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Order Vampire por ScarlletParaise

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Notas del capitulo:

Hola! Aquí les traigo un capitulin más, espero que les guste. nwn

- ¿Qué haces aquí Hilda? – Pregunto con nerviosismo y frialdad Aioros al ver a la mujer de largos cabellos platinos, quien los observaba con seriedad y a la vez transmitirle con su mirada perla lo enrabiada que estaba al verlos.

 

- Veo que el mundo es como un pañuelo – Contesto con altanería la mujer aristocrática, sabiendo que los tres parecían entablar una atmosfera por demás incomoda.

 

(Opening - Voodoo Doll de VIXX)

 

- Si fuera el mundo más grande, a nosotros nos sería imposible encontrarnos contigo – Hilda lo observa con aires de superioridad, no podía olvidar las cosas que ocurrieron en el pasado y menos podía desear ver de nuevo la cara de ese asqueroso sirviente.

 

- Shura, por favor no empieces un revuelo – Trata de calmarlo, pero le era imposible, dado que su novio lo tomo de la mano y lo saco de allí, dejando a Hilda con la palabra en la boca – Oye, ¿A dónde me llevas? – Le cuestiona hasta notar que estaban en un pasillo alejados de todas las personas, no pudo reaccionar cuando su actual pareja le comía besos y de esos que lo hacían perder el conocimiento.

 

Shura se separa de amado señor, quien lo observaba de una manera tan deleitante, ya que no podía perder la costumbre de mirarlo con cara de pedirle más – Esperemos a que ella se vaya y volvemos enseguida, porque no me fio de ella después de lo que hizo – Aioros frunce el ceño al no entender esa última parte, pasaron por mucho los dos, pero de todos esos acontecimientos no encontraba uno que le significase mucho a su novio.

 

- Mi amor, a que te refieres con que ¿Después de lo que ella hizo? – Shura se espanta por demás al escuchar aquella pregunta, no sabía que decir, después más de cien años él se sentía entre la espada y la pared, todo porque no quería todavía revelarle toda la verdad a Aioros, si lo hacía ahora, su relación con él terminaría por estar ocultándose y menos quería hacer eso, por eso mismo debía abstenerse a todo. (*)

------- /////// -------

Cuando aquella noticia llego a sus oídos, no podía pensar en nada más que la salud de su adorado Albafica, lo había criado, lo había parido a pesar de los obstáculos que tuvo que pasar – Gracias Manigoldo por llamarme y darme esta desagradable noticia – Le decía con la necesidad de romper en llanto, pero el joven Doría lo abraza para consolarlo, dado que entendía su postura en esos momentos.

 

- Lo sé y le doy mis condolencias a causa de lo que sufrió Albafica, además tuve que traerlo justo cuando mi celular sonó avisándome que a Camus Afrontes lo ingresaron de urgencias – El hombre de cabellos rojizos se separa de su antiguo patrón, le dedica unas castas cariseas para mirarlo con aires de padre.

 

- Me conto todo el día de ayer cuando me pidió hablar conmigo, sé que lo mal que hice al permitirle marcharse con aquel psicópata, lo engaño y ahora está en un estado crítico – Se lleva la mano a su boca para romper en llanto con pensar en las condiciones en las que podría estar su hijo mayor.

 

En eso, Afrodita llega al hospital con la idea de visitar a su mejor amigo, trayendo consigo unas hermosas flores rojas con una cartita escrita por él mismo. Al anunciarse en la recepción e ir hasta la zona de los pacientes hospitalizados, se encuentra con la imagen que jamás creyó posible - ¿Papá? – Murmura para sí mismo, acorta la distancia para poder escuchar lo que estaba por decirle el médico que salía de la sala.

 

- Doctor, ¿Cómo está mi hijo? – Le pregunta muy preocupado y al borde de perder el control de sus nervios, no podía ni un minuto pensar de como esta su hijo ahora.

 

- Su hijo está ahora mismo reposando, tiene numerosas heridas y golpes en todo su cuerpo, puede que haya sido abusado por su pareja, ya que la policía tomo su testimonio en la madrugada y eso puede ayudar en la causa del otro chico que está en esa habitación – Señalo el doctor que se encargaba del caso de Albafica el cuarto antes del peli celeste mayor, Manigoldo abraza al padre de Albafica con el fin de bríndale fuerzas -  Puede que en estos días despierte su hijo, Señor Lugonis – Afrodita parecía estar por demás shockeado al ver que su padre le estaba ocultando algo muy grande y más con relación a Albafica.

