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It's not crazy por RoronoaD-Grace

[Reviews - 236]   LISTA DE CAPITULOS
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Notas del capitulo:

Holaaa…


¿Qué tal, pastelitos de limón? ¿Cómo les va? Espero que bien… wenuuu yo solo pasaba por aquí a dejarles el nuevo capítulo


A las personas que leyeron el capitulo anterior, infinitas gracias, y a quienes me dejaron su hermoso y sensual review: Say, HiroDuzumaki,  sukisasunaru50 y love sasunaru.  Otros infinitos gracias, me hizo muy feliz saber que les gusto el capitulo… ñlsdfjslkejñslk…


Los personajes no me pertenecen, son del increíble Masashi Kishimoto-sama. Por los posibles horrores ortográficos, dos mil disculpas. Lo reviso siempre, pero ya saben que se me va la onda, y es seguro que más de un par se me fue.


Sin más que decir, excepto que, espero por el ángel, que el capitulo sea de su agrado, los dejo leer.

 


COMO HACE AÑOS


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Sasuke estaba mentalmente estable. Después de pasar horas y horas y horas meditando en lo sucedido hacia dos días en el bosque, llego a una conclusión. Por lo tanto, él estaba tranquilo.


Eran las diez menos quince minutos y Sasuke ya se encontraba en los límites del bosque. Una ventaja era que, su padre y su hermano, estuvieran todo el tiempo en la jefatura y además de que él estuviera de vacaciones. Fugaku le había dicho que aprovechara esos meses, pues cuando diera inicio la universidad, no permitiría que estuviera de vago, y solo aceptaría las mejores calificaciones. Lo bueno era que al menos le había dado ese tiempo para hacer lo que a él se le diera la gana, bueno, más o menos.


Como últimamente hacia, Sasuke había utilizado su sudadera negra con gorro mientras caminaba por las calles de Konoha. Por supuesto, primero había ido a casa de Sakura sin llevarla puesta para que lo vieron yendo allí, luego habían ido con Ino y fue ahí donde se coloco la sudadera, para que las personas tuvieran la impresión de que era un cliente más que había ido a comprar flores, y gracias al gorro no se le veía el rostro y, por supuesto, tuvo que comprar una ramo de rosas pequeño.


Cuando llego a los limites del bosque, se que quito la sudadera y la coloco en un bolsón que llevaba al hombro; las flores se las había dado a una anciana que encontró por ahí. En ese momento estaba recostado contra un árbol, jugueteando con su celular. Espero varios minutos hasta que al fin escucho pasos.


—Hola — saludo Naruto, en sus labios había una gran sonrisa y sus ojitos azules brillaban.


—Hey — Sasuke se alejo del tronco del árbol y fue hacia el rubio. El rubio vestía unos pantalones cortos color beige, y una playera naranja.


Naruto lo observo durante unos segundos; el azabache llevaba un pantalón negro y una playera azul. Sasuke se veía bastante tranquilo, sereno y relajado.


El azabache arqueo una ceja.


—¿Tengo algo en la cara y no me he dado cuenta? — cuestiono.


El rubio rio.


—Es solo que, estas muy tranquilo.


—No veo cual es el problema — se encogió de hombros.


—No hay ningún problema en ello — afirmo —. Disculpa, es solo que creí que vendrías con cara de susto después de lo que hizo Kurama —. Dijo apenado.


Sasuke sonrió de medio lado.


—No estaba muy seguro de que fueras a venir — acepto Naruto.


—¿Por qué siempre dices eso? ¿Tan difícil es de creer que quiero que seamos amigos otra vez?


Naruto se sintió muy mal.


—No te ofendas, pero, si. Me cuesta creer eso después de tantos años — Sasuke no dijo nada, su expresión pasó de la relajación a la seriedad —. No me malentiendas. Estoy muy feliz porque seamos amigos nuevamente. Es solo que he estado pensando en estos días… y en ocasiones creo que Kurama tiene razón.


—¿En qué?


El rubio lo observo unos segundos, luego desvió la vista. Inhalo y exhalo, entonces volvió los ojos hacia Sasuke.


—En que vas a lastimarme.


Sasuke dio un par de pasos y quedo a centímetros del rubio.


—Mi intención no es esa, Naruto — el susodicho bajo la vista —. No quiero lastimarte.


—Lo sé — susurro.


