Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"El ultimo grano de arena" por KarinUchiha1

[Reviews - 55]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Luego de casi 3 meses sin escribir esta fic (que esta casi muerta, nadie la pela por aqui pero me gusta publicarla) ya le tocaba y ahora si tenemos aqui un lemon tierno por parte de Naruto y Gaara.

Espero me haya salido bien, porque es el primero que escribo de Naruto (de marvel creo que ya me volvi una experta 😆) en fin aqui el fic.

Recomendacion musical:

halsey - not afraid anymore

Naruto…
Cargue a Gaara, saltando entre edificios de arena, Gaara no dejaba de abrazarme el cuello y yo no podía de dejar de acercarlo más a mí. Ya estaba impaciente.

Llegamos al dormitorio de Gaara, recosté a Gaara en la misma bolsa de dormir donde habíamos dormido tan solo la noche anterior, trate de dejarlo en la bolsa de dormir pero él no dejaba de abrazarme el cuello y la vez no dejaba de temblar.

Naruto: ¿Estas bien? Gaara

Gaara: No lo sé, no sé qué esperar

Naruto: Yo tampoco pero –logro hacer que Gaara se soltara separándose un poco- yo empezare a tocarte un poco y si no te gusta, me detendré de inmediato.

Desabroche un poco la ropa de Gaara dejando al descubierto su cuello, aun nervioso empecé a darle besos a la mejilla bajando lentamente a su cuello, la dulce piel de Gaara estaba adictándome todos mis sentidos empezando a perder un poco la cordura llegando a lamer un poco su cuello sobresaltando a Gaara.

Naruto: -se separa un poco de Gaara- ¿Quieres que me detenga?

Gaara:-toca su cuello con la mano- Se sintió cálido, estaba asustado pero no quería que te detuvieras, yo quería mas.

Naruto: ¿Seguimos?

Gaara no respondió, solo asintió la cabeza dejando que lo siga desvistiéndolo, dejándolo semidesnudo volví a tomarlo de las mejillas volviéndolo a besar, sintiendo el dulce sabor de los labios de Gaara ahogándome con su boca solo para sentir todo el placer de sus besos. Gaara acepto aún más mis besos acercándose más a mí, poniendo sus manos en mis hombros y ambos perdidos en nuestras miradas de deseo cerrando los ojos perdiéndonos solo en el deseo de los besos. Rodee con mis manos su cintura acercándolo a mí, intensificando más el beso. La exigencia se volvía intensa, los besos ya no eran suficientes, mis manos se soltaron de su cintura empezando tocar la espalda de Gaara provocando que él se separa del beso de golpe abrazándome y recargando su frente en mi hombro de forma muy vergonzosa. Pensé que me rogaría que me detuviera, pero mientras más lo tocaba más se aferraba a mi espalda.

Gaara: Naruto…-susurra en su odio- ¿podría quitarte la ropa también?

Naruto: -avergonzado- Claro…

Nos separamos un poco y Gaara tomo el zíper de mi chaqueta, él estaba muy nervioso intentando bajar el zipper pero poniendo mis manos con las suyas lo ayuda a bajarlo quitándome la chaqueta, el resto lo hice yo quitándome la camisa que tenía bajo la chaqueta quedando de igual manera semidesnudo.

Gaara: -avergonzado- ¿Puedo tocarte?

Naruto: Te dije que no tenías que preguntar

Gaara toco mi cuello bajando por mi hombro derecho hasta mi pecho empezándome a acariciar en su totalidad, se acercó más a mi poniendo sus brazos a tras de mi abrazándome recargando su rostro de lado frontal en mi pecho.

Gaara: Puedo oír tu corazón, es cálido –cierra sus ojos- nunca había sentido esta calidez antes, me siento distinto ahora.

Naruto: -corresponde el abrazo- Se llama, sentirse amado.

Gaara: ¿Tu sientes lo mismo ahora?

Naruto: Si –abraza con más firmeza a Gaara- me siento amado.

No me había sentido así de querido, ni siquiera por mi equipo, llegue a dar más de lo que dieron, pero en Gaara es distinto, él no me ofrece la gran cosa pero siento que cuando la ofrece, lo hace de lo más profundo de su ser.

Aun abrazado, recosté a Gaara en la bolsa de dormir y mirándonos el uno al otro volví besarlo con más fervor que nunca, nuestro deseo creciendo, nos comíamos a besos y de golpe Gaara se detuvo preocupándome.

Naruto: ¿Que sucede?

Gaara: Algo, en mis pantalones –mira hacia abajo- mi amm…

Naruto: -avergonzado- Amm, estas excitado…

Gaara: ¿Eso es malo?

Naruto: -ríe un poco poniéndose la mano en la cara- Realmente eres muy inocente Gaara.

Gaara: -un poco molesto y avergonzado- ¡No te burles!

Naruto: De acuerdo no lo hare, pero te explicare para que no estés asustado –bajo su mano de la cara- recuerdas lo que paso en las aguas termales de Konoha?

Gaara: Si, de hecho –mira su pantalón- se siente igual que esa ocasión

Naruto: Eso es porque te gusta lo que hacemos y ahora pasara algo parecido a lo que hicimos esa ocasión –desvía un poco la mirada- solo que un poco distinto ahora.

Gaara: ¿Que cambiara?

Naruto: Que esta vez –regresa la mirada avergonzado- no solo voy a utilizar mi mano y que además yo…

Gaara: Vas a meter tu pene en mi trasero?

Naruto: -alterado- ¿¡Que!? Pero como sabes…

Gaara: Te dije que vi el sexo, pero supongo yo que es distinto cuando se trata de dos hombres y yo amm –avergonzado- lo deduje solo, duele cuando lo metes?

Naruto: Pues no estoy seguro pero… -tomo el rostro de Gaara besándolo en la frente- jamás me permitiría hacerte daño, te prometo que aunque duela un poco al principio te hare sentir mejor pero si aún luego de algunos segundos no te gusta –serio, mira a Gaara- me voy a detener.