 

- Será mejor que lo dejemos descansar, por hoy – Lugonis asiente al escuchar aquello, podía presentir que ese doctor no le dijo todo acerca del estado de su hijo, sin más se adentró al cuarto con el fin de visitarlo y estar para él en todo momento.

 

Al ingresar por el ala de emergencia, Deathmask estaba desesperado por encontrar a Afrodita y poder acompañarlo en el dolor, podía entender lo que sucedió entre ellos dos, le dolía la causa de su distanciamiento y más cuando es él quien trato de conquistarlo, pero no había excusa aparente para decirle.

En eso lo encuentra parado y observando la dirección en donde podía ver a su hermano mayor, esperando a que alguien saliera de esa habitación. Sin embargo, Deathmask no parecía estar al tanto de lo que pasaba alrededor del peli celeste, al rememorar la discusión que tuvieron en la escuela era algo que jamás se perdonaría y más hacerlo llorar de la impotencia.

---- Hace unas horas antes ----

Había salido del salón hecho un desastre, estaba una vez más solo y maldecía que Aioria haya faltado por el mero capricho de vigilar a ese desgraciado o eso pensó, cuando la excusa era estar hablando toda una hora con el coordinador de curso.

Va con dirección a su casillero con el fin de dejar unas cosas y buscar un libro que debía devolver a la biblioteca del instituto, al ya hacerlo se voltea para dar un brinco al ver quien estaba allí con una cara de pocos amigos.

 

- ¿Por qué me sigues? – Le cuestiona recibiendo la mirada inquisitoria de ese chico de una extrema belleza que parecía estar volviéndolo loco con tan solo mirarlo a los ojos, sin embargo, nota algo extraño en su manera de actuar.

 

- Te sigo porque te exijo una explicación de porque me evitas – Death alza una ceja al no comprender el punto de aquel reproche, más tratando de buscar alguna manera de entender, pero no la encontraba.

 

- ¿Yo evitándote? ¿De dónde sacas esa tontería de que yo te evito? – Afrodita suelta un suspiro de fastidio, se cruza de brazos y tratando de encontrar las palabras exactas para hacerse escuchar por ese tonto.

 

- No son tonterías y es la pura verdad – Death lo toma del brazo y lo atrae a sí mismo, Afrodita lo mira con unas tremendas ganas de escupirle, todo porque evadía sus exigencias – Antes eras tú el que me seguía a todas partes, el que me dejaba mensajitos en mi casillero, el que siempre me daba sus apuntes en clases cuando me atrasaba y todo el tiempo eras tú, yo te hacia caso a pesar de que estaba de mal humor o con más cosas en mi cabeza, siempre te prestaba atención… ¡¿Por qué no ahora?! ¿Qué quieres que haga? – Ahora entendía la preocupación del peli celeste, ahora le caían las fichas al tener siempre esas hermosas gemas posarse en su fría apariencia.

 

-Yo- yo – No encontraba las palabras correctas para explicarse, dado que Afrodita le dio un manotazo a su mano para que lo soltase y así lo hizo.

 

- Veo que no deseas hablar conmigo, noto que ya no te intereso y que lo único que sabes hacer es fastidiarle la existencia otras personas… - Se cubre con una mano su boca, ya que no pudo contener más las ganas de llorar y eso golpe muy duro a Death – Bien, si no vas a hablar, terminemos con esto – Así nomás se lo dijo y se aleja de él, el de cabellos azules, se sentía devastado al reparar en el daño que le causo.

 

- Lo siento, Dita – Golpea con su espalda su casillero para así observar su mano, aquella mano que fue agredida por aquel ser de una extrema belleza y que ama en verdad.

---- End Flashback ----

Afrodita se voltea hacia la entrada para encontrarse con la mirada preocupada de Deathmask, la enfoca después en el suelo marmolado y se lleva aquel ramillete de rosas al pecho, dejando que sus lágrimas cayesen en esos hermosos y delicados pétalos rojos.

------- /////// -------

Seguía estudiando para la próxima evaluación que tenían, estaba en compañía de su novio que no dejaba de mirarle con sus aires de Romeo - ¿Podrías hacer algo productivo, cachorrito de León? – Al escuchar aquel apodo por los labios de su actual novio le causo mucha gracia, sonríe tontamente y extiende su mano para alzarle el mentón.

