Después de un largo año en el que los gemelos por fin daban sus primeros pasos, naruto y sasuke ya vivían con ellos en una elegante mansión en una las ciudades mas adineradas en california. Para naruto sus dos hijos eran un hermoso sueño, nunca se había sentido tan feliz en toda su vida, después de tanta soledad y desprecio por parte de todos aquellos que alguna vez conoció por fin sentía que su alegría recaía en esos dos retoños que completaban su vida, ahora mas que nada en el mundo tenía un propósito de existencia, cuidar y amar a su familia.
Llego otro año mas en los gemelos festejaban su cumpleaños, esa mañana mientras sasuke organizaba una fiesta infantil con los sirvientes, naruto se encontraba jugando al balón con hikari en el jardín trasero de la mansión y mizuki paseando encima de su coche de juguete.
-eso es cariño, lanza con mucha fuerza- dijo naruto mientras empujaba con sus manos el balón despacio hacía su bebe.
-ah..abbb...ahh- balbuceaba el niño pequeño tratando de patear con todas su fuerzas el balón hacía su papa, pero solo logro empujarla hacía la mitad del camino.
-muy bien cariño, cuanta fuerza tienes- comento orgulloso de su hijo mientras se acercaba a tomar el balón.
Dentro de la mansión sasuke observaba todo eso desde la ventana que daba al jardín, miraba a sus hijos con cariño pero mantenía una dura y seria vista en naruto, desde la semana esperada por el cumpleaños de sus hijos, naruto no le había prestado ni una pizca de atención a sasuke al menos no como el quería, desde la llegada de sus hijos naruto había puesto de lado todo lo que pasaba por su mente, ahora su única prioridad eran sus amados bebes. Sasuke se sentía feliz por su futuro campeón y su hermosa princesa, pero no podría permitir que se convirtieran en un obstáculo, no iba a dejar que naruto comenzara a pensar independientemente, durante años hizo lo imposible por meterle en la cabeza que no era nada ni nadie sin él y como siempre ahora iba a cerciorarse de que eso no cambiara, naruto debía entender que para él sasuke era un dios y debía de comer arrodillado de la palma de su mano.
La fiesta de los gemelos ya estaba completamente arreglada pero sasuke mintió en que debía pensar que aun faltaba detalles que aplicar cuando en realidad necesitaba pensar en un nuevo movimiento para mantener a naruto sujetando su pierna como un loco necesitado, se mantenía dentro de la mansión pasando de pasillo en pasillo.
-ehmmm... disculpe, amo... - sasuke se volteo al escuchar esa suave voz infantil, contemplo a una joven de cabello castaño y el uniforme de sirvienta pero al parecer lo llevaba muy corto y escotado para llamar la atención a la imaginación.
La hija de la sirvienta era una adolescente que ayudaba a su madre constantemente para recibir el salario necesario que necesitan, por obvias razones se sentía atraía por sasuke y este aprovechaba eso a su favor para hacerla trabajar horas extras sin necesidad de salario. Sasuke nunca había cambiado su forma de ser, seguía siendo el cruel manipulador que no se ablandaba ni por una niña joven como la que tenía en frente aun sabiendo que esta caía ante sus encantos.
-¿que pasa?... ¿ya esta todo preparado para la cena especial de esta noche?-
-si amo... mi madre y los demás sirvientes ya tienen los preparativos en su lugar, sus hijos se divertirán mucho con los juegos que instalo- comento sonrojada mientras se acercaba a él.
-gracias... ehmmm... como sea, te puedes retirar- comento sasuke sin nada mas que decir, nunca se supo su nombre y no le importaba saberlo.
-ahhh, e-espere... amo... etto... me preguntaba si le gustaría ir a ver la comida... ya los sirvientes y mi madre se están ocupando de los dormitorios y pasillos de la mansión... estaremos solos... podemos... charlar... si lo desea- comento coqueta con algo de desesperación por llamar la atención del varón.