Nadie dijo nada durante un par de minutos. Se mantuvieron en las mismas posiciones, hasta que Sasuke poso una mano sobre los desordenados cabellos dorados de Naruto y los revolvió de forma cariñosa. El rubio levanto la vista.


—Espero que hayas traído traje de baño — sonrió.


—¿Qué soy, una chica? — fingió indignación. Naruto amplió su sonrisa.


Tomo a Sasuke de la mano y tiro de él hacia el bosque.


—Iremos primero a mi casa, a por unas cosas que prepare — informo mientras se adentraban al bosque —. Y no te preocupes, Kurama no va a molestarte esta vez. Ya hable con él.


—Es bueno saberlo — dijo el azabache.


Cuando llegaron a casa de Naruto, Sasuke volvió a sorprenderse incluso después de que ya haber visto el lugar. Y es que la verdad, se sentía cierta magia allí. El rubio le pidió que esperara fuera durante unos segundos y luego se adentro en su casa. Cuando salió, llevaba consigo una cesta para un picnic. Sasuke lo ayudo rápidamente.


—No hace falta — le dijo Naruto —. Ni siquiera pesa.


Sasuke solo se encogió de hombros.


—Como quieras — comento el rubio —. Sígueme.


Se adentraron aun más en el bosque. Conforme fueron avanzando, la maleza se hacia un poco más espesa y las copas de los arboles más tupidas. Los rayos del sol se filtraban levemente entre las ramas.  Había humedad en el aire, pero también estaba bastante acalorado.  El día estaba perfecto para ir a remojarse y hacer un picnic.


En el transcurso del camino, Sasuke no dijo nada, simplemente observaba todo a su alrededor con seriedad, estuvo a punto de caerse un par de veces por no ver donde pisaba, gracias que el rubio no se había dado cuenta. Naruto por su parte, sonreía mientras tenia la vista fija en el frente. A Sasuke le pareció más bien que se aguantaba una carcajada, y de vez en cuando susurraba cosas. Lo cual era motivo suficiente para regresar por donde iba y dejar de hablarle, pero a Sasuke, la verdad, estaba dejándole de importar esas cosas. Pues él iba a ayudarlo.


—¿Sabes que sería genial? — dijo Sasuke —. Que me dijeras que es tan gracioso.


El rubio volteo a verlo y le sonrió.


—Lo siento — era claro que no era cierto —. Es solo que las chicas estaban diciendo cosas graciosas de ti. Sé que no es correcto, pero me da mucha risa.


Sasuke alzo las cejas.


—¿Las chicas? — Naruto asintió.


—Dríades.


El azabache busco en su mente información acerca de las Dríades, según recordaba, eran las ninfas de los robles.


—¿Y qué dicen, si se puede saber?


Naruto se carcajeo.


—Que cierres la boca mientras observes el bosque, o te entraran insectos. Pero sobre todo, que veas por dónde vas, aunque sería bastante gracioso que te cayeras y enterraras el rostro entre las hojas y la tierra.


No hubo falta que Naruto se lo dijera, Sasuke estaba completamente seguro que se había sonrojado levemente. El rubio se carcajeo nuevamente antes de girarse y continuar caminando. Sasuke hizo una mueca hacia la derecha y sin pensar muy bien lo que hacía, o porque lo hacía, le saco el dedo medio a uno de los arboles más próximos.


Entonces una rama de ese mismo árbol, le golpeo la cabeza, haciendo que Sasuke trastabillara hacia el frente y se quejara por el dolor. Se inclino un poco y froto con su mano la parte afectada. Cuando levanto la vista, Naruto estaba riéndose de él.


—Enebro, dice: te lo mereces — le comunico —. Dice también: fue muy maduro de tu parte, sacarme el dedo medio —. Repitió el rubio. Sarcasmo, obviamente.


Sasuke tuvo unas repentinas ganas de salir corriendo, aunque no lo hizo. Estaba comenzando a pensar que todas esas criaturas mágicas lo odiaban. Por supuesto, era una gran tontería, porque no existían.


Pero…


¿Cómo explicar lo recién sucedido?