 

- Lo productivo para mi es mirar cada día, cada hora, cada minuto y cada segundo, esos hermosos ojos que se te fueron otorgados por los mismo cielos – Shaka se ruboriza ante el piropo que se acababa de inventar su novio, vaya día que tenía, desde que Aioria hablo con el coordinador de la clase pidiéndole que él fuese su compañero de banco, eso significaba muchísimo para él y eso era el equivalente a que su noviazgo iba por buen camino – Dejando eso de lado, al observarlos pude notar que algo sucedió contigo – El chico de largos cabellos rubios se separa de su novio, toma el libro que estaba resumiendo para posteriormente irse a un sector de la biblioteca dejando a su novio con la intriga ante su comportamiento – Shaka, ¿Qué te ocurrió amor? – Lo sigue para después escuchar un sordo sonido y el grito suave que dio su novio, acelera el paso para posteriormente encontrarse con la imagen de su novio bañado con una sustancia que lograba reconocerla al instante de inhalarla.

 

- “Esto es el colmo del colmo” Lo siento Aioria, yo… - Se voltea dispuesto alejarse de su novio, pero este lo toma del brazo y obligarlo a darse la vuelta para mirarlo a los ojos.

 

- ¿Qué sucede? – Le cuestiona una vez más y Shaka estaba dispuesto a contarle toda la verdad esta vez con respecto a su hermanito Regulus, sin embargo, al otro lado de la estantería con libros dicha persona estaba vigilándolo muy de cerca.

 

- Esta bien, te dire lo que me ocurre – Aioria saca de su bolsillo una botellita de perfume para comenzar a bañarlo por completo, Shaka agradece que el líquido de ajo que se le tiro no parecía tan potente como Mu se lo había descripto – Gracias – Le sonríe a modo de respuesta ante el gesto, Aioria lo abraza ya pudiendo disfrutar de la cercanía de su amado rubio – Me gustaría decirte primero que nada, de que ayer después de que Camus fue trasladado al hospital, yo estaba arriba del coche en compañía de tu familia, estuve hablando con cada uno de ellos, pero – Hace una pequeña pausa tratando de encontrar las palabras correcta para lograr que Aioria le entienda, se separan los dos y se miran fijamente – Tu pequeño hermano anoche hizo un comentario muy grosero, citando a la orden vampírica y se refería a mi mejor amigo con aires de superioridad, yo lo defendí y me salvaguardé yo también, porque en cierto sentido parecía que nos metían a todo los humanos en una misma bolsa – Aioria se cruza de brazos y observa a su novio con seriedad absoluta, Shaka observa aquella postura para así continuar – Yo hice un comentario que no debí, lo admito, me equivoque, pero lo que hizo él fue grave porque me amenazó con hacerme la vida imposible y llegar hasta el punto de querer asesinarme – Al contar aquello último agacha la cabeza muy avergonzado y de nuevo experimentando ese miedo que le instauro Regulus desde anoche.

 

Aioria se da media vuelta dispuesto hacerle frente a su pequeño hermano, porque no le iba a permitir hacer ese tipo de comentarios a su novio y menos amenazarlo. Shaka al ver como su amante se iba hecho una furia de la biblioteca dejándolo a él completamente solo, y con unas ganas tremendas de borrarse ahora mismo.

Sin embargo, Regulus estaba hecho una fiera, deseaba matar a su “cuñado”, pero debía irse de allí dispuesto a dejarse encontrar por su hermano mayor y hablar con él sin rodeos. Sonríe sardónicamente, su plan era perfecto y sabría que funcionaria con su tonto hermano.

------- /////// -------

Abre sus ojos lentamente, había pasado simplemente unas cuantas horas después de que llevaron de urgencias a Camus que pareció entrar en un estado de asfixia porque alguien ingreso al cuarto para apagarle la máquina de oxígeno, él no había estado aquel momento y de que apreciar cómo se lo llevaban a las seis de la mañana, eso lo frustro muchísimo.

Se acomoda un poco el cabello, no sin antes correr hacia el baño del cuarto para vomitar, de nuevo ese malestar, ya son siete veces en ese año que le agarraba las ganas de vomitar y ese dolor inmenso en su estómago al oprimirse. Vomitaba y vomitaba, sacaba todo el contenido que su estómago guardaba, hasta el punto de llegar a vomitar flemas, catarro y hasta saliva, algo que nunca en su larga vida le ocurrió.

