Aquellos que digieran que era tan solo un humano mas es que no conocían los alcances de Anthony Edward Stark y mucho menos su genialidad, el hombre no solo era millonario, genio y apuesto entre otras cosas era perseverante, si… perseverante a un punto que muy pocos sabían, cuando el genio detrás de industrias Stark se proponía algo ni dios mismo podía hacerle desistir y en ese momento estaba frente a un pequeño dios de nueve años que lloraba desconsolado y de alguna forma le partía el corazón, pero no se podía dar el lujo de flaquear no en ese instante, Loki le miro aun con sus ojos irritados por las lágrimas y luego bajo su mirada verde al piso.
¿Qué había hecho?... gritaba una voz en su cabeza con tintes a reproche pero entre mas veía al niño sabía que podía lograrlo, se acercó ahora sin verlo retroceder, el miedo inicial ya había sido superado y ahora solo hacía falta que entendiera, Tony exhalo acuclillándose frente al niño para verle a los ojos
-por favor deja de llorar- pidió amablemente con una voz dulce y modulada
-no puedo… es terrible lo que me has dicho- dijo el niño encogiéndose en su lugar
-lo sé y te entiendo a mí me duele tanto o más que a ti y es terrible el saber que te cause daño- dijo triste y Loki le miro aun sollozando
-¿entonces por qué me lo dices?- cuestiono el niño y Tony sonrió amargamente
-¿Por qué?... bueno tengo muchas razones pero la primera es que te amo- dijo tocando la nariz del moreno quien sonrió ante el acto –y las demás son aún más sencillas- dijo parándose para sentarse al lado del niño al que abrazo
-aun no pudo creer lo que dices pero algo en mi interior dice que no mientes… eres un Midgardiano muy interesante- susurro lo del final pero Tony le escucho
-inusual dices normalmente- corrigió al moreno que asintió con su cabeza, Loki le miro y después a la habitación, no había ventanas por lo que le era difícil saber si ya era tarde o tenía mucho tiempo allí –no te preocupes por ello regresaras en el mismo instante en que te fuiste- Loki volteo a verle sorprendido, el humano tenia poderes sorprendentes, y Tony rio mostrándole una sonrisa enorme que muy pocas personas le dedicaban siendo solo dos, Thor y su madre quienes le hablaban y sonreían… pero toda esa situación le hacía apreciar cosas nuevas
-si es cierto lo que dices…- bajo su mirada –provocare daño a todos a mi alrededor- susurro soltando un par de lágrimas –no quiero…- dijo finalmente soltando un sollozo y aferrándose a la ropa de Tony quien exhalo rodeándole con sus brazos
-no… no ocasionaras nada Loki, escúchame debes de aprender algo importante y juro estar a tu lado en cada momento… te protegeré- el niño asintió sin despegarse del mayor moviendo su rostro –es hora por ello es que tienes que confiar en mi… Loki- le separo por los brazos para que sus ojos se vieran –es importante sin importar lo que me ocurra quien importa eres tú, no mires hacia atrás nunca y en tu futuro nos encontraremos te lo prometo aunque al principio no seamos más que enemigos confía en ti y que mis sentimientos son fuertes- Loki asintió aun con la mirada vidriosa por las lágrimas que limpio Tony con una sonrisa en su rostro, ambos regresaron al cofre de los inviernos futuros solo que Loki llevaba sus ojos vendados como prueba de la confianza que le tenía al mortal.
“nunca deberás de utilizarlo… es un hechizo que puede cambiar todo el universo como le conocemos y si llegase a pasar nadie sabe las consecuencias de ese acto” sus palabras retumbaban en sus oídos el día que miro aquel hechizo escrito en un libro de Loki, aquel que llevase siempre consigo y solo hojeara Tony un par de veces parándose al ver aquella página que le intrigaba pues sus palabras estaban escritas con sangre “¿Qué es?” cuestiono al moreno intrigado por ello y Loki volteo a verle, su rostro no representaba nada que no fuera esa expresión inamovible “algo que escribí hacia siglos” contesto al principio escueto y cuando sus lecciones en el ámbito mágico comenzaron, lo recordó e intento hacerlo “no… no Tony” dijo Loki rebatándole el libro y explicándole aquellas palabras que aun estando en su interior y repetia tocando el cofre y trazando en su mente aquel pentagrama con simbología que apenas había visto un minuto.
