Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

NO TE ENAMORES por Cafetonight

[Reviews - 64]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

“Cuanto tiempo” pensó, mientras estacionada su auto en una zona de parqueo cercana a la galería, cuando bajo de él, tomo su bolso y se aseguró de poner la alarma. Camino a paso lento, sintiendo como el viento frio se infiltraba en su piel, por lo que entro enseguida perdiéndose en la calidez del lugar, una vez dentro fue recibido por un flujo reducido de personas quienes observaban algunas obras en exposición.


Jiyong se sintió raro cuando algunas personas voltearon a mirarlo, esto le hizo recordar la primera vez que ingreso al salón de clases en la universidad, para ese entonces él se sentía seguro de sí mismo, a diferencia de ahora,  trato de caminar despacio y pasar desapercibido, pero fue interrumpido por alguien.


“Puedo ayudarte en algo”, era un joven de cabello oscuro, más alto que el, acompañado de dos chicas.


“Ah…”


“Lo estas asustando Seungyoon”, dijo una de ellas.


“A puesto a que Seunghyun no le gustara nada saber que estas acosando a las personas”, hablo otra de las muchachas con una risita.


“No lo estoy asustando”, se quejó el joven, “solo le pregunte si necesita ayuda, ¿cierto?”, se volvió mirando a Jiyong.


“Seungyoon, Lalisa, Rose, ¿Que estás haciendo aquí?”, susurro Daesung acercándose a ellos aunque más parecía una llamada de atención.


“Les dije que tenían que supervisar la zona B”, los jóvenes parecían asustados cuando lo vieron.


“Estábamos ayudando al señor”, dijo Lalisa.


“Cierto”, respondieron Seungyoon y Rose.


Genial, estas aquí para hablar con Seunghyun y ya ocasionaste problemas, se dijo mentalmente Jiyong.


¿¡Jiyong!?, pregunto Daesung frunciendo el ceño.


 “H…hola.”, respondió avergonzado.


“¿Qué haces aquí?”. El amigo de su marido se veía bastante sorprendido.


“Yo…necesito hablar con…” Jiyong sabía que no era necesario decir con quien quería hablar, Daesung parecía entender.


“Pregúntale Sandara, es su secretaria, ella te dará información.”


“¿Se conocen?”, pregunto Seungyoon curioso.


“Sera mejor que los lleve yo mismo a la zona B, no quiero que se pierdan otra vez jovencitos.” Los tres muchachos asintieron a regañadientes antes de despedirse de Jiyong y retirarse.


Cuando Jiyong llego a la oficina de Sandara, esta se encontraba vacía, por lo que decidió esperar, unos minutos después apareció una hermosa mujer de cabello chocolate.


“¿Puedo ayudarle algo?, pregunto con amabilidad.


“Ah… si… yo… uhm…”, trato de decir Jiyong aunque su lengua no estaba ayudando. La mujer parecía no entenderle por lo que espero a que continuará.


“Yo… necesito hablar Seunghyun”, dijo por fin, sintiéndose aliviado.


“¿Tiene alguna cita?”


“No”


“Oh!, siendo así es algo difícil, necesita hacer una cita previa para reunirse con él, ¿Quizá puedo hacer una para usted la próxima semana?”


“No… no me entiende, yo… necesito hablar con el ahora.” Sandara seguía insistiendo en hacer una cita para Jiyong.


“Lo entiendo señor…”


“Jiyong.”, respondio el, informándole su nombre.


“Lo entiendo señor Jiyong, pero hay muchas personas que solían los servicios del señor Choi como curador.”


“Usted, no entiende, yo… yo soy…”, a Jiyong le resultada difícil decirle que era su marido, por lo que levanto su mano, enseñando su anillo para que Sandara lo viera y entendiera, sin embargo eso no parecía ayudar en absoluto.


“Soy su marido”, dijo por fin, sintiéndose avergonzado y aliviado al mismo tiempo.


La mujer parecía tan sorprendida de lo que acaba de escuchar que observo por unos segundos a Jiyong sin decirle nada.


“¡Oh!, por favor discúlpeme, no fue mi intención interrogarlo, solo es una cuestión de rutina.”, se disculpó Sandara.