Sasuke la miro unos segundos, quería reírse de ella en su cara, la niña era muy perspicaz y eso le agradaba. de pronto el foco se prendió, como siempre sasuke al ver un nuevo juguete se le venía una nueva idea, esa niña era su boleto de entrada a la sumisión de naruto, se aplaudió mentalmente, se adoraba a si mismo y a sus ideas, todo lo que tenía y seguiría obteniendo era a su gran ingenio.
-¿sabes? eres... tan... linda...- comento mientras se acercaba a ella muy despacio, haciendo que la niña se sonrojara. -eres tan amable... nunca me reclamas nada, siendo el jefe de tu mama... tu trabajas horas extras... sin pedir... nada a cambio... quisiera... quisiera... - comento muy seductor mientras tomaba un mechón de su cabello y saboreaba con su nariz su dulce olor. -... quisiera poder... compensarte... preciosa- dijo con un tono mas fuerte y lento.
La joven sintió como sus piernas comenzaban a temblar, pareciera que en cualquier momento se desmayaría, sasuke era tan encantador y tan varonil que deseaba caer en sus brazos.
-... yo... yo... amo.. quisiera que-... -
-shhh... no digas nada~... te ves bien... callada... eso lo hace... muuuy excitante~... - dijo susurrando en su oído. -desearía poder tenerte ahora... pero... soportare para esta noche... aunque no se si pueda aguantar-
-ahhh~... he deseado esto desde el momento en que lo vi... yo también deseo... que estemos juntos... quiero hacerlo con usted... amo~... -
-¿en serio?... me siento tan alagado... esta noche durante la fiesta... convence a tu madre de salir... no vallas a mencionarme en ningún momento... aunque sea... sal a escondidas por la puerta trasera que esta al final de la mansión en la otra manzana... procura que nadie... absolutamente nadie... te vea... ¿entiendes?-
-si... lo entiendo... no puedo esperar por estar con usted... ya lo deseo con ansias- comento melosa la pequeña queriendo acercarse para besarle pero sasuke volteo la cabeza y sus labios cayeron en la mejilla de él.
-te estare esperando... pero ahora... debo ocuparme de los asuntos de mi niños... aun queda mucho trabajo por hacer-
-pero... pero ya casi esta todo hecho... ¿que mas falta?-
-los gemelos, necesitan un baño y un buen arreglo... ash... los amo pero me siento tan agotado... pero en fin... no les diré que no-
-y ¿su esposo?-
-naruto es muy flojo... no querrá arreglarlos- mintió con sorna.
-yo me ocupare de ellos si quiere... usted se ve muy cansado-
-no, tu ya has hecho suficiente, además es mejor que te de un descanso... no es necesario trabajar tanto... si necesitas dinero, yo podría- -
-no me importa el dinero, ya se lo repetido muchas veces, déjeme cuidar de sus hijos... lo haré por voluntad propia-
-eres un cielo... no se que podría hacer sin ti- dijo con una dulce sonrisa mientras le guiñaba el ojo y se volteaba para ir directo a su recamara.
La niña con una enorme sonrisa y sus mejillas coloradas, muy ilusionada pensando en como se iba a divertir con su amo toda la noche corría hacía el patio trasero acercándose a naruto y a los gemelos.
-ejem... amo- llamo la atención de naruto muy seria.
-¿eh?... oh, lizzie... ¿que sucede?-
-ya es hora de que los gemelos tomen un baño y luego los arregle para esta noche-
-¿qu- que... que que?- comento atónito naruto para luego endurecer la mirada. tonto sasuke, se suponía que el le daría un baño a los niños, me lo prometió ¿por que siempre envía a esta niña a hacer el trabajo duro? ¿no debería estar ya en su descanso?... oh un momento, es verdad, lo había olvidado... sasuke hace tiempo me dijo que esta niña le confeso que su madre y ella estaban necesitadas de dinero y siempre le suplica que le de horas extras a escondidas de su madre... pobrecita... no me puedo negar...
