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A SHORT LOVE por Taoris4ever

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Notas del capitulo:

Heaven

 

El velorio fue demasiado tormentoso, afortunadamente Suho, tuvo ahí a sus amigos y padres para ayudarlo a superar aquello.

En un momento de la tarde, él tuvo el suficiente valor para acercarse a los padres de Lay, sin embargo al estar frente a ellos no supo que decir, pero los adultos solo lo abrazaron, entendiéndose mutuamente debido a que el sufrimiento que pasaban era similar. Tal vez el consuelo que entre ellos se dieron fue lo que le dio un poco más de agallas, para finalmente acercarse al ataúd a ver el cuerpo de su amado.

Verlo ahí tan pacífico y sin ninguna mueca lastimera en su rostro, lo hizo pensar en las veces que lo vio dormido en el hospital, y por un momento olvido la realidad.

—Mi ángel…—Se acercó a darle un último beso en sus labios fríos, mientras varias de sus lágrimas caían en la cara de Lay. Una de estas cayó en sus ojos y se deslizó lentamente por su mejilla, por un momento se dio la impresión que esa lágrima pertenecía al propio Yixing.

—Prometo encontrarte en nuestras otras vidas, y cuando eso suceda, no dejaré que te vayas de mi lado. —Subió sus manos a las mejillas de la persona que ama, y limpió sus propias lágrimas del rostro contrario, con tanto cariño, que a las personas que lo vieron se les hizo un nudo en la garganta—. Por siempre te amaré XingXing. — Un último beso y se alejó de ese lugar.

El momento del entierro llegó inevitablemente, él casi no lo resistió, incluso sus rodillas fallaron cuando la tierra empezó a ser echada encima de la caja. Si él no cayó estrepitosamente al suelo, fue solo por Baek y Chan, quienes lo sostuvieron de cada brazo.

Cuando todo terminó, él se acercó a la tumba ya sellada, y con un último “Te amo”, y una rosa blanca depositada en el lugar en el que ahora él descasaba, Suho se despidió de la persona que fue su más grande regalo, aquella que le enseñó a mandar a la lógica a volar. Aquel que le hizo ver lunas, estrellas, galaxias, y universos con uno solo de sus besos y abrazos.

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Los días naturalmente pasaron, los minutos no se detuvieron para él. Sin embargo Suho, había perdido su sonrisa, él ya no era el mismo. Todos sus compañeros lo notaron, pero nadie se atrevió a decir nada.

Su familia y sus amigos lo trataban de animar, pero con cada día que pasaba eso parecía más que imposible. Suho se había encerrado en sí mismo y después del funeral, él no se había permitido llorar más, alegando: “esto es lo que él hubiera deseado que yo hiciera”.

El pequeño Suho ahora se concentraba más en sus estudios, dejando de lado el salir con sus amigos, y el tiempo de calidad con sus padres. Ya nadie sabía qué hacer, todos los que lo querían estaban desesperados por él, pero finalmente después de dos semanas un pequeño cuaderno entregado por alguien conocido fue la respuesta que Jun necesitaba para seguir adelante.

Nadie se esperó ver de nuevo a Chen, es decir desde el funeral, él junto a su familia habían desaparecido totalmente, y ni siquiera el teléfono habían contestado, porque sí, Suho intentó varias veces contactarlos, aun aferrándose a lo único que le quedaba de Lay.

A Chen lo encontraron en la salida de su colegio, con el uniforme de un instituto diferente, una funda de regalo en sus manos, su cara estaba demacrada y algo pálida. Se notaba que a él también le estaba afectando en demasía la ausencia de Lay.

—Hola —saludo con un amago de sonrisa a Suho y sus amigos, con paso decidido se acercó hasta el más pequeño y le extendió la funda de regalo—. Mi hermano quería que tuvieras esto. 

Suho abrió de sobre manera los ojos, impresionado, con manos temblorosas tomó la bolsa, mientras sus amigos se tensaban a su lado, no creían que seguir trayendo a Lay a colación le fuera hacer algún bien.

El muchacho vio dentro de la funda, donde se encontraba un cuaderno mediano, que parecía más diario que otra cosa. Al leer la etiqueta de la portada, su respiración se cortó y alzó la mirada encontrándose con los ojos de Chen, quien entendió la pregunta muda que le hizo.

—Mi hermano estaba preparando esto para el día de tu cumpleaños, aunque sabía que probablemente él no estaría para ese momento, me pidió que te lo entregara ese día en específico, pero antes de irse…—Su voz tembló—, me dijo que te lo entregara previamente, él creía que esto tal vez te ayudaría en tu proceso de duelo.