Gaara: -acaricia la mejilla derecha de Naruto- Tu en verdad, cuidas mucho lo que amas y eres incapaz de dañar a alguien –toma el rostro de Naruto volviéndolo a besar- confiare en tu palabra, Naruto…

El miedo se fue, ese momento cuando estaba nervioso de tocar a Gaara, simplemente desaparecía y esa parte de mí que me estaba conteniendo, empecé a quitarle los pantalones junto toda la ropa estorbosa que tenía, por algunos segundos lo admiraba por su desnudes. Volviéndome a regresar a su rostro, le di un beso en la mejilla bajando a su cuello, seguía dándole pequeños besos hasta que termine en uno de sus pezones empezándolo a lamer de un lado al otro haciéndolo gemir desbordadamente.

Gaara: ¡Naruto! Esto, se siente bien…

Siguió gimiendo mientras que con mi otra mano jugaba un poco con su otro pezón haciendo que gimiera con más fervor.

Gaara: El calor de mi cuerpo –arqueando la cabeza hacia los lados- me quema, siento como si…¡Ahh!

Sorprendí a Gaara, cuando agarre su pene empezando a masturbarlo arriba y abajo aumentando su velocidad conforme él aumentaba los gemidos de placer que yo le proporcionaba. Seguía lamiendo uno de sus pezones para luego detenerme por breve momento bajando mi lengua del pecho de Gaara hasta su abdomen donde empecé a lamerlo alrededor de su ombligo.

Gaara: ¡Naruto! De nuevo, no puedo respirar…

Naruto: Espera un poco Gaara, aun no termino

Dejando de lamerlo un poco, seguí los instintos de mi cuerpo bajando mi lengua hasta la parte baja de Gaara hasta llegar a su pene, seguí agarrándolo con firmeza pero esta vez empecé a darle pequeños besos a la cabeza de su miembro haciendo arquear aún más a Gaara.

Gaara: ¡Ahhh! Tu boca, espera… -toma la cabeza de Naruto- es…

Estaba en una situación complicada, por un lado prometí que si a Gaara no le gustaba lo que hiciera me detendría pero –mira a Gaara extasiado- mi cabeza me está traicionando.

Metí la punta de su pene en mi boca, empezándolo a lamer con la lengua, nunca había hecho esto jamás en mi vida, pero mi cuerpo se movía solo y mientras más lo lamia más lo metía dentro de mi boca masturbándolo un poco con mi mano.

Gaara: -enlazando sus manos al cabello de Naruto- Naruto…eso… ¡Ahhh!

Introducir dos dedos a la entrada de Gaara haciéndolo arquear más hacia delante, pero yo no dejaba de lamer su pene.

Gaara: Ahh… Naruto, creo… me voy a venir… ahhh… Naruto…

El líquido pre seminal no dejaba de salir de su pene, en cualquier momento todo saldría de golpe y lo aceptaría todo.

Gaara: Aghh… ahhh…¡Ahhh!

Gaara se vino de golpe en mi boca y unos segundos después regularizo su respiración avergonzándose al ver mi boca con resto de su semen.

Gaara: Lo siento, me corrí…

Naruto: Tranquilo –se levanta un poco, tragando- me lo trague…

Gaara: ¿Ehh? ¿Eso se come?

Naruto: -avergonzado- No precisamente, pero quería hacerlo…

Gaara: -sonrojado, se alza un poco abrazando a Naruto- Naruto, yo también quiero hacerlo

Naruto: ¿Estas seguro?

Gaara: Si –respiraba ajetreado- quiero hacerlo

Naruto: -suspira pesado- Esta bien, te dejare hacerlo

Me separe un poco de él sentándome, él se recostó de frente empezándome a desabrochar el pantalón quitandomelo y dejandome completamente desnudo, se acerco mi pene que al parecer también ya estaba bastante erecto. Gaara parecía nervioso, pero aun así se metió la punta de mi pene en su boca empezándolo a lamer, parece que ese nerviosismo desapareció pues empezó a meterse todo mi pene en boca, entrando y saliendo.

Naruto: -gimiendo- Gaara…

No quería que solo el sintiera este placer, así que volví a introducir mis dos dedos en su entrada volviéndolo a arquear un poco separando su boca con mi pene.

Gaara: -respira agitado- Naruto por favor espera. –los dedos de Naruto entraban y salían de su cuerpo-

Naruto: Detente un momento Gaara –saca los dedos de Gaara levantándolo un poco hacia el-

Gaara: ¿No te gusto?

Naruto: -un poco agitado- No es eso, es solo que no quiero terminar en tu boca

Gaara: Pero yo termine en tu boca, yo quería que…

Interrumpí a Gaara con otro beso que aunque era lento me devoraba sus labios con fervor y luego me separe de el a pocos centímetros.

Naruto: Disfrutemos de forma lenta y que a ambos nos guste.

Volví a recostar a Gaara, besándolo desde la frente hasta sus labios y entre besos de ambos, tome mi miembro empezándolo a introducir en Gaara, él me apretó de los hombros dando un pequeño quejido.

Gaara: Se siente extraño –quejido- y duele un poco.

Naruto: Tranquilo…

Cambiando nuevamente de posición y esta vez senté a Gaara sobre mi erección arqueándolo un poco pero deleitándome con ese rostro extasiado de Gaara.

Gaara: Naruto… -baja un poco al rostro de Naruto- se siente tan… pero…

Naruto: - jadeando- Muévete como tú quieras hacerlo.

Gaara: -jadeando- No sé cómo.

Naruto: Intenta levantarte y luego bajar, luego solo sigue tus instintos.

Cerrando los ojos, Gaara se levantó un poco y de igual manera se dejó caer otra vez, instintivamente Gaara se movía como el placer se lo pedía, ya sea cabalgando de abajo arriba o de enfrente a atrás. El deseo empezó a aumentar sintiendo el calor recorrer el cuerpo de ambos, de igual manera Naruto no pudo mantenerse quieto moviendo la cadera al ritmo de cómo lo hacia Gaara.

Naruto...
El placer, el deseo, la pasión y la lujuria todo en un solo momento. La habitación se llenaba de nuestros gemidos y la velocidad de nuestros cuerpos empezaba a aumentar.