A la conclusión que Sasuke había llegado, era que sucedían cosas por casualidad, entonces Naruto lo asociaba a actos de estas criaturas mágicas que creía ver. Por ejemplo: Recientemente, Sasuke pensó que Naruto no lo había visto mientras estuvo a punto de caer, pero sí lo hizo. Por el rabillo del ojo lo más probable, y pensó que estas ninfas de los robles se lo habían contado. Así como también lo del golpe con la rama de unos segundos antes. Estaba casi ciento por ciento seguro, que una rama se había caído debido a que ya estaba seca, entonces le golpeo en la cabeza. Naruto lo asocio a un acto mágico y lo de la saña pues, mientras el azabache veía hacia el árbol, el rubio seguramente había volteado a verlo.


En conclusión, «lógicamente», Naruto estaba viendo cosas que no eran.


Su subconsciente estaba protegiéndolo. La pérdida de sus padres le afecto en demasía, y su mente para no sucumbir ante efectos desastrosos en él, y combatir la soledad, le mostro cosas. Tan solo era un niño cuando perdió a sus padres. ¿Qué mejor refugio para él, que crear su propio mundo de magia? Un amigo imaginario no sería suficiente para la perdida que sufrió el pequeño rubio. Para alejarse del pozo vacio en el que podría haberse convertido su vida, creo más que un amigo imaginario.


Eso era lo que pensaba Sasuke.


No…


Eso era lo que quería creer.


Pero ciertamente había cosas que simplemente no podía explicar. Lo de Kurama, por ejemplo. Sasuke ni siquiera sabía cómo había llegado a la conclusión de que en realidad no había tocado nada viscoso, húmedo y caliente ese día en el bosque. Y que la respiración y gruñido que escucho, eran aves. Era tan absurdo que daba risa.


Pero Sasuke estaba desesperadamente intentando negar algo que desde el principio había creído. Quería creer que lo que los médicos le habían dicho era la verdad, quería tener una razón lógica para haberse alejado de Naruto todos esos años. Necesitaba una razón válida.


No quería creer nuevamente.


Se negaba a hacerlo.


No podía aceptar que ese mundo mágico existía, porque si lo hacía. Estaba ciento por ciento seguro que querría correr hacia el. Y si lo hacía, vería cosas hermosas y fantásticas, y sería feliz por ello. ¡Y no podía!... no lo merecía.


No merecía tener esperanza de que su vida fuera mejor.


¿Pero no era su vida mejor, desde que estaba cerca de Naruto?


¿Qué era lo que Sasuke realmente quería logar?


¿Quería ayudar a Naruto, o ayudarse él mismo?


—¿Sasuke? — le llamo Naruto. El azabache sacudió la cabeza y fijo la vista en él.


—Dime


—¿Estás bien? De repente ya no dijiste nada durante minutos — se acerco al oji-negro y poso una mano en su frente —. Nada — dijo para sí mismo —. Enebro, dice: Lo siento por golpearte.


El azabache negó con la cabeza.


—No hay problema — dijo.


Por el rabillo del ojo, observo el árbol, le pareció ver la silueta de una mujer. Parpadeo rápidamente y se abofeteo mentalmente, pues eso no podía haber pasado.


—Vamos — hablo el rubio.


Los chicos retomaron el camino, esta vez, Sasuke observo por donde caminaba, y trataba de no ver nada a su alrededor. En cuestión de unos cuanto minutos más, un sonido peculiar comenzó a escucharse. Naruto apresuro el paso y el azabache le siguió. Rápidamente llegaron a un pequeño rio.


—Por aquí — el rubio lo tomo de la mano.


Caminaron por la orilla del rio hasta que llegaron al lugar donde el agua caía, se acercaron y observaron hacia abajo. Calculando, quizá eran unos quince metros de caída.


Cuando Sasuke observo había abajo, hacia la posa de agua cristalina, lo recuerdos azotaron su mente. Recordó ese día, ese último cumpleaños que había compartido con Naruto. Rieron y jugaron toda la tarde, se la habían pasado increíble. Pero luego, ocurrió el suceso que marco su vida para siempre.


—Ven — Naruto tiro de él y comenzó a descender por un camino empedrado que estaba hacia un lado. Resbalaron un par de veces, pero al fin llegaron hasta abajo.


Sasuke contemplo el lugar. Había rocas de gran tamaño en la orilla, en su superficie había crecido musgo, y cerca de estas había follajes de varios tonos de verde y flores silvestres de diferentes colores. El agua, como ya había visto, era cristalina, y cuando esta se estrellaba desde arriba contra el agua de la posa, creaba un pequeño arcoíris debido a la luz del sol, además que se sentía la briza en el lugar.


