"Guau".
"¿Guau? ¿En serio?"
"Pues ¿Qué más quieres que te diga? Esto es demasiado como para que lo procese en un sólo momento
Bueno, está bien, lo admito, creo que no debería de exigir tanto con tan poco tiempo que ha pasado, pero 'guau' es de las respuestas que menos esperaba.
Este día ha sido de los que más giros he llegado a tener en mi vida: Huyendo de lo que siento, enterarse que Rock y Spud están juntos, descubrir que son mucho mejores con los consejos que lo qué pensé y terminar confesando lo que siento. Ahora lo único que falta es saber el resultado final de todo esto.
Lorenzo aún seguía en estado casi de shock, tratando de asimilar el beso que nos acabamos de dar. Decidí de esperar un poco antes de proseguir. Quería estar seguro de cómo se sentía él por esto. El sonido del videojuego en la TV es lo único que evitaba el silencio incómodo. Estuvimos así por un largo rato, hasta que Lorenzo volvió a hablar.
"Creo que ya es hora de ir a dormir, se está haciendo bastante tarde" Dijo.
"¿Pero de qué hablas?" Pregunté sorprendido "Es viernes por la noche, y aún no me has dado tu respuesta".
"Porque no hay nada que responder" Exclamó "Esto es sólo un mal entendido, seguro después lo olvidaremos y no reiremos de esto" Dijo esto último tratando de forzar una risa, aunque bastante seca.
"¡Pero no quiero que sea asi!" Respondí exaltado "¡Esto real, lo siento desde hace bastante tiempo, no es algo que se me haya ocurrido de la noche a la mañana, es real!"
"Chet, esto no tiene sentido alguno" Replicó Lorenzo "¡Somos amigos y HERMANASTROS!" Soltó un suspiro e inclinó la cabeza hacia abajo "Sólo pretendamos que esto nunca ocurrió y vayamos a dormir".
No podía creer esto. Esto no podía terminar así, te maldigo Rock. Veía como Lorenzo apagaba la consola y comenzaba a introducirse en su cama.
"Pero correspondiste el beso" Le dije.
Lorenzo se quedó congelado frente a su cama sin hacer nada ni voltear a verme por rato, hasta que soltó un suspiro y volvió a hablar.
"Sólo vete a dormir Chet" Fue su respuesta, y él se acostó.
Solté un aire de derrota, mientras subía a mi cama para tratar de conciliar el sueño.
'Te probaré que este no será el fin' Pensé para mis adentros antes de caer completamente ante el sueño.
Me desperté temprano a la mañana siguiente. Regresé a ver a la cama de abajo, Lorenzo seguía profundamente dormido como de costumbre.
Me preparé sin hacer mucho ruido y salí de la habitación con dirección a la cocina para desayunar.
"Buenos días mamá" Dije mas no recibí respuesta alguna. Extrañado, comencé a buscar el por qué, cuando me topé con una nota en el refrigerador:
"Hijos:
Su padre y yo salimos por el fin de semana.
Planeamos decírselos antes, pero Chet no estuvo por casi todo el día, por lo que no encontramos el momento.
Dejamos dinero en la mesa para que ordenen de comer, o pueden intentar cocinar algo con lo que hay en el refrigerador.
Los queremos.
Mamá"'
Está bien, esto apestaba, un fin de semana sin nuestros padres. Aunque, por otra parte, eso también significa que será un fin de semana sólo para nosotros dos. Una sonrisa se dibujó en mi rostro. Esto ya no parecía tan malo después de todo.
En muchas películas, he visto que uno de los protagonistas le prepara de desayunar al otro a la mañana siguiente. Bueno, nosotros sólo nos basamos, pero quiero asegurarme de hacerlo cambiar de opinión con algo romántico. No creo sea tan difícil cocinar un buen desayuno.
"¿Qué es lo que exactamente querías tratar de hacer?" Preguntó, brazos cruzados y con su mirada fija en mí.
"El desayuno" Respondí apenado.
'Tratar' sería la palabra clave. La cocina había quedado hecha un desastre, trozos de alimentos en varias partes del piso y la mesa, aparte de que se había terminado quemando todo lo que cociné. Creo que cocinar es más difícil de lo que parece.
Lorenzo soltó un suspiro, posiblemente por el desastre que hice.
"Olvidémonos de cocinar por ahora" Dijo "Sólo llamaré para ordenar una pizza para ambos, después limpiaremos" Con lo que salió de la cocina y yo con él hacia la sala.
Me senté en sofá mientras escucha a Lorenzo tomar el teléfono y marcar parara ordenar.