Gaara: ¡Naruto! No puedo, siento que…

Naruto: Descuida –con su mano acerca la cara de Gaara a la suya- yo tampoco…

Gaara dio un grito sintiendo una punzada en el vientre al sentir como Naruto había llegado al orgasmo viniéndose en él, inesperadamente Gaara también llego a su segundo orgasmo cayendo sobre Naruto, pero al parecer aun después del orgasmo de Naruto el seguía duro.

Naruto: Gaara, lo siento…

Gaara: ¿Ehh?

Naruto: Tengo que volverlo hacer

Aun con la respiración un poco agitada Naruto cambio de posición con Gaara volviéndolo a poner debajo, sin más volvió a embestir a Gaara.

Naruto…
Era increíble aun después de llegar al orgasmo, yo no quería detenerme y las embestidas seguían siendo fuertes. Incluso siento que ya no lastimo a Gaara, su rostro estaba extasiado y mirándome con lujuria.

Gaara: -rodeo el cuello de Naruto con sus manos- Naruto…

Fueron sus últimas palabras antes que pudiera tomar más fuerza para embestirlo con todas mis fuerzas, me abrazo hasta acercarme más a su oído y yo correspondí el abrazo.

Gaara: -jadeando- Naruto, de nuevo…

Naruto: -jadeando- Lo sé, yo también. Gaara…

Mi cuerpo convulsionaba con las pocas fuerzas que me quedaba y con las últimas envestidas, volví a venirme en Gaara igualmente él volvió a venirse. Poco a poco nuestra respiración empezaba a regularse y aunque exhaustos ambos le di un último beso de deseo; Gaara estiro un poco su mano rezándome con la llena de sus dedos.

Gaara: Gracias, Naruto…

Naruto: ¿Por qué?

Gaara: Por enseñarme una forma hermosa de volver amar

Naruto: -sonríe- Y gracias a ti por dejarme experimentarlo contigo.

Gaara me dio una pequeña sonrisa quedándose dormido, aun dormido correspondí la sonrisa, me recosté aun lado de él, lo acerque un poco a mí para abrazarlo y finalmente ambos quedamos dormidos.

Era una sensación tan agradable, sentirme querido por Gaara, me hace olvidar el pasado y querer construir un nuevo futuro con él. Donde solo seamos solo él y yo.

Perdido en el sueño, nuevamente regrese al paraje oscuro de la primera vez que conocí al primer guerrero de Gaara, pero esta vez Lady Shukaku estaba parada frente a mi mirándome un tanto seria.

Naruto: -mira a Shukaku- Tu ¿Eres lady Shukaku?

Shu: -asiente la cabeza- Solo dime Shu.

Naruto: -mira a su alrededor completamente oscuro- ¿Dónde estamos?

Shu: En mi mente.

Estaba confundido, realmente esta chica era Gaara o Gaara era Shu. Esto realmente me estaba confundiendo mucho.

Naruto: ¿Tú eres Gaara?

Shu: No, yo soy Shu y Gaara es Gaara.

Naruto: Pero son la misma persona ¿no?

Shu: Es algo complicado de explicar, somos seres con una misma bestia. Somos la bestia.

Naruto: Sigo pensando que no lo son.

Shu: ¿Y si te lo muestro? –sorprende a Naruto- Y si te muestro a la bestia ¿Seguirás creyendo que no lo somos? Si te muestro al Ichibi ¿Seguirás amando a Gaara? O ¿Temerás de él?

Naruto: -serio- Yo seguire amando a Gaara…

Shu: ¿Por qué estás tan seguro?

Naruto: Porque yo también soy una bestia –sonríe- sería absurdo temer a lo que podrías ser tu.

Ella estaba un poco sorprendida, acerco su mano a mi mejilla hasta tocarme, podía sentir su calor en su palma, tan parecida a la de Gaara.

Shu: -aleja su mano- No mientes, realmente no mientes

Naruto: Tengo el mal habito de nunca mentir

Reí un poco pero ella se puso seria desviando la mirada.

Shu: Ojala mi guerrero hubiera sido igual que tú.

Naruto: -toma la mano de Shu- Ahora me tienes a mí.

Shu: -sonríe- No, Gaara te tiene a ti –toma las manos de Naruto- y por eso siempre te estaré agradecida.

Ambos se consideran una bestia y aun así ante mis ojos parecen las criaturas más hermosas que haya visto en mi vida.

Shu: -seria, baja las manos de Naruto- ¿Estás listo?

Naruto: Lo estoy.

Shu me mostro su puño y al voltearlo poco a poco la arena caía como reloj, los segundos empezaron a correr.

Shu: Cuando el último grano de arena caiga, tu verdadero corazón será revelado.

La arena caía lentamente y cuando finalmente el ultimo grano de arena cayo; Shu desapareció, la oscuridad se volvió fría y un intenso chakra inundo el lugar.

Voz masculina: Mira que tenemos aquí, luego de tantos años y un nuevo humano llega aquí. Esto debe ser una broma.

La voz parecía de un hombre pero era castroza y bastante amenazante, voltee un poco encontrándome con algo enorme. Una bestia enorme de arena en forma de Tanuki, unos ojos bastante atemorizantes y un chakra descomunal. No había duda; él era el Shukaku, la bestia de una cola. Ichibi.

Shukaku: Eres solo un niño –mira fijamente a Naruto- ¿No me tienes miedo?

Naruto: -serio- Vi una bestia un poco más atemorizante que tu hace muchos años.

Shukaku: Eso es ridículo de pensar viendo tu edad, pocas bestias dejamos que algún humano vea nuestra forma original.

Naruto: Si es así ¿Por qué Shu me dejo verte?

Shukaku: No solo fue Shu la que te permitió verme, si no también Gaara.

Naruto: -un poco sorprendido- ¿Gaara?

Shukaku: -suspira- Creí que al volverlo hombre, sería menos problemático.

Naruto: -un poco molesto- Estas hablando mal de ti mismo

Shukaku: No es así, Shu y Gaara son dos seres que cree para resguardar mi forma bestial. Un poco más sencillo para que entiendas, ellos son la jaula y yo la bestia.