 

- Veo que Sasha estaba en lo cierto, tu estas enfermo pequeño Milo – El susodicho como pudo alzo su rostro completamente pálido y mirar el semblante preocupado de la doctora.

 

- Yo estoy bien, esto ya se volvió normal en mi día a día – La mujer de largos cabellos platinados frunce el ceño al escuchar aquella mentira, podía decirse que los hermanos Diamantidis eran unos malos a la hora de mentirle a un médico.

 

- Eso no es estrés y menos un mal funcionamiento de tu estómago, eso es una enfermedad muy grave Milo – Al escuchar la última parte de la frase lo alarmo por completo, no quería pensar en que era verdad o mentira, porque el estado de shock en el que estaba era muy notable – Ya eres el tercero que padece de esta extraña enfermedad terminal que un vampiro como nosotros puede padecer de forma natural, primero la enfermedad empieza con los simples síntomas de cansancio, dolores musculares y que nuestros colmillos pierdan su forma – Seraphina abraza a Milo para brindarle consuelo, entendía esa expresión y podía asegurar que el chico estaba asustado – en la segunda etapa, le dan muchas ganas de beber sangre humana y después la vomita, y a veces esos vómitos son frecuentes dejando así un estomago completamente vacío, y sin ganas de comer algo llegando al punto de desnutrición – Lo revisa por completo, notando que este chico parecía estar obligándose a comer y eso no le parecía sano – La única cura que hay es de que te vacune, si deseas hacerlo, ve a mi consultorio en compañía de Kardia “Piénsalo pequeño bichito” – Le deposita un beso en la cabeza a su pequeño amigo y dejarlo solo con sus pensamientos, sabía que esa vacuna que creo en conjunto de Youma Stoltidis y de su padre, podría erradicar con esa enfermedad terminal que contraían varios vampiros de forma natural, sin embargo, debía aplicarle el otro líquido para matar el virus que lo convirtió en el monstruo que relataba el joven Camus entre sueños, algo que ayudo a Kardia y a Aspros armar el reporte de lo que aconteció durante ese lapso de secuestro, de cautiverio y el desenlace, algo que la perturbo muchísimo.

---- Flashback ----

Ella esperaba a que sus dos amigos ingresaran al cuarto del muchacho, simplemente chequeaba que las maquinas funcionaran correctamente, de que el chico estaba listo para que Aspros utilizara su poder vampírico para averiguar lo más demencial y atar cabos para la investigación que llevaban aparte de los otros miembros de la orden.

 

- Por fin llegan – Les murmuro sin voltearse, provocando que el mayor de los hermanos Stoltidis soltara una risa de satisfacción.

 

- Cierto belleza, llegamos listos para indagar en la mente de este muchachito – Kardia fulmina a Aspros con unas tremendas ganas de propinarle un certero golpe en la cara, porque no podía ante esas dobles intenciones en sus palabras.

 

- Aprovechemos ahora que Milo no está en el cuarto, porque si nos pilla haciendo esto sin su consentimiento, jura Kardia que tu hermano no nos mate después – El mayor de los Diamantidis frunce los hombros demostrándole a Seraphina que no estaría dispuesto a ser el intermediario si eso pasase, porque conocía a la perfección a su hermanito y si se enojaba con él, ese mocositos terminaría perdiendo contra él.

 

Aspros se acerca al muchacho de cabellos aguamarina, cierra sus ojos para después colocar su mano en la frente del chico listo para instalar esa sensación de contarlo todo – Kardia prepárate para grabar todo lo que diga el chico y tu Seraphina analiza el comportamiento de él – Ambos asienten para así él sacar su mano de la frente, logrando que el joven despertara de su coma.

 

- ¿Kardia? – Camus parecía estar aturdido al ver aquel hombre que le fastidiaba con tan solo verlo, pero podía sentir que ese sentimiento no sería ese en específico sino la necesidad de desahogarse.

 

- Si Camus, viene con unos amigos que desean hablar contigo – El adolescente se voltea a su lado izquierdo para toparse con Aspros, lo conocía porque lo tuvo que ir a visitar para hacerle una entrevista para el colegio, después a su lado derecho encontrándose con la apariencia de Seraphina, también la reconocía y era amiga de su primo.