-¿amo?... ¿me escucha?-
-ah... ah... si... lo siento... gracias por ofrecerte... iré adentro con mi esposo- comento con una reverencia mientras corrí hacía dentro.
valla hombre, ni siquiera te preocupas en cuidar a tus propios hijos tu mismo, te hubieras negado a mi petición... no importa... quizá con el tiempo... el amo sasuke... lo eche... y quizá nosotros... nosotros... jeje... ah... ¿me pregunto si estas pequeñas criaturas podrán llamarme mama algún día?
La niña seguía ilusionada en su mundo de fantasía creyendo que algún día inesperado se juntaría con sasuke. Una típica adolescente enamorada que no lograba ver que pronto la oscuridad arremetería su inocencia. Cargo los niños y los llevo adentro a unos de los baños para comenzar a bañarlos, se veía tan feliz que la ceguedad no le hacia dar cuenta que estaba pasando por las ultimas horas de su vida.
Sasuke terminaba de hacer una llamada en cuanto vio como naruto muy molesto entrar al despacho de la oficina.
-hola amor ¿que haces por aquí? vallamos a la habitación-
-sasuke, esa pobre chica de nuevo se hizo cargo del trabajo que deberías hacer tu-
-lo se amor... pero ya hablamos de esto-
-no esta bien que ella haga esa cosas... pueden demandarte por abuso infantil, es menor de edad y no debería de trabajar así... si necesita dinero puedes dárselo a su madre-
-naruto ya hablamos de esto... trate de aumentarle a su madre, pero ella se negó diciendo que si lo hacía su madre sospecharía, negaría el dinero y no la mandaría a trabajar mas... eso en parte sería bueno pero ella me suplico... solo quiere ayudar a su madre... es una mujer correcta y trabajadora como ella... deja que trabaje extra... es joven como tu y llena de energía, le hará bien el dinero extra-
-... eso es muy lindo de esa chica... pero aun así no me parece correcto-
-también pienso lo mismo... pero no todo el mundo es rico y poderoso como tu amor... los demás deben ganarse la vida... todo estará bien... no la mando hacer trabajos forzosos... solo cuidar de los gemelos y limpiar un poco la mansión... no es tan malo- dijo mientras tomaba a naruto de la cintura y lo acercaba hacía el. -además no es tan malo, podemos tener mas tiempo para nosotros~...- le susurro al oído.
-no sasuke, no me parece correcto, quiero cuidar de mis hijos... quiero que cuidemos de nuestros hijos-
-si cuidamos de nuestros hijos... solo que hay un momento en el que debemos tomarnos, un momento para nosotros- sasuke decidido cargo a naruto y lo sentó encima del escritorio con las piernas abiertas.
-sasuke... yo... -
-¡¿estas dudando?!... ¡¿estas dudando cuando ya he dicho algo?!- Se exalto sasuke, el siempre tenía la ultima palabra, naruto nunca chisto y ni reclamo nada después de que el terminara de hablar.
Obviamente naruto comenzaba a pensar independientemente y eso no lo iba a permitir, naruto tiene que tener en la cabeza que sin sasuke solo era basura y no por tener hijos iba a comenzar madurar, eso solo enfado a sasuke.
-sasuke cálmate... solo pienso que sería mejor- -
-¡¿pensar?! ¡¿desde cuando piensas?!-
-¿que demonios te pasa?-
-... lo siento... no se que me paso naruto... creo que me siento celoso de mis propios hijos- comento con una sonrisa avergonzada.
-jejeje... a veces yo también paso por lo mismo amor... te veo muy unido a los gemelos y me da muchos celos... me gusta que me abraces y me beses solo a mi... pero son nuestro hijos... son nuestra mayor prioridad.-
eso solo debo pensarlo yo... tu solo eres un adorno que debe ir pegado a mi pierna... no pensar en nadie mas, si vas a amar a nuestros hijos debes dejar que yo piense en su educación y seguridad. pensó muy irritado sasuke viendo como naruto comenzaba alejarse de sus alas.