El Ichibi estiro un poco una de sus patas y bajo su palma dejo ver al Shu con Gaara parados frente a mi e inconscientes.

Naruto: Entonces ellos son…

Shukaku: No te equivoques, ellos no son humanos, son mis recipientes.

Naruto: ¡No entiendo nada de esto! ¡Se supone que ellos dos son tú! ¿¡Pero ellos no son la misma persona!? Tienes que explicarme mejor esto.

Shukaku: Bueno para explicarte eso primero tendría que hablar desde el inicio –observa a Naruto aún más confundido- El comienzo de nuestra era.

Me ponía nervioso saber lo que él diría, pero ahora que estoy aquí podría conocer el verdadero corazón de Gaara. Tome asiento cruzando las rodillas.

Shukaku: Créeme, tenemos todo el tiempo del mundo. Dejaste exhausto a mi receptor Gaara, ja y yo que creí que el acto de procreación solo era un acto para reproducción humana.

Espera ¿Qué?

Shukaku: Además yo creí que solo se hacía eso con un hombre y una mujer.

¡Un momento! Acaso él…

Naruto: -nervioso- Tu, nos viste cuando…

Shukaku: Claro que si idiota, él es mi recipiente; todo lo que ve, oye, huele o toca puedo sentirlo. Incluso lo que acabaron de hacer.

Naruto: -se levanta alterado- ¡Bestia pervertida!

Shukaku: Le das mucha importancia niño, en realidad solo bromeaba –hace suspirar a Naruto de alivio- en realidad solo los vi.

Naruto: ¡Maldito!

Shukaku: Es algo inevitable niño, él es mi recipiente así que soy perceptible a todo lo que hace. Además no es como si lo tomara de algo de importancia, para mí solo fue un contacto humano, como si no hubiera visto animales aparearse antes.

Naruto: ¡Genial! –se soba los ojos- Ahora no podre quitarme tus ojos de encima.

Shukaku: Los humanos son tan arbitrarios con estas cosas. Oye ¿Vas a escucharme o prefieres que me vaya?

Naruto: ¡No! –suspira- solo no vuelvas hablar del tema –vuelve a tomar asiento cruzando las piernas-

Shukaku: De acuerdo –desaparece a Shu y Gaara- primero como la historia lo plantea, los bijuus somos criaturas creadas por el sabio de los 6 caminos y como tal nosotros nos volvimos los dioses de este mundo, 8 bestias con cola.

Naruto: ¿8 bestias?

Shukaku: ¡No interrumpas niño! –deja cayado a Naruto-el punto fue, que el sabio nos creó para crear y prosperar este mundo. Así fue por muchos años, las criaturas que creamos y llamamos humanos nos respetaron venerándonos por miles de años, pero conforme el tiempo pasaba, los humanos empezaron a tenernos miedo, llegaron a creer que al ser nosotros seres superiores a ellos los destruiríamos en cualquier momento, pero fue completamente contrario a lo que los humanos creyeron. Las bestias y yo nos reunimos para intentar idear una nueva forma de unión a los humanos, porque en cierto punto era cierto que ellos eran seres inferiores a nosotros, pero ellos nos superaban en número de 100 a 1, era cuestión de tiempo para que ellos se revelaran contra nosotros. Así que en lugar de hacer su pesadilla realidad, preferimos convivir con ellos a su propia imagen. Las bestias decidimos crearnos recipientes, recipientes en forma humana que resguardaran todo nuestro ser controlando toda nuestra fuerza con el propósito de proteger a nuestra creación y al mismo tiempo convivir entre ellos, a estos recipientes los llamamos Jinchuriki. 

Naruto…
¿Jinchuriki? Entonces yo…

Shukaku: Cada bestia formo a su Jinchuriki según las necesidades de su gente; ya sea el género, complexión y habilidades, todo con el fin de que los humanos no nos temieran.

Naruto: Los Jinchurikis ¿Pueden morir?

Shukaku: Si, pero a diferencia de los humanos los Jinchuriki vuelven a la vida con la reencarnación eterna; en comparación, cuando un humano muere su existencia desaparece pero un Jinchuriki vuelve a la vida en solo cuestión de años. Su aspecto no cambia, el Jinchuriki sigue siendo el mismo recipiente sin importar el tiempo, las mismas características que tuvo las tendrá por miles de años.

Naruto: Entonces ¿Por qué tú tienes dos Jinchiruki?

Shukaku: Porque mi primer jinchiruki –volvió a mostrar a Shu con su pata- hizo algo que es estrictamente prohibidos a los bijuus.

Naruto: -serio- ¿Qué fue lo que hizo?

Shukaku: Otorgarle el poder de dios a un humano.

Naruto…
El guerrero, el primer Hokage. Shu rompió una regla bijuu otorgándole la inmortalidad a él guerrero.

Shukaku: Es lo malo de los Jinchurikis, aunque sean solo recipientes llegan a crear un carácter o emociones humanas que no van acorde de nuestra ideología

Naruto: ¿Porque Shu hizo eso?

Shukaku: No estoy seguro, supongo que fue un tanto de mi ideología humana con la suya. Creyó demasiado en la voluntad humana, pero de algo bueno tenía que sacar luego de ese error –desaparece a Shu- no siempre puedes confiar en los humanos.

Naruto: -baja la mirada- Se lo que es eso

Shukaku: Pero de hecho, eso no fue su mayor error; es más, cuando los demás Bijuus y Jinchurikis supieron de eso les había agradado la idea, llegamos a un punto donde tal vez ya era hora de compartir más a los humanos y no solo limitarlos. Pensamos que tal vez los bijuus y los humanos podríamos ser iguales. Pero todo cambio cuando la última generación del guerrero cometió el peor error que puedes hacerle aun bijuu o en este caso aun Jinchuriki. Este guerrero no solo engaño a mi Jinchuriki…

Naruto…
Su voz se escuchaba más rasposa, sus patas se volvieron puños empezándolos a apretar y su mirada mostraba una gran furia en su ser.

Shukaku: Este guerrero… -con un pequeño torbellino de arena muestra a Shu pero esta vez abriendo sus ojos con una mirada quebrada- destruyo a mi Jinchuriki.