 

Asintió ante aquello dejándose hipnotizar por el poder vampírico de Seraphina, su mente se coloca en blanco para así dejar que las palabras fluyan – Empecemos por el principio, dinos quienes te secuestraron – Pidió Aspros analizando por su parte la condición mental del chico.

 

- Radamanthys, Minos y Aiacos – Kardia intercambia mirada con Seraphina quien parecía estar al borde de desmayarse, pero Aspros la atrapo antes de que callera al suelo.

---- End Flashback ----

Cierra la puerta de aquella habitación, debía mantener la calma para en el futuro matar a esos tres con sus propias manos, porque le quitaron la vida de su amado hermanito. Sin embargo, al salir del cuarto, se encuentra con aquellas dos parejitas que parecían estar al borde del divorcio.

------- /////// -------

Shaka trataba por sus medios no contarle nada a su novio con respecto a lo que le acabaron de hacer Regulus y sus amiguitos, porque aquella jugarreta era por lo que sucedió, si, él había abierto la boca y le conto toda la verdad a Aioria, parece ser que el más chico de los León lo había descubierto de alguna manera – “Entonces ese desgraciado es un mal parido y un mal educado, veo que no soportare más esta humillación” – Se dirigió hasta la oficina del director con el fin de levantar un llamado de atención a Regulus y a sus amiguitos, porque volver a ser molestado por brabucones no estaba a su altura.

 

En ese momento, Aioria apreciaba en compañía de su hermanito todo lo que hacía Shaka – Ves hermanito, tu novio planea hacerme expulsar de la escuela y no sé porque se las agarra conmigo, si solamente quiero ser más cercano a él – Le contaba Regulus en un tono infantil y tierno, Aioria no sabía que decir o hacer, conocía las artimañas de su pequeño hermano, pero jamás pudo creer que Shaka fuese esa clase de chico.

 

Por otra parte, había algo que no le encajaba en toda esa loca idea, no deseaba enojarse con su novio, pero lo estaba y era porque acababa de insultar a su hermano pequeño, algo que no le parecía justo, otra de las cuestiones, era de como Regulus dio su versión de los hechos durante su ausencia.

----- Flashback -----

Al buscar por todo el instituto, llega a dar con los amiguitos de su hermano menor, quienes parecían estar consumiendo sustancias inapropiadas para jóvenes como ellos - ¿Vieron a Regulus? – Les pregunto, Mime le señala que se dé la vuelta para así encontrar a su hermano menor con una sonrisa de oreja a oreja, podía notar que estaba feliz en verlo y eso no le indicaba nada bueno.

 

- Aquí estoy hermano, yo también deseaba verte y hablar como buenos hermanos que somos – Aioria se cruza de brazos para mirarlo con seriedad, detestaba que le hablase de esa forma tan despreocupada y más metiendo los lazos que él mismo tomo no hace mucho.

 

- No me vengas con zalamerías y vallamos hablar a otra parte – Lo toma del brazo para sacarlo del pasillo principal y arrastrarlo hasta el otro sector del instituto, el menor les hace saber a sus amigos que lo esperen en la salida y que no lo buscaran por si acaso.

 

Al llegar a un lugar tranquilo, Aioria lo suelta para posteriormente mirarlo fijamente y hacerle saber que estaba muy enojado - ¿Qué? – Le pregunta con inocencia sin saber el punto de aquella mirada, sin embargo, el castaño mayor deja salir un suspiro de derrota.

 

- Deja de hacerte la mosquita muerta, porque sé muy bien lo que le hiciste anoche a mi novio y de cómo lo amenazaste delante de nuestra familia, ¿Eso te parece educado de tu parte? – Regulus frunce el ceño ya al borde de querer ir a matar a ese nerd, porque no podía soportar la mirada furiosa que le estaba dedicando su hermano mayor.

 

- No me parece educado, pero él fue quien no me hizo caso, sino que me desafío a tal punto de querer yo defenderme, ¿Sabes por lo menos mi versión de los hechos antes de acusarme de algo que tu no presenciaste? – Aioria se aleja de su hermano menor y reflexiona aquellas palabras, puede ser que Shaka esté equivocado y juzgo mal a su hermano, pero también había probabilidades que Regulus haya sido un inmaduro y cobarde por amenazarlo de muerte.