-¿sasuke?... ¿algo va mal?-
-ah... perdón... me quede pensando... -
-estos meses te veo muy cerrado... ¿acaso... hice algo malo?... ¿estas pensando en alguien mas?... -
-no amor... no es eso... sucede que... eh visto los noticieros... hay muchas desapariciones... están secuestrando... niños... quiero seguridad total para mis bebes... voy a reducir el horario de la fiesta esta noche-
-¿que?... no puedes hacer eso... sasuke, es algo paranoico... no los encierres sasuke... se que quieres ser un padre sobre protector pero encerrarlos no será la respuesta... ellos necesitan criarse de forma abierta-
no los quiero encerrar a ellos si no a ti, pero si tengo que usar a mis propios hijos aunque me duela, lo haré. volvió a pensar sasuke entrecerrando los ojos. -no quiero discutir contigo naruto... se va a hacer lo que yo diga...-
-no sasuke... por favor... solo por esta vez... solo esta vez... hazme caso-
-esta bien naruto... esta vez te haré caso... tal vez tengas razón, soy algo paranoico... contigo mis hijos nunca correrían peligro... mejor ve a preparar tu ropa- comento sasuke rendido soltando un suspiro.
Naruto se bajo del escritorio y salio del despacho de trabajo para dirigirse hacía su habitación. Una enorme sonrisa salio al flote de su rostro. Nunca le había reclamado a su esposo, pero quería lo mejor para sus hijos, sasuke siempre tenía la ultima palabra, el que le dijera que tenía razón le hizo sentir muy emocionado, nunca se le vino a la cabeza que le dijera eso algún día. El que sasuke no estuviera ahí para decirle que hacer y que decir por primera vez le hizo sentir muy bien. El ganarle por primera vez en su vida en una discusión lo emociono. No entendía que sasuke dejo que ganara esta vez para luego torturarlo mentalmente.
quizá sasuke no este siempre para mi, aunque me cueste admitirlo pero ya no debo dejar que tome mis propias decisiones y pensar mas por mi mismo. pensó muy alegre.
Llego la noche y todos los invitados vestían elegantemente mientras los gemelos y otros tres bebes jugaban en una habitación con juegos infantiles. Los padres de sasuke y su primo junto con su pareja se habían acercado a él para ser recibidos
-ahí estas sasuke, esta fiesta es esplendida, tu si sabes entretener hijo-
-gracias padre, que bueno que hayas venido, puedo enseñarte si quieres las bebidas que están en el almacén- comento con un tono mas severo al mencionar la ultima palabra.
Ese cambio de tono logro llamar la atención de sai y fugaku sabiendo que era la señal, se pusieron serios y trataron de disuadir a sus parejas.
-oh valla un almacén de bebidas fuertes, suena interesante, pero sería mejor que valla a ver a mi pequeña Aiko, no quiero que este sola-
-no amor, tu si quieres ve, yo iré a ver a aiko... ademas se debe estar divirtiendo, itachi y deidara están ahí con ellos, no esta sola- comento gaara, su pareja, un joven doncel pelirrojo.
-eres un cielo, mi vida, gracias- comento sai tomando su mentón y dándole un ligero beso.
-naruto bebe, lleva a mi madre también con gaara, los gemelos ya hacía rato que balbuceaban ver a su abuela-
-oh ¿en serio? que lindo, yo también quiero ver a mis nietos-
-jeje, claro, venga conmigo señorita mikoto- comento naruto.
-ah naruto, cuando veas a itachi dile que venga, quiero mostrarle que tengo su whisky favorito-
-esta bien amor- comento naruto mientras se iba con gaara y con mikoto.
-tu, empleada ven aquí- dijo sasuke llamando a una mujer algo madura con el uniforme puesto.