La sala se ilumino y con su mano sobre el cofre y la otra conectada a la mano infantil del futuro hechicero estaban allí en ese momento en que la obscuridad llamo al moreno en su desesperación y el pequeño se quitó la venda al oír su llamado asustado y ambos Loki uno siendo un niño y otro un adulto se miraron con miedo para después ver a Tony
-es hora de combatir ese mal que te atormenta…- el moreno mayor retrocedió negando abrazándose a si mismo
-no puedo es más fuerte que yo mismo…- susurro con la mirada baja y sintiendo una terrible punzada de la que el pequeño se quejara
-duele…- jadeo el pequeño llevándose una mano al corazón
-no es más fuerte de lo que quieres que sea- le dijo Tony acercándose con el niño que ahora cargaba en brazos –obsérvate, se fuerte por ti por que el dolor que sientes lo puedes hacer eterno al igual que su sufrimiento- bajo al pequeño que termino en los brazos del moreno, Loki le veía y después a Tony, recordaba aquella época en pedazos, la bondad que despedía y la alegría, sus ojos subieron a los del mortal que con decisión y su versión infantil ambos tomados de la mano decidieron luchar
-acabare con él…- dijo decidido observando a Tony que negó de inmediato
-no… no puedes terminar con el por qué no es otra cosa que tú mismo… debes aceptarlo como lo que es una parte de ti que desea existir- ambos le miraron incrédulos, una parte de él había dicho, ¿pero cómo aceptar la obscuridad sin que seas engullido por ella?, se cuestionó a lo que Tony negó –no lo pienses demasiado es como el cariño que le profesas a Thor o Frigga- Loki adulto negó de inmediato
-no… ellos me abandonaron…- dio un paso alejándose de ambos –confiaba en ellos y al final termine solo y destrozado- cayo de rodillas soltando un par de lagrimas
-pero siempre me han querido- susurro el niño confundido y sintiendo el dolor del mayor –ellos siempre están a nuestro lado- dijo recordando como Thor corría a su habitación en medio de una tormenta para abrazarlo y poder dormir o como Frigga usaba su magia para curarle cuando imitaba a Thor y se subía a un árbol o corría y terminaba resbalando, el mayor le miro sintiendo esa esperanza, cariño y protección que ambas figuras le proporcionaban –incuso padre me quiere- y fue un flash muy rápido pero lo recordó, aquel día en que se había caído jugando y quedando atrás ante la velocidad de Thor y sus amigos se encontraba solo, no había llorado aunque su pierna le doliera demasiado y Odín que sus cuervos rondaban fue a su ayuda, le había levantado como si fuera un objeto frágil y llevado a las sanadoras que le atendieran y recordó el regaño a Thor por no haberse fijado y este mismo le prometió jamás dejarle atrás.