“Descuide, no fue culpa suya.”


Luego de una breve conversación Sandara lo acompaño hasta una sala a la que llamaban “La Sala de sueños”, donde los artistas que expondrían sus obras daban una pequeña muestra de su trabajo a Seunghyun. “Sandara es amable”, pensó Jiyong mientras la oía hablar con tanta pasión sobre el arte, por lo que se preguntó si Seunghyun hablaba de la misma forma con otras personas.


“Este es el lugar señor Jiyong”, le informo Sandara, extendiendo uno de sus brazos en dirección a la puerta.


“Por favor, solo dime Jiyong.”


“Está bien Jiyong.”


Sin embargo Jiyong no estaba preparado para lo que iba a ver.


 


Envuelto aun en sus sabanas, miro al techo por unos segundos y se puso de pie para tomar una ducha rápida, había mucho trabajo y no dejaría de ir a la galería solo porque era su cumpleaños,  “otro día más” se dijo así mismo mientras acomodaba la corbata en su cuello.


Todo se veía muy tranquilo cuando entro por la puerta de la galeria y saludo a todo el mundo, era demasiado raro ver tanta tranquilidad y más con los practicantes nuevos, pero no le dio más importancia. Cuando se adentró en su oficina comenzó a trabajar en algunos papeles, tenía que revisar algunos informes y firmarlos para dar su autorización en diferentes proyectos.


“¿Estas ocupado?”, pregunto Daesung mientras cerraba la puerta de su oficina.


“No”, respondió Seunghyun.


“Qué bueno, necesito que recibes unos archivos, ya te los envié por email.”


“Claro.”


“Genial, nos vemos luego.” Seunghyun se quedó observando la puerta por unos segundos, esperando a que su amigo regresara a saludarlo por su cumpleaños, pero no lo hizo. Tal vez lo había olvidado, no lo culpaba, había cosas más importantes que eso.


Se colocó los lentes y encendió su laptop mientras revisaba los archivos que Daesung le había envidado, todas eran piezas de arte a subastar, paso mucho tiempo cuando termino de revisar los archivos, era cerca del mediodía y su estómago estaba empezando a quejarse.


“Hola… ¿puedo entrar?”


“Taehyun… entra por favor.”


“Gracias”, sonrió el menor, acercándose al escritorio de Seunghyun.


“¡Feliz Cumpleaños!”, le dijo mientras colocaba una caja frente a él y se inclinaba para darle un abrazo afectuoso.


“Gracias.”  Respondió Seunghyun, no esperaba que alguien recordara su cumpleaños.


Taehyun se separó unos centímetros de Seunghyun para que pueda abrir su regalo.


“¿Chocolates?”


“Si…, son tus favoritos.”


Taehyun seguía sonriéndole con tanta calidez que el corazón de Seunghyun comenzó a bombear con prisa.  Él no quería pensar en ciertas cosas, pero había notado el profundo interés que este joven tenía por su persona, fue así desde el primer día que se conocieron, aquel día Taehyun había llegado corriendo con tanta prisa a su entrevista que había tropezado con Seunghyun, sin saber que estaba hablando con la misma persona que minutos después lo entrevistaría.


Cuando Taehyun se dio cuenta se sintió muy avergonzado tratando de explicarle que no había sido su intención hacerle pasar un mal rato pero que parte de sus sueños eran trabajar en una galería como esta y aprender de él, fue entonces cuando  Seunghyun y Taehyun pasaron de una breve entrevista a una conversación mucho más interesante sobre arte, Seunghyun nunca se había sentido así, el hablar con alguien que tenga tanto interés por las mismas cosas que él, era fascinante, Taehyun era fascinante.


Ambos habian ido a comer otra vez juntos durante el almuerzo, y Taehyun hablaba animadamente algunas de sus anécdotas durante su trabajo con los otros practicantes, Seunghyun lo escuchaba con atención.


“Estoy hablando demasiado, lo siento”, se disculpó.


“Me gusta escucharte”, le informo Seunghyun sonriendo.


Taehyun le devolvió la sonrisa, “Y… que planes tienes para esta noche…”


Seunghyun mastico su comida con paciencia mientras Taehyun esperaba una respuesta que no llego.