Nos decidimos por pedir una de pepperoni, la cual parece que llegaría en 30 minutos, por lo que él también se sentó a un lado mío en el sofá. Incluso si quería hablar con Lorenzo, parece que se me habían ido todas las palabras de lengua, pues no tenía ni idea de qué decir. Los dos estuvimos con este silencio incómodo hasta que, de alguna forma, logré hacer que las palabras salieran de mi boca.
"¿Por qué?" Susurré.
"Ya te lo había dicho anoche" Respondió "Somos hermanastros, y hasta ahí, no más ni menos".
"¡¿Pero eso qué importa imbécil?!" Pregunté casi gritando, lo que hice que Lorenzo me volteara la mirada hacia mí. "¿Cuál es el problema? ¿No te gusto de esa forma? ¿Es por eso? Si es así, está bien, lo aceptaré, no sería la primera vez que me ocurre" Dije entristecido.
"Es exactamente lo opuesto a eso" Respondió, bajando la vista.
"¿A qué te refieres?" Pregunté.
"¡Que el problema es que también me gustas!" Respondió.
"¿Eso no sería lo contrario a un problema?" Pregunté incrédulo. Empecé a sentir una sensación agradable dentro de mí. Realmente le gustaba.
"Porque somos hermanastros imbécil" Respondió "Sería como incesto o algo así. Nunca había visto a papá tan feliz en años desde que conoció a tu mamá, y ella tampoco me cae nada mal. No quiero que todo esto se vea arruinado por una tontería como ésta. Sólo hagamos que nada de esto existe y que ninguno siente algo así por el otro" Terminó, soltando un suspiro "Sabes, creo que las cosas era mucho más sencillas cuando nos odiábamos y siempre nos peleábamos".
"Pero yo no quiero pretender que no siento algo por ti. Y creo que tú tampoco quieres" Le dije, mirándolo directamente a los ojos.
"Lo que queramos no importa, así se hará, nadie debe saber" Respondió.
"Bueno, eso será un poco difícil por Rock y Spud" Dije como susurro, pero por la expresión de Lorenzo, creo que escuchó.
"Espera ¡¿Qué?! ¡¿Le dijiste a ese par de imbéciles que son aún más estúpidos que tú?!" Preguntó mientras se golpeaba el rostro con la palma de la mano por la frustración.
"Bueno, quizá un poco" Respondí sonrojado por la pena "Pero eso no importa, a lo qué me refiero es: ¿Qué importa?".
"Chet, te acabo de explica-"
"Ya sé lo qué dijiste, pero aun así ¿Qué más da? Ni mi mamá ni tu papá tienen por qué enterarse, y ya estamos a casi nada de ir a la Universidad, fuera de la vista de ellos. La gente no sabrá nada de que seamos hermanastros si no les decimos. ¡Sería el crimen perfecto!" Dije esto último emocionado cual niño pequeño.
"Ésa es la idea más estúpida y sin sentido que has tenido..." La culpa me empezó a carcomer por el comentario de Lorenzo, pero una sonrisa empezó a aparecer en el rostro de él "¡Y creo que podría funcionar!" Exclamó con la misma emoción que yo.
"Lo sé, soy un genio" Dije con aire de orgullo.
"Podría hacer una lista en orden alfabético del por qué eso no es verdad pero ahora no me importa ¡Abrázame hermano!" Dijo mientras abría sus brazos, con lo que yo con gusto correspondí. Entre la emoción del abrazo, nuestros labios se entrelazaron. Fue igual o más torpe que el de la noche anterior, pero honestamente no me importaba. Estaba demasiado feliz como para hacerlo.
Aunque el momento fue interrumpido cuando escuchamos al repartidor. Los dos estábamos bastante rojos por el momento anterior, pero Lorenzo decidió ser el que fuera por la pizza pues no se notaba tanto por su piel oscura. Pagó y trajo la pizza lo más rápido que pudo al sofá para que comiéramos.
Nos pusimos a hablar de cualquier cosa que cruzara nuestras mentes, reírnos de todo, e incluso uno que otro beso casto ocasional. Y lo mejor, aún teníamos el resto del fin de semana para nosotros.
Las cosas serán complicadas, lo sé, y aun siento un poco de culpa dentro de mí, y puedo ver que Lorenzo también. Pero igual sé que ninguno de los dos parece se echará atrás ahora. Tendremos que ver que tan lejos llega esto.
Creo que le debo una a los rockeros por ésta, creo que éste será el inicio de algo genial para ambos.