El mayor soltó unas lágrimas al ver la mano de Thor cuando era pequeño y su infantil voz negando “perderás la carrera” le había dicho y el mayor con una sonrisa radiante negó “la perderemos juntos” y Loki pensó que su hermano era genial y que siempre le querría, Tony sonrió al ver al pequeño y después al mayor, Loki niño le estaba proporcionando de la fortaleza que a su edad solo adquiría del cariño y personas a su lado, sus recuerdos, recuerdos perdidos cuando el lado obscuro tomo posesión de su cuerpo estando atrapado en su habitación y que robo destruyéndolos, le hacían falta, los necesitaba para borrar esa soledad, requería de esas memorias que solo el pequeño podía darle, momentos felices sin amargura que destruyeran lentamente aquellos que le dejaran en la desolación y profundo sufrimiento
-no fueron siempre las cosas así- murmuro después de recordarlo –ellos me quisieron… procuraron, en algún momento me amaron- susurro para sí mismo a pesar de que los otros podían escucharle
-así fue madre, padre y Thor todos nos quieren, hermano pierde las carreras, madre nos cura y besa y padre jamás nos deja solos… los cuervos, ¿recuerdas?- cuestiono a su yo mayor que soltaba un par de lágrimas, los cuervos como podría olvidarlos aquellas creaturas impertinentes que le digieran a Odín de él, su amado Svadilfari y al final fueran su ruina no siempre lo habían sido, ellos estuvieron cuando el caballo le había tirado en aquella ocasión que saliese con los demás de cazaría, Odín había ido por él para llevarle al palacio todo se veía tan extraño el saber que le habían amado, que sentían algo más que odio y repulsión por su persona, y otro más apareció el llorando junto al mar eterno derramando sus lágrimas después de haber peleado con Thor, su primera riña y ultima Odín Padre de Todo, su padre le había consolado en silencio para después brindarle una sonrisa y un beso en su frente “ve hijo mío que las palabras son la peor arma que se puede empliar y ellas mismas sanan esas heridas que se cree traspasan el alma pero a pesar de nuestra larga vida seguimos siendo imperfectos y de ello debemos de aprender, nadie mi niño está exento de cometer errores solo debemos aprender a resarcirlos”, Loki había asentido fervientemente en sus palabras en su sabiduría que considero absoluta y se levantó impulsado por un nuevo ánimo para ir con su hermano a quien después de disculpas de ambas partes y un abrazo se prometieron que las palabras jamás las usarían para herirse
-pero yo no lo hice- susurro triste, al saber que había quebrantado aquella promesa, había herido a su hermano con sus palabras mordaces, había dejado una huella lo suficientemente grande para ver tristeza en la mirada que solo alegría demostraba –dejo de sonreír después de ello… ya no era mi sol- musito triste comprendiendo tanto
-pero el tambien rompió una promesa- susurro un Loki obscuro cual si fuera un ser opaco que era la copia del mayor –prometió cuidarnos, ellos dijeron que nos protegerían y fueron quienes nos hirieron- Tony sonrió con melancolía, siempre lo mismo, las mismas palabras
-deja de herir… que tus palabras solo te lastiman a ti- dijo Tony y el ente opaco gruño con rabia para ver al niño
-ellos destruirán tu vida… acabaran con tus sueños con tu propósito, es lo que somos escoria que merecía la muerte en un obscuro mundo congelados, él lo dijo, esa día él nos lo dijo- y el niño y Loki lo vieron a Padre de Todo imponente sobre su trono sosteniendo su lanza y el atado, prisionero de nuevo sin forma de escapar y las palabras retumbaron en las paredes despiadadamente grabándose en fuego
-¿pero era el quien hablaba o su miedo?- cuestiono Tony al ente que le miro con rabia
-eran sus palabras salidas de su boca… dichas con el propósito de vernos destruidos- grito al par que se habían quedado callados mirando aquella escena
-no… no lo fueron, fue miedo, temor a lo desconocido a perderte a no soportar la idea de que quisieras destruirte- dijo Tony y Loki subió su mirada seguida del niño
-¿Por qué diría eso?- cuestiono el pequeño