 

- No lo sé y estoy dispuesto a conocer tu versión, por esta única vez será – Regulus sonríe satisfactoriamente al ya ver que pudo amansar a su hermano mayor, sabia la maniobra de Aioros al intentar persuadirlo y vio que si funciono.

 

- Muy bien, las cosas se dieron de esta forma – Comenzó a narrarle desde lo ocurrido con Camus y Milo, de cuando subieron al coche todos, de las cosas que hablaban encima del vehículo, pero el cambio en cierta parte lo que él comentó y colocando al actual novio de su hermano como el malo de la película – Eso fue todo lo que ocurrió, Aioria – Agacha su mirada con una tristeza fingida, se abraza a si mismo demostrándole a su hermano que tenía mucho miedo de que algo malo le ocurriese – No quiero que te separes de él, Shaka es un buen chico, es inteligente y veo que te ama en cierta parte, lo mejor para ti es que compruebes con tus propios medios lo que planea en verdad – Aioria dudaba de aquello, pero se deja guiar por su hermano menor hasta el sector de casilleros y encontrándose a su novio guardando sus cosas de mala gana.

---- End Flashback ----

------- /////// -------

Habían pasado tres días después de lo ocurrido días anteriores, Degel no parecía estar en condiciones de soportar más la espera de que su primo reaccionara, su padre estaba de la misma forma y más preocupado por lo ocurrido el miércoles a la madrugada, orillando a su sobrino ser intervenido de urgencias.

Kardia sudaba en frio ya temiendo lo que la orden dictaminara con el caso de Camus Afrontes, no quería que su hermano menor sea sacrificado o que lo manden a matar por ser un vampiro inhabilitado de intervenir en un secuestro de un humano. En cambio, los amigos de Milo y de Camus, estaban de los nervios, todos peleados por lo que se mostraba, pero la única pareja que se dieron tregua fue Death y Afrodita, ellos dos parecían estar acompañándose en el dolor.

 

Por otro lado, en el cuarto Milo se despertaba de su letargo, había sido vacunado por Seraphina y casi obligado por su hermano mayor, quien fue avisado por Degel. Maldecía que esa vacuna tenía otra cosa más, provocándole que durmiese tres días completos – Qué mala suerte tengo Camus – Toma la mano de ese joven que seguía conectado a todas esas máquinas, siente que ese chico recupero el pulso, pero la temperatura de su cuerpo es baja – Espero que dentro de unos días te den el alta y puedas volver a la escuela, yo también pienso volver algún día y ser alguien especial para ti, a pesar de los malos ratos que te hice pasar – Hace una pequeña pausa para brindarle unas suaves carisias en la mejilla izquierda del chico, recuerda por fin la carta que este le entrego, suelta su mano para así buscar entre sus bolsillos aquel papel, al encontrarlo dentro de su chaqueta negra, la decide abrir.

 

Al notar la calidad del papel y de la letra, pudo identificarla de quien era. Comienza a leer los dos primeros párrafos de la carta, se queda petrificado al apreciar con claridad los sentimientos que fueron plasmados en ese papel amarillento; camina hasta la ventana continuando su lectura, al leer el tercer párrafo frunce el ceño sin lograr entender el punto que deseaba ir al mencionar sus sentimientos, recuerda los buenos momentos y los tristes momentos que pasaron juntos, pero decide continuar leyendo; en el cuarto párrafo, en su garganta se formó un gran nudo de emociones, sus ojos comenzaban a cristalizarse ya entendiendo por dónde van los tiros.

Dolor, deseos de matar a esos tres degenerados, mover cielo y tierra para hacerle entender al mundo que perdió lo que más amo. Sin embargo, leer esa carta parecía estar abriéndole la mente para ver la realidad por fin, después de todo esos siglos de un eterno sufrimiento. Cierra por unos segundos sus ojos, deja brotar las lágrimas al recordar aquella tarde donde estaban los dos solos amándose como era debido, sin interrupciones, y solamente ellos dos, decide retomar su lectura para así saber más verdades.

Aprieta el papel sin romperlo y abollarlo por los lados, su mente estaba presentando esas horripilantes escenas, y saber las condiciones en las que estaba su difunto amado. Sus ojos se abren enormemente al leer aquellas líneas del octavo párrafo, podía oler que algo extraño ocurría en el pueblo, como también estar anonadado al saber que el padre de los gemelos fue asesinado, pero sabía que esta con vida, ¿Cómo sobrevivió?, esa era su pregunta, la que deseaba obtener una respuesta sincera y honesta.