El azabache no pudo hacer más que pasar saliva.


—Es hermoso, ¿No? — comento Naruto. Sasuke volteo a verlo —.  Cambio desde la última vez que viniste — el azabache asintió — Aqua ha hecho un gran trabajo — sonrió de forma dulce.


—¿Aqua? — cuestiono Sasuke. Algo le dijo que ya sabía la sabia la respuesta.


—La Nereida de este rio.


Comenzó a caminar, rodeando la posa, Sasuke fue tras él. Pronto, ambos chicos se encontraban justo enfrente de la caída de agua. El lugar era hermoso.


—Es muy amiga de Lea, una ninfa de las plantas. Ella le ayuda a que las flores siempre estén hermosas, pero es Aqua quien mantiene el agua tan cristalina, tan limpia — volteo a ver a Sasuke y le sonrió.


—¿Fue Lea quien te ayudo con las enredaderas de tu casa? — cuestiono.


Naruto rio burlón.


—No — dijo —. Como te dije, fueron las Hadas. Al igual que otras ninfas, Lea está ligada a cierta zona del bosque. No puede alejarse mucho de su hogar.


—Entiendo — el azabache se sintió un tanto estúpido por haber olvidado los de las Hadas.


Sasuke dejo la cesta en el suelo y observo como Naruto caminaba hacia la posa de agua, se quito los zapatos y se adentro en esta. El agua solo le llego a los tobillos, entonces se inclino.


—Hola, Aqua — saludo.


El azabache no vio nada, más que un movimiento de agua cerca de donde el rubio se encontraba. Lógicamente podía tratarse del movimiento que Naruto hacia al estar dentro de la posa y por el agua que caía mas allá. Pero el oji-azul no se movía. Y en cierta forma, el agua solo se removía y mostraba un poco turbia, metros más adelante.


—Él es Sasuke, ¿Lo recuerdas? — Hablo el rubio —. Si, lo sé… hace mucho tiempo — Naruto volteo a verlo —. A veces estoy seguro que sí, otras veces no tengo idea —. Sasuke solo alzaba las cejas —. Esperaba que nos permitieras zambullirnos un poco… prometo que no dejaremos basura — sonrió —. Gracias Aqua.


Sasuke escucho un chapoteo, luego Naruto se enderezo y giro hacia él.


—¡Listo! — comunico, sonreía ampliamente.


Fue hacia él oji-noche.


—¿Quieres decir que ni siquiera estabas seguro de que Aqua iba dejarnos nadar un poco?


—Contaba con ello — le saco la lengua —. Desayunaste, ¿Cierto? — Sasuke asintió —. Genial, porque primero nos zambulliremos, luego comeremos lo que prepare.


—Por mí no hay problema — Acepto Sasuke.


Naruto sonrió una vez más antes de quitarse la playera naranja que estaba usando. El azabache casi se iba de espaldas cuando vio lo que hacía. Le fue imposible no quedársele viendo. Su piel levemente bronceada le provoco ganas de pasar las yemas de los dedos sobre ella. Su cintura hizo que quisiera estrecharla con sus manos. Naruto era delgado, pero de una forma esbelta y muy atractiva. Observo sus delgados brazos y los huesos de la clavícula, Sasuke quiso besar su cuello y lamer el lóbulo de su oreja. Quería besar esos labios y acariciar esas sonrojadas mejillas…


—Sasuke — dijo el rubio, sentía su rostro arder —. Estas poniéndome nervioso.


Sasuke se abofeteo mentalmente para salir de su ensoñación.


—Disculpa — carraspeo la garganta.


Sacudió la cabeza, tratando de alejar todo tipo de pensamientos indecoroso, que no tenía idea a que se debían. Luego se despojo él de su playera, y fue el turno de Naruto para quedarse embobado con el cuerpo del azabache.


Su piel era tan blanca y tan libre de imperfecciones. Sus brazos se veían tan fuertes que Naruto tuvo esa necesidad de ser abrazado por ellos. Contemplo sus pectorales y la firmeza de su abdomen. Ese cuello. Esos labios, Naruto se pregunto si eran suaves. Observo sus ojos, esos hermosos ojos negros. Sasuke tenía una mirada tan profunda y seductora. Tan…


—Naruto — le llamo Sasuke, en sus labios había una sonrisa burlona —. Estas poniéndome nervioso.