Shu miro a Naruto con unos ojos llenos de dolor y con una inmensa tristeza que se desbordo al solo abrir un poco su boca dejando ver lágrimas en sus ojos.

CONTINUARA...

Naruto…
Cargue a Gaara, saltando entre edificios de arena, Gaara no dejaba de abrazarme el cuello y yo no podía de dejar de acercarlo más a mí. Ya estaba impaciente.

Llegamos al dormitorio de Gaara, recosté a Gaara en la misma bolsa de dormir donde habíamos dormido tan solo la noche anterior, trate de dejarlo en la bolsa de dormir pero él no dejaba de abrazarme el cuello y la vez no dejaba de temblar.

Naruto: ¿Estas bien? Gaara

Gaara: No lo sé, no sé qué esperar

Naruto: Yo tampoco pero –logro hacer que Gaara se soltara separándose un poco- yo empezare a tocarte un poco y si no te gusta, me detendré de inmediato.

Desabroche un poco la ropa de Gaara dejando al descubierto su cuello, aun nervioso empecé a darle besos a la mejilla bajando lentamente a su cuello, la dulce piel de Gaara estaba adictándome todos mis sentidos empezando a perder un poco la cordura llegando a lamer un poco su cuello sobresaltando a Gaara.

Naruto: -se separa un poco de Gaara- ¿Quieres que me detenga?

Gaara:-toca su cuello con la mano- Se sintió cálido, estaba asustado pero no quería que te detuvieras, yo quería mas.

Naruto: ¿Seguimos?

Gaara no respondió, solo asintió la cabeza dejando que lo siga desvistiéndolo, dejándolo semidesnudo volví a tomarlo de las mejillas volviéndolo a besar, sintiendo el dulce sabor de los labios de Gaara ahogándome con su boca solo para sentir todo el placer de sus besos. Gaara acepto aún más mis besos acercándose más a mí, poniendo sus manos en mis hombros y ambos perdidos en nuestras miradas de deseo cerrando los ojos perdiéndonos solo en el deseo de los besos. Rodee con mis manos su cintura acercándolo a mí, intensificando más el beso. La exigencia se volvía intensa, los besos ya no eran suficientes, mis manos se soltaron de su cintura empezando tocar la espalda de Gaara provocando que él se separa del beso de golpe abrazándome y recargando su frente en mi hombro de forma muy vergonzosa. Pensé que me rogaría que me detuviera, pero mientras más lo tocaba más se aferraba a mi espalda.

Gaara: Naruto…-susurra en su odio- ¿podría quitarte la ropa también?

Naruto: -avergonzado- Claro…

Nos separamos un poco y Gaara tomo el zíper de mi chaqueta, él estaba muy nervioso intentando bajar el zipper pero poniendo mis manos con las suyas lo ayuda a bajarlo quitándome la chaqueta, el resto lo hice yo quitándome la camisa que tenía bajo la chaqueta quedando de igual manera semidesnudo.

Gaara: -avergonzado- ¿Puedo tocarte?

Naruto: Te dije que no tenías que preguntar

Gaara toco mi cuello bajando por mi hombro derecho hasta mi pecho empezándome a acariciar en su totalidad, se acercó más a mi poniendo sus brazos a tras de mi abrazándome recargando su rostro de lado frontal en mi pecho.

Gaara: Puedo oír tu corazón, es cálido –cierra sus ojos- nunca había sentido esta calidez antes, me siento distinto ahora.

Naruto: -corresponde el abrazo- Se llama, sentirse amado.

Gaara: ¿Tu sientes lo mismo ahora?

Naruto: Si –abraza con más firmeza a Gaara- me siento amado.

No me había sentido así de querido, ni siquiera por mi equipo, llegue a dar más de lo que dieron, pero en Gaara es distinto, él no me ofrece la gran cosa pero siento que cuando la ofrece, lo hace de lo más profundo de su ser.

Aun abrazado, recosté a Gaara en la bolsa de dormir y mirándonos el uno al otro volví besarlo con más fervor que nunca, nuestro deseo creciendo, nos comíamos a besos y de golpe Gaara se detuvo preocupándome.

Naruto: ¿Que sucede?

Gaara: Algo, en mis pantalones –mira hacia abajo- mi amm…

Naruto: -avergonzado- Amm, estas excitado…

Gaara: ¿Eso es malo?

Naruto: -ríe un poco poniéndose la mano en la cara- Realmente eres muy inocente Gaara.

Gaara: -un poco molesto y avergonzado- ¡No te burles!

Naruto: De acuerdo no lo hare, pero te explicare para que no estés asustado –bajo su mano de la cara- recuerdas lo que paso en las aguas termales de Konoha?

Gaara: Si, de hecho –mira su pantalón- se siente igual que esa ocasión

Naruto: Eso es porque te gusta lo que hacemos y ahora pasara algo parecido a lo que hicimos esa ocasión –desvía un poco la mirada- solo que un poco distinto ahora.

Gaara: ¿Que cambiara?

Naruto: Que esta vez –regresa la mirada avergonzado- no solo voy a utilizar mi mano y que además yo…

Gaara: Vas a meter tu pene en mi trasero?

Naruto: -alterado- ¿¡Que!? Pero como sabes…

Gaara: Te dije que vi el sexo, pero supongo yo que es distinto cuando se trata de dos hombres y yo amm –avergonzado- lo deduje solo, duele cuando lo metes?

Naruto: Pues no estoy seguro pero… -tomo el rostro de Gaara besándolo en la frente- jamás me permitiría hacerte daño, te prometo que aunque duela un poco al principio te hare sentir mejor pero si aún luego de algunos segundos no te gusta –serio, mira a Gaara- me voy a detener.

Gaara: -acaricia la mejilla derecha de Naruto- Tu en verdad, cuidas mucho lo que amas y eres incapaz de dañar a alguien –toma el rostro de Naruto volviéndolo a besar- confiare en tu palabra, Naruto…

El miedo se fue, ese momento cuando estaba nervioso de tocar a Gaara, simplemente desaparecía y esa parte de mí que me estaba conteniendo, empecé a quitarle los pantalones junto toda la ropa estorbosa que tenía, por algunos segundos lo admiraba por su desnudes. Volviéndome a regresar a su rostro, le di un beso en la mejilla bajando a su cuello, seguía dándole pequeños besos hasta que termine en uno de sus pezones empezándolo a lamer de un lado al otro haciéndolo gemir desbordadamente.