-iré al almacén con mi padre y mi primo, asegúrate de mantener a los demás invitados entretenidos, si quieres puedes pedirle a tu hija que te ayude-
-ahm... si amo... pero mi hija no podrá ayudarme hoy, salio en una fiesta que tiene con sus amigas-
era todo lo que quería oír. pensó sasuke con una sonrisa. -oh bueno, no importa, confió que tu y el mayordomo lo harán bien, no te preocupes, no me tardare, solo mantén buena música y sirve comida a los invitados- comento finalmente mientras se retiraba hacía el patio trasero.
-si amo- comento la sirvienta con una reverencia para después seguir con su trabajo.
Naruto, mikoto y gaara entraron a una habitación muy colorida, llena de retratos de arco iris y muchas esculturas hechas de globo, con el piso suave de tela, lleno de toboganes enanos, calesitas, caballos de madera, un largo tren de marcha y otros juegos infantiles. Deidara e itachi se encontraban ahí con los bebes divirtiéndose.
-ese es mi bebe, ve por el- comentaba divertido deidara mientras le hablaba a un pequeño infante de cabello negro y ojos azules que intentaba mover un enorme balón de goma muy colorido.
-oh ahí estas aiko- dijo gaara acercándose a su pequeña pelirroja de ojos oscuros. -¿que pasa linda? ¿quieres subirte al tren?- dijo gracioso mientras la cargaba y le subía al tren de carga falso.
En cuanto el tren comenzó a marchar despacio mientras emitía música de niños, naruto aprovecho para acercarse a itachi, dejando a los gemelos con su abuela.
-etto... itachi, tu hermano fue al almacén, quiere mostrarte que tiene tu bebida favorita ahí-
-gracias naruto, amor enseguida vengo ¿estas bien si te quedas tu con los bebes?-
-claro amor- le respondió deidara mientras subía el también a sus hijos al tren.
Itachi camino hacía el patio trasero y yendo al final del lugar una puerta que daba con un almacén de bebidas, el lugar estaba algo silencioso y se adentro mas al fondo para encontrarse con su hermano, su primo y su padre riendo. Logro divisar a unos hombres cubriendo su rostro mientras sujetaban a la hija de la sirvienta atada y amordazada.
-ah itachi pasa, quiero que veas que tengo tu mercancía favorita, joven y energética... yo mismo pude comprobarlo... siempre hacía labores extras sin necesidad de dinero, muy estúpida pero servicial-
-valla sasuke, tu si sabes elegir bien- comento itachi mientras se acercaba.
-por eso me siento orgulloso de mi hijo, lo joven sale mucho mas caro, con ella haremos un buen trato con los exteriores- comento fugaku con una copa en su mano.
-¿no deberían matarla primero? esto dolerá muuuuucho- dijo con una sonrisa mientras se acercaba a la joven.
-lo haría pero no se puede, si no pueden investigar, si le doy un balazo, buscaran el origen del arma y si le doy un golpe en la cabeza investigaran la herramienta y esto tiene que salir perfecto, nadie debe saber como paso... tenga sufrir si o si- comento serio sasuke haciendo que la niña temblara.
-es algo cruel pero cierto, lamentablemente tendrá que pasar por esta tortura estando viva- comento itachi sirviéndose un whisky.
-bien, llévenla al fondo del almacén, entren a la guarida secreta de siempre y quitenle los órganos por la garganta y vagina, no le hagan ningún corte o eso también sera investigado.- comento como ultima orden para que lleven a la pobre adolescente a su destino fatal.
Los hombres hablaron un poco antes de retirarse del almacén, regresaron a la fiesta como si nada y la noche siguió tranquila hasta que todos los bebes se durmieron, los invitados se retiraron y naruto abrió los regalos de sus hijos para dárselos después.
Paso una semana ante la desaparición de la hija de la sirvienta, ella había aparecido en una bolsa de tela cerca del arroyo de un río contaminado. Sasuke le dio un gran salario y vacaciones a la sirvienta como muestra de pésame. Días después de lo ocurrido naruto y la sirvienta se acercaron para hablar con sasuke.