El rubio enrojeció, desvió rápidamente la vista luego de disculparse. Sentía su rostro arder por la vergüenza. Inmediatamente, rodeo la poza de agua y fue hacia una piedra que estaba un poco en alto, sin pensarlo dos veces, salto hacia el agua, esta brinco en todas direcciones cuando el rubio se sumergió. Estuvo bajo el agua durante unos segundos, permitiendo que su cabeza se enfriara, cuando salió a la superficie y fijo la vista donde se encontraba Sasuke, no lo vio.


—¿Buscas a alguien?


Naruto dio un brinco en el agua. Desvió la vista hacia la piedra de la cual había saltado un par de minutos antes. Sasuke estaba allí, ya no usaba el pantalón negro, en ese momento llevaba una pantaloneta color azul marino e iba descalzo.


Se lanzo a la poza y el agua brinco hacia el rostro del rubio.


—El agua esta deliciosa — dijo, cuando salió a la superficie —. Aqua realmente hace un gran trabajo — comento.


Sasuke sabía que estaba mal hablar de ese modo, como si realmente creyera en la existencia de la Nereida. Era solo que, como le había dicho a Sakura, la mejor forma de acercarse a Naruto era por medio de las cosas que le gustaban, o en ese caso, en lo que creía.


Por supuesto, ni Sasuke tenía idea de lo que él mismo creía y lo que no.


—Aqua, dice: gracias — Naruto sonrió.


—Gracias a ti, Aqua, por permitirnos nadar en esta magnífica agua.


De repente, Naruto comenzó a reír de forma nerviosa. Sasuke pudo ver un par de arrugas en su frente, señal de que estaba un poco molesto.


—¿Qué sucede? — le cuestiono.


—Al parecer, Aqua se ha enamorado de ti — respondió.


«Oh», pensó el azabache. Sus labios se curvaron en una sonrisa que, a Naruto, le pareció de lo más seductora.


—¿Celoso de ella?


Naruto estuvo seguro que de haber estado bebiendo algo, lo habría escupido todo en el rostro del azabache. Sintió su rostro arder.


—¡Puts! ¿Celoso? ¿Yo?... Al parecer, Enebro te golpeo más fuerte de lo que pensaba.


Sasuke se que le quedo viendo a los ojos.


—Sí, lo que digas — arqueo una ceja.


El rubio entrecerró los ojos. Pataleo y braceo y se acerco mucho más de lo que ya lo estaba al azabache.


—¿Qué se supone que significa eso? — le dijo al oji-noche.


—Lo que se supone, que debe de significar.


Naruto frunció los labios en un puchero, y luego comenzó a tirarle agua en el rostro a Sasuke, este no se quedo atrás, y también comenzó a lanzarle el vital liquido al rubio. El oji-azul se reía a carcajadas mientras chapoteaba y el agua salpicaba en todas direcciones.


—¡Ya! ¡Está bien! ¡Detente! — pidió Naruto, mientras continuaba sonriendo.


Como buena obra, Sasuke se detuvo. Pero en el instante siguiente, el rubio ya se había balanceado hacia él y lo zambullo con todas sus fuerza. Sasuke en cuestión de segundos, se encontró bajo el cuerpo de Naruto, sumergido completamente bajo el agua. Debido a la cristalina que se encontraba esta, fue capaz de observar el fondo de la posa, las rocas y algunos peces que nadaban en ella.


Entonces, a unos metros del lugar donde él se encontraba sumergido, una figura fue tomando forma, una silueta, la silueta de una mujer. Lo primero que Sasuke observo, es que era hermosa, sus cabellos blancos se mecían en el agua, sus ojos eran verdes, y su piel muy blanca. Lo segundo que noto, es que ella le sonreía y saludaba con su mano derecha.


«Hola», dijo una voz suave y dulce en su mente.


Durante unos instantes, se quedo en shock. Sasuke pensó que estaba alucinando. Pues no podía ser cierto lo que sus ojos veían. Pero, ¿realmente podía la mente humana crear ese tipo de visiones? ¿Cómo era posible que pudiera ver algo tan claro, tan nítido, y esto no fuera real?