Gaara: Naruto! Esto, se siente bien…

Siguió gimiendo mientras que con mi otra mano jugaba un poco con su otro pezón haciendo que gimiera con más fervor.

Gaara: El calor de mi cuerpo –arqueando la cabeza hacia los lados- me quema, siento como si…Ahh!

Sorprendí a Gaara, cuando agarre su pene empezando a masturbarlo arriba y abajo aumentando su velocidad conforme él aumentaba los gemidos de placer que yo le proporcionaba. Seguía lamiendo uno de sus pezones para luego detenerme por breve momento bajando mi lengua del pecho de Gaara hasta su abdomen donde empecé a lamerlo alrededor de su ombligo.

Gaara: Naruto! De nuevo, no puedo respirar…

Naruto: Espera un poco Gaara, aun no termino

Dejando de lamerlo un poco, seguí los instintos de mi cuerpo bajando mi lengua hasta la parte baja de Gaara hasta llegar a su pene, seguí agarrándolo con firmeza pero esta vez empecé a darle pequeños besos a la cabeza de su miembro haciendo arquear aún más a Gaara.

Gaara: Ahhh! Tu boca, espera… -toma la cabeza de Naruto- es…

Estaba en una situación complicada, por un lado prometí que si a Gaara no le gustaba lo que hiciera me detendría pero –mira a Gaara extasiado- mi cabeza me está traicionando.

Metí la punta de su pene en mi boca, empezándolo a lamer con la lengua, nunca había hecho esto jamás en mi vida, pero mi cuerpo se movía solo y mientras más lo lamia más lo metía dentro de mi boca masturbándolo un poco con mi mano.

Gaara: -enlazando sus manos al cabello de Naruto- Naruto…eso… Ahhh!

Introducir dos dedos a la entrada de Gaara haciéndolo arquear más hacia delante, pero yo no dejaba de lamer su pene.

Gaara: Ahh… Naruto, creo… me voy a venir… ahhh… Naruto…

El líquido pre seminal no dejaba de salir de su pene, en cualquier momento todo saldría de golpe y lo aceptaría todo.

Gaara: Aghh… ahhh…Ahhh!

Gaara se vino de golpe en mi boca y unos segundos después regularizo su respiración avergonzándose al ver mi boca con resto de su semen.

Gaara: Lo siento, me corrí…

Naruto: Tranquilo –se levanta un poco, tragando- me lo trague…

Gaara: Ehh? Eso se come?

Naruto: -avergonzado- No precisamente, pero quería hacerlo…

Gaara: -sonrojado, se alza un poco abrazando a Naruto- Naruto, yo también quiero hacerlo

Naruto: Estas seguro?

Gaara: Si –respiraba ajetreado- quiero hacerlo

Naruto: -suspira pesado- Esta bien, te dejare hacerlo

Me separe un poco de él sentándome, él se recostó de frente empezándome a desabrochar el pantalón sacando mi pene que al parecer también ya estaba bastante erecto. Gaara parecía nervioso, pero aun así se metió la punta de mi pene en su boca empezándolo a lamer, parece que ese nerviosismo desapareció pues empezó a meterse todo mi pene en boca, entrando y saliendo.

Naruto: -gimiendo- Gaara…

No quería que solo el sintiera este placer, así que volví a introducir mis dos dedos en su entrada volviéndolo a arquear un poco separando su boca con mi pene.

Gaara: -respira agitado- Naruto por favor espera. –los dedos de Naruto entraban y salían de su cuerpo-

Naruto: Detente un momento Gaara –saca los dedos de Gaara levantándolo un poco hacia el-

Gaara: ¿No te gusto?

Naruto: -un poco agitado- No es eso, es solo que no quiero terminar en tu boca

Gaara: Pero yo termine en tu boca, yo quería que…

Interrumpí a Gaara con otro beso que aunque era lento me devoraba sus labios con fervor y luego me separe de el a pocos centímetros.

Naruto: Disfrutemos de forma lenta y que a ambos nos guste.

Volví a recostar a Gaara, besándolo desde la frente hasta sus labios y entre besos de ambos, tome mi miembro empezándolo a introducir en Gaara, él me apretó de los hombros dando un pequeño quejido.

Gaara: Se siente extraño –quejido- y duele un poco.

Naruto: Tranquilo…

Cambiando nuevamente de posición y esta vez senté a Gaara sobre mi erección arqueándolo un poco pero deleitándome con ese rostro extasiado de Gaara.

Gaara: Naruto… -baja un poco al rostro de Naruto- se siente tan… pero…

Naruto: - jadeando- Muévete como tú quieras hacerlo.

Gaara: -jadeando- No sé cómo.

Naruto: Intenta levantarte y luego bajar, luego solo sigue tus instintos.

Cerrando los ojos, Gaara se levantó un poco y de igual manera se dejó caer otra vez, instintivamente Gaara se movía como el placer se lo pedía, ya sea cabalgando de abajo arriba o de enfrente a atrás. El deseo empezó a aumentar sintiendo el calor recorrer el cuerpo de ambos, de igual manera Naruto no pudo mantenerse quieto moviendo la cadera al ritmo de cómo lo hacia Gaara.

El placer, el deseo, la pasión y la lujuria todo en un solo momento. La habitación se llenaba de nuestros gemidos y la velocidad de nuestros cuerpos empezaba a aumentar.

Gaara: ¡Naruto! No puedo, siento que…

Naruto: Descuida –con su mano acerca la cara de Gaara a la suya- yo tampoco…

Gaara dio un grito sintiendo una punzada en el vientre al sentir como Naruto había llegado al orgasmo viniéndose en él, inesperadamente Gaara también llego a su segundo orgasmo cayendo sobre Naruto, pero al parecer aun después del orgasmo de Naruto el seguía duro.