-porque es de carne y hueso y sus sentimientos no sabía cómo expresarlos, y todos cometemos errores, es normal, cuando sientes que pierdes algo…- Tony miro al ente y a los dos Loki –por qué en lugar de decir te amo decimos cosas que puedan herir para no lastimarnos más… por que el admitir que tuviste miedo de verte partir lejos de quien te ha querido tanto durante tanto tiempo deja un hueco en tu corazón y el dolor es tan grande que no sabes que decir- se acercó abrazando a ambos Loki atrayéndolos a si –pero él no les dejo morir, jamás lo aria- susurro en los oídos de ambos
-por qué nos quiere- dijo por fin el pequeño que se aferró al cuerpo del mortal
-no… no lo entienden transgiversar la cosa, el tambien nos miente- dijo sin dejar de mirar a los otros dos para luego voltear a Tony a quien se fue con una daga en mano que saco de entre sus ropas, Tony apenas si la esquivo botándosela con un golpe de las manos cuando un impacto sobren su estómago le derribo –soy mejor que tu más ágil un guerrero- siseo parándose a su lado para jalar sus cabellos hacia atrás, Tony le miro desde abajo sin dejar de sostener su estómago mientras inclinaba atrás su cabeza para evitar le jalara más de lo necesario
-no pretendo ser mejor…- susurro en un hilo de voz –solo hacerles entrar en razón- dijo para ver a los dos Loki que parados uno junto al otros miraban sorprendido la escena
-¿Por qué mortal?- cuestiono soltándole para pararse frente él y cubrirlo de los dos morenos –te empeñas en hablar… convencerles cuando soy quien le ha mantenido con vida sin mí no sobrevivirían- grito finalmente y Tony se paro
-ni sobrevivirán…- eso tomo por sorpresa al ente que retrocedió –te necesitan tanto o más que a mí, es cierto que le amo y entregaría mi vida por él y tú les das seguridad una que no sé cómo proporcionarle pero eres nocivo… no piensas en él- apunto a Loki adulto –eres tu quien transgiversar las cosa quien borra memorias y esconde verdades Loki sabe amar, entregarse, sabe ser amado y recibir lo bueno, lo malo pero sobre todo y sabiendo que eres parte de él sabe luchar- dijo y vio al pequeño acercarse al mayor para tomarle de las manos y transmitirle todo ese coraje y valor que a su corta edad poseía, entrega… saltar al vacío sin preguntarse qué habrá abajo pues tenía el apoyo de su familia que siempre le respaldaría y Tony quien ahora era parte de esa familia, el ente volvió su mirada para ver la decisión en ambos
-así que me enfrentaran…- dijo sombrío y molesto –yo que he dado todo de mi por ustedes… insensatos me van a dar la espalda- rugió pero Loki adulto negó sosteniendo con fuerza la mano de su yo niño
-no te daré la espalda ni peleare con tigo al contrario te ofrezco un lugar- extendió su brazo hacia el con la mano abierta –una parte de mi te pertenece y sin ti estaríamos incompletos- el ente retrocedió negando, ¿cómo había ocurrido?, no negó de nuevo volviendo a ver a Tony
-es tu culpa- siseo con un toque de rabia y furia acercándose al mortal que retrocedía –das muy buenos discursos mortal, pero aun a pesar de tan gran avance se te olvida algo- dijo a la vez que tomaba su brazo y o acercaba a él
-¿Qué?- cuestiono con una sonrisa socarrona
-solo eres un simple mortal- y con ello clavo una daga que hiciera aparecer en sus manos, Tony sintió el metal frio rompiendo su piel sin dejar de mirar al ente que sonreía satisfecho, cayo de rodillas con una mano en la herida y otra extendida al frente para terminar el hechizo y que todo regresara a su normalidad.
El pequeño parpadeo observando el campo de entrenamiento extrañado, hacia algunos segundos había jurado que un hombre le había prometido ser su amigo pero ya no recordaba quien, miro a todos lados desconcertado sabiendo que algo estaba mal y de sus ojos las lágrimas comenzaron a correr libres, un nombre, algo estaba atrapado en su garganta y le provocaba dolor, incertidumbre, sus ojos no dejaron de llorar viendo a todos lados sin entender realmente el sentimiento ni lo que era cuando cerro sus ojos y un susurro llego a sus oídos “Tony”, se limpió las lágrimas y subió su mirada al cielo y después decidido caminando al área de entrenamiento.