjas en turno de vigías algunos en posición de ataque a la espera, otros incluso heridos, los ambus no tardan en llegar.
-¿Qué ha pasado?- Pregunta un ambu a uno de los ninjas que están ayudando a sus compañeros heridos.
-Algo apareció de la nada y comenzó a atacar-Dice cómo puede uno de los heridos mientras uno de sus compañeros intenta hacer un torniquete en su pierna con un trozo de su camiseta para detener la hemorragia.
-¿Algo?-Piensa el azabache, al escuchar la respuesta, desconcertado y frunciendo el entrecejo mientras dirige su vista de nuevo a la columna de humo que se ha dispersado un poco los ninjas se ponen en posición de ataque cuando un sonido sale de esa dirección seguido de un ataque de kunais que se dirigen a todos los ahí presentes, el Uchiha y los demás ninjas reaccionan esquivando el ataque mientras quitan a los ninjas heridos del camino, ¿pero qué mierda?, cuando el ojinegro posa su vista en los kunais lanzados se da cuenta que no son kunais son una especie de espinas del tamaño de su brazo.
-Retrocedan-Dice un ambu mientras Sasuke desenfundado su Katana- Saquen a los heridos de aquí
Obedecen la orden dicha por el líder de escuadrón enmascarado sin rechistar o replicar, mientras él se pone en posición de ataque pues detectan movimiento, alguien está saliendo de la nueve de humo, mas nadie da crédito a lo que ven, no se lo creen, algo sale de la nueve de humo (ahora más dispersa) a paso lento, pero el ninja tenía razón, el causante de toda esa revuelta no era “alguien” es “algo”. Sasuke nunca, ni en sus locos años al lado del sannin serpiente, había visto algo como lo que se acercaba a paso lento, pues era una especie de humanoide cubierto por lo que parecía una coraza en lugar de piel, un hocico prominente como el de un caballo con dientes afilados asomándose de este, brazos (si es que se le podían llamar así) largos y anchos, los dedos de esta criatura seguro pasan los 13 cm sumando sus (al parecer) afiladas garras, todo eso en un conjunto de quizás unos 2 metros o más de alto. ¿Qué mierda era eso? Y ¿porque atacaba Konoha?
En cuanto Sasuke termino de asimilar la figura de aquella criatura un presentimiento nada agradable se formó en su pecho oprimiéndolo, ¿Qué mierda estaba pasando? Aquello no le agradaba nada y por algún motivo relacionaba este suceso con su sueño anterior. No sabía que estaba pasando pero sabía que algo no saldría bien, y no quería averiguar que era.