Suho aferró la bolsa a su pecho, con los ojos cristalinos, pero rápidamente apartó las ganas de llorar. Chen le tendió una carta esta vez. 

—También me pidió que te diera esto —Suho tomó la carta entre sus manos—, no la leas hasta que hayas terminado ese diario. Mi hermano no la pudo escribir con su propia letra, así que en su lugar encontraras la mía, pero cada palabra escrita ahí, son las líneas exactas que él me pidió que escribiera, sus pensamientos.

—Gracias. —Apenas fue un susurro, pero el contrario lo escuchó. Chen asintió y empezó alejarse sin decir más, pero a unos pocos pasos se detuvo y regresó todo el camino ya recorrido.

El abrazo que él le dio a Suho nadie se lo esperaba, pero el contrario lo correspondió. —Recuerda que no estás solo, tienes a tu familia y amigos para ayudarte a superarlo…—Su voz titubeo por un momento—, y a mí. Me tienes a mí y a mis padres.

Esta vez sí se despidió, e inmediatamente después los tres amigos retomaron su camino a casa.

Como en los últimos días, Chanyeol y Baek acompañaron a su residencia a Suho, habían tomado esta rutina en vista del estado en el que se encontraba su amigo, pero a diferencia de días anteriores, el camino fue silencioso, esta vez no trataron de sacarle conversa y animarle, porque notaban que hoy más que nunca Suho estaba metido en sus pensamientos, en los cuales no les dejaría entrar.

Al llegar a la puerta del hogar de Suho, este empezó a ingresar, sin decir nada, pero la mano de Chanyeol lo detuvo.

—¿Estarás bien? —Cuando Suho lo miró sin comprender, él señaló a la funda de regalo en sus manos—. No estoy seguro de que ver eso te haga bien anímicamente.

—Estaré bien. —El más bajo le dio una sonrisa tranquila—. Él hubiera querido que este bien.

Baek quien estaba al lado de su novio suspiró y negó. —Suho, él no hubiera querido que fingieras estar bien. Lay hubiera querido que lo superaras y siguieras con tu vida pero de verdad.

—Eso estoy haciendo. —Replicó con la voz cansada y agotada.

—No —dijo firme Chanyeol—. Te engañas a ti mismo, diciendo “estar bien”, pero no es así, te estas consumiendo por dentro, porque no compartes con nadie más lo que de verdad sientes, porque no nos dejas ayudarte.

—Escucha Suho, el dolor no se va a ir de un día para otro, y es normal —Baek lo abrazó—, debes entender eso y dejar que tus emociones finalmente encuentren una salida. Nadie espera, ni quiere que seas fuerte, estamos aquí para ti.

Chan lo despeinó cariñosamente y le brindó una sonrisa tranquilizadora. —Sabes Suho, el dolor a veces es menos si lo dejas fluir, sí no te opones a tus emociones, estás dejaran de asfixiarte lentamente y abandonaran por completo tu cuerpo.

—Ya lloré lo que debía. —responde obstinadamente.

—A veces llorar unos días no basta. —Baek tomó sus hombros y lo miró directo a los ojos—. No te juzgaremos si vas por ahí con los ojos llorosos, pero deja de fingir que nada ha pasado. Amigo estamos dispuestos a ser tu pilar y seremos tu paño de lágrimas el tiempo que quieras.

—Gracias. —Fue lo único que contestó Suho, ya que sentía que ninguna palabra sería suficiente para poder expresar toda la gratitud que tenía hacia sus dos amigos en ese preciso instante, por estar a su lado, por no abandonarle.  

Y en un acto sincero los abrazó fuertemente, ellos recibieron este gesto gratamente, después de separarse los despidió a ambos, dándoles empujoncitos leves hacia la acera, haciéndoles entender que necesitaba estar solo en ese momento, los dos sin poder objetar nada solo suspiraron, antes de verlo ingresar a su casa, una mueca de preocupación se marcó en ambos jóvenes rostros.

Suho al ingresar a su hogar fue inmediatamente hacia la ventana de la sala, donde pudo ver a sus dos amigos partir agarrados de la mano. Sus ojos brillaron con un vestigio de felicidad al contemplarlos, le alegró tener amigos así, pero sobre todo le contentó saber que se tenían entre ellos, y se deleitó del amor tan bonito que ambos compartían, deseo con todas sus fuerzas que jamás pasaran por algo como lo que él estaba viviendo.