Tenía muchas cosas en la cabeza en ese instante, sin embargo, en su mente pronuncio dos simples palabras.


«Hola, Aqua». La sonrisa de la Nereida se amplio.


Aqua jugueteo con el agua, lanzo una corriente hacia Naruto y él cayó hacia un lado permitiendo que Sasuke saliera a la superficie dando una gran bocanada de oxigeno. Cuando sus ojos se encontraron con los azules del rubio, el chico sonreía. Sasuke no pudo evitar compararlo con la hermosa Nereida. Le sorprendió lo mucho que antes sus ojos, Naruto le ganaba a Kellie en belleza.


Sasuke observo a su alrededor, no veía nada diferente, no veía criaturas mágicas por doquier, a como lo hacía Naruto. Se replanteo la idea de que quizá si estaba alucinando. Pero un chapoteo en el agua un par de metros por detrás de Naruto, hizo que fijara sus ojos en dicho lugar.


Aqua lo observaba con una sonrisa en sus labios. A la luz del día, su piel era incluso más blanca.


«Quiero que sepas que confió en ti — dijo Aqua, y su voz sonó nuevamente en la mente del azabache —. Gracias por creer en mí. Es agradable tener a otra persona con quien hablar»


¿Creer en ella?


¿Entonces realmente creía en la existencia de Aqua?


El azabache sintió sus ojos arder, comenzó a reír. Naruto se le quedo viendo un tanto confundido, pues parecía que Sasuke no sabía si llorar o sonreír.


Se suponía que él iba a ayudar a Naruto, se suponía que él le iba hacerle darse cuenta que lo que creía ver, no era real. Se suponía que le iba a mostrar la verdad.


Pero no. ahí estaba Sasuke, sintiéndose como cuando era niño, creyendo que Naruto era especial y anhelando que todas las criaturas del bosque confiaran en él, para que le permitieran poder verlas… así que como Aqua confiaba en él. En su subconsciente siempre lo supo, siempre supo que todo lo que Naruto decía ver, era real, pero quiso negárselo porque después de lo que le había ocurrido a su madre, Sasuke sentía que no tenía derecho a ver tan hermosas criaturas. No merecía permanecer al lado de una persona tan increíble como Naruto. No le sorprendía que a pesar de lo increíble que pareciera, no le fuera difícil en realidad, creer en la magia que había en el bosque. Pues siempre había creído ella, y solo había estado tratando de engañarse a sí mismo.   


Sasuke en ese momento de se dio cuenta, se dio cuenta que él siempre tuvo razón. No bastaba creer en ellos para verlos, había que ganarse la confianza de esos seres mágicos si realmente quería poder apreciarlos en todo su esplendor.


Y Sasuke no podía esperar para verlos a todos.


 

Notas finales:

Y eso jue todo…


¿Y qué tal?


¿Qué les pareció?


¿Les gusto?


Ñlsdkfjañsieñsiejsesjñe pues andele, Sasuke, tanto que se empeñaba en negar lo que siempre creyo, que pufffff, en vez de hacer que Naruto dejara de creer, el cabeza de cacatúa termino creyendo más firmemente… hsdñla hehe.


Disculparan ustedes los horrores ortográficos, no me han dado mis lentes así que medio medio miro que rayos escribo… hahaha, naaah.


Por cierto mi inshe Whatsapp: +502 58875928. Por si les interesa aclarar alguna duda. O preguntar alguna tontera. O solo hablar conmigo, me siento solita aquí en mi casa sin amigos cerca, y nadie que me visite… :/ naahh haha… dice Mofo.


Disculpen también que me tarde en actualizar. Las prácticas de violín tienen el noventa por ciento de mi tiempo… y me encanta. Sjdfñlaskjdñ ¿Ya les había dicho que puedo tocar trompeta? Dlfkjsñdk


Mañana como a esta hora, les subo la actualización de «Corriendo del pasado»


Yo espero y el cap., si les haya gustado, ya saben que pueden hacérmelo saber por medio de un hermoso review, el cual responderé con mucho gusto, y espero que esta vez no se borren. Si no les gusto, igual pueden hacérmelo saber, yo acepto sus review de todo tipo. Solo no me insulten mucho que mi Kokoro es frágil y delicado ante estos.


Hasta la próxima, que ángel cuide de su inshes almas, besos y abrazos para todos, amor y paz…


Bye.


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