“¿Es en serio Seunghyun?, no tienes planes.”


“Tengo una cita con mi cama esta noche.” Le respondió, haciendo sonreír al más joven.


Taehyun no le preguntaba sobre su marido, él sabía que su matrimonio no estaba bien, lo sabía porque Seunghyun siempre evitaba hablar de ese tema y cuando lo hacia su rostro reflejaba tristeza. Seunghyun siempre resguardaba su vida privada y era casi imposible saber detalles de ella. Sin embargo eso no le impedía a Taehyun pensar en Seunghyun de otra manera.


Seunghyun era muy atractivo e inteligente, una persona amable e interesante, tan interesante como la forma en que trabajaba, con pasión, con la misma pasión que muchas veces soñaba Taehyun entre sus brazos.


“Quizá, esta noche te lleves una sorpresa”, le dijo Taehyun llevándose la comida a la boca.


Cuando regresaron a la galería, volvieron a sus actividades para trabajar juntos en la Sala de Sueños, Taehyun era su asistente, juntos hacían grandes cosas, o como decía Taehyun dos cabezas piensan mejor que una.


El tiempo juntos durante el trabajo parecía volar.


“Esa fue la  penúltima pieza…creo”.


“Por qué no vas a casa temprano, es fin de semana, yo terminare con el resto” Seunghyun observo lo cansado que estaba su ayudante más joven, aunque este no se lo dijera.


“Estoy bien, no te preocupes.” le informo.


Taehyun al igual que es resto del equipo de Seunghyun habian preparado una fiesta sorpresa para él, habian fingido no saber nada para que no lo descubriera y al parecer había funcionado.


“No me mires así Seunghyun, lo digo en serio, estoy bien, y en todo caso prefiero pasar mi fin de semana contigo.”


Al oír esto Seunghyun sonrió, “Sabes que otros chicos de tu edad darían lo que fuera por salir temprano del trabajo y tú quieres quedarte”


“Quizá es porque no tienen un jefe como tu… muy especial”, Taehyun parecía decidido cuando lo observo y llevo una de sus manos al rostro de Seunghyun, trazando su perfecta mandíbula.


Seunghyun lo observaba sin decir nada, dejando que el muchacho lo tocara y se acercara a su rostro.


Seunghyun podía sentir su aliente, tibio, evaporándose y tocando su boca en ondas, observándolo con deseo, el no recordaba cuando fue la última vez que alguien lo había visto así, se sentía bien, le gustaba.


“Uhm…”, se quejó Taehyun cuando Seunghyun lo tomo de la nuca, y aprisiono su boca contra la suya, besándolo. El tiempo parecía inexistente en ese momento, separándose unos segundos y mirándose a los ojos, tratando de explicarse cada uno sobre lo que estaban haciendo, cuando Taehyun quiso volver a sumergirse entre los labios de Seunghyun un sonido los hizo volver de sus sentidos.


Cuando voltearon a mirar, observaron a Sandara junto a otro hombre que tenía el rostro desencajado mirando en su dirección, Taehyun pudo observar el cambio en el rostro de Seunghyun.


“Taehyun necesito tu ayuda, ahora”. Sandara parecía molesta con él, mientras cruzaba el camino y lo tomaba del brazo llevándolo afuera. El hombre desconocido y Seunghyun se quedaron a solas.


“Sandara que sucede”, se quejó el joven soltándose de su agarre.


“Que hiciste Taehyun”, se quejó con molestia.


“No te entiendo”. Sabía que Sandara y el otro hombre habian visto todo.


“Sabes a lo que me refiero, y no trates de justificarte.”


“Me gusta Seunghyun, ¿Cuál es el problema?”


“¡Guarda silencio!, te prohíbo que vuelvas a decir eso, le reprendió.


“¿Por qué?. No es como si a ese hombre le interesara lo que vio.”


“¡¡Ese hombre es el marido de Seunghyun!!”


Taehyun contuvo el aliento en su garganta al escuchar a Sandara, mientras miraba hacia la puerta cerrada, donde el marido de Seunghyun y él se encontraban.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).