JunMyeon subió a su cuarto lo más lento que pudo, se recostó en la cama y junto a él colocó la bolsa de regalo, por varios minutos solo se dedicó a observarla, sin animarse a abrirla. Hasta que finalmente decidió sentarse en la cama, y con la espalda apoyada al respaldo de esta, sacó el diario que su amor había hecho para él.

“Mis más dulces recuerdos.” Eso es lo que rezaba en la portada y por un momento se permitió sonreír, porque también allí decía: “Propietario: Zhang Yixing”.

Portada.

‘No que era un regalo para mí’, pensó mientras un atisbo de diversión iluminaba su rostro.

Abrió el diario y lo primero que lo recibió fue una bonita letra. “Mi querido Suho…”  Respiro profundo antes de continuar.  

“Este pequeño cuaderno es mi regalo para ti, por tu cumpleaños, probablemente no estaré para ese momento, pero sé que te llegará. Seguramente en este instante estás pensando en algo como: ‘¿Por qué si es tu regalo, mi nombre se encuentra cómo si fuera el propietario de este diario?’, pues bien lo puse así porque lo que te estoy regalado es mucho más que simples fotografías, te estoy regalando mis más preciados recuerdos y pensamientos cuando estuve a tu lado, aquellos que solo me pertenecían a mí, pero ahora también a ti, cariño.”

Suho pasó la primera hoja de esa dedicatoria y seguidamente se encontró con un mundo de recuerdos que estrujó su corazón poco a poco, llevó una mano a su boca, cuando un sollozo amenazó con salir de sus labios.

“La primera vez que te vi, supe que ibas a ser especial para mí…”, así comenzaba la siguiente página, y más abajo de esta frase había un lindo dibujo de él convertido en conejito. “Ese día no pude evitar pensar que te parecías a un lindo conejito, que debía ser cuidado y tratado con la mayor delicadeza posible.”

Hoja 1

Las siguientes páginas estaban inundadas de fotografías de cada una de sus citas, y en ellas había pequeños pensamientos de Lay, que llenaban su corazón de nostalgia porque cada palabra le recordaba la razón por la cual se había enamorado de él, atesoró en su mente todo, incluso las frases más raras que se encontró ahí.

Hoja A y B

“Tu sonrisa es la más cálida…”

Hoja 2

“Siempre ame tu sonrisa, porque cuando la veía mi corazón adquiría una calidez inmensa, y siempre me daba muchos ánimos para continuar con mi tratamiento. Nunca quise ocultarte mi enfermedad, pero fui egoísta por primera vez en mi vida, y no te lo dije porque no quería que te alejaras de mí, esa es la verdad. Enserio yo creía que iba a funcionar el tratamiento, pero no lo hizo…”

 “Cariño sonríe siempre por favor, que tu sonrisa no desaparezca de tu pequeño rostro”

En una página encontró la foto de él junto a Minseok y Sehun. En está Lay había escrito lo siguiente: “El día que los conociste, tuve miedo de que no te cayeran bien, por su historia algo irreal para tu lógica. Me alegra que hayan congeniado tan bien. Amor, confía en ellos, te ayudarán de aquí en adelante a superar esto.”

Hoja 3

Él acaricio la foto y sonrió nostálgicamente, tal vez no debería dejar de ser amigo de ellos solo porque Lay ya no está.

La siguiente página estaba titulada como: “The Bitch”  y en esta se encontraban fotos de cuando se fueron a la playa, no entendió porque Lay pondría ese título en esas fotos, hasta que se fijó en el pie de página y soltó una gran carcajada a pesar de sus ojos llorosos.

“Se supone que debía decir en el título ‘The Beach’, pero adivina quien se equivocó y no quería arrancar ninguna hoja de este diario. Lo siento cariño”

Hoja 4

Solo su novio podía hacer eso, él definitivamente siempre fue único. En realidad fue la persona más hermosa que conoció en su vida.

Hoja 5, 6.

En las demás páginas se encontró con fotos de todos juntos, pero no encontró ninguna foto de Lay y él en la playa, y eso lo entristeció un poco más, porque esas fotos eran sus preferidas.

Hoja 7, 8.

Cuando llegó a la última página dedicada a ese día en especial, se encontró con unas fotos de él y Chen juntos.

“Mi hermano puede que sea un tanto fastidio, a veces infantil y algo tarado cuando se lo propone (parece que no lo quisiera XD), pero en fin, él es alguien en quien yo confió ciegamente.”