Naruto: Gaara, lo siento…

Gaara: Ehh?

Naruto: Tengo que volverlo hacer

Aun con la respiración un poco agitada Naruto cambio de posición con Gaara volviéndolo a poner debajo, sin más volvió a embestir a Gaara.

Naruto…
Era increíble aun después de llegar al orgasmo, yo no quería detenerme y las embestidas seguían siendo fuertes. Incluso siento que ya no lastimo a Gaara, su rostro estaba extasiado y mirándome con lujuria.

Gaara: -rodeo el cuello de Naruto con sus manos- Naruto…

Fueron sus últimas palabras antes que pudiera tomar más fuerza para embestirlo con todas mis fuerzas, me abrazo hasta acercarme más a su oído y yo correspondí el abrazo.

Gaara: -jadeando- Naruto, de nuevo…

Naruto: -jadeando- Lo sé, yo también. Gaara…

Mi cuerpo convulsionaba con las pocas fuerzas que me quedaba y con las últimas envestidas, volví a venirme en Gaara igualmente él volvió a venirse. Poco a poco nuestra respiración empezaba a regularse y aunque exhaustos ambos le di un último beso de deseo; Gaara estiro un poco su mano rezándome con la llena de sus dedos.

Gaara: Gracias, Naruto…

Naruto: ¿Por qué?

Gaara: Por enseñarme una forma hermosa de volver amar

Naruto: -sonríe- Y gracias a ti por dejarme experimentarlo contigo.

Gaara me dio una pequeña sonrisa quedándose dormido, aun dormido correspondí la sonrisa, me recosté aun lado de él, lo acerque un poco a mí para abrazarlo y finalmente ambos quedamos dormidos.

Era una sensación tan agradable, sentirme querido por Gaara, me hace olvidar el pasado y querer construir un nuevo futuro con él. Donde solo seamos solo él y yo.

Perdido en el sueño, nuevamente regrese al paraje oscuro de la primera vez que conocí al primer guerrero de Gaara, pero esta vez Lady Shukaku estaba parada frente a mi mirándome un tanto seria.

Naruto: -mira a Shukaku- Tu ¿Eres lady Shukaku?

Shu: -asiente la cabeza- Solo dime Shu.

Naruto: -mira a su alrededor completamente oscuro- ¿Dónde estamos?

Shu: En mi mente.

Estaba confundido, realmente esta chica era Gaara o Gaara era Shu. Esto realmente me estaba confundiendo mucho.

Naruto: ¿Tú eres Gaara?

Shu: No, yo soy Shu y Gaara es Gaara.

Naruto: Pero son la misma persona ¿no?

Shu: Es algo complicado de explicar, somos seres con una misma bestia. Somos la bestia.

Naruto: Sigo pensando que no lo son.

Shu: ¿Y si te lo muestro? –sorprende a Naruto- Y si te muestro a la bestia ¿Seguirás creyendo que no lo somos? Si te muestro al Ichibi ¿Seguirás amando a Gaara? O ¿Temerás de él?

Naruto: -serio- Si…

Shu: ¿Por qué estás tan seguro?

Naruto: Porque yo también soy una bestia –sonríe- sería absurdo temer a lo podrías ser tu.

Ella estaba un poco sorprendida, acerco su mano a mi mejilla hasta tocarme, podía sentir su calor en su palma, tan parecida a la de Gaara.

Shu: -aleja su mano- No mientes, realmente no mientes

Naruto: Tengo el mal habito de nunca mentir

Reí un poco pero ella se puso seria desviando la mirada.

Shu: Ojala mi guerrero hubiera sido igual que tú.

Naruto: -toma la mano de Shu- Ahora me tienes a mí.

Shu: -sonríe- No, Gaara te tiene a ti –toma las manos de Naruto- y por eso siempre te estaré agradecida.

Ambos se consideran una bestia y aun así ante mis ojos parecen las criaturas más hermosas que haya visto en mi vida.

Shu: -seria, baja las manos de Naruto- ¿Estás listo?

Naruto: Lo estoy.

Shu me mostro su puño y al voltearlo poco a poco la arena caía como reloj, los segundos empezaron a correr.

Shu: Cuando el último grano de arena caiga, tu verdadero corazón será revelado.

La arena caía lentamente y cuando finalmente el ultimo grano de arena cayo; Shu desapareció, la oscuridad se volvió fría y un intenso chakra inundo el lugar.

Voz masculina: Mira que tenemos aquí, luego de tantos años y un nuevo humano llega aquí. Esto debe ser una broma.

La voz parecía de un hombre pero era castroza y bastante amenazante, voltee un poco encontrándome con algo enorme. Una bestia enorme de arena en forma de Tanuki, unos ojos bastante atemorizantes y un chakra descomunal. No había duda; él era el Shukaku, la bestia de una cola. Ichibi.

Shukaku: Eres solo un niño –mira fijamente a Naruto- ¿No me tienes miedo?

Naruto: -serio- Vi una bestia un poco más atemorizante que tu hace muchos años.

Shukaku: Eso es ridículo de pensar viendo tu edad, pocas bestias dejamos que algún humano vea nuestra forma original.

Naruto: Si es así ¿Por qué Shu me dejo verte?

Shukaku: No solo fue Shu la que te permitió verme, si no también Gaara.

Naruto: -un poco sorprendido- ¿Gaara?

Shukaku: -suspira- Creí que al volverlo hombre, sería menos problemático.

Naruto: -un poco molesto- Estas hablando mal de ti mismo

Shukaku: No es así, Shu y Gaara son dos seres que cree para resguardar mi forma bestial. Un poco más sencillo para que entiendas, ellos son la jaula y yo la bestia.

El Ichibi estiro un poco una de sus patas y bajo su palma dejo ver al Shu con Gaara parados frente a mi he inconscientes.

Naruto: Entonces ellos son…

Shukaku: No te equivoques, ellos no son humanos, son mis recipientes.

Naruto: ¡No entiendo nada de esto! ¡Se supone que ellos dos son tú! ¿¡Pero ellos no son la misma persona!? Tienes que explicarme mejor esto.