Por fin rompe en llanto, se deja caer al suelo, dejando que sus gritos de dolor y sufrimiento traspasaran las paredes. La puerta de aquella habitación a oscuras con los pocos rayos de luz solar filtrándose por las rendijas de la ventana, siente esos brazos que siempre lo consolaron, su hermano mayor lo estaba abrazando con seguridad, se lleva el papel al pecho gritando en silencio el nombre de su amado Camus Monthay, él había muerto, eso era verdad, pero quería saber dónde estaba enterrado, aunque sea como un último adiós para los dos. (**)

 

- Ya Milo, ya paso, ya paso – Le decía Kardia tratando de calmar a su hermanito quien lloraba con todas sus fuerzas, el psiquiatra había ingresado para corroborar que el joven Diamantidis esté en condiciones, sin embargo, Aioria y Deathmask se acercaron a su mejor amigo para depositarle confort.

 

- ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué lo mataron?! ¡Él era inocente! ¡Él era todo lo que tenía! ¡KARDIA! – Sus gritos provocaron que cierta persona despertara, Degel y Krest se voltearon para encontrarse a Camus despierto.

 

García en compañía de Youma, pudieron apreciar el momento que cualquier cercano a la familia Afrontes y a la familia Diamantidis, podía desear. Las culpas se expiraron, pero la ira y la sed de venganza se instauro en el ambiente, de eso estaban seguros los dos.

(Ending – Apology de IKON)

------- En el próximo capítulo de Orden Vampire -------

- Listo, ya le suministré a los dos un calmante – Dijo Luco con neutralidad, mientras apreciaba en la condición que estaban Milo y Camus Afrontes, esos dos chicos parecían estar más unidos por ese lazo llamado “Amor”.

 

- ¿Podrá la policía tomarle su testimonio de los hechos? – Pregunto más calmado Degel mientras era abrazado por detrás por su novio, el médico asiente con mucha pena, dado que la condición mental de ese chico era muy grave hasta obligarlo a suministrarle un calmante.

(…)

Las cosas siguieron con normalidad, hasta que Milo regreso al instituto por fin, con la idea de completar todas las materias que debía, como también tomar los apuntes para dárselo a Camus. Todos lo miraban con un aire de intriga, pero él seguía siendo el típico chico amante de las riñas.

 

- Parece ser que nuestro grupito creció Shaka – Le mencionaba Afrodita a su mejor amigo, dado que los dos estaban por detrás de los tres chicos populares del instituto.

 

- Esta vez así podemos llamarle, Mu se marchó y Camus está en las peores condiciones que puede estar, después de una semana y media desaparecido – Afrodita asiente ante aquella verdad, la tormenta había pasado, pero todo eso no iba a terminar ahí.

(…)

- ¡MALDITO! – Exclamo furioso Radamanthys, mientras tiraba todo a su paso, dejando su “oficina” hecho un desastre. Minos apreciaba todo ese show desde la puerta, con sus facciones demostrándole su impaciencia - ¡No puedo creer que Kardia este a un paso de descubrirnos! ¡Y Aiacos desaparecido! ¡¿Cómo podemos sacarnos a las autoridades de encima, si estamos rodeados?! “¡Maldita ramera! Me las pagara muy caro, de eso estoy seguro” – Camina de un lado a otro como si de un león enjaulado podía decirse, dado que sus nervios estaban que saltaban térmicas en su cerebro.

 

- Aiacos fue secuestrado Milo, pero puede que la Orden Vampírica sepa lo que hicimos, y puede que nuestro padre nos mate, ¿No crees Radamanthys? – El de cabellos cortos y rubios, enfoca su mirada en su medio hermano, ese detalle no lo había pensado y había posibilidades que ellos tres se queden sin nada.

Notas finales:

Espero que lo hayan disfrutado tanto como yo disfrute escribiendo, quiero saber que opinan al respecto con lo sucedido en este capitulo dejandome un hermoso Reviews. Sin más que decir, nos leemos en el próximo capitulo de Order Vampire.


 


Aclaración


 


(*) Pasen a leer Juego Prohibido para saber como va esta historia.


(**) Pasen a leer Es un ADIOS o un TALVEZ, la carta numero 2, experimenten el dolor que paso en esta instancia Milo. ;)


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