“Le encargue cuidarte cuando yo no este, y sé que lo hará, por favor cuídalo tú también a él. Chen no es tan fuerte como aparenta, pero entre los dos y con ayuda de nuestros amigos y familia, sé que ambos podrán seguir con su vida normalmente”

“PDT: Los amo a los dos.”

Hoja 9

Las páginas fueron pasando una a una y a ratos una sonrisa boba se le formaba en sus labios por las ocurrencias de Lay, había ocasiones en las que una lágrima silenciosa bajaba por sus mejillas, y otras en las que fruncía el ceño junto con los labios en un gesto infantil por haberse vuelto tan predecible para su adorado XingXing.

Hoja 10

Con el paso de los segundos el pequeño diario se fue acabando y cuando tan solo faltaban cuatro hojas para terminar, su respiración se aceleró y sus manos temblaron.

“Hacer el amor…”. Ese era el título de esa página, y debajo de este había una foto de él dormido en el sofá, ese domingo que ellos pasaron juntos.

Hoja 11

“Sabes fui un desgraciado el día que te hice el amor. Ese día yo me enteré de que probablemente el tratamiento fuera ineficaz, estaba tan desconsolado y triste, que solo quise estar contigo. No planee hacer lo que hice, pero ese día necesitaba estar unido a ti de muchas maneras, física, espiritual y emocionalmente. Te quite algo que probablemente no era para mí, pero no me arrepiento, porque fue la noche más especial de mi vida. Créeme Suho, esa noche dejamos de ser dos individuos y fuimos uno solo en diferentes aspectos, tanto así que el universo se puso celoso de nosotros, por la conexión tan fuerte que tuvimos.”

“Perdón por hacerte sufrir tanto y hacer con mis acciones que duela más mi partida.”

“Te amo, trata de vivir. No te quedes estancado, llora todas las lágrimas que debas, pero cuando sientas que ya no queda ninguna, levántate y no te cierres a las oportunidades que la vida te va a seguir dando, porque estoy seguro que en un futuro alguien nuevo llegará a ocupar mi lugar. Así que no te niegues a aceptar el amor nuevamente. Cariño vive al máximo por los dos.”

Las lágrimas recorrieron a borbotones sus pálidas mejillas, hasta terminar en algunas de las hojas del diario, pasó la siguiente página con el corazón acelerado y un nudo en la garganta.

En esa hoja se encontró con pequeñas notas unidas a esa página por un pequeño clip, que rezaba lo siguiente: “Cuando sientas que más me necesitas lee esto, por favor”.

Hoja 12

Notas

Cuando terminó de ver las notas sus manos temblaban excesivamente. Suho tuvo que detenerse, porque no creyó poder seguir con ello, además en cierta manera no quería ver las últimas páginas, porque no quería que ese diario se terminara. Tomó valor y finalmente se atrevió a ver la última página.   

“El paraíso…”. Después de ese título se encontraban varias fotos del atardecer que vieron en ese faro. El lugar que Lay tanto amaba, y que para él se convirtió en un sitio donde el dolor brotó en forma de suplicas a su novio, para aceptar un tratamiento que solo lo hizo sufrir.

“Cariño, esta página no estaba planeada en un principio, pero decidí escribirla en agradecimiento al esfuerzo que hicieron todos por llevarme hasta allí.”

“Amo ese paisaje y me alegra haberlo podido ver con la persona que más amo en esta vida.”

“Pensé mucho lo que me dijiste está tarde y decidí aceptar la quimioterapia. No quiero que pienses que no soy capaz de hacerlo todo por permanecer a tu lado, porque eso es mentira. Suho si yo pudiera vendería mi alma a cualquier desgraciado que se me apareciera por permanecer a tu lado, pero no lo puedo hacer.”

Hoja 13

“Así que al menos puedo complacerte con hacer lo que me pides, aunque sé que no funcionará, pero al menos quiero brindarte la tranquilidad de saber, que yo morí habiendo agotado todas mis posibilidades de tratamiento. Que no había más posibilidades de salvarme, porque no quiero que en un futuro pienses: ‘Lay se hubiera salvado de haber aceptado la quimio’, no quiero eso cariño.”

“Yo creo que las personas estamos aquí por algún motivo especifico, y cuando termínanos ese propósito es momento de partir. Así que mi momento llegó y no temó a la partida, sin embargo haré mi último esfuerzo por permanecer a tu lado.”

“Pero sí aún después de esto llegó a morir, mantén presente estas tres cosas en tu mente. Vive, ama y se feliz, no me lleves como una carga o un recuerdo doloroso, llévame como una experiencia bonita que te ayudó a creer en el amor sin lógica.”

