La única ventaja que tuve fue que al menos la cama era cómoda, esa noche pude descansar de cierta manera sin sentirme vigilado, claro que no fue lo mismo par Ikkaku el cual parecía haber tenido pesadillas, al levantarnos todo parecía tranquilo, claro que solo lo parecía, hasta que llegamos a la cocina junto con el hermano de ese monstruo.
-buenos días amor, te prepare el desayuno-la chica se había levantado muy temprano para preparar el tan pesado desayuno ninguno de los tres pudo evitar poner mala cara
-porque carne asada en la mañana-dijo el menor de los Asano
-no puedo comer algo tan pesado por las mañanas-esta mujer o lo quería enfermar o definitivamente nos quería muertos a todos, al ver la reacción de Ikkaku ella le ofreció otros platillos que había preparado, por la pinta que tenia la comida no se veía tan mal y no sabía nada mal
-pero lo prepare desde la noche para que tu lo disfrutaras-esa chica era realmente una buena actriz
-aunque no lo creas esto no sabe nada mal-interrumpí su ya comenzada discusión, bueno discusión por parte de Ikkaku ya que ella regreso a su estado de enamoramiento
-tu cállate y deja de tragar como un cerdo-realmente Ikkaku era todo un caso, pero uno divertido, después cambio la plática-¿por cierto no has visto nuestra ropa?-esa si era una pregunta importante, ya que al despertar no la habíamos encontrado.
-sí, la lleve a lavar-
-toda nuestra ropa-ahora si estaba molesto con ella
-bueno, bueno les traje esta, es ropa nueva- nos dio a cada quien una bolsa y subimos a cambiarnos, bueno yo me cambie la ropa en el baño necesitaba lavarme la cara e Ikkaku se cambio en la habitación que nos habían dado, no podía negar que tenía un buen gusto para escogerme ropa no me veía mal, cuando volví a la sala Ikkaku no estaba, por lo general siempre tardo más que él, porque se demoraría tanto pasaron 5 minutos más cuando bajo, como alma que lleva el diablo a gritar.
-qué diablos es esto-bueno entendía la razón por la que no bajaba llevaba una playera con un estampado algo vistoso, era como una fotografía de ella y él en medio de un corazón, realmente se veía algo ridículo.
-verdad que es encantadora-la felicidad de la joven se veía demasiado
-te queda bien-dije en un tono burlón
-tu cállate, te diviertes con mi humillación-si, la verdad es que si me estaba divirtiendo.
-no será que tienes envidia porque no veo bien con lo que llevo puesto-hace mucho que no o molestaba así me hubiera encantado que Rangiku lo viera no dejaría que lo olvidara nunca.
-está bien, si no te gusto esa puedes elegir otra-Ikkaku sentía que su humillación había terminado-tengo de muchos estilos por elegir- pero todas las demás tenían el mismo estampado.
-no quiero ninguna de esas-al final tuvo que resignarse a la que le había dado al inicio, sabía que no atrevería a salir.
-oye ponte esto-el joven que vivía con ella se había acercado a nosotros, como observando que ya no hubiera peligro y le dio un chaleco en tono azul que combinaba con lo que llevaba puesto.
-¿Por qué? me lo das-
-porque ella da miedo, y ustedes necesitan salir de aquí- le di la razón teníamos que salir de ahí para comenzar con nuestra búsqueda, pero el orgullo de Ikkaku no lo dejaría dar ni un paso fuera del departamento, acepto la ayuda de mala manera, al menos el hermano no daba miedo, más bien parecía su títere-les sugiero que no vuelvan hasta que anochezca por su seguridad-salió corriendo por la puerta como si se le hiciera tarde para a un compromiso o realmente se le hizo tarde o el miedo hacia su hermana era demasiado.
-será mejor que también nos vallamos-me decía Ikkaku ya más tranquilo-no queremos demorarnos más de la semana- nos dirigimos a la puerta
-espera-lo detuve antes de que saliera
-ahora que-
-se me olvido el rastreador-me miro como si tuviera la culpa de lo que había pasado en la mañana-tranquilo lo deje bajo la almohada iré por el no tardare-
Corrí hacia la habitación lo más rápido que pude, entre en la habitación lo bueno era que aun estaba ahí salí para regresar con Ikkaku, pero una voz me detuvo antes de salir del pasillo era la voz de esa chica desde el interior de otra habitación me acerque para saber que ocurría, estaba hablando sola realmente estaba loca.
-esta vez no dejare que se valla antes de iniciar una relación, la ultima vez no pude hacer nada para evitarlo, no me voy a rendir el tiene que ser mío-hablaba y se callaba como si imaginara una vida con él era realmente aterradora la vista, un sudor frio me recorrió la espalda, ahora entendía al hermano sí que daba miedo, salí corriendo de ahí antes de que se percatara que la espiaba, llegue donde estaba Ikkaku todavía con la imagen de la chica en mi mente
-¿porque tardaste tanto?-
-por nada ya vámonos- lo empuje para salir antes de que ella nos viera
Al fin habíamos salido del departamento, aire libre después del espectáculo de la mañana se sentía bien, comenzamos nuestra búsqueda toda la mañana sin mucho éxito
-esto es cansado, hace calor y no hemos detectado nada-el calor comenzaba a sentirse y el aburrimiento también
-si tienes calor deberías quirate ese abrigador chaleco-te decía mientras bajaba el cierre
-no seas estúpido, prefiero morir de calor a que todos vean esta ridícula playera-no me podía dejar olvidar ese momento aunque Rangiku no estuviera para recordarlo, definitivamente solo ese momento no todo el día porque recordar todo el día significaría recordar ese horrible momento, un extraño sonido nos hizo salir de ese momento
-que es ese sonido, posiblemente sea el hollow-decía Ikkaku listo para salir de su gigai
-espera, no es el hollow-no detuve antes de que se tragara la píldora
-entonces de donde proviene ese sonido-nos detuvimos a escuchar detenidamente, parecía ser que ese sonido venia de su pantalón Ikkaku metió su mano el bolsillo y saco un pequeño aparato que emitía el sonido –pero que es esto-
-hola mi amor-decía la chica que salía de unos arbustos detrás de nosotros-es hora de comer te prepare algo delicioso a ti y a tu amigo espero que lo disfrutes te veré en una horas en la casa no tardes para cenar juntos-así como había llegado se había ido, de menos no cocinaba mal, nos dedicamos toda la tarde a seguir buscando e igual que en la mañana no habíamos tenido éxito, por lo que decidimos regresar estaba cayendo la noche cuando observamos algo particular
-oye que esa no es Rukia Kuchiki-me decía Ikkaku mirando hacia el interior de la calle
-si es ella-parecía como si persiguiera a un hollow solo que estaba sola sin pensarlo los dos caminamos hacia ella, pero más que eso parecía que la estábamos espiando, llego hasta un callejón y se observo a su alrededor para ver que nadie la seguía, cuando se sintió segura abrió el senkaimon y entro en el, que le sucedía desde que llegamos la había notado un poco extraña y ahora se fugaba no era de mi interés posiblemente y el capitán Ukitake la había mandado a llamar pero porque se estaba escondiendo, Ikkaku no le dio más importancia y retomamos nuestro camino la noche había caído sobre nosotros, realmente perdimos tiempo en seguir a la menor de los Kuchiki cuando llegamos ella estaba en la entrada esperándonos
-¿Por qué llegan tan tarde?-por un instante pensé que nos asesinaría hasta que levanto la cara-estaba muy preocupada por ti-decía llorando mientras se lanzaba a Ikkaku
-que exagerada eres hermana no es tan tarde-pero ella lo estaba fulminando con la mirada
-esta lista la semana o prefieres darte un baño antes-no se quedaba más miedo lo que había visto en la mañana o su actitud de “buena esposa”, decidió primero el baño
-bien el agua está caliente disfrútalo- yo me quede en la sala con su hermano, todo estaba en silencio hasta que un grito proveniente del baño nos hizo salir corriendo al hermano y a mi, cuando llegamos Ikkaku estaba envuelto en una toalla alejando a la hermana del chico
-hermana que estás haciendo-le decía el joven asombrado y un poco asustado
-Yumichika aléjala de mi- gritaba Ikkaku, con una mano sostenía la toalla y con la otra trataba de alejar a la mujer la separamos de él Ikkaku termino de bañarse y preferimos no cenar, subimos hasta la habitación en donde Ikkaku prefirió encerrarnos
-Yumichika por ningún motivo quiero que esa puerta se habrá hasta mañana está bien-solo asentí con la cabeza y él se acostó a dormir, un día de locos había sido ese y todavía faltaba el resto de la semana.