Shukaku: Bueno para explicarte eso primero tendría que hablar desde el inicio –observa a Naruto aún más confundido- El comienzo de nuestra era.

Me ponía nervioso saber lo que él diría, pero ahora que estoy aquí podría conocer el verdadero corazón de Gaara. Tome asiento cruzando las rodillas.

Shukaku: Créeme, tenemos todo el tiempo del mundo. Dejaste exhausto a mi receptor Gaara, ja y yo que creí que el acto de procreación solo era un acto para reproducción humana.

Espera ¿Qué?

Shukaku: Además yo creí que solo se hacía eso con un hombre y una mujer.

¡Un momento! Acaso él…

Naruto: -nervioso- Tu, nos viste cuando…

Shukaku: Claro que si idiota, él es mi recipiente; todo lo que ve, oye, huele o toca puedo sentirlo. Incluso lo que acabaron de hacer.

Naruto: -se levanta alterado- ¡Bestia pervertida!

Shukaku: Le das mucha importancia niño, en realidad solo bromeaba –hace suspirar a Naruto de alivio- en realidad solo los vi.

Naruto: ¡Maldito!

Shukaku: Es algo inevitable niño, él es mi recipiente así que son perceptible a todo lo que hace. Además no es como si lo tomara de algo de importancia, para mí solo fue un contacto humano, como si no hubiera visto animales aparearse antes.

Naruto: ¡Genial! –se soba los ojos- Ahora no podre quitarme tus ojos de encima.

Shukaku: Los humanos son tan arbitrarios con estas cosas. Oye ¿Vas a escucharme o prefieres que me vaya?

Naruto: ¡No! –suspira- solo no vuelvas hablar del tema –vuelve a tomar asiento cruzando las piernas-

Shukaku: De acuerdo –desaparece a Shu y Gaara- primero como la historia lo plantea, los bijuus somos criaturas creadas por el sabio de los 6 caminos y como tal nosotros nos volvimos los dioses de este mundo, 8 bestias con cola.

Naruto: ¿8 bestias?

Shukaku: ¡No interrumpas niño! –deja cayado a Naruto-el punto fue, que el sabio nos creó para crear y prosperar este mundo. Así fue por muchos años, las criaturas que creamos y llamamos humanos nos respetaron venerándonos por miles de años, pero conforme el tiempo pasaba, los humanos empezaron a tenernos miedo, llegaron a creer que al ser nosotros seres superiores a ellos los destruiríamos en cualquier momento, pero fue completamente contrario a lo que los humanos creyeron. Las bestias y yo nos reunimos para intentar idear una nueva forma de unión a los humanos, porque en cierto punto era cierto que ellos eran seres inferiores a nosotros, pero ellos nos superaban en número de 100 a 1, era cuestión de tiempo para que ellos se revelaran contra nosotros. Así que en lugar de hacer su pesadilla realidad, preferimos convivir con ellos a su propia imagen. Las bestias decidimos crearnos recipientes, recipientes en forma humana que resguardaran todo nuestro ser controlando toda nuestra fuerza con el propósito de proteger a nuestra creación y al mismo tiempo convivir entre ellos, a estos recipientes los llamamos Jinchuriki. 

Naruto…
¿Jinchuriki? Entonces yo…

Shukaku: Cada bestia formo a su Jinchuriki según las necesidades de su gente; ya sea el género, complexión y habilidades, todo con el fin de que los humanos no nos temieran.

Naruto: Los Jinchurikis ¿Pueden morir?

Shukaku: Si, pero a diferencia de los humanos los Jinchurikis vuelven a la vida con la reencarnación eterna, en comparación cuando un humano muere su existencia desaparece pero un Jinchuriki vuelve a la vida en solo cuestión de años. Su aspecto no cambia, el jinchuriki sigue siendo el mismo recipiente sin importar el tiempo, las mismas características que tuvo las tendrá por miles de años.

Naruto: Entonces ¿Por qué tú tienes dos jinchirukis?

Shukaku: Porque mi primer jinchiruki –volvió a mostrar a Shu con su pata- hizo algo que estrictamente prohibidos los bijuus.

Naruto: -serio- ¿Qué fue lo que hizo?

Shukaku: Otorgarle el poder de dios a un humano.

Naruto…
El guerrero, el primer Hokage. Shu rompió una regla bijuu otorgándole la inmortalidad a él guerrero.

Shukaku: Es lo malo de los Jinchurikis, aunque sean solo recipientes llegan a crear un carácter o emociones humanas que no van acorde de nuestra ideología

Naruto: ¿Porque Shu hizo eso?

Shukaku: No estoy seguro, supongo que fue un tanto de mi ideología humana con la suya. Creyó demasiado en la voluntad humana, pero de algo bueno tenía que sacar luego de ese error –desaparece a Shu- no siempre puedes confiar en los humanos.

Naruto: -baja la mirada- Se lo que es eso

Shukaku: Pero de hecho, eso no fue su mayor error; es más, cuando los demás Bijuus y Jinchurikis supieron de eso le había agradado la idea, llegamos a un punto donde tal vez ya era hora de compartir más a los humanos y no solo limitarlos. Pensamos que tal vez los bijuus y los humanos podríamos ser iguales. Pero todo cambio cuando la última generación del guerrero cometió el peor error que puedes hacerle aun bijuu o en este caso aun Jinchuriki. Este guerrero no solo engaño a mi Jinchuriki…

Naruto…
Su voz se escuchaba más rasposa, sus patas se volvieron puños empezándolos a apretar y su mirada mostraba una gran furia en su ser.

Shukaku: Este guerrero… -con un pequeño torbellino de arena muestra a Shu pero esta vez abriendo sus ojos con una mirada quebrada- destruyo a mi Jinchuriki.

Shu miro a Naruto con unos ojos llenos de dolor y con una inmensa tristeza que se desbordo al solo abrir un poco su boca dejando ver lágrimas en sus ojos.

Notas finales:

¿Creyeron que solo leeriamos un poco de lemon? No, tambien sabremos mas de la historia de Gaara y Lady Shu.

Espero que les haya gustada, nos vemos en el proximo fic


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).