-amo... se que lo que pasó fue terrible... pero usted no tiene culpa de nada... lo que ocurrió fue mi culpa por dejarla salir tan tarde-
-sasuke, no te entiendo ¿por que sufres así? ¿acaso me ocultas algo?-
-lo que sucedió si fue mi culpa... la noche que desapareció... fue la noche de la fiesta... esa niña... fue la sustitución de mis hijos- comento con melancolía dejando a la sirvienta y a naruto sorprendidos. -las investigaciones hablan de que casi se metía gente a la mansión, pero como ella ya había salido, la tomaron por sorpresa... si ella no hubiera salido, hubieran ido por los bebes... le debo mucho a esa niña... pero esto en parte fue mi culpa... si hubiera reducido las horas de la fiesta, la seguridad se hubiera encargado de los secuestradores... no debí ser tan idiota... casi pierdo a mi hijos y todo por estar de despistado... -
-sasuke... no- comento naruto con lagrimas. -esto fue mi culpa... debí... debí escucharte- empezó a sollozar.
-amo naruto... fui una terrible madre.. ustedes... ustedes- comenzó a sollozar también.
-señorita flora, tómese el día libre hoy... valla a casa, esta situación nos involucro a todos... y quiero estar a solas con naruto-
-si amo- comento con una reverencia mientras salía llorando.
-sasuke... -
-no digas nada... lo lamento... tu no tienes la culpa... yo debí ser mas atento y protegerlos a los tres- comento mientras le daba la espalda.
Frente a los dos había un corral de plástico donde se encontraban los gemelos compartiendo juguetes, al ver como su padre lloraba, se acercaron a las rejas y lo miraban con sus caritas inexpresivas.
-no sasuke... esto fue mi culpa... tu tenías razón... !siempre la tienes!... fui un irresponsable, un idiota... amo tanto a mis hijos... que creí que los protegía... cuando en realidad lo hacías tu... perdón- lloraba naruto sin ver como sasuke sonreía.
-ay amor... tu eres un padre increíble... pero tienes que entender que quien los cuida y los protege soy yo... pero esta bien... porque tu siempre estarás ahí para decirles cuantos los amas y abrazarlos- dijo acercándose a él.
-yo también quiero protegerlos-
-ya se, pero no sabes hacerlo... deja que yo sea quien se encargue de su seguridad, tu solo sonríe y demuéstrales que estas ahí para ellos... no hagas nada mas... casi perdemos a nuestros dos bebes antes que cumplieran sus dos años... ¿entiendes? naruto- comento mas serio.
-si amor... no volveré a reclamarte nada... lo siento en verdad- comento agachando la mirada.
-ni tampoco me volverás a desobedecer... no llores amor, esta bien, todo esta bien, la sirvienta te perdonara... ve a nuestra alcoba... haré que los niños se duerman- comento sasuke fingiendo melancolía, asegurándose que naruto se fuera con culpa.
Aunque fuera muy estúpido para el, la culpa que sentía naruto lo volvería mas sumiso, haciéndole entender que todo lo que piense por si mismo solo logre desgracias. Sasuke obtuvo su cometido, ahora naruto vivirá mas pegado a su pierna sin poder decidir nada sin el. Se acerco a sus hijos en cuanto naruto se fue, estirando su mano hacía ambos.
-eso mis niños... se llama poder... la manipulación es nuestro golpe mas usado... lo que tenemos es lo que nos convierte en lo que somos... no pedimos permiso, tomamos lo que por derecho nos pertenece... cuando vemos algo que nos gusta, lo tomamos y lo ponemos debajo de nuestro brazo para que no se valla, hacemos que todo a nuestro alrededor salga como queremos, lo convertimos en nuestro reino y todos aquellos que lo pisan se convierten en nuestros esclavos... pronto papa les enseñara a ser verdaderos Uchihas- comento muy orgulloso.
Los niños lo miraron unos segundos y sonrieron muy inocentes tomando con sus pequeñas manos los dedos de su padre. La nueva generación Uchiha aparecía frente a sasuke con mucho orgullo.