“Por siempre tuyo, Lay.”

El pequeño diario tenía más hojas, pero ya sin uso. Cerró el cuadernito entre hipidos, y sollozos y seguidamente tomó la carta que le había dado Chen, abrió el sobre y cuando saco la carta un pequeño collar cayó en su regazo.

Lo tomó en sus manos y vio la inscripción. A pesar de que era sencillo, también era muy hermoso, Suho sonrió al darse cuenta que en el collar estaba grabado el apodo que él le había dado. “Conejito.  Ama.” Dos simples palabras, que expresaron mucho para Jun. Empezó a leer la carta después de que se colocó el collar.

Collar.

“Cariño, ya te dije en el diario la mayoría de cosas que quería decirte, y si le pido a mi hermano que escriba esto, es solo para decirte tres cosas más.”

“La primera es que te quiero pedir perdón por todo, primeramente me disculpo por no aguatar más tiempo. En este preciso momento no me encuentro bien, sé que pronto llegará la muerte a mi puerta, es cuestión de solo segundos, así que te pido perdón por no poder despedirme de ti personalmente y verte una vez más.”

“Por la otra razón que me quiero disculpar es por no poder cumplir las promesas que alguna vez te hice. Te prometí no lastimarte nunca, pero lo hice. Te prometí cuidarte siempre y no lo logré. Realmente hubiera deseado poder cumplir cada una de mis palabras, pero la vida no me alcanzó.”

“La segunda cosa es un pedido especial. Conejito por favor no te conviertas en la Lou de nuestra historia. No quiero que te niegues al dolor y que solo finjas superarlo, yo quiero que realmente encuentres consuelo después de todo esto, a tu tiempo, no impidas el desahogo que necesita tu alma. Cariño es normal sufrir cuando alguien querido parte, así que desahógate todo lo que quieras, insulta, llora, haz una rabieta, pero una vez hayas vaciado todos esos sentimientos sigue con tu vida sin arrepentimientos.”

“Y lo último es que te quiero agradecer por haberme hecho la persona más feliz en estos casi cinco meses que te conocí, el tiempo fue corto, pero lo hemos aprovechado al máximo. Gracias por amarme cariño. Gracias por dejarme disfrutar al máximo este corto amor.”

“Te ama y amará por la eternidad, Zhang Yixing.”

—Te extraño —murmuró, con la voz rasposa de tanto llorar. Suho se abrazó al diario, a la carta y al collar, y lloró como lo había estado deseando desde hace mucho, exteriorizando finalmente la rabia y dolor. Esta vez no se contuvo como lo estuvo haciendo antes, lo dejó salir todo, hasta que sus ojos se volvieron por completo rojos y las lágrimas parecieron acabársele.

Esa noche Suho durmió con lágrimas aun resbalándole por las mejillas, pero con una apacible sonrisa, que demostraba que su corazón estaba un poco más liberado de todo el dolor que él mismo se encargó de encerrar bajó llave después de la muerte de su amado.

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Notas finales:

Holis, primero quiero disculparme por la demora, pero realmente la semana pasada fue complicado para mí poder actualizar, debido a mis ocupaciones, tuve prácticas en dos diferentes hospitales, además de clases, deberes y pruebas, así que era muy asfixiante para mí ocuparme de otras cosas que no fueran mis estudios, aparte de cosas personales :)


En realidad ahora mismo debería estar estudiando, pero no quise retrasarme más... en fin espero que les haya gustado y espero que no les haya parecido tedioso o repetitivo, como ya se habrán dado cuenta la canción de arriba fue parte de mi inspiración para este fic... en realidad me esforcé mucho por este capi, espero que haya salido bien y sepan disculpar mis errores...


Les quería preguntar, ¿les gustaría leer una parte de la historia que fue eliminada?, originalmente está iba a ir en el capi donde Lay fallece, pero la consideré tediosa y la quite, pero cayendo en cuenta hay partes que quedan sin explicar, y me gustaría que ustedes me ayudaran a decidir si debe ser publicada, sería como un extra... la publicaría el fin de semana y tomaría en cuenta sus opiniones para dejarla o quitarla... en fin gracias por su espera :)


Como habrán notado algunas de las imágenes que cree para la historia dicen lo mismo que en la redacción, pero otras no, aunque sin verlas se entiende de todos modos la historia, espero que les haya gustado las misma.


En mi página de Face pueden ver el diario completo. AQUÍ


Bybye Gracias por leer :)


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