Iba maldiciendo por los pasillos del colegio, debería estar en clases, no es que me importe, pero enserio tengo que cargar los libros de los profesores y entregárselos a cada uno de ellos, mis brazos me duelen y aún no he entregado la mitad, maldito profesor, me pillo con el celular en clases y como castigo me encomendó la tarea de entregarles los libros de clases a cada profe, lo único que puedo rescatar es que podre molestar a Almita cuando la vea en su curso. Por el horario debería tocarle educación física, alma nunca fue buena en los deportes verla me animara el día.
Deambule por los pasillos por 15 minutos entregando los libros hasta que al fin solo me quedo el del curso de Alma, me dirigí al gimnasio y entre, observe unos momentos ya que estaban haciendo velocidad, ahí fue donde la vi, estaba conversando con dos chicas, luego de unos segundos la llamaron para correr junto a otra chica, ahí estaba mi momento feliz del día, ella se levantó y se puso en posición para correr, cuando escucho el silbato del entrenador corrió junto a una chica, pero grande fue mi sorpresa cuando la vi sacándole demasiada ventaja a su compañera, hasta el profesor quedo sorprendido. Se sacó el sudor de su frente y se fue sentar con una gran sonrisa en la cara. Al reaccionar me acerque a profesor y le entregue el libro. Me quede unos minutos más hasta que todos se fueron a cambiar al camarín, así que como el profesor miraba una hoja me metí para hablar con Alma, ahí la vi observando a sus compañeras cambiarse, pero luego de verme ahí dentro frunció el ceño y se empezó a cambiar.
- Almita…- la llame
- ¿Qué haces aquí?- dijo mientras se sacaba su polera del colegio
- Vaya… la adolescencia te está ayudando- exclame mirándola de arriba abajo
- Oye… no me mires así- dijo avergonzándose
- Hablo enserio… vaya tu abdomen está bien torneado y en la cadera tienes marcado, tus brazos están bastante firmes y tienen musculatura ¿has entrenado?- pregunte
- Eso no te importa… aparte deberías salir, no eres del curso, ¿acaso viniste a espiarme mientras me cambiaba?- exclamo apartándose de mi
- Esto no quedara así, no me dejaras con la duda Alma- dije antes de irme, muchas chicas de su curso me empezaron a mirar como si fuera una pervertida, así que opte por una retirada estratégica.
Luego de algunos minutos fue receso, pero en vez de juntarme con mis amigas decidí investigar a Alma, para fastidiarla un poco, es divertido molestarla, desde que tengo memoria lo he hecho aunque antes solía esconderse tras su hermana, ahora parecen algo distantes.
Si describiera a Alma, diría que es una chica algo friki, ama ver, escuchar anime, también escucha música que mi madre y Sharon dicen que es satánica, por la cantidad de gritos que incluye, aunque cuando era un poco más chica, era bastante sociable, ahora es un poco seria y ya no es tan sociable, su círculo disminuye bastante con el correr de los años, aunque es bastante amable, sus arranques de ira por así decirlo , son bastante feo, a veces contra restra esa amabilidad tan típica de ella. Ahora que menciono sus arranques de ira, me pregunto por qué será, hace bastante se le ve algo deprimida, es como si escondiera algo que le avergüenza o peor que le duele, se lo preguntaría pero sé que ella no confía en mí, sé que tampoco se lo contaría a su hermana. Para Sharon su hermana aun es una niña aunque ya no lo sea. Tal vez necesite ayuda de Jennifer, no creo que a Sharon le guste la idea pero no tiene por qué enterarse, aparte anda en las nubes por su nuevo enamorado.
- Oye Jenny- llámela atención de mi amiga que estaba jugando en su celular
- Dime- me dijo sin mirarme
- espiemos a Alma- exclame emocionada
- ¡¿QUE?!- dijo sorprendida dejo de jugar y me miró fijamente
- Esa mocosa oculta algo y lo sabré-le dije decidida-ayúdame a saber que es… incluso ahora está en forma… hoy lo descubrí…- dije colocándome la mano a la barbilla
- ¿porque? – pregunto confundida, a lo mejor se pregunta porque gastaría mi tiempo espiando a la hermana menor de mi amiga
- Porque es divertido fastidiarla, aparte cuando fui a entregar ese dichoso libro la observe un momento para reírme de su forma de correr, pero me lleve una sorpresa, cambio en muy poco tiempo y me gustaría saber por qué, para molestarla-mi amiga me miro indecisa y rara, a lo mejor no se explicaba tanta determinación en saber todo de alma.
- Está bien- dijo- pero sabes que Sharon nos quemara viva si sabe que molestas y espías a su hermanita- advirtió con miedo
- Lo sé- me reí un poco- pero no tiene por qué enterarse- sonreí de lado-hoy cuando vayamos a la casa de Sharon le preguntare algo de su hermana y con eso sacare provecho para agarrar a alma y joderla un poco-
- ¿Por qué te gusta molestarla?- pregunto- Alma es simpática y tierna, la vas a traumar-para Jenny la hermana de Sharon era como su hermana menor.
- Porque es divertido, la considero mi hermana menor y como buena hermana mayor es mi deber molestarla-volví a sonreír de lado, Jenny me miro extrañada
Las clases transcurrieron normales para todos y al finalizar cada una se fue a sus respectivas casas, menos Alma que fue a hablar con Ivana, para informarle su decisión, mientras que el resto se preparaba para ir a casa de Sharon para pasar la noche ahí, tenían muchos exámenes esta semana por lo que debían estudiar demasiado y debían apoyarse entre todas.
Sharon nos recibió bastante contenta, al entrar conversamos un poco antes de ponernos a estudiar de lleno las materias, pero a medida que pasaba el tiempo no vi que apareciera Alma ¿acaso había salido? Pero decidí preguntar cuando nos tomáramos un receso.
- Oye Sharon, tu hermana no se ha pronunciado ¿está bien?- dije estirándome
- Fue a una tienda, al parecer va a empezar trabajar- dijo Sharon imitando lo que hacía y se estiraba.
- Ya veo… por cierto has notado que tu hermana esta mas flaca, ¿se empezó a ejercitar?- pregunte
- No lo sé… pero tiene mancuernas en su habitación, no sé en qué momento se las compro- dijo mirando el techo
- Hoy cuando fui a dejar los libros…- empecé a relatar- la vi en clases de educación física y yo espere ver su corrida graciosa… pero me lleve una sorpresa al ver que es mucho más rápida de lo que era, para mejorar en tan poco tiempo tuvo que haberse sometido a algo realmente fuerte- dije sembrando duda en Sharon
- Tienes razón… ahora que lo pienso… hace unas semanas a veces andaba adolorida y a penas se movía, pero no le tome mucha importancia ya que siempre quedaba así después de clases-
- Apuesto que debajo de esa ropa que usa esconde un buen cuerpo, apuesto que lo oculta para luego burlarse de ti, como siempre le ganas en todo- dije sonriendo ampliamente
- No lo había pensado, pero creo que hay que verlo- dijo cayendo en mis palabras, mire a Jenny sonriendo diciéndole “lo logre”, pero ella me miro sorprendida
No paso más de cinco minutos cuando entro alma, de inmediato Sharon la miro seriamente, en realidad todas la miramos, ella se incomodó y saludo con la mano, pero Sharon la llamo para que se acercara.
- ¿Qué pasa?- dijo confundida, acaso había hecho algo malo
- ¡ahora Karla!- grito Sharon, la menor abrió los ojos y se dio la vuelta para emprender la huida pero alcance a agarrarla por la cintura, provocando que cayéramos al suelo. Sharon se unió a la pelea que estaba perdiendo, ¿cómo había conseguido tanta fuerza? La única que solo miro era Jenny
- ¡¿Qué LES PASA?! ¡SUELTENME!- gritaba alma desesperada- O-oye… ¿Por qué?-
- Me las ingenie para sacarle el poleron del buzo deportivo del colegio y Sharon le levando la polera
Luego de forcejear y tocarle sus brazos, su abdomen y varias partes más de su cuerpo que no voy a mencionar, la dejamos tranquila, ella estaba sonrojada y exhausta por forcejar
- ¡HERMANA!- le grito avergonzada y enojada- ¿Por qué me hiciste eso?- se le notaba agitada, tal vez nos pasamos un poco, se levantó y sin decir nada mas o esperar respuesta se marchó a su habitación
- Creo que se molestó- dijo Karla
- Sí, pero ya se le pasara… le deje un regalo en su habitación- dijo Sharon
Luego del pequeño descanso las tres decidieron continuar su estudio, sin duda iba a ser una larga noche, tenían que repasar demasiada materia y para dos de ellas no era su fuerte, luego de al menos dos horas intensas de estudio se dieron un descanso para comer algo, Jenny aprovecho de ir al baño a lo que Karla también y fue al baño de arriba, al ver la puerta de Alma noto que la luz aún estaba encendida, se acercó un poco y la escucho hablando sola.
“olvídalo…” se le notaba jadeante “ella nunca te va a querer”
Karla abrió despacio la puerta, sin que notara nada Alma y observo por un costado, al parecer la más joven estaba haciendo flexiones de brazo, se le notaba cansada, pero por alguna razón continuaba.
“olvida ese sentimiento”
Se le oía decir con dificultar
“ella es imposible” continuaba asiendo flexiones aun cuando sus brazos tiritaban demasiado, se notaba que estaba sufriendo, se le notaba frustrada, ahora entendía ese cambio, Alma trataba de apaciguar sus emociones con el ejercicio, pero ahora Karla tenía otra interrogante ¿Quién era dueño del corazón de Alma? Al parecer, por lo que decía no era un él, sino un ella, siempre supuso que a la hermana menor de su amiga tenía ese tipo de inclinación muchas veces era muy evidente y otras no tanto, pero lo que si noto cuando ella era más pequeña, era que Alma solía mirar demasiado a Jenny, ¿acaso será que a Alma le sigue gustando Jenny? Era probable pero algo hacia dudar de esa hipótesis, Alma habla el mínimo con su amiga y ya no la mira de esa forma como lo hacía antes, un poco tal vez, pero no mucho.
Cerro la puerta con cuidado y fue al baño a lavarse la cara, una vez que salió de ahí se la encontró empapada en sudor, al parecer ahora se iba a bañar, le sonrió antes de irse, ahora tenía algo, pero eso le daba más curiosidad, si averiguaba bien, podía dejar a Alma a su merced y eso sin duda seria entretenido. Pero tendría que ser más cuidadosa y más inteligente.