Nicholas cayo duramente contra el suelo frío, estaba desorientado y no sabía cuanto tiempo había estado cayendo.
Miro a su alrededor y se sorprendio de encontrarse en un elegante castillo con un fino piso de porcelana. Se levanto aturdido y miro revisando cada detalle.
--Solo tienes que meterlo dentro de esta lampara--unos murmullos hizo que caminara precavidamente hasta aquellas voces. Pudo observar a un señor de sesenta años, cabello canoso, sujetando un baston de madera y en la otra, una lampara de salsa de oro.
--Pero Henry se va a dar cuenta--la voz de un hombre mas joven delataba al atractivo pero afeminado hombre delgado que aparentaba estar en sus veintitres años. Lucía una cara asustada.
--Tu eres su pareja, el confia en ti. Solo encierralo y seremos ricos hijo.¿acaso piensas estar con ese hombre toda tu vida?--el anciano era insistente y deslizo la lampara en la mano del joven hombre que la miro con indecisión--Se que haras lo correcto--el señor le dio unas cuantas palmadas en la espalda del joven para luego narcharse.
Nicholas vio como el hombre al quedarse solo apreto sus manos en dos puños y camino enojado hasta donde el se encontraba, rapidamente el pelinegro se escondio de aquel castaño.
--¿Facil?--el joven camino hasta donde se encontraban dos comodos sillones con grandes almohadones blancos.
--¿Que va hacer facil? --el hombre que mato a su compañero entro por el lado opuesto y Nicholas sintio el odio contra ese tipo.
--Limpiar esta cosa--el castaño se quejo con un puchero y el rubio se acerco para depositar un pequeño beso.
--Puedo hacerlo con magia--el rubio se separo del castaño y justo cuando iba a tocar la lampara, el otro hombre le tomo de la mano para jalarlo contra el.
--Primero necesito que me atiendas. ¿Ya no tienes tiempo para tu esposo? Me tienes tan solo--el castaño lo rodeo con sus brazos y le dio pequeños besos en la boca mientras se apegaba demasiado al otro hombre.
--Tu eres mi todo Sashir--el rubio comenzo a besar suavemente por del niveo cuello del otro hombre mientras este soltaba suspiros de stisfacción.
--Tu tambien Henry--el rubio recosto por completo al castaño para luego ir desprendiendo de forma maestra la ropa del otro hombre. Cuando el pecho de Sashir estaba desnudo, comenzo a chupar el pezon derecho hasta quedar satisfecho y seguir el izquierdo para finalmente bajar lentamente por el ombligo en un sensual recorrido de besos y succiones a la nívea piel.
Nicholas estaba sonrojado, avergonzado consigo mismo por estar de mirón ante una escena que era tan intima. Se sento en el suelo intentado darles un poco de privacidad pero el suelo se abrio repentinamente y lo trago al igual que la oscuridad.
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Henry observo al joven de cabello negro tirado entre los rosales. Sentía curiosidad por saber del lugar del que vino o la manera en la que se había colado dentro de la propiedad de su palacio.
El rubio lo levanto con magia y con delicadeza lo llevo hasta el ultimo sofa que se encontraba en su sala. Su pareja aun no había regresado pero sospechaba que había algo extraño pasando desde hace unas semanas.
El pelinegro abrio los ojos, el terror en su mirada y Henry intento tranquilizarlo pero cuando escucho la voz melodiosa de su pareja llegando, conjuro una burbuja invisible para que el castaño no notara al recien invitado.
--Henry--Sasha se acerco a el y justo cuando se iba a sentar en el sofa, lo jalo contra su cuerpo y lo beso.
--Te extrañe--el rubio sonaba meloso y es que era extraño que un hechizero como él encontrara a su pareja predestinada, mas raro era encomtrar a un hermoso elfo de cabello castaño como su pareja.
--Yo tambien--Sasha lo separo de su cuerpo, sonrio y camino de forma sensual hasta el librero para tomar la lampara de oro en sus manos--Eh estado pensando en nosotros, yo te amo pero...--el castaño detuvo sus pasos a mitad del camino y el rubio se acerco a el.
--No me importa que tu raza este en contra de nosotros. ¡Miranos! Tu estas a mi lado mientras que los humanos conviven con los elfos de tu especie. ¿Acaso no todo esta mejor?
Sasha miro al rubio de forma coqueta y extendio la lampara de oro en dirección al otro hombre. Henry tomo la lampara para comenzar a sentirse debil y que la lampara comenzara a brillar.
--No lo es. --Sasha corrio hasta el otro extremo, casi para llegar al jardin pero observando como el rubio comenzaba a defenderse en ser tragado por el remolino que había creado la lampara. --No lo entiendes. Los elfos somos superiores a los humanos y no podemos compartir estas tierras.
--¿Por que? --Henry se sintio traicionado y herido por la forma cruel en la que su prometido le decía aquellas duras palabras.
--Cuando no estes. Este sera mi reino y ya tengo a una futura reina--el elfo castaño miro de forma arrogante al que habi sido su pareja y sonrio satisfecho al ver el rostro de dolor del otro hombre.
--¡Yo jamas te voy a perdonar maldito bastardo!--la desiluciòn se habìa convertido en un odio puro cuando se dio cuenta de la realidad. Solo un poco mas abajo del cuello aun no era absorvido--¡Maldigo tu raza, tu descendencìa y estas tierras. Jamas podra salir ninguno de tu raza pero los humanos seran los unicos que puedan disfrutar de su libertad fuera se estas tierras!¡Todos ustedes tendran la oscuridad con ustedes! Sash...--la lampara lo habìa tragado por completo.
La burbuja comenzo a achicarse y una nueva oscuridad cubrio a Nicholas.
Cuando abrio los ojos, podia ver que ahora se encontraba frente a un edificio parecido a una iglesia, saliendo de las gran puertas de caoba decorada con plata salìa el elfo Sasha acompañado de una hermosa elfo rubia.
La escena se distorciono y el pelinegro sintio el estomago revolverse de una forma que hizo que vomitara.
--¿Se encuentra bien? --una voz conocida hizo que abriera los ojos, no sabia cuando los habìa cerrado pero se sorprendio al ver a un joven principe Bourbon de veinte años.
Nicholas solo pudo asentir aturdido mientras una joven versiòn de su pareja le extendìa un pañuelo.
--Gracias--el pelinegro se limpio lo mas rapido que pudo para quedar lo mas presentable que podia.
--Los humanos son tan debiles, tan efìmeros como sus propias vidas--el principe saco otro pañuelo de su elegante traje de principe y limpio la mejilla derecha de Nicholas para luego ponerle el cabello detras de la oreja. --Pero son lo mas preciado que tiene nuestro reino. Por favor, ve al medico para que mejores, seria una lastima que algo te pasara.
--¡Bourbon!--una rubia elfa vestida de manera elegante lo llamo desde lejos, un joven principe Brie se acerco a donde su hermano para tomarlo sin delicadeza de los brazos.
--¡No hables con escorias humanas, nos avergüenzas!--el principe Brie lo miro de mala manera para llevarse al principe Brie a lado de la elfa rubia.
Observo como un elfo de cabello rojo, el rey, traia detras suyo un ataud.
--¡Les agradezco subditos por acompañarnos al triste funeral del consejero principal el rey Bengki, hijo de gran Rey Hunga. Debemos darle los respetos correspondientes ya que el era del antigüo linaje del unico rey original, El rey Sasha!
¡Pero no preocupeis que el linaje continua con mi descendencìa, mis dos hijos varones; Brie Amir y Bourbon Jules!
--¡Larga vida al rey!--todos los presentes gritaròn varias veces hasta que la familia real se marcho nuevamente al castillo.
Nicholas sintio como su cuerpo perdia fuerza y comenzo a temblar de forma incontrolable. Miro sus manos para ver con horror como estas desaparecìan hasta que sintio un horrible golpe en la cabeza que hizo que perdiera